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Augusto, de Adrian Goldsworthy

Crónica, Historia, Memorias

Idus de marzo del año 44 a. C., Julio César fue asesinado a los pies de la estatua de Pompeyo. En ese momento, Octavio no era más que un oscuro adolescente recién adoptado por el primer hombre de Roma. Ante el magnicidio, dio un paso al frente y se proclamó su legítimo heredero y sucesor. Nadie le tomó en serio, sin embargo, en pocos meses formó un ejército y consiguió alzarse como uno de los tres hombres más poderosos del momento con Marco Antonio y Lépido. Durante la década siguiente se fue consolidando mientras Marco Antonio fracasaba en Oriente y caía en los brazos de Cleopatra. Octavio, confiado en sus fuerzas, atacó a su viejo aliado y le venció. En el 31 a. C., ya sin rivales, se convirtió en el primer emperador acabando para siempre con la República. Y así, Octavio pasó a llamarse Augusto y Roma se transformó en un imperio. Consumado manipulador, propagandista y con gran dominio de la teatralidad, Augusto podía ser impulsivo y emocional, despiadado y generoso. De la familia y los amigos esperaba que representaran los papeles que les había asignado, por eso exilió a su hija y su nieto cuando no se ajustaron al guion. Fue el suyo un gobierno repleto de contradicciones por lo que su personalidad resulta difícil de aprehender. En esta nueva biografía, Adrian Goldsworthy como ya hiciese para abordar la figura de Julio César, se apoya exclusivamente en las fuentes antiguas para tratar en detalle la existencia del emperador y dar nueva luz sobre el hombre y su época.


Aunque perdamos la vida, de David Espino

Crónica, Ciencias sociales

En Aunque perdamos la vida David Espino ofrece una impactante crónica que nos lleva al corazón de las autodefensas y las policías comunitarias. El reportero guerrerense David Espino explica el surgimiento de los movimientos de autodefensa en Guerrero y las estrategias del gobierno para corromperlos y amenazar o encarcelar a sus líderes. En la última década, la tasa de homicidios en Guerrero ha incrementado más de 300 por ciento. Durante mucho tiempo, la gente ha tenido que atestiguar ejecuciones, tropezar con cabezas cercenadas y cuerpos apilados. Decenas de niños, ancianos y estudiantes han muerto en fuegos cruzados, mientras secuestros y extorsiones ocurren casi a diario. Desde 2012, miles de guerrerenses se alzaron en armas en Huamuxtitlán, Olinalá, Ayutla, Tecoanapa, Tixtla, Tlapa, Tierra Colorada... Alrededor de 40 municipios se unieron en un grito de guerra contra la delincuencia. ¿Por qué hasta hace poco a nadie le había interesado lo que estaba pasando en Guerrero? ¿Por qué nadie volteó a ver los cientos de desaparecidos, no en pueblos perdidos, sino en lugares tan conocidos como Taxco, Acapulco o Chilpancingo? ¿Por qué se creyeron el discurso del Estado de que todas las víctimas tenían algo que ver con el narco? Las respuestas a estas preguntas se entretejen con una impactante crónica que nos lleva al corazón de las autodefensas y las policías comunitarias. El reportero guerrerense David Espino explica el surgimiento de estos movimientos y las estrategias del gobierno para corromperlos y amenazar o encarcelar a sus líderes, como Bruno Plácido Valerio o Nestora Salgado. Hasta ahora, en Guerrero prevalece la lucha territorial del crimen organizado, las autoridades prácticamente no existen, pero la población se mantiene en pie de lucha.


Auschwitz. Cada día, un día más, de Esther Mucznik

Crónica, Historia

«Cada día quería morir y cada día luchaba por sobrevivir» Shlomo Venezia, superviviente de Auschwitz  El campo de concentración de Auschwitz es el sinónimo del mal absoluto que el nazismo preconizó. Los judíos y gitanos sirvieron como cobayas para la experimentación diabólica de los nazis, gaseando a más de un millón de personas y matando de hambre, frío, agotamiento o, simplemente, de soledad y desesperanza. Sin embargo, muchos presos resistieron a la total deshumanización del campo esforzándose por mantener la dignidad. Cuidar la higiene, escribir o dibujar eran actos que ayudaban a sobrevivir. Esther Mucznik cuenta a través de las voces de aquellos que sobrevivieron al infierno de Auschwitz el insoportable silencio tras los asesinatos de niños, la barbarie de la experimentación médica sobre miles de hombres y mujeres o la lucha por sobrevivir en un campo de horror y muerte. Estos son los relatos que deben servir para mantener viva la memoria de aquellos que sucumbieron a la maquinaria del terror nazi.


