Descubrir el amor y la pasión te cambia la vida; perderlos puede arrebatártela. Tim y Amanda no tendrían que haberse conocido, sus vidas no deberían haber coincidido esa noche en una lujosa fiesta de Boston, pero coincidieron. Y les bastó con verse en los ojos del otro para saber que, cuando dos personas se pertenecen tan profundamente, quizá el tiempo y los errores no importen tanto. Quizá lo único que importa de verdad es el amor. Fue demasiado pronto y demasiado intenso. Se enamoraron, se casaron y se perdieron... Pero años más tarde, con nuevas vidas y con algunos sueños cumplidos, un truco del destino consigue que se reencuentren en París. Y esta vez, a pesar del dolor y de los remordimientos, los dos están dispuestos a luchar por lo que sienten, porque cuando no se olvida, no se puede dejar de amar.
Harrison MacMurray, agente de un peculiar departamento de Inteligencia, debe investigar los asesinatos de dos matemáticos y dos militares retirados y la primera pista fiable que encuentra vincula esas muertes con un prestigioso y joven congresista, el niño mimado del Capitolio, Benedict Holmes.Victoria se casó con Benedict porque compartían el mismo sueño: cambiar las leyes para que sirvieran de verdad a quien las necesitaba y no solo a quien podía pagarlas, pero Ben ahora es distinto y ella ya no se siente feliz con su vida. Hasta que una mañana conoce a Harry, el analista informático que han contratado para la campaña de reelección de su marido.Harry tiene que averiguar cuanto antes si Benedict Holmes es un traidor, no pensar en Victoria, en lo increíbles que son sus ojos, en lo excitantes que resultan todos y cada uno de los segundos que pasa con ella. Debe ir con cuidado, un mero error podría ser mortal para los dos. Y tiene que encontrar el modo de contarle la verdad a Victoria antes de que sea demasiado tarde. O tal vez ya lo sea…Porque el amor es lo más peligroso que puede sucederles.
Con apenas dieciocho años, Pam sobrevivió a un infierno y empezó de cero lejos de casa. Entonces se prometió que sería fuerte y los tatuajes que lleva le recuerdan que es una luchadora y que no necesita a nadie. Su trabajo como fotógrafa y cámara le permite viajar por el mundo y se especializa en rodar documentales, cuanto más peligrosos mejor. Pero el último casi acaba con su vida y ahora, para evitar que la despidan, tiene que rodar un maldito documental en Cerdeña con el National Geographic. Pam se lo toma con resignación, como unas vacaciones forzosas, hasta que se tropieza con Ben y siente que nada de lo que ha hecho o sentido hasta ahora la ha preparado para un hombre como él. Ben estudió la carrera perfecta, se enamoró y se casó con la mujer perfecta y tenía el trabajo perfecto. Hasta que estuvo a punto de ser acusado de traición. Ahora Ben acaba de divorciarse y ha dimitido. No tiene nada ni a nadie, y necesita desaparecer para poder pensar y recordar quién es de verdad. Cuando tenía veinte años pasó un verano en Cerdeña y, en un impulso, compra un billete para la isla. Una vez allí, Ben se da cuenta de que lleva años viviendo sin respirar, sin sentir, sin emocionarse y decide hacer todo lo que sea necesario para remediarlo. Pero en sus planes no entra para nada sentirse atraído por una mujer completamente opuesta a él, una mujer cuya mirada contiene demasiados secretos y a la que él, sin saberlo, lleva toda la vida esperando. Hay personajes secundarios que se merecen su propia y gran historia de amor. Si conociste a Pam y a Ben en Las reglas del juego y Donde empieza todo, ahora te enamorarás de ellos en Fuera de juego.
La escritura mágica de Colleen McCullough consigue, en Las señoritas de Missalonghi, transportar al lector a un mundo fascinante que participa por igual de la realidad y de la ensoñación. Missy Wright, la protagonista de la novela, es una mujer soltera que, a sus 33 años, compensa los tonos grises y difíciles de su vida con la lectura de novelas románticas. Missy arrastra una vida sin alicientes en la localidad australiana de Byron. Una existencia llena de estrecheces económicas y la convivencia con su madre y su tía constituyen las referencias vitales en que se mueve nuestra heroína cotidiana. Hasta que, inesperadamente, entra en escena John Smith, un desconocido que proyecta instalarse en el valle cercano a la casa en que habita Missy. A partir de aquí, despuntará un mundo de felicidad y entrega que colmará las ilusiones, hasta entonces frustradas, de la protagonista del relato. El hechizo del amor hará milagros y Missy alcanzará una vida llena, por encima de las mezquinas tensiones familiares y la marginación femenina de que había sido víctima. Las señoritas de Missalonghi es una descripción exacta y brillante de la vida en una remota localidad australiana y, también, un verdadero cuento de hadas.
