Contra todo pronóstico, Ester Pasternak ha sobrevivido al horror de Auschwitz. Pero, pese a haber salido con vida, su desolador viaje solo acaba de empezar. En el campo dio a luz a Pippa, una pequeña criatura de pelo rubio que los nazis le arrancaron de los brazos y entregaron a una familia alemana. Ahora que la guerra ha terminado, Ester solo piensa en encontrarla.
El problema es que Europa está sumida en el caos, muchísimas familias han sido separadas y todo el mundo anhela desesperadamente encontrar a sus seres queridos. Ester, como todos ellos, busca los ojos azules de su pequeña en cada orfanato y en cada hospital.
Los meses y los años pasan y las posibilidades disminuyen cada día. Ester se pregunta si Pippa sigue viva o si, por el contrario, el milagro que parecía haberla salvado solo la puso en peligro… La única pista con la que cuenta Ester es el número tatuado que ambas tienen en la piel.
¿Conseguirá encontrar a una niña con su mismo tatuaje? ¿O será demasiado tarde?
La conmovedora historia de una madre decidida a encontrar a su hija tras el horror de Auschwitz.
El amor de Élisa hacia Gilles, su marido, es absoluto y emocionalmente completo. Gilles es feliz al lado de su maravillosa mujer y de su familia. Nadie hubiera podido intuir la fragilidad de esa felicidad doméstica. Pero Gilles y la hermana menor de su esposa, Victorine, caen en una pasión ciega. Perdido el eje de su existencia, Élisa se adentra en un mundo de angustia, en una profunda desesperación. «La mujer de Gilles», originalmente publicada en París en 1937, no sólo narra la historia de un amor apasionado que transcurre en una familia obrera en Bélgica durante los años treinta, sino que presenta un agudo análisis sobre el erotismo de una sorprendente modernidad. Los libros de Madeleine Bourdouxhe, elogiados por Simone de Beauvoir, habían permanecido olvidados durante décadas. Sin embargo, hoy son apreciados en todo el mundo y «La mujer de Gilles» en particular, después de una serie de avatares, se ha convertido en una joya literaria que por fin el lector tiene entre sus manos.
Wilhem Strasser es un joven ingeniero europeo que un día llega con su mujer, Hilde, a una provincia del norte argentino, para construir un puente. Hilde y Strasser son más que extranjeros —probablemente huidos de la guerra europea—, son dos seres extraños en esa nueva geografía, que necesitan, además, levantar otro puente menos visible para continuar con sus vidas. Las lluvias constantes, el calor, el agobio de una tarea a la que no se le haya fin ni sentido, la rutina lacónica de los lugareños van creando una atmósfera enrarecida, en la que Strasser, Hilde y Janos —el asistente de Strasser, que completa el triángulo erótico— se mueven como sombras, como espectros de un mundo derrotado. Escrita con un lenguaje sutilmente lírico, intensa y original, La mujer de Strasser es una muestra más del talento narrativo de Héctor Tizón; una de esas novelas en las que el lector ingresa con ingenuidad, casi con descuido, y que, a medida que avanza, se va impregnando de su aire y adhiriéndose a las paredes de su mundo, un mundo en el que, como dice uno de sus personajes, el cumplimiento del deseo ayuda a encontrar la verdad.
En el seno de un respetable matrimonio londinense del siglo XIX ocurre un día un hecho insólito: Charles Wakefield, el marido, le dice a su esposa, Elizabeth, que debe salir de viaje por unos días. Al poco tiempo, Elizabeth descubre la absurda realidad: su marido lleva una vida furtiva a pocas calles de su casa. En una sociedad en que una mujer sin marido no es bien vista ―y en la que, como trasfondo, aparece el «movimiento luddita» contra las máquinas de la Revolución Industrial―, la mujer de Wakefield descubre que debe valerse por sí misma, y decide desentrañar qué ha motivado la huida de Charles. En sus pesquisas, y durante la espera, que será de años, la esposa abandonada aprende a medir el paso de los días y el peso de la vida.
En un encantador barrio residencial de Connecticut viven tres matrimonios amigos que de pronto ven amenazada su apreciada armonía cuando una joven y bella vecina —que enviudó un año atrás— queda embarazada. ¿Quién es el padre? ¿Podría ser alguno de los maridos? Cada pareja analiza la situación de su matrimonio y de la lealtad que daban por segura. Y en todos los casos salen a relucir debilidades, que llevan a cada mujer a una situación de crisis. Deberán tomar decisiones importantes, que pueden fortalecer su matrimonio o, por el contrario, destruirlo.
