David vuelve a introducirnos de nuevo en una peculiar y asombrosa historia llena de suspense y misterio. Desde las solitarias y apartadas montañas de aquellos verdes valles a las transitadas calles del pueblo que lo vio nacer.
“Aquella misteriosa visión … no dejaba a ninguno de los presentes indiferentes.
Atónitos, examinaban con sumo interés el oscuro tejado de una inexistente morada que intentaba sin éxito alguno, confundirse entre viejas viviendas en ruinas de tiempos muy lejanos… justo, donde la calle finaliza”. Un suceso inesperado que envolverá a la familia Ruiz Olmo, adentrándose en una dinámica trama que les hará retroceder varias décadas en el tiempo.
Nadie en aquella tranquila localidad imaginaba el escabroso secreto que se guardaba tras esas cuatro paredes.
Sumérgete en los confines de la ciencia ficción y fantasía con ésta electrizante colección de 20 cuentos para jóvenes y adultos.
Entra en un torbellino de mundos distópicos, lugares imposibles, lejanos universos y dimensiones desconocidas. Los cuentos de H.M. Santoy te transportarán más allá de los límites de tu imaginación, desde las profundidades de civilizaciones futuristas hasta paisajes primigenios.
En POR AMOR AL ARTE, un obsesionado artista se enamora de su obra. En SELENE Y LA CEIBA, una mujer tiene una conexión con el árbol sagrado de los mayas. En LA HORA DE LAS CUCARACHAS, un interrogatorio se convierte en una pesadilla. En DEJA VÚ, una mujer recibe misteriosas cartas que guardan un secreto. En CIRCO ALEGRÍA, un perverso cirquero roba las sonrisas de su publico. Éstas y otras quince historias más, te traerán personajes inolvidables que te confrontarán a cuestionar los enigmas más profundos del alma y la condición humana.
Un hombre curioso descubre un día el pequeño cuaderno de su esposa. En él: cuatro historias. ¿Realidad o ficción? Sólo en la última página hallará la respuesta: —En nuestra primera historia descubrirá a una mujer que perdió todo… hasta ella misma. Eterno personaje secundario y jamás la protagonista de su propia vida. ¿Un viejo loco le ayudará a encontrar la salida? —En la segunda, un joven fotógrafo se enfrentará a sus fantasmas para cuidar del Diablo que lo desprecia. ¿Las lecciones del «Ángel» de su pasado lograrán salvarlo o caerá en el Infierno? ¿Es posible ver la luz para un ciego? —En la tercera historia una violinista española y un actor japonés se enfrentarán al odio, al desprecio y a la locura en plena dictadura argentina. ¿Logrará su amor superar a la tortura? —Y en nuestra última historia el valor se hace persona a través de una anciana cobarde que se enfrenta a terroristas. ¿Podrá el amor de una abuela derrotar al «Isis»? Aventuras de amor, superación y sacrificio tocarán el alma de aquel esposo tan metomentodo. Y guiado por cada palabra comprenderá, al fin, una única verdad: «No son los golpes de la vida lo que nos impide estar en pie, sino nuestro propio miedo». ¿Qué hará este esposo al terminar el cuaderno?
Una profunda y conmovedora historia sobre la depresión entre los más jóvenes. Uno apenas mide un palmo y no parece peligroso. Dos es enorme y pesa una tonelada. Tres tiene los ojos amarillos. Cuatro una larga cola con anillos de colores. Cinco es especialista en susurrar al oído. Seis no deja de llorar. Siete parece pequeñito, pero puede hacerse grande como una bombilla. Grande como una pelota de fútbol. Grande como el televisor del salón. Estas siete criaturas (algunas terribles, otras aparentemente inofensivas) viven debajo de la cama de Alma y salen por la noche para robarle su luz, sus sueños y sus esperanzas. Alma no se atreve a hablar de ellas ni con su familia ni con sus amigos por miedo a que nadie crea que son reales. Pero lo que Alma no sabe es que hay monstruos que solo se pueden combatir en compañía. Iria G. Parente y Selene M. Pascual abordan la depresión en esta emotiva alegoría para grandes y pequeños.
Un glosario poético ilustrado que recoge palabras del medio rural en riesgo de desaparecer.
María Sánchez se ha convertido en una de las voces más reconocidas en la defensa del mundo rural y en la dignificación de su cultura. De ese afán nació Almáciga, un proyecto colaborativo en el que ha ido recogiendo palabras asociadas al campo para que no caigan en el olvido. La recolección ve la luz ahora en forma de libro, un glosario poético que huele a tierra arada y a lumbre, iluminado con las bellas ilustraciones de Cristina Jiménez.