Cambiar de aires nunca fue fácil. Sobre todo cuando llegas a una ciudad nueva y descubres que estás en el sitio equivocado en el momento equivocado.
¿Quién mandaría a Delia ir a estudiar lejos de su casa? Eso mismo se pregunta ella cuando se ve inmersa en un secreto que nada tenía que ver con su vida, hasta ahora.
Ya es tarde. No hay marcha atrás.
Una universitaria asustadiza, un italiano loco y una catedral tan bella como terrorífica son los ingredientes de esta historia cuyo final es impredecible.
Camila pierde a su familia a raíz de una denuncia a los maltratos de su padre. Ahora debe sobrevivir sola en el Bronx con un trabajo de porquería. Sin embargo algo ocurre que le hace aceptar una oferta no muy decente para poder hacer realidad sus sueños, una que le lleva a conocer a dos hombres, uno que paga lo que sea por su presencia y el otro que se pierde en sus ojos y pelea a toda costa por estar a su lado.... Hay un misterio en la vida de ambos hombres, algo que Camila no sospecha...Cuando se entere de la maraña, deberá o rendirse o elegir. Pasión, drama e intrigas y además unos personajes increíbles que rodean a este trío. No te pierdas este primer libro de la bilogía Condenado a tu amor.
Charleen ha tenido una vida llena de desgracias. Cuando decide hacer un análisis de su pasado, descubre cosas que no sabía y que ha afectado su árbol genealógico. Debe solucionarlo para evitar que sigan ocurriendo cosas extrañas a su alrededor. Su futuro dependerá de descubrir el secreto y las personas que pueden ayudarla a salvarse a sí misma.... Un psicólogo, una amiga y un grupo. Ellos forman parte del futuro y la felicidad de ella. ¿Podrá conocer la historia familiar y el secreto que no ha permitido que sea feliz? ¿Se rendirá en una depresión? ¿Encontrará el amor de su vida?
Hacía cuatro años, Skye Kellerman había sido atacada a punta de cuchillo en su propia cama. Consiguió ahuyentar a su agresor, pero aquel trauma cambió su vida por completo. A raíz de aquello se unió a dos amigas para fundar El Último Reducto, una asociación de ayuda a las víctimas de delitos violentos. Ahora, el doctor Oliver Burke, el hombre que intentó violarla, ha salido de la cárcel. Él no ha olvidado que el testimonio de Skye le costó su reputación... y su libertad. David Willis, el detective de Sacramento que investigó el caso, cree que Burke, al que considera responsable de al menos tres asesinatos sin resolver, sigue siendo una amenaza. Burke está libre para aterrorizar de nuevo a Skye; a no ser que David logre detenerlo o que ella consiga defenderse. Porque aquel psicópata tenía intención de acabar lo que había empezado.
Romain Fornier había perdido su única razón para vivir cuando su hija fue secuestrada y asesinada. Tras tomarse la justicia por su mano, pasó varios años en prisión. Una vez cumplida su condena, regresó a sus raíces cajunes, en el corazón de Luisiana. Ahora, descubría que tal vez había matado al hombre equivocado. Jasmine Stratford estaba convencida de que el asesino de la hija de Romain seguía vivo… y de que Romain y ella tenían algo en común. Creía que la misma persona había secuestrado a su hermana Kimberly hacía dieciséis años. Jasmine decidió seguir la pista del secuestrador cuando recibió un paquete anónimo con matasellos de Nueva Orleans: la pulsera que le regaló a Kimberly por su octavo cumpleaños. Recurrió a Romain porque sabía que él podía ayudarla… y porque no podía dejar de soñar con él. Pero buscar al hombre que había cambiado irrevocablemente el curso de su vida significaba aceptar el desafío de un asesino: Detenme.
