La mujer que soy es una historia valiente y asombrosamente conmovedora sobre la libertad, la fama, la maternidad, la supervivencia, la fe y la esperanza. En junio de 2021, el mundo entero escuchó hablar a Britney Spears en una audiencia pública. El impacto que causó al compartir su voz, su verdad, fue innegable, y cambió el rumbo de su vida y el de la de infinidad de personas. La mujer que soy revela por primera vez la increíble peripecia vital y la fuerza interior de una de las mejores artistas de la historia de la música pop. Escritas con una franqueza y un humor extraordinarios, las impactantes memorias de Spears ilustran el poder imperecedero de la música y el amor, y la importancia de que una mujer, por fin, cuente su propia historia, en sus propios términos.
Una historia de amor intensa y adictiva. Nunca sabes la razón secreta que hay tras lo que parecer estar sucediendo. Y si la averiguas, suele ser más siniestra de lo que podrías haber imaginado. Para Isabel Archer, las citas son una manera más de matar el tiempo en una vida anodina pero cómoda. Siempre quiso ser actriz, pero no es una mujer perseverante. Así que ha decidido desarrollar sus dotes interpretativas en los encuentros con hombres desconocidos: adopta el papel de la mujer ideal y perfecta con cada uno de ellos, adivinando, gracias a su poderosa empatía, qué es lo que el hombre que tiene en frente espera de ella. Es un juego inocente en el que no busca hacer daño, tan solo pasar el rato. Al día siguiente, borra su perfil en las redes y adopta uno diferente. Hasta que se encuentra con Mathew. Porque Mathew también disfruta jugando. Pero solo el juego que él diseña y planea, en el que tiene siempre las cartas ganadoras, un juego del que él siempre sale indemne.
La mujer quijote remite en su título a la más famosa novela de Cervantes. Y Arabella, su protagonista, tiene desde luego mucho que ver con Don Quijote: la inmoderada lectura de romances heroicos franceses hace que su razón se vea capturada por las hazañas de príncipes y princesas, que ella espera hallar reflejadas en su propia vida.
Sus aventuras, más imaginarias que reales, son el hilo conductor de la novela, y aportan el tono de humor de la obra. Pero la burla no es cruel ni despiadada, y la joven aparece siempre retratada bajo una luz favorecedora como defensora de valores eternos frente a una sociedad hipócrita, pretenciosa y artificial, en un mundo basado en las apariencias.
Sabemos que Charlotte Lennox fue en su día una escritora muy conocida en el Londres de la segunda mitad del siglo XVIII.
Si nació en Gibraltar o en las colonias de América del Norte, hecho que confirmaría a Lennox como la primera novelista americana, sigue siendo un misterio. Muchos otros misterios rodean la vida de esta mujer que se codeó con los más ilustres intelectuales londinenses de su tiempo, que gozó de su apoyo y estima, y que murió en Inglaterra en una situación de precariedad absoluta en 1804.
Sus imperiosas necesidades económicas llevaron a la autora a un nivel de enorme productividad: escribió novelas, obras de teatro, traducciones, y trabajó en una polémica edición crítica de las obras de Shakespeare que pretendía ser el primer estudio de fuentes del famoso dramaturgo.
Su obra gira en torno al tema de la mujer, preocupada por el papel de esta en la sociedad y de su educación.
En «La mujer sentada», novela concebida como un extraño sueño sostenido, desfilan mujeres que se vuelven poliándricas, soldados que imaginan una religión del honor cuyo rito más notable será el suicidio, grandes duques rusos que fustigan a cortesanas francesas; se escucha un concierto de cámara a cañonazos en las trincheras del Marne y el tumulto de las barricadas en París; se asiste, sin que cese el asombro, a carnavales, a bailes de disfraces, a orgías. Guillaume Apollinaire escribió «La mujer sentada», que se publicaría de forma póstuma en 1920, a partir de dos escritos previos, extrañamente complementarios: «La mormona y el danita», de 1914, e «Irene de Montparnasse o París en tiempos de guerra», de 1917. El primero es una crónica épica sobre la fundación del Estado mormón de Utah en el siglo XIX. El segundo una evocación de la vida encendida y febril del París de las vanguardias, del Montparnasse en el que vivían, creaban y se peleaban Picasso, Max Jacob, Blaise Cendrars o el propio Apollinaire, todos ellos personajes del libro. A pesar de su variedad de temas y estilos, hay en esta novela una cuestión esencial y absolutamente moderna: la mujer libre, bárbara, la mujer que cuenta con ingresos propios y con un harén propio, que ha aprendido a vivir «sentada» en un mundo de «hombres en pie» que vagan perplejos y asustados.
Con una estética a medio camino entre el melodrama, las novelas de Manuel Puig y los thrillers policiales, Dany Salvatierra nos presenta una cautivante novela en tres actos protagonizada por una diva en decadencia. Jacqueline Metalius es una leyenda viva de las telenovelas latinoamericanas. Arrolladora, indómita y de carácter volcánico, decidió enfocarse en su carrera antes que en su vida personal. Un día, en medio de las grabaciones de su más reciente producción en Miami, recibe un mensaje anónimo de quien parece ser su difunta madre, asegurándole que no está muerta. A partir de entonces, se verá atrapada en una red de espionaje internacional que la traerá de vuelta, después de cuarenta años, a Lima, su ciudad natal, donde los cadáveres regresarán de sus tumbas para desenmascarar los más oscuros y terribles secretos.
Ainara es una profesora de ascendencia árabe que trabaja y vive en Madrid. Su amor por la enseñanza y el cariño de los niños juegan a combinación perfecta en su día a día. Tiene una vida independiente y unas serie de aficiones que nunca suele traicionar. Sin embargo, una cierta tarde tormentosa de un día cualquiera del mes de mayo, algo sucedería que dejaría un profundo calado en la mente de la profesora: un papel en el buzón de su casa cuyas venenosas letras solo buscan el dolor y la preocupación. “No eres quién crees ser” reza la nota en cuestión. Ainara, en un principio perfectamente preparada para pensar que haya podido ser algún alumno resentido, obvia el detalle hasta que una serie de acontecimientos, cada vez mas siniestros y desagradables, empiezan a hacer mella en su primera opinión. Esto es un juego macabro que hace le hace dudar de su propia existencia, de su pasado e incluso de lo que le depara el futuro.
Nes es una psiquiatra de cuarenta y ocho años que vive bajo la presión de una percepción del tiempo anormalmente acelerada. Hija de un cirujano de provincias, pertenece a una familia dividida en dos categorías: los Rápidos y los Lentos. La mujer veloz es una original mirada sobre el gran mal contemporáneo: la tiranía de la inmediatez en la mayoría de ámbitos de nuestras vidas y las dificultades que tenemos para distinguir lo «importante» de lo «urgente».
Vibrante y llena de suspense… nos conduce al corazón de lo que significa ser artista. Cuando Alizée Benoit, una pintora estadounidense que trabaja para el gobierno, desaparece sin dejar rastro en el Nueva York 1940, nadie parecer saber qué ha pasado. Ni su familia judía, que habita en la Francia ocupada por los nazis, ni su mecenas artística Eleanor Roosevelt, ni su círculo de amigos íntimos -Pollock, Krasner y Rothko-, saben qué ha podido ser de ella. Setenta años después, su sobrina nieta Danielle Abrams, empleada de la célebre casa de subastas Christie's, descubre unas enigmáticas pinturas escondidas en el dorso de unos cuadros abstractos. ¿Tienen esas obras las respuestas a las preguntas que envuelven la desaparición de su tía abuela?
Gloria es una aspirante a bailarina de ballet devenida a stripper gracias a sus deudas y problemas económicos. Sin embargo, secretamente ella disfruta que su cuerpos sea admirado por cientos de extraños cada noche mientras baila. Hasta que recibe una propuesta tan inusual como tentadora; posar desnuda para una serie de pinturas del afamado artista plástico Jacques LeSoeur. Gloria acepta, excitada por la generosa paga y por el magnífico atractivo de Jacques. Una vez n su estudio, se entera que el tema de las pinturas es la dominación y la sumisión, y que ella deberá posar no solo desnuda si no que amordazada, esposada, atada… Pronto, la pasión entre ella y Jacques se desatará en forma de ardientes juegos de dominación. Pero el amor también complicará lo que en un principio solo sería una relación profesional.
