Constanza Contanti es una joven veneciana hija de un acaudalado joyero y poseedora de una belleza sin igual. Educada entre ricos algodones y brocados suntuosos, su vida transcurrirá plácidamente siempre que acepte las reglas de un juego que otros han decidido por ella. Con tan sólo diez años su familia acuerda un matrimonio de conveniencia que ligará el destino de Constanza al de la nobleza más refinada de Italia una vez alcance la pubertad y pueda dar hijos a su futuro esposo que perpetúen el ducado. Los cambios comienzan en su cuerpo tempranamente y ella intenta posponer el momento del enlace todo lo posible ocultándoselo a su madre. Mujer de inteligencia despierta, pronto descubre el poderoso influjo que su belleza ejerce entre los hombres, y mientras experimenta pasiones prohibidas a las damas de su edad y posición, no deja de hacerse preguntas: ¿por qué ellos, incluidos los más jóvenes, pueden dar rienda suelta a sus deseos y las mujeres no tienen ese derecho? ¿Y qué pensará su esposo si descubre que ella no llega al lecho conyugal sumida en la ignorancia?
Ernesto, como muchos otros, nació medianamente feo. Le compensaron con una hormona rumbera. Mal complemento para un pobre. Si hubiera nacido rico, su carencia de guapura no sería óbice para pasar una vida de regodeo. Lo más notorio de los ricos es el dinero, y eso encubre todo lo demás: físico o espiritual. Ernesto representa la parte visible del iceberg de maniacos sexuales que navegan por un mar de lujuria. La otra parte, la mayor, se oculta en los oscuros abismos de la moralidad fingida. Ernesto es el paradigma de quien piensa en el sexo dos tercios de su vida. El resto, cuando duerme, sueña con él. Ernesto es simplemente un obseso del sexo, algo que hoy en día ocurre con quienquiera que posea un televisor o vea los carteles de las avenidas. Una despampanante mujer casi desnuda nos invita a un cigarrillo, una copa, una camisa o un par de zapatos. Incluso aparecen cuando se trata de estuches funerarios o la infinita paz de un sepulcro con aire acondicionado. ¿En qué podemos pensar si no es en ella? ¿Alguna vez un tipo gordo y feo nos recomienda un cómodo colchón? No, siempre es una mujer que prácticamente nos invita a compartirlo. Ernesto personifica el producto lógico de una sociedad que nos ofrece mujeres encamables, y sólo con el poder de su firma. Y él, un pobre tipejo que no pescaría un pez en un estanque seco, tiene la imperiosa obligación de fungir de lo que se espera de él: un minúsculo grano del molesto sarpullido en los glúteos de la sociedad. Esta es parte de su historia, contada por él mismo, como una tentativa de decirle al mundo que existe, aunque no tenga la menor idea de para qué. Será por el estúpido argumento de que en este mundo debe haber de todo.
Eduardo y Julia son dos viejos amigos que se reencuentran a sus setenta años. No se consideran una pareja, mucho menos un matrimonio: uno es para el otro esa deseada compañía que los ayuda a afrontar los achaques propios de la edad, pero también a compartir sus inquietudes y sus ganas de vivir, aún intactas. Ella es inquieta y divertida; él es un hombre paciente y amable que vive pendiente de las necesidades de su nuevo amor. Con ironía y humor, la novela retrata las peripecias de dos personas para quienes, a pesar de los años y la nostalgia por la juventud perdida, la vida es un permanente comienzo.
Inglaterra y Francia están en guerra. El poderoso ejército republicano ha invadido el continente y ahora se dispone a atacar las costas británicas. Mientras tanto, en Kensington, un grupo de astrónomos franceses exiliados busca una estrella perdida a la que llaman Selene, con la esperanza de desvelar así el secreto de la armonía del sistema solar. Para completar la ecuación sólo les falta descubrir un nuevo planeta, cuya órbita debería situarse entre las de Marte y Júpiter. La correspondencia científica sobre la estrella perdida fluye libremente entre los dos países en guerra, pero ¿no es posible que esas cartas escondan algo más siniestro que la trayectoria de los cuerpos celestes?
