La deseaba con todas sus fuerzas, y él siempre conseguía lo que deseaba… Desde el momento en que conoció a Tag Elliott, Renee Williams no pudo dejar de imaginar cómo sería sentir sus labios sobre la boca. No pensaba en otra cosa más que en sus besos y en dormitorios sin luz y llenos de promesas. Pe......
En cuanto volvió a ver a Shelly Brockman, el sheriff Dare Westmoreland recordó la ardiente pasión que habían compartido en otro tiempo. Entonces ella le dijo que era el padre de su hijo, el rebelde jovencito al que acababa de detener y sus fantasías se convirtieron en furia. Shelly había regresado a su ciudad natal para sacar a su hijo de las peligrosas calles de Los Angeles. Seguramente le vendría bien conocer a su padre.. lo que no sabía era qué tal le vendría a ella volver a ver al único hombre capaz de acelerarle el pulso. El único hombre al que no había podido olvidar a pesar de las heridas que le había dejado en el corazón...
Primero quiso seducirla... después amarla para siempre Thorn Westmoreland no era razón suficiente para que Tara Matthews volviera a creer en el amor... ¿o quizá sí? La bella pediatra y el duro empresario eran como el agua y el aceite. Entonces, ¿por qué Tara no podía borrar de su mente el recuerdo de sus tiernas caricias? Thorn deseaba a Tara desde el mismo día en que la conoció. Su primera intención fue seducirla y tener con ella una aventura sin compromiso alguno, pero antes de que pudiera saborear el triunfo, Tara había cambiado las reglas del juego...
Las mujeres lo consideraban perfecto... Podía llevarse a cualquiera a la cama con sus dulces palabras, y lo hacía a menudo. El bombero Storm Westmoreland había estado con muchas mujeres sin que ninguna dejara huella en él... hasta que un tórrido fin de semana con una sexy virgen hizo que el seductor Storm deseara algo más que la satisfacción física... Jayla Cole se encontraba en el ojo del huracán, incapaz de estar a la altura del atractivo Storm... o de soportar la tormenta emocional que él desencadenaba dentro de ella. ¿Se sentiría satisfecha con una relación meramente sexual... o seguía deseando formar su propia familia?
Dana Rollins tenía la certeza de que aceptar la petición que le había hecho Jared Westmoreland era el camino más directo hacia el desengaño y la desilusión. Hacerse pasar por la prometida de Jared no era precisamente algo que interesara a Dana, pero le debía un favor a Jared y éste sabía ser muy persuasivo a la hora de querer conseguir algo, por no hablar de sus apasionados besos. Así es que no tardó mucho en aceptar y, a su vez, en preguntarse cómo iba a poder sobrevivir a esa farsa sin terminar con el corazón destrozado. Pared, por su parte, era un soltero empedernido que no deseaba adquirir ningún tipo de compromiso, menos sentimental. Pero a medida que iba conociendo a su falsa prometida, más se preguntaba si aquella farsa no sería lo que en realidad andaba buscando.
Él siempre conseguía todo lo que deseaba... Había algo muy apetecible y Chase sabía que no figuraba en la carta de su restaurante. Su nueva vecina, Jessica, era tan deliciosa como los postres que preparaba. Tanto, que a Chase le resultaba difícil concentrarse en algo que no fuera la curva de sus labios. Jessica no podía negar el deseo que se respiraba en el aire cada vez que estaban juntos, pero tenía un secreto que podría destruir lo que estaba surgiendo entre ellos. Sin embargo, sus buenas intenciones flaqueaban cuando se enfrentaba al calor que desprendía su mirada.
Su deber era convertirse en padre y esposo... con todas las consecuencias Con sólo decirle que iba a tener un hijo suyo, Savannah Claiborne puso patas arriba la organizada vida de Durango Westmoreland. De pronto, aquella inolvidable noche de pasión se había convertido en una obligación de por vida para un soltero empedernido como él. Pero los hombres de la familia Westmoreland siempre cumplían con sus responsabilidades, así que dejar que Savannah criara sola al niño no era siquiera una posibilidad para Durango. Le pidió que se casara con él y ella aceptó... Con una condición: sería únicamente un matrimonio de conveniencia...
