«Journal d’un poete», título dado a las notas íntimas de Alfred de Vigny (1797-1863) por Louis Ratisbonne, su albacea testamentario, que las publicó fragmentariamente en 1867, son confesiones, reflexiones críticas, literarias, esbozos de composiciones, trozos de memorias continuadas. Vigny, a pesar de su natural reserva, aquí se entrega y se explica a sí mismo y su obra.
«Le Times» era el nombre que Albertine Sarrazin daba a su diario de prisión, iniciado en la cárcel de Amiens el 23 de diciembre de 1958 y continuado en Soissons hasta el 3 de noviembre de 1959. Si, en principio, tiene el valor de un incomparable documento autobiográfico, alcanza también dimensión literaria, por esta suerte de alquimia que practica constantemente Albertine y que convierte, en un proceso de elaboración interior del cual el «Diario de prisión» nos da las claves, cada incidencia biográfica, cada circunstancia vivida y padecida, en fermento literario. Dice Julien que las páginas del «Diario» son un documento viviente y son, al mismo tiempo, un ejercicio de escritura. El «Diario» es la respuesta más elaborada y plena que Albertine puede dar al silencio, a esa forma de sometimiento que la sociedad intenta imponerle aislándola del ser que ama y privándola de la libertad. Convencida de que cada individuo se define únicamente frente al «otro», por medio del «otro», el «testigo», Albertine elige a Julien como testigo y lo convierte en destinatario de su vasta meditación. Así, el «Diario» es en realidad una larguísima carta a Julien, y, a diferencia de otros diarios cuyo destinatario es el público y cuya función radica en que el lector indiferenciado conozca al autor, en estas páginas, libres de toda presunción o afectación literarias, la aspiración de Albertine es conocerse mejor a sí misma y ser mejor amada por Julien. Pero tampoco es posible pensar que al escribirlas careciera de conciencia literaria. La justificación de toda su vida está en la literatura: tal vez no valga la pena vivir aquello que jamás será escrito, pero, al mismo tiempo, lo escrito salva lo vivido de la traición de la memoria, del paso del tiempo, de los juicios morales o las sanciones sociales. La escritura ha sido para Albertine un espacio y un tiempo abiertos, donde no rigen las leyes comunes y donde una suerte de moral diferente —la del arte— sublima los acontecimientos de la vida y permite el goce de una libertad que ninguna prisión restringe. Y —volviendo al certero comentario de Julien— estas páginas del «Diario de prisión» constituyen, al mismo tiempo, un ejercicio literario, ejercicio que dará frutos tan maduros y logrados como «El astrágalo» y «La fuga», en 1964, y «El atajo», en 1966.
El Diario de un combatiente, inédito hasta hoy, recoge momentos irrepetibles de la lucha armada en Cuba desde la llegada del yate Granma a las costas del oriente del país, el 2 de diciembre de 1956, hasta el triunfo revolucionario del 1.º de enero de 1959, narrados por quien fuera uno de sus principales protagonistas, el comandante argentino-cubano Ernesto Che Guevara. En sus páginas encontrará el lector reflexiones que van cobrando un mayor relieve y hondura cuando los escenarios en los que el Che interviene se complejizan, y su participación en la guerra revolucionaria se va tornando cada vez más comprometida. El alto valor testimonial y humano que emana de su lectura propicia un acercamiento a las percepciones del Che sobre la realidad de la isla, su cultura, identidad y contexto político; sus primeras vivencias y el significado real de una gesta a la que se consagró en aras de contribuir a la liberación del pueblo cubano
Desde mayo de 1936 hasta poco antes de acabar sus días en el campo de concentración de Dachau en 1945, el escritor Friedrich Reck llevó un diario donde anotó sus impresiones acerca del régimen nacionalsocialista. Se trata de un documento excepcional en la medida en que ilustra el rechazo que la ideología nazi suscitaba en ciertos círculos conservadores, como los que frecuentaba el propio autor. De esta crítica mordaz y exasperada, resultan especialmente significativos aquellos pasajes en que describe su arrepentimiento por no haber podido matar a Hitler cuando lo tuvo cerca. Diario de un desesperado contó con numerosas ediciones en Alemania —la primera es de 1947— y en distintos países europeos. Sin embargo, hasta 1994 no se publicó la que, gracias al trabajo de investigación de la historiadora Christine Zeile, se considera la definitiva: ésta es la que se ha usado para la publicación, por primera vez, del libro en castellano.
