Martín de Viloalle asumirá durante su vida las consecuencias de la única decisión que toma con plena libertad: acompañar a los jesuitas expulsados de España el 2 de abril de 1767. Esa y otras circunstancias tragicómicas le llevarán hasta Roma, los estados alemanes, el reino de Dinamarca, el París revolucionario y aún más allá. En esos años, será miembro nada honorable de una sociedad marginal, itinerante, filosófica, artística o estafadora, dedicada a vagar de corte en corte para entretener el gusto, el sexo, el intelecto y, sobre todo, el tedio de la clase superior. Ilustrados y aventureros: personajes que construyen su identidad con una máscara permanente hasta alcanzar claves muy personales sobre el engaño de la condición humana. Visionarios corruptos quizá, pero visionarios al fin, que adulando a la nobleza del Antiguo Régimen modelaron las apariencias de una nueva época. La nuestra.
Finalista del Premio Nadal 2008.
Una restauradora de viejos documentales que trabaja en la Filmoteca Nacional encuentra una fotografía que despierta su interés y que va a trastocar su existencia. En ella aparece un grupo de componentes de las Misiones pedagógicas, un proyecto idealista de tiempos de la República que se proponía difundir la cultura por los pueblos de España.
Han pasado siete décadas, pero los rostros sonrientes del grupo de artistas y maestros, que se autodenomina El Club de la Memoria, ya no van a abandonar a la joven, de forma que sus miedos y sus sueños se van entrelazando con las peripecias y las emociones de aquellos otros jóvenes tan lejanos cuyas vidas fueron atravesadas por la guerra y el exilio.
Los miembros de El Club de la Memoria se comprometieron a dejar constancia escrita de su aventura vital, lo que nos permite revivir —a través de diarios, cartas y recuerdos que la narradora va recuperando a lo largo de la geografía europea— los amores e ilusiones, pero también las imposturas y traiciones, de unos hombres y mujeres que de otra forma habría borrado el tiempo.
Rien ne va plus ; no hay vuelta atrás, todos los caminos están abiertos. Una ciudad de provincias de la Alemania del Este, enero de 1990. Enrico Türmer, hombre de teatro y escritor no confeso, le da la espalda al arte y entra a trabajar en un periódico recién fundado. Aparentemente liberado de la necesidad de describir el mundo, Türmer se vuelca en la vida profesional. Guiado por su Mefistófeles, el omnipresente Clemens von Barrista, esa alma artística pronto desarrollará una inesperada tendencia arribista.
De ese cambio vital hablan las cartas de Enrico Türmer, escritas durante la primera mitad de 1990 a tres de sus amores: su hermana Vera, su amigo de infancia Johann y la inalcanzable Nicoletta. Al tiempo que va descubriendo el capitalismo por sí mismo y relata sus aventuras de hombre de negocios, surge lo que Türmer llevaba tanto tiempo soñando: la novela de su vida, en cuyos episodios se desgrana y refleja la historia contemporánea. Poco a poco, la contradictoria figura de Türmer se irá convirtiendo en una alegoría de la incertidumbre de la vida anterior, sí, pero también de la vida nueva.
Esta espléndida novela supone la consagración literaria de Ingo Schulze como un gran narrador, capaz de evocar como nadie las situaciones absurdas de la época que vio la caída del muro de Berlín y dio forma a nuestra sociedad.
Un libro que conmueve, que no deja indiferente. Schulze coloca un espejo frente al lector y le obliga, quiera o no, a plantearse su propia existencia.
