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Cuentos a Ninon, de Émile Zola

Relato, Juvenil

En «Cuentos a Ninon», publicado en 1864 cuando Émile Zola tenía 24 años, el autor exhibe todos sus talentos y se sirve de todo tipo de registros narrativos: lo maravilloso, lo fantástico, la sátira, la épica, el realismo, la autobiografía; y explota todo tipo de matices: el humor, la ironía, el patetismo, la rabia. Este volumen de cuentos es un reflejo de toda su obra: resume diez años de producción literaria y anuncia temas, figuras y formas que el escritor desarrollará en sus grandes obras maestras. Entre cuentos de hadas y crónicas, bajo el signo de la fantasía y la seriedad, esta obra de juventud muestra la riqueza, la ambigüedad, el poder de la imaginación y la expresión de sus futuras novelas.


Cuentos adivinanzas y refranes populares. Recopilación, de Fernán Caballero

Relato, Infantil

Junto a cuentos de encantamiento y cuentos religiosos, Fernán Caballero incluye también Coplas de Nochebuena, Oraciones, Refranes y Adivinanzas. Destacamos algunas oraciones, de tradición infantil, que se dicen al levantarse, al acostarse, para ir a jugar o para empezar a comer. La virtud más destacable de su obra es la movilidad de los personajes y cuadros de costumbres y la creación de una atmósfera narrativa, que hace muy amena la lectura, por sus tramas ligeras e intencionadamente ingenuas. Entre sus obra podemos destacar que en 1849 aparecieron varias novelas suyas: La gaviota, Una en otra y Elia y, un año después, Lágrimas, Callar en vida y perdonar en muerte y No transige la conciencia. Durante la década de 1850 publicó más obras (Cuentos populares andaluces, 1852; Clemencia, 1852; Más largo es el tiempo que la fortuna, 1853; Simón Verde, 1853; Un verano en Bornos, 1855; Un servilón y un liberalito, 1859), hasta que en 1865 logró un gran éxito con La farisea.


Cuentos al amor de la lumbre, de Antonio Rodríguez Almodóvar

Relato, Fantástico

La fortuna que han alcanzado las recopilaciones de cuentos populares provenientes de otros ámbitos culturales —como las hechas en su día por los hermanos Grimm o, en menor medida, Perrault o Andersen— a menudo ha venido a oscurecer, de rechazo, el maravilloso acervo de relatos pertenecientes a la tradición de nuestro país. Antonio Rodríguez Almodóvar ha reunido en «Cuentos al amor de la lumbre» una muestra significativa de los cuentos populares españoles. Este volumen recoge los cuentos maravillosos, dentro de los cuales se hallarán, por ejemplo, aquellos que giran en torno a «Blancaflor», «Juan el Oso», los príncipes y princesas encantados, las tres maravillas del mundo, niñas perseguidas, niños valientes, princesas y pastores, muertos agradecidos, seres mitológicos, la ambición castigada y la muerte. También los cuentos de costumbres (entre ellos los referentes a niños en peligro —«Garbancito» o «La casita de turrón»—, pícaros, pobres y ricos, tontos, mujeres difíciles, así como cuentos de miedo) y los cuentos de animales, protagonizados por lobos, zorras y otras muchas criaturas.


Cuentos al amor de la lumbre 1. Cuentos al amor de la lumbre, I, de A. R. Almodóvar

Relato, Infantil

La fortuna que han alcanzado las recopilaciones de cuentos populares provenientes de otros ámbitos culturales -como las hechas en su día por los hermanos Grimm o, en menor medida, Perrault o Andersen- a menudo ha venido a oscurecer, de rechazo, el maravilloso acervo de relatos pertenecientes a la tradición de nuestro país. Antonio Rodríguez Almodóvar ha reunido en "Cuentos al amor de la lumbre" una muestra significativa de los cuentos populares españoles. Este primer volumen recoge los cuentos maravillosos, dentro de los cuales se hallarán, por ejemplo, aquellos que giran en torno a Blancaflor, Juan el Oso, los príncipes y princesas encantados, las tres maravillas del mundo, niñas perseguidas, niños valientes, princesas y pastores, muertos agradecidos, seres mitológicos, la ambición castigada y la muerte.


