Como una mañana cualquiera, Rachel deja a su hija en la parada del autobús. Pero una llamada de un número desconocido lo cambia todo: una mujer le informa que tiene a Kylie secuestrada y que, si quiere verla de nuevo, deberá seguir sus instrucciones al pie de la letra: primero, pagar un rescate; segundo, secuestrar a otro niño. Quien llama es también una madre cuyo hijo ha sido secuestrado, y si Rachel no cumple con las reglas, el niño morirá, y su hija también. Rachel ya forma parte de La Cadena, un mecanismo que convierte a padres de familia en víctimas y a su vez en criminales, y que está haciendo a alguien muy rico en el proceso. Ella es una mujer corriente, pero en pocas horas los acontecimientos la llevarán hasta límites impensables y la obligarán a hacer algo terrible. Los creadores de La Cadena saben que unos padres harán todo lo que está en sus manos por sus hijos. Pero no contaban con cruzarse en el camino de una mujer decidida, valiente y superviviente como Rachel. Porque, si alguien puede romperla, esa es ella.
Esta sensacional novela constituye el argumento de la gran película del mismo título dirigida por el mítico Costa-Gavras. A través de estas páginas nos introducimos en la vida de la comunidad húngara residente en Estadus Unidos. Uno de sus miembros, el anticomunista Mike Laszlo, es acusado de criminal de guera nazi por el gobierno magiar. Estalla el escándalo y la propia hija del acusado, la abogada Ann Talbot, se encarga de su defensa. A medida que avanza el proceso, las verdades que salen a la luz resultan cada vez más turbadoras. Ann se ve atrapada entre su amor filial y su profundo sentido ético.
21-12-2012: La fecha ya está fijada y el tiempo corre en contra… El fin del mundo empieza ahora. Los antiguos mayas predijeron el fin del mundo con una precisión implacable, pero también proporcionaron la clave para evitar el Apocalipsis: un zafiro de incomparable belleza tallado en forma de calavera humana. La joven Stella, doctora en Física en Cambridge y espeleóloga, deberá descifrar un poema para comprender la historia y el sentido de esta maravillosa y peligrosa calavera tallada, cuya extraña energía empieza a sentir sobre sí misma. Sin embargo, alguien le sigue la pista… Un trepidante thriller de aventuras e intriga con una historia en el presente y otra en el siglo XVI, entrelazadas en torno a la profecía maya del fin del mundo.
El asesinato de un ejecutivo español, Carlos Durán, que ha trabajado en diversos bancos de Estados Unidos, junto con un misterioso encargo del Gobierno, lleva a Dolores Amado, la primera comisaria en la historia de España, a investigar los vericuetos de la economía, una de las ciencias sociales que menos le interesaban. Sin embargo, al descubrir las implicaciones que ésta tiene en la vida cotidiana, entrelazadas con las que sostiene con el mundo político, se va introduciendo en la investigación hasta apasionarse con ella y llegar a visitar, en Nueva York, el centro neurálgico de la economía mundial, la calle del Muro: Wall Street. En el curso de la investigación, que se desarrolla en el contexto de la crisis financiera mundial que aún nos azota, Lola, como quiere que la conozcan, va desentrañando, a veces de forma indirecta, las connivencias entre políticos, economistas y medios de comunicación; y comprendiendo el verdadero trasfondo de términos tan cotidianos como la deuda, el trabajo o el dinero, para lo que cuenta con la ayuda de un manual básico de economía, que encuentra en la estantería de la víctima, las explicaciones de un catedrático en la materia, su padre, y las averiguaciones que el por siempre maldito Karl Marx hizo, en su día, sobre el sistema capitalista. Además de observar de cerca las conspiraciones de los más altos ejecutivos mundiales para lograr su único objetivo, el beneficio personal, el lector encontrará en esta novela, de forma sutil, el incipiente poder de los movimientos cívicos y democráticos, especialmente el del 15M en España, y la vaticinada caída de los tradicionales partidos de izquierda, ante el avance de fuerzas que enarbolan la bandera de la socialdemocracia, dejada caer por aquellos.
