Este libro es el resultado de un debate que tuvo lugar en el marco de la octava Feria de Editores bajo el nombre 'La lengua en disputa'. El texto es la desgrabación corregida del intercambio que se dio entre Beatriz Sarlo y Santiago Kalinowski. La intención fue replicar una lógica de debate tradicional, en la que los invitados conocieran de antemano los ejes sobre los cuales se iba a discutir para poder preparar sus argumentos. En pocas páginas se estructuran las principales objeciones o beneficios del uso del lenguaje inclusivo. El registro oral del libro permite que los argumentos se intercalen con sencillez, sin perder su profundidad. Un texto ideal para disparar discusiones por venir.
Este es el libro que todo escritor debería escribir, y que sus lectores desearían que escribiera. El diario de su vida, mejor dicho, el diario literario de su vida: el significado de la literatura en su vida, el papel del escritor, el laberinto de su manera diaria de estar, y conjugar las letras. Descubrimos aquí a un Monterroso lector de Kafka, Proust, Rimbaud, Eliot, Dante, Cervantes y otros clásicos, el lector de sus contemporáneos y amigos como Cortázar, Bryce Echenique, José Donoso, o Juan Rulfo, el que pasea por Praga emocionado ante la casa en que Kafka vivía con su familia, el que se burla de su propia educación, el que confiesa que el público lo intimida, el que elogia la irritación…, en definitiva, el que hombre se oculta detrás del escritor de estos textos breves pero magistrales que rozan a vuelapluma todos los planos de la vida.
El Romanticismo. Primer volumen del ensayo La literatura francesa moderna (1910-1911). El Romanticismo es un movimiento cultural originado en Alemania y en el Reino Unido a finales del siglo XVIII como una reacción revolucionaria contra el racionalismo de la Ilustración y el Neoclasicismo, confiriendo prioridad a los sentimientos. Su característica fundamental es la ruptura con la tradición clasicista basada en un conjunto de reglas estereotipadas. La libertad auténtica es su búsqueda constante, por eso es que su rasgo revolucionario es incuestionable. Debido a que El Romanticismo es una manera de sentir y concebir la naturaleza, la vida y al hombre mismo que se presenta de manera distinta y particular en cada país donde se desarrolla, incluso dentro de una misma nación, se manifiestan distintas tendencias proyectándose también en todas las artes.
El naturalismo. Tercer volumen del ensayo La literatura francesa moderna [El Romanticismo, La transición y El naturalismo (1910-1911)]. «El naturalismo» es un estilo artístico, sobre todo literario, emparentado con «El Realismo», basado en reproducir la realidad con una objetividad documental en todos sus aspectos, tanto en los más sublimes como los más vulgares. Su máximo representante, teorizador e impulsor fue el escritor Émile Zola que expuso esta teoría en el prólogo a su novela Thérèse Raquin y sobre todo en Le roman expérimental (1880).
«No soy un hombre de biografía. No dejaré más que algunos libros, donde todo lo mío está dicho, o casi todo. El que no vive más que entre libros? ama los libros, duerme, come, siempre con libros.» Cesare Pavese escribió estas palabras con solo diecinueve años, pero a lo largo de su vida no hizo más que confirmar esa pasión por la literatura. Su figura, contradictoria a veces y atormentada siempre, destaca con fuerza hoy, aportando un rigor y una profundidad inusuales en estos tiempos. Los ensayos que componen el volumen, tanto si se ocupan de Faulkner y Dickens, como del concepto del intelectual políticamente comprometido o de las raíces del mito poético, brillan por su hondura y su lenguaje conciso y chispeante a la vez, descubriéndonos la faceta quizá menos conocida de uno de los maestros de la literatura europea contemporánea. «Este libro nos brinda la más rica y explícita autobiografía intelectual de Pavese.» ITALO CALVINO
Ensayo, Crítica y teoría literaria, Espiritualidad, Filosofía
En este libro, que se inscribe dentro de la fenomenología de lo imaginario que constituye la parte más conocida y valorada de la obra de Gastón Bachelard, el filósofo francés se detiene en los sueños que despierta la contemplación de una llama solitaria. La llama tiene una gran capacidad productora de imágenes y de allí la riqueza metafórica que ha sabido inspirar. En el camino de sus reflexiones Bachelard encuentra algunos nombres de poetas capitales que, como en el caso de Novalis, T. S. Eliot o de Octavio Paz, son referencias concretas que se insertan en el curso general de su pensamiento iluminando por una parte el alcance de sus precisiones y por otra el de los poetas citados.
