Sólo le hacía falta un marido...
Tenía todo lo que una chica podía desear excepto un marido. De modo que Elise Montgomery recurrió a la guía Cómo buscar marido para encontrar a uno. Pero, según el manual, su hombre elegido, un sexy granjero llamado Zane Keaton, era, definitivamente, el hombre equivocado. Sin embargo, después de compartir con él unos cuantos besos estremecedores, Elise se preguntó si, después de todo, no sería un buen candidato.
Zane sólo deseaba a una mujer sencilla y sin aspiraciones... hasta que conoció a Elise. Era dulce, descarada y seductora, pero demasiado ambiciosa para ser su esposa ideal. ¿Cómo iba ella a resignarse a una vida de felicidad doméstica?
Ambos ocultaban su verdadera personalidad…
Jen Summers se había quedado al cargo de una empresa de relaciones públicas durante dos semanas. No parecía muy difícil… ¡hasta que un guapísimo desconocido llegó a la oficina con la pequeña sobrina de Jen! Jen no tenía ni idea de cómo alternar su nuevo trabajo con ser una madre temporal… así que decidió pedirle ayuda al apuesto desconocido.
Harry Ryder estaba acostumbrado a llevarse a las mujeres a la cama, no a ayudarlas con niños pequeños. Pero Jen era tan tímida y delicada que Harry no pudo resistirse. Y cuanto más insistía Jen en que eran incompatibles, más seguro estaba él de que ya no quería seguir siendo un playboy… ¡Quería una esposa!
De la noche a la mañana se había convertido en una princesa… Amy Scott se sentía más a gusto en la librería de su pequeño pueblo que en el palacio imperial de Lufthania. Pero, según el atractivo príncipe Will, aquél era el lugar al que ella pertenecía. Sin embargo, mientras Amy, la heredera al trono, se acostumbraba a aquel estilo de vida, el príncipe Will prefería apartarse de ella. Por lo visto, tenía una regla personal que le prohibía enamorarse, y menos aún de su nueva soberana. Para ganarse su corazón, Amy tendrá que hacer algunas concesiones reales. ¿Podrá conseguir a su príncipe azul y hacer realidad su cuento de hadas?
Un romance fracasado había conseguido que se olvidara de los hombres La madre y la abuela de Lora Gifford no dejaban de intentar emparejarla con todos los hombres solteros de la ciudad, no importaba quiénes fueran o qué edad tuvieran. Para evitarlo, Lora pensó que lo mejor sería buscarles pareja a ellas dos. Parecía el plan perfecto... hasta que se quedó prendada de un recién llegado. El doctor Jon Woods, un sexy veterinario que debía cubrir un puesto temporalmente, no hacía el menor esfuerzo por ocultar la atracción que sentía hacia ella. Pero, ¿cómo podría Lora hacerle un hueco en su corazón sabiendo que se lo rompería cuando se marchara?
El millonario Connor Wolfe no tenía otra opción que casarse si quería conservar la custodia de su sobrina huérfana. ¿Y quién mejor para convertirse en su esposa que Jenny Gordon, la niñera de la pequeña? Jenny aceptó aquel matrimonio únicamente por el bien de la niña... pero en realidad deseaba con todas sus fuerzas que aquello fuera algo más que un matrimonio de conveniencia.
Isabella Martineau estaba harta de ser princesa y creía que había llegado el momento de escapar y vivir la vida a su manera. La libertad la llamaba desde el desierto australiano, donde el duro Jack Kingsley-Laird enseguida descubrió que bajo su delicada apariencia, había una mujer salvaje y aventurera. ¿Sería suficiente una increíble pasión para salvar la enorme distancia que existía entre sus mundos?