Timothy Gaylor, un banquero discreto y oscuro, parece haber vivido en todas las épocas y conocer bien las pasiones y los anhelos de los hombres. Sabe del ansia de poder, y de la utilidad del poder. En pleno torbellino electoral norteamericano, alguien está moviendo piezas con una astucia inaudita. Los propósitos del banquero que ha visto pasar los siglos, y que contempla el mundo desde los ventanales de Manhattan, parecen no encajar con el mensaje del más humilde candidato a la presidencia de Estados Unidos, Christian Earth, que predica el amor y la concordia… sólo que Christian Earth es hijo de Gaylor, lo que muchos desconocen. Y para completar el rompecabezas, otro candidato muere asesinado en una fiesta en la que están todas las fuerzas vivas, y una fundación debe decidir a qué campaña dedica sus fabulosos fondos; una mujer muy bella sabe demasiado sobre demasiados hombres poderosos, con la mafia de por medio. Timothy Gaylor recibe entonces una visita del Vaticano…
En la vida, en el paisaje, en la sociedad, priman los castillos altivos, que todo lo dominan, mientras a su alrededor subsisten regiones de sombras, miserables o entrañables. Novela coral aunque centrada en dos grandes protagonistas, Cada castillo y todas las sombras constituye un formidable pulso a la Barcelona de hoy, a través de sus contradicciones, de su pasado, de su tragedia e ilusiones. La acción transcurre en tres días y recrea las peripecias vitales de Pelai Puig Alosa y de Ginés Jordi Martigalà, los dos extremos de la humanidad que pugna en la gran ciudad, en la que pululan poetas, ejecutivos, el presidente de la Generalitat, el aliento agrio de la guerra civil. Entre medio de ambas esferas, la novela da cuenta de las pasiones, la lucha política, la tensión económica e ideológica que se desencadenan a raíz del hundimiento de un suburbio. Con un estilo rico y matizado, pletórica en su tejido imaginativo y real, Cada castillo y todas las sombras es una obra original e importante de nuestras letras, como la figura de su autor.
Cada castillo y todas las sombras aspira a mostrar no un fragmento, ni una visión lateral, sino la imagen global de una sociedad a partir de sus extremos. Por su ambición literaria, Porcel es hoy el más «tomwolfeano», si no el único, de los escritores españoles.
Claudia, la joven protagonista de esta novela, nos cuenta la historia de un amor absoluto, el que ella y Max van a tener el coraje de vivir. Estaban destinados a no alcanzar el fruto del Árbol de la Ciencia, y sin embargo se atrevieron a decir: «Nada está escrito». El deseo les hará enteramente fuertes y enteramente libres.Como si fuesen dos nuevos arquetipos, Claudia y Max ni siquiera son conscientes de su audacia: la de aquellos que han decidido ir más allá del bien y del mal. Todo en su historia, la trepidante sucesión de los hechos, los escenarios míticos, las desarboladas vidas de los personajes que aquí comparecen, forman el asombroso mecanismo que ellos harán saltar por los aires.Y al final el lector comprende algo decisivo: tenía derecho a conocer esta maravillosa historia por sí mismo sin que nadie se la anticipara. Por encima de sus brillantes logros estéticos, Los confines es una novela sobre la conquista del Paraíso que le fue arrebatado al ser humano, una novela radical y feliz que conmoverá y hará pensar a todos. Una obra que irrumpe como un arroyo de aguas claras en la literatura moderna.
«Me llamo Saad Saad, que en árabe significa Esperanza, Esperanza y en inglés Triste, Triste.»
Saad quiere huir de la caótica e insoportable situación en Bagdad, llegar a Europa en busca de libertad, de un porvenir.
¿Pero cómo atravesar las fronteras sin un dinar en el bolsillo?
¿Cómo, al igual que Ulises, enfrentarse a las tempestades, sobrevivir a los naufragios, escapar de los traficantes de opio, ignorar el canto de las sirenas transformadas en rockeras, sustraerse a la crueldad de un carcelero ciclópeo o zafarse de los hechizos amorosos de una Calipso siciliana?
Violento, cómico, trágico, empieza el viaje sin retorno de Saad. Entre aventuras y tribulaciones, acompasada por las conversaciones con un padre tierno e inolvidable, esta novela narra el éxodo de uno de esos millones de hombres sin papeles, clandestinos, que día a día buscan un lugar en el mundo.
«La aventura se presenta y, como siempre, lo hace en forma de miedo y amenaza. La hija del cabecilla hampón del barrio ha sido violada y asesinada. Los dedos acusadores apuntan al Watusi, un individuo famoso en el barrio al que Pepito el Yeyé parece tener como héroe. Fernando Atienza y Pepito parten en busca de ese misterioso personaje para avisarle de que fuerzas despiadadas le buscan para vengarse. Ese día, el 15 de agosto de 1971, la pareja recorrerá la ciudad desierta bajo una interminable tormenta de verano, un lugar que se irá convirtiendo poco a poco en el espacio de los sueños de cada uno de nosotros; el bosque brumoso donde escapamos, donde nos aterrorizamos, donde conocemos el misterio, la magia, el sexo, el placer, la mentira, el desengaño y las convicciones que nos convierten en los seres humanos que, por suerte o por desgracia, acabamos siendo. En esa búsqueda que se convertirá en fuga, el adolescente Fernando Atienza averiguará también quién es el Watusi. Y el Watusi es el rey del ritmo, un bailarín pero también un criminal, un filósofo, un mercenario, el guardián de la alegría y el mensajero de la muerte, un secreto que recorre las calles como el viento, aquello que nuestra imaginación quiere que sea y, a lo mejor, muy poca cosa».Con estas palabras, esbozaba su autor el arranque de El día del Watusi, que incorpora en la presente edición las correcciones que había ido introduciendo al manuscrito. Francisco Casavella murió repentinamente a los 45 años, el 17 de diciembre de 2008, mientras escribía una nueva novela que recuperaba a Fernando Atienza, protagonista y narrador de la presente. Tampoco él había podido abandonar al Watusi.Posiblemente sea ésta una obra que cifra su modernidad en una cualidad mitificadora, resultado de una sutilidad y plasticidad infinitas. La leemos así como una novela llena de inventiva, en eterno movimiento, que posee el don de representar el desorden contemporáneo, y de vencerlo. La obra de un autor que gana nuevos lectores día a día.
Sandra ha decidido retirarse a un pueblo de la costa levantina: tiene treinta años, ha dejado el trabajo y, embarazada de un hombre del que no está enamorada, pasa los días en una suave inapetencia, intentando aplazar la decisión de qué hacer con su vida.En la playa conoce a los Christensen, un matrimonio de octogenarios noruegos instalados desde hace años en el pueblo que la ayudan tras sufrir un mareo y la tratan como los abuelos que no ha tenido. Karin y Fredrik parecen la solución a los problemas de Sandra e incluso le ofrecen un sueldo por acompañar a Karin a las sesiones de rehabilitación, los paseos o las compras.Nadie diría que esas tres vidas unidas al azar constituyen la razón de ser de Julián, un anciano que acaba de llegar de Argentina y que sigue paso a paso las idas y venidas de los noruegos. Un día Julián aborda a Sandra y le revela detalles del pasado absolutamente insospechados. Le cuenta, por ejemplo, que él es un superviviente del campo de Mauthausen, el campo de concentración que a Sandra sólo le suena por alguna película o algún documental, un horror en blanco y negro que no tiene nada que ver con ella. Y que los Christensen no son lo que aparentan ser. Aunque al principio Sandra no le da mucho crédito a Julián, poco a poco empezará a mirar de una forma nueva las costumbres, los amigos, las palabras y los silencios de la pareja de ancianos, sin darse cuenta de que el fin de su inocencia está poniendo su vida en peligro.Lo que esconde tu nombre es un subyugante relato de terror sin efectos sobrenaturales, y es también, y ante todo, una absorbente novela sobre la memoria y la redención de la culpa.
Un psiquiatra de La Sorbona especializado en mentes criminales viaja a la Barcelona de 1956. Quiere realizar un estudio sobre el caso de Teresa Pla Meseguer, llamada La Pastora, una mujer acusada de veintinueve muertes.Se trata del maquis más buscado por la Guardia Civil, y se ha convertido en una leyenda popular porque sigue libre. Sólo un periodista barcelonés parece tener claves importantes en torno al personaje, pero lo que el viajero francés le propone es algo fuera de lo normal: no desea datos sobre Teresa sino un encuentro cara a cara.El idealista Lucien Nourissier y el cínico Carlos Infante emprenderán ese viaje a las tierras del Maestrazgo, donde se esconde su casi imposible objetivo. A lo largo de su investigación deberán sortear la vigilancia de los guardias, distinguir las pistas verdaderas de las falsas y esquivar los mil obstáculos que les salen al paso. La novela se convierte entonces en una búsqueda, en una huida, en una aventura que nos descubre las miserias y la humanidad de una España terrible.
Si naces en Afganistán en el lugar equivocado y en el momento equivocado, puedes estar seguro que aunque seas un niño ágil como una cabra puede haber alguien que reclame que tu vida le pertenece. Sobre todo si tu padre muere mientras trabaja para un hombre poderoso y la mercancía del camión que conducía se pierde. En ese caso, puede que, para evitar que te capturen, tu propia madre te diga que tenéis que salir de viaje y te lleve a Pakistán, donde, tras hacerte prometer que te convertirás en un hombre de bien, te abandone a tu suerte.
