“Su nombre era Esther. Supe desde el primer momento que era ELLA, pero estaba fuera de mi alcance. Sabía que era una chica que jugaba en primera división y yo no tenía nada que ofrecer dentro de su mundo. Inteligente, divertida, guapa a rabiar y con el glamour suficiente como para hacer cualquier cosa y quedar siempre bien.Todos la miraban con admiración y deseo. Y no sé cómo, ni por qué, acabó fijándose en mi... Hubiese sido una bonita historia de amor salvo por el hecho de que, entre otras cosas, se viera interrumpida por los signos del Apocalipsis. Y por desgracia yo era el elegido para evitar el fin del mundo.” Perigeo Rojo retoma el testigo dejado por Perigeo Azul, pero lo hace de una original forma en su narrativa. Sabremos lo que pasó en la masacre de Guadalajara diecisiete años antes y lo que ocurrió tras los sucesos acaecidos en Pedraza de Talmir tras la llegada de Aileon. Ambos relatos se entrelazan para traernos la historia de Simón Salgado, un joven como otro cualquiera, que se ve forzado a renunciar a su vida para descubrir que en sus manos se encuentra el destino de la humanidad.
José Ortega es un periodista español destinado en el Berlín prehitleriano con la misión de informar sobre el convulso panorama político alemán. Allí será testigo de las hazañas de Eric Jan Hanussen, un mentalista cuyas predicciones lo convierten en una de las grandes estrellas del mundo del espectáculo de la época, en multimillonario y, de forma sorprendente, en uno de los principales apoyos del partido nazi, llegando a entablar estrechas relaciones con personalidades como Goebbels, Göring y hasta el mismísimo Hitler. Sin embargo, Hanussen esconde un secreto que lo pondrá en un serio compromiso con sus nuevas amistades, que amenazará su reputación y hasta su vida.
El periodista José Ortega viaja a Mónaco con la esperanza de realizar un reportaje que le permita recuperar el prestigio perdido tras años como corresponsal en Berlín. En Montecarlo entrará en contacto con Basil Zaharoff, el millonario más misterioso de Europa en ese momento, y pronto descubrirá que los secretos que guarda el anciano son codiciados por muchos que no se detendrán ante nada para lograr su objetivo. Gervasio Posadas regresa al panorama literario con una magnífica novela ambientada en el convulso Montecarlo de entreguerras y basada en hechos reales que tiene todos los ingredientes necesarios de un apasionante «thriller» histórico: un anciano enigmático y rodeado por una leyenda negra, un narrador atrapado entre la obligación y la conveniencia, asesinatos, personajes célebres de la alta sociedad de los años 30…
En cierta ocasión, hace ya mucho tiempo, vi un fantasma. Sí, un espectro, una aparición, un espíritu; lo puedes llamar como quieras, el caso es que lo vi.
Ocurrió el mismo año en que el hombre llegó a la Luna y, aunque hubo momentos en los que pasé mucho miedo, esta historia no es lo que suele llamarse una novela de terror.
Todo comenzó con un enigma: el misterio de un objeto muy valioso que estuvo perdido durante siete décadas. Las Lágrimas de Shiva, así se llamaba ese objeto extraviado. A su alrededor tuvieron lugar venganzas cruzadas, y amores prohibidos, y extrañas desapariciones.
Hubo un fantasma, sí, y un viejo secreto oculto en las sombras, pero también hubo mucho más.
Hace poco le salvé la vida a un tío. Dicho así, ya sé que suena un poco fuerte. Pero es verdad. A veces la vida es fuerte.El tío al que le salvé la vida tiene dos años más que yo y me cae fatal. Bueno, puede que desde lo que pasó me caiga un poco mejor, pero solo un poco. En realidad no lo sé. No sería su amigo por nada del mundo.Seguro que os estáis preguntando qué pasó, qué hice. Igual me imagináis como un héroe. Alguien que va por ahí salvando vidas o salvando mundos. O que lleva capa y una «S» muy grande en la camiseta.No os rayéis. Soy un tipo como todos, pero más raro. Creo que si no fuera raro las cosas habían sido distintas. De aquella madrugada apenas tengo recuerdos nítidos. Todo fue cuestión de tres o cuatro segundos. Apenas tuve tiempo de pensar, pero sí de formularme una pregunta horrible: «¿Y si no hago nada?».
