Tras pasarse nueve meses destrozando sus Clarks, pues se niega a calzarse unas botas de montaña apropiadas para la región, Schiavone acoge con escepticismo la llegada de una teórica primavera al valle de Aosta. Su resistencia a someterse a la realidad de aquel lugar, donde ni las estaciones del año son como deberían ser, se refleja también en su labor profesional. Al conocerse el accidente de una furgoneta en el que mueren el conductor y su acompañante, Rocco reacciona con su habitual irritación e intenta desentenderse del asunto. Sin embargo, pocos días después, la desaparición de una joven perteneciente a una rica familia de constructores de la zona despierta su instinto de sabueso: las pesquisas para encontrar a la chica le abren las puertas de un mundo subterráneo que lo deja estupefacto. Rocco conoce muy bien los negocios turbios que se dan en una gran ciudad como la que tanto añora, pero no sospechaba hasta qué punto podía existir algo semejante en ese rincón perdido entre las montañas. Finalmente, Schiavone no tiene más remedio que ponerse manos a la obra, lo que lo obligará a apartar de su mente el espinoso asunto de su relación con la mejor amiga de su última ex, además de un doloroso hecho de su pasado que se niega a aceptar.
Unos días después de haber liberado a Chiara Berguet, el subjefe Rocco Schiavone se encuentra muy afectado por un hecho que no le desearía a nadie: la muerte, en su propia casa, de la compañera de un amigo de Roma, acribillada con balas que iban destinadas a él. Pero cuando la depresión amenaza una vez más con doblegarlo, Rocco echa mano del mejor recurso que conoce para combatirla: expresar su ira contra todo el mundo, transmutada en una ironía capaz de herir más hondo que una navaja. Por fortuna, los agentes de la comisaría de Aosta, que están aprendiendo a convivir con la coraza de espinas que recubre el corazón malherido de su jefe, saben tomárselo con filosofía y aguantar el chaparrón. Así que, cuando Rocco sale del pozo, lo animan a emprender la búsqueda del asesino, que, al discurrir entre Roma y Aosta, se convierte en una dolorosa exploración de su pasado, un viaje en el tiempo que es como una herida abierta sobre una llaga que sigue sangrando. Y por si fuera poco, el caso de otro finado, al que en un principio se había dado carpetazo como víctima de un infarto, aterriza sobre su mesa para avivar su irritación. Y con él, un nuevo viaje, en esta ocasión al sector más acomodado de la ciudad, el de los que están fuera de toda sospecha, los que creen que pueden disponer de la vida humana como si de un peluche se tratara.
No es aventurado sospechar que el carácter áspero y mordaz del subjefe Rocco Schiavone es la coraza de un hombre que vive atormentado por la culpa y está poseído por la ira y el dolor. En esta quinta entrega de la serie —que escaló una vez más al primer puesto de ventas en Italia— se revela por fin el oscuro pasado de Rocco en Roma, donde, bajo la aparente normalidad del trabajo cotidiano y de su amor inquebrantable por Marina, su mujer, el incorregible policía cultiva un entramado de amistades y lealtades peligrosas que, a la postre, supondrán su perdición. El verano de 2007, en plena canícula romana, Rocco sufre una fuerte sacudida que lo deja aturdido y desconsolado: Marina se ha marchado de casa, triste y desengañada tras descubrir que el elevado tren de vida que llevan se basa en los trapicheos de Rocco y sus amigos de la infancia. Sumido en la desesperación, el subjefe debe investigar la muerte de dos estudiantes de Derecho, asesinados de forma tan violenta que todos los indicios apuntan a un ajuste de cuentas. Después de semanas de intensas pesquisas, en las que logra destapar las conexiones internacionales de una red de narcotraficantes, Rocco obtiene la información suficiente para interceptar un cargamento de droga. Sin embargo, aunque lo ignora, acaba de dar un paso decisivo hacia el precipicio: al asestar el golpe de gracia a la trama criminal, ha firmado una sentencia de muerte cuyo legado será una guerra sin cuartel que se dilatará durante diez años hasta alcanzar los fríos parajes de Aosta.
