Entre el 11 de enero de 1944 y el 9 de abril de 1945, Abel J. Herzberg estuvo prisionero en el campo de concentración alemán de Bergen-Belsen, «uno de los centros de tortura más terribles jamás concebidos por el espíritu humano». Muy poco después de su liberación, el Groene Amsterdammer, un influyente semanario holandés, solicitó a Herzberg una serie de artículos —recopilados bajo el título de Amor fati, locución latina que alude a la voluntad de abrazar el propio destino— sobre los crímenes de guerra cometidos por los nazis. En sus escritos, Herzberg hace un intento por comprender la naturaleza del mal, al tiempo que expresa su esperanza de que lo ocurrido en los lager contribuya al conocimiento de hasta qué extremo es capaz de llegar el hombre cuando se deja gobernar por la sinrazón.
En el mundo clásico, el pensamiento religioso, los hábitos sociales y la divergencia entre lo masculino y lo femenino dieron lugar a un peculiar arte erótico cuyo estudio ayuda a entender la compleja naturaleza de estas sociedades.
Carmen Sánchez no plantea aquí un ensayo sobre la sexualidad en el mundo griego y romano, sino un recorrido por el imaginario visual del erotismo clásico, donde los textos se han tratado como ilustraciones con la intención de entender, explicar y, sobre todo, oír las imágenes. Este libro explora el erotismo en el arte de la cultura clásica, desde la invención del desnudo público hasta la construcción de las populares escenas de cortejo homosexual masculino, desde la utilización del falo como amuleto hasta la exploración de la alteridad del erotismo sobrenatural y mágico.
Cuando Pandora abrió su famosa caja y la diosa Ápate escapó de su prisión, el engaño y la mentira se extendieron por todo el mundo. Desde entonces, Ápate vive entre nosotros y, según argumenta Gescinska en este ensayo, todos descendemos de ella. Pero como hijos de Ápate podemos rebelarnos y ofrecer resistencia a la tentación de la mentira, lo cual nunca fue tan necesario como en estos tiempos de posverdad, hechos alternativos y noticias falsas.El auténtico problema de nuestra era es la falta de autenticidad y veracidad, conceptos que Gescinska define, respectivamente, como la sinceridad con nosotros mismos y con los demás. Lo que determina la calidad de una afirmación es la intención del hablante. Por eso, para combatir la proliferación de la mentira no basta con ofrecer más herramientas con las que comprobar los hechos. Sin un nuevo compromiso con la autenticidad y la veracidad, la democracia está más amenazada y, con ello, corremos el riesgo de perder nuestro bien más preciado: la libertad.
La sabiduría astrológica tiene orígenes más antiguos que la propia civilización occidental, y nuestros signos del zodíaco son en su mayoría los que los sacerdotes astronómicos de Babilonia señalaron en la bóveda del firmamento. Reconstruir su historia milenaria y descubrir cómo las divisiones del cielo, la denominación de los planetas y la composición de las constelaciones se fueron cargando de significado —de Persia a Egipto y, desde allí, al mundo grecorromano— es la única manera de entender su profundo significado.
Para explorar tan apasionante camino, tal vez no haya guía más experto y autorizado que Franz Cumont, quien, a través de calendarios, relojes de sol, horóscopos y una fascinante red de fuentes originales, logra conducir al lector, con una delicadeza historiográfica y una pasión poco comunes, por la historia de las transformaciones de los doce signos en un extraordinario intento de vincular lo humano y lo no humano, lo visible y lo invisible, el Yo y el Todo.
Santa Catalina de Alejandría e Hipatia de Alejandría fueron dos portentos de sabiduría, valentía y lucidez, que desafiaron el orden establecido esgrimiendo su convicción de que salvaguardar la razón, la libertad y la justicia es necesario para que cualquier civilización sea digna de llamarse así. La primera es emblema de fe y virtud; la segunda, de erudición científica y filosófica. Ambas figuras son una sola en las tradiciones cristiana y pagana, y comparten el mismo fatídico destino: fueron asesinadas a causa de la intolerancia religiosa.
En un recorrido apasionante y muy personal, Ana Rossetti reflexiona sobre las vocaciones y principios de estas dos mujeres, y entreteje sus vivencias con el devenir histórico de la primera gran ciudad cosmopolita y el declive de su esplendor. La autora abunda en las entretelas de la escena sociopolítica de la época y en sus personajes más relevantes, aportando así una perspectiva reveladora, de profundo calado espiritual, que nos permite comprender mejor la deriva de las célebres alejandrinas hacia su trágico final. Somos un cuerpo herido es un ensayo amplio y riguroso, a la vez que reivindicativo, con el que la autora constata, una vez más, su formidable capacidad para entrelazar erudición y narrativa.