“El campo y nuestros medios rurales tienen una manera de hablar única que hermana territorio, personas y animales. Muchas de sus palabras llevan demasiado tiempo a la intemperie. Si no las cuidamos, morirán con nuestros mayores y nuestros pueblos. Por eso este libro, esta almáciga. Un sustrato donde las expresiones de nuestras tierras descansen; una semillera para recuperar sus palabras y sus significados, para volver a oírlas y nombrarlas, para que arraiguen entre nosotros y las tengamos más cerca; un vivero en el que mimarlas y cobijarlas con nuestros cuerpos y acentos. Un diálogo-tejido con nuestro medio rural para que germinen y puedan volver a existir.”
Intenté huir, pero alguien me golpeó en la cabeza y caí al suelo. No recuerdo nada más. Cuando abrí los ojos estaba en un lugar oscuro y frío. Abba, me miraba serio. Alce la mano, pero me dijo que no podía tocarlo, porque yo estaba muerto. La casa siempre estaba a oscuras. Mama pasaba largas horas llorando sentada en la butaca frente a la chimenea, con mi foto en las manos. Yo sabía que no estaba muerto, cómo sino podía acercarme a ella de noche mientras dormía, tocarle la cara, acariciarle el pelo. Abba, el rabino, decía que no era más que una ilusión de mi espíritu, que ni siquiera su imagen era real cuando me hablaba. Dijo también que el Sheol, ese lugar horrible a donde van las almas impuras, es un sitio confuso, donde los muertos creen estar vivos y actúan como si así fuese. Pero yo no estoy muerto. Ni vivo en ese infierno. Sino en casa, en mi casa. Aunque no entiendo por qué nadie puede verme. Una novela escalofriante, con una fuerte carga emocional y dramática. Donde la fe judía, los prejuicios sociales y el complejo mundo de la mente, van unidos de la mano.
¿Qué harías si enfrente de tu piso vivieran ocho chicos?
Emma Parks se muda a vivir a San Francisco con su extravagante primo Daniel mientras duren sus años de estudio. Lo que no esperaba, ni de lejos, era tener como vecinos a ocho chicos. Jóvenes, guapos y a cada cual más raro que el anterior.
Kyle y Liam son parte de esos vecinos de Emma. El primero es, aparte de endiabladamente atractivo, listillo, egocéntrico y bastante idiota. El segundo es guapísimo, atento y encantador.
No hay modo de evitar cruzarse con ellos y Emma se siente confusamente atraída por los dos.
Tomar decisiones no es lo que más le apetezca, pero a veces no queda otro remedio.
Ella tendrá que ser consciente de que haga lo que haga, traerá consecuencias.
[Escasos 28 días tras el primer brote, la infección se ha extendido por todo el planeta. Bárbara despierta desorientada y aturdida dentro de un ataúd en el cementerio de Sheol, la ciudad que la vio nacer. No es capaz de recordar cómo acabó ahí, pero esa es la última de sus preocupaciones. De nada sirve señalar culpables o intentar averiguar cómo se llegó hasta ese extremo. Habiéndolo perdido todo, su único objetivo es salvarse, y no ser uno más de los millones de humanos infectados que deambulan por las calles sucias y desiertas en busca de su siguiente víctima. Pronto conocerá a Zoe, una entrañable niña que se unirá a ella a la búsqueda de un lugar seguro. Ella será la primera integrante de un heterogéneo grupo de supervivientes que decidirán aunar sus fuerzas y sus escasos recursos en pro del bien común, demostrando que aún queda lugar para la esperanza.]
“Al otro lado de la vida” es una distopía, una novela coral de ciencia ficción postapocalíptica. En ella los infectados no son más que el telón de fondo que sirve para establecer las bases de una trama en la que la supervivencia, el miedo, el afecto, el compañerismo y la desesperación de sus personajes son los verdaderos protagonistas. La acción y el terror están presentes, de un modo activo y muchas veces frenético, pero son los temores de esos supervivientes, sus demonios personales, el recuerdo de la trágica historia que les dejó solos, asustados e indefensos en ese nuevo mundo, los que verdaderamente dirigen la novela.
El que tienes delante es el primer tomo de una trilogía en la que cada libro narra una etapa diferente del trayecto que toman sus protagonistas.
[Escasos 28 días tras el primer brote, la infección se ha extendido por todo el planeta. Bárbara despierta desorientada y aturdida dentro de un ataúd en el cementerio de Sheol, la ciudad que la vio nacer. No es capaz de recordar cómo acabó ahí, pero esa es la última de sus preocupaciones. De nada sirve señalar culpables o intentar averiguar cómo se llegó hasta ese extremo. Habiéndolo perdido todo, su único objetivo es salvarse, y no ser uno más de los millones de humanos infectados que deambulan por las calles sucias y desiertas en busca de su siguiente víctima. Pronto conocerá a Zoe, una entrañable niña que se unirá a ella a la búsqueda de un lugar seguro. Ella será la primera integrante de un heterogéneo grupo de supervivientes que decidirán aunar sus fuerzas y sus escasos recursos en pro del bien común, demostrando que aún queda lugar para la esperanza.]