El buen tiempo no acaba de llegar a Aosta y el subjefe Rocco Schiavone tiene que lidiar con dos crímenes mientras repasa latín con Gabriele, el vecino adolescente cuya madre nunca está en casa. El cadáver de una transexual ha aparecido en el río Dora y casi a la vez, en un prado a las afueras de la capital, un pastor ha descubierto el cuerpo inerte de un hombre que esconde, en el bolsillo, una nota con el número de móvil de Schiavone. Y cuando el subjefe empieza a olerse que no se trata de un homicidio sin importancia, como pretenden algunos mandos, sino de algo mucho peor, recibe instrucciones de abandonar la investigación. De nuevo, el policía más políticamente incorrecto solo podrá aclarar lo que está pasando saltándose los procedimientos y enfrentándose a todos los estamentos y engranajes del poder. «Polvo y sombra», sexta entrega de la serie dedicada a Rocco Schiavone, que se ha encaramado a los primeros puestos de las listas de libros más vendidos de Italia, es una historia de sombras y traiciones que el subjefe intentará atrapar, pero que huyen dejándolo simplemente con el polvo de sus recuerdos.
Vuelve Rocco Schiavone, el melancólico, irascible, irreverente y poco ortodoxo subjefe de la policía de Aosta.
Un homicidio en el casino de Saint-Vincent, uno de los más prestigiosos de Europa, sumerge a Rocco Schiavone en el mundo de la ludopatía, los juegos de azar y la avaricia. A pesar de la complejidad del caso, el subjefe no puede liberarse de su pasado… y recomponer su vida se torna más difícil porque la sombra de su enemigo Enzo Baiocchi todavía se cierne sobre él. Y aún quedan muchas preguntas por responder: ¿qué pasó con Caterina?, ¿por qué lo traicionó?, y ¿por qué la fiscalía comienza a investigar la muerte de Luigi Baiocchi?
Con su ácido sentido del humor, sus diálogos mordaces y una mirada sin concesiones sobre la sociedad contemporánea, esta nueva investigación de Rocco Schiavone es un auténtico placer para los aficionados a la novela negra.
Badmash significa travieso. ¿Lo somos? Sí, nos sobra descaro, pero también podemos derretirte el corazón. Grayson Skelton es el bajista del grupo de rock Badmash. La banda que ha alcanzado fama mundial y ha ganado un grammy. Su vida siempre ha consistido en hacer y deshacer a su antojo, pues él proviene de una familia adinerada y nunca ha tenido impedimentos. Ni siquiera con las mujeres. Es el mejor amante, el peor novio y tiene claro que quiere divertirse sin límites. Danna es la nueva manager de Badmash. La atracción entre ambos es inevitable, pero Grayson no parece soportarla. Tampoco cuenta con el factor sorpresa: ella le conoce más de lo que él cree. Cuando el pasado entre ambos sale a la luz, ninguno podrá ignorar que tal vez es hora de replantearse muchas cosas, entre ellas, si merece la pena dejarlo todo por una mujer que piensa que él se ha convertido en la peor versión de sí mismo. ¿Qué es eso que los unió y que ahora los separa? ¿Deberá ella abandonar su trabajo? ¿Lidiarán con sus sentimientos por el bien del grupo? Rock & Love no es solo música y mujeres; somos una familia y lo damos todo por protegernos. La intriga, pasión y acción son nuestro pan de cada día. Una vez que entres, no querrás dejarnos. ¿Quieres unirte a la banda?
Una fantástica novela romántica, con pasajes dramáticos y reflexiones que mantendrán al lector absorto en los hechos que se narran, además de llevarlos en un viaje a diferentes lugares y a sentir diversas emociones. La historia de Ismael con sus diferentes relaciones, así como sus grandes triunfos y decepciones, son una mezcla que desembocó en un muy buen trabajo literario.
