«Nada en el domingo», publicada originariamente en 1988, es la historia de una noche madrileña, casi tan alucinante como la noche dublinesa de Stephen Dedalus y Leopold Bloom: un aquelarre en el que el protagonista se ve a sí mismo como un tétrico bufón y se autodenomina Grock, para acabar comprendiendo que es uno más, que es casi todos, que casi todos los hombres son Grock. Los paraísos artificiales de Baudelaire muestran aquí cruel y crudamente su envés, en la amanecida que deslíe y destiñe las luces repintadas de una vigilia febril. La constante inventiva estilística de Umbral sirve con singular energía y desgarro a una visión descarnada y vivacísima de la esencial soledad humana.
311 d.C., Pérgamo. El joven escriba Lisandro, tiene una habilidad especial, con la que su amo Blasius está encantado: puede transcribir exactamente cualquier discurso por largo que sea. Tras pertenecer a varios amos, Lisandro llega a ser escriba en la corte de Constantino el Grande, donde transcribirá en un códice, todos los detalles de cómo el emperador consiguió demostrar la falsedad de los orígenes de la secta de los cristianos. Si el códice de Lisandro, llegara a hacerse público…la Iglesia podría desaparecer para siempre. Un abogado, Mark y dos arqueólogos, Hector y Emy, empiezan a investigar la extrañísima muerte de Fidel, sacerdote y tío de Mark y de Héctor Deverís, también arqueólogo y padre de Héctor y Emy. A medida que avanzan en su investigación, los jóvenes se sienten vigilados y amenazados por los que se autoproclaman como los Milites Dei, o soldados de Dios y por los Aúreos, escépticos ateos que rinden culto a phi o el número aúreo (F) En una espiral de acción, que les lleva de Málaga a Estambul, Roma e Israel, el Vaticano, la mafia, los Milites Dei y los Aúreos, parecen estar buscando algo desesperadamente, pero al final… nada es lo que parece
Desde el momento en el que Yolanda se cuela furtivamente en el taller de tuning de «Diablo», su vida se verá enredada en un sinfín de acontecimientos que a punto estarán de costarle la vida. Un desafortunado atraco la pondrá en el punto de mira, donde ladrones, conductores callejeros y traficantes de droga se pelearán por ser los primeros en echarle el guante. Acompaña a Yolanda en esta trepidante aventura a todo gas en la que la amistad y el amor que surgen entre los protagonistas se verán puestos a prueba de manera sorprendente.
Zoe Carpenter ha trabajado muy duro para llegar a ser una periodista de prestigio pero, justo cuando está a punto de conseguir entrevistar a una de las actrices más populares de Hollywood, el periodista de la competencia utiliza sus sucios ardides para arrebatarle la entrevista. El maldito Nick Rayner, tan atractivo como carismático, arruina su carrera y Zoe termina sus días investigando fenómenos de avistamientos ovni en una revista dedicada a la ufología. ¿Se puede caer más bajo? Nick Rayner es un profesional reconocido pero tiene un serio problema, y es que acostumbra a meterse en demasiadas camas. Hasta que un día se mete en la equivocada y Nick no solo pierde su trabajo, sino que todos los periódicos importantes le cierran las puertas tras el grave escándalo que protagoniza. Cuando Zoe le ve aparecer por la redacción de «La verdad está ahí fuera», quiere que se la trague la tierra. Su jefe lo ha contratado como redactor y su mesa está justo al lado de la suya. Pero la situación se complica un poco más cuando emprenden un viaje juntos a Peebles, un pueblo perdido en la geografía de Ohio al que acuden para realizar una investigación ovni. Pero en ese lugar pasan cosas muy extrañas, parece como si todo el mundo se hubiese vuelto loco, incluida ella, que empieza a sentir una atracción por Nick fuera de lo común. ¿Qué está pasando allí? Zoe se topa por casualidad con un entramado que pone en peligro sus vidas y entonces descubre, que nada es lo que parece.