Thriller, terror y género policiaco combinados en un adictivo debut al más puro estilo del maestro Stephen King. Cuando Ana pidió ayuda a Daniel para cargar con la muñeca hasta el hoyo, no intuía ni por asomo que, junto con el juguete, arrojaría también en aquel húmedo abismo su infancia y las vidas de cuantos le rodeaban. Un cuarto de siglo después —en un pueblo costero del sur peninsular y bajo el disfraz del desarrollo urbanístico—, el azar desenterrará varios cuerpos en el antiguo vertedero municipal y removerá así un ponzoñoso pasado que solo esperaba el momento para salir de su letargo y cobrarse una deuda… En ese lugar en que los muertos reclaman sus nombres y los vivos juegan a olvidarlos, una inspectora en horas bajas intentará redimir sus errores y desenmarañar veinticinco años de oscuridad. Al más puro estilo It, del maestro del suspense Stephen King, el thriller, el terror y el género policiaco se disputan el protagonismo en esta adictiva y trepidante novela en dos tiempos, donde la ligereza de la adolescencia y la gravedad de la edad adulta colisionan con la desgarradora energía propia de todos los ritos de paso. «Una historia inquietante de trauma y venganza». Susana Martín Gijón
Corren los años treinta en la remota ciudad albanesa de Gjirokaster. Una joven de diecisiete años, «La muñeca», es casada sin previa consulta, como marcan las tradiciones. Es una Dobi, una de las grandes familias de la ciudad, y la han casado con un Kadaré, clan que conoció mejores tiempos. Entre ambas familias, como entre las demás de esta añeja ciudad albanesa, siempre ha reinado la envidia y las desavenencias. «La muñeca» deja la casa familiar para alojarse en su nuevo hogar, una mansión fría y austera, con calabozo propio, en la que reina su suegra, mujer de fuerte carácter, inteligente, enclaustrada voluntariamente entre aquellas paredes siguiendo la tradición familiar. La relación de la joven con su suegra no será fácil, lo que la obligará a adaptarse, a ser una mujer casi sin criterios, sin carácter, sin sentido, que asiente a todo, una muñeca frágil de cara pálida como la porcelana, «La muñeca». Tras el fallecimiento de su suegra, aunque mejora su situación, surgen nuevos problemas, esta vez con su propio hijo que quiere emanciparse. Brillante y altivo, ha estudiado y emplea palabras que ella no entiende. Tampoco su forma de vida ya que no acepta sus consejos y menos que le busque una novia siguiendo la tradición. Poco a poco, «La muñeca» va descubriendo con tristeza que su mundo está desapareciendo, y lo peor de todo, teme que su hijo la ignore. Ismaíl Kadaré vuelve en «La muñeca» una vez más a su natal Gjirokaster, una villa medieval de casas fortificadas y callejuelas serpenteantes del sur de Albania, para narrarnos su particular relación con su madre. Un relato valiente y evocador, con una notable carga de ironía para describir a aquel joven que fue, un tanto soberbio, en un mundo cambiante que en pocos años había pasado de la más asfixiante tradición al olvido de aquellos viejos valores que habían marcado su infancia y la vida de su madre, «La muñeca».
1937: Numerosos republicanos españoles huyen de su país asolado por la guerra civil y la avanzada de las tropas del general Franco. Felicia, una niña de unos 6 años, pasa la frontera francesa de los Pirineos, acompañada de su inseparable muñeca de trapo, de su madre y de Salvador, el joven amigo de su padre. Ya huérfana y refugiada en Francia, la acoge el orfanato normando Francisco Ferrer de Le Havre, en el que le da clases Elvira, una joven maestra española. Felicia solo conserva de Barcelona el remoto recuerdo de un padre del que estará sin noticias... Hasta ese día de julio de 1956 cuando, entre los participantes a un congreso de esperanto en la capital catalana, el padre reconocerá a su hija... Una novela emocionante en la que se descubre el desenlace de los destinos entrecruzados de cuatro personajes sumidos en un conflicto mal cicatrizado.
Bénédicte Masson es un hombre de una fealdad extrema que se ha visto obligado a mantener unas relaciones distantes y poco frecuentes con las mujeres. Desde su buhardilla parisina, Masson observa a Christine, su amor platónico, y a un desconocido que la joven mantiene escondido en un armario. Paralelamente, la marquesa de Coulteray asegura que está siendo vampirizada por su marido, mientras unas muchachas desaparecen en la casa de campo de Masson. La oscura personalidad de éste es el eje argumental de la novela, y a su alrededor gira un sinfín de interrogantes que acentúan la intriga y la sensación de inquietud que produce la novela desde la primera página. «La muñeca sangrienta» es una magnífica novela de suspense que revela una de las principales preocupaciones del escritor francés: el misterio insondable que se encuentra en la frontera entre la vida y la muerte.
El día que Ara y Enzo se mudaron a Milán, nada hacía suponer que su vida allí sería distinta de la que llevaban en Roma. Pero cuando alguien atropella a Ara y esta entra en coma, las circunstancias se precipitan. Enzo, desesperado por encontrar al causante del accidente de su mujer, recurre a cuanto tiene a su alcance. Pero... no todo es lo que parece, y gente que creía desaparecida volverá a su vida para cambiarla por completo. Pero ¿y si la realidad no lo es todo? Tras dos meses de espera, Enzo comienza a soñar con Ara en un mundo sostenido por las mentes de ambos… que puede ser la solución, o la jaula definitiva.
La teoría de Brad Clifford no era más que matemáticas aplicadas pero sus implicaciones eran demasiado candentes para las entumecidas mentes de sus superiores. Así que la envolvieron (y a él también) en el más absoluto de los misterios.
Y entonces aparece en escena Aubrey Philipsz, otro genio iconoclasta como Clifford, para construir la Máquina del Génesis que la teoría del matemático ha hecho posible.
De repente, todas las armas parecen inútiles ante el poder antes inimaginable de la Máquina del Génesis.