Una cárcel, tres hombres que confluyen en ella por caminos diferentes. Tres vidas marcadas por la genética, el maltrato o el abandono: Juan Pablo Ayala, un abogado experto en la manipulación y la estafa; Sebastián Valdés, un chileno víctima de la homofobia, la dictadura y la pobreza; Alberto Aguirre, un muchacho de clase acomodada con una infancia sobrada de obligaciones y escasa de atención familiar. Y en medio, Paula, una joven psicóloga que ha comenzado a trabajar con un grupo de siete internos, dentro del programa de tratamiento que se lleva a cabo en la prisión. ¿Será capaz de lograr sus objetivos? Sus teorías, su fe en la condición humana y sus buenas intenciones, van a chocar desde el principio contra los manejos de una mente torcida que diseñará un plan macabro, una red mortal tejida en las sombras. Y lo hará despacio, con minuciosidad, como trabajan las arañas. Durante ese tiempo que crece de noche en la oscuridad de la celda, que sobra para no hacer nada, que falta para salir a la libertad. 'La calma de las arañas' es una dura reflexión sobre el ser humano y sus circunstancias. Una formulación de porqués en torno a las causas que pueden torcer los senderos de la existencia. Una historia de obsesiones, traumas, soledades, recuerdos, temores y venganzas. Un mosaico de tintes oscuros, pintado con la crudeza y la desnudez de quienes han perdido la vida que dejaron fuera.
En las ruinas de la antigua ciudad de Teotihuacán, el cuerpo mutilado de un joven aparece como mudo testigo de la obra de un asesino en serie.Luego de la trágica muerte de su hermano, el detective Juan Morales decide tomarse unas merecidas vacaciones. Sin embargo, aquel cadáver de un joven cuyo corazón ha sido arrancado en la Calzada de los Muertos, no es precisamente el tranquilo descanso que tenía en mente.En ese mismo lugar trabaja la inteligente y atractiva arqueóloga, Sophia Kanakarides, por quién Morales se siente fuertemente atraído. Mientras surgen más crímenes espantosos, Sophia pone su experiencia a disposición de la policía y, sin darse cuenta, cae en manos del asesino.Alucinante y de trama muy bien elaborada, La Calzada de los Muertos revive el escalofriante mundo de los asesinatos rituales y los sacrificios humanos.
La acción de este estremecedor relato transcurre en una fantasmal aldea casi deshabitada del Pirineo catalán. Ricardo Maristany se refugia en esa pequeña población, acompañado de Lidia, su pareja, con intención de dedicarse al cultivo de la marihuana. Pero Ricardo empieza a mostrar un comportamiento cada vez más extraño y Lidia debe marcharse de su lado. Al cabo de un tiempo, los seis únicos habitantes del lugar, incluyendo a Ricardo, aparecen asesinados. La única pista para desentrañar el misterio se halla en el diario personal de Ricardo, en el que hace referencia a unos espantosos espectros que rondaban por la casa. Llevada al cine en el año 2003 por el director Javier Elorrieta con el título «Pacto de brujas».
El canto de la diosa Kali produce el sonido de la muerte. Un periodista sostiene que su culto no ha desaparecido aún en nuestro moderno mundo tecnológico y está dispuesto a comprobar sus afirmaciones. Nada le resultará sencillo, y lo que empezó como un trabajo rutinario se convertirá en una pesadilla en la que el protagonista sólo escucha mentiras y choca contra el muro de la indiferencia oficial cuando acude a las autoridades en busca de ayuda.
Jimmie Kentland, redactor del periódico «Sun», de Chicago, acuciado por su jefe para que consiga una gran noticia, desobedece las instrucciones de éste y abandona su puesto de responsable de la redacción de noche a causa de una misteriosa llamada en la que le anuncian un crimen. A partir de ese momento, se van a desencadenar una serie de sucesos misteriosos que acabarán envolviéndolo en una complicada trama de traición y espionaje, en cuya resolución acabará encontrando el amor. «La cara del hombre de Saturno» es ciertamente una novela detectivesca aderezada con las personales pinceladas de este singular escritor. Siguiendo su costumbre, las tramas se suceden y entremezclan de manera abrupta, confundiendo a veces al desconcertado lector, pero nunca defraudándole.