Francia del siglo XIX. En el tranquilo pueblecito de Beaufort empiezan a suceder cosas extrañas. Todo ello coincide con el regreso a Beaufort de Isabelle, una lavandera que se marchó tiempo atrás en pos de su amor, un joven noble. Ahora ella está muy cambiada; a pesar de que parece que ha hecho fortuna, viste de luto y apenas sale de su casa. Parece que su única ventana al mundo es Mijaíl, un enorme y extraño criado mudo que la sirve con gran fidelidad.Queriendo resolver el misterio de Isabelle, Max, el joven gendarme del pueblo, empieza a investigar. Pero él es un hombre tranquilo y pacífico, y puede que no esté preparado para afrontar la verdad…
La vida de Montse ha cambiado por completo: un hecho imprevisible ha sacudido sus cimientos. Ha estado a las puertas de la muerte, pero ha vencido, aunque el precio siempre es muy duro. Ahora en su vida hay un antes y un después. Y mientras trata de recuperar la sonrisa, vivir el verano como una joven más, olvidar el abandono y el dolor, aparece Sergio, la esperanza. Tal vez el amor. ¿O no es lo que parece? ¿Realmente ha sido la casualidad lo que los ha hecho tropezar?Donde esté mi corazón es una historia reveladora de amor y pasión entre dos adolescentes. Habla de superación personal, de personas que sufren por amor y nos introduce en la piel de Montse, que con tan solo dieciséis años acaba de volver a la vida después de una grave operación. Para ella no es nada fácil evitar las miradas de compasión de los demás y vivir con el miedo a que algo pudiera ocurrir de nuevo.Uno de los libros juveniles más recomendados de su autor, el prolífico Jordi Sierra i Fabra, para su lectura en enseñanza media.
Tres amigos se ven involucrados en un caso de asesinato cuando están preparando un trabajo de arte para el instituto. Es así como entran en contacto con Kurti Innauer, un estrambótico pintor alcohólico cuyos temas y materiales son siempre macabros.
Un joven superdotado, aunque muy vulnerable afectivamente, se verá involucrado en un complicado plan de venganza orquestado por un poderoso narcotraficante boliviano de cocaína. Por las calles de Madrid se entrecruzarán las vidas de un asesino a sueldo, una emigrante latinoamericana y un adolescente.
Tina llevaba quince días surcando el Mar de China con su familia. Quince días que habían transcurrido casi en un suspiro. Entre otras cosas, porque la joven amaba el mar. Lo llevaba inyectado en la sangre. Su abuelo había sido un gran navegante y sus padres también lo eran. Aquel amanecer era precioso y tranquilo, y Tina se encargaba de la guardia al frente del timón. De pronto, una tremenda detonación a su espalda interrumpió en seco sus pensamientos. No le dio tiempo a volverse. Un proyectil silbó por encima de su caba y cayó a doscientos metros ante su proa, levantando una gran columna de agua. El grupo de gaviotas salió de estampida llenando el cielo de estridentes graznidos y ella permaneció atónita contemplando el círculo de espuma producido por el disparo.Y así comenzó la pesadilla: porque, irremediablemente, el lujoso velero cayó en manos de los piratas, que asaltaron el barco y los llevaron prisioneros a una pequeña isla perdida que escondía más de un secreto…
Mil años atrás una historia de amor quedó truncada por la desgracia y una maldición. Un poder tan maligno que había conseguido retener a sus espíritus generación tras generación. Y mientras tanto, los amantes esperan, condenados a reencontrarse y a perderse por culpa de los celos y el odio. El caballero y la dama. El guerrero y la doncella. Hasta que tal vez un día, tal vez en nuestra época, siglos después, un poder superior y benigno consiga romper el maleficio.
Un viejo, viejísimo expolicía (el Tieso, mientras estuvo en funciones) quema su último cartucho y entretiene sus días de soledad rumiando algunas historias que le dejaron como una espina clavada, ese puñetero y excepcional caso que quedó sin resolver. El asunto ahora es que la médica del seguro le ha pedido que se mantenga activo en lo físico y, sobre todo, mentalmente. Y la mejor manera que se le ha ocurrido al Tieso es poner por escrito esa jodida quisicosa que le dejó tan mal sabor de boca. Pero él no es un escritor aunque cuenta con algunas amistades que pueden aconsejarlo; y cuenta también con su buena memoria y con los papeles que guarda, y con los vecinos de su barrio que se reúnen en el bar de la Toñi. El hecho cabal es sobre el Niño, aquel hijoputa de su mismo pueblo que aparecía y desaparecía de su vida y que estuvo directamente relacionado con él, y con la misteriosa María Soledad, que les dejó el corazón hecho trizas a todos. María Soledad, un témpano, quien después de muchos años apareció asesinada de treinta y tantas puñaladas en las escaleras de bajada de una playa del norte…
Dos autoras de renombre, Ángeles de Irisarri y Toti Martínez de Lezea, nos muestran treinta relatos protagonizados por mujeres cristianas, judías y musulmanas. Aquélla se encarga de los de cristianas, ésta de los de judías, y los diez sobre musulmanas se los han repartido a partes iguales. Entre ambas plumas —quizá las más representativas de nuestra novela histórica— recorren la época medieval española, en la cual la convivencia entre los seguidores de las tres religiones no fue en todo momento pacífica, aunque tampoco vivieron siempre enfrentados. El punto de vista femenino, desde el que se abordan estas narraciones, nos sitúa en los márgenes de la historia oficial, independientemente de la religión de sus protagonistas y de que pertenezcan a la nobleza o al pueblo llano. Un punto de vista este que también se recrea en la vida cotidiana de entonces. El resultado es muy atrayente y muestra un vivo retrato de aquella desconocida sociedad medieval que en los reinos de España fue tan plural. Una época de la que hay mucho que aprender, tanto para imitar como para evitar.
