Rogelio, al que todos creían muerto en 1936, regresa en junio de 1977 al pueblo donde nació y fue fusilado junto a su padre y su hermano. Son los días de las primeras elecciones democráticas. Cuando la noticia se conoce, los sentimientos de los supervivientes se cruzan y reaparecen tras más de 40 años. Todos dan por hecho que vuelve para vengarse, pero el regreso lo hace con su esposa, veinte años más joven que él, y su hija de 19 años. Rogelio no sabe quién le delató entonces, por qué está vivo, por qué las balas de los que le fusilaron no le alcanzaron. Tras caer a la fosa logró zafarse de ella en la oscuridad antes de que les cubrieran con tierra. Su hermana sabe que está vivo desde hace 20 años, pero lo ha silenciado por miedo. Ahora que Franco ha muerto es la hora del reencuentro. ¿Qué busca Rogelio? ¿Solo visitar la fosa donde están su padre y su hermano junto a otros vecinos y reencontrarse con sus orígenes? ¿Cómo reaccionará su primera novia, el amor de su vida, o su mejor amigo, que se cambió de bando para sobrevivir y ahora es su marido? ¿Y el topo que ha vivido 38 años encerrado esperando a que el dictador muriera? ¿Qué hará el hijo del alcalde que lideró la revuelta en julio del 36 y que ahora gobierna la villa? ¿Y el sargento de la guardia civil? ¿Se desatará una espiral de violencia en los días en que los españoles sellan, por fin, la paz con su voto en las urnas?
Si la chica-gata es «La mujer pantera», en la primera película que en la novela le cuenta Molina a Valentín, la mujer-araña es el propio Molinita, el homosexual que quiere ser mujer. En sus relatos, con nocturnidad y algo de alevosía, Molina va sacando al radical y recalcitrante revolucionario Valentín de su abstracción. Para envolverle en la fantasía, en la ilusión, en el refugio que para un ser tan basureado como él es su único escape de la realidad. Pero si Molina es un marginado, también lo es Valentín. Dos seres tan diametralmente diversos de entrada, en un proceso sutil y casi ritual, van evolucionando de tal modo que cada uno acaba asumiendo la personalidad opuesta. […] «La mujer araña», madre, mujer, amante, la que uno quiso ser y el otro quiso tener, acogerá a los dos.PEPE MARTÍN
En este gran clásico de la literatura norteamericana del siglo xx, James Baldwin da voz a Tish, una chica de diecinueve años embarazada de un joven escultor llamado Fonny. Novios desde el instituto, decidieron casarse y formar una familia, pero sus planes se truncan cuando él es injustamente acusado de violación y encarcelado. A través del relato de Tish recorremos la historia de amor de esta pareja afroamericana a la vez que asistimos al intento desesperado de la familia por liberar a Fonny de la cárcel y demostrar su inocencia, en una lucha contra la hostilidad y la injusticia de un sistema racista y corrupto. Publicada por primera vez en 1974, la violencia y la sensualidad de la novela de Baldwin siguen golpeando y conmoviendo conciencias con la cadencia triste y pasional del blues más sentido, avivado en estas páginas por el amor más puro y el afán de supervivencia de unos seres marginados por el color de su piel y por su pobreza.
Una novela de acción trepidante que lo sumergirá en el mundo de la santería, el palo mayombe y el candomblé. El sacerdote Adam Kennedy deberá enfrentar a los demonios que trajo consigo desde Haití, luego de vivir en un mundo de intrigas políticas y religiosas.
«El bolígrafo de gel verde es el retrato detallado, minucioso, magnífico y angustioso de cómo perder el tiempo y, en consecuencia, perder la vida». Superficies de vida: Casa: 89 m2 Ascensor: 3 m2 Garaje: 8 m2 Empresa: la sala, unos 80 m2 Restaurante: 50 m2 Cafetería: 30 m2 Casa de los padres de Rebe: 90 m2 Casa de mis padres: 95 m2 Total: 445 m2 ¿Puede alguien vivir en 445 m2 durante el resto de su vida? Seguramente sí, seguramente usted conoce a mucha gente así. Personas que se desplazan por una celda sin estar presas; que se levantan cada día sabiendo que todo va a ser igual que ayer, igual que mañana; personas que a pesar de estar vivas se sienten muertas. Ésta es la historia de un hombre que fue capaz de hacer realidad lo que cada noche imaginaba bajo las sábanas: empezarlo todo de nuevo. Lo hizo, pero pagó un precio demasiado alto. Pero si de verdad usted quiere saber cuál es el argumento de esta novela, mire su muñeca izquierda; ahí está todo. Esta novela no ha sido galardonada con ningún conocido premio literario; ni siquiera con uno desconocido.