En 1770, El Barón de Holbach publicó su libro más famoso, Sistema de la naturaleza (Le Système de la nature), bajo el pseudónimo de Jean-Baptiste de Mirabaud, el secretario de la Academia de Ciencias de Francia, que había fallecido diez años antes. Negando la existencia de una deidad, y negándose a admitir como evidencia cualquier argumento a priori, d'Holbach veía el universo como nada más que materia en movimiento, guiada por las inexorables leyes naturales de causa y efecto. No hay, escribió, 'ninguna necesidad de recurrir a poderes sobrenaturales para explicar la formación de las cosas.' Sistema de la naturaleza es un largo y extenso trabajo que presenta una detallada visión naturalista del mundo.
En 1770, El Barón de Holbach publicó su libro más famoso, Sistema de la naturaleza (Le Système de la nature), bajo el pseudónimo de Jean-Baptiste de Mirabaud, el secretario de la Academia de Ciencias de Francia, que había fallecido diez años antes. Negando la existencia de una deidad, y negándose a admitir como evidencia cualquier argumento a priori, d'Holbach veía el universo como nada más que materia en movimiento, guiada por las inexorables leyes naturales de causa y efecto. No hay, escribió, 'ninguna necesidad de recurrir a poderes sobrenaturales para explicar la formación de las cosas.' Sistema de la naturaleza es un largo y extenso trabajo que presenta una detallada visión naturalista del mundo.
Publicado en 1800, el Sistema del idealismo trascendental se centra, en lo que Schelling considera la «verdadera» filosofía de Fichte: la construcción completa del Yo, de la subjetividad, de la autoconciencia. Es entonces cuando ambos filósofos comprenden definitivamente que están pensando en parámetros diferentes y se produce la ruptura.
Los tópicos aquí reunidos son juicios de valor que actúan a modo de prejuicios básicos ampliamente compartidos. Ellos manifiestan la mentalidad de una sociedad, componen un retrato colectivo en el que nada cuesta reconocernos. No ha de suponerse que los tópoi sean invenciones de los medios de comunicación, aunque éstos contribuyan lo suyo a propagarlos. Esos lugares comunes son creación nuestra: de nuestra comodidad y de nuestros miedos, de la ignorancia tanto como del espíritu rebañego de la mayoría. Prescindir de ellos, pues, exige ponerse a pensar lo que quizá no hemos pensado nunca, porque en ese mismo vacío se asienta buena parte de nuestras convicciones. En la estela de su libro anterior, Tantos tontos tópicos, Aurelio Arteta vuelve a cargar en Si todos lo dicen... contra otros cuantos clichés que nos confunden. Empecemos a sospechar de eso que siempre hemos creído evidente por ser lo que acostumbramos a escuchar, lo que todos aprueban y nadie discute, lo que nos asegura su acogida... Descubrir estas frases hechas, cuestionar sus pretensiones y remover su falsa solidez es un quehacer que todo sujeto debe imponerse. Una guía adecuada para ello puede ser esta topografía moral que el autor nos ofrece.
Una vez le dije a un periodista, andando por un parque: «¿Ve ese árbol? Si un árbol cae, nadie lo ve, no cambia la vida de los árboles». Y eso era exactamente la vida en Sarajevo durante el asedio, eso era el individuo en Sarajevo. MARKO VEŠOVIĆ La violenta desmembración de Yugoslavia en la década de 1990 cambió el mapa político de Europa en una convulsión histórica sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial. Según Marko Vešović, poeta y profesor de la Universidad de Sarajevo, «probablemente ésta sea la única guerra de la historia planeada y dirigida por escritores». En efecto, los escritores no fueron en ella meros observadores sino protagonistas, empezando por Milošević y su esposa, Mira Marković, y siguiendo por el que fue primer presidente de Croacia, Franjo Tudjman. Muchos intelectuales no se resistieron a colaborar en la propaganda de uno ti otro bando, cumpliendo —como dice Nenad Popović— con el feo oficio de «producir emociones». En «Si un árbol cae», Isabel Núñez recopila el resultado de varios años de investigación, cuenta su itinerario y sus lecturas balcánicas y presenta más de veinticinco entrevistas con otros tantos escritores que hablan y discuten sobre las causas de la guerra, su vivencia personal del conflicto, su peculiar posición en él, y la extrema dificultad creativa de contar lo que vieron, lo que pensaron, lo que sintieron… pues, como señala Igor Štiks, «lo que es una tragedia en la vida real puede ser de una banalidad extrema en literatura». Éste es un libro valiente y singular, repleto de ecos y paralelismos, que aúna el reportaje y la reflexión literaria y que sin duda constituye un extraordinario documento de la reciente historia de Europa.