En una época en que la novela todavía no había alcanzado a la poesía en la jerarquía de las artes, Henry James, que había revolucionado la narrativa de su tiempo con obras enormemente arriesgadas, echaba de menos una reflexión crítica paralela a su narrativa. Y por ello, empezó a escribir ensayos sobre el arte de la novela y sobre otros novelistas que le habían precedido, como George Eliot y Gustave Flaubert. Luego, cuando se empezó a publicar su obra completa en Nueva York, a principios del siglo XX, se dedicó a escribir unos iluminadores prefacios a sus obras. Esta edición reúne una selección de algunos de esos prólogos, más algunos de sus ensayos. El resultado es una de las experiencias críticas autobiográficas más deslumbrantes de la historia de la literatura. El volumen está editado y prologado por Andreu Jaume y traducido íntegramente por Olivia de Miguel.
Son malos tiempos para el humanismo, para la visión de una educación basada en la cultura antigua o tradicional. Vivimos en un mundo demasiado obsesionado por el presente, lleno de imágenes mediáticas, de una impresionante trivialización y vulgaridad. Todo eso va en contra de una educación basada en los valores antiguos. Hay una tendencia general a la vulgarización y a la mediocridad, pero en esto existe una gran responsabilidad por parte de los gobiernos. Piensan que educar sólo consiste en formar en destrezas, en lo rentable y en lo inmediato y se descuida algo tan importante como es la formación en la cultura, en las humanidades. Con la seguridad de quien sabe que es una causa difícil, pero que es necesario defenderla, este libro es una voz de alerta al actual descrédito de las humanidades. Una obra que recoge trabajos y pensamientos de García Gual sobre la utilidad de los clásicos y nos invita a la reflexión personal sobre estos temas y sus pervivencias. Una reivindicación de la memoria, la literatura y los estudios humanísticos.
Los escritores, tanto los hombres como las mujeres, han de ser egoístas para tener tiempo de escribir, pero las mujeres no están entrenadas para ser egoístas… comenta Margaret Atwood en estas páginas, y si ella lo dice debe de ser cierto, porque la autora lleva más de treinta años dedicada a la escritura, y las piezas reunidas en «La maldición de Eva» son una buena muestra de lo que se cuece en su mente cuando se enfrenta a la página en blanco. Empezando el primero de estos textos, que aborda el rol de la mujer como escritora, como lectora y como protagonista de una novela, pasando por las reflexiones de Atwood acerca del trabajo de Virginia Woolf y de George Orwell, y acabando con la magnífica «Carta a América», que la autora escribió a raíz de la invasión de Irak, estos breves ensayos hablan de literatura, pero consiguen atar el oficio de escribir al oficio de vivir. Sólo así se explica que tengamos entre manos un libro vital, cargado de anécdotas, donde el sentido común y el humor de esta gran mujer tienen tanto valor como su talento de narradora.
Fernando Savater nos regala un repaso por los escritores y sus obras memorables, pero sobre todo, nos permite celebrar con él esa emoción singular: el placer de la lectura. "Personalísima guía de lectura". "La música de las letras contagia entusiasmo lector, sabe concertar citas amorosas entre sus lectores y los libros que recomienda. Gracias a sus oficios como celestina, algunos descubrimos a Cioran, Rosset o Santayana. Seguiremos atentos a las recomendaciones de nuestro volteriano de guardia, lector puro y sólo escritor por necesidad." Luis Muñoz Díez, Culturamas. Los cazadores exhiben orgullosos las mejores piezas que han conseguido; los viajeros enseñan fotografías de los lugares más hermosos que han visitado; Fernando Savater es un certero cazador de grandes escritores y un viajero incansable a través de los libros. En las páginas de esta obra da cuenta de algunas de sus mejores conquistas en la jungla de las bibliotecas: Edgar Allan Poe, Albert Camus, Erasmo, Voltaire, Schopenhauer, Dick Francis, los maestros de la novela policiaca y de la ciencia ficción. Aunque también habla de la educación que nos ayuda a vivir y de la experiencia vital que nos va educando.
María del Carmen Bobes Naves es catedrática de Teoría de la Literatura en la Universidad de Oviedo. En 1973 publica en Madrid «La semiótica como teoría lingüística», que introduce los estudios de semiología en España, y a partir de entonces ha escrito y publicado obras como «Gramática de «Cantico»» (1975), «Gramática textual de «Belarmino y Apolonio»» (1977), «Teoría general de la novela. Semiología de «La Regenta»» (1985), «Semiología de la obra dramática» (1987), «El diálogo. Estudio pragmático, lingüístico y literario» (1992), etc. María del Carmen Bobes ha abordado, tanto en las obras extensas como en los artículos, los temas generales de la epistemología y la teoría literaria desde presupuestos y métodos semiológicos principalmente, pero sin abandonar el histórico, el psicocrítico y la sociología de la literatura cuando contribuyen a aclarar, explicar o a facilitar la comprensión de los temas tratados. La novela es uno de los temas que ha considerado centrales en sus investigaciones y como resultado de ello, en la obra que ahora presenta, realiza una síntesis de los conocimientos que sobre las unidades, los conceptos y los esquemas de relación del relato ha alcanzado la narratología actual.
Durante mucho tiempo, estuve dedicado al desarrollo de un proyecto para demostrar que las novelas se podían trasladar a cualquier idioma. En plena época de la aviación, elaboré este proyecto de las novelas como múltiplos. De modo que sí, al pasar del esquimal al inglés, o del inglés al japonés, habría cambios, pero éstos serían irrelevantes en cuanto a la cuestión básica de la calidad: no disminuirían el valor de esa novela en la historia de su arte. Sin embargo, esta primera versión básicamente confinaba el proyecto a oraciones mientras que una novela, obviamente, es algo mucho más grande que una oración. Y si bien este hecho no es ninguna novedad, provocó que me comenzara a preguntar si la novela no sería algo mucho más extraño de lo que había pensado en primer lugar. Así pues, comencé a pensar que este proyecto necesitaba una filosofía menos convencional y más exhaustiva. Necesitaba centrarme en la destartalada extensión de las composiciones más puras. Y es que hasta una composición única, estaba descubriendo, era un múltiplo. Este proyecto era, sin embargo, utópico: pretendía ser una plataforma para colectivos. Lo cual quería decir que necesitaba considerar las implicaciones de un último elemento: el lector ausente y múltiple.
En 1972, en su libro La nueva novela hispanoamericana, Carlos Fuentes se encargó de poner en blanco y negro lo que la mayor parte de los autores del Boom pensaba acerca de su propia relevancia en la historia de la literatura de América Latina: Fuentes afirmó que con él y sus contemporáneos se refundaba la narrativa de la región, que con ellos empezaba la verdadera modernidad en nuestras letras. Las excepciones, autores como Borges, Onetti o Carpentier, eran asimilados al grupo como antecedentes. El gesto era de una arrogancia suprema: desconocía cualquier relevancia a la novela latinoamericana del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX. Implicaba una reescritura de la historia.
Esta obra trata sobre las fronteras de la pintura y la poesía, sobre sus posibilidades y sobre muchos otros temas relativos al arte antiguo que Lessing plantea como ¿incidentales?, pero que, de hecho, le sirven para realizar una crítica a varios de los grandes autores de su época, entre ellos a Winckelmann. En el Laocoonte, Lessing cuestiona la identificación que algunos autores de su época hacían entre poesía y pintura, que va, a su entender, en menoscabo de ambas. Las observaciones incidentales lo llevan a mostrar por qué poesía y pintura se alejan una de otra al imitar, en razón de su propia naturaleza, una más apta para lo temporal y otra para lo espacial, que impone límites a cada una de las artes. Para ejemplificar sus argumentos se basa en el caso del Laocoonte, que da título al libro, comparando la descripción de Virgilio con la estatua que lo representa. Lessing utiliza muchísimos otros ejemplos, sumamente eruditos, para mostrar cuáles son las relaciones ideales entre poesía y pintura, y para subrayar la idea de que, entre los antiguos, la belleza era la ley más alta de las artes plásticas, a la que había que subordinar cualquier otra consideración, incluida la misma expresión.
