«Tiempos turbulentos» narra la historia de distintos personajes a lo largo de la última década del siglo XII, donde sus vidas se van cruzando irremediablemente en una serie de traiciones, pasiones, luchas, amores y desengaños en esa época turbulenta y violenta que fue la Edad Media. La fascinación que siente el autor por la aventura y los tiempos pretéritos da lugar a esta novela histórica repleta de acción, abusos y atrocidades, pero también llena de lealtad, amor y sensibilidad; una combinación que mantiene siempre viva la atención del lector. Por sus páginas desfilan reyes, nobles, villanos, caballeros, soldados, prestamistas, trovadores, clérigos, comerciantes y campesinos. Con el fondo histórico de la Tercera Cruzada, Gonzalo Iribarnegaray ofrece el reflejo de una época oscura pero a la vez luminosa, una época violenta pero al mismo tiempo pasional, una época en la que todo tenía fuerza y vitalidad y donde los personajes se movían al son de quien empuñaba la espada.
Antiguas culturas en la peninsula ibérica, antes de las épocas griega y romana. La novela se ambienta en el siglo V a. C. y narra las aventuras de un joven que quiere ser guerrero. Para ello debe superar una ceremonia de iniciación guerrera, tras lo cual se embarca en un viaje que le llevará por distintas ciudades u oppidas de la antigua Iberia. En estas aventuras se dan a conocer algunos de los usos y costumbres de una cultura de la que apenas se conoce nada, pero que ha llegado a nuestros días a través de los escasos restos arqueológicos encontrados hasta el momento. Los distintos pueblos íberos se extinguieron con la llegada y conquista por parte del Imperio Romano. Una de las batallas más célebres fue la toma de Numancia, donde quedó de manifiesto la fuerza y el tesón de estos pueblos para tratar de sobreponerse a la conquista y destrucción de su cultura. En este libro hay aventuras, amor, traiciones, batallas, desengaños...todos los ingredientes necesarios para sumergirse en un entretenimiento que a la vez pretende dar a conocer la existencia de esta cultura prerromana.
La guerra se recrudece. El enfrentamiento entre los pueblos íberos del este peninsular y los celtíberos del interior y el oeste se intensifica. Cástalo, en esta segunda parte, deberá enfrentarse a nuevos peligros. Viajará a nuevas ciudades, conocerá nuevas gentes, hará nuevos amigos y enemigos. En esta segunda entrega conocerás nuevos pueblos, dioses y costumbres de los numerosos pueblos que vivían en la península ibérica prerromana. Acción, aventuras, pasión y traiciones. Si te gustó la primera parte, esta segunda tiene todo lo necesario para hacerte vibrar de nuevo con intensas emociones, al tiempo que te seguirá mostrando una época de la que por desgracia tan poco conocemos. DIOSES Y REYES es la segunda entrega de TIEMPO ÍBERO. En ella podrás conocer como ha continuado la vida de los personajes de la primera entrega, así como saber lo que el devenir de la guerra les depara a cada uno de ellos.
La historia llega finalmente a su fin. En esta tercera parte llega el desenlace de la gran guerra librada por los pueblos del este y el oeste en la península ibérica prerromana. Nuestro personaje Cástalo, deberá tomar una serie de decisiones difíciles si quiere asegurar la supervivencia de su pueblo y su familia. Nuevos personajes, reencuentros con otros anteriores, batallas, traiciones, poder y ambición son solo algunos de los ingredientes de esta tercera parte que cierra una trilogía iniciada con TIEMPO ÍBERO, y continuada con DIOSES Y REYES.Como en los anteriores libros, en esta tercera y última parte se dan a conocer nuevos pueblos cuya existencia es desconocida para la gran mayoría del público en general. Con unos personajes y una trama ficticios, continuaremos recorriendo la antigua península ibérica, una que atesoraba una gran variedad de pueblos conocidos como íberos y celtíberos, y que la posterior conquista por parte del Imperio Romano, con su rica civilización y sus invencibles ejércitos, estuvo a punto de hacer caer en el olvido.
El joven Juan García regresa a las tierras vizcaínas de su familia, los Basondo, llamado por su abuelo Martín para que esclarezca los terribles crímenes que se están cometiendo en la comarca. Allí, sufre el rechazo del resto de la familia, que no tiene ningún interés en que se resuelvan las muertes. Además, encuentra grandes dificultades a la hora de amoldarse a la que una vez fue su tierra y que abandonó en su niñez; una tierra dura, oscura y peligrosa. La única ayuda que recibe, llega de la mano de Esteban Otxoa, «el lobo», veterano jefe de armas de la casa de los Basondo, curtido en mil batallas, que se convierte en su guía y protector. Nos encontramos en la segunda mitad del siglo XV, un tiempo en el que Bilbao —que se contrapone al arcaico mundo rural predominante— crece con pujanza, toma fuerza y no duda en defender con violencia sus intereses frente a sus distintos competidores. A medida que el lector se sumerge en la narración, va descubriendo un mundo cruento, en el que las diferentes familias vizcaínas están enfrentadas desde tiempos inmemoriales, fruto de odios ancestrales e intereses económicos, y en el que solventan sus diferencias por medio de la espada; traiciones, celadas y venganzas se suceden de forma trepidante y te atrapan desde la primera línea.