Islandia, 1686. Tras su inesperado compromiso matrimonial con Jón Eriksson, Rósa abandona su hogar para instalarse en la remota e inhóspita aldea de Stykkishólmur. Pero sus nuevos vecinos desconfían de los forasteros. Sobre todo, de una mujer que, como ella, procede de los misteriosos umbrales de la civilización. Pero Rósa también abriga sus sospechas. Su marido enterró a su primera esposa solo y en plena noche. Jón se niega a hablar de ello, pero le regala una figurilla de cristal cuyo significado Rósa no entiende. Los lugareños los miran no solo con recelo, sino con temor. Murmuran siniestras amenazas. Rósa intuye la presencia del mal. Aislada y lejos de su hogar, ve cernerse sobre ella la oscuridad. Y teme ser su próxima víctima. Con la Islandia del siglo XVII como escenario, con su trasfondo de juicios por brujería y turbulencias volcánicas, «La mujer de cristal» es un relato poderoso y apasionante acerca de la superstición y la salvación, el amor y el miedo.
Sus días de banquero pertenecen al pasado. Ahora, Laurent Letellier es el feliz propietario de una pequeña librería parisina. Cuando una mañana, camino del trabajo, se topa con un bolso de mujer abandonado sobre un cubo de basura, decide llevárselo a la tienda con la noble intención de devolverlo a su dueña. Desaparecidos el billetero y el móvil, su propósito parece casi imposible si no fuera porque, entre diversos objetos femeninos, Laurent encuentra una libreta roja llena de anotaciones, pensamientos y recuerdos. Cediendo a la curiosidad, se sumerge en la jugosa lectura y, como un si de un rompecabezas se tratara, empieza a reconstruir la vida de Laure, amparado por la excusa de hallar alguna pista que le permita localizarla. Sin embargo, para qué engañarse, el diario también es una llave a la intimidad de la enigmática desconocida, lo que ejerce sobre Laurent una irresistible fascinación. Y mientras él se entrega de lleno a una absorbente labor detectivesca, Laure regresa a casa después de recuperarse en el hospital de las secuelas del atraco. De pronto, los papeles se intercambian, y en un giro sorprendente, Laure se convierte también en investigadora, empeñada en descubrir quién es el misterioso hombre que ha depositado el bolso, con todo su preciado contenido, en el salón de su casa.
En una época de oscurantismo y superstición, una mujer se atrevió a desafiar todos los tabúes de su tiempo. Monasterio de San Disibolo, Renania, 1118. Durante la noche, Hildegard descubre, enterrado en el jardín, el cuerpo de un recién nacido todavía con vida. Extrañada, se apresura a la celda de su novicia favorita y encuentra a la joven ensangrentada y moribunda… Ciudad del Vaticano, Roma, en la actualidad. Hasta ahora, el joven sacerdote Samuel Beyhe conocía la ruptura que supuso para la jerarquía eclesiástica la primera feminista de la historia: abadesa, profetisa, curandera, bruja, artista, escritora, compositora, visionaria, mística… Hildegard de Bingen fue uno de los personajes más fascinantes de la Edad Media. Pero Samuel no sabe por qué el Vaticano tiene un súbito interés en recuperar unos códices de Hildegard que llevan desaparecidos cientos de años, ni cuáles son los motivos para que se le haya encomendado la misión de encontrarlos. Lo que empieza siendo una investigación rutinaria, pronto se convierte en una vertiginosa carrera por descifrar una profecía que afectará irremediablemente al papel de la mujer en la iglesia. Y también en un peligroso juego donde la rompedora visión de Hildegard y los secretos que guardó en su seno todo este tiempo en torno a la verdad, la fe, el sexo y el amor, cambiarán la vida de Samuel para siempre.
Alexandre Dumas escribe la historia que su amigo Charles Nodier le transmitió en su lecho de muerte. Trata sobre Theodor Hoffmann, pintor, compositor y escritor alemán, que decide realizar un viaje a París antes de casarse con Antonia, la hija de Maese Gottlieb Murr (su mentor y director de la orquesta del teatro de Mannheim). Antes de partir Hoffmann, a petición de Antonia, jura por la vida de ella que renunciará al juego y que le será fiel en cuerpo y alma. Una vez en París no encuentra lo que esperaba; pintura, literatura, música y política, sino que se topa con la dura realidad de una ciudad convulsa inmersa en el Reinado del Terror jacobino. Los museos y bibliotecas están cerrados pero las ejecuciones de la plaza de la Revolución, donde se haya la guillotina, se suceden. Viendo la representación de El Juicio de Paris Hoffmann se enamora perdidamente de la bailarina de la ópera Arsenia, quien resulta ser la amante de Danton. A partir de ese momento el protagonista lucha para mantener las promesas realizadas a su prometida Antonia y acontecen numerosos hechos sobrenaturales.