'Estaba perdida, y él era el mapa que me llevaba a casa .' Jasmine y Elliott llevan la música en la sangre. Están hechos el uno para el otro y sueñan con una vida juntos, pero el destino no tardará en separarlos. Años después, cuando Jasmine regresa a su hogar, todo ha cambiado para la joven pareja. ¿Podrá su amor por la música unirlos una vez más?
Si hay un autor de culto en la literatura española es Andrés Ibáñez. Su obra —novelas, cuentos orientales, incluso libretos de óperas—, influida por autores como Borges, Nabokov o Cortázar, suelen presentar universos paralelos, realidades escindidas, hombres y mujeres en busca de su auténtica alma y reivindica constantemente la capacidad sanadora de amor y la fuerza de la imaginación para cambiar el mundo o para crear nuevos mundos. Un joven de misterioso pasado, Block, y su amigo Jaime buscan en la nación imaginaria de Países una entrada a la fabulosa Región Confabulada, de la cual hay múltiples pistas en las Biblioteca Nacional, la embajada de Estonia, etc... Al tiempo se trenza una historia de amor entre Block y Estrella, en los fantásticos lugares de la ciudad, el Parque Servadac, habitado por todo tipo de seres míticos… La música del mundo fue agraciada con el premio Ojo Crítico, es una novela llena de magia, fantasía y referencias literarias. Raras veces se encuentra en la literatura española contemporánea una novela de tal ambición y capacidad creativa. Ibáñez levanta con la fuerza de su imaginación todo un país, con su historia, geografía, sus próceres y su idiosincrasia, un curioso país centroeuropeo, reflejado en un texto donde se vislumbran reminiscencias de Rayuela, las vanguardias, Nabokov y muchos otros autores. En muchas partes prolijo y moroso, quizás demasiado lento, se le puede achacar que peca de carecer de un argumento claro y de mostrarse en forma demasiado «bruta», como si fuera un derroche de creatividad no pasado por la inevitable exigencia de una mínima intriga y de un progreso narrativo. De todas formas, es un libro de alta calidad, donde se pueden encontrar reflexiones sobre arte, música, literatura, además de ser todo un manifiesto de Ibáñez sobre su visión del género fantástico. El autor, como en sus otros libros, reivindica los cuentos de hadas y la fantasía más desbordada. También un concepto un poco elitista de la literatura. No es una novela fácil de leer, no solo por la ya citada ausencia de argumento y de construcción novelesca convencional, sino por las referencias a otros autores y novelas. De todas formas, una vez dentro de ella, te sientes transportado a un mundo nuevo, que deseas ir descubriendo de la mano de una prosa detallista y barroca, que no evita el surrealismo en ocasiones.
La magia existe. Aunque nadie la llama así: la llaman prodigios. Para que suceda un prodigio alguien tiene que pedirlo y esperar a que los dioses, sean cuales sean, respondan. A veces los prodigios ayudan. Otras tienen consecuencias espeluznantes, como terremotos, plagas y bestias monstruosas. Desde que la Inquisición los prohibió en Europa, pasaron a convertirse en meras leyendas. Pero todo cambia con el desembarco en el Nuevo Mundo... A principios del siglo XVIII, las colonias británicas bullen de actividad: hay cazatesoros, inquisidores y nativos, y los monstruos campan a sus anchas. Allí es a donde envían a las hermanas Woodcombe: Olive, fascinada por todo lo que encuentra, y Hester, obsesionada con una melodía que puede salvar o condenar todo lo que ama.
Un periodista encuentra en una alfombra traída de la India un mensaje del niño que la ha tejido. Es una petición de socorro, un grito desesperado, y no puede permanecer ajeno a él. Aunque millones de niños son explotados en el mundo, el mensaje tiene un nombre, Iqbal, y una procedencia: la ciudad de Madurai. Un viaje a la tienda donde fue comprada la alfombra enfrentará al protagonista con la realidad de los niños esclavos que son vendidos por sus propios padres. Pero ¿qué puede hacer un occidental ante lo desconocido y en un mundo que permite la esclavitud infantil? El insólito desenlace de la historia, lleno de fuerza y coraje, es un canto de esperanza, tan necesaria en estos momentos en los que la sociedad se enfrenta al reto de erradicar definitivamente la explotación infantil.