Auschwitz: última parada, de Eddy de Wind

Crónica, Memorias

Eddy de Wind llega a Auschwitz en 1943 junto a su esposa Friedel. Él es médico y ella enfermera. Allí son separados. Ella queda entre los presos destinados a los crueles experimentos médicos del Dr. Mengele; él al cuidado de los prisioneros políticos polacos. Cuando la guerra está perdida y los nazis huyen del campo con los presos que sobreviven (entre ellos su mujer), Eddy decide esconderse y esperar la llegada de los rusos. Permanece por un tiempo con ellos en el campo y allí empieza a escribir Auschwitz, última parada, donde describe la rutina diaria, las atrocidades de las que ha sido testigo y víctima y la liberación por los rusos. Pero en su texto muestra también su amor y deseo hacia Friedel.


Auschwitz y después 1. Ninguno de nosotros volverá, de Charlotte Delbo

Crónica, Memorias

En 1942, Charlotte Delbo fue detenida en París y encarcelada por pertenecer a la Resistencia francesa y, en 1943, deportada al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau junto con doscientas treinta presas francesas, de las que solo sobrevivirían cuarenta y nueve. El presente volumen recoge los dos primeros libros de su elogiada trilogía Auschwitz y después, en los que relata esa experiencia.  Delbo reconstruye su recuerdo a partir de breves y poéticas estampas de vida y de muerte, y lo hace en gran medida desde una voz colectiva femenina, la de todas las cautivas que, pese a haber sido desposeídas de su identidad, supieron sostenerse las unas a las otras. A partir de esa particular mirada, la autora logra encontrar palabras para lo inefable e ir todavía más allá, creando belleza donde no podía haberla. Uno de los testimonios más emotivos y necesarios de la literatura concentracionaria, a la altura de los de Primo Levi o Elie Wiesel. Sin duda, una obra maestra literaria.


Auschwitz y después 2. Un conocimiento inútil, de Charlotte Delbo

Crónica, Memorias

En 1942, Charlotte Delbo fue detenida en París y encarcelada por pertenecer a la Resistencia francesa y, en 1943, deportada al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau junto con doscientas treinta presas francesas, de las que solo sobrevivirían cuarenta y nueve. El presente volumen recoge los dos primeros libros de su elogiada trilogía Auschwitz y después, en los que relata esa experiencia.  Delbo reconstruye su recuerdo a partir de breves y poéticas estampas de vida y de muerte, y lo hace en gran medida desde una voz colectiva femenina, la de todas las cautivas que, pese a haber sido desposeídas de su identidad, supieron sostenerse las unas a las otras. A partir de esa particular mirada, la autora logra encontrar palabras para lo inefable e ir todavía más allá, creando belleza donde no podía haberla. Uno de los testimonios más emotivos y necesarios de la literatura concentracionaria, a la altura de los de Primo Levi o Elie Wiesel. Sin duda, una obra maestra literaria.


Autobiografía, de Agatha Christie

Crónica, Memorias

La sorprendente carrera de Agatha Christie es de sobra conocida. Sus cifras de venta sólo han sido superadas por la Biblia y por las obras de Shakespeare. Los films basados en sus libros —el más famoso «Asesinato en el Orient Express»— han batido innumerables récords de taquilla. La obra teatral «La ratonera», representada por primera vez en 1952, continúa aún hoy, registrando llenos diarios, batiendo el récord mundial de permanencia en cartel. Sus novelas han alcanzado los primeros puestos en las listas de libros más vendidos, no sólo en los países de habla inglesa, sino prácticamente en todo el mundo. En 1971, como reconocimiento a su labor, se le concedió el título de Dama del Imperio británico. A pasar de sus éxitos, ha sido una persona muy celosa de su intimidad, que ha llegado a extremos casi extravagantes en su afán de eludir las apariciones en público. Rodeó su vida con un manto de misterio casi tan impenetrable como el de sus novelas. Esta obra nos cuenta, por fin, su vida, los años felices de la infancia pasados en el extranjero y en Torquay; los devaneos amorosos de la juventud; su primer matrimonio con el coronel Christie, celebrado bajo el impacto de la primera guerra mundial, feliz durante muchos años pero que al final fracasó; los contratiempos sufridos al comenzar la carrera de escritora y la consecución gradual de su éxito sorprendente; su segundo y felicísimo matrimonio con el famoso arqueólogo Max Mallowan y las satisfacciones que la profesión le proporcionó; su segunda carrera, el teatro, en la que también obtuvo un éxito increíble; sus casas y jardines; su familia. Todo ello figura en este libro, relatado con una honradez y lucidez absolutas, sin tomarse en serio a sí misma, indiscreta con sus debilidades, generosa con los demás. Es un libro regocijante; la autobiografía de alguien que ha sabido disfrutar plenamente de la vida y, al mismo tiempo, el estudio de una profesional consciente, de una escritora que sabía perfectamente cuál era su trabajo y que nos cuenta cómo lo realizo. «Estoy satisfecha —escribió al terminar este libro— he hecho lo que pretendía». En realidad ésta es la historia de alguien que sabía lo que quería hacer y lo hizo magníficamente.