Aquel cuento de hadas funcionaba para todos menos para el hada... Al principio le había parecido una buena idea: entregar sus alas de hada a cambio de un cuerpo de mujer con el objetivo de ayudar al atractivo viudo Paul Roland con su hija. Y en cuanto tuvo a la pequeña en brazos, supo lo que era la verdadera felicidad. Lo que no había previsto eran las emociones que despertaría en ella el hombre que la necesitaba no sólo como niñera, sino también como mujer que curara su corazón herido. De pronto corría el riesgo de romper una importante regla de las hadas... porque estaba terminantemente prohibido enamorarse de un mortal... /div>
Si tenía que ser la amante de alguien... esperaba que fuera la suya
Cuando el abogado Jude Conroy le dijo a Cate que acababa de heredar una fortuna de un acaudalado caballero, todo el mundo, incluyendo a Jude, dio por hecho que había sido la amante del fallecido...
Cate insistía en que ni siquiera conocía al hombre que le había dejado aquel dinero. Pero Jude había aprendido a desconfiar de las mujeres que se hacían las inocentes... Sin embargo, había una parte de él que estaba dispuesta a hacer cualquier cosa con tal de creer que decía la verdad.
El matrimonio no era de verdad pero... ¿y la luna de miel?
Joanna había soñado con casarse con Matt desde su primer beso, y con que el día de su boda sería el más feliz de su vida...
Pero Jo y Matt habían roto cinco semanas antes de la boda, aunque lo habían mantenido en secreto y habían continuado una relación fingida. Su matrimonio era una falsedad pero, si lo que estaban haciendo era fingir, ¿por qué parecía tan real lo que sentían? ¿Y por qué le había propuesto Matt una verdadera luna de miel?
Se suponía que le encantaba estar soltera, pero en realidad estaba enamorada... ¡de su marido!
Kelly trabajaba mucho para demostrar que no había nada mejor que la vida de soltera; de hecho, había empezado a escribir una columna sobre el tema. Pero ocultaba un secreto que jamás podría contarles a sus lectores: ¡estaba casada!
Llevaba cinco años sin ver a su marido... hasta que apareció. Simon había vuelto a Melbourne atraído por su columna, y Kelly pensó que era el momento adecuado para entregarle los papeles del divorcio. Sin embargo, Simon tenía otros planes: quería arreglar su matrimonio.
El padre de su hijo había vuelto a aparecer en su vida...
Mary Cameron se había marchado de Australia llevándose un secreto con ella, y así lo había mantenido durante años. Pero había llegado el momento de enfrentarse con las decisiones que había tomado en el pasado.
Tom Pirelli había vuelto. Por fin Mary tendría la oportunidad de contarle la verdadera razón por la que lo había abandonado... y que tenía un hijo al que no conocía.
Mary debía tomar una importante decisión que cambiaría su vida... y la de Tom para siempre.
Nunca se había alegrado tanto de perderse...
Cuando se perdió con el coche en una oscura carretera, Callie Walker creyó estar alucinando: un sexy cowboy con una pícara sonrisa en los labios apareció dispuesto a ayudarla.
Cade Kills Thunder no tenía la menor idea de qué estaba haciendo una chica de ciudad como aquélla en mitad de Montana. Una cosa sí estaba clara: no podía dejarla allí sola. Pero llevarla a su rancho era demasiado peligroso... era obvio que la irresistible pelirroja podría hacerle cambiar de opinión respecto a los compromisos.
Él era una fantasía hecha realidad... ¡y ahora también era papá!
Amelia Gallagher disfrutaba torturando a Larry Mackenzie, un atractivo socio del bufete de abogados en el que trabajaba. Era el sueño de cualquier mujer, excepto por un pequeño detalle: estaba completamente en contra de cualquier tipo de compromiso. ¿Qué hacía entonces cuidando de aquel bebé?
Mac había prometido que le encontraría a la hija de un cliente la familia que él nunca había tenido. Pero hasta que lo consiguiera, iba a necesitar algo de ayuda para entender a la pequeña. Fue entonces cuando apareció la bellísima Amelia y le hizo pensar que su casa era el hogar perfecto para una familia de tres miembros...