Ceilán, 1925. Gwendolyn Hooper, una joven inglesa de solo diecinueve años, llega en un barco de vapor, ilusionada por iniciar su nueva vida de casada junto a Laurence en su inmensa plantación de té. Pero el marido que la recibe es un hombre distante, reservado y taciturno. Laurence siempre está fuera trabajando, por lo que Gwen decide explorar ella sola la plantación, envuelta entre la neblina y los perfumados aromas a canela y jazmín de la tierra. Al vagar por la casa, Gwen se encuentra con puertas cerradas, baúles con vestidos polvorientos, una pequeña tumba en el jardín cubierta de maleza; indicios de un pasado oculto e inquietante, un misterio más profundo de lo que parece y que se remonta a tres generaciones antes. Gwen queda pronto embarazada, para alegría de Laurence, pero el día que prometía ser el más feliz de su vida se enfrenta a una terrible decisión. Una decisión que debe ocultarle a toda costa y que solo le provocará dolor y ansiedad. ¿Conseguirá Gwen salvar su matrimonio y perdonarse a sí misma por la desgarradora decisión que se sintió obligada a tomar? Y cuando llegue el momento de la verdad, ¿podrá Laurence perdonarla en un ambiente general cada vez más hostil por las tensiones entre tamiles, cingaleses y los colonos británicos, lo que amenaza con la ruina familiar?
Un amor más valioso que un tesoro Olivia es encanto, misterio y seducción. Lapo de Monfalco, aristocrático y romántico, acaba cautivado. Sin embargo, el destino está compuesto de espinas y zarzas, además de felicidad y angustia…
Lucía es una editora que empieza a dejar atrás su juventud justo cuando afronta una dolorosa ruptura sentimental. En esa difícil encrucijada, visita el desván de la antigua casa familiar y descubre, en el fondo de un baúl, el diario íntimo que su madre, María, ya fallecida, escribió durante la crisis de los misiles de Cuba. Desde Suecia, donde ha seguido a su marido diplomático, María narra con angustia los momentos más tensos de la Guerra Fría, desahoga su miedo ante la amenaza nuclear y se replantea su situación matrimonial, atormentada por la sospecha de que él tiene una aventura. Su relato -el de sus anhelos, temores, certezas y secretos-, hará que Lucía descubra a una madre muy diferente a la que ella creía conocer
Estella, es la única hija del director de un hospital psiquiátrico, una joven que anhela sentir la pasión y el amor que las relaciones de parejas entregan. En este lugar entabla una poco convencional amistad con una paciente, que va manejando la cabeza de Estella de una manera asombrosa. En el intento desesperado por vivir, comete errores que la van llevando por una camino de dolor, sufrimiento y soledad. Jonathan, es un joven muy apuesto, que llama mucho la atención de Estella, es el hijo de un amigo de su padre, pero esconde algo que destruirá la vida de Estella. Por otro lado Edmond, es un médico psiquiatra, que se ve envuelto por la belleza y carácter enigmático de Estella. ¿Será posible que el verdadero amor salve a alguien de la oscuridad? ¿Es Estella la que mueve los hilos de su vida o son manejados por alguien más? Acompaña a Estella es este impactante drama, lleno de lucras, deseos y pasiones desesperadas.
El inspector Enzo Barese recibe una inquietante llamada la noche de fin de año. Han asesinado a una joven en el bosque del pequeño pueblo de Lagarza. Cuando llega a la escena del crimen, enseguida se percata de que no se trata de un asesinato corriente, sino lo que parece la obra de un asesino en serie. Esa misma noche, Julieta despierta en medio del bosque sin saber cómo ha llegado hasta allí. ¿Por qué lleva un fino vestido de verano en pleno invierno? ¿Quién la ha intentado enterrar en vida? Pronto se dará cuenta de que esas no son las únicas incógnitas por resolver: no recuerda nada sobre su vida ni su pasado. Para investigar su propia identidad y los sucesos que la llevaron hasta ese bosque, Julieta deberá hacerse pasar por otra persona y a la vez evitar que ese apuesto inspector que ronda por el pueblo averigüe su secreto. Cuando Enzo y Julieta se ven obligados a colaborar en el caso, surge entre ellos una fuerte atracción que ninguno de los dos estará dispuesto a reconocer. En Lagarza nunca pasaba nada, hasta que pasó.
