La profesora Jana Fitzgerald le aterrorizó enterarse de quién era su vecino. Se trataba de Zack Devlin, un famoso escritor. Había conseguido una nueva vida en Illinois, lejos de los escándalos y chismes de Hollywood, que atormentaron y destruyeron a su familia durante su infancia. Ahora Zack Devlin de nuevo hizo acto de presencia y amenazaba con destruir su ordenada vida. Pero, las intenciones de él, eran distintas a las que ella imaginaba.
Su primer encuentro fue accidental. Rose y su compañera, Sadie, perdidas en Ámsterdam, tocaron la puerta en la dirección más cercana. Ésta pertenecía al doctor Sybren Werdmer ter Sane. Estaban impresionadas, aunque no esperaban volver a verlo de nuevo. Su segundo encuentro en Londres fue una sorpresa. El doctor ter Sane estaba pidiendo cuidado especializado de una enfermera para un caso en Holanda. Aunque fue Rose quien fue, ella había escuchado por accidente que era la preciosa Sadie a quien él había querido llevar…
Él era un experto en el arte del amor. El legado de una casa de su tía le dio a Lyn la oportunidad que necesitaba para escapar de una familia poco cariñosa. Ahora, en su propia casa, ella podría concentrarse en su arte. Su vecino fue una agradable sorpresa. Peter Kelso, un hombre de mundo, introdujo a Lyn en el ambiente del arte de Sydney, abriéndole la posibilidad de vender sus creaciones y haciéndole conocer una libertad inesperada... Pero cuando se enamoró de Peter, Lyn descubrió que esa libertad era lo último que ella quería.
También editada, en Harmex, bajo el título: Primavera tormentosa. Meg era una joven anticuada y no le atraían las diversiones. Había sido feliz viviendo en la tranquilidad del campo y cuidando de su madre inválida. Pero ahora eso pertenecía al pasado. La casa de la familia estaba en venta y Meg tendría que enfrentarse a un futuro incierto. Entonces Ralph apareció en su vida y le ofreció una alternativa. Por supuesto, él sólo era amable, no la veía como a una mujer… ¿o sí?
Francesca llevaba la casa que compartía con sus tres tías ancianas con la misma eficiencia que desarrollaba su trabajo en el hospital. Su vida transcurría dentro de una monótona rutina, hasta que el doctor Van Rijgen, un hombre antipático al que siempre trataba de eludir, la siguió cuando se marchó de vacaciones. Cuando la encontró le hizo una asombrosa proposición. Ella, inexplicablemente se sintió tentada a aceptarla.
El padre de Florina enfureció cuando, después de una vida de sumisión, ella reunió valor para liberarse del hogar paterno. Le encantaba su nuevo empleo como cocinara en la mansión de Sir William Sedley, el conocido pediatra. Y no tardó mucho en enamorarse de su jefe. ¿Tendría alguna oportunidad de ser correspondida, en tanto él estuviera prometido a la hermosa Wanda?
—No voy a insultar tu inteligencia diciéndote que te amo —le dijo Rauwerd van Kempler a Tilly cuando le pidió que se casara con él. El suyo iba a ser un matrimonio de conveniencia mediante el cual él tendría una esposa que se hiciera cargo de la casa y fuera anfitriona de sus fiestas. Tilly conseguiría a cambio un lugar para vivir y un hombre que no le haría el amor apasionadamente. De pronto, ella no estuvo tan segura de que eso la haría feliz.
Laurian poseía todo: atractivo, inteligencia, talento y una meteórica carrera como diseñadora de ropa. Sin embargo, en el amor había tenido poco éxito. Robert quería casarse con ella, pero a él lo consideraba sólo un buen amigo, no el amante apasionado que la haría perder la cabeza. Quizá esperaba demasiado... Entonces Oliver Thornham entró de nuevo en su vida. Él le había roto el corazón en el pasado, ¿por qué iba a ser diferente esta vez?
Los marines no eran su tipo… o al menos eso se decía a sí misma. Según Kate Bradley, los hombres guapos y temerarios no eran buenos maridos. Pero eso no le impedía fantasear con Striker Kozlowski, el marine a quien había adorado en secreto desde los diecisiete años. Ahora, tenía que asegurarse de que Striker cumpliera la voluntad de su abuelo… y de mantener ocultos sus verdaderos sentimientos. La intención de Striker no había sido volver a Texas ni que lo encerraran en una sala con una hermosa princesa de hielo que lo hacía sentirse como un recluta nervioso. Podía cumplir las misiones más peligrosas, pero ¿podría correr el mayor riesgo de todos… amando?
Después de un infeliz matrimonio, Kara no buscaba aventuras amorosas y menos aún con alguien como Aleko Tanakas. En cambio, él parecía decidido a conquistarla y ella tenía que admitir que era muy apuesto. Entonces, la hermana de Kara reveló que se encontraba en un apuro... y puso un final abrupto al incipiente idilio. Inesperadamente, los dos se encontraron en bandos opuestos y con la lealtad familiar en juego. ¿Cómo podía ella tener esperanzas de ser feliz?