Había mucho más en juego que una noche de pasión... Ian Westmoreland creía que no volvería a ver a Brooke Chamberlain hasta que la vio aparecer en su complejo hotelero en busca de descanso. Brooke lo había traicionado hacía años y ahora Ian estaba seguro de que detrás de aquella visita había algo más. Ninguna mujer había estado tan cerca de encender la pasión que había dentro de él. Así que si quería descubrir lo que Brooke ocultaba, ¿qué mejor manera de hacerlo que a través de la seducción?
A pesar de su aspecto inocente, aquella mujer era una tentación a la que no podría resistirse.... El criador de caballos McKinnon Quinn estaba orgulloso de no permitir la entrada de mujeres en su rancho, por eso cuando Casey Westmoreland le pidió trabajo como adiestradora, McKinnon la rechazó tajantemente. Casey había prometido conseguir que McKinnon la contratara y convertirlo en su primer y único amante. Sin embargo después de cada apasionado encuentro, él seguía huyendo de ella. Era como si tuviera un secreto que no quisiera compartir con nadie, pero Casey se moría por descubrirlo...
Aquel matrimonio era un asunto de negocios… hasta que la pasión cambió las reglas del juegoEl millonario Spencer Westmoreland tenía el plan perfecto para salvar el viñedo de Chardonnay Russell: se casaría con ella si a cambio le daba un hijo. Pero Chardonnay no debía albergar la esperanza de que fuera a enamorarse de ella.Chardonnay no tenía más remedio que aceptar la proposición de aquel arrogante ejecutivo. El problema era que la simple idea de convertirse en esposa de Spencer le aceleraba el corazón y despertaba en ella un enorme deseo. Pronto empezó a querer lo que estaba estrictamente prohibido...
Siempre conseguía lo que deseaba... y ahora la deseaba a ella Patrina Forman no tenía la menor intención de enamorarse de un hombre con fobia al compromiso como Cole Westmoreland, y mucho menos iba a acostarse con él. Pero entonces una tormenta de nieve lo cambió todo. Atrapados durante tres deliciosas noches, Cole no tardó en hacer cambiar de opinión a Patrina gracias a sus increíbles dotes de seducción. Pero, ¿qué ocurriría cuando llegara el deshielo?
La única noche que Quade Westmoreland había pasado con Cheyenne Steele lo había marcado en cuerpo y alma, pero ella desapareció sin que Quade lograra siquiera enterarse de su apellido. Casi un año después, guiado por sus recuerdos y una fotografía, el atractivo agente consiguió descubrir su rastro... y también a tres bebés que se le parecían mucho. Saber que era padre hizo que Quade tomara su decisión aún más rápidamente: conquistaría a Cheyenne de cualquier forma. Sorprendentemente, la irresistible belleza parecía decidida a ponérselo difícil. Pero el destino de los Westmoreland estaba en juego y Quade lucharía por lo que era suyo.
Olivia Jeffries estaba deseando darle algo de emoción a su vida, y la oportunidad se le presentó cuando conoció a un apuesto desconocido en un baile de máscaras. La atracción fue instantánea y, la química entre ellos, muy intensa. Pero unos días más tarde descubrió que su nuevo amante no era otro que Reginald Westmoreland, el rival más odiado de su padre. Intentó resistirse a él, pero Reggie fue insistente. No dejaría que nada, ni siquiera el chantaje, impidiese que Olivia volviese a su cama. ¡Aquello sí que era dormir con el enemigo!
Estaba decidido a seducirla y a arrebatársela a otro hombre…Había un secreto en la herencia del magnate inmobiliario Dillon Westmoreland… y Pamela Novak poseía la clave. Aunque la belleza de cabello azabache estaba atrapada por su astuto novio, Dillon, el mayor del clan Westmoreland de Denver, no pudo resistir pasar una noche devastadora en sus brazos. Y después de esa pasión increíble… Bueno, cuando un Westmoreland reclamaba a la mujer que realmente deseaba, ¡no dejaba que nada los separara!
Si no puedes aguantar el calor… Ramsey tenía la norma de no mezclar placer y trabajo, pero su cocinera del momento era tan atractiva que empezaba a plantearse introducir un cambio en sus costumbres. Cuando la tentación fue más fuerte que la razón, descubrió que Chloe Burton era tan apasionada en la cama como buena cocinera. Aunque su relación era cada vez más tórrida, Ramsey se preguntaba cuáles eran los motivos ocultos de Chloe. Al descubrirlos, decidió olvidarla aunque fuera a base de duchas frías, pero pronto supo que había cometido un grave error: infravalorar el poder del corazón, especialmente, tratándose del de un Westmoreland.
A Derringer Westmoreland le persiguio durante semanas la imagen de una mujer cuyo rostro no podia recordar tras una aventura de una unica y fantastica noche. Pero deseaba volver a vivir aquella intensa pasion. Y cuando finalmente descubrio la identidad de la misteriosa mujer, se llevo toda una sorpresa; era Lucia Conyers, la mejor amiga de su cunada. Lucia no estaba por la labor de convertirse en una mas de las chicas de Derringer. Por primera vez en su comoda vida, iba a tener que llevar a cabo un cortejo. Y si queria ganarse el corazon de Lucia, mas le valia estar dispuesto a arriesgarse a perder el suyo.
Cuando conoció a Bella Bostwick, Jason Westmoreland la deseó tanto como a la tierra que ésta había heredado. De hacerle la propuesta adecuada, podría tener a la belleza sureña en su cama y las escrituras en sus manos. Un matrimonio de conveniencia no era lo que Bella tenía en mente cuando dejó Savannah, pero pronto descubrió que por acostarse con Jason bien merecía la pena.
Era sexy, atrevido… y solo jugaba para ganar. Los planes de reforma que Candice Hammond había hecho para el restaurante eran perfectos, o eso parecía, hasta que apareció el guapísimo millonario Derek Reeves. Discutían por todo y Candice estaba utilizando toda su habilidad negociadora para evitar que su proyecto de decoración acabara convertido en humo. Derek Reeves sabía qué hacer para vencer siempre; no debía perder nunca la concentración, ni dejar que nada lo distrajera. Pero la estrategia empezó a resultarle muy difícil de cumplir cuando se quedó a solas con Candice. Fue entonces cuando ambos se vieron obligados a poner todas sus cartas… y toda su ropa sobre la mesa.
Tendría su noche de bodas. Su matrimonio nunca se había consumado, porque el poderoso padre de la novia lo había impedido. Y después de ser expulsado de la ciudad, Quinn McCain se había propuesto olvidar a Evie Montgomery. Años después, la mujer con la que una vez estuvo casado apareció en su oficina para pedirle dinero. ¡Cómo habían cambiado las tornas! A cambio de ayudarla, Quinn deseaba lo único que le había sido negado, pero esa vez el juramento de amor no entraría en el trato.
Tras la muerte de su padre, la hermosa lady Clare descubre que debe casarse para proteger Deseo, la isla que acaba de heredar. Cuando su futuro marido, elegido por los guardianes de la isla, cruza cabalgando las puertas del castillo, lady Clare se siente completamente traicionada. Sir Gareth de Wyckmere no es el poeta que ella habría deseado, sino un temible caballero convencido de poder domar a su rebelde esposa. Sin embargo, Gareth no podrá impedir que lady Clare haga todo lo posible por amoldarlo a su ideal… El choque de voluntades enciende una pasión desbordante, al tiempo que una conspiración pone en peligro tanto su amor como sus vidas.