Podría acabar con el mundo, o salvarlo, y los hombres que han llevado a ese mismo mundo por el camino del desastre luchan ahora por hacerse con el control de esta nueva fuerza.
Pero Clifford y Philipsz tienen otro objetivo, otro sueño.
¡Ellos apuntan mucho más alto!
El diario codificado de Benjamin Franklin. Un mapa oculto. Un evangelio legendario. Estas son las primeras piezas de un antiguo puzle que podría destruir los mismísimos cimientos del cristianismo. En una ocasión, Joseph Koster desenterró uno de los secretos más celosamente guardados de la Iglesia... y aquello estuvo a punto de costarle la vida. Ahora, en compañía de la hermosa ingeniera Savita Sajan, Koster debe descodificar el diario de Franklin antes de que caiga en las manos de aquellos que están dispuestos a todo para destruirlo. Pero en un mundo de sociedades secretas, antiguas conspiraciones y acertijos masónicos, encontrar el trofeo es una cosa, y sobrevivir otra, pues la llave que abre la puerta del cielo... puede abrir la del infierno.
Luis y Alberto son hermanos gemelos. Se han ido a vivir a una urbanización, a una casa nueva donde pueden disfrutar del aire libre y la piscina. Aquello les encanta. Una tarde nublada deciden irse a dar una vuelta con sus bicis. En el camino encuentran una casa abandonada, con un búho en la ventana que parece observarles. Lo extraño es que los dos han soñado con esa casa. La curiosidad les impulsa a entrar y dentro encontrarán una puerta escondida que les llevará hasta Drelio, el hombre vampiro. Junto a él vivirán una aventura difícil de olvidar.
Gaston Leroux es uno de los autores más brillantes y carismáticos de cuantos se han dedicado a la literatura de aventuras, terror y misterio. Su pluma nos ha dejado personajes tan memorables como el detective Rouletabille, Chéri-Bibi o el mismísimo Fantasma de la ópera. Con su maestría para dosificar la intriga y el terror, su irónico y mordaz sentido del humor y su fino olfato para enhebrar en una misma trama elementos sobrenaturales, de ciencia-ficción y una acerada agudeza para captar la esencia psicológica de los caracteres de sus personajes, el autor de «La máquina de asesinar» vuelve a sumergirnos de nuevo en las vidas cotidianas de los habitantes de la parisina Île-Saint-Louis. Esta vez el barrio vive asolado por el terror que siembran las apariciones de un misterioso galán de rostro impasible y ojos tristes que, siempre silencioso, siempre enigmático, bellísimo y audaz, ha secuestrado a la hermosa Christine, la hija del relojero Norbert. Christine es también el amor secreto del ajusticiado Bénédict Masson y la prometida del ambicioso Jacques Constantin, un estudiante de medicina empeñado en dotar de vida a seres ya muertos o a objetos mecánicos inanimados. ¿Qué secreto se esconde tras el silencio del enigmático raptor? ¿Qué relación guarda con el difunto Masson? ¿Y con las secretas prácticas médicas de Constantin?
No por el hecho de que André Maurois se lance a una especulación científica al modo de H. G. Wells es preciso suponer que realice un salto fuera de nuestro tiempo y una exploración del futuro. «La máquina de leer los pensamientos» es un relato que puede suceder hoy mismo, que puede suceder mañana o que tal vez sucedió ayer; sus personajes están dotados de las mismas cualidades y defectos que cualquiera de nosotros. Lo extraordinario lo hallamos en la aventura en sí, en la imaginación de que nace, en el trastorno mental que provoca por doquier. El mecanismo inventado por ese profesor Hickey que nos presenta Maurois, es una quimera; sin embargo debemos admitir como verosímil el proceso racional en virtud del cual se llega a desear la invención de un aparato capaz de leer la mente ajena. «La máquina de leer los pensamientos» nos sitúa en un punto de partida desde el cual nuestra mente puede lanzarse libremente al descubrimiento de nuestro espíritu y absorberse en el estudio de nuestro destino como seres humanos.
Obra que se halla en los inicios de la novela de ciencia-ficción, La máquina del tiempo (1895) sigue conservando el mismo poder de fascinación y vigor narrativo que le valieron el éxito inmediato en el momento de su publicación. Afortunada síntesis de los conocimientos científicos del autor, del maquinismo que hacía furor en la época y de la visión escéptica de H.G. Wells (1866-1946) respecto al rumbo tomado por la sociedad que le tocó vivir, el relato (un clásico) describe un futuro inquietante en el que dos razas semibestiales, los eloi y los morlock, comparten en una peculiar simbiosis un planeta extraño y desolado sobre el que se han cernido catástrofes y transformaciones, pero en el que brilla aún, como tenue esperanza, un hálito de humanidad.