La música de una vida, aquí tambien el autor contrapone el trágico destino del protagonista y su lucha interior por la supervivencia —física y moral— a la epopeya vivida por el pueblo ruso bajo la tiranía de Stalin y la invasión alemana en la segunda guerra mundial. Los primeros meses de 1941 son tiempos difíciles para los habitantes de la Unión Soviética, pues al terror estalinista se unen los rumores de una pronta invasión nazi. Una tarde de mayo, un joven pianista moscovita, Alexei Berg, recibe el aviso de que no regrese a su casa, pues, en una de sus incontables redadas, la policía del régimen ha detenido a sus padres, acusados de supuestos e intrincados delitos políticos, y le busca también a él. Alexei tiene que huir precipitadamente a una aldea ucraniana donde unos parientes campesinos le esconden en un henil.
La novela que relata la gran pasión entre Robert Schumman y Clara Wieck, los grandes músicos del Romanticismo.
Sombras de amor es la historia de una pasión. La emocionante novela de la relación entre la pianista europea más importante de su época, Clara Wieck, y Robert Schumann, el genial compositor alemán.
Desde su primer encuentro, cuando Clara tenía catorce años y Robert era un joven de veintitrés, este brillante y ambicioso relato situado en el siglo XIX retrata los obstáculos que tuvieron que sortear dos personas que se amaron profundamente contra la voluntad del padre de ella y que experimentaron la grandeza del arte, con todas sus consecuencias y peligros.
En la vorágine de unas vidas sobresalientes, ambos viajaron por Europa hasta la Rusia de los zares, conocieron a las figuras más insignes de la época, como a los músicos Mendelssohn, Chopin, Paganini e, íntimamente, a Johannes Brahms, reflexionaron sobre su tiempo y encarnaron, a fin de cuentas, la revolución del Romanticismo.
El amor, el arte, la genialidad y la locura atraviesan esta narración escrita por Elizabeth Subercaseaux, tataranieta directa de los Schumann, tras una indagación en sus biografías, sus cartas, sus diarios de vida, su música y sus composiciones. Un libro a la altura de la sensibilidad de sus protagonistas.
Durante casi toda su vida, Elisse ha sido acosado por criaturas horripilantes que al parecer, nadie más puede ver ni escuchar. Desesperado por huir tanto de ellas como de su pasado, decide marcharse de la mística India, el país donde estuvo refugiado, para sumergirse dentro de la Gran Hechicera Nueva Orleans. ¿Su única esperanza? Volver a encontrarse con su padre quien, por motivos desconocidos, tuvo que abandonarlo siendo apenas un bebé. Pero lo que él no sabe, es que en esa ciudad sepultada por una misteriosa niebla y devorada por furiosos huracanes, se encontrará con mucho más que las respuestas a los enigmas de su inquietante vida: un secreto, tan ancestral como extraordinario, que se oculta entre los pantanos de Luisiana, en los muros helados del cementerio de Saint Louis y hasta en su propia sangre. Mitos, cultos y leyendas. La humanidad tiene miles, pero Elisse está a punto de descubrir que solo existe una verdad. Los abismos lo observan. Sus pesadillas lo persiguen. Y ahora, su instinto lo guiará a la batalla. ¿Tienes el valor de entrar a su mundo?
'Al principio, Dios creó una criatura maravillosa. Pura, inmortal y perfecta... Pero al mirarla, supo que también era monstruosa, así que la partió en dos.' Obligado a separarse de su familia, Elisse abandona la fantasmagórica ciudad de Nueva Orleans para arrojarse en una salvaje contienda a través de Estados Unidos, con el único propósito de proteger a quienes ama de los inquietantes misterios que envuelven su existencia. Pero Elisse no viaja solo. El monstruo dentro de él ruge con fuerza, y su peregrinaje lo lleva a los paisajes desérticos de Utah. Allí conoce a Adam, un peculiar chico con el que comienza a establecer un importante vínculo emocional. Pero el desierto esconde secretos terribles, y Elisse tendrá que tomar, una vez más, una decisión que puede poner en peligro no sólo su vida, sino la de una nueva familia de errantes desesperados por su ayuda. Los lazos de lealtad serán puestos a prueba y el más valiente será el único sobreviviente. ¿Tienes el coraje de pelear al lado de Elisse? Bienvenidos de nuevo a nuestra Nación.