Mi nombre es Natalia, aunque ahora me llaman Nat. A simple vista soy una chica normal y con un trabajo corriente, pero escondo un pequeño secreto que pocos conocen. Jake, un guapo empresario, necesita una esposa con urgencia, ¿y quién mejor que una simple camarera que no llame demasiado la atención? Lo que él no sabe —tampoco lo preguntó— quién es mi familia y de dónde provengo. No acepté el acuerdo por el dinero que me ofrecía, sino por la estúpida obsesión de mis padres de verme casada con un buen partido. Y, sin duda, Jake lo era. ¿Qué hará cuando se entere que la humilde y corriente camarera, es en realidad la hija del multimillonario Francis De la Vega Ortuño?
Mi nombre es Jake y acabo de perder a Natalia por no tener la valentía de reconocer que la quiero. Es cierto eso que dicen de "no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes", o al menos, lo acabo de vivir en primera persona. Llevo meses sin saber dónde está y necesito encontrarla cuanto para confesarle mis verdaderos sentimientos, pero parece que ella no está dispuesta a dejar que la encuentre. ¿Y si cuando dé con su paradero ha conocido a otra persona?¿Y si con ello pierdo a la mujer de mi vida? No estoy dispuesto a darme por vencido y pienso hacer todo lo que esté en mi mano para hacer que vuelva conmigo, aunque tenga que involucrarme en situaciones peligrosas. Adictiva y erótica.
Clara acaba de dejarlo con su novio, que la sometía a un maltrato psicológico «de baja intensidad», y pasa sus días esperando el momento de volver a enamorarse, formar una familia y vivir su vida con tranquilidad. Esa misma vida da un vuelco cuando conoce a Max, de quien se enamora perdidamente. Lo que Clara aún no sabe es que el apuesto Max guarda un secreto que pone al borde del precipicio una relación que lo tenía todo para ser feliz. Tampoco sabe aún que se puede violar a alguien sin que ninguno de los dos implicados lo sepa. Y tampoco comprende el vínculo que la une a la mujer que limpia su oficina por las noches. Clara, que desconoce cualquier asunto relacionado con la comunidad LGTBIQ, que cree que el feminismo es una moda innecesaria, que hace oídos sordos cada vez que su amiga Carmen, mucho más concienciada, le habla de género o patriarcado, términos que ni le van ni le vienen, sufre una profunda transición que la convierte en alguien nuevo y desconocido y que la lleva por un camino en el que el amor y la lucha por los derechos y la libertad son los pilares fundamentales.
Olympia ha conseguido lo que tanto esfuerzo le ha costado: acabar la selectividad con una gran nota para poder acceder a la misma universidad que su amigo de la infancia, Gabriel. Tras dos años separados y con una relación de amistad que se ha enfriado por la distancia y el tiempo, desea poder recuperar esa comunicación que tantas buenas cosas le ha dado durante los años que han compartido juntos. Lo que no espera es encontrarse a un nuevo Gabriel con una nueva vida en la que ella no encaja y a la vez darse cuenta de que tal vez los sentimientos ya no son lo que eran. Gabriel ha rehecho su vida: la universidad, el equipo de fútbol y Pamela, una chica que puede ponerlo todo a sus pies a la misma vez que quitárselo; pero Olympia ha vuelto a formar parte de su presente y sus sentimientos le golpean con fuerza, llevándolo a una realidad que chocará con un pasado que le atormentará de la manera más dura. Para ambos este cambio de vida supondrá todo un reto, lleno de nuevas amistades y sentimientos que desconocen. Una historia llena de pasión, primeras veces y lucha interna por un pasado que les hará más complicado avanzar en lo que realmente quieren los dos.