Estar condenada a vivir la pesadilla constante de ser telepática, era insoportable para Dana Haslow, al grado de hacerla desear la muerte, como una misericordiosa liberación. Fue entonces cuando David Raymond apareció, y ella por fin encontró a alguien que no sólo la apreciaba, sino también la comprendía. Sin embargo, poco después descubrió que había un sufrimiento mayor: ofrecer su amor y ser rechazada.
Durante el verano, Corfú era un sitio encantador para descansar y Elisa lo disfrutó al máximo. Después conoció a Penny Sinclair y su vida cambió por completo. Al quedar Penny sin una nana que se hiciera cargo de ella, Rafe Sinclair, su padre, intervino para que Elisa desempeñara el trabajo. Ninguno imaginaba que los tres conseguirían algo más de lo que esperaban…
¡Eres mi esposa y seguirás siéndolo! Matt no tuvo inconveniente en volver al hogar, pensó Lesley, molesta. Pero su separación no fue amigable, y desde entonces ella se había forjado una vida satisfactoria. La perturbó mucho enterarse de que habían secuestrado a Matt durante una de sus misiones en el Medio Oriente, pero hasta allí llegaban sus sentimientos. ¿Por qué estaba Matt tan celoso de Jacques, cuando él tuvo relaciones con Becca, su despampanante colega?
Judi sabía que no quería casarse con Robert… pero dos pares de padres y el presunto prometido estaban firmemente alineados en contra de ella. Por eso, cuando surgió una oferta de trabajo en Tailandia, Judi aprovechó esa oportunidad para escapar. Su trabajo como secretaria del irascible Nick Compton fue un desafío mayor de lo que ella había esperado. Judi no pudo evitar preguntarse si habría saltado de la sartén al fuego. Sabía que podía con el trabajo, pero sospechaba que tratar con Nick no sería sencillo.
Trisha es una chica atolondrada a quien le gusta jugar con los hombres sólo para divertirse, y no me gustaría ser uno más en su lista -dijo Pierce.
Pese a eso, terminó casándose con ella.
¿Qué tipo de mujer era Trisha?¿Por qué se había desposado con él? La joven también necesitaba respuestas a algunas preguntas.
Según el parecer de Emma, Conrad era el hombre más desagradable sobre la faz de la tierra y, a juzgar por el destello amenazador en sus ojos, él correspondía a sus sentimientos. Era obvio que Conrad consideraba a Emma una explotadora de hombres, que pretendía aprovechar su posición para quitarle su dinero a Alistair Jackson, el anciano millonario. Y… puesto que Conrad jamás debería conocer la verdadera razón de su viaje a Tobago, Emma se preparó para vivir con su helado desprecio. ¿Por qué entonces, la hirió tanto la noticia del compromiso de Conrad?
Cuando Gaby Warren regresó al hogar de su juventud en busca de su amor infantil, descubrió que el hermano ilegítimo de éste era el propietario de todo lo que ella alguna vez amó. Ahora tendría que luchar contra él para conservar el control sobre su propio hogar. Pero de alguna manera, cada vez que se ponía en contacto con él, no podía concentrarse en la lucha…
El nuevo trabajo de Julia como asistente del dominante Marcus Lang era un logro en su carrera... mas esa no era la meta de la joven. Tenía planes para Marcus Lang, y en especial para el hermano de éste, Garrett. Una vez que lograra sus fines, renunciaría a su empleo.
Marcus era un jefe difícil y exigente, pero poco a poco Julia empezó a darse cuenta de que lo encontraba atractivo. Desafortunadamente, era el único hombre del que no debía enamorarse.
Se llamaba Jessica Devlin. Y viajaba al norte para reclamar su herencia. Mas eso fue todo lo que se le dijo en el hospital después del choque del tren. Ella no recordaba nada. Los detalles debían ser correctos, porque nadie tenía razones para mentirle. Entonces, ¿por qué se sentía tan incómoda con su identidad e incluso con la ropa que según le habían dicho le pertenecía? Todo el mundo fue muy amable; especialmente el primo de su padre, James Bentley. pero, ¿tenía él un motivo oculto? El tiempo lo diría.
Él cabalgaba en un caballo blanco…Neil Munroe debería haber sido su caballero de brillante armadura.Primero salvó a Elodie Swann de ahogarse y, a continuación, el carismático promotor se ofreció a salvarla de la ruina financiera. Ella debería habercaído rendida a sus pies.Pero este caballero y sus servicios tenían un precio. Neil quería las tierras que la abuela de Elodie le había dejado a ella, tierras que no estaban en venta. También afirmaba que quería el amor de Elodie.Elodie deseaba que su encuentro terminara como en un cuento de hadas. Ella quería creer que realmente la amaba… por algo más que sus tierras, ¿pero podría?