«No sé cómo ha sucedido, pero la distancia que separaba mi rostro del de Sam se ha esfumado en lo que dura un parpadeo. Mis labios encuentran los suyos y, de pronto, me convierto en un pobre hombre perdido quién sabe cuánto tiempo en el desierto y los labios de Sam son el oasis de fresca y dulce agua cuyo hallazgo yo ya casi había dado por imposible.»
Alan está convencido de saber quién es y qué le gusta. Pero eso es antes de conocer a Sam, su nuevo compañero de piso después de que su vida dé un giro repentino. Desde el primer día, Alan descubre algo en Sam, algo que no había visto nunca antes en ningún hombre. Al fin y al cabo, Alan está (¿o estaba?) segurísimo de su heterosexualidad.
Y, sin embargo, la llama de las dudas se convierte en un tentador canto que lleva a Alan a lugares desconocidos para él. Con el absoluto terror en una mano y la necesidad de desenmarañar su confusa mente y aclarar sus sentimientos, Alan se dejará guiar por Sam y la voz de sus dedos. Con él, se atreverá a explorar por primera vez el cuerpo de otro hombre y entenderá quién es él realmente.
Tras dejarse guiar por Sam y la voz de sus dedos, Alan y él entablan una relación romántica. La relación parece ir viento en popa, hasta el punto en el que Sam decide presentar a Alan a su grupo de amigos. Lo que ni Sam ni Alan podrían haber sabido era que esa simple decisión podría poner en riesgo toda su relación. En la piscina de Oriol, uno de los mejores amigos de Sam, suceden cosas que Alan nunca imaginó posibles. Pero el poderoso sol de ese tórrido verano puede llevar a uno a cometer más de una locura, así que Alan, hipnotizado por Oriol y el calor de sus ojos, se verá sumido en un torbellino de sentimientos que acabarán amenazando con una gran crisis entre él y Sam.
“Mi cuerpo se estremeció con su mirada y volví a experimentar la inmensa atracción que Tristan Reed ejercía sobre mí, incluso ahora que sabía que era un vampiro o quizás precisamente porque lo era”. Giulia Myers acaba de mudarse a Nueva York con su mejor amiga, Tania, para cursar sus estudios de Periodismo en Columbia, su gran sueño hecho realidad. Su complicado pasado, ha convertido a Giulia en una chica fuerte y pragmática, que siempre ha luchado por conseguir sus objetivos y como recompensa a su esfuerzo, ha logrado una beca de estudios para la prestigiosa universidad. Tras una mala racha, necesita desesperadamente pasar página y comenzar a ser feliz y qué mejor oportunidad para hacerlo que emprender con entusiasmo esa nueva etapa de su vida. Sólo hay un pequeño inconveniente, necesita urgentemente una fuente de ingresos para poder subsistir en la Gran Ciudad, pero la suerte parece acompañarla y su amiga encuentra un buen trabajo para ambas en un bar de copas de Manhattan. Todo se complica cuando las dos amigas comienzan a trabajar en ese lugar. Entre su clientela habitual, hombres de negocios con un alto poder adquisitivo, se esconde una terrible amenaza y sin saberlo entablan relaciones que ponen en peligro sus vidas. El destino de Giulia cambia drásticamente cuando se cruza en su camino Tristan Reed, un hombre apuesto y misterioso por el que se siente inmensamente atraída. Tristan esconde un oscuro secreto del que intenta apartarla con todo su empeño, pero ella no atiende a razones, inevitablemente no puede alejarse de él. Cuando hacen daño a aquellos a los que ama, Giulia se enfrenta a sus miedos y demuestra lo fuerte que en realidad es. La Luz de tus Ojos narra una extraordinaria historia de amor entre una joven y un vampiro, dos almas gemelas que habitan en mundos enfrentados.
Los destinos de Lily y Alec se cruzan debido a un pacto firmado 200 años atrás. Si ambos desean conseguir lo que quieren, deberán cumplir con sus condiciones, aunque éstas los obliguen a permanecer peligrosamente juntos. Pronto, descubrirán que alguien los quiere separar, pero ¿y si, a pesar de luchar contra lo que sienten y contra el enemigo, lo que está escrito no puede ser desafiado? Dos personas de mundos opuestos, una feria y la alta sociedad, que se verán irremediablemente atraídas como la luna y el mar...