Alexandria Marzano-Lesnevich es una joven estudiante de derecho que trabaja en un despacho especializado en representar a condenados a muerte cuando oye hablar de uno de sus clientes, Ricky Langley, un pedófilo convicto y confeso. Hasta entonces había estado en contra de la pena de muerte, pero en ese momento sus convicciones empiezan a tambalearse. Asombrada por su reacción, se verá obligada a afrontar los duros recuerdos de su niñez. A medida que investiga sobre el caso Langley, su familiaridad con algunos de los hechos la llena de desasosiego y la lleva a desenterrar los oscuros secretos familiares que están condicionando su percepción del mismo. A medio camino entre las memorias y el «true crime», «Nada más real que un cuerpo» es un libro que quita el aliento y que nos hace comprender que en cualquier investigación criminal −en cualquier reconstrucción de un hecho delictivo− es muy difícil distinguir lo real de las conjeturas y que, por tanto, impartir justicia −y perdonar− resulta mucho más complicado de lo que podamos imaginar.
El robo de unas ilustraciones antiguas y del famoso báculo pastoral de William de Wykeham del s. XIV obligan al director del New College de la Universidad de Oxford a pedir ayuda a Scotland Yard. La detective Taylor será la encargada de investigar el caso y, para que nadie sospeche de ella, Stephen Allen, un brillante aunque algo desastrado catedrático de Historia Antigua, se ve forzado a acogerla en su casa y a fingir que están emparentados. Las personalidades de ambos son muy distintas: él aparenta estar anclado varios siglos atrás mientras que ella es una joven moderna, a la que nada se le pone por delante; y sus puntos de vista son tan opuestos que los roces entre ellos se suceden. A pesar de todo, el impenitente solterón se siente cada día más cautivado por la detective, pero ¿y Georgina? ¿Qué es lo que siente en realidad por aquel atractivo profesor?
Finalista del Premio Booker (2012) y del Premio Nacional del Libro en la categoría de mejor autor (2012). Nada más llegar con su familia a una casa en las colinas con vistas a Niza, Joe descubre el cuerpo de una chica en la piscina. Pero Kitty Finch está viva, sale del agua desnuda con las uñas pintadas de verde y se presenta como botánica… ¿Qué hace ahí? ¿Qué quiere de ellos? Y ¿por qué la esposa de Joe le permite quedarse? Nadando a casa es un libro subversivo y trepidante, una mirada implacable sobre el insidioso efecto de la depresión en personas aparentemente estables y distinguidas. Con una estructura muy ajustada, la historia se desarrolla en una casa de veraneo a lo largo de una semana en la que un grupo de atractivos e imperfectos turistas en la Riviera son llevados al límite. Con un humor mordaz, la novela capta la atención del lector de inmediato, sobrellevando su lado tenebroso con ligereza.
Ambientada en Dublín, en el año previo a la Pascua de 1916, el momento crucial del levantamiento de los irlandeses contra el gobierno británico; «Nadan dos chicos» cuenta la historia de amor de dos muchachos. Jim es un estudiante ingenuo y reservado, el hijo pequeño de Mr. Mack, un presuntuoso aspirante a tendero. Doyler, un diamante en bruto, es hijo de un viejo compañero de armas de Mr. Mack. Doyler podría haber tenido la misma vida que Jim pero sus padres le obligaron a trabajar mientras ideas blasfemas, socialistas y revolucionarias, bullían en su cabeza. El padre de Jim está seguro de que el futuro le sonríe. Su hijo mayor está luchando en el ejército y tiene planes ambiciosos para Jim y sus negocios. Pero Mr. Mack no alcanza a ver que el paisaje está cambiando, ni se da cuenta de la creciente amistad entre su hijo y Doyler. Junto al acantilado donde suelen ir los hombres a bañarse, los dos chicos se encuentran día tras día. Allí sellan un pacto: Doyler enseñará a Jim a nadar y en el trancurso de un año alcanzarán a nado, atravesando la bahía, el distante faro de Muglins Rock, y reclamarán la isla para sí.