Si te gustan las buenas historias new adult, con romance, muchos líos amorosos, y amistad, esta es una gran novela. Dos hermanas que vivirán el amor a ritmo de rock, dos chicas jóvenes que encuentran el amor en un viaje, que las hará descubrir más sobre el amor y sobre ellas mismas. Extremoduro es su banda favorita. Sus amigos están algo locos. Esta es la novela que habla de más de una relación de amor, y todo a ritmo de rock y muchos, muchos líos. ¿Qué locuras se pueden cometer por amor? ¿Y por amistad? La fórmula de la novela que tiene en sus manos es la siguiente: ¡Unas hermanas que llevan mucha gasolina! Más un conquistador nato… Más un chico que ama a su perra por encima de todas las cosas… Más otro con muchos miedos. Más unos amigos que te acompañarían al fin del mundo. Más un concierto de Extremoduro… Más ¡¡la aparición en escena de una peculiar pareja que no entraba en los planes de nadie!! ¿Puede cambiar tu vida por culpa de unas llaves? Si te llamaras Irene Medina sí… Una novela con mucho ritmo, la receta perfecta para olvidarte de todas tus penas.
Una historia de amor a fuego lento que sigue la vida de sus protagonistas desde la adolescencia hasta los veintitantos y nos hace testigos de cómo su amistad se transforma en amor. Ígneo Cuando sus padres se divorcian, Cooper se ve inmerso en una custodia compartida en la que le tocará vivir una semana con su madre y otra con su padre. Pero es que no es solo con su padre con quien tiene que vivir. Porque con él está Lila: la otra. La mujer que hizo que la roca sólida sobre la que se asentaba su vida se desmoronara. Y, por si fuera poco…, también está Jace: el hijo de Lila. Un engreído con los ojos de un azul que recuerda a escamas de pez recién vomitadas. Lo único que quiere Cooper es que su familia vuelva a ser lo que era, pero algo en ese niño le dice que las cosas nunca volverán a ser como antes. Sedimentario. Cooper se sigue resistiendo a aceptar la realidad de su nueva vida y su primer contacto con Jace es más bien rocoso; pero, una vez superado ese complicado inicio, los cientos de recuerdos compartidos hacen que se vaya creando algo nuevo entre ellos, una sólida… amistad. Porque amistad es lo único que pueden tener. A pesar de no ser hermanos de verdad. De hecho, técnicamente, ni siquiera son hermanastros. Metamórfico. ¿Cómo evolucionará esa amistad ante las presiones de la vida? ¿Y qué pasa con las presiones del corazón?
Un avión sufre un accidente en un lugar indeterminado de la costa de Indonesia. Los únicos cuatro supervivientes se cobijan en una pequeña isla desierta, hasta que lleguen los equipos de rescate. Mientras esperan, comienzan a ocurrir unos hechos extraños que hace sospechar a los náufragos que no están solos y que allí hay alguien más, aparte de ellos. Todo se complica cuando deciden refugiarse en un barco averiado que se ha quedado embarrancado en el arrecife y una especie de morsa gigante impide que nadie se pueda acercar.
La historia de tres divos de la música rock. Los tres han pagado una alto precio por ascender los peldaños de la fama, y los tres son demasiado grandes para compartir el mismo escenario. Sin embargo, la desesperación de un hombre y la consumación de una terrible venganza les arrastrarán a un inesperado juego mortal…
Una mujer que le acaba de echar de casa. Un trabajo poco reconocido y peor remunerado como redactor de sucesos en el segundo periódico de la provincia. Un hijo en el que le resulta imposible reconocerse. Unos amigos a los que apenas ve y que cada día siente más lejanos. Una abstinencia sexual agudizada por un hermano que parece disfrutar exhibiendo delante de él sus conquistas amorosas. Una ciudad hostil, en la que, a la sombra de los poderes políticos y económicos, los retoños de las viejas familias patricias hacen negocios con la última hornada de triunfadores. Por supuesto, Eduardo Saragüeta no se cuenta entre estos últimos. Sin más ayuda que la ginebra, un tocadiscos salvado del desguace y la nostalgia de los años jóvenes, se bandea malamente en la peor crisis de su vida cuando una llamada le informa de la aparición del cadáver de una anciana flotando en el lecho del río. En cualquier otra época del año el hecho no habría merecido más de una docena de líneas en la esquina derecha de una página par. Pero estamos en agosto, y en agosto cualquier suceso, hasta el más intrascendente, puede pasar a ocupar la primera plana de un periódico. El rock’n’roll ha comenzado.