Lili está decidida a pasar el verano con su madre, Helena, a la que no ve desde hace años y a la que odia por abandonar a su padre. Sus días allí consisten en tumbarse en la playa, discutir con su madre y observar un viejo faro que se alza en la lejanía. Todo cambia cuando un escritor famoso se cruza en su camino y promete poner del revés todos los esquemas que Lili tiene en su enmarañada mente.
Maria, una mujer libre y carismática, es la administradora del 315 de Grotta Perfetta, en Roma. Cuando muere repentinamente, deja una hija de seis años; y deja también una carta. La niña se llama Mandorla —Almendra—, y ya sólo su nombre encierra todo el encanto y el absurdo del que será su destino, ya que Maria ha dejado escrito que el verdadero padre de Mandorla es uno de los hombres que vive en el edificio. Tras una asamblea de vecinos en la que nadie confiesa su paternidad, deciden criar a la niña entre todos. Así, Mandorla irá cambiando de casa de los 6 a los 17 años, adaptándose a cinco modelos de familia: será testigo de la soledad de Tina; vivirá la separación de Caterina y Samuele; acompañará a Paolo y Michelangelo al Orgullo Gay; se sentará a la mesa de los Barilla, una familia tradicional, y vivirá las turbulencias de la eterna pareja de hecho, Lidia y Lorenzo. Y mientras Mandorla crece, se enamora y busca a su padre, Chiara Gamberale nos recuerda que, antes de ser mujeres, maridos, padres o hijos, somos personas: maravillosas y terribles, con una infancia que nos persigue. En esta luminosa novela descubrimos que la familia es una alquimia indefinible: quien la tiene es consciente de su peso, hasta el punto de querer librarse de ella, y quien no la tiene la desea como el único escenario posible de la felicidad.
Una mañana de abril de 1926, un bote encalla en la costa rocosa de una remota isla australiana. En su interior yacen un hombre muerto y un bebé que llora con desesperación. A su encuentro salen Tom Sherbourne, el farero, y su joven esposa, Isabel. Se han instalado en la isla para dejar atrás los horrores de la Primera Guerra Mundial, y lo único que ensombrece su felicidad es la incapacidad de tener hijos. Ante la impresión que les causa un ser tan frágil e indefenso, Tom e Isabel deciden seguir el dictado de sus corazones y adoptar a la criatura, sin notificar el hallazgo a las autoridades. Un par de años después, cuando llega a su conocimiento que la madre de la niña está viva y mantiene la esperanza de encontrar a su hija, las tensiones se desatan en la pareja. Isabel ya no concibe la vida sin la pequeña Lucy, pero la decisión que han de tomar y el sufrimiento de la madre biológica harán que los hechos se precipiten en una cadena de consecuencias imprevisibles.
En el siglo XV, la Abadía de Montserrat es tomada a la fuerza por un reducido grupo de soldados. Lucen en su pecho la cruz de los desaparecidos Caballeros Templarios y necesitan que Fray Nicasio, uno de los monjes de la abadía, traduzca un misterioso texto. Al darse cuenta del poder que encierran aquellas páginas, el monje se ve obligado a huir, y decide proteger con su vida las maravillas que se encuentran en el texto. Su huida comienza en Montserrat y sigue a través del Camino de Santiago, portando con él un secreto que podría terminar con el poder de la Iglesia. Miguel es un minero a punto de alcanzar la prejubilación. Tras rescatar el cadáver de un compañero en lo que resulta para él su experiencia más traumática dentro de la mina, su destino se entrelaza con el de fray Nicasio al descubrir una cueva que oculta el diario del monje. Miguel, hombre instruido e inteligente, rápidamente se da cuenta de la importancia de su descubrimiento. Finalmente, se embarca en una peligrosa aventura, donde órdenes religiosas y un maravilloso secreto que podría terminar con la enfermedad en el mundo, se entremezclan poniendo la vida del protagonista y la de sus misteriosos benefactores al límite del abismo. La huida de un hombre del siglo XV y la peligrosa búsqueda de otro del XXI, unidas por un mismo destino que no siempre es mera casualidad.
Esta es una novela sobre falsificadores y falsarios, con personajes reales que parecen de ficción. La narradora, una crítica de arte que trabajó para una tasadora por cuyas manos pasaban obras falsificadas, relata una historia singular, aunque advierte: «No esperen nombres, estadísticas, fechas. Lo sólido se me escapa, solo queda entre mis dedos una atmósfera imprecisa, técnicamente soy una impresionista de la vieja escuela. Además, todos estos años en el mundo del arte me han vuelto un ser desconfiado. Sospecho en especial de los historiadores que con sus datos precisos y notas heladas a pie de página ejercen sobre el lector una coerción siniestra. Le dicen: “Esto fue así.” A esta altura de mi vida yo aprecio las gentilezas, prefiero que me digan: “Supongamos que así sucedió.”»En el centro de la trama hay un personaje llamado la Negra, que falsifica lienzos de la pintora Mariette Lydis, retratista de la alta sociedad bonaerense, y tirando de ese hilo aparece otro artista del fraude, Federico Manuel Vogelius, falsificador de obras de Pedro Figari. Aparecen también un lugar llamado Hotel Melancólico en el que viven varios artistas, y una película de culto sobre beatniks bonaerenses en la que asoma la Negra, figura escurridiza donde las haya…Esta es una novela sobre el arte y la vida, sobre el engaño y la manipulación, sobre la realidad y la ficción, sobre lo vivido y lo contado; una narración sinuosa, enigmática y envolvente que seduce y atrapa. Tras deslumbrar a la crítica con El nervio óptico, María Gainza vuelve a tomar el mundo de la pintura como punto de partida y despliega de nuevo su inusitado talento en una obra magnética.
Córdoba, 1009. El pueblo de la que entonces era la capital del mundo se levantó en armas contra la tiranía de los hijos de Almanzor, respaldada por mercenarios e integristas. Dicha rebelión no fue fruto de un malestar súbito, sino el corolario de un movimiento planificado y gestado en la clandestinidad por una suerte de asamblea o consejo. Aquella revolución vertebraría en el plano político la sociedad, dando lugar a la creación de un ejército propio e integrándose en el gobierno naciente. Pero el afán de los partidarios de la dictadura por recobrar el poder y la resistencia del pueblo de Córdoba a perderlo desembocaron en una guerra civil larga y cruenta, que malograría la grandiosidad de Medina Azahira, de Medina Azahara y del mismo califato omeya, con la proclamación de la república en 1031. Nada en el futuro volvería a ser como antes. Antonio Manuel, autor de obras tan celebradas como "La huella morisca", se adentra aquí en un momento trascendental de nuestra historia, para poner luz, color y sonidos a la oscuridad y secretismo que la envolvían. El resultado es una novela tan necesaria como memorable. "Una novela, escrita en femenino plural, que rompe con los tópicos decimonónicos del harem y vierte luz sobre la herencia milenaria de las mujeres de Al Ándalus, propiciando el reencuentro con la memoria popular y sentimental andalusí, para identificarnos como custodias de un legado que prevalece más allá de los siglos y sus silencios". MATILDE CABELLO "La luz que fuimos, oscurecida durante un milenio, se abre paso hoy de la mano de un autor que ama profundamente aquella luminaria que nadie podrá apagar". HASHIM CABRERA
Marie-Laure vive con su padre en París, cerca del Museo de Historia Natural, donde él trabaja como responsable de sus mil cerraduras. Cuando, siendo muy niña, Marie-Laure se queda ciega, su padre le construye una perfecta miniatura de su barrio para que pueda memorizarla gracias al tacto y encontrar el camino a casa. A sus doce años, los nazis ocupan París y padre e hija tienen que huir a la ciudad amurallada de Saint-Malo. Con ellos se llevan la que podría ser la más preciada y peligrosa joya del museo. En una ciudad minera de Alemania, el joven huérfano Werner crece junto a su hermana pequeña, cautivado por una rudimentaria radio que ambos encuentran. Werner se convierte en un experto en construir y reparar estos aparatos cruciales para los nuevos tiempos, un talento que no pasa desapercibido a las Juventudes Hitlerianas. Siguiendo al ejército alemán, Werner deberá atravesar el corazón en guerra de Europa. Hasta que en la última noche antes de la liberación de Saint-Malo los caminos de Werner y Marie-Laure por fin se crucen. Y sus vidas cambien para siempre.
La lámpara (1946) es la segunda novela de Clarice Lispector y, como el objeto que lleva por título, deslumbra hasta cegar, a la vez ilumina aspectos cruciales de la narrativa de la siempre personalísima autora brasileña. Reducido a su núcleo esencial, el texto cuenta la historia de un probable incesto; el de los hermanos Virgínia y Daniel; y de una soledad segura, la de ella, que con su aislamiento distorsiona todas las formas de lo real, enfrentándose y enfrentándonos a la evidencia de la fragilidad de nuestra manera de relacionarnos con los demás y con el mundo. Porque la mirada de Virgínia no hace concesiones y penetra hasta esos rincones del yo que los adultos convenimos desde siempre en ocultar. Por eso, cuando llega el sorprendente y rápido desenlace de la trama, todos asentimos al unísono, comprendiendo de inmediato que era el único final posible.
Nick tiene veinte años y se ha graduado en Oxford. Está escribiendo su tesis sobre Henry James, y abandona la provincia para irse a vivir a Londres, a casa de Toby Fedden, su mejor amigo y compañero de estudios. El joven está fascinado por la inalcanzable belleza de Toby, que es insistentemente heterosexual, pero también por el encanto de todos los Fedden, un encanto hecho de dinero, de clase, de cultura y de un saber vivir sin prejuicios, tan diferente de los modos de la conservadora clase media de donde procede Nick. Y no porque la familia Fedden sea de izquierdas: Gerald, el padre, es un político en alza en el gobierno de Margaret Thatcher; Rachel, la madre, es una Kessler, hija de una familia judía de las altas finanzas y hermana del barón de Hawkeswood. Es el verano de 1983, y Nick, ingenuo y cortesano como un personaje de Henry James, se implicará cada vez más en el mundo de los Fedden, en esa Inglaterra de fiestás interminables y euforia económica, donde todo parece posible. Y la espléndida, suntuosa novela de Alan Hollinghurst se abre ante el lector como un vasto retablo de la era thatcheriana, visto, vivido y contado por un joven testigo inteligente y cándidamente arribista, a la vez crítico y seducido. Pero La línea de la belleza es también el relato de la entrada en la vida de una generación, la crónica de una educación sentimental, la elegía intensa e irónica de un fugaz paraíso que ya comenzaba a desvanecerse. La línea de la belleza se ha hecho acreedora al Man Booker Prize, el más codiciado de los premios literarios británicos. Al dar lectura al fallo del jurado, su presidente, Chris Smith, ex ministro de Cultura, ha dicho, entre otras cosas, que era una novela emocionante, que trataba a fondo el tema del thatcherismo, y que nunca la búsqueda de la belleza, del amor y del sexo había sido descrita de manera tan exquisita.
Sofía se instala en casa de veraneo de su familia en Laredo para desarrollar su tesis doctoral sobre la figura de Mikel Areilza, un escritor que militó en ETA y se suicidó en el exilio. Desde su terraza se divisa la prisión de El Dueso, en la que cumple condena Jokin, un ex novio de quien se ha vuelto a enamorar por correspondencia. Sofía se va encerrando cada vez más en esa urbanización desierta en temporada baja, mientras desarrolla su tesis. a través a los diarios de un director argentino que trabajaba con Areilza cuando se suicidó. Sofía irá descubriendo que aquello en lo que cree no es más que la proyección de un discurso ficcional: La identidad, el amor romántico, la delgada línea entre el héroe y el terrorista.
Una ciudad marítima que se parece a Génova, un turbio crimen, un cadáver anónimo, un hombre que emprende una investigación personal para desvelar su identidad. Pero el procedimiento de Spino, el detective de la historia, no sigue una lógica de causa-efecto. En lugar de las apariencias visibles, él busca los significados que estas apariencias contienen, y su búsqueda corre sobre el filo ambiguo que separa el espectáculo del espectador. Así, su investigación «enloquece» y de pesquisa sobre una muerte se desliza al ámbito de las razones secretas que guían una existencia, transformándose en una especie de caída libre, vertiginosa y obligada al mismo tiempo: una indagación sin pausa, tendida hacia un objetivo que, igual que el horizonte, parece desplazarse junto con quien lo sigue. Una inolvidable novela-enigma que, bajo la apariencia de la detective story, oculta un interrogante sobre el sentido de las cosas.