Autobiografía, de Angela Y. Davis

Crónica, Memorias

Publicada en 1974 y escrita cuando tenía 28 años, la autobiografía de Angela Davis es una radiografía fundamental de las luchas sociales en Estados Unidos durante los años sesenta y setenta, periodo en el que se convirtió en un icono del Movimiento de Liberación Negro. En sus páginas, Davis expone el punto de vista de una militante afroamericana y su particular visión del movimiento negro y el feminismo, en uno de los momentos más efervescentes de la historia política reciente, cuando el imperialismo norteamericano estaba a la defensiva tanto en el exterior (Vietnam, frentes de liberación, etc.) como en el interior. Fue en este periodo cuando fue perseguida y encarcelada por diversas autoridades, falsamente acusada de secuestro, conspiración y asesinato. Más que ideas abstractas, teorías o ejercicios intelectuales triviales, lo que encontramos en este volumen es una profunda preocupación por la dignidad de la gente, en un momento histórico en el que la lucha por estos valores se libraba a vida o muerte. Y Davis luchó por la vida de muchos como si fuera por la suya propia.


Autobiografía, de Charles Chaplin

Crónica, Memorias, Comunicación

Charlot, personaje icónico del siglo xx, acaba de cumplir cien años, pero no ha perdido su bombín ni su bastón... y desde luego ni un ápice de su carácter. En esta autobiografía, publicada en 1964, Chaplin cuenta la fascinante historia de su vida, desde su trágica infancia en una familia de artistas hasta los primeros pasos en el teatro musical londinense y su traslado a Estados Unidos. Allí, su talento para entretener de manera inteligente al público le permitió emprender una carrera cinematográfica que lo llevó a convertirse en uno de los rostros más conocidos de todo el planeta y ser el alma de obras maestras como Tiempos modernos o Candilejas, que hoy son clásicos indiscutibles. Chaplin encarna como pocos el espíritu del siglo XX. Fue un genio del cine mudo que se resistió a aceptar la invención del sonoro. Y, cuando finalmente accedió a ello, fue para caricaturizar a Adolf Hitler, cuya imitación en El gran dictador es una de sus creaciones más memorables. Ese gran hombre supo hacer reír sin renunciar a la lucha contra la censura y a favor de la libertad en su sentido más amplio, convirtiéndose así en una leyenda de la historia del cine. Oír ahora su voz a lo largo de estas páginas es volver atrás en el tiempo y también aprender algo de lo que el presente nos depara. «Para reírte de verdad, tienes que ser capaz de agarrar el dolor y jugar con él». Charlie Chaplin>


Autobiografía, de Charles Darwin

Crónica, Memorias

«Un editor alemán me escribió pidiéndome un informe sobre la evolución de mi mente y mi carácter —escribe Darwin—, junto con un esbozo autobiográfico, y pensé que el intento podría entretenerme y resultar, quizá, interesante para mis hijos o para mis nietos. […] He intentado escribir el siguiente relato sobre mi propia persona como si yo fuera un difunto que, situado en otro mundo, contempla su existencia retrospectivamente, lo cual tampoco me ha resultado difícil, pues mi vida ha llegado casi a su final.» CHARLES DARWIN No obstante, a los ojos de la familia, y especialmente de su mujer Emma Wedgwood, Darwin escribió estas memorias con demasiada libertad. El autor de El origen de las especies exponía abiertamente sus opiniones sobre amigos y conocidos, y de manera muy particular sobre la religión (el cristianismo le parecía, por ejemplo, «una doctrina detestable»). El texto apareció censurado en su primera edición, y sólo en la década de 1950 se recuperó la versión íntegra, sin recortes.