Esta es una edición completamente revisada del texto original de Anthony Burgess de La naranja mecánica, con un glosario de la jerga adolescente 'Nadsat', notas explicativas, páginas del texto mecanografiado original, entrevistas, artículos y reseñas, Editado por Andrew Biswell. A Alex, de quince años, le gustan los latigazos de ultraviolencia. Él y su pandilla de amigos roban, matan y violan en su camino a través de un futuro de pesadilla, hasta que el Estado pone fin a sus desenfrenados excesos. Pero, ¿qué significará su reeducación? Un horror distópico, una comedia negra, una exploración de elección, La naranja mecánica es también un trabajo de invención exuberante que creó un nuevo lenguaje para sus personajes.
Anthony Burgess fue un famoso escritor y compositor británico cuya obra más famosa fue la novela La naranja mecánica publicada en 1962. La historia está inspirada por un incidente vivido por el autor durante la Segunda Guerra Mundial, cuando él y su mujer fueron asaltados en 1944, siendo la esposa del propio Burgess víctima de robo y violación por parte de cuatro soldados estadounidenses en las calles londinenses. Dado que se encontraba embarazada, la paliza le provocó un aborto. El libro trata sobre la libre voluntad y la moral, y la manipulación de los individuos por fuerzas como los sistemas políticos, la represión, y como estas conllevan a la corrupción del ser humano. La naranja mecánica cuenta la historia del nadsat-adolescente Alex y sus tres drugosamigos en un mundo de crueldad y destrucción. Alex tiene los principales atributos humanos: amor a la agresión, amor al lenguaje, amor a la belleza. Pero es joven y no ha entendido aún la verdadera importancia de la libertad, la que disfruta de un modo violento. En cierto sentido vive en el edén, y sólo cuando cae, como en verdad le ocurre, desde una ventana, parece capaz de llegar a transformarse en un verdadero ser humano. Esta novela fue llevada al cine en 1971, de la mano del director Stanley Kubrick, en un polémico film protagonizado por Malcolm McDowell, que le dió vida al carismático y psicopático delincuente Alex De Large.
Edward Trencom ha ido dando tumbos por la vida, confiando en su infalible nariz para convertir la tienda familiar en la más célebre fromagerie de Inglaterra. La suya no es una nariz corriente, sino una nariz larga, aguileña y provista de un característico abultamiento redondeado sobre el puente: la misma nariz que ostentan todos los hombres de la familia Trencom. Un buen día, Edward tropieza con un cajón lleno de papeles viejos y su vida se vuelve del revés. Descubre espantado que nueve generaciones de su familia han conocido finales trágicos por culpa de sus narices. Cuando se pone a investigar, se ve envuelto en un enigma bizantino sin aparente solución. Y como sus infortunados antecesores, es perseguido por fuerzas hostiles cuya identidad y propósito son un completo misterio.
«Lanark» fue un acontecimiento literario en el momento de su publicación, en 1981, y recibió grandes elogios de la crítica (El «TLS» lo tildó de «extraordinaria obra maestra»). Convertido en un clásico con el tiempo, el libro toma de Kafka y del cómic americano, de la ciencia ficción y del realismo más formal para construir un relato muy humano, a la vez divertido y apocalíptico. Alasdair Gray sigue el rastro del protagonista en el mundo que conocemos y unos cuantos más (no en orden cronológico, por cierto), una prolongada penitencia moral que le permite proyectar una alegoría gigantesca de nuestra sociedad. Artista además de escritor, Gray es también el autor de la impactante obra gráfica del libro, que se ha respetado en el interior y recuperado para las cubiertas con la vuelta al diseño original.