“Al otro lado de la vida” es una distopía, una novela coral de ciencia ficción postapocalíptica. En ella los infectados no son más que el telón de fondo que sirve para establecer las bases de una trama en la que la supervivencia, el miedo, el afecto, el compañerismo y la desesperación de sus personajes son los verdaderos protagonistas. La acción y el terror están presentes, de un modo activo y muchas veces frenético, pero son los temores de esos supervivientes, sus demonios personales, el recuerdo de la trágica historia que les dejó solos, asustados e indefensos en ese nuevo mundo, los que verdaderamente dirigen la novela.
El que tienes delante es el segundo tomo de una trilogía en la que cada libro narra una etapa diferente del trayecto que toman sus protagonistas.
Al otro lado del jardín nos ofrece un microcosmos imaginario donde niños, objetos, hombres y mujeres nos cuentan las situaciones cotidianas o prodigiosas que marcaron sus vidas.
Un hombre se enamora de una misteriosa mujer que descubre al otro lado del jardín.
Una mujer asiste inquieta a la cárcel para un “bis a bis” con su pareja.
Un bache reivindica su derecho al honor.
Un viejo profesor evoca su amor por una adolescente mientras espera la muerte.
Un niño intenta convivir con su extremada gordura.
Un hombre vuelve a su casa con la maleta de una desconocida.
Una tortilla de patata provoca la ruptura de una pareja.
Un hombre mata sin esfuerzo alguno a su mujer.
Un calcetín nos cuenta las consecuencias de no tener pareja.
El alma de una joven queda encarcelada en la acera donde cayó muerta.
Estas son algunas de las historias que nos invitan a recorrer caminos imaginarios repletos de luces y sombras, trazados con pinceladas de amor y desamor, de ilusión y desencanto. Voces que nos muestran los diferentes perfiles de nuestra existencia.
¿Qué pasa cuando las estructuras mentales que amoldan la realidad que conoces se derrumban por completo? ¿Qué sucede si descubres que lo que crees ser es un espejismo, una fachada de una realidad inimaginable a los ojos de la humanidad? ¿Qué pensarías si te dijeran que la vida, tal como la conoces, es un sueño del cual despertaras de un momento a otro? ¿Cómo te sentirías si tuvieras la certeza de que la muerte no existe, que solo es un juego que tú mismo creaste y planificaste desde antes de nacer?
A través de estas líneas quiero que conozcan la historia de Adrián, un hombre muy particular que conocí en mi estadía como pasante universitario y que cambió mi forma de ver el mundo por completo. Al principio tuve miedo, me estaba enfrentando a un conjunto de hechos que estaban fuera de toda lógica racional y que tenía a gran parte de los habitantes del domicilio, donde nos hospedamos, atemorizados y desconcertados. La curiosidad y mis ganas de enfrentarme a la verdad me permitieron acercarme a Adrián en busca de respuestas. Él lo sabía desde el principio. Supo canalizar todo mi interés para transportarme a un mundo nuevo y desconocido que devastó todo lo que creía saber sobre la existencia.
Nos hicimos buenos amigos; fue entonces cuando empecé a comprender que Adrián no era una persona normal y corriente.
Comencé a intuir que sus conceptos de la realidad, o “del mundo de las formas” ----como él le llamaba----, se vieron afectadas por un suceso que lo trasformó por completo. Su presencia no estaba ligada enteramente a este mundo, si lo quería, podía desprenderse de el a su antojo. Quise saber que lo hacía tan especial y el me brindo la posibilidad de averiguarlo de una forma particular: contestaría once preguntas que yo le formulara. Aunque al comienzo las preguntas que le hice fueron limitadas por mis patrones mentales, él se encargó de abrir mi mente a otra dimensión, fue así que a medida que avanzábamos las respuestas fueron tomando más profundidad. Y llego la respuesta a la pregunta número once, la más ambiciosa. Para ello me entregó un cofre con una cerradura cifrada la cual debería abrir a través de la resolución de un criptograma que el mismo diseñó.
––Es el secreto que me permite hacer lo que has visto y que tanto te ha impresionado. –––Me dijo––– Pero lo más importante; es la prueba irrefutable de que la muerte no existe.
Después de un tiempo pude descifrar la clave. Lo que encontré dentro del cofre fue un manuscrito de su puño y letra el cual comparto con el estimado lector a través de este libro. Quiero que recuerde: la verdad no hay que creerla, hay que sentirla. Esta historia tiene menos ficción de lo que usted imagina. Puede estar seguro que no lo dejará indiferente.
Primero un virus, luego una guerra. El mundo ya no es como lo conocíamos. Los hostiles, grupos de asesinos y expresidiarios, son la nueva amenaza para los supervivientes. Alyssa es una mercenaria que trabajaba para el gobierno y ahora protege a su comunidad, decide ayudar a un actor, que fue su ídolo de adolescente. Jack, le pedirá que encuentre a los suyos, entre ellos su esposa e hija. ¿Podrán resistirse a lo que empieza a surgir entre ambos?