Autobiografía, de G. K. Chesterton

Memorias, Crónica

G. K. Chesterton, celebradísimo escritor de ficción, fue también un renombrado autor de ensayos y un acerado polemista que dejó, tras su muerte, en 1936, la Autobiografía que hoy presentamos. Más allá de trazarnos el recorrido vital de su memoria, Chesterton nos abre una ventana al mundo que le tuvo ocupado como periodista y escritor de panfletos —así es como él quería ser recordado— y con el que raramente mantuvo una convivencia pacífica. Chesterton es el hombre visceral, polémico y apasionado, que no dudaba en proclamar de viva voz su denuncia ante un sistema político corrupto y una moral propagandística cuyo telón de fondo era la guerra de los Bóers (la incursión británica en Sudáfrica que tan popular fue entre la sociedad inglesa) y la Primera Guerra Mundial. Su conversión al catolicismo acabó de situarlo en el papel de personaje excéntrico y contestatario. Hoy, por su extraordinaria agudeza intelectual y su brillante habilidad para esgrimir la paradoja como arma de argumentación, Chesterton sigue siendo el estimulante pensador que consiguió mantener, en vilo y al acecho, a miles de lectores.


Autobiografía de Giambattista Vico, de Giambattista Vico

Crónica, Memorias

Giambattista Vico (1668-1744) escribe su autobiografía como historiador y como filósofo, y las dos perspectivas se funden —como se preconiza como método de su Ciencia Nueva— para alcanzar la verdad de su vida literaria que halla en la conjunción de la conciencia de lo cierto y de la ciencia de lo verdadero, en la coherencia de lo hecho y lo razonado. Si la Ciencia Nueva es, en metáfora viquiana, el espejo donde la mente universal se ve a sí misma en su devenir, del texto autobiográfico viquiano podemos decir que es el espejo donde la mente del napolitano se ve reflejada en su devenir, ofreciéndonos tres sucesivas objetivaciones de su autoconciencia en tres momentos cruciales de su vida intelectual que conformaron su Ciencia Nueva. Con formulación irónica podríamos decir que la existencia de la autobiografía nos muestra cómo su providencia, la de Vico, se ocupó —forzando su voluntad— de que quedara para tiempos postreros este relato de la génesis o esta autoaplicación de su obra teórica mayor que, ahora, nos atreveríamos a ver como exigidos, tanto el uno como la otra, por necesidad interna de sus propios postulados teóricos. El presente volumen ha sido prologado, traducido y anotado por Josep Martínez Bisbal (Universitat de Valencia) y Moisés González García (UNED) a partir del texto establecido para la edición crítica de la obra viquiana y con la colaboración del Centro di Studi Vichiani de Nápoles.


Autobiografía de una mujer emancipada, de Aleksandra Kollontai

Crónica, Ciencias sociales, Historia, Memorias

«Aún creía que habría de venir un tiempo en que la mujer sería juzgada con las mismas medidas morales que el hombre. Pues no es su virtud específicamente femenina lo que le confiere un puesto de honor en la sociedad, sino el valor del trabajo útil que haya desempeñado, el valor de su personalidad como ser humano, como ciudadana, como pensadora, como luchadora… este motivo ha constituido la fuerza directriz de toda mi vida y obra. Seguir mi camino, trabajar, luchar, crear lado a lado con los hombres y aspirar a un objetivo universal humano, construyendo al mismo tiempo mi vida personal e íntima como mujer, según mi propia voluntad y las leyes innatas de mi naturaleza: tales son los postulados que han condicionado mi ideario»


Autobiografía en construcción 1. Cosas que no quiero saber: una respuesta al ensayo de 1946 de George Orwell 'Por qué escribo', de Deborah Levy

Crónica, Memorias

Deborah Levy arranca estas memorias recordando la etapa de su vida en que rompía a llorar cuando subía unas escaleras mecánicas. Ese movimiento inocuo la llevaba a rincones de su memoria a los que no quería volver. Son esos recuerdos los que forman Cosas que no quiero saber, el inicio de su «autobiografía en construcción».   Esta primera parte de lo que será un tríptico sobre la condición de ser mujer nace como respuesta al ensayo «Por qué escribo», de George Orwell. Sin embargo, Levy no viene a dar respuestas. Viene a abrir interrogantes que deja flotando en una atmósfera formada por toda la fuerza poética de su escritura. Su magia no es otra que la de las conexiones impredecibles de la memoria: el primer mordisco a un albaricoque la traslada a la salida de sus hijos de la escuela, observando a las otras madres, «jóvenes convertidas en sombras de lo que habían sido»; el llanto de una mujer le devuelve la nieve cayendo sobre su padre en el Johannesburgo del apartheid, poco antes de ser encarcelado; el olor del curry la lleva a su adolescencia en Londres, escribiendo en servilletas de bares y soñando con una habitación propia.   Leer a Levy es querer entrar en sus recuerdos y dejarse llevar por la calma y el aplomo de quien ha aprendido todo lo que sabe (y todo lo que no querría saber) a fuerza de buscar su propia voz.