Un joven cineasta se dispone a rodar su primera película en el Madrid en el que Berlanga filma El verdugo y se ha sentenciado a muerte a Grimau.Estamos en Madrid en 1963. Pelayo Pelayo, lleno de dudas e ilusiones, reescribe obsesivamente un guion que está a punto de rodar. Además de cineasta en ciernes, es militante del PC, y el camarada José Antonio Bardem le pide que visite a Berlanga en el rodaje de El verdugo para que firme un manifiesto en contra de la pena de muerte a Julián Grimau. Pelayo Pelayo visita a Berlanga y recorre Madrid manteniendo una serie de encuentros: con el actor famoso que va a protagonizar su película, con el productor que la va a financiar, con su novia Laura, de la que se está distanciando, con la periodista Miriam que le cuenta novedades sobre lo de Grimau, con un acomodador de cine que hace de extra en sus ratos libres... Y en este Madrid en pleno franquismo desarrollista, Pelayo Pelayo acaba retocando su guion en un prostíbulo y teniendo un encontronazo con el infausto comisario Conesa...
Primavera del 246 a. C.
Cuando el Atalanta, barco de guerra de la república de Rodas, destruye una embarcación pirata, se sitúa, sin saberlo, en el ojo de un huracán inesperado. Entre las víctimas que rescata de los piratas se encuentra una hermosa mujer, Dionisia, favorita del rey de Siria, conocedora de un secreto capaz de sumergir a todo el Mediterráneo oriental en una guerra larga y de vencedor incierto.
Isócrates, el capitán del barco de guerra, un hombre sencillo que ha dedicado toda su vida a combatir la piratería, se verá envuelto en un conflicto diplomático difícil de manejar; tendrá que conseguir evitar que estalle la guerra entre los tres imperios que rodean a Rodas: Egipto, Siria y Macedonia. Amenazado de muerte por la despiadada reina siria Laodice, viajará de un lado a otro del mar en un intento por atrapar a su mayor enemigo y salvar a Dionisia de una muerte segura. Gillian Bradshaw, autora de la aclamada El faro de Alejandría, vuelve a presentar una historia absorbente, con una trama colmada de intriga y acción que descorrerá la cortina de un periodo de la Historia tan desconocido como atractivo, en un maravilloso despliegue narrativo.
La cantina que un día fué propiedad de Max Baxter y que al morir éste pasó a manos de su hija Bernardette, estaba situada en el esquinazo de un bajo edificio en una pequeña plaza en el importante poblado de Medford del norte de Oregón. Este poblado, debido a la proximidad a la divisoria de California y quizá aún más debído a que en este último Estado se había intensificado una gran limpia de gente peligrosa por todos conceptos, se había recrecido en poco tiempo, adquiriendo una excelente importancia, pero a la par, había adquirido un carácter bronco y peligroso que amenaba con contaminar al elemento joven y sano de la cuenca.
Las relaciones de vecindad entre Lester Kent y Sidney Keyes no eran cordiales, ni siquiera de tipo indiferente. Los dos se odiaban rabiosamente y los dos constituían una fuerza, aunque en sentido contrario. Lester era uno de los más destacados ovejeros de la región. Poseía un buen rancho a poca distancia de Elko y unos nutridos rebaños que rumiaban en las salvajes hondonadas o cresterías de las montañas Independence.
Cuando el acaudalado Rowland Mallet contempla por primera vez una escultura de Roderick Hudson, se queda estupefacto y considera que es obra de un genio, a la vez que se extasía con la belleza, el espíritu y el carisma del propio escultor. Así, con el deseo de conceder al empobrecido artista la oportunidad de desarrollar su talento, se lleva a Roderick a Roma, donde pronto será el centro de atención de la ciudad. Sin embargo, éste enseguida pierde la inspiración, y Rowland pierde el control de su protegido cuando ambos se enamoran de la misma mujer, que nunca podrá ser suya. ¿Podrá escapar Roderick del camino hacia la autodestrucción en el que parece encontrarse? Considerada de manera casi unánime como la primera gran novela de Henry James, Roderick Hudson es un absorbente retrato del temperamento artístico de un joven que, como Ícaro, vuela demasiado cerca del sol. Acompañado por su amigo y mecenas Rowland Mallet, y por Christina Light, una de las más encantadoras femmes fatales de Henry James —que volverá a aparecer en la célebre obra La Princesa Casamassima, del mismo autor—, Roderick Hudson protagoniza una novela en torno al aprendizaje y los amores trágicos, en la que su protector y él bien podrían representar los dos lados de la propia naturaleza de Henry James: el artista salvajemente imaginativo y el mentor consciente de su poder e influencia.