Una narración novelada sobre la campaña fascista de Mussolini en Abisinia.
Alessandro Marsala, profesor de literatura en la Universidad de Florencia, decide un día buscar a su padre, al que nunca conoció y al que dieron por desaparecido en Abisinia en 1936 durante la campaña del Duce en territorios etíopes.
Un viaje en el tiempo y en una historia olvidada que nos llevará a adentrarnos en el corazón de Etiopía.
«Tierra de héroes» no es una novela histórica, aunque su contexto es real y se puede rastrear en plena Edad Media Española. En una época de reyes y caballeros, de sacrificios y reivindicaciones, el nombre de Dios es invocado por unos y por otros. El personaje de la mujer, esencial y no siempre valorado, surge en la novela con fuerza y muestra todos sus registros posibles. El amor, el odio, las luchas, la Reconquista y la búsqueda de la identidad castellana se dan la mano en esta novela. «El Mester de Clerecía» y el «Romancero» ponen el contrapunto literario, al lado de las «Glosas Emilianenses». Un historia que humaniza la literatura y nos la permite disfrutar como nunca antes se había visto. Y, por supuesto, hay una figura que, aunque no es central, si ayuda a que avance la trama, se trata del Cid Campeador camino del exilio. Una niña es la clave para amansar las aguas de esta historia.
Chicago, 1887. La vida de Violet Montroe es una sucesión de rostros y nombres, gente que pasa por la casa de huéspedes de su familia sin dejar huella. Hasta que un ranchero de Colorado, llamado Christopher Anderson, se hospeda allí y, tras un vuelco del destino, le pide matrimonio. Violet acepta con la ilusión de tener un hogar propio y de limpiar y cocinar solo para su marido.
Sin embargo, en el rancho la aguarda una desagradable sorpresa: Christopher vive en una casa con otros seis hombres y solo se ha casado con ella porque necesitaba una criada.
Cuando no hay lugar al que regresar, solo se puede caminar hacia adelante.
Tierra de olvido es una de las más sólidas novelas que se han escrito sobre el mundo cátaro. De la mano de la joven pareja formada por Vierna y Guilhem, Antoni Dalmau nos traslada al Languedoc del siglo XIII, y recrea con extraordinaria intensidad las vicisitudes de unos pueblos en los que convivían diferentes culturas y religiones. Pero sobre el camino que emprenden juntos los protagonistas de esta historia se cierne la amenaza del fanatismo y la intolerancia. A raíz de la cruzada promovida por el papa Inocencio III, los cátaros vivirán una persecución sin tregua y se verán obligados a la clandestinidad o a emprender el amargo canino del exilio. Una impresionante novela contra el olvido.
Corre el año 1838. Las tierras de Pergamino son testigo de hechos oscuros, intensos y crueles; el odio y el rencor manchan con sangre el honor de las tradicionales familias criollas. Con Juan Manuel de Rosas al frente de la tiranía, un cruento enfrentamiento se desata entre unitarios y federales. El resultado es una batalla encarnizada que se proyecta hacia el interior de las familias. En el seno de una de ellas crece María de la Cruz, una adolescente con un pasado doloroso, que esconde su profunda pena tras una ceguera nerviosa. Su tía Matilde la conducirá con cariño y paciencia al encuentro de Facundo Godoy, un muchacho a quien el fuego desfiguró el rostro para luego sumirlo en la soledad, pero que descubrirá en María de la Cruz el bálsamo para sus heridas y el amor verdadero... Sin embargo, los jóvenes no cuentan con la malicia de Juan Arizmendi, un amigo de la infancia de Facundo, quien hará lo imposible para adueñarse del corazón de Cruz. En Tierra en sombras los personajes se nos presentan humanos, llenos de matices, contradictorios, fortalecidos o vencidos. Los protagonistas deberán vivir situaciones conflictivas en las que los celos, los sufrimientos, las dudas y hasta la más cruel de las traiciones se conjugan para separarlos. Un viaje al mundo del pasado, a un Pergamino que aún guarda en sus paredes las balas que tiñeron de sangre la política y la historia de nuestro país. Una historia de indios, de malones, de criollos y gringos brutalmente enamorados.