Gina tiene 14 años, ganas de hacer amistades en el instituto nuevo y dos madres con las que habla de todo, o prácticamente de todo. Pero tras la reciente mudanza se esconden unos cuantos secretos. Y en el aula de tercero B tampoco todo es como aparenta a simple vista. Nada que esconder es una novela sobre la diversidad familiar, el bullying y la homofobia, pero también sobre la amistad, la complicidad, la valentía y los derechos de las personas LGTB.
En plena crisis de pareja, la narradora de esta novela vuelve al episodio que marcó el final abrupto de su adolescencia y de los años más felices de su familia: la muerte inesperada de su madre en un desconocido Uruguay de finales de la década de los sesenta, cuando nada, aparentemente, turbaba una vida que transcurría entre fiestas elegantes al aire libre, días en la playa o animadas celebraciones. Obsesionada por aquel final, la protagonista regresa, muchos años después, al reencuentro con amigas de la infancia, con las mujeres que conocieron a su padre, fascinante y seductor, y con aquellos que puedan contarle por qué ella y su hermano tuvieron que partir para España apresuradamente tras el fallecimiento de la madre.
¿Te apetece emprender el viaje más fascinante de tu vida? Un viaje a la Gran Barrera de Coral australiana es la puerta de entrada a una historia repleta de intriga y pasión. Cuando aceptó viajar a Queensland para participar en el Simposio Internacional para la Protección de los arrecifes coralinos, Elsa no podía imaginar que su vida daría un giro tan inesperado como excitante. Durante el trayecto conoce a Adam O'Neal, un enigmático periodista con el que a partir de entonces coincidirá más a menudo de lo que tenía previsto. Excelente conversador, Adam instruye a nuestra protagonista en algunas de las más peculiares costumbres australianas. Al saber que Elsa tiene planes para recorrer el Mar del Coral, le suplica que le permita unirse a la expedición con el objeto de realizar un reportaje para su revista. Atractivo y reservado, de carácter simpático y espontáneo, Adam consigue penetrar la barrera que Elsa interpone entre ella y el resto de la gente. Pero todo en la vida tiene un precio y la confianza que Elsa deposita en él la llevará a enredarse en una aventura que no por apasionante resulta menos peligrosa.
«Él me mostraba el lado salvaje de la vida. Un nuevo tipo de oscuridad. Era como una enfermedad incurable que me había golpeado con fuerza. Me obsesionaba. Sencillamente, me obsesionaba. Lo habría seguido hasta el mismo Infierno si así me lo hubiese demandado». Alexia odia las citas a ciegas y el hecho de que su padre se haya empeñado en organizarle una. Quiere vivir la vida a su manera, irse lejos de su ciudad natal y empezar de cero. Pero no tardará en averiguar que las cosas no siempre salen según las has imaginado. Puede que un día cualquiera cruces una mirada con un desconocido, compartas una sonrisa en la calle, y puede que todo tu mundo se haga añicos después. Él es todo lo que ella estaba deseando. Es intenso, carismático, metódico… muy pasional; el chico rebelde que haría perder la cabeza a cualquier mujer entre los trece y los noventa y nueve. Lexi no es una excepción. Pero ¿puede confiar en alguien que vive al margen de la ley? ¿Y quién ha dicho que tenga elección?
Nada que perdonar oscila entre la autobiografía y la crónica patibularia de las ciudades que han enmarcado las experiencias vitales de un autodidacta de origen proletario.
Del « Infiernavit » de Iztacalco que marcó su infancia y adolescencia entre páginas de libros, desempleo y ambientes rufianescos, a la glamorosa ciudad de París donde vivió algunos años aferrado a trabajos ocasionales como jornalero.
Este libro narra las experiencias que convirtieron a J. M. Servín en un escritor que expresa como pocos la voz de los excluidos. Sobre todas las cosas, son testimonios picarescos de aprendizaje sostenido en la literatura de alguien que escribe, no sin ironía, por la pura necesidad de contar cómo se ve la vida al límite .
