Bobby parece ser un hombre normal, pero es en realidad un especialista en seguridad informática (hacker) trabajando en el anonimato para gobiernos, gente de dudosa conducta y corporaciones, su vida, al contrario de lo que los demás se imaginan, realmente es gris y sin mucho ruido. Pero al recibir la noticia de la proximidad de la muerte de su madre por cáncer, viaja a su pueblo natal y los secretos de su pasado se revelan de manera trepidante y horrenda ante él. Bobby siente entonces despertar los viejos y reprimidos, impulsos de asesino en serie que él creía meras fantasías. Un inteligentísimo hacker, asesino en serie, caníbal, que desesperadamente necesita ser detenido, pero antes debe encontrar un contrincante igual de inteligente que le haga frente.
Un periodista es asignado a cubrir la ejecución de un condenado a muerte. La tarea se convierte en un reto pues su trabajo incluye una entrevista, para cubrir el testimonio del último día de vida de un cautivo. El reportero terminó reuniendo material suficiente para un libro. No fue hasta diez años más tarde que recrea en su memoria el tiempo que pasó con ese hombre. Aquel que prefería ser llamado con el nombre de «Bobo», quien nunca se arrepintió de sus actos y vivió convencido de que hizo lo correcto. La historia de Bobo comienza a pulsar en la mente del periodista hasta que la transforma en una novela. La vida de un asesino con una memoria prodigiosa, una cultura incoherente con su condición y su nombre. Un individuo sin pudor, sin culpa, aferrando a la firme convicción de que actuó correctamente. Su texto recorre los recovecos de la vida de Bobo. Su infancia, sus relaciones personales y familiares, la terrible historia de su hermano y apoyo, los conflictos entre sus padres, la relación con el pilar de su vida que fue su perro de agua. El destino de Bobo está escrito. El juicio y la reflexión final serán, como siempre, a discreción del lector.
Este libro ofrece una multitud de pequeñas historias que cuentan, juntas, una sola historia. Es una travesía por los temas más diversos: el amor, la infancia, el agua, la tierra, la palabra, la imagen, la música, el éxodo, el poder, el miedo, la guerra, la indignidad, la indignación, el vuelo. Sus protagonistas aparecen y se desvanecen para seguir viviendo, historia tras historia, en otros personajes que les dan continuidad. Tejidos por los hilos del tiempo, ellos son tiempo que dice: son bocas del tiempo.
La vastedad de las desiertas regiones ganadas para los Estados Unidos en el Oeste obligó a sus pobladores a ejercer las más diversas actividades. Así BRET HARTE (1836-1902), nacido en Albany, amigo y protector de Mark Twain, fue sucesivamente maestro de escuela, empleado de farmacia, minero, mensajero, tipógrafo, reportero, autor de cuentos cortos, colaborador regular del «Golden Era» y, a partir de 1868, director de la importante revista «Overland Monthly.» En sus páginas aparecieron esas breves y patéticas obras maestras «The Luck of Roaring Camp» (La suerte de Roaring Camp), «The Outcasts of Poker Flat» (Los expulsados de Poker Flat), «Tennessee’s Partner» (El socio de Tennessee), que el autor reuniría bajo el título de «The Californian Sketches» (Bocetos californianos) y que fueron, acaso, una revelación del Oeste. Un poema humorístico «The Heathen Chinne» (El chino pagano), lo hizo famoso desde el Pacífico al Atlántico. En 1878, a pedido suyo, fue nombrado cónsul en la ciudad de Crefeld, en Prusia, y luego en Glasgow. Sus últimos años los pasó en Londres.JORGE LUIS BORGES«(Introducción a la literatura norteamericana)»
El disoluto millonario Desmond Doyle ha dilapidado su fortuna. Arruinado, abandonado por su novia, perseguido por multitud de acreedores y consciente, aunque tarde, de la descomposición moral en la que lo ha sumido una vida de vicio, decide poner fin a su vida.
Lamarat Minar, de veinte años, regresa de Holanda con su familia a Touarirt, su pueblo natal en Marruecos, para celebrar la boda de su hermana Rebekka con su tío Mosa. Durante los festejos, descubre que su tío ha desaparecido, y su padre le ordena ir a buscar y traer de vuelta al novio fugitivo. Con la ayuda de Chalid, el taxista que todo lo sabe, Lamarat emprenderá un periplo por la región y por los recuerdos... con un desenlace inesperado. Boda junto al mar es una novela muy poco convencional, no tanto por la trama en sí como por el estilo en que está narrada. Abdelkader Benali se recrea jugando con el lenguaje, rompiendo sin reparo la sintaxis con estructuras extrañas y forzadas procedentes del árabe, su lengua materna. Y como telón de fondo, las tradiciones y los conflictos culturales surgidos del contraste entre dos visiones de la vida tan distintas como la marroquí y la europea.
Bodas de Odio se desarrolla en el siglo pasado, en el opulento y contrastante mundo de la Rusia zarista. En medio del lujo aristocrático, una bella y delicada jovencita llamada Lisaveta Ivanovna Kerloff intenta obtener el favor de su padre para casarse con Fedor Mikailovich Lavrezky, un humilde teniente.
A punto de conseguir el permiso paterno, el destino engrana las circunstancias de tal forma, que separa irremediablemente a la apasionada pareja.
Bodas de Odio encierra toda una gama de sentimientos y pasiones humanas que se desatan merced a una boda cuyos lazos son... de odio.
El desenlace de Bodas de Odio es inesperado; se llega a él no sin antes pasar por mil y una intrigas, y desentrañar añejos secretos que desgarrarán poco a poco el alma buena de Lisaveta.
Stella Newman no sólo es muy mayor; padece además un cáncer. Stella pasa sus últimos días en una residencia de ancianos.
La soledad es su compañera; de ella sólo le alivia su cuidadora, Genevieve Warner, mujer de poco más de treinta años, casada y que recientemente ha iniciado una relación extramatrimonial. Para Genevieve, las conversaciones con Stella resultan muy ilustrativas, pues la anciana lo sabe todo sobre el amor. De ese modo, se va forjando entre ambas una corriente de afecto mutuo que se resuelve en un póstumo acto de generosidad de Stella.
Por su sutil ejercicio de equilibrio entre el misterio y el análisis psicológico, «Bodas de azufre» es una novela intensa y turbadora, que deja en el lector la agridulce sensación de lo hermoso cuando es rozado por el hálito de la muerte.
Corre el año 1840 en Buenos Aires. Con su belleza pelirroja, su terquedad y su espíritu impulsivo, la joven Fiona Malone hace honor a su origen irlandés. Se niega a seguir las costumbres porteñas de la época pues está decidida a casarse por amor. Por ello se desespera cuando su padre dispone su matrimonio con Don Juan Cruz de Silva, protegido del tirano Juan Manuel de Rosas. De Silva, apodado el Diablo, tiene un oscuro pasado y debe su prosperidad tanto a su inteligencia, valor y frialdad como al afecto que le tiene Rosas. Para consolidar su posición debe casarse con una joven de buena familia, y la belleza de Fiona lo ha conquistado. Sin embargo, el matrimonio comenzará marcado por el odio. Juan Cruz y Fiona sólo serán felices si saben ceder a la inmensa fuerza del deseo y del amor.
Una romántica y disparatada historia de amor con dos protagonistas inolvidables. Emma Byrd ha pasado los últimos años trabajando como asistente de uno de los autores más renombrados de su generación; pero acaba de llegar a un punto sin retorno. Zane Swanson es terco como una mula, neurótico hasta la extenuación, y el hombre más desconsiderado del universo. Tiene que dejarlo o terminará matándolo. A Zane, la noticia de que su asistente ha decidido renunciar le parece la peor de las traiciones y está determinado a impedirlo; no importa las locuras que deba cometer para lograrlo. Está convencido de que no podrá sobrevivir un día sin Emma y, aunque le cueste reconocerlo, aquello no se debe solo a lo buena que es en su trabajo. En esta disparatada historia se entretejen un sinnúmero de situaciones, a cuál más divertida, que irán desde la búsqueda del vestido de novia perfecto, la necesidad de encontrar aquello que nos hace feliz, hasta toparse con el romance más inesperado, y precisamente por ello, el mejor con el que alguien podría soñar. Una maravillosa comedia romántica con unos protagonistas que se ganarán tu corazón de inmediato.
Un romántico y divertido viaje en el que nuestros protagonistas descubrirán que el verdadero amor se encuentra donde menos lo esperas. A Peter Gallagher acaba de ocurrirle la que considera es la peor de las tragedias: su mejor amigo va a casarse. No solo eso: unirá su vida a la mujer de la que lleva años secretamente enamorado y, como si eso no fuese suficiente, le ha pedido que sea su padrino. Por suerte, al menos le queda su trabajo como chef de uno de los mejores restaurantes de la ciudad. O al menos, eso es lo que él cree. Nina Osbourne es la heredera de una de las grandes corporaciones del país, pero tiene una pasión oculta: adora cocinar. De modo que, cuando se presenta la oportunidad de adquirir un restaurante en crisis, no lo piensa dos veces y decide ir más allá: se pone al mando del mismo para sacarlo adelante. Después de todo, es brillante, decidida y está dispuesta a todo por triunfar para demostrar que es la mejor. Hasta que se da de bruces con cierto chef obstinado. La paradoja del padrino es una historia tan frenética como la mejor cocina; disparatada a rabiar y, sobre todo, tan deliciosa como el mejor de los platillos.