Ese trágico gesto de amor está en el inicio de la prematura vida adulta de Enaiatollah Akbari, y del increíble viaje que lo llevará a Italia pasando por Irán, Turquía y Grecia. Toda una odisea que lo pone en contacto con la miseria y la nobleza de los seres humanos y durante la que, pese a todo, conserva la ironía y una maravillosa sonrisa.
Las partidas de tenis al mediodía, las demostraciones de popularidad en la tribuna del Barça, los vermuts en el Turó Parc y las tardes de compras en la Illa Diagonal: esa es la plácida existencia que el empresario Amadeu Conill, un prohombre de la burguesía barcelonesa en caída libre, tuvo que sacrificar en el verano de 2007 para salvar su empresa y su propia vida.
La primera novela de Cristian Segura describe con ironía los dilemas existenciales y las miserias humanas que afrontan el protagonista y su familia, el clan de los Conill. La obra sigue la estela de otros retratos literarios de la sociedad catalana, pero más que de un relevo generacional o de la transformación de una sociedad, La madriguera es la historia de una era que finaliza a ritmo de máquina: de la máquina de la globalización.
Nacido en el seno de una familia de la burguesía barcelonesa, el pequeño Adrià estuvo sometido desde su más tierna infancia a la tiranía de unos padres obsesionados en hacer de él un prodigio de las letras y de la música. Su único consuelo eran aquellas tardes en la tienda familiar de antigüedades o en el laberíntico piso del Ensanche, donde se refugiaba dando rienda suelta a la imaginación junto al sheriff Carson y el indio arapaho Águila Negra, dos muñecos que pronto se convertirían en sus inseparables confidentes. Precisamente en el despacho de su padre, Adrià supo por primera vez de la existencia del Vial, un violín Storioni codiciado por músicos y coleccionistas de todo el mundo, cuya historia escondía un sinfín de crímenes y episodios poco edificantes. El modo en que este instrumento acabó en manos de los Ardèvol marcará para bien y para mal el destino de Adrià y el de sus seres queridos.
Premio de Novela Francisco Casavella 2011
Guillermo Ruano, joven novelista con una única obra publicada, recibe de su editor un peculiar encargo: escribir la biografía oficial de la recién fallecida Tania con i®, considerada por antropólogos, sociólogos e historiadores un icono del siglo XXI, como lo fueron del XX Kate Moss, Gandhi, Lady Di o Ernesto Che Guevara.
Perseguida por la CIA, creadora de tendencias en distintos ámbitos, autora intelectual de Yomango, líder de la contracultura, inventora del PierZen, defensora de los desvalidos e inspiradora de la Generación Nocilla, el fenómeno Tania con i® supuso todo un revulsivo empresarial que aceleró la salida de la crisis económica capitalista.
La obsesión por la biografiada y la comprometida vocación literaria de Ruano, le llevarán a hurgar más allá de lo visible en busca de una verdad que sólo parece interesarle a él.
Tras 55 ediciones y 40 millones de ejemplares vendidos, la 56.ª edición de la biografía póstuma de Tania con i® se presenta ampliada con un epílogo especial escrito para la ocasión por el siempre impasible e insobornable Willy Ruanowski.
Un siglo de la historia de Europa que tan solo dura el fugaz momento en que una bala sale de un fusil y llega a la frente de un soldado en los campos de batalla de Verdún.Las trincheras de la Gran Guerra; el derrumbe de la despreocupada e indolente Viena fin de siècle; la Praga mágica de autómatas y leyendas, atravesada por los totalitarismos; el campo de concentración de Terezín y la clínica de exterminio de Hartheim; el mundo de la demencia en Steinhof, la ciudad de los locos; la cárcel de represión comunista de Léopold. Son los escenarios para la memoria del siglo XX que se suceden a través de una saga invisible que recorre todo un siglo de la historia de Europa, mientras un joven checo, Jaroslav, tras desertar del ejército austrohúngaro aguarda en las trincheras de Verdún el fin de la batalla y de la guerra.
