¿Cómo respiraremos en el polucionado mundo de mañana? ¿Qué nos ofrecerá la televisión como espectáculo de choque? Qué sustituirá al dinero? Cómo se divertirá la juventud? Qué haremos con la gente que no es como nosotros? A través de ocho de sus mejores relatos, Domingo Santos nos ofrece con Futuro imperfecto una visión prospectiva de nuestro mundo, entre desencantada y apocalíptica, difícil de olvidar.
«Moderan» recoge docenas de historias breves, publicadas en su mayoría entre 1958 y 1965, en las revistas «Fantastic» y «Amazing». Las historias se desarrollan en un mundo futuro aparentemente destruido por bombas nucleares, un mundo en el que el paisaje ha sido completamente pavimentado con plástico y los humanos supervivientes se han transformado en cyborgs, dejando solo unas pocas tiras de carne como evidencia de su antigua forma. Los hombres con más metal se convierten en guerreros cuya identidad se funde con la Fortaleza que los alberga, y el placer y la gloria de Moderan es la guerra entre sus Fortalezas. (La mayoría de las historias de «Moderan» se centran en la Fortaleza 10, la más victoriosa de ellas). Como muchos clásicos de la ciencia-ficción, «Moderan» es un texto «arreglado», una colección de historias dispersas ligadas por secciones escritas posteriormente que les proporcionan vínculos estructurales y antecedentes expositivos. De sus 46 capítulos, 19 fueron escritos expresamente para el libro, incluidos 13 de los 16 primeros, que establecen cierta linealidad para los episodios siguientes.
Estamos en la última década del siglo XXI. La humanidad ha llegado a la conclusión de que el Tiempo es más una construcción mental que física y, por tanto, el viaje temporal puede equipararse al viaje mental. En un contexto económico de crisis en el mundo occidental, el desplazamiento mental ayudado por drogas psicotrópicas se convierte en una moda que hace furor. El principal protagonista de la novela, Ted Bush, es un experto en la materia, realizando sus traslaciones temporales por cuenta de una institución oficial y profundizando en el conocimiento del pasado. Sin embargo, cuando regresa «al presente» tras un largo vagabundeo mental/temporal, se encuentra con que el gobierno de su país (Gran Bretaña) ha sido tomado por una dictadura militar encabezada por un general poco amigo de los viajes mentales, a los que responsabiliza del delicado estado de la economía y de la degeneración social.
En los primeros momentos de la guerra, una cápsula del espacio es saboteada mientras regresa de un viaje a la Luna. El balance: una persona muerta y otras tres a la deriva en una balsa en medio del Pacífico. Solo uno de ellos sobrevive y alcanza a ver los acantilados de una isla dominada por una letra enorme: M. La apariencia de los habitantes de esta isla sorprende vivamente al náufrago, Shaw: aunque humanos, hay en ellos algo enigmáticamente bestial. El genio siniestro responsable de estos híbridos es Mortimer Dart, una víctima de la talidomida fascinada por las deformidades humanas y que ha llevado a cabo una serie de experimentos que duplican los del legendario doctor Moreau de H. G. Wells. Brian Aldiss rinde un sentido homenaje a Wells en la que constituye una de sus obras mayores.
Como «Universo de locos» de Fredric Brown, o las novelas y cuentos de Robert Sheckley, «¿Quién anda por ahí?» es una muestra excepcional de lo que puede ser una ficción científica que incluya entre sus ingredientes principales el humor y la comicidad. Warren Peace se ha alistado en la Legión Espacial para olvidar, para que le borren la memoria. Pronto descubrirá que se ha equivocado, y emprende entonces una larga búsqueda, yendo de un lado a otro entre extraordinarios personajes y situaciones insólitas, intentando recuperar un tiempo perdido.