«Hola. Me llamo Benjamín Serra. Tengo dos carreras y un máster y limpio WCs.» Así rezaba el inicio del texto que el autor de este libro publicó en septiembre de 2013 en sus perfiles de Twitter y Facebook, y que a las pocas horas se convirtió en un fenómeno viral en las redes sociales y en los medios de comunicación. En él, ponía de manifiesto la realidad que viven miles de jóvenes españoles sobradamente preparados; jóvenes que no han podido encontrar un empleo en España al finalizar sus estudios y se han visto en la obligación de emigrar a otros países y desempeñar trabajos para los que, en muchas ocasiones, están demasiado cualificados. Sobradamente preparado para limpiar váteres en Londres narra una de esas experiencias, la del propio Benjamín, desde las dudas iniciales hasta los problemas con el idioma, desde los trabajos de subsistencia hasta las peripecias para encontrar un apartamento habitable, pasando por las distintas costumbres, los sinsabores del trato con el público y los incontables intentos (a ambos lados del canal de la Mancha) de aprovecharse del que busca trabajo. El suyo es un relato que rehúye la amargura pero no la acidez ni, por supuesto, el humor, porque, pese a que salir a buscarse la vida es una aventura no exenta de altibajos, ¿quién dice que no pueda tener un final feliz?
Se ha escrito mucho sobre Dalí, pero hasta ahora nunca se había mostrado al genio tan de cerca como en este libro, en el que el periodista Fernando Huici entrevista a Antonio Pitxot, la persona viva que mejor conoció al pintor. Pitxot fue su mano derecha, su apoyo y su refugio durante los últimos años de su vida. A través de una distendida conversación, la obra nos ofrece un retrato muy completo del Dalí menos conocido por el público que abarca todas las facetas: su creación, su concepción del arte, su relación con Gala, la ruptura con su familia, sus amigos, sus relaciones con otros creadores, su vena literaria... Por primera vez, el excéntrico genio se nos hace humano, próximo, vulnerable, divertido, cotidiano. Y sin perder ni un ápice de su genialidad.
Dios, el hombre y la muerte son problemas cuya verdad radica más en su planteamiento que en su solución. Esta obra da fe de ello. La primera aproximación se basa en el método cartesiano. El hombre es el tema central de la segunda aproximación. Finalmente, la aproximación a la muerte deja en claro que la estetización religiosa, metafísica o poética del morir no lo exime de su nexo ontológico con la nada.
Sobre cosas que se ven en el cielo, una de las últimas obras de Jung, es un estudio del rumor visionario sobre los ovnis. «Atendiendo a su forma, características y antecedentes en relación con los símbolos oníricos y artísticos, Jung plantea que los ovnis son un símbolo de totalidad que avisa del peligro de la masificación para la vida del individuo, volcado hacia el exterior e incapaz de comprender su interior. Como en muchas otras ocasiones, se malentendió a Jung hasta hacerle un profeta de los ovnis».
En este ensayo Sobre educación, Russell parte de la idea de que la educación que deseamos para nuestros hijos depende de nuestros ideales acerca del ser humano. Ataca así el sistema educativo de la época, en manos de la Iglesia o del Estado, a los que acusa de crear rebaños formando en el conformismo, el autoritarismo y el nacionalismo. Russell busca educar personalidades libres y sensibles, cultivadas en la curiosidad, la confianza en el esfuerzo y el sentido de aventura. Él y su mujer Dora crearon una escuela en Beacon Hill en donde intentaron llevar a la práctica sus ideales educativos.
El valor actual de estos ensayos reside en lo pausado y racional de su análisis, en la claridad de sus propuestas y la amenidad de su lectura: «Cuanto he de decir —escribe Russell— no es sino el resultado de mis preocupaciones con respecto a mis hijos; no hay, pues, en ello nada de remoto ni teórico, y espero que ayudará a otros padres a aclarar ideas, bien sea para compartir o para rechazar mis opiniones».