Jacques Rancière, sin duda uno de los filósofos más relevantes de la actualidad, realiza aquí un recorrido exquisito por la historia de la literatura en el que analiza la naturaleza y las modalidades del cambio de paradigma que destruyó el sistema normativo de las Bellas Letras, al tiempo que se pregunta por las contradicciones y tensiones de la literatura hoy. Rancière propone una nueva interpretación de este cambio, donde la literatura ya no será “ni la idea imprecisa del repertorio de las obras de la escritura ni la idea de una esencia particular capaz de conferir a esas obras su calidad ‘literaria’”, sino “el modo histórico de visibilidad de las obras del arte de escribir, que produce esa distinción”. Antes que preguntarse por el concepto de literatura –y distanciándose de posiciones como las de Sartre o Blanchot–, para Rancière resultará más interesante indagar acerca de las condiciones que hacen posible enunciar tal o cual principio o definición. Un análisis histórico filosófico de la literatura en un libro que se ha convertido en una referencia ineludible para la crítica literaria contemporánea.
«La paradoja del comediante» es una obra maestra de galanura y sutileza. Diderot, hombre de saber ecuménico y escritor admirable, reunió en la páginas de este ensayo en forma de dialogo sus reflexiones sobre el actor y el arte de la interpretación. Para Diderot, el verdadero actor no vive su papel, sino lo representa. Y es más veraz y más comunicativo y capaz de suscitar la emoción cuanto más reflexivo y frío es en el desempeño de su tarea. De ahí la paradoja.
Clásico libro de ensayos de una de las figuras más importantes del medio intelectual mexicano, Gabriel Zaid. Hay que ver la poesía en la práctica: en el mundo del trabajo y los negocios, del prestigio social y el poder político, de la ingeniería y las computadoras, de la vida amorosa y cotidiana. La inspiración creadora no sólo hace versos: sopla y lo mueve todo. En ese movimiento, la práctica no es algo estrecho, mecánico y sin misterio, sino creación; y la poesía es práctica: hace más habitable el mundo. La argumentación rigurosa y elegante de Zaid hace ver la naturaleza del acto creador. 'Éste es un ensayo estimulante cuya lectura nos vuelve conscientes, de una manera curiosamente personal, de los procesos a los cuales se refiere. Zaid tiene una mente original y una profunda convicción en la normalidad de la experiencia artística. Deja con ganas de ver más de su obra.' The Times Literary Supplement , 14 de noviembre de 1968 Los ensayos de este libro fueron publicados por primera vez entre 1963 y 1967. Han sido escritos nuevamente para esta edición.
Crítica y teoría literaria, Manuales y cursos, Ensayo
La página escrita no es un método de escritura al uso. Tampoco pretende ser el mejor manual o el definitivo. Es una ocasión única para compartir la pasión, el talento y la experiencia de este autor y aprender, paso a paso y de una manera clara, directa y, sobre todo, amena, las técnicas que Jordi Sierra i Fabra ha desarrollado a lo largo de los años para escribir sus novelas. Escribir es la soledad máxima, y por contra, la compañía global. Tú y tus personajes. Es la libertad. Y la libertad no admite métodos ni manuales. Entonces, te preguntarás qué diablos tienes en las manos. Es una buena pregunta. No lo sé. O por lo menos no estoy seguro de saberlo. No he querido escribir un método o un manual. Sólo intento explicar lo que pienso, lo que siento, y lo que creo que es para mí mismo el arte de escribir. Jordi Sierra i Fabra La página escrita no es un método de escritura al uso. Tampoco pretende ser el mejor manual o el definitivo. Es una ocasión única para compartir la pasión, el talento y la experiencia de este autor y aprender, paso a paso y de una manera clara, directa y, sobre todo, amena, las técnicas que Jordi Sierra i Fabra ha desarrollado a lo largo de los años para escribir sus novelas. Uno de los autores más prestigiosos de LIJ pone todo su saber y buen hacer al servicio de todos aquellos que quieren ser escritores.
«Larra. Anatomía de un dandy» supone, seguramente, uno de los más serios empeños realizados hasta la fecha para entender y explicar la personalidad genial del gran español más allá de su obra y al margen de interpretaciones noveleras o pseudo-románticas. En una línea rigurosa de pensamiento, Umbral se ha dejado sumir en el alma apasionante de Larra, obteniendo de ella una teoría y una visión ciertamente originales, por las que Fígaro resulta, esclarecido, como hombre de una dimensión absolutamente actual, desarraigada, existencial. La capacidad de Umbral como ensayista de largo aliento queda definitivamente puesta a prueba en este intenso libro.