Los treinta relatos que componen el volumen, aun reflejando una evolución de los conflictos causados en la convivencia que acabará con el sometimiento o expulsión de una parte de aquella sociedad, se leen de forma independiente.
Permafrost es el sorprendente debut de Eva Baltasar, una historia contundente, íntima y carnal de una protagonista con pulsiones suicidas que se protege del exterior pero se entrega con intensidad al sexo con otras mujeres, la literatura y el arte. El permafrost es esa capa de la tierra permanentemente congelada y es también la membrana que cubre a la protagonista de esta novela. Escrita en primera persona, nos presenta a una mujer en etapa de formación que se protege del exterior, que percibe la superficialidad en todo cuanto la rodea y huye de un entorno que nada tiene que ver con su manera de entender la vida: una madre obsesionada con la salud, omnipresente y controladora, y una hermana que afronta su existencia convencional con medicación y un positivismo irritante. La protagonista, que siente pulsiones suicidas, no permite que nadie se le acerque demasiado, pero al mismo tiempo se entrega con intensidad al sexo con otras mujeres, la literatura y el arte. El pulso entre el hedonismo, los placeres más carnales y la muerte es constante en esta novela, así como el tono mordaz de una protagonista que nos gana con su inteligencia y su humor negrísimo desde la primera página. Repleto de imágenes poéticas, contundentes y muy físicas, este carácter tan palpable del texto no es gratuito en una novela que nos habla del cuerpo, del sexo, del yo; una obra aguda y directa que reivindica la libertad femenina en el placer y en la soledad. Eva Baltasar inicia con Permafrost un tríptico de protagonistas femeninas que quiere explorar distintas etapas en la vida de las mujeres.
Después de una desilusión amorosa, y una huida para protegerse a ella y a su hijo, Katherine Flint se ha empeñado en empezar de cero y mantener bien los pies sobre la tierra. Lo único que desea es una vida sencilla, alejada de las mentiras y los engaños. Sin embargo, el amor, es algo que no entra en sus planes, por eso cuando llega a casa de William Hayes, un hombre que no solo le brinda trabajo, sino que es capaz de hacer que vuelva a sentirse amada de nuevo, se niega a dejarse llevar por la pasión que despierta en ella. Kate no está dispuesta a volver a amar, y mucho menos poner en riesgo de nuevo no solo su corazón, también el de su hijo. 'Cuando el amor llega sin pretenderlo, sin avisar, se convierte en un huracán que te arrastra sin remedio'.
Genaro Estrada (Mazatlán, 1887-Ciudad de México, 1937). Dedicó gran parte de su vida al servicio exterior. De 1923 a 1935 desarrolló una obra de ambiciosas proyecciones bibliográficas, localizó y difundió fuentes documentales para la historia social y literaria de México, como lo hicieron antes Francisco Sosa y Joaquín García Icazbalceta. Entre 1918 y 1926 Francisco Monteverde, Artemio de Valle-Arizpe, Emilio Abreu Gómez, Genaro Estrada y Mariano Silva y Aceves publicaron las obras más representativas de la corriente colonialista. Si el interés por recrear las manifestaciones sociales y artísticas del virreinato mexicano identificaba a estos narradores, no menos los ha unido el calificativo de evasores ante los cruentos hechos revolucionarios; sin embargo, se ha valorado su contribución al enriquecimiento del lenguaje literario y al conocimiento del pasado. «Pero Galín» (1926) cierra el ciclo colonialista al hacer una crítica demoledora a dicha corriente. María del Carmen Millán la calificó como «una completa sátira de la literatura de su tiempo […] Enjuicia la literatura, especialmente la moda arcaizante, y en particular el personaje que, de espaldas a la realidad, vive en el pasado, entre vitrinas y retablos de la corte virreinal». Mezcla de crónica, ensayo y narración, esta novela ofrece una moraleja: no escapes de tu momento y circunstancia, pero tampoco aceptes una vida moderna como la norteamericana, opta mejor por una existencia sencilla y campirana. De la bibliografía del autor destacan: «Visionario de la Nueva España» (1921), «Crucero» (1928), «Escalera» (1929) y «Paso a nivel» (1933).