Agosto de 2001. Un profesor argentino llega a una universidad en el sur de los Estados Unidos para dar un curso de literatura en español. Todo parece perfecto y en su primera clase descubre algo prohibido pero irresistible: una de sus alumnas, Jennifer, una chica deslumbrante y ambigua, con la que inicia una serie de encuentros sexuales cada vez más arriesgados, en medio del secreto y el disimulo. Ninguno de los dos sabe que ese breve período juntos cambiará sus vidas para siempre y que un acontecimiento brutal acabará por trastocar su mundo de la manera más inesperada.Intensamente carnal, irónica y dramática, Yo también tuve una novia bisexual registra, con la precisión de un diario, «el pasaje ensimismado de los cuerpos que de la nada llega a todo» y recobra para el sexo con audacia toda su complejidad y dimensión literaria.
Hace exactamente un año que Pablo Rouviot, un reconocido psicoanalista, vive atormentado por el final de una turbulenta historia de amor que le ha hundido en la angustia y la soledad más insoportables. A sacarle de su letargo llega Paula, una joven de 27 años que irrumpe en la vida de Pablo con una historia que, aparentemente, nada tiene que ver con él. Se trata del asesinato de su padre, un poderoso empresario cuyo cadáver apareció acuchillado en un descampado cercano a su casa meses atrás. Todo apunta a que el asesino es el hermano de Paula, Javier, que sufre graves problemas psicológicos y para el que la joven necesita que Rouviot elabore un informe que le exima de responsabilidad penal.Sin embargo, antes de dar una respuesta, Pablo quiere saber más sobre el caso y, sin darse cuenta, acaba enredado en una trama siniestra en la que nada es lo que parece: médicos, abogados, policías y amantes se confabulan para mantener a salvo una historia familiar llena de secretos. Desde ese momento, el día a día de Rouviot se convierte en una pesadilla en la que sólo le mantiene a flote una obsesión: descubrir la verdad, por muy dolorosa que sea.
En los años ochenta, cuando Verónica tiene 9 años, descubre en la vieja cartera de su padre la fotografía de una niña que jamás ha visto antes, una foto acerca de la cual su intuición le dice que mejor no preguntar. Ha vivido toda su vida con la percepción de que, tras la tristeza de su madre, las discusiones y los silencios en casa, había algo de lo que nadie parecía querer hablar. Años después, la muerte de la madre enfrenta a una Verónica adolescente con un pasado del que lo desconoce casi todo, un pasado robado que la acerca más y más a esa niña de la fotografía, en una búsqueda sin retorno cuyo final Verónica está muy lejos de imaginar. Un gran secreto y una vida perdida guiarán a Verónica en la carrera hacia una verdad difícil de desentrañar y que se empieza a revelar como muy peligrosa.
Román es un profesor universitario jubilado al que invade la nostalgia de los días luminosos de la pedagogía en que fascinaba a sus alumnos despertándoles el amor por el saber y ayudándoles a alcanzar una vida más noble y más alta. Entre sus antiguos alumnos están Elena y Eugenio, una pareja de médicos a los que todavía trata y con los que ha establecido complejas relaciones en lo intelectual y en lo sentimental. Por otra parte, halagado por el interés hacia su persona que demuestra un joven periodista, Héctor, permite que éste entre en su vida sin sospechar que el pasado torturado del nuevo personaje le atrapará en una situación en la que es incapaz de tomar decisiones, de comprometerse con el drama al que asiste. Con una escritura tensa, vibrante, que deslumbra tanto por los hallazgos plásticos como por la indagación filosófica, El temblor del héroe es a la vez un acto de fe en la literatura como territorio donde plantear los grandes asuntos: la confianza y la traición, la posibilidad de arrepentimiento, la culpa, la cobardía, el valor, el sentido de la existencia.
La esfinge teme al tiempo y el tiempo teme a la esfinge, dice un refrán en Egipto. Hay obras humanas que compiten en su eternidad con el propio tiempo. De algunas de ellas habla este libro.El autor ha viajado por todo el mundo a su encuentro, desde las ruinas de Roma a los colosos de Memnón en Egipto, desde los farallones de Capri a la biblioteca de Celso en la antigua Pérgamo, desde las puertas de las murallas de Constantinopla a las Torres Gemelas de Nueva York, desde el ejército de terracota de Xi’an en China hasta la ciudad perdida de Shangri-la.Vencer al tiempo siempre fue un reto para el hombre de cualquier época. Y a veces lo ha logrado a través de las arquitecturas, las obras artísticas o los muchos y variados artificios inventados por su imaginación.Donde la eternidad envejece es una apasionada e inteligente invitación al viaje, a la lectura, al conocimiento y la contemplación sensual e intelectual.