Hicieron una extraña alianza… Lady Cecily despreciaba a los rehenes franceses que eran retenidos en la corte. Tratados con honores de invitados, los hombres participaban de todo tipo de juegos amorosos y Cecily temía que su señora, la princesa, fuera desgraciada. Cansado de la guerra, el caballero Marc de Marcel solo deseaba regresar a su hogar. Sin tener la certeza de que fueran a pagar su rescate, estableció una improbable alianza con la distante y apasionada Cecily. Él la ayudaría a salvar a la princesa de la ruina y ella lo ayudaría a escapar. Un pacto que podría conducirlos a los dos al desastre.
El trono de Inglaterra estaba en juego. Anne de Stamford era depositaria desde hacía años de los secretos de su señora, pero cuando lady Joan se desposó con el hijo del rey, la vida en la corte se volvió todavía más peligrosa. Sir Nicholas Lovayne había llegado para descubrir la verdad sobre el pasado de lady Joan, y Anne debía hacer algo, lo que fuera, para distraerlo… Ansiando escapar a las intrigas de la corte, Nicholas no había contado con la manera en que Anne lo distraería. ¿Sería capaz de cumplir con su deber cuando cada fibra de su ser le ordenaba proteger a aquella joven tan especial?
Ana y Dylan, eran hijos de rancheros, cada uno de un lado del país, Dylan de Texas y Ana de Huelva, pero su madre se casó con un vaquero de Montana, ya que era viuda.
Los padres de Ana y Dylan tenían un nexo en común, o dos, o tres… La madre de Dylan murió cuando él era un niño, el padre de Ana también en un accidente laboral y su madre cuando ella tenía 18 años y se quedó sola con su padrastro.
El segundo nexo en común fue una mujer casi tan joven como Dylan, que se casó con su padre, y al morir este en poco tiempo, conoció también en las redes sociales al padrastro de Ana. Y se volvió a casar con otro hombre mayor. Dylan tuvo que irse del rancho de Texas al de Montana, lo único que les dejaron a ambos con la condición de casarse…
Y Dylan, viajó a Montana, antes de quedarse sin nada y conoció a Ana, y se casó con ella. Pero ¿era el prototipo de mujeres con las que había salido en Texas? Le llevaba ocho años y un rancho la mitad del suyo…
Después del inexplicable suicidio de su marido, el director de cine Rey Robla, Lauren regresa a la vieja casa junto al mar en la que vivió con él. Allí se encuentra con el dolor y la soledad. Pero pronto se rompe el imperante silencio: Lauren descubre que en el piso de arriba habita un extraño hombre capaz de reproducir las conversaciones privadas de Lauren y su marido. ¿Es este hombre una persona real o es simplemente el producto de una ensoñación de la mente de Lauren?
He sido agente de la DEA hasta hace un año, cuando un error le costó la vida de mi mejor amigo... y casi me cuesta la mía. El sentimiento de culpa no me permitía hacer bien mi trabajo, por eso decidí dejarlo y empezar a trabajar en la empresa de mi cuñado como guardaespaldas, aunque debido a mi carácter serio no me dure demasiado un trabajo. Acaba de encargarme uno que me proporcionará una cuantiosa suma de dinero, y solo tengo que hacer de niñero de la esposa de un transportista millonario. ¿Qué puede salir mal?
Había dado un paso atrás al observar la mano de MacNaught extendida hacía él. Y era una mano digna de respeto. Parecía la pala de un tahonero. MacNaught era un gigante de cerca de siete pies de alto y con una anchura de hombros equilibrada con su estatura. Tenía el cabello rojo de cercanos antecesores irlandeses.
Como una manada de ovejas, cogieron sus herramientas y se dirigieron hacia el lugar donde la máquina guía esperaba para recorrer la línea recién terminada. Donovan se guardó el revólver. Sonreía cruelmente. Se dirigió a la caseta del ingeniero. Este, un hombre de mediana edad, le miraba con asombro y prevención.
Habían trabajado como burros, durmiendo y comiendo sobre el terreno. Cuatro años, uno detrás de otro, robando horas al sueño y al descanso, sin permitirse ni siquiera un corto viaje al próximo pueblo para aliviarse el cuerpo con unas cuantas botellas de whisky y la compañía de algunas de aquellas funcionarías que viajaban constantemente por Texas y que resultaban mucho más ligeras de cascos que muchos caballos del país.