Diario de un incesto es la historia real, contada en primera persona, de una mujer que estuvo sometida a abusos sexuales y maltratos por parte de su padre cuando aún era una niña. Es la anatomía de una mente rota, la radiografía de un alma herida y, sobre todo, una visión privilegiada de cómo alguien intenta sobrevivir y cómo se relaciona con el mundo. La autora cuenta su historia sin adjetivos ni metáforas de ningún tipo. El horror, primero tiene la cara de su padre y después la de todos aquellos que acaban utilizándola. Pasado el shock del incesto inicial, el lector descubrirá que la condena al infierno no eran las agresiones de su padre, sino todo lo que llegará después.
Eugene B. Sledge, un muchacho de Alabama embebido de la historia de Estados Unidos y prendado de héroes como George Washington y Daniel Boone, es destinado a la 1.ª División de marines durante la segunda guerra mundial. Tras un intenso adiestramiento, Sledge se encuentra en medio de la batalla de Peleliu, donde «el mundo es una pesadilla de fogonazos, violentas explosiones y balas silbando». Para cuando se topa con el infierno de Okinawa es ya un veterano de combate, aún lleno de temor aunque ya no de pánico. Basándose en las notas que Sledge guardaba en secreto en una copia del Nuevo Testamento, Diario de un marine capta con sencillez y honestidad las experiencias de un soldado en el encarnizado teatro de operaciones del Pacífico. Aquí se recoge lo que salvó, amenazó y cambió su vida, así como el relato de cómo aprendió a odiar y a matar, pero también a comprender a sus semejantes. Un clásico de la literatura militar que ha sido la principal fuente de inspiración de la serie televisiva «The Pacific», producida por Steven Spielberg y Tom Hanks.
El 9 de marzo de 2020, el Consejo de Gobierno, decide cerrar en Madrid, todos los centros docentes por un período de 15 días. La noticia, corre como la pólvora por los grupos de WhatsApp, y miles de estudiantes se agolpan en las calles a celebrarlo. La emoción del momento les puede y no saben que realmente no hay nada que celebrar, estamos jodidos, muy muy jodidos. Aquellos que tengan la suerte de haber nacido en 2002, este año se enfrentan a las arduas pruebas de Selectividad, donde todo el temario se da deprisa y corriendo para poder llegar al examen, 15 días que pierden los estudiantes, 15 días que pueden determinar su futuro. Nadie sabe nada, y todos se desesperan, por los chats se promueven las discusiones, entre el bando que yo llamo catastrofista, aquellos que ven esto como una gran catastrofe, y a los ignorantes, aquellos que acuden rapidamente a celebrarlo sin percatarse de que no es una buena noticia para nadie. Yo fui de esos durante décimas de segundo. El país se detuvo, un virus había logrado que 42 millones de personas, parasen y se bajasen de un mundo que gira demasiado rápido, donde nos encontramos inmersos y hacemos las cosas sin saber por qué. Un virus, había conseguido lo que no habían conseguido muchos líderes espirituales en años. España estaba en pause, y nadie estaba dispuesto a volver a darle al play. Es por ello que escribo esto, una agenda, un diario, una memoria, de la letal crisis que sufrió España, tras el brote de COVID-19 que azotó todo el mundo en el año 2020.
Un topo en el movimiento neonazi español. Un año camuflado bajo la piel de un skinhead. De este modo cabe resumir la experiencia que Antonio Salas cuenta sin escrúpulos en este libro.Diario de un skin es la confesión de quien ha logrado, por primera vez, infiltrarse sin levantar sospechas en un grupo tan peligroso que no perdona los errores. Armado con una cámara oculta y parapetado tras una falsa identidad, construyó un personaje lo suficientemente convincente como para ganarse la confianza de sus «iguales» y vivir desde dentro la terrible realidad de los cabezas rapadas.El orgullo y los sentimientos de odio de los ultras, los actos violentos en los que participan, su implicación en las peñas futbolísticas, sus alianzas con grupos internacionales afines a través de Internet son, entre otros muchos, los aspectos que se desarrollan en estas páginas sin precedentes.Nueva presentación, revisada y actualizada, de la obra más emblemática del periodismo de investigación en nuestro país, Diario de un skin, que ha vendido desde que viera la luz en 2003, más de 300 000 ejemplares y que ha servido de base para condenar, en fechas recientes, a la organización Hammerskin España, además de ser el argumento de una producción audiovisual.El cuaderno de bitácora de un infiltrado en el entramado neonazi español. Una crónica de violencia y odio que desentraña las alianzas y el modus operandi de los cabezas rapadas de nuestro país.