Anne es una joven plebeya que vive en Brujas durante el Renacimiento; Hanna, aristócrata, en la Viena imperial de principios del siglo XX; y Anny, en el Hollywood de hoy: ¿qué pueden tener en común tres mujeres tan distintas? Para descubrirlo, Éric-Emmanuel Schmitt, con su gran maestría para trazar retratos psicológicos femeninos, nos ofrece un fascinante viaje por sus vidas, sus épocas y sus sentimientos.
Jimena de Viges, hija bastarda del rey de Castilla, ama la música por encima de todo, pero su imprudencia e ingenuidad la impulsan a cometer un terrible desliz que conlleva su destierro a un paraje remoto. Sin tiempo para hacerse a la idea, y dejando atrás todos sus privilegios, parte hacia Santa María de Tina escoltada por Blasco Espinar, un imperturbable templario al que llaman Negraluna. Descendiente del halconero real y acostumbrado a librar mil batallas, Espinar pronto comprueba que la misión encomendada por la Orden a la que pertenece no resulta tan sencilla como preveía, debiendo enfrentarse durante la travesía a la contienda más difícil de su vida: lidiar con los demonios de su pasado, proteger a la juglaresa de lengua afilada de los enemigos que la amenazan y escudar su propio corazón contra los embates de unos sentimientos que creía irrecuperables.
A la memoria de Florentino Ameghino Florentino Ameghino tuvo el ahínco del conquistador, la firmeza del estudioso y la solvencia espartana del sabio. Por eso un día lanzó al mundo la teoría de que el origen del hombre había tenido lugar en territorio argentino. Ningún otro compatriota se arriesgó a tanto. En algún tiempo lo llamaron despectivamente «el huesero». Hoy su nombre encabeza la ciencia nacional. Esta novela presenta a su mujer, Leontina Poirier, joven francesa de la que se enamoró en París en ocasión de presentar su tesis en la Feria Internacional de 1879. Consciente de las dificultades que presenta el abordaje de los temas científicos, la autora apeló a una trama sencilla para difundir aspectos de la ciencia junto a otros de la vida cotidiana, y lo hace sin endiosar a sus personajes. “La mujer del huesero” es un libro notable que cuenta con una correcta ambientación, conflictos de época y testimonios atractivos que han sido presentados con fluida prosa.
Cuando María llega desde el reino vecino para casarse por compromiso con el atractivo y frío inquisidor, es consciente de que a partir de ahora compartirá su vida con un monstruo. Se siente capaz de sobrellevarlo, se ha preparado como ha podido para ello. Lo que no imagina son los malvados planes que Diana, la sirvienta del religioso, tiene reservados para ella, pues no piensa permitir que nadie la arrincone ni le quite el puesto que ocupa en la casa y en la cama de ese poderoso hombre. Solo que... nada saldrá como habían pensado ninguno de los tres. Sexo explícito, sangre e intriga en un mundo medieval de ficción, donde placeres mundanos de todo tipo incendiarán las almas de sus habitantes, llenos de secretos y doble moral. Otros personajes, como la reina de Las tres águilas, el mujeriego conde Ethan o las brujas que habitan el bosque, se verán implicados en una trama de secuestros y asesinatos que asolan la capital mientras tanto. Novela corta independiente, en la línea de la serie de relatos de la autora '¿Cuál es tu fantasía? Relatos eróticos para irse a la cama.', bestseller erótica varios años y longseller Amazon desde 2013.
Jane Gardam vuelve a deleitarnos con su aguda capacidad de observación, su fino sentido del humor y la sobria claridad de su estilo narrativo. Retomando el hilo de su anterior novela, El viejo juez, Gardam nos ofrece una nueva versión de la historia de Sir Edward Feathers, el peculiar personaje que desgranaba su azarosa vida desde su plácido retiro en la campiña inglesa. Pero esta vez será a través de las vicisitudes de Betty, su esposa, como descubriremos aspectos desconocidos de la brillante carrera del juez y del matrimonio que ambos compartieron. Niña huérfana y criada en los campos de internamiento de Shanghai, Betty estudió en Oxford y se formó como una mujer de espíritu libre. El contraste con su marido, tan reservado y tradicional acrecienta su atracción por el eterno adversario de Filth, el desenvuelto y dinámico Terry Veneering. Así pues, desde la perspectiva de Betty, la historia de sus vidas se desarrolla plena de giros y revelaciones sorprendentes, de los que emerge el retrato de un matrimonio narrado con la ironía y sutileza típicamente británicas que han hecho famosa a la autora.