¿Tendría que elegir entre el trabajo de su vida y el hombre de su vida? Cara Marlowe quería forjarse una carrera en televisión y su nuevo empleo la ayudaría mucho... siempre que nada saliera mal. La mala noticia era que el multimillonario Adam Tyler quería poner punto final al programa, y lo peor era que Cara era incapaz de concentrarse cuando el guapísimo Adam estaba cerca. Ella no necesitaba millones, pero sí quería a Adam... y no perder su trabajo.
Aquél era un matrimonio que ninguno de los dos esperaba...
A Tara Andrews le encantaba trabajar con su madre y con su hermana preparando las bodas... de otros. Sin embargo, no tenía la menor intención de casarse jamás... hasta que conoció al atractivo millonario Patrick Keene.
Estaba claro que él era el único hombre que podría hacerle cambiar de opinión... pero también era el único hombre que jamás podría tener.
¿Cómo era posible que la promesa que le había hecho a un amigo lo hubiera llevado hasta el altar? El marine Ben Kozlowski no estaba del todo seguro, pero sabía que los maravillosos ojos castaños y la suave piel de Ellie Jensen tenían algo que ver con lo que le pasaba: cada vez que se acercaba a ella se le aceleraba el pulso. Desde el momento que la conoció había estado inventando cuentos de hadas para su hija y había sentido cómo se le derretía el corazón con su pequeña familia.Aquélla se había convertido en la misión más arriesgada de su vida. ¿Se atrevería a bajar la guardia y rendirse al amor de Ellie y de su hija?
Un importante ejecutivo y una madre soltera intercambian sus vidas...
Kelli Walters trabajaba en el escalafón más bajo de su empresa, pero quería tener la oportunidad de conocer una vida mejor, aunque para ello tuviera que participar en un programa de televisión. Así fue como llegó a intercambiar su vida y su trabajo con un ejecutivo, el vicepresidente Samuel Maxwell.
Eso implicaba sentarse en su enorme despacho y decirle a todo el mundo lo que tenía que hacer, mientras que él debía arreglárselas como madre soltera y un trabajo sin porvenir. Pero cuando Kelli conoció al sexy Sam, con sus sonrisas arrebatadoras, se dio cuenta de que para lograr lo que deseaba no tenía por qué ganar el concurso, sino conseguir el verdadero premio: él.
Él no tenía la menor idea de que era padre... La organizadora de bodas Skye Andrews llevaba cuatro años ocultándole un secreto al célebre abogado Nick Coburn: tenían una hija... Pero ahora Skye debía organizar una boda en la que Nick iba a ser el padrino... y seguían sintiéndose tan atraídos como siempre. ¿Durante cuánto tiempo podría Skye ocultarle la razón por la que había tenido que romper su relación? ¿Qué pasaría cuando él descubriera la verdad?
Una proposición de mentira dio lugar a una relación muy real...
Riana Andrews se quedó de piedra al despertar una mañana y descubrir un anillo de compromiso en su dedo. Lo que más la confundía era que creía que quien le había hecho tal proposición era Joe Henderson, el sexy y famoso fotógrafo que iba a hacerle las fotos a sus diseños de vestidos de novia
Quizá Joe tuviera un plan oculto pero, desde luego, se estaba comportando como si realmente fuera a casarse con ella. Y los escalofríos que Riana sentía cada vez que él estaba cerca no eran para nada producto de su imaginación...
Cuando el amor llama a tu puerta, no puedes hacer nada para evitarlo...
Después de tantos fracasos amorosos, Hailey había decidido alejarse de los hombres durante un año. Pero cuando llevaba seis meses cumpliendo su promesa, conoció la tentación hecha hombre. Jordan Halifax era increíblemente sexy... y además vivía en la casa de al lado. ¿Qué podía hacer?