«El “Diario irlandés” viene a ser una especie de punto de inflexión, una licencia nostálgica a caballo entre dos épocas: más allá de las “ruinas” y en vísperas inmediatas del “milagro”. Entre 1954 y 1957 Böll hace varios viajes a Irlanda —donde reside actualmente largas temporadas— y la sublima a su manera con un “Diario” como pretexto. Y digo como pretexto porque algunos capítulos (“Los pies más hermosos del mundo”, “El indio muerto de la Duke Street”) son, en realidad, narraciones intercaladas, y otros (“Llegada”, “Despedida”), ejercicios de estilo. En “Despedida”, por ejemplo, hay un cálido homenaje a Joyce disfrazado de pesadilla dublinesa. También se incluyen apuntes costumbristas (“Cuando a Seamus le entran ganas de echarse un trago”) y hasta un estupendo capítulo de práctica política (“Sacando muelas”). Con todo y ello el “Diario irlandés” es un libro hermoso y reposado, un Böll idílico, probablemente irrepetible». (Del prólogo de Víctor Canicio).
Este Diario político y sentimental es un libro abierto al vivir de la gente, al correr de la vida, con muchas caras conocidas, casi todas ilustres o nobles, y por estas páginas vamos viendo, como en una novela, el pasar de gentes queridas o famosas, de la luminosa juventud a la decadencia y la muerte. Francisco Umbral ha vuelto a hacer en este libro un prodigioso ejercicio de la memoria, la suya y la nuestra, paseándonos por delante personajes que son habituales, pero vistos a otro sesgo, y personajes que son queridos o significativos para el autor, elevando el género del Diario (cada vez más en auge en el mundo) a la categoría de gran género: Saint-Simon, Proust, Pla, Pavese, Kafka... El propio Umbral, en notas entrañables, confesiones luminosas o malignas, se vuelve del revés en estas páginas como nunca lo había hecho, y así el escritor nos da su revés de hombre y el hombre su revés de escritor que, como ser de lejanías (Heidegger), mira la vida con la triple perspectiva del tiempo, la distancia y la lucidez, sin esperanza, pero con contagiosa y bella resignación. Digamos que en el libro ocurren varias novelas —el devenir de distintos personajes— y palpita un interno hilo conductor, la propia vida de Umbral, tan volcada en la vida política, sentimental, íntima, pública, como en la de los demás, que sigue y nos acerca como el más eficaz novelista. La España de hoy y el Umbral de siempre quedan detenidos y vivos en estas densas y ágiles páginas.
Warhol ha marcado la escena artística y social de los últimos treinta años. Nombre señero del pop art en los sesenta, impulsor de aventuras vanguardistas en su célebre Factory —desde bandas de rock como la Velvet Underground hasta películas como Sleep o Lonesome Cowboys, sin olvidar algunos de los «happenings» más estrepitosos de la historia—, se convirtió, con su revista Interview, en el árbitro que decidía «quién era quién» en la sociedad neoyorquina. Homosexual, voyeur e infatigable frecuentador de todos los lugares de encuentro de ricos, modernos y famosos, después de su muerte ha seguido provocando, con sus diarios, grandes oleadas en los revueltos mares en los que navegara.Registro minucioso de todo lo que hacían y decían sus amigos y conocidos, por sus páginas desfilan desde Truman Capote a Jackie Onassis, desde Lennon y Yoko Ono a Donald Trump, Madonna y Mick Jagger, en una crónica de la modernidad escrita desde el centro del imperio. Una visión absolutamente franca de los personajes más célebres de nuestra época y de sí mismo, tal vez el personaje más misterioso y fascinante de toda esta glamourosa galería.«Lo que distingue a Warhol es su naturalidad, una inocencia de grandes ojos abiertos que recuerda la de los primeros cineastas. Warhol es, en más de un sentido, el Walt Disney de la era de las anfetaminas» (J. G. Ballard).
Desde que se suicidara en 1972, Alejandra Pizarnik ha ido adquiriendo poco a poco naturaleza de mito y perfil de leyenda. Autora de culto, venerada por varias generaciones de lectores, Pizarnik se cuenta ya entre las escritoras latinoamericanas más importantes del siglo XX. Su poesía ha cosechado numerosos adeptos incondicionales, ha creado escuela y la ha hecho mundialmente famosa. Ahora llegan por fin sus diarios, esperadísimos y totalmente inéditos, la obra de toda su vida, el laboratorio de su obra poética y ensayística, el testimonio estremecedor de su atormentada vida, la crónica de ese descenso al infierno de las palabras y de la existencia que fue su biografía. Ana Becciu, máxima especialista en la obra de la poeta argentina, ha llevado a cabo una selección de los diarios originales —un manuscrito monumental— a fin de publicar lo más esencial del pensamiento literario de la autora, de sus reflexiones acerca del amor y la muerte, de los resultados de su autoanálisis. En definitiva, estos Diarios constituyen una fascinante autobiografía, sin duda uno de los textos memorialísticos más importantes del pasado siglo.
Los textos que recoge este volumen, cuya escritura se extiende a lo largo de casi toda la vida de Pessoa, aportan una valiosa versión, de primera mano, sobre la vida y el espíritu de su autor. Algunos, como los que abarcan períodos de 1906, 1908, 1913, 1914 y 1915, fueron escritos propiamente como diarios por Pessoa. Otros constituyen apuntes en ocasiones clasificados por el autor como notas biográficas, notas personales, apuntes bibliográficos… En su conjunto, proporcionan al lector una visión única de las inquietudes personales de Pessoa, de su vida cotidiana, sus estrecheces materiales, de su formación humanística, filosófica y literaria, de sus intenciones vitales, y de su temprana madurez. Algunos de estos textos pertenecen a heterónimos menos conocidos como Charles-Robert Anon, Alexander Search o Fray Mauricio. Todo ello convive con páginas magistrales, textos a veces casi aforísticos, joyas que merecen figurar junto al resto de su obra y que sin duda harán las delicias de los admiradores de Pessoa.
Pocos escritos exploran la vida amorosa de una mujer con tanto detalle y sutileza como estos diarios no censurados de Anaïs Nin. En ellos se abordan abiertamente los aspectos físicos y psicológicos de esta autora que buscó actuar con plena libertad desde sus deseos sexuales y emocionales. En Incesto (1932-1934) aparecen por primera vez todos los fragmentos omitidos en publicaciones anteriores de sus diarios. Destaca la decisiva transgresión que supuso el incesto con su padre, y que subyace en la mente de una mujer en apariencia tan libre de ataduras y prejuicios. En Fuego (1934-1937), Anaïs Nin prosigue el apasionante relato de su vida. Esta vez la acción transcurre entre París y Nueva York, y aborda sus ya conocidas relaciones con Henry Miller y el psicoanalista Otto Rank. También escribe en estos diarios sobre la guerra civil española, Rafael Alberti, Alejo Carpentier o Constantin Brancusi.
Hay en la Rusia oriental una carretera mítica, una especie de Ruta 66 donde la historia del comunismo más sanguinario se cruza con el carácter extremo de la temperatura siberiana y su inherente despoblación. Los mapas la denominan Autopista M56. Los locales la conocen, simplemente, como Trassa (La Ruta). Sin embargo, su nombre más legendario es el de «Carretera de los huesos», porque bajo ese pavimento maltrecho por el que apenas circula nadie están enterrados, para darle firmeza al suelo, miles de los prisioneros del Gulag que la construyeron por orden de Stalin. El prestigioso reportero polaco Jacek Hugo-Bader, heredero de Ryszard Kapuscinski, ha recorrido en autoestop los 2.025 kilómetros de esta vía. El suyo no es solo un viaje al terrible pasado soviético que retrataron Varlam Shalamov o Aleksandr Solzhenitsyn. Es sobre todo un descenso al alma de las personas que hoy habitan este infierno helado. Hugo-Bader habla con los descendientes de los prisioneros. Escribe de estafadores y comerciantes de chatarra, de políticos corruptos y del crimen organizado. De intelectuales que sobreviven alimentándose de hongos y de espías y delatores. De chamanes y chequistas. De mineros que cavan fosas comunes mientras buscan oro, y de todos los adictos, convictos y héroes caídos que huyen de sus problemas y acaban en la región mas fría y remota de Rusia, un mundo aparte donde la Historia es un fantasma que se niega a marcharse. Un magistral viajero en la mejor tradición polaca. - Oliver Bullough, The Daily Telegraph. La narración esta surtida de diésel, vodka y lagrimas. Hugo-Bader tiene talento para desenterrar historias humanas sucias y extraer de ellas oro. - Kapka Kassabova, The Guardian.
El origen de Notas de viaje es el diario que redacto Ernesto Guevara cuando en diciembre de 1951, a la edad de veintitrés años, decidió emprender un largo recorrido en moto por Latinoamérica con su amigo Alberto Granado. Juntos, decidieron empezar su ruta en Córdoba para recorrer Argentina y continuar por Chile, Perú, Colombia y Venezuela. El Che acabó solo su viaje —tras ocho meses de periplo— cuando consiguió volver desde Miami a Buenos Aires para poner fin a lo que, sin duda, fue una gran aventura. «Un viaje, una cantidad de viajes. Ernesto Guevara en busca de aventuras, Ernesto Guevara en busca de América, Ernesto Guevara en busca del Che. En este recorrido de recorridos, la soledad se unió a la solidaridad, el “yo” se convirtió en “nosotros”». —Eduardo Galeano.
Este «diario secreto» del último año de la vida de Pushkin (el texto más buscado en Rusia durante casi siglo y medio, y sacado clandestinamente de la extinta U.R.S.S.) constituye algo más que el testamento vital del gran poeta ruso: es una visión insólita sobre la vida, la muerte y… el sexo. Y es que en vísperas del duelo que le costaría la vida, el gran Pushkin muestra en efecto la cara oculta del hombre al que admiró toda Rusia: su sed de escritura y de goce sexual, las dificultades de la vida conyugal, sus complejas relaciones con el zar Nicolás I, pero, sobre todo, su necesidad de coleccionar mujeres, a pesar de estar casado con una de las más grandes bellezas de la Corte imperial.
Henri-Frédéric Amiel: he aquí un filósofo que, después de haber permanecido sumergido en su labor docente durante casi cuatro décadas, siente de pronto la necesidad de comunicar al mundo el resultado de sus meditaciones, y con un solo libro, su «Diario íntimo», alcanza fama universal. Se trata de una obra autobiográfica, en la que Amiel, con meridiana plasticidad, anota las sensaciones experimentadas por su propio ser en relación con el mundo aparentemente tranquilo que le rodea. Su estilo conciso es de una belleza emotiva, que tiene la virtud de situar al lector ante un espejo en el que mirarse tal cual es en el ambiente que le toca vivir. Traducida a todos los idiomas del mundo, esta obra nos permite saber hasta qué profundidades puede llegar el análisis lúcido y desapasionado del alma humana.
Ordenado alfabéticamente como las enciclopedias de antes, este nuevo libro de Javier Pérez Andújar encierra un universo original, pues es el de sus orígenes y su pasado, y proyecta una mirada hacia lo que ha ocurrido en estos años recientes en los que todo ha cambiado. Así, el diccionario aquí es a la vez una colección de referentes, como los tebeos de Bruguera, el cine fantástico, la historia de Charlie Hebdo, el extrarradio, la televisión y la cultura popular, pero también la crónica de la gente anónima de los barrios y las calles de Barcelona, Madrid y otras ciudades, los movimientos de indignación, el miedo internacional y en general un canto a la vieja escuela. Y de entre unos artículos y otros, vemos emerger el mundo más íntimo del autor con capítulos que constituyen una verdadera síntesis generacional, escritos con la prosa más original y chispeante de la literatura española. En definitiva, un manual de la vieja escuela para no dejar de leer de principio a fin.
Este libro recoge la narración fidedigna de los trágicos episodios que tuvieron lugar en Barcelona la noche del 6 al 7 de octubre de 1934, realizada por quien fuera testigo directo de los mismos al encontrarse «en primera línea» para cubrir la noticia como corresponsal del diario El Debate. El libro fue publicado en el mismo año 1934, lo que indica que se trata de un reportaje de urgencia que sólo podía escribir, de manera tan minuciosa, un testigo ocular directísimo de tales acontecimientos. El reportaje cobra en estos momentos una gran actualidad, ya que demuestra que las tensiones centrífugas que se plantean ahora desde Cataluña al resto de España son las mismas, exactamente las mismas y a veces con las mismas palabras, que estuvieron en el origen y desarrollo de la rebelión separatista de octubre del 34.