Aitana trabaja en una compañía energética y está a punto de firmar un contrato con un cliente, que sería el último humano con el que tendría algo. Y no solo porque aún se esté recuperando del palo de que Gabriel la dejara de la noche a la mañana, sino porque Martín, su cliente, es lo más opuesto a ella. Aitana es una chica de ciudad, espontánea, sociable y cerrada al amor; en cambio, Martín ama el campo, es el dueño de una exitosa finca en la que cultiva productos ecológicos, es duro y arrollador, y está abierto a tener una relación seria y estable. Además, como a esto último hay que añadir que Martín es escandalosamente guapo y con unos impresionantes ojos azules, Aitana considera que Martín es perfecto para su amiga Gala. A Gala le encanta la naturaleza, le ponen los bordes y los raros, y está deseando tener una relación con alguien que sepa lo que quiere. Así que se presenta con Aitana en la finca el día de la firma del contrato, sin embargo, en quien Gala se fija en cuanto llega es en Javier, el enigmático chef que trabaja en el restaurante de la finca y con el que, aunque ella no lo sepa, tiene cuentas pendientes. Y tanto se cuelga Gala del chef que se apunta a sus cursos de Huerta y Gastronomía en la finca, adonde acude cada sábado en compañía de Aitana, a la que le espera un descubrimiento extraordinario. Pues se percata de que no hay nada mejor para superar su ruptura con Gabriel que ponerse un sombrero de paja, meter las manos en la tierra, arrancar malas hierbas, plantar lechugas, recoger limones o echarse siestas a la sombra de una encina centenaria. Y con él, con Martín. Ese ser que no tiene nada que ver con ella, pero por el que siente tal atracción que van a estallar todas sus certezas…
Sophie nunca se ha sentido tan protegida y feliz como en su amistad con Morgana. Estas jóvenes, a quienes el destino reúne en el convulsionado Chile de principios de los 70, descubren que es mucho lo que comparten, pero que por sobre todo las hermana su sensibilidad por el arte y la poesía. Juntas forman un núcleo con códigos propios, que sienten indestructible. También están profundamente vinculadas por un mismo amor, Diego, el padre de Sophie. Sin embargo, la pasión fulminante entre él y Morgana traspasará la frontera de lo prohibido, quebrando el único ámbito de estabilidad de su hija. Casi treinta años después, los eventos del 11 de septiembre de 2001 remecen a una Sophie ya consagrada como artista plástica. A su mente regresa otro 11 de septiembre, ese que truncó la vida de su familia, de la cual ella nunca más quiso saber. Ahora, por primera vez, se arriesgará a abrir un pequeño espacio a ese pasado que bloqueó en un intento por recuperar lo perdido.
¿Existe alguna manera de trascendernos, de vencer nuestra condición de seres mortales, quizá a través de la pasión? Esa es la pregunta que guía e intriga al lector en «Nada se acaba». El matrimonio de Elisabeth y Nate hace aguas. Llevan casados más de una década y viven bajo el mismo techo, pero durante los últimos años han llevado vidas separadas. En su naufragio conyugal se embarcan en constantes aventuras sentimentales de las que suelen volver maltrechos, hasta que de repente algo cambia: el suicidio del último amante de Elisabeth y la relación entre Nate y Lesje, una paleontóloga que solo se siente cómoda entre fósiles de dinosaurios, van a crear un nuevo triángulo amoroso que rompe el peculiar equilibrio de la pareja. A lo largo de estas páginas llenas de sabiduría desfilan adultos que al final del día no son más que niños en busca de protección. Su desconcierto y su rabia son en el fondo universales, pues duele comprender que no somos más que una mota de polvo en la historia del universo: por mucho que hagamos, nada se acaba y la vida sigue sin pedir permiso. Finalmente, entre tantas dudas, un destello de luz se abre paso: tal vez la entrega amorosa pueda llevarnos hacia el futuro y ser un antídoto contra la muerte y el olvido. Tal vez…