En San Antonio, Tejas, un traficante de drogas negro muere en extrañas circunstancias. El caso enfrenta a dos hombres muy distintos, ambos entregados al servicio de la ley aunque desde lados opuestos. Raymond Boudro, abogado, procede de un barrio donde las violaciones y las palizas son moneda corriente; él ha logrado salir de allí y convertirse en un brillante profesional, pero sigue defendiendo a sus hermanos de raza en los tribunales. Mike Stennet, comisario de policía con una larga experiencia, patrulla por los callejones más sórdidos y tiene fama de tomarse la justicia por su mano. Él es el principal sospechoso de la muerte del traficante: su pistola estaba junto al cadáver y todos los antecedentes le señalan como culpable. Boudro, pese a todo, decide aceptar el caso y defender por primera vez en su vida a un policía blanco.
En La carcajada del general se entrecruzan los caminos del cartel de Cali, el Hezbolá, el Mosad, la CIA y los servicios secretos de diversos países suramericanos. La última de Gisbert Haefs arrastra al lector a una vorágine de acción, intriga y sexo en cuyo centro se debate un grupo de jóvenes acorralados por un viejo y astuto general. La acción, el suspense y el modo de reproducir una situación social y política extrema hacen de esta novela un «thriller» de la mejor clase. Una novela tan explosiva como la realidad a la que alude.
Un escritor en horas bajas es incapaz de escribir nada decente. El éxito comercial de su última novela parece haberle arrastrado hasta un bucle de inseguridad que lo mantiene bloqueado ante la página en blanco. Se obliga a tomar unas vacaciones y aislarse durante un tiempo en la Sierra de Cádiz, un retiro espiritual donde olvidarse de la presión de la editorial, de las facturas sin pagar y de las llamadas telefónicas constantes. Con el paso de los días descubre que, en la cabaña donde se aloja, aparece un nuevo número pintado en la pared cada mañana. Una cuenta atrás sin explicación aparente que termina sumiéndolo en la mayor de las obsesiones. Es probable que su vida corra peligro y el tiempo apremia. Los números no perdonan. Una crisis creativa, un cambio de escena, sucesos misteriosos, muerte, amor y reconciliación con uno mismo. Todo ello con un sabor profundamente rural y gaditano, contado con una narrativa fresca, ágil y sin tapujos. Estos son rasgos distintivos de Fopiani que lo hacen destacar dentro del género con toques ligeramente underground. La Carcoma es un pueblo, pero también una metáfora.
En un bosque solitario, dos adolescentes son brutalmente atacados por un ser de una fuerza sobrenatural. En su declaración, ambos sostienen que el agresor es un zombi. La inspectora Laura Tébar es encargada de la investigación. Se trata de una profesional de 55 años, brillante, solitaria y con un carácter temible forjado en un pasado lleno de errores imposibles de remediar. Se la respeta y se la teme a partes iguales. Con Tébar, y a su pesar, comienza a trabajar el subinspector Merino, un joven tan inexperto como intuitivo y motivado. Los dos no pueden ser más opuestos y no tardan en chocar. A través de la novela, el lector asistirá a un auténtico tour de force entre ambos personajes, que pasarán lo suyo antes de permitirse el mínimo respeto mutuo que les permita colaborar y enfrentarse a unos seres tan misteriosos como violentos, que atacan desde lo más profundo del bosque, parecen invulnerables y desaparecen sin dejar rastro.
Es temprano. Las primeras horas del día. El sol ni siquiera salió, cuando el programador Alejandro Moreno se encuentra de rodillas con una pistola apuntando a su nuca. ¿Qué ha hecho para que se encuentre así? La inspectora Andrea Zamora, tiene la labor de descubrir, cómo y porqué un civil como Alex, ha salido vivo de un asalto que se ha llevado las vidas de muchas personas, incluidas las de dos operativos de algún extraño grupo armado. Javier de Ros y Miranda no puede creer que esté involucrado en una guerra entre un grupo desconocido y el Gobierno por un objeto llamado: la Carpeta Negra. Puede ser la mejor historia de su carrera como periodista… si sale vivo. Dejó la Argentina para buscar una oportunidad, una vida tranquila y próspera. No obstante, la enfermera Natalia Díaz ve como su existencia pende de un hilo muy fino, que el extraño y poderoso grupo y el Gobierno están tensando hasta su punto de ruptura. Cuatro protagonistas y cuatro historias que se cruzan y entremezclan en una intensa novela en donde no todo es lo que parece, donde los amigos se convierten en enemigos y los enemigos, lo siguen siendo. Secretos, conspiraciones, traiciones y muerte se ocultan en una Carpeta Negra que el Gobierno lucha para que permanezca cerrada, a toda costa.
