Una estrella en la oscuridad habla de superación, de la importancia de luchar con tenacidad ante situaciones difíciles y dolorosas, del poder del crecimiento personal y de la curación de las almas. Johnny es un treintañero sureño que vuelve de la guerra de Vietnam teniendo como consecuencia demasiadas pérdidas y cicatrices muy profundas. Al regresar a casa solo quiere recuperar su vida donde la dejó dos años atrás, pero le resultará imposible cuando, privado de visión, lo único que puede ver es cuánto ha perdido. Elisabeth es una jovencita egocéntrica y deslenguada que nuca ha salido de su urbanización al norte del país. Tiene grandes pretensiones que difícilmente se verán cumplidas: sueña con trasladarse a California y convertirse en la nueva ambición rubia; sin embargo, se verá atrapada en una situación que nunca hubiese imaginado. La vida de ambos está a punto de colisionar y unir sus caminos de forma irremediable y permanente. Johnny quiere recuperar su independencia y encontrar la paz mental que tanto necesita, pero Beth no lo ayudará después de verse arrastrada a un lugar donde es incapaz de encontrar su sitio. ¿Podrán dar con ese punto de encuentro donde ambos puedan coexistir? ¿Encontrarán lo que buscan en su nueva vida en común? ¿Podrá surgir el amor entre ellos? Descúbrelo en 'Una estrella en la oscuridad” «Una estrella en la oscuridad es una historia de superación y segundas oportunidades narrada con sencillez pero repleta de intensas y emotivas escenas que harán sucumbir al lector ante la pluma de la autora.» Promesas de Amor.
La infancia recuperada de esta novela es el lugar del que Harry Crews se marchó a los diecisiete años con idea de no volver. No la miserable cabaña de arrendatarios en la que siendo apenas un bebé amaneció un buen día junto a su padre muerto, ni siquiera aquella cama en la que se pasó tentido buena parte de su infancia soñando con huir al mundo idílico y sin cicatrices que se anunciaba en las páginas satinadas de los catálogos de Sears, sino todo el condado de Bacon, con sus gentes y sus historias. Sobre todo sus historias. Historias de alambiques ilegales escondidos en mitad de la espesura, de viejas rencillas sangrientas, de serpientes que hablan, de pájaros que pueden poseer el alma de un niño, de predicadores delirantes y hechiceras que espantan a los espíritus... Y es que en el condado de Bacon todo el mundo cuenta historias. Las historias lo son todo y todo son historias. Contar historias es su manera de sobrevivir y de comprenderse. Nada muere si hay historias. Todo, tanto lo bueno como lo malo, se incorpora y se traspasa de una generación a la siguiente y son quienes cargan con ese legado los que acaban por darle forma y color. A lo largo de estas páginas el autor de 'El Cantante de Gospel' intenta regresar al territorio delimitado por las historias que configuraron su infancia para descubrir que de aquel lugar del que, como el viejo Huckleberry Finn, siempre quiso huir, por muy lejos que le llevarían sus futuros vagabundeos, nunca logró marcharse.
Una novela imprescindible para comprender el siglo xx escrita por uno de los más importantes autores de las letras contemporáneas. En la Europa del siglo xx un hombre enigmático que huye de su pasado y una niña perdida que busca a su padre se encuentran por azar. Hanna está desorientada, no sabe valerse por sí misma. Marius decide acompañarla y juntos emprenden un viaje que los llevará hasta Berlín. Un recorrido marcado por una serie de escalas imprevisibles que nos acerca a un elenco de personajes «realmente deslumbrante » (Diário Digital), cada uno con una historia particular y todos juntos con un mismo fin: revelar el verdadero rostro de nuestra memoria colectiva. Porque es en las distancias cortas donde la multitud se desvanece dando paso a individuos concretos; gente capaz de mirar.
En «Un artista del hambre», historia de la vida y muerte de un ayunador de profesión, la muerte en vida toma forma. Sin antítesis ni preámbulos de advenimientos, simplemente, la sensación de vivir es igual de comprensible como morir. Según dicen, éste fue uno de los pocos textos que Kafka no ordenó quemar y en una carta a Milena Jesenká definió a su personaje como: «Un hombre condenado a mirar al mundo con una claridad tan enceguecedora que éste le resultó insoportable y se encaminó hacia la muerte». Igual que «La metamorfosis», «Un artista del hambre» presenta el aislamiento de un personaje de la sociedad y, a los demás hombres, como crueles objetos detrás del favor amablemente hipócrita de cada día: «Y alzaba la vista para mirar los ojos de las señoritas, en apariencia tan amables, en realidad tan crueles…». El mundo exterior de Kafka, es el espectador que satisface su malestar sólo con el hecho de ver a un hombre-bestia. A un hombre cuyo delicado tormento es la mueca para que el público, debido a su esnobismo o no, padezca con el personaje de ficción, en algún momento alter ego de Kafka, «es como una persona desnuda en medio de la gente vestida».