Un especialista en psicología militar enloquece al adentrarse en los entresijos de la maquinaria propagandística de la guerra de Vietnam. Un megalómano colono bóer ejecuta una espantosa venganza contra una tribu hotentote por haber desafiado el orden «natural» de su universo y haberle negado el respeto que el hombre blanco merece. En su primera novela, el futuro premio Nobel inauguraba algunos de los temas que desarrollaría en el resto de su obra. «Tierras de poniente» es una reflexión sobre los efectos del poder sin límites y un retrato despiadado de la obsesión y la culpa.
«Tierras de sangre» narra el drama humano y la incisión histórica que supuso, en 1922, la expulsión tanto de la población griega del suelo turco como de la población turca del territorio griego: un millón y medio de personas abandonaba así su ancestral morada tras una guerra lacerante —prefiguración de los conflictos históricos de nuestro pasado reciente— que convertía a la población civil en víctima desgarrada del nacionalismo étnico y del irredentismo más feroz. Más allá de las fronteras literarias que demarcan la novela histórica, la presente obra de Didó Sotiríu —una de las voces más comprometidas de la Grecia contemporánea— se ha convertido, por la tensión narrativa y poética de sus páginas, por la reconstrucción tan fiel como dramática de realidades y personajes, en una novela de enorme éxito y un testimonio desgarrador del conflicto europeo entre fronteras.
Se han contado los relatos de los reyes, de los nobles, de las batallas y de los grandes guerreros, pero quienes repoblaron la tierra yerma fueron hombres y mujeres que, con una mano en la estiba del arado y la otra en una lanza, arriesgaron sus vidas por repoblar las tierras perdidas. Entonces, cuando una peligrosa tropa acechaba —y junto a ella la muerte—, ellos dibujaron las fronteras que hoy heredamos.
En esta novela de prosa evocadora y exhaustivo rigor histórico, Antonio Pérez Henares nos traslada, a galope entre el siglo XII y el XIII, a las fronteras de la extremadura castellana por las sierras, las alcarrias, el Tajo y el Guadiana.
A través de sus personajes —cristianos y musulmanes, campesinos y pastores, señores y caballeros—, nos muestra la historia de los que sembraban y segaban, de los que levantaron las ermitas e hicieron brotar pasiones, amistades, rencores, pueblos y vivencias. Aquellos que dieron humanidad a la tierra y se convirtieron en la semilla de nuestra nación.
Como miembro del ejército de Alejandro de Macedonia, Kineas ha sido testigo de las acciones del dios de la guerra: escenas de heroísmo, como salidas de la mente de Homero, y otras de horror, más tenebrosas que sus propias pesadillas. Dos coronas de laurel, así como algunas cicatrices que perdurarán por siempre, reconocen su valor al mando de la caballería griega. Pero, al regresar a Atenas, Kineas encontrará que la recompensa a los servicios prestados no es la gloria sino la vergüenza y el exilio. Sin nada más que su reputación militar, Kineas accederá a conducir un grupo de veteranos hacia la ciudad de Olbia cuyo Tirano está ofreciendo dinero a quien entrene a su caballería de élite. Pronto Kineas y sus hombres se verán involucrados en las confabulaciones del Tirano contra sus propios ciudadanos, en tanto que la destrucción amenaza a Olbia desde fuera. Mientras Alejandro ha estado conquistando el mundo, Macedonia se ha tornado hambrienta de oro y grano, y Olbia está en su camino. Kineas se enfrente entonces a la máquina de guerra más mortifica que jamás haya existido con un ejército recién entrenado, un puñado de mercenarios y los imprescindibles escitas, antiguos aliados de Olbia. Apesadumbrado por las oscuras profecías de una vidente escita y perseguido por una deslumbrante mujer guerrera cuyo amor podría traer la muerte, Kineas deberá urdir un osado plan a fin de evitar el destino que los dioses parecen haber preparado para él.
Kineas de Atenas ha recorrido un duro y sangriento camino desde que comandó la caballería ateniense en la campaña de Alejandro Magno contra los persas. Ahora que las viejas heridas le producen dolores atroces y sus sueños están poblados de compañeros de armas muertos, por fin puede darle la espalda a la guerra y escapar de un destino como mercenario. La princesa guerrera Srayanka, del clan de los Manos Crueles, lleva en el vientre un hijo suyo, y una vida nueva aguarda a nuestro héroe en las fértiles costas del Euxino. Pero lejos de allí, al otro lado del mar de hierba, Alejandro sigue empeñado en la conquista del mundo. Sus ejércitos en Afganistán están listos para aniquilar a los escitas orientales si estos no se someten. El honor obliga a Srayanka a luchar con los hombres de su clan contra «el monstruo», y Kineas sabe que no tiene más remedio que seguirla y enfrentarse al que ha sido ala vez su héroe y su perdición. Conducir un ejército en tan épica marcha, atravesando territorios hostiles hacia los confines del mundo conocido, pondrá a prueba la destreza y el coraje de Kineas hasta límites insospechados. Y aguardándole al final del viaje habrá un hombre a quien antaño adoró, el hombre cuyas falanges han hecho morder el polvo a cuantos ejércitos se ha enfrentado y cuyas victorias lo han convertido en un dios.