Un marino sin barco, desterrado del mar, conoce a una extraña mujer que posee, tal vez sin saberlo, respuestas a preguntas que ciertos hombres se hacen desde siglos. Cazadores de naufragios en busca del fantasma de un barco perdido en el Mediterráneo, problemas de latitud y longitud cuyo secreto yace oculto en antiguos derroteros y cartas náuticas, museos navales, bibliotecas… Nunca el mar y la Historia, la ciencia de la navegación, la aventura y el misterio se habían combinado de un modo tan extraordinario en una novela, como en La carta esférica. De Melville a Stevenson y Conrad, de Homero a Patrick O’Brian, toda la gran literatura escrita sobre el mar late en las páginas de esta historia fascinante e inolvidable.
Una casa abandonada y rodeada de misterio; una venganza en el presente que llegará del pasado.
Para Kaine Prescott la muerte no es una extraña. Su marido murió hace dos años en extrañas circunstancias y sus súplicas para que la investigación fuera más allá cayeron en saco roto. Para olvidar y empezar de nuevo, decide comprar una vieja casa en la ciudad natal de su abuelo, en Wisconsin. Al ver la casa por primera vez, abandonada y rodeada de misterio, se da cuenta de que quizá se ha precipitado. Y lo peor está por llegar, pues la oscura historia del edificio saldrá a la luz y Kaine se dará cuenta de que ahora sí que no tiene dónde esconderse.
Hace cien años, la casa de Foster Hill no guardaba más que recuerdos dolorosos para Ivy Thorpe. Tras encontrar el cadáver de una desconocida en la propiedad, se ve obligada a investigar de quién se trata. Y al hacerlo, se internará sin quererlo en un mundo peligroso… ¿Podrá desentrañar el misterio que envuelve la casa antes de que de que su vida o cualquier otra se pierdan?
El pequeño pueblo costero de Roquesas de Mar se ve conmocionado por la desaparición de una de sus vecinas: la joven Sandra López, de dieciséis años de edad. Cuando hallan el cadáver de la chiquilla, horriblemente mutilado, en la parte trasera de la casa de uno de los más ilustres vecinos de la villa, todos sospechan de Álvaro Alsina como el autor del crimen. La biempensante sociedad local comienza una caza de brujas culpando del crimen a Álvaro, al mismo tiempo que se va tejiendo una tupida red de engaños en torno a su persona, con el único fin de incriminarlo… Álvaro Alsina ve cómo todo el mundo se derrumba a su alrededor sin que él, ni su familia, puedan hacer nada para evitarlo. Sus amigos, su mujer, sus hijos, su amante, y hasta el jefe de la policía local, lo consideran el autor del crimen en un pueblo que no tiene letrero desde que un vendaval lo arrancó y nunca lo restablecieron.
Hay algo perturbador en la mirada de Justine Dalvik, algo que delata cierto desequilibrio mental. En su hogar, situado junto a un lago a las afueras de una pequeña población sueca, Justine vive obsesionada por una idea: su vida habría sido mucho mejor de no ser por la nefasta influencia que, en su infancia, tuvieron una serie de personas. Su madre murió joven y el padre decidió al poco casarse con Flora, una mujer severa que jamás se esforzó por comprenderla. En la escuela, las cosas no fueron más fáciles: sus crueles compañeros le hicieron la vida imposible. Entonces no había nadie que la entendiera; ahora, tampoco parece tener más suerte. Sin embargo, recluida en su casa con un pájaro por toda compañía, Justine es feliz. Todo va por buen camino ahora se siente una mujer fuerte, dispuesta a dejar atrás el pasado, a ser implacable con todos aquellos que tan injustamente la trataron. Inger Frimansson recrea con gran perspicacia la desequilibrada trayectoria vital de Justine Dalvik. La Justine que el lector conoce al inicio de la novela es sólo una mujer peculiar; la que descubre al cerrar el libro es otra Justine. Una progresiva transformación que se traduce en un inquietante suspense psicológico.