En un pequeño pueblo al pie de una montaña, un hombre, gran conocedor de las rutas que permiten cruzar la frontera, añade la actividad de pasador de clandestinos a su oficio de escultor. Pero no les cobra, y uno de esos viajeros, escritor, escribe sobre él, lo que llama la atención de los medios y lo obliga a mudarse junto al mar. Allí, un cura le propone una tarea bien particular: restaurar una cruz de mármol, un Cristo vestido con un paño al que deberá dotar de sexo. Reflexión sobre lo sagrado y lo profano, sobre el lugar de la religión en nuestras sociedades y la instrumentalización del poder del cristianismo, «La natura expuesta» es una intensa y poderosa novela en la que Erri De Luca aborda también los temas de la inmigración y de la integración social y subraya más que nunca la necesidad universal de solidaridad y compasión.
S es una escritora que vive en Londres. Ha perdido a un hijo y con él todo lo que la ataba a la vida, incluido su matrimonio. F es abogado y lleva junto a su mujer una vida tranquila en Santiago de Chile. S y F se conocen en Londres y a partir de entonces comienzan a reunirse clandestinamente en remotas ciudades, al tiempo que mantienen una obsesiva comunicación a distancia. Junto a F, ella recobra el impulso erótico y las ganas de sentir, de amar, de asomarse al mundo. Sin embargo, los kilómetros que los separan y el desconocimiento que cada uno tiene de la verdadera vida del otro llevarán a S a enfrentarse a unas circunstancias que ni en sus sueños ni en sus pesadillas hubiese podido imaginar. Mostrando la sexualidad de los amantes de manera explícita y audaz, Carla Guelfenbein recorre en esta novela las zonas del cuerpo y la mente donde los deseos nacen y se expanden hasta dominarlo todo. Una novela que revela sin tapujos el poder cegador de las ilusiones y de las historias que nos contamos para seguir viviendo.
Mientras la ciudad Estado de Aldacia se enfrenta a una insólita ola de calor y a los disturbios derivados de su primera huelga feminista, la vida de Dante Riesco, divulgador experto en psicología positiva, confluye por accidente con la de Nora Sarafyan, una joven aquejada por un trastorno de empatía con quien pronto emprende algo similar a una relación amorosa. Las altas temperaturas, los altercados y los problemas entre ambos comienzan a recrudecerse a partir de entonces hasta atrapar a Dante y a su hijo, y también a Ángela Sanguino, la exconvicta a cargo de la misteriosa empresa donde trabaja Nora, en un carrusel de sospechas y contradicciones tan imprevisible como la conducta de la joven y tan despiadado como la naturaleza de su empleo. La novela reflexiona con astucia, gracias a una fusión muy compacta de drama contemporáneo y suspense psicológico, acerca de la endeblez de la identidad personal y los vínculos afectivos al tiempo que ofrece una de las historias de amor más disfuncionales y retorcidas de la literatura independiente.
La navaja de Ockham es una reflexión novelada sobre los valores y dilemas de la sociedad de hoy. A partir del plagio cometido en una tesis de maestría en una universidad ficticia de la cosmopolita ciudad de Panamá, nudo gordiano del relato, se ponen de manifiesto las pendencias de celos y envidia de dos universitarios que, subrepticiamente, se baten por el corazón de una condiscípula. La aldea global de que hablaba Marshall McLuhan, se alimenta de los tóxicos de guerrillas burocráticas y académicas. El espeluznante final de la obra contrasta con la atmósfera contenida y alambicada del claustro. Queda claro que, bajo la apariencia de normalidad, pululan las peores pasiones. Dos ciudades, el claustro y la urbe capitalina, en simbiosis alimentan móviles insanos y sombríos. La decencia y la esperanza son convidados de piedra, perfectos estorbos. La novela nos estrella con la certeza de que no hay omisiones en dilemas cruciales sin consecuencias. La posverdad, la corrupción y la ambición desmedida nos pasarán factura. No hay modo de escapar de este escenario de oprobio. Los personajes de La navaja de Ockham, en carne viva, lo comprueban. De vale su absurda negación.