Tras la muerte de Alejandro Magno en Babilonia, el mundo se ha convertido en un gigantesco campo de batalla en el que sus generales se disputan el inmenso imperio por él creado. Elegir bando, y saber cuándo cambiar, es un asunto de vida o muerte, pero a veces ni siquiera alinearse con los vencedores garantiza la supervivencia. Los gemelos Sátiro y Melita, herederos de un próspero reino a orillas del mar Negro, tienen que aprender deprisa esta lección cuando una infame traición los convierte en desesperados fugitivos. Acompañados por su preceptor, el espartano Filocles, deben emprender un peligroso viaje hacia el oeste, con unos implacables asesinos pisándoles los talones, esperando hallar refugio en Alejandría, la ciudad más extraordinaria del mundo antiguo. En medio de la tormenta y convertidos en peones de la enmarañada red de alianzas y conspiraciones que conducirá a un monumental enfrentamiento final, Sátiro y Melita tendrán que volverse adultos sin dilación y atender a la llamada del destino.
En el capítulo anterior de la saga, Tirano. Juegos funerarios, los gemelos Sátiro y Melita, herederos de un próspero reino a orillas del mar Negro, son obligados a exiliarse tras el asesinato de su madre a manos de Herón, un antiguo camarada de su padre. Ahora Herón gobierna el reino que les pertenece, pero no sabe que Sátiro y Melita se han endurecido en las batallas libradas por los sucesores de Alejandro Magno. Esta vez, en cuanto reúnan sus fuerzas nada ni nadie les impedirá planear su venganza.
Una novela ambientada en la mayor guerra de la historia de la humanidad.
Hacia 305 a. C., dos hombres se enfrentaron por la hegemonía del Mediterráneo: Tolomeo, señor de Egipto, y Antígono el Tuerto, señor de Asia. Y, entre ambos, la estratégica isla de Rodas y la ciudad fortificada del mismo nombre, que ninguno podía permitirse ceder al enemigo.
Para Demetrio, el inteligente aunque jactancioso hijo de Antígono, Rodas era una presa que debía tomarse a toda costa. Rodeada por su poderosa flota, con su ejército acampado ante las murallas y las más ingeniosas máquinas de sitio jamás construidas apuntando hacia ella, la ciudad parecía condenada a sucumbir. Pero atrapado tras sus murallas había un hombre resuelto a salvarla de la destrucción.
Un hombre con la valentía y la visión para volver las tornas contra Demetrio y su abrumador poderío militar. Un hombre que, apoyado por sus amigos más íntimos y la mujer a quien ama, sencillamente no puede permitirse fracasar. Un hombre llamado Sátiro.
El descomunal y mortífero conflicto entre los antiguos generales de Alejandro Magno en la lucha por dominar su imperio ha llegado a un punto muerto cargado de tensión. Lisímaco, sátrapa de Tracia; Casandro, rey de Macedonia; Tolomeo de Egipto; Antígono, señor de Asia; Seleuco, señor de Babilonia; ninguno parece capaz de asestar el golpe definitivo. Incluso Estratocles, el astuto ateniense que siempre da la impresión de ir dos jugadas por delante, se ha visto traicionado inesperadamente. Con su vida —y la de la ciudad a la que sirve— pendiente de un hilo, ha llegado la hora de poner otra ficha en el tablero. Pues escondido en las remotas montañas de Hircania hay un muchacho que lo podría cambiar todo: Heracles, el hijo de Alejandro.
‘Tlacaélel, el azteca entre los aztecas’ cuenta la historia de un joven azteca que recibe el emblema sagrado de Quetzalcóatl y es erigido como Sumo Sacerdote. La novela te llevará por aquel glorioso pasado de la gran capital México-Tenochtítlan, cómo fue construido y fortalecido el imperio a través de intrigas, hechos heroicos, misticismo y sobre todo por grandes hombres, la gran raza de bronce. Libro indispensable para todos aquellos que se interesan en el Imperio azteca. Un relato interesante y detallado del poder que Tlacaélel tenía en el imperio sin ser emperador donde personajes conocidos como Moctezuma, Tizoc, Axayacatl y Citlalmina son parte fundamental de esta obra que mezcla los datos históricos y la fantasía del autor. «Porque no siendo rey, hacía más que si lo fuera… ya que no se hacía en todo el reino más que lo que él, Tlacaélel mandaba». (Códice Ramírez)