Mi nombre es Ariana, de la casa de la Estrella Negra. Era una princesa heredera, ahora soy una vagabunda, una paria. Me han humillado, me han traicionado, me han robado lo que me pertenece. Todo. Pero no estoy aquí para quejarme, sino para vengarme, para verter la sangre de mis enemigos y recuperar lo que es mío. Lo juro por Madre Noche.
Es La Casa de la Troya (1915) uno de los grandes best-sellers del siglo XX, pues ronda el centenar de ediciones, ha sido traducida a diversos idiomas, llevada con éxito al teatro en varias ocasiones y al cine en cinco, y hasta convertida en Zarzuela. Y no es de extrañar porque esta novela cuenta con los ingredientes necesarios para atraer al gran público: intriga, tensión, una historia perfectamente estructurada, unos personajes cabalmente perfilados, un retrato fiel de la España de finales del siglo XIX con aquella sociedad de clases perfectamente diferenciadas, y la espectacular descripción tanto de una interesante ciudad universitaria de provincias (nada menos que Santiago de Compostela) como de su afamada universidad y su característico ambiente estudiantil.. La Casa de la Troya recoge los tópicos propios del ambiente universitario de aquella rancia España. Pero —lo que es más importante— genera otros nuevos que serán, precisamente, los más característicos de las décadas posteriores a su publicación. De modo que no es que la novela se pareciera (que se parecía) a aquella sociedad que retrataba, sino que además, lo que no se parecía acabó por parecerse. Tan notable fue su influencia en la realidad española de entonces que ni las estudiantinas ni las tunas de mitad del siglo XX hubieran sido como fueron sin esta singular narración. Y, por supuesto, en tal contexto, y como hilo conductor, una historia de amor con problemas y enemigos: la del joven madrileño (Gerardo Roquer) al que su padre lo había alejado del pernicioso ambiente de la Villa y Corte mandándolo a Santiago para terminar allí sus estudios de leyes, de un lado, y la de la muchacha bien y de buena clase, de provincias (Carmiña Castro Retén), modelo de belleza, bondad y buenas formas, de otro. Gerardo aterrizará en este ambiente compostelano yendo a parar a la posada de la viuda de un Capitán de Carabineros, conocida como la Casa de la Troya: —¿Dónde para usted este año? —En la posada de la Troya. —¿En casa de doña Generosa? ¡Arrenegote demo! Usted era el único que faltaba allí. Y es que 'viven allí los puntos más traviesos de la Universidad. Verdaderos estudiantes de la tuna, ¿sabes? Todos rapaces de buenas familias, no vayas a creer; pero unos paveros, siempre dispuestos a divertirse y a jugársela al Sol. Ya verás. ¡Te hay cada volante!... ' Pero no, la casa de la Troya no debe su nombre a doña Generosa, sino a la calle en que estaba y sigue estando ubicada, pues 'aquí tenemos una afición loca a la elipsis, y cuando se trata de nombrar cualquier vía de la ciudad abreviamos usando simplemente su nombre'. Gerardo enseguida se prendará, como todos, de la belleza de Carmiña a quien intentará seducir para entretener su transitorio alejamiento del atractivo y depravado ambiente madrileño. Claro, que la muchacha marcará perfectamente las distancias justas para forjar en Gerardo un impetuoso amor que le cambiará de vida y mentalidad y hasta le hará apartarse de las juergas estudiantiles. Será entonces cuando harán su aparición los otros enemigos de ese amor, los verdaderos enemigos: los malvados Maragotas, que querrán a la muchacha y a su fortuna para su Octavio, empleando para ello todos los ardides necesarios, secuestro de la doncella incluido. Quizá la fuerza narrativa oculta de esta novela estriba, precisamente, en ser un trasunto de historias y personajes reales, pues el propio Pérez Lugín era madrileño y estudió leyes en Santiago. Y la misma Carmiña hunde sus raíces en Carmen Carballeira, antigua novia de Lugín, que se hizo monja y vivió muchos años en el Convento de la Enseñanza. Tanto éxito y tanta influencia, tuvieron su reflejo en un sonoro premio de la Real Academia Española. Y es que la novela está impregnada de mucha realidad, demasiada realidad.