Novela que generalmente se incluye entre sus obras históricas, pero que más bien es un cuadro vívido y fascinante de la Inglaterra previctoriana, con especial atención al boxeo, que describe en sus comienzos con notabilísima penetración. A puño limpio y sin límite de asaltos, así era este rudo deporte por aquel entonces, en el que una contienda podía prolongarse durante horas. En muchos condados de Inglaterra, el boxeo estaba prohibido: tanto público, como autoridades y representantes, e incluso los mismos púgiles eran perseguidos por la ley; pero nada pudo detener la proliferación de los «nomade rings», en cualquier terreno aceptable de cualquier rincón de la ciudad. Todas estas extensas narraciones tienen un estilo decididamente decimonónico, en los moldes de la gran novela victoriana fijada por Dickens; los protagonistas nos ofrecen inolvidables retratos históricos de los personajes más peculiares del siglo XIX: Lord Nelson, John Lade, Lord Cochrane, el dandi Beau Brummell, Emma Hamilton, o el Príncipe de Gales (Jorge IV); así como de luchadores míticos: Jem Belcher, Joe Berks, John Jackson y Daniel Mendoza.
A finales de la Época Oscura, las Tierras de Poniente se preparan para una nueva guerra a causa de la Gran Sequía. Un día de primavera, en el mercado de Adiá, ciudad ribereña del Mar Grande, se conocen el criado Poncet y el poeta Guiamón. El amo de Poncet, Roger, soldado de fortuna, se entera aquel mismo día de la existencia de la Isla de las Tres Naranjas por boca del Misterioso Viajero, que lo quiere convencer de que entre al servicio del rey Flocart para vencer a las Hermandades de campesinos de la Isla y recuperar el Estandarte del reino, perdido misteriosamente. Así comienza una nueva aventura mítica que nos adentrará en los senderos de la protohistoria. Conoceremos la profecía de la Mujer-Pez, la fuerza de Garidaina, llamada Estrella de Oro, las experiencias guerreras del poeta Guiamón, el orgullo de los corsarios de Oriente, la sabiduría del monje del monasterio del Cerro de los Gigantes, el poder de la Herramienta de Paz, la guarida de la Bestia y el reino de los Grandes del Abismo. Cabalgaremos con Roger, Poncet y Guiamón por los caminos de la Isla, lucharemos con los campesinos y los monjes contra corsarios y soldados y asistiremos al nacimiento de una nueva época.
De regreso de la Isla de las Tres Naranjas, donde Roger de Adiá recuperó el Estandarte Mágico y conoció a Garidaina, llamada Estrella de Oro, la Compañía del Portador, formada por el poeta Guiamón, el criado Poncet y el monje Guiós, se enfrentará con la Guerra de Poniente, los encantos de la Reina Nyega y la destrucción del Mundo Conocido por la ambición de los ponentinos. Esta nueva aventura mítica que nos propone Jaume Fuster, después del éxito de La Isla de las Tres Naranjas, prolonga y redondea la exploración que el autor nos ofrece por los caminos imaginativos de la protohistoria. En El Anillo de Hierro entraremos con Guiamón en la Montaña de Fuego, velaremos con él en el Corredor del Pasado, asistiremos al asedio y caída de Brótil, huiremos derrotados por los caminos del Consejo de Bailías hasta la Tierra Alta, nos enfrentaremos al Rostro del Desconocido y al Engullidor de Colores, leeremos la magia de los Dichos Antiguos en el Libro Verde del Monasterio de la Vall-llóbrega, combatiremos con los Caballeros del Anillo de Hierro contra el ejército de la Reina Nyega, treparemos a la Cumbre del Puigpelat en busca de la Oronja Escarlata y amaremos a Nároa, la Dama del Agua.