Nicolas, de ocho años, va a pasar una semana en la nieve. Va a disfrutar, junto con sus compañeros del colegio, de una semana de diversión en una estación de esquí. Es lo que en las escuelas francesas se conoce como semana blanca, que permite que los niños se oxigenen con unas breves vacaciones y rompan por unos días la rutina de las clases. En ese paisaje nevado y gélido, Nicolas conoce a su monitor de esquí y hace un nuevo amigo, el temible Hodkann, el terror de los dormitorios. Pero esos días de diversión tendrán para él mucho de viaje iniciático: el lector no tarda en ir percibiendo que sobre esa semana en la nieve planea una amenaza, un desasosiego difuso, una incertidumbre perturbadora, que se materializará de un modo terrible cuando llega la noticia de que en un pueblo vecino ha sido asesinado un niño… Mezclando la crónica de sucesos, el relato fantástico y el inquietante universo de los cuentos de Perrault o los Grimm, Emmanuel Carrère aborda con sutileza y auténtica maestría literaria los temores infantiles, las inseguridades de una etapa en la vida de una persona en la que los miedos pueden convertirse en pesadillas.
A los diecisiete años, Jeanne sale del internado para regresar a la casa solariega de sus padres en Normandía. Pletórica de ilusiones, mimada por su familia y fascinada por la plenitud de una naturaleza que parece murmurar y soñar con ella, no conoce «del amor si no su poesía». Al cabo de unos meses, está casada con un joven vizconde: el deseo, la sensualidad de su marido la avergüenzan y humillan; pero, cuando finalmente se produce «la revelación misteriosa de esos hechos en los que reside el gran secreto del amor», la convivencia cotidiana, el hábito que sucede fatalmente a los grandes descubrimientos, no tarda en mostrar «las rarezas de carácter de Julien, sus rasgos de dureza, su avaricia y, por fin, su infidelidad». Maupassant publicó «Una vida», su primera novela, en 1883, cuando ya era un escritor famoso, tras la estela de Flaubert; y en ella narró «la humilde verdad», según reza su subtítulo, de la vida de una mujer atrapada en un mundo de arcaicas convenciones regidas por el dinero, los títulos y los hombres y destinada a sufrir con pasividad los embates de la familia, la religión, el matrimonio, la maternidad e, incluso, de «instituciones» menos morales como las amantes de los maridos.
Los planes de la joven viuda Florence Morland de presentar a su hermana pequeña, Daisy, en sociedad y disfrutar de la temporada londinense se ven truncados cuando recibe una tentadora invitación: la nueva propietaria de es Bienheureux, la idílica finca del norte de Francia que antaño perteneció a la familia, desea que ambas se unan al resto de sus invitados para pasar el verano entre sus bucólicos jardines. El recuerdo de antiguos amores, así como el anhelo de los nuevos, florecerá nada más traspasar su mágico umbral, y las dos hermanas descubrirán, entre sesiones de espiritismo y escapadas a la luz de la luna, que no todo es joie de vivre y que los secretos que se esconden la una a la otra no son nada comparados con los que atesora la antigua mansión familiar. Un mal ancestral acecha aletargado entre raíces y sombras, esperando la oportunidad de ser liberado.
Julius Hertzfeld, psicoterapeuta de sesenta y cinco años, descubre que tiene una enfermedad terminal. Le resta un año de vida... ¿Qué hacer? ¿Cómo utilizar esos últimos doce meses que le quedan? Decide rastrear a un antiguo paciente, Philip, su único fracaso como terapeuta, para ofrecerle una segunda oportunidad. Con el firme propósito de cerrar su ciclo vital compartiendo con los demás su experiencia, su sabiduría y su capacidad de amar, Julius incorpora a Philip al grupo de terapia que dirige desde hace años, A su vez Philip, un hombre solitario y frio, los introduce al pensamiento de Arthur Schopenhauer, a quien considera su auténtico terapeuta personal. ¿El gran filósofo del pesimismo convertido en guía espiritual?Irvin Yalom, autor de la aclamada novela El día que Nietzsche lloró, vuelve con su trabajo más brillante hasta la fecha. Un año con Schopenhauer es el recorrido vital de un hombre sensible a quien la inminencia de la muerte lo lleva a hacer un balance de su vida. Una maravillosa aventura emocional e intelectual de deslumbrante intensidad.