Sheridan Kohl y Jason Wyatt, dos adolescentes, estaban en un coche aparcado junto al lago de Whiterock cuando les disparó un desconocidocubierto con un pasamontañas. Sheridan logró sobrevivir, pero Jason murió, y su asesino nunca fue descubierto. Aunque la familia de Sheridan se trasladó poco después, ella seguía obsesionada. Doce años después, Sheridan regresó a Whiterock impulsada por el hallazgo de una nueva pista. Pero fue agredida por segunda vez, y sólo consiguió sobrevivir gracias a la intervención de Cain Granger, el hermanastro de Jason... el hombre a quien no había podido olvidar y la última persona a la que deseaba ver. De no ser porque ella había querido darle celos a Cain, Jason no habría estado en aquel coche. Cain sabía que seguramente a su hermano no lo mató un desconocido. Sin embargo, no era fácil descubrir la identidad de un asesino que parecía adelantarse a todos sus movimientos
Una tarde de mayo, la hija de trece años de Zoe Duncan desaparece de su propio patio. La policía piensa que Samantha ha huido porque es el próximo matrimonio de su madre le hace desgraciada, pero Zone no lo cree. De hecho, está dispuesta a hacer lo que sea para recuperar a Sam, aunque eso represente perder su empleo, su hermosa casa y a su prometido. Aunque signifique divulgar todos sus secretos a un detective privado. onathan Stivers es un detective privado que dona su tiempo a The Last Stand, un refugio para víctimas de Sacramento. Es muy bueno en su trabajo; es el mejor. Pero nunca antes había contado con tan pocas pistas que seguir, o sentido más atraído por una cliente. Jonathan tan solo está seguro de una cosa: Sam fue raptada por alguien próximo a la familia. Pero no se imagina cómo de próximo hasta que se da cuenta de que la pareja «perfecta» es todo lo contrario de lo que aparenta ser…
La obsesión conduce a las mentiras… Cuando Luke Trusell, capitán de las fuerzas aéreas, abre su puerta una mañana de domingo, se queda pasmado al encontrarse con la policía… y más aún cuando le acusan de violación. Sabe que ha cometido un error de juicio la noche anterior, pero desde luego no forzó a la mujer que le había perseguido durante meses. El problema es que Karina Harter tiene moratones, y las pruebas de ADN, que respaldan su acusación… Y las mentidas pueden conducir al asesinato… Decidida a aislar a Luke, Karine recurre a Ava Bixby, la abogada defensora de Last Stand, con la esperanza de que le ayude a meter a Luke entre rejas. Pero Ava no tarda en darse cuenta de que está defendiendo a la víctima equivocada. El problema es que darle su apoyo a Luke podría ser peligroso… sobre todo cuando se enamora de él. Porque Karina no está dispuesta a perder al hombre al que quiere. Y mucho menos por Ava.
Sebastian Costas llevaba más de un año intentando descubrir la verdad que se ocultaba tras el asesinato de su exesposa y su hijo. A pesar de todas las pruebas que parecían evidenciar lo contrario, estaba convencido de que el segundo marido de su exesposa, un policía, había cometido ambos asesinatos y había fingido después su propia muerte. Siguiendo una pista que podía conducirle hasta él, llegó a Sacramento. La investigadora Jane Burke le llamó en relación con un delito diferente... un delito que podía guiarle directamente al hombre que durante tanto tiempo había estado buscando. Tras haber estado casada con un asesino en serie, Jane Burke había pasado cinco años tratando de rehacer su vida. Y con Sebastian había encontrado por fin una oportunidad de ser feliz. Pero el hombre al que pretendían encontrar también los buscaba a ellos. Para aquel asesino, aquello se había convertido en una batalla personal, y estaba decidido a ganarla costara lo que costase...
Claudia es una joven a la que todos desean, pero ahora atraviesa un momento de confusión y los problemas se le amontonan. Por casualidad, su vida se cruzará con la de Amaia, una enfermera alocada que reprime sus sentimientos lésbicos y que está a punto de casarse. Con ella descubrirá su lado más oculto.