En este libro se reúnen algunos de los primeros cuentos de James Tiptree, Jr., junto a los que escribiera entre 1972 y 1973, que lo situaron definitivamente entre los maestros de la ciencia ficción contemporánea: «Amor es el plan, el plan es la muerte» (por el que obtuvo el prestigioso Premio Nebula), «La muchacha que estaba conectada» (galardonado con el codiciado Premio Hugo), junto a otros once cuentos también de perfecta factura. Robert Silverberg insiste en su prólogo en la fuerza y solidez de estas historias, «a menudo profundamente feministas, pero narradas de un modo enteramente masculino». Pero James Tiptree, Jr., sorprendió a propios y extraños al revelar su auténtica identidad en 1977, al obtener de nuevo los premios Nebula y Hugo: no es otra que la antropóloga Alice Hastings Sheldon. La crítica especializada ha alabado a menudo la ruptura de las convenciones y estrategias narrativas típicas de la ciencia ficción que lleva a cabo Tiptree en su obra, siempre en una prosa fascinante y arrebatadora. No hay que perdérsela.
El hombre encontrado en la luna estaba muerto. Era de ojos grandes, velludo, de nariz larga. Habían encontrado el cadáver esquelético en un traje espacial de color rojo brillante, oculto en una fosa de piedra.
Nadie sabía quién era ni cómo había llegado hasta allí, ni cómo había muerto. Sólo se sabía que aquellos restos tenían aproximadamente cincuenta mil años de antigüedad, lo que significaba que ese hombre había vivido muchos años antes de haber podido existir.
James P. Hogan, cuya obra ha sido comparada a menudo a la de Arthur C. Clarke, nos propone un misterio apasionante en clave de novela de ciencia ficción.
La Tierra envía su primera nave estelar a los confines de la Galaxia. A bordo de la inmensa astronave, un puñado de científicos escogidos se enclaustran voluntariamente para servir a la ciencia y la Humanidad durante varios años de destierro por el espacio interplanetario. Entre estos sabios, y como el más joven de ellos, se encuentra Elliot Grosvenor, único representante a bordo de la nave de la novísima disciplina científica conocida por Nexialismo, y que en general es mirada con prevención por sus colegas.
Sin embargo, gracias al nexialismo (ciencia coordinadora, síntesis de todos los conocimientos especializados) la nave puede salvarse del ataque de los terribles monstruos del espacio estelar, que A. E. Van Vogt nos pinta con toda su gran maestría de escritor científico. Es ésta una obra construida rigurosamente, que aborda problemas muy profundos y que obliga a meditar al lector consciente. Sobre todo, trata del problema -hoy ya muy grave- de la superespacialización y de sus posibles consecuencias catastróficas. Y todo ello servido en una prosa de gran calidad con una trama novelesca fascinante y escenas sobrecogedoras en extremo.
Esta es la historia de un ser creado sin emociones para controlar, con la mente, la conquista de la Tierra.
Sucedió que un 23 de Mayo apareció sobre la Tierra un hombre que pasó brillantemente los tests y entró a formar parte de los miembros selectos - Eldin Raigmore. La humanidad se felicitó a si misma. ¿Dónde, sino en la Tierra, podía la destreza y el talento humano haber inventado un sistema infalible que recompensaría a un ser humano según sus propios méritos?
Pero los terrestres no sabian que Raigmore no era humano. Creado de la nada por una raza todavía desconocida, Raigmore tenía por misión la conquista del mundo. "¡Habían conquistado Marte! ¡La Tierra era su próximo objetivo!". Marte había sido derrotado en una hora y treinta y cuatro minutos. Y ahora una flota de criaturas del espacio avanzaba hacia la Tierra.
Todos los ojos se volvieron hacia Eldin Raigmore, Presidente de los E.E.U.U. La civilización se apoyaba en sus manos. "¡Y el era un miembro secreto de la raza invasora!".
Un accidente casual lanza hacia la Luna a Peter Grossman, reportero gráfico del 'Sunbeam' , quien por un cúmulo de circunstancias , comparte las penalidades y la glorias del grupo de físicos dedicados a la astronáutica. Las divertidas escenas y aventuras que se desarrollan en torno al hallazgo de un meteorito de antimateria entretejidas con los fenómenos de inercia de masas a que da lugar , el salvamento de la tripulación del satélite artificial y el lanzamiento del protagonista en órbita hacia la Luna , desarrolado con rigor de cálculo , cautivan la atención del lector hasta las últimas lineas. Como final, un cuento corto titulado 'El convertidor de magnitud'.
Estados Unidos ha logrado por fin resolver el problema de la navegación interplanetaria y, con gran secreto se ha construido una inmensa astronave que pronto despegará para Marte. Es una astronave atómica, claro está, y el terrible chorro de despegue dejará arrasado todo el terreno del campo de astronavegación. Es una empresa militar y el alto estado mayor cuida de ella. Y, ahora, sin previa orden del alto mando, antes del plazo solícitado para la salida, la nave con todo su tripulación de sabios, militares y observadores, despega y emprende su camino por el espacio. -¡Traición¡ - se susurra,- ¡traición¡ -, pero ¿de quién?. En la tierra no lo sabe nadie. En el astronave sí. Allí los supuestos traidores se han desenmascarado. Son habitantes de Venus. Porque Marte está desierto como la Luna, pero en Venus florece una civilización biológicamente reptiloide pero intelectual y moralmente más avanzada que la terrena.
Una nave de dimensiones colosales vaga perdida por el espacio interplanetario desde hace generaciones. A bordo transporta los descendientes degenerados de los primeros tripulantes de la inmensa cosmonave. Un grupo de éstos , encabezados por el atrevido Cmplain, abandona sus primitivas residencias situadas a popa de la nave, para dirigirse a explorar la misteriosa región "Proa". Allí les suceden toda suerte de aventuras imprevistas y encuentros inesperados.
El tema de la nave perdida en el Cosmos con su cargamento de seres humanos no es nuevo en la literatura de Fantasía Científica. Sin embargo Brian W. Aldiss en "NON -STOP"( título inglés de esta obra), le infunde un interés especial y consigue mantener en suspenso el ánimo del lector hasta el final, completamente inesperado y sorprendente.Por otra parte, la obra s halla repleta de implicaciones sociológicas y éticas, aplicables perfectamente a cualquier sociedad…incluso la actual.
Un fascinante relato de cuatro astronáutas, que tras haber visitado la Luna por vez primera y haber obtenido muestras geológicas e informacion científica, se ven sorprendidos a su regreso a la Tierra por una misteriosa alteración de todos sus planes. La nave queda a merced de unos ignotos y misteriosos seres inteligentes de otro mundo, que se hacen obedecer a traves de la VOZ que dirige a los tripulantes del 'Luna'. Son conducidos a una fantástica existencia en nuestro propio mundo, pero a través del pasado de la Tierra. Estos seres son inteligentes y pacíficos. Un relato apasionante de Charles Chilton, maravilloso y lleno de insospechadas aventuras que deleitará al lector de ciencia ficción.
Me di cuenta, como tantas veces me la había dado, de que no era buena. De que me había propuesto conquistar a Arturo de la forma que fuera, y ello, aunque parezca extraño, me producía una íntima vergüenza. Pero también sabía que pasara lo que pasara y cayera quien cayera, mi decisión era firme. Y si lo era, me decía para consolarme y quizá disculparme, que consideraba que a Salomé no iba a hacerle demasiado daño y en cambio, aparte vanidad, creía que a Arturo le haría un gran bien.
Un joven Agustín se marcha de casa huyendo de la violencia familiar, dejando tras de sí a Desiré, su vecina, amiga y único consuelo.
Años después, piensa que su decisión no fue la acertada, ya que encuentra a su amiga en serias dificultades y no ha estado a su lado.