Álex es una estudiante de segundo de Bachillerato. Es divertida, inteligente y tiene muchos amigos. Pero su vida amorosa no está al mismo nivel. En realidad, ha sido bastante decepcionante hasta el momento, así que este año Alexia ha decidido centrarse únicamente en sus estudios. Claro que no contaba con la llegada de Oliver, su desconcertante nuevo vecino. Oliver es realmente atractivo —como su amiga Gaby se esfuerza en recordarle—, pero de una manera salvaje que inquieta a Álex. Oliver es duro y distante hasta la insolencia pero, a través de esas visitas inesperadas por la terraza de su habitación, Alexia descubrirá también a un joven tierno y pasional cuyo misterio los llevará al límite. Y es que, a veces, el verdadero misterio, aquello que hace fascinante nuestras vidas, está más cerca de lo que pensamos…
Si fuera un caballero, Joe jamás posaría los ojos en la suculenta mujer que chocó contra él un día cualquiera. Si fuera un caballero, tendría continuamente presente las razones por las que él no es la persona adecuada para una mujer ejemplar, viviendo en un pueblo pequeño. Si fuera un caballero, simplemente, se ceñiría al plan inicial, en su intento por sanar a su hermana y olvidarse de lo que él fue en un tiempo, no muy remoto. Si fuera un caballero... Pero él no lo es, y eso será un gran problema para Lynette, quien descubrirá lo que, verdaderamente, no hace un caballero. ¿Y tú? ¿Estás lista para conocer esta historia?
En 1946, en un sanatorio para tuberculosos de la Conca d’Oro, castillo de Atlante y campo de exterminio, unos singulares personajes, supervivientes de la guerra y presumiblemente incurables, pelean débilmente consigo mismos y con los otros, en espera de la muerte. Largos duelos de gestos y de palabras; de palabras sobre todo: febriles, tiernas, barrocas a tono con el barroco de una tierra que ama la hipérbole y el exceso. Tema dominante: la muerte que se propaga sutilmente, se disfraza, se esconde, se extravía, musicalmente reaparece. Y todo esto entre los ropajes de una escritura en equilibrio entre el desgarro y el falsete y en un espacio siempre más acá o más allá de la historia… que podría incluso simular un escenario o la niebla de un sueño.
Han pasado 7 años desde que el detective José María Arregui y el entonces Rey de España, Juan Carlos I, compartieran una aventura delirante atravesando una España mucho más profunda la que muestra cualquier telediario. No han vuelto a verse desde entonces y cada uno sobrelleva el paso del tiempo como puede. La agencia de investigaciones que preside Arregui va viento en popa, pero algo se ha frenado dentro del detective. Quiere y teme atreverse a sentir. En cuanto al rey, ya jubilado, presiente que se acaba su tiempo de ser un niño viejo y se agota la indulgencia con la que todo un país lo trató durante décadas. Quiere vivir, quizá s su última aventura. De modo que le pide trabajo a su "amigo" Arregui, que se niega. Pero dos casos sin conexión lo harán cambiar de idea. Dos asesinatos diferentes que nadie tiene verdadero interés en esclarecer, salvo él. Y para hacerlo, necesitará de las influencias menguantes del Rey, a cambio de tenerlo como un estrambótico y disfrazado ayudante. El hombre más odiado de España, vinculado a la mayoría de los casos de corrupción durante los últimos 30 años, se ha suicidado. O no. Estaba a punto de declarar en varias causas y se temía que “tirase de la manta”. También ha muerto una muchacha estrafalaria y tierna, llevaba el pelo teñido de verde, mezclaba el canto tirolés con el claqué y las canciones de Leonard Cohen y creía en la bondad de todos los seres vivos. A nadie interesa investigar a fondo su muerte, en una zona de Madrid que quiso ser lujosamente residencial y se quedó a mitad de camino por la crisis. Ambas investigaciones no están conectadas, pero para el detective representan la importancia de conocer la verdad en un mundo que cada día le resulta más irreal. Y en esa búsqueda lo asiste un rey anciano que responde al nombre de Johnny Bourbon y le indica el camino un GPS con la voz de su novia muerta hace años. Al final,está la muerte. O una gatita bebé llamada Patty. La duda es saber a cuál de las dos llegarán antes.