—Estoy sin empleo fijo. Llegué a Dorset hace seis meses. Me dedico a inyectar a la gente que me llama, a velar moribundos por la noche, y no soy capaz de pillar un empleo fijo. Puede que este me sirva. ¿Quieres explicarme quiénes son los Doyle? —Un maniático que perdió a su mujer hace seis o siete años. Un tipo cargado de millones y de manías. —¿Está enfermo? —No. Lo está su hijo de quince años. —¡Oh! —No hay quien aguante al padre ni al hijo. ¿Aún sigues aspirando a ese empleo? Hara Stark lo pensó un segundo. Terminó de fumar aquel cigarrillo y encendió otro nerviosamente.
Imogen Waterstone siempre se había sentido orgullosa de ser una mujer absolutamente independiente. Pero las circunstancias hicieron que necesitara un hombre. Y no cualquier hombre, sino alguien con una voluntad férrea y nervios de acero. Por eso invitó a su casa a Matthias Marshall, el infame conde de Colchester. ¿Quién más adecuado que el legendario explorador para ayudarla a tender la trampa perfecta? Su plan era sencillo: permitir que se supiera que cuando heredara la colección de antigüedades de su tío también heredaría el mapa del lugar donde se escondía un fabuloso y antiguo tesoro. Estaba segura de que su enemigo estaría dispuesto a quedar en la ruina si a cambio podía tener acceso al mítico botín. Y para asegurarse de que el canalla mordiera el anzuelo, la implacable joven esperaba que Colchester apareciera como el cruel rival del señor y fingiera que estaba dispuesto a seducirla para conseguir el mapa. Pero cuando Matthias acepta participar en la farsa, Imogen descubre que otros peligros se interponen en su camino y que el destino le ha tendido una trampa de la que le resultará difícil librarse.
Heroínas inteligentes y aventureras que saben defenderse en situaciones peligrosas, así son las protagonistas de los libros de Claudia Cortez. Julia no creía en el "más allá", ese lugar al que todos van y del que nadie vuelve. ¿Nadie vuelve? Sin embargo, cuando Damián murió se dio cuenta cuán profundamente se había aferrado a la promesa que él le había hecho.Pero él no volvió cómo había prometido. Si tus muertos nunca regresan ¿es porque no existe otra vida? Pero, ¿si regresan y desean quedarse a tu lado cuidándote? Una historia de fantasmas y algo más, ingeniosamente misteriosa e inesperadamente romántica. Suspense y amor son los principales ingredientes de esta original novela que acelerará tu corazón en cada vuelta de página.
Me llamo Rhys Knight y soy uno de los hombres más ricos de Estados Unidos. Nunca he mezclado los negocios y el placer, y prueba de ello es el imperio que he levantado en poco tiempo. Cierro contratos, destino dinero a causas benéficas y salgo con mujeres preciosas a las que no vuelvo a ver al día siguiente. Mi vida es perfecta, o al menos lo era hasta que mi mejor amigo me pidió el favor de contratar a su hermana pequeña como secretaria…, y desde ese día soy incapaz de no imaginármela desnuda.
Casey Evans es todo lo que no suelo buscar en una mujer: habla demasiado y le gusta el contacto físico, lo que supone el incumplimiento de dos de mis reglas a la hora de trabajar conmigo. Sin embargo, supe que todo cambiaría esa noche, cuando celebramos haber cerrado un acuerdo con un magnate ruso… A partir de ese momento tuve claro que no podría mantenerme alejado de ella nunca más.
Me llamo Lilia Hilinger, vivo en Fuentealcántaro y soy una de «las tres patas pa un banco» junto a mis hermanas. Estaba yo tan tranquila con mi vida cuando Gus ha vuelto a parecer en ella. ¿Que quién es este hombre? Mi ex. Mi único ex. Ese con el que empecé a salir cuando apenas era una cría... hasta que él decidió por los dos que debíamos separarnos. Me llamo Lilia Hilinger y esta es mi historia.
Me llamo Azalea Hilinger y soy la segunda de tres. Dicen que la mediana recibe por ambas partes, quizá sea ese el motivo por el cual tengo la cara tan dura y la lengua tan suelta. Estaba yo tan tranquila con mi vida cuando Bruno ha aparecido en ella. ¿Que quién es Bruno? El sobrino de nuestra difunda tía Carmen. Y, ¿por qué ha perturbado mi calma? Porque me ha recordado un suceso que he tratado de olvidar durante años. Soy Azalea Hilinger y esta es mi historia.