La muerte cuelga en forma de serpiente en una esquina. Absurda como un accidente, sinuosa e impredecible como un homicidio… Como las huellas de un reptil en la arena, la pluma de Agatha Christie dibuja las curvas del crimen, los laberintos de la lógica, la mecánica del amor e, incluso, los difusos límites del espacio sobrenatural. En Un dios solitario y otros relatos se recogen las primeras narraciones creadas por la sacerdotisa del crimen; un registro completo que muestra de manera excepcional la primera etapa de la prolífica escritora. Desempolvados de viejas revistas de los años veinte y treinta, estos cuentos inéditos retratan la obra de una escritora en constante proceso de búsqueda, tanto de género como de estilo. Pero siempre sorprendente con sus desenlaces imprevistos… El monstruo de la locura deforma el bello rostro de una joven; el pasado golpea a la puerta en forma de chantaje; odio y amor chocan y dan de bruces con la soledad más absoluta. Agatha Christie, viajera impenitente obsesionada con la arqueología, no pone límites a las atmósferas vivas, misteriosas y coloridas: exóticas esencias de Medio Oriente o frías y nebulosas campiñas británicas.
«Tener un hijo está a nuestro alcance y sin embargo pocos futuros padres conocen la verdad: es el fin de la vida». Una joven pareja enamorada decide tener un hijo. Debería ser el inicio de una gran felicidad, el comienzo de una nueva vida… ¿Pero conocemos realmente los gozos de la maternidad? ¿Las dificultades que supone ser al mismo tiempo mujer, madre, amante? ¿Cómo vivir para otro sin olvidarse de una misma? Por primera vez, una visión diferente de la maternidad, alejada de los tópicos. Una novela magnífica, intensa, llena de humor ácido y mordaz, en la que esta joven escritora ya consagrada aborda ese «feliz acontecimiento» con toda honestidad.
Ramiro, un escritor frustrado sin ningún talento, ha dejado su trabajo como repartidor de pan de molde a turno de noche para escribir su gran obra. Mientras tanto, intenta sobrevivir con el exiguo subsidio de desempleo que le ha quedado y publicitándose como redactor freelance. Una mañana de invierno, Ramiro recibe una visita de un misterioso personaje, Albert Toole, que le propondrá la redacción de una extraña carta: su nota de suicidio. A partir de ese momento se verá envuelto en una serie de acontecimientos, ajenos a su patética y tranquila vida, que tendrán como telón de fondo la llegada del hombre a la Luna en 1969. Una novela que va más allá del suspense y que pone en entredicho la difusa frontera que separa la locura de la cordura y que nos convierte a todos, incluida la propia realidad, en una inquietante caricatura imposible de distinguir de la ficción.
Sábado por la noche. Tres parejas y un excompañero de estudios, a quien no ven desde hace años, se reúnen a cenar con la intención de ponerse al día de sus respectivas historias personales. Bajo las sólidas convenciones de sus vidas burguesas, laten aún experiencias traumáticas que han marcado su existencia. Así pues, el aparente equilibrio con el que disimulan el dolor, la culpa o la vergüenza comienza a resquebrajarse cuando los conflictos más profundos salen a la luz de forma inexorable. Y a medida que pasan las horas, la reunión se transforma en un tenso encuentro que enfrentará a los participantes con sus secretos más inconfesables.En este insólito relato de ecos pirandellianos, Andrea Camilleri disecciona sin compasión la materia más sombría y corrupta que puede albergar el alma humana. La voz de hombre de teatro del maestro siciliano emerge en estas páginas con toda la riqueza de su imaginación y su ingente capacidad de sorprender al lector con el giro menos esperado.
El presente volumen reúne los mejores cuentos de Chesterton aparecidos en prensa y nunca publicados como libro, desde 1890, cuando era alumno de la St Paul School, y reflejan la predilección adolescente de Chesterton hacia los horrores y las pesadillas, «porque nada hay tan delicioso como una pesadilla, cuando se sabe que es una pesadilla…». También se han incluido las fábulas publicadas en la sección «Principios» de su propia revista, «G. K.’s Weekly», a finales de los años veinte. A quien no esté familiarizado con la obra de Chesterton, tal vez le resulten esclarecedoras estas palabras de Borges, uno de sus más ilustres admiradores: «Chesterton nos habla de un muerto que descubre en el paraíso que los espíritus de los coros angélicos tienen sin fin su misma cara; habla de una cárcel de espejos; habla de un laberinto sin centro; habla de un hombre devorado por autómatas de metal; habla de un árbol que devora a los pájaros y que en lugar de hojas da plumas… Chesterton se defendió de ser Edgar Allan Poe o Franz Kafka, aunque algo en el barro de su yo propendía a la pesadilla, algo secreto, y ciego y central…».
Gilbert K. Chesterton, el genial escritor inglés entre cuyos méritos se encuentra la creación del inmortal Padre Brown, escribió la desconcertante novela «El hombre vivo» en 1912. «El hombre vivo» narra el caso de Innocent Smith, un hombre común, aunque algo extraño, cuya visión del mundo es pura y no está manchada por el cinismo. Su encanto infantil seduce a la señora Mary Gray, inquilina de la Casa Beacon, y la convence para que se case con él. El resto de los huéspedes de la pensión opinan que la señora Gray ha perdido la cabeza, pues apenas conoce al señor Smith, por lo que deciden investigar el pasado del singular pretendiente en busca de asuntos escabrosos. Y obtienen un gran éxito. En el historial de Innocent Smith encuentran alarmantes acusaciones para todos los gustos: desde intento de homicidio a robo con allanamiento de morada, deserción o poligamia. Esos vecinos conjurados escenifican un juicio para dilucidar la verdad de las acusaciones y disuadir a la señora Gray de su propósito. Eos capítulos iniciales de la novela, «los enigmas de Innocent Smith», llenos de suspense, describen los hechos de los supuestos delitos. Pero en la segunda parte de la obra, «Esas explicaciones de Innocent Smith», el inimitable ingenio de Chesterton nos deparará la sorpresa de una inaudita explicación para cada uno de ellos. En estas páginas, como en tantas otras de Chesterton, el humor absurdo y la paradoja no excluyen una reflexión profunda y moral sobre el ser humano y la sociedad, y nos ofrecen una visión nueva sobre las convenciones de siempre.
Según H.P. Lovecraft Cumbres borrascosas es una historia «totalmente aparte como novela y como obra literaria de terror, con sus enloquecidos paisajes –los páramos desolados de Yorkshire— y las vidas atormentadas y violentas que en ellos se desarrollan. Heathcliff, variante del héroe malvado byroniano, es un niño raro y huraño que aparece abandonado en la calle; sólo habla una especie de extraño galimatías, y es adoptado por una familia. Entre Heathcliff y Catherine Earshaw —hija de la familia de acogida— nace un vínculo más profundo y terrible que el amor humano. El misterioso terror de Emily Brontë no es un mero eco gótico, sino la tensa expresión del estremecimiento del hombre ante lo desconocido.»Emily Jane Brontë nació en Thornton, Inglaterra, el 30 de junio de 1818. Dos años más tarde, su padre, Patrick Brontë, fue nombrado rector de Haworth, un pueblo situado en los páramos de Yorkshire, lugar al que la familia quedaría vinculada para siempre. La infancia de Emily fue una época maravillosa, poblada de libros, arte, leyendas y juegos, hasta la muerte de su madre en 1824. Emily fue enviada entonces, junto con sus tres hermanas mayores a un riguroso internado femenino en Cowan Bridge. Tras la muerte por tuberculosis de las dos mayores, Emily y Charlotte regresan a Haworth. En 1846, Charlotte, Emily y Anne, la hermana pequeña, se propusieron escribir una novela cada una. La primera en llegar a las librerías fue la de Charlotte, Jane Eyre, un melodrama gótico que tuvo un éxito inmediato. Anne escribió Agnes Grey, y Emily la inmortal Cumbres borrascosas (1847), una historia de amor imposible que se prolonga más allá de la muerte. Un año después fallece su querido hermano P. Branwell. Emily coge frío en el entierro, enferma, y muere tres meses después, el 19 de diciembre de 1848, a la edad de treinta años.