Un libro en el que el propio Russell consigue lo que quiso para los niños: despertar la curiosidad y la reflexión convirtiendo su discurso en una entretenida aventura.
«Mi experiencia como médico, al igual que mi propia vida», escribe C. G. Jung, «me han puesto incesantemente ante la pregunta sobre el amor, y nunca fui capaz de dar una respuesta válida». La presente antología de textos extraídos de la rica obra junguiana recoge algunas de las reflexiones más significativas del psicólogo y psiquiatra en torno a «las imprevisibles paradojas del amor» y al conocimiento de que «únicamente en lo opuesto se enciende la vida». El recorrido a través del Eros («gran vinculador y desligador»), de la relación entre los sexos, el matrimonio, la comunidad y la relación terapéutica, pone de manifiesto la importancia que para la psicoterapia junguiana tiene no sólo la relación de transferencia entre médico y paciente, sino la relación humana. Ocupado en transmitir a sus pacientes «la ficción que cura», Jung hace sobre todo una invitación a «vivir psicológicamente», dedicado como estuvo a fomentar con su trabajo el desarrollo del individuo.
Los dos ensayos que integran este volumen fueron escritos con una década de diferencia. «Sobre el arte contemporáneo» es la alocución con la que César Aira inauguró el congreso Artescritura, que tuvo lugar en Madrid en 2010 y que se proponía superar la brecha que separa a escritores y artistas visuales. «En La Habana», en cambio, parte de un recorrido por la casa museo del escritor Lezama Lima, realizado durante una visita a Cuba en el año 2000, y desemboca en una crónica del viaje por los museos de la ciudad y los objetos que allí se exponen. Estos dos imponentes textos de uno de los autores clave de las letras hispanas vuelven a incidir en algunos de los temas predilectos de Aira: la relación entre arte y literatura, el proceso de creación, el arte de lo incompleto y, en definitiva, la veracidad de la escritura.
Con la publicación de estos ensayos (1922-1930), Horacio Quiroga buscó explorar el «problema de la literatura». De la ajena y de la propia, porque, como pensaba Borges, leer es una manera de crear, y en él la lectura no fue enciclopédica, ni siquiera muy vasta, sino que constituyó una auténtica profesión de fe, la elección de un trayecto ficcional del que dejó testimonio irrrecusable. No debe descartarse, en estos textos, una fuerte dosis de humor e ironía (como en su «defensa» frente a los jóvenes vanguardistas), pero por encima de ella la reflexión, la búsqueda de racionalizar el acto creativo, en la que destaca su agudeza, penetración y dominio de la poética del cuento que con tanto magisterio ejerció.
Estamos viviendo un renacimiento de la figura y la obra de Gilbert Keith Chesterton (1874-1936). Por todas partes surgen asociaciones chestertonianas y se reeditan con gran éxito sus obras fundamentales. Por este motivo, se está rescatando también el resto de su obra, aparentemente menor, pero que tiene el encanto de ofrecernos a un Chesterton igualmente atractivo, un «hombre de pelea, un paradojista y un poeta», como lo llama Miguel de Unamuno en el prólogo a esta edición española de «Sobre el concepto de barbarie» (1915). Chesterton no era un pacifista, pensaba que había «guerras justas» que tenían que librarse. Durante la Gran Guerra (1914-1918), como miembro del War Propaganda Bureau, publicó diversos escritos en defensa de la civilización occidental, que veía amenazada por la moderna maquinaria bélica teutona. En su análisis de los acontecimientos, Chesterton considera que la Gran Guerra es un conflicto «de civilizaciones y religiones, para determinar el destino moral de la humanidad». Esta edición recoge también las «Cartas a un viejo garibaldino», otro de sus folletos de la época, que tradicionalmente suelen publicarse con estos escritos sobre el concepto de barbarie. El libro lleva una introducción de Emilio Quintana, que dirige la revista online Hallali. Revista de estudios culturales sobre la Gran Guerra y el mundo hispánico.
La idea principal de este libro es desarrollar los principios empiristas, en el campo del derecho, hasta sus conclusiones últimas. De esta idea surge la exigencia metodológica de que el estudio del derecho siga los tradicionales patrones de observación y verificación que inspiran a toda la ciencia empírica moderna. De ella surge también la exigencia analítica de que las nociones jurídicas fundamentales sean interpretadas exclusivamente como concepciones sobre la realidad social, sobre la conducta del hombre en sociedad.