El deseo de ayudarla se ve complicado cuando una serie de atentados contra su vida ponen a Desiré en peligro.Agustín, tratará de averiguar quién quiere matarlo mientras intenta solucionar los problemas que la distancia y el tiempo hicieron surgir entre su amiga y él.
Nat Sánchez ya sabía lo que se le venía encima. Se lo estaba imaginando y lo que es peor, lo esperaba todos los días. A la misma suegra se lo había dicho uno de aquellos días que pasó por Rosales a visitarla. Marcela, con ser una señora mayor, tenía más entendimiento que su hijo y, por otra parte, no se había detenido en una época, sino que había evolucionado con la vida. Claro que tratándose de Chus no era, precisamente, que se hubiese estacionado o no, sino que era así porque quizás no pudiera remediarlo, pero si era «así», ella no tenía culpa ni era responsable de su forma de ser machista, anacrónico o atávico. Fuera como fuese sabía que un día cualquiera estallaría, porque no sabía aceptar las situaciones tal cual se planteaban y la vida las planteaba por sí solas, sin necesidad de empujarlas ni de contenerlas.
¡Si Cliff Hamilton hubiese clavado sus ojos en ella diez años atrás! Sara Melton siempre había estado loca por aquel hombre, pero había ocultado sus sentimientos. Ella y Cliff habían sido sólo compañeros y miembros del club de historia, eso era todo. Ahora, Sara era una mujer terriblemente independiente y aunque a Cliff no le parecieran suficientes unos cuantos besos y abrazos, Sara no estaba dispuesta a dar más de sí misma.
Alba es una joven enfermera, viuda y madre de tres hijos, que vive por y para ellos. Nick es un profesor de autoescuela juzgado solo por nacer. Una noche Alba decide darse un respiro y salir con Mar, su mejor amiga. Conocerá a Nick por casualidad y acabará haciendo lo que en un principio pensó que jamás haría: dejarse llevar fingiendo ser alguien que no es. Sin embargo, pronto descubrirán que lo suyo es una relación prohibida. ¿Conseguirán contener el deseo y comportarse como se espera de ellos? El descubrimiento de un secreto oculto durante años les complicará más las cosas a los protagonistas. ¿Podrá el amor romper los continuos obstáculos que parecen interponerse siempre en su relación? Sorpresas, intriga, tensión sexual, amistad y, sobre todo, amor al límite caracterizan NECESITO UN RESPIRO.
Londres, siglo XVI. En el corazón de la Inglaterra isabelina, el joven Richard Shakespeare sueña con una brillante carrera en los teatros londinenses, dominados por su hermano mayor, William. Aunque este le da trabajo en su compañía, los papeles son mínimos, y Richard está sin un céntimo y tiene que buscarse la vida para sobrevivir. La gratitud que siempre ha sentido hacia William comienza a resquebrajarse, y llega a plantearse robar los manuscritos de su hermano y venderlos a teatros rivales. Entonces desaparece un manuscrito de gran valor en la compañía de William, y todas las sospechas recaen sobre Richard, que se verá forzado a penetrar en los bajos fondos del Londres más pendenciero para recuperarlo. Súbitamente se ve enredado en un doble juego de apuestas y traiciones, del que solo podrá escapar aplicando todo lo que ha aprendido como actor en los mejores escenarios londinenses…
En los últimos años son muchas las ediciones del Necronomicón que han sido publicadas. Sin embargo, ninguna es la obra prohibida del sabio maldito Abdul Alhazred, el árabe loco nacido en el Yemen que encontró los perdidos arcanos en el terrible desierto del Roba el Khaliyeh junto a los tenebrosos e invisibles moradores de las arenas.
Él llamó a su obra Al Azif el ruido de los insectos, que fue llamado Necronomicón primero en griego y luego en latín, siendo esta la traducción griega del erudito Teodoro Filetas hecha en Constantinopla en el año 950, y posteriormente vertida al latín por Olaus Wormius en el año del Señor de 1228.