CharlesNodier (1780-1844), el ilustre bibliotecario de El Arsenal reivindicado por los surrealistas, fue entomólogo, herborista, filósofo, conversadorinfatigable, opiómano y autoridad suprema y oracular en bibliofilia y enencuadernaciones de lujo. Reconocido introductor del romanticismo y laliteratura fantástica en Francia, y apasionado por los relatos sobre vampiros,demonios y aparecidos, que recopiló en el volumen «Infernaliana» (col. El ClubDiógenes n° 77), dedicó gran parte de su obra a confeccionar historias quetratan de penetrar en el oscuro corazón de lo sobrenatural. Elpresente volumen reúne cinco relatos fantásticos de Nodier: “Inés de LasSierras” (1837), que narra las peripecias de tres oficiales napoleónicos deviaje por Cataluña que se ven obligados a refugiarse en un castillo encantado; “Smarra,o los demonios de la noche” (1821), que relata cómo el joven Lorenzo sueña quees un antiguo soldado griego amante de la magia al que se aparece en sueñosPolemón, compañero de armas que le salvó la vida en una batalla y le describe lasterribles pesadillas que le ocasiona Smarra, «un monstruo sin color ni forma,que brinca y aúlla» y disfruta atormentando a los durmientes; “Trilby, o elduende de Argail” (1822), ambientada en Escocia, que nos cuenta las desventurasde un trasgo que vive en casa de los Dougal y ve peligrar su posición con el advenimiento del cristianismo; “Jean-FrançoisMedias Azules” (1832), que cuenta la historia de un chico peculiar convertido en hazmerreir de su vecindario porque, aunquees una eminencia en Álgebra, Geometría y Astrofísica, además de profetainfalible, es incapaz de expresarse correctamente; y “La novena de laCandelaria” (1839), que relata la historia de Máxime, un joven creyente quededica una novena a la Virgen pidiéndole que le revele en sueños quién sería suesposa ideal. Laedición se completa con “De algunos fenómenos del sueño” (1830), un ensayo enel que Nodier se anticipa setenta años al psicoanálisis.
La sociedad arrastra una crisis económica y de valores que parece irreversible. Esther y Tomás, un matrimonio joven con serios problemas laborales, deciden pasar un último fin de semana, junto con su hija de dos años Say, en el apartamento de montaña que compraron en tiempos mejores y que ahora necesitan vender. En plena tormenta de nieve, alguien llama a su puerta y comienza la pesadilla. Veinticuatro horas de terror extremo, en las que deberán luchar para sobrevivir. En su huida, la situación se complicará aún más y se verán obligados a enfrentarse a sus miedos más profundos y ancestrales. Porque, además, alguien que se desplaza entre las sombras les acompaña en su viaje sin retorno.Disforia es una historia claustrofóbica y aterradora que te dejará sin aliento. El autor de La silla nos sorprende con su nueva novela, una obra aún más terrible y agobiante. Una lucha desesperada por la supervivencia y la cordura. Un viaje al terror más intenso y perturbador, del que no siempre se puede regresar. Una historia que te atenaza y te obliga a traspasar los límites de la razón.DISFORIA: emoción desagradable o molesta. Ansiedad, irritabilidad. Angustia difícil de soportar, malestar psíquico. A menudo conlleva reacciones coléricas. Es el opuesto etimológico de la euforia.
Publicado en 1944 en una edición de 100 ejemplares, «Viaje a la semilla» nos lleva a la Cuba colonial del siglo XIX. Con un sutil manejo del tiempo, que el lector irá advirtiendo poco a poco, asistimos a la muerte de Don Marcial, Marqués de Capellanías, a los diferentes avatares de su vida y a su nacimiento. Paralelamente, conocemos los cambios que un insólito flujo temporal opera en su casa, en sus muebles y objetos.
Cuando Marco y sus compañeros se enfrentan a una nueva enseñanza conceptual no solo se encaminan hacia una serie de intrigantes experiencias sino que se sumergen en un viaje espiritual que desembocará en la esencia de ellos mismos. Si bien esta nueva filosofía de vida fortalecerá el vínculo entre ellos, también los ubicará en situaciones de difícil resolución, donde hasta la errónea percepción de la realidad se hará presente para condimentar este aprendizaje que los llevará a ser lo que son.
«Vuelta y vuelta» es una historia sobre la búsqueda de sentido y una fábula hiperrealista. En medio del duelo por la muerte de su madre, una mujer muy especial cuya huella ha quedado marcada en sus hijos y en su arte, el autor y protagonista de esta ficción se embarca en una aventura extrema, que se inicia en la isla Martín García y lo llevará a conocer personas extraordinarias en un viaje tan alucinado como consciente. Con un trabajo singularísimo del lenguaje, aboliendo las normas, la narración se vuelve hipnótica y logra una atracción irreversible hacia un universo literario único.