A falta de tres años para cumplir los cuarenta, Pedro, un funcionario viudo y enfermo crónico, decide dar un giro de 360° a su vida, después de llevar más de cinco años albergando la idea en su interior. El mismo día que toma la decisión de dar el primer paso, un suceso fortuito e inesperado con un joven en los lavabos del café-pub al que acude casi a diario en su pequeña ciudad del norte, a orillas del mar Cantábrico, bloquea totalmente su incipiente andadura. Son quince días en su vida, sin llegar a ser una crónica propiamente dicha, en los que se enfrenta con su pasado en numerosas regresiones, al mismo tiempo que está obligado a vivir un presente que se ha convertido, de repente, en peligroso y clandestino, mientras el sub-inspector Balbás hace su labor para esclarecer los hechos y detener a los culpables en una trama que se complica a medida que avanza su investigación. Entre su dedicación a la talla exenta de madera y a la poesía, a su grupo de amigos y a la exigua familia, a sus amores y al sexo, durante estas dos semanas va pintando un lienzo con los claroscuros de sus años vividos bajo la presión pertinaz del sempiterno viento Sur y la cáustica deslealtad. Sus convicciones existencialistas, su grupo de amigos y el abrigo de su bahía le ayudan a sobrellevar su nueva y surrealista situación con estoica integridad hasta la sorprendente solución definitiva.
Inspirándose en su experiencia como corresponsal de guerra, David Jiménez recrea personajes y acontecimientos reales para escribir una desgarradora historia en la que la amistad, el amor y la lealtad son llevados al extremo en un país sumido en la pobreza y la violencia.
La silueta semiderruida y abandonada del Hotel Intercontinental se alza sobre el valle de Kabul como símbolo de un pueblo herido por décadas de invasiones y conflictos. Pero ni los bombardeos ni la salvaje dictadura de los talibán impiden que sus empleados acudan puntualmente a trabajar, decididos a mantener abierto el establecimiento más emblemático de la ciudad y sostener la esperanza de un eventual regreso de los buenos tiempos a Afganistán.
La llegada del huésped americano Frank Goldkamp y su amistad con el joven botones del hotel serán el preludio de una nueva guerra que unirá los destinos de los dos protagonistas y les llevará a emprender un viaje a lo más profundo de la condición humana, su luz y su oscuridad.
Un abuelo polaco cuenta por primera vez la historia secreta del número que lleva tatuado en el antebrazo. Un pianista serbio añora su identidad prohibida. Un joven indígena maya está desgarrado entre sus estudios, sus obligaciones familiares y su amor por la poesía. Una hippie israelí anhela respuestas y experiencias alucinógenas en Antigua Guatemala. Un viejo académico reivindica la importancia del humor. Todos ellos, seducidos por algo que está más allá de la razón, buscan lo hermoso y lo efímero a través de la música, las historias, la poesía, lo erótico, el humor o el silencio, mientras un narrador −profesor universitario y escritor guatemalteco también llamado Eduardo Halfon− empieza a rastrear las huellas de su personaje más enigmático: él mismo. Publicado por primera vez en 2008 y traducido a una decena de idiomas, «El boxeador polaco» —que aquí se presenta en la versión concebida inicialmente por su autor, incluyendo «La pirueta»— se ha convertido en un referente indiscutible de la literatura latinoamericana reciente.
Un autor fundamental de la literatura del siglo XX es Arno Schmidt (1914-1979). Sus estructuras novelescas rompedoras, su gusto por la experimentación y los juegos de palabras, de raíz rabelaisiana y joyciana, su ácido sentido del humor y la sátira, su pesimismo radical, hicieron de su literatura un mundo aparte en la literatura alemana posterior a la Segunda Guerra Mundial. Arno Schmidt es un autor de culto, casi secreto, y también un escritor de escritores.
Inglaterra, 1918. Lyle MacAllister, médico escocés, y Elena, enfermera procedente de una familia italiana, se enamoran mientras trabajan en un hospital durante la Primera Guerra Mundial. Pero Lyle descubre que su ex novia, Millie, está esperando un hijo de él, por lo que se verá obligado a casarse con ella. Elena, desconsolada, lo acepta, pero al terminar la guerra descubre que también está embarazada de Lyle. A fin de no avergonzar a su familia, mantiene en secreto su embarazo y se casa con Aldo, un italiano con el que emigrará a Australia. Lo que Elena no sabe es que Lyle ha aceptado un trabajo como médico para los Flying Doctors en el interior de Australia, con lo que sus caminos se cruzarán de nuevo y la fuerza del continente rojo los empujará hacia un nuevo e inesperado destino.
Margarita, escritora de éxito, vuelve a su ciudad natal para vaciar la casa de sus padres, un piso de los años 60 en un barrio obrero. Mientras, los medios de comunicación retransmiten la exhumación del cadáver de Franco, que marcó la vida de tantas generaciones de españoles. De las cuatro personas que vivieron en la casa, solo queda Margarita. Su abuela, su madre y su padre han ido muriendo por ese orden. Es hija única y debe realizar la tarea ella sola. Ni su marido ni su hijo la acompañan en ese viaje tan extremo que es el de recorrer los vacíos personales. Los olores que aún permanecen en la ropa, el sabor de la quina Santa Catalina, los viejos pasaportes, los libros… la van transportando a diferentes momentos de su pasado vividos en el piso. Los reproches a sí misma y a los fantasmas de los muertos que viven en su memoria se mezclan con la historia en la que se enmarcan su vida y la de su familia: una abuela que vivió todas las guerras del siglo, una madre y un padre que se criaron en una posguerra castradora de sueños; y ella, la protagonista y narradora en primera persona, que tenía trece años cuando murió el dictador. Sus recuerdos llenan la casa vacía, y a través de ellos entiende mejor las actitudes de su familia y de ella misma hacia todo lo que estaba pasando en aquellos años de la Transición.
Gregorio y Manuel son mejores amigos hasta que el primero comienza a despeñarse hacia la locura. Mientras Gregorio entra y sale de hospitales psiquiátricos, Tania —su novia— y Manuel comienzan una relación amorosa a sus espaldas. Herido por la traición y acosado por los celos, el caos mental de Gregorio lo orilla al suicidio, dejando a cuestas una caja con misteriosas cartas y mensajes que atormentarán a Manuel y a Tania, conduciéndolos también hasta los linderos de la demencia. Esta novela de atmósfera inquietante, cuya afilada y descarnada prosa nos conduce por los abismos y los claroscuros de la condición humana, confirma a Guillermo Arriaga —traducido a varios idiomas, autor de «Amores perros, 21 gramos» y «Babel», y recientemente galardonado con el Premio Mazatlán de Literatura por su última novela, «El Salvaje»— como uno de los mejores escritores de la literatura contemporánea.
Es una de las últimas novelas de Galdós, alejada del estilo decimonónico finisecular tan presente en el autor en otras obras como la paradigmática y aclamada «Fortunata y Jacinta» (1887), y, al propio tiempo, una de las menos leídas. En términos generales, la crítica despacha «El caballero encantado» en escasos y apresurados juicios, relegándola así a una preteridad sin duda injusta. Si buscamos opiniones acerca de esta obra nos encontraremos con que de ella se ha dicho que muestra un declive estilístico y creador por parte de su autor, una absurda mescolanza de realismo y de incoherente fantasía, un radicalismo senil… Se trata de una novela, en fin, que no ha podido ser incluida dentro del marco habitual del realismo, y se trata también y muy especialmente de una novela política y social, de serias implicaciones noventayochistas. Es, en verdad, una novela olvidada. Galdós introduce una estética más cercana a los movimientos que en esa época se desarrollaban en España, el Modernismo y la Generación del 98. Incluye así mismo capítulos netamente teatrales (ya había incluido capítulos de estilo teatral en obras como «El doctor Centeno» o «Tormento»), y accede al mundo onírico. Combina, por tanto, elementos de la modernidad e incluso elementos de lo real-maravilloso. La novela es una crítica a la sociedad rural caciquista, desarrollándose en su mayoría en Soria. A diferencia de otros autores de la época como Antonio Machado (pero al igual que otros como Rosalía de Castro) se hace una profunda crítica de Castilla y su decadencia. Don Carlos de Tarsis y Suárez de Almondar, marqués de Mudarra y conde de Zorita de los Canes, terrateniente y oligarca, mantiene su tren de vida y ocios gracias a la explotación de los campesinos. Un extraño personaje, La Madre (Clío, España), lo transforma, precisamente, en jornalero miserable, y le hace peregrinar por Castilla la Vieja, en busca de su propia purificación y de su enamorada, la maestra Cintia. Desencantado y regenerado, Carlos-Gil, unido a su amante, luchará por desencantar y regenerar el país todo. Dentro de este esquema, Galdós va a pasar revista a las diversas clases que constituyen la sociedad española, clases que aparecen claramente delimitadas y caracterizadas. Se escribió en el contexto de la Crisis del 98 y la Semana trágica de Barcelona, lo que explica el creciente reflejo de sus preocupaciones políticas, sociales y estéticas. En la obra, precursora en ciertos aspectos de «Luces de Bohemia», se habla de la esperanza de un mundo español e hispanoamericano formado por reinos descoronados en el que no existirá «ni tuyo ni mío». Por todo esto, es una de las novelas más vanguardistas e interesantes de Galdós, pero también una de las más desconocidas, debido su lejanía a la estética general del autor. Leyéndola se verá que no es, como se ha dicho, ni «un curioso capricho de Galdós» ni tampoco su «último sueño romántico». Se ha mantenido el sistema de comillas, tildes, así como otros usos ortográficos utilizados en la 1.ª edición, de 1909, de la cual se ha partido para esta edición digital.
Es una familia de clase media, acomodada, es el padre, la madre, el hijo mayor, que es un niño llamado Paúl, y dos nenas. Una familia muy derrochadora de dinero, ¡eso sí!, sólo que un día se encuentran con que en la casa siempre hace falta más dinero. Se quejan siempre, sobre todo ella, la madre, y un buen día de esos, ocurre una extraña especie de milagro a la inversa, de las paredes de la casa, se empiezan a oír voces que dicen: «¡Hace falta más dinero!, ¡hace falta más dinero!, ¡hace falta más dinero!». Es como un susurro, los chicos las escuchan, nadie dice nada, ni lo dicen en voz alta, solo lo comentan en susurros, pero el niño Paúl, él sufre mucho las voces, y se desespera porque quiere hallar una solución, entonces se va a su cuarto, donde tiene un caballito de madera y siempre lo monta (…tu, tu… tu, tu… tu, tu… tu, tu…) y le dice: «Llévame, llévame a donde está la suerte, te lo pido, te ordeno que me lleves a donde está la suerte, llévame a donde está la suerte, ¡que me lleves a donde está la suerte!», le sale fuego por los ojos. Y el caballito seguía adelante y atrás, meciéndolo, bien obstinado y obsesionado (…tu, tu… tu, tu… tu, tu… tu, tu…).
«El caballo amarillo» es un clásico que trasciende las épocas, en la línea del mejor Dostoievski. Una novela irrepetible, sombría como el crimen y cortante como el hielo. Borís Sávinkov: dandi asesino, mujeriego letal, inspirador de Camus, escritor y terrorista ruso de altos vuelos. Su vida y peripecias parecen sacadas de una novela de espías. «El caballo amarillo» es el diario, la confesión de George O’Brien, trasunto del propio Sávinkov, que prepara un atentado contra el gobernador general de Moscú, el Gran Duque Sergei Alexandrovich. George, antihéroe digno de las novelas de Dostoievski y nihilista redomado, planea el atentado minuciosamente mientras le atormentan los celos que siente por el marido de su amante. Política y misticismo, amor y sexo, escrúpulos y cinismo se combinan en esta novela para marcar las vidas de los cinco miembros del comando, a los que sólo puede parar la muerte, la horca o el suicidio.
Phoenix está a punto de hacer realidad el sueño de su vida. Su pequeño café en una pintoresca zona de Edimburgo está listo para abrirse. Han sido años de esfuerzo, pero ha merecido la pena. La inauguración es un éxito y el café se llena de amigos y familiares. Pero cuando Erin Miller se presenta por sorpresa solo puede significar una cosa: problemas. ¿Por qué ha vuelto a Edimburgo? Phoenix no recuerda bien cómo llegó a ser amiga de alguien como Erin Miller; la chica rebelde del instituto, la misma que rompía corazones sin pensar en las consecuencias. Una noche loca, algo de alcohol y ocurrió algo que Phoenix preferiría olvidar para siempre. Al día siguiente, Erin desapareció…durante seis largos años. ¿Qué hacía ahora en la inauguración de su café? ¿Por qué seguía sintiendo las mismas mariposas cada vez que Erin Miller sonreía? Dice que ha cambiado. ¿Es eso posible? ¿Puede alguien como Erin Miller cambiar? ¿Merece una segunda oportunidad o volverá a desaparecer como hizo hace seis años?
Cuando eres joven quieres comerte el mundo de un solo bocado, quieres experimentar y conocer los placeres de la vida. Besas, haces el amor y tomas su mano, como si de ello dependiera la vida. En su mirada encuentras las respuestas de tu existir y es todo lo que necesitas para caminar a su lado. Estar con ella es como estar en una montaña rusa de emociones, tus ojos están anclados en esa persona y vives por sus risas, sin embargo, ¿qué haces cuando rompe tu corazón? Ni la escuela ni la sociedad te enseñan cómo seguir adelante con el alma hecha pedazos, cuando la persona que amas se marcha de tu vida sin importarle cómo te encuentras, sin girar y sin decir adiós. Charles no ha podido superar a la mujer que rompió sus ilusiones, la mujer que jugó con sus sentimientos y abandonó a su hija. Él no ha podido dejar de amarla aun con el pasar de los años, la recuerda y sufre por no haber podido reparar su corazón. Ha tenido que ponerse una armadura y luchar por su hija; ha tenido que dejar todo para hacerla a ella feliz.
El padre de María, coronel del Ejército del Aire, es asesinado en un complot y su familia recibe la noticia de que se ha suicidado. María, de dieciocho años, se siente en parte responsable de la muerte de su padre y busca en la vida situaciones y personas que la castiguen. Se enamora de un apuesto joven holandés durante unas vacaciones de verano y todo hace pensar que se trata del hombre ideal, sin embargo, nada está más lejos de la realidad ...
«Anne Enright es delicada y audaz reflejando los vínculos entre los personajes, y logra momentos de alta resonancia emotiva». VICENTE MOLINA FOIX, BabeliaHace tiempo que los cuatro hijos de Rosaleen Madigan abandonaron su pueblo natal en la costa atlántica de Irlanda en pos de unas vidas que nunca habrían soñado, en Dublín, Nueva York o Segú. Ahora que su madre, una mujer tan difícil como fascinante, ha decidido vender la casa familiar y dividir la herencia, Dan, Constance, Emmet y Hanna regresan a su antiguo hogar para pasar allí la última Navidad, con la sensación ineludible de que su infancia y su historia están a punto de desaparecer para siempre...Hay pocos escritores que, como Anne Enright, sepan dotar al lenguaje de tanta tensión y tanto brillo, que puedan mostrar cómo las vidas de sus protagonistas estallan en mil pedazos para luego volver a fundirse en un cristal perfecto. O en palabras de la propia autora: «Cuando miro a la gente, me pregunto si vuelven a casa o huyen de sus seres queridos. No hay otro tipo de viaje. Y pienso que somos una clase curiosa de refugiados: escapamos de nuestra propia sangre o vamos hacia ella».
La publicación en 1932 de «El camino del tabaco» supuso un serio golpe al mítico sueño de oro americano. Con crudo realismo, su autor ponía al descubierto el rostro oculto de Estados Unidos: la miseria, la ignorancia y los problemas raciales, y formulaba una violenta acusación contra el sistema social de su país. Lo cual no fue en absoluto óbice para que el libro obtuviera un inmediato y arrollador éxito y fuera llevado incluso a la escena: se mantuvo en cartel durante más de siete años. Caldwell ambienta «El camino del tabaco» —que ya es considerado un clásico de la literatura norteamericana del siglo XX— en los campos del profundo Sur. Una familia, los Lester, se obstina en permanecer en sus tierras, las que fueron las mejores de Georgia. Apegados a sus tradiciones, a su pasado esplendor, se enfrentan al progreso opulento. Se verán reducidos, por ello, a la mayor pobreza. Y todo, por amor a la tierra que les vio nacer. Un amor que llegará a aniquilarlos.