Cuentos al amor de la lumbre 2. Cuentos al amor de la lumbre, II, de A. R. Almodóvar

Relato, Infantil

Este segundo volumen recoge los cuentos de costumbres (entre ellos los referentes a niños en peligro – Garbancito o La casita de turrón–, pícaros, pobres y ricos, tontos, mujeres difíciles, así como cuentos de miedo) y los cuentos de animales, protagonizados por lobos, zorras y otras muchas criaturas.


Cuentos a medianoche, de Claudio Hernández

Relato, Terror

El ciclo del miedo es como una medida del mismo en diferentes estados. El miedo está ahí presente en cada momento. Nacemos con él y, según nuestra educación, podemos tener más o menos controlado el concepto de “miedo”, pero sigue estando ahí. En los momentos más inoportunos de nuestra vida aparece y se vuelve a quedar ahí para siempre. Por eso, en cada relato de este libro, encontrará un nivel del miedo entre el uno y el cinco, si habláramos de puntuación. Cada persona podrá recibir diferentes estímulos al mismo, según la historia. Todo depende del ciclo del miedo que tenga implícitos en nuestro yo. A menudo, el miedo puede paralizar el sistema nervioso y llevarte al pánico, o un shock indeterminado. El miedo forma parte de nuestras vidas y es una emoción más, que debe calcularse fría y serenamente. Tiene tratamiento, aunque no es curable, sino mitigable. Así que te pido que controles tu nivel del miedo y que empieces a leer esta antología de relatos que medirán tu estado de ánimo y el ciclo del miedo. Esta una es una segunda revisión de 'Miedo en la medianoche', así que si ya tienes el primero, no compres esta. En esta nueva revisión, se han corregido todas las historias y en concreto, la de zombi, se ha unificado en un solo relato. Zombi, los que caminan detrás de él, La chica que amo, El curioso caso del señor Carl Farmer, A veces duermen, Están entre nosotros, La muerte de Fletcher, Cuernos, un caso extraordinario, Las mascotas siempre vuelven, Catalepsia, El quinto invitado, El Apocalipsis que conocimos, La fotocopiadora, El atajo de la cuesta de la cabra, son las historias que enontrarás aquí.


Cuentos andinos, de Enrique López Albújar

Relato, Drama, Realista

Construido sobre la base de la experiencia y la observación, ‘Cuentos andinos’ (1920) constituye el testimonio descarnado y auténtico del impacto emocional que un aspecto de la realidad andina generó en su autor. Los hombres y las mujeres de ese universo narrativo actúan como impulsados por los más elementales instintos. Pero esos seres, en la visión de López Albújar, no son arquetipos; no comprometen, por tanto, al conjunto de la sociedad andina, ya que no implican una visión generalizadora y por lo mismo deformante. Los seres que pueblan ese universo son más bien individualidades que, colocadas en situaciones límite, rescatan su propia humanidad y defienden su derecho a la vida del único modo posible, en tales circunstancias: mediante la violencia. En ese contexto, la obra de Enrique López Albújar es una visión del indio liberada de sentimentalismos y de retórica. La lectura de estos ríspidos relatos debe hacerse sin perder de vista, por lo demás, la novelística indigenista decimonónica a la cual parece contraponerse este cuadro, de gruesas tintas, en el que no hay lugar para la vacilación o la lágrima, y donde el indio capta para sí un protagonismo evidente.


Cuentos antiguos, de Emilia Pardo Bazán

Relato, Otros

Compilación de nueve cuentos cortos que relatan diversas situaciones: desde la de un joven que tomó medidas drásticas con tal de no mentir, hasta la de un poeta en la antigua Grecia.
En una ocasión, Leopoldo Alas «Clarín» afirmó que Emilia Pardo Bazán era «uno de los españoles que más saben y mejor entienden lo que ven, piensan y sienten. Tratar con ella es aprender mucho». La crítica suele estar de acuerdo en afirmar que donde mejor se recoge su habilidad como escritora es, precisamente, en sus cuentos —valientes, modernos, de impecable factura—. Leer estas piezas supone una grata sorpresa. Emilia Pardo Bazán es sin duda una de las cuentistas más fecundas que ha producido la literatura de todos los tiempos. Notables por su número, los cuentos de Emilia Pardo Bazán, lo son también por la diversidad de sus temas y motivos.


Cuentos clásicos feministas, de Ángela Vallvey Arévalo

Relato, Infantil

Los cuentos clásicos tienen la fuerza de los mitos, que han evolucionado según los tiempos y representan un enorme tesoro de sabiduría, un delicado trabajo de inteligencia colectiva. Ángela Vallvey ha querido reivindicar ese legado, repleto de humor, poesía y terror, renovándolo hasta hacerlo más cercano y comprensible a los lectores contemporáneos, pero también siendo el a su signicado más profundo. Si bien, aquí no encontraremos historias en las que el amor romántico y acaramelado trastorna a los personajes (sobre todo a los femeninos), sino que las protagonistas se convierten en heroínas que descubren el peligro del desamor, del abuso y el desengaño. El cuento popular que se presenta en estas páginas pretende servir a las niñas y niños, adolescentes, padres y educadores, como una forma divertida de acercarse a nuestra herencia cultural y descifrar sus mensajes más sensatos e imaginativos. Aunque también, ¿por qué no?, como un manual de fantasía 3.0 que ayude a nuestros hijos e hijas a enfrentarse a la complejidad de la vida.


Cuentos completos (trad. Julio Cortázar), de Edgar Allan Poe

Relato, Fantástico, Terror, Sátira

Recopilación de los 67 relatos publicados a lo largo de su vida por Edgar Allan Poe (1809-1849), quien señaló que «al escribir estos cuentos uno por uno, a largos intervalos, mantuve, sin embargo, la unidad de un libro».  En un primer grupo de cuentos se reúnen las narraciones dominadas por el terror, la presencia de lo sobrenatural, la preocupación metafísica y el gusto por el análisis, mientras que en un segundo grupo se recogen las exploraciones sobre el pasado y el futuro, los bellos relatos contemplativos que encierran la filosofía de Poe sobre el paisaje, la serie de estampas grotescas y los cuentos de carácter satírico.


Cuentos completos, de Abelardo Castillo

Relato, Drama, Fantástico, Erótico, Humor

Un canon cuentístico de la narrativa argentina no podría soslayar (acaso junto a Borges y a Cortázar) la obra de Abelardo Castillo. No poco se ha dicho de estos mundos reales y siempre fracasaron los intentos de clasificarlos. Lo cierto es que Castillo recurre a una tradición sólo para reinventarla, para deshilvanar, en esquirlas de la misteriosa lucidez, la trama de lo real. «Hace años vengo sintiendo que mis cuentos pertenecen a un solo libro, Los mundos reales, único libro de cuentos que comencé a inventar antes de los dieciocho años, que crece y se modifica conmigo, y en el que encarnizadamente trabajaré toda mi vida». Así alude el autor a su incesante obra. Estas páginas urden su propio mundo. Son espejismos que arrastran al lector hacia una luminosa celada. Ensimismarse en ella es la gozosa experiencia que reduce a cero la frontera entre ficción y realidad.


Cuentos completos, de Abraham Valdelomar

Relato, Drama, Fantástico, Humor, Sátira, Otros

Abraham Valdelomar (1888-1919) es un caso excepcional dentro de la literatura peruana. Elogiado y atacado en vida como ningún otro escritor de su país, estuvo decidido a triunfar en su medio para lo cual no dudó en adoptar posturas desafiantes y escandalosas a la manera de Oscar Wilde, a quien seguramente quiso imitar. Sin embargo, detrás del decadentismo que solía mostrar en público y su apego a las frases brillantes e irónicas, se descubre un auténtico temperamento artístico, lleno de sentimiento y nostalgia, que se manifiesta en sus mejores poemas y relatos. Este volumen de ‘Cuentos completos’ mantiene la clasificación, establecida por el mismo autor, en «Criollos», «Incaicos», «Fantásticos», «Cinematográficos», «Chinos», etc. De estas categorías, Valdelomar trabajó especialmente la primera y la segunda, con relatos que reunió bajo los títulos de ‘La aldea encantada’ (1914, no llegó a publicarse; aparecieron luego en ‘El Caballero Carmelo’, 1918) y ‘Los hijos del Sol’ (póstumo, 1921), respectivamente.


Cuentos completos, de Agatha Christie

Relato, Policial, Intriga

Esta recopilación de narraciones cortas contiene todos los cuentos escritos por Agatha Christie en el orden cronológico cuando fueron publicados en el Reino Unido: un total de 153 textos disponibles en español. Hércules Poirot hizo su primera aparición en un cuento en la revista «The Sketch» en 1923, y fue de esa manera como aparecieron la mayoría de los cuentos de Agatha Christie: en revistas semanales y mensuales, lo que contribuyó a crear el ejército de fanáticos y seguidores de sus estupendas narraciones. Muchas presentaban a Poirot o a «Miss» Marple, pero otras le permitieron la libertad de experimentar con nuevos personajes o simplemente escribir misterios llenos de ingenio que han desafiado a muchos de sus lectores. Estas narraciones son una muestra de la amplitud del talento de Agatha Christie: desde los casos de asesinatos, robos y chantajes cargados del más puro suspenso, hasta los cuentos en que aborda la temática sobrenatural, estos relatos son una muestra de sus mejores argumentos que hacen de ellos «obras maestras en miniatura».


Cuentos completos, de Alberto Laiseca

Relato, Humor, Sátira, Fantástico

Alberto Laiseca publicó su primer cuento, «Mi mujer», bajo el seudónimo de Dionisios Iseka en el diario La Opinión el 19 de agosto de 1973, aunque su escritura estaba fechada casi dos años antes (29 de Octubre. 1971). Las páginas que el suplemento cultural le dedicó al joven escritor incluyen el anticipo de dos capítulos de la novela «Su turno» (que, por razones de mercado, fue publicada por decisión del editor con el título ampliado de «Su turno para morir») y una nota de presentación sin firma que reproducimos a continuación, antes de «Mi mujer», rescatado en hemeroteca para el volumen de «Cuentos Completos». El volumen, merecido homenaje a uno de los escritores más originales de la literatura contemporánea, recopila todos los cuentos que integran sus tres colecciones anteriores («Matando enanos a garrotazos, Gracias Chanchúbelo, En sueños he llorado»), otros publicados en antologías y quince inéditos escritos en los últimos años.


Cuentos completos, de Alejo Carpentier

Relato

Un gran escritor no escribe obras menores, y los cuentos de Alejo Carpentier demuestran esta verdad. Hombres, mujeres, espacio y tiempo, metáforas, y, sobre todo, un prodigioso y único estilo, barroco y a la vez geométricamente preciso, forman los fragmentos de mundo aquí reunidos. Tal vez porque al carecer de unidad novelística estos relatos se expanden en diferentes direcciones, como un universo en movimiento, el lector puede disfrutar el placer de una fascinante aventura: leer las novelas que Carpentier no escribió en medio siglo de paciente y espléndida consagración a la palabra.


Cuentos completos, de Alfredo Bryce Echenique

Relato, Otros, Realista

Los cuentos que agrupa esta edición completa de la obra breve del escritor peruano Alfredo Bryce Echenique incluyen desde los de su primer libro, Huerto cerrado, hasta algunos más recientes e inéditos. Sus cuentos tienen la ventaja de ser muy variados en su temática, muy sencillos en su historia (no en su construcción) y llenos de humor. A menudo son narrados desde el subconsciente de sus personajes, una técnica que recuerda al «flujo de conciencia» utilizado por James Joyce. «Dados a contarnos los unos a los otros, el mundo sería una novela de Bryce Echenique, una biografía sin pérdida. Todo comienza en los cuentos». JULIO ORTEGA


Cuentos completos, de Amy Hempel

Relato, Otros

Una de las autoras de relatos más importantes de la actualidad. Amy Hempel es la maestra del relato. Este volumen reúne su obra completa: cuatro libros de cuentos que nos hablan de matrimonios, de desastres y de momentos de revelación, todo ello narrado de manera sorprendente. Con su inimitable sentido de la compasión y del ingenio, Hempel nos presenta a personajes que deciden hacer elecciones que parecen inevitables y cuyas nostalgias y dudas nos remiten a unas vivencias humanas imperecederas. Ningún lector al que le guste la gran escritura debería pasar por alto este libro. «Cuentos completos» ganó el Ambassor Book Award de 2007 al mejor libro de ficción, el premio inaugural United States Artists Fellowship y fue finalista del PEN/Faulkner Award en 2006.


Cuentos completos, de Andrés Caicedo

Relato, Realista

Por primera vez se reúnen en un solo volumen los cuentos completos de Andrés Caicedo en esta edición que incluye el original de su primer relato, «El Ideal», inédito hasta el momento. La obra de este autor emblemático de la literatura colombiana, más de treinta años después de su muerte, resulta más fascinante y rompedora que nunca. «El mundo del Calicalabozo, ese mundo macabro poblado solamente por angelitos empantanados, obsesionado por contar historias para jovencitos —“Cali es una ciudad sólo para adolescentes”, solía decir Caicedo—, ese mundo que traza con tanta crueldad los destinitos fatales de sus tristes protagonistas, está en todos estos cuentos: su oscuridad, sus vidas alucinadas, su sexualidad confusa, su existencia en los márgenes, sus brutales estrategias para huir del sufrimiento (el de la juventud, que los personajes no saben distinguir del de la vida misma) que siempre acaban en el abismo y la perdición y el desencuentro irremediable. Los cuentos de Caicedo, obsesionados como estaban por la juventud, se han negado —igual que se negaba Peter Pan— a envejecer. Aquí están, tan jóvenes como hace décadas. Ni una arruga les ha salido». Juan Gabriel Vásquez «Andrés Caicedo, el chico de moda de los setenta, sigue estando de moda, lo que prueba que no es una moda, que lo que escribe trasciende idiomas, ciudades, grupos, tendencias. En esta era de Twitter, iPhones, chats y Skype, WhatsApp y YouTube, Caicedo parece el autor natural para narrar esta nueva generación: gente conectada y desconectada, con una sobredosis de información pero con emociones que no entienden del todo o que no pueden controlar». Alberto Fuguet


Cuentos completos, de Antonio di Benedetto

Relato, Fantástico, Aventuras, Obras completas

Antonio Di Benedetto es un «fenómeno» literario, un escritor anticlásico, que practicó una literatura silenciosa, inestable, en cambio constante. Un escritor que no cabe en el molde uniforme de la canonización, un escritor extraño o, mejor, un escritor de la extrañeza, del extrañamiento. Con las particularidades que le da Di Benedetto, el cuento es el laboratorio de su escritura, el cimiento del proyecto, la estructura que prefigura toda posibilidad de relato; en él se expanden algunas de las mejores páginas del autor. La forma breve, en Di Benedetto, es el punto de partida y de llegada de la trayectoria de creación y es, también, el espacio privilegiado de la innovación, del experimento, de la variación genérica. Los postulados de escritura del autor lo asocian con una filiación subterránea de la literatura hispanoamericana que prolonga la literatura fantástica, concentrándose en efectos y sentidos semejantes a los de los textos clásicos del género. Con prácticas muy variadas, podría incluirse en esa corriente a Felisberto Hernández, Silvina Ocampo o Virgilio Piñera. Son todos escritores donde lo fantástico se desarrolla como impresión y no como fenómeno argumental, como horizonte y no como mecanismo narrativo.Además de los relatos publicados originalmente en forma de libro, esta cuidada edición de los «Cuentos completos» que conmemora los veinte años de la muerte de Di Benedetto (1922-1986), incluye trece relatos publicados en diarios y revistas pero nunca retomados en libro, así como cuatro cuentos hasta ahora inéditos.


Cuentos completos, de Antón Chéjov

Relato, Realista

Al principio, Chéjov escribía simplemente por razones económicas, pero su ambición artística fue creciendo al introducir innovaciones que influyeron poderosamente en la evolución del relato corto.​ Su originalidad consiste en el uso de la técnica del monólogo —adoptada más tarde por James Joyce y otros escritores del modernismo anglosajón— y por el rechazo de la finalidad moral presente en la estructura de las obras tradicionales.​ No le preocupaban las dificultades que esto último planteaba al lector, porque consideraba que el papel del artista es realizar preguntas, no responderlas.​ Chéjov compaginó su carrera literaria con la medicina; en una de sus cartas, escribió al respecto: «La medicina es mi esposa legal; la literatura, solo mi amante». Según el escritor estadounidense E. L. Doctorow, Chéjov posee la voz más natural de la ficción: «Sus cuentos parecen esparcirse sobre la página sin arte, sin ninguna intención estética detrás de ellos. Y así uno ve la vida a través de sus frases».​