Trata sobre las aventuras, antes del primer encuentro entre los protagonistas Tibeth y Alba y como estos se conocen, después de una muerte inesperada. Y como unidos por el amor a la arqueología, siendo ella titulada y él por hobby, nace el amor entre ellos, para después ser diagnosticada con una extraña enfermedad. Viajan por diferentes lugares del mundo, junto con su hermana y la pareja de esta, sin que Alba les permita saber la verdadera finalidad. Años después de su muerte, se dan cuenta que le dejó una caja a Nebet, la hija de ambos, donde había guardado una investigación realizada en los últimos meses de su vida, sobre unos antiguos pergaminos, que hablaban sobre ¨El círculo de conexión¨, que de existir, en algunos puntos muy determinados, uniría a un ser, con su familiar más directo del pasado. Alba escéptica, decide investigar, pues es la única oportunidad de que su hija pueda conocerla, ya que los médicos solo le pueden extender la vida, hasta que el feto se forme. Todo se dificulta, cuando aparece el amor del pasado de Tibeth, que creía muerta, una antigua amante, con un hijo de este, del cual no sabía de su existencia y el amor de la hermana de su difunta pareja. Una mezcla de sentimientos y emociones antiguos y nuevos, mientras intenta reunirse de nuevo, junto con los demás, con el amor de su vida, viajando por diferentes territorios, mientras varias organizaciones intentan terminar con ellos, para hacerse con la investigación de ¨conexiones¨.
En la monótona ciudad francesa de Sedan, Vincent, soltero convencido, pasa sus días entrenando al modesto equipo de fútbol local. Cuando su hermana le confía a su hijo Léonard para que se ocupe de él durante dos semanas, propicia sin saberlo el encuentro entre dos almas gemelas. ¿Cómo se acercará el solitario Vincent a ese chico que pasa la noche entera jugando al ajedrez? ¿Y cómo reaccionará Léonard, a quien no le gusta en absoluto relacionarse con los demás, frente a ese pariente al que no ha visto nunca? Tío y sobrino descubrirán juntos, en esta entrañable fábula, el valor de la amistad y el amor a través de su pasión compartida por el deporte, al que se aproximan de maneras muy particulares...
De 1932 a 1939 el «terror» causó millones de víctimas en la Unión Soviética. De tal proceso se tenía una visión esquemática, que lo explicaba todo por la acción personal de un Stalin demoníaco. La apertura de los archivos soviéticos ha permitido acceder a documentos hasta ahora desconocidos. De ellos surge este libro que nos ofrece una visión distinta en que el «terror» se nos aparece como el resultado de una locura colectiva que acabó destruyendo al propio grupo dirigente bolchevique.
La narradora y protagonista recibe un escueto telegrama que le comunica la muerte de su hermano Diego. Conmocionada, viaja a su Sevilla natal para ocuparse de las exequias, pero nada ocurre como era de esperar: tal vez su hermano no ha muerto y el telegrama ha sido producto de una mente extraviada, tal vez Diego sólo pasa unos días en una casa de campo.
Una obra literaria cuyo escenario se caracteriza por su dramatismo y embrujo. El fondo es la bella Italia y dos familias: una educada en los cánones de la moralidad y la religiosidad, y otra que rompe los esquemas de la época. Nuestra protagonista vivirá ambas vidas. La protagonista es Maddalena, una mujer virtuosa, recatada, según los cánones de la época. Su padre, un noble emprobrecido, busca desesperadamente un yerno rico para su hija, y lo encuentra en Giuseppe Labardi, un joven alegre, impetuoso que al no lograr satisfacer la pasión que ha despertado en él su mujer, decide imponerse por la fuerza. Ante eso Maddalena huye en la oscuridad de la noche. Nino, un apuesto gitano de tez aceitunada y hermosos ojos, encuentra en la escalinata de una iglesia una mujer empapada por la lluvia y con su traje hecho jirones, que no responde a ningún nombre. Ante eso, Nino la arropa en sus brazos y la lleva a su guarida de ladrones donde vive con su madre y hermanos. Allí Nino la llamará Rosanna y la convertirá en una ladrona que hará suya la brillante y moderna Florencia.