Autobiografía en construcción 2. El coste de vivir, de Deborah Levy

Crónica, Biografía

Deborah Levy empieza a escribir este libro cuando, con cincuenta años, se ve forzada a reinventarse: su matrimonio ha terminado, sus ingresos escasean, su madre se está muriendo y sus hijas empiezan a abandonar el nido. En un momento en que la vida tendría que volverse plácida e imperturbable, Levy decide abrazar el caos y la inestabilidad a cambio de recuperar, oculto bajo capas y capas de resignación, un nombre propio. A través de un diálogo con intelectuales como Marguerite Duras o Simone de Beauvoir, y mediante recuerdos que evoca con elocuencia, sensibilidad y un delicioso sentido del humor, Levy se pregunta cuál es ese papel ficticio escrito por hombres e interpretado por mujeres al que llamamos «feminidad». Cualquiera que haya luchado por ser libre y por construir una vida propia sabe que es precisamente eso: una lucha constante en la que se paga un coste por vivir.


Autobiografía en construcción 3. Una casa propia, de Deborah Levy

Crónica, Biografía

El cierre de la Autobiografía en construcción de una Deborah Levy que logra su habitación propia. Deborah Levy imagina una casa en una latitud cálida, cerca de un lago o de un mar. Allí hay una chimenea y un mayordomo que atiende sus deseos, hasta el de discutir. Pero Levy en realidad está en Londres, no tiene dinero para construir el hogar que imagina, su apartamento es minúsculo y lo más parecido a un jardín en su casa es un banano al que entrega los cuidados que sus hijas ya no necesitan. La menor ha abandonado el nido, y Levy, a sus cincuenta y nueve años, está lista para afrontar una nueva etapa en su vida. Así, nos lleva desde Nueva York a Bombay, pasando por París y Berlín, mientras teje una estimulante y audaz reflexión sobre el significado del hogar y de los espectros que lo acechan. Entretejiendo el pasado y el presente, lo personal y lo político, y convocando a Marguerite Duras, Elena Ferrante, Georgia O’Keeffe o Céline Schiamma, la autora indaga en el significado de la feminidad y de la propiedad. A través de sus recuerdos hace inventario de sus posesiones reales e imaginarias y cuestiona nuestra forma de entender el valor de la vida intelectual y cotidiana de la mujer. Después de Cosas que no quiero saber y El coste de vivir, esta obra es la culminación de una autobiografía escrita en el fragor de una vida que no está solamente protagonizada por Levy, sino por todas las mujeres que la sostienen con una red invisible.


Autobiografía y otros escritos, de Benjamin Franklin

Crónica, Memorias, Ensayo, Ciencias naturales, Ciencias sociales, Espiritualidad

En los momentos en que se forja la nueva nación norteamericana, a finales del siglo XVIII, Benjamin Franklin aparece como la figura más representativa de las tendencias dominantes en el pensamiento de la época. En su obra se unen, por una parte, la tradición cultural de origen calvinista que había inspirado la fundación y el desarrollo de las colonias de Norteamérica; por otra, el espíritu de la Ilustración y la conciencia del cambio social y económico que se estaba produciendo en los albores de la industrialización. Por ello, sus obras, aun sin ser estrictamente de tipo teórico, ejercieron una inmensa influencia no sólo en Estados Unidos, sino en toda Europa, presentándose como el epítome de la burguesía liberal. En la presente obra se recogen traducciones de sus principales escritos: la famosa «Autobiografía» (que va más allá de la mera narración para convertirse, conscientemente, en la propuesta de un modelo de vida), así como ensayos, cartas, diarios, etc., que muestran facetas del pensamiento frankliniano en sus aspectos teológico, moral, económico y científico.


A veces un caballero, de Javier Marías

Crónica, Otros

Sin alharacas ni presunciones, Javier Marías se ha convertido en uno de los indiscutibles maestros del actual columnismo, como puede comprobarse en los ciento cuatro artículos contenidos en A veces un caballero , escritos entre 1998 y 2001. Casi siempre educado, resulta sin embargo más impertinente que cualquier provocador profesional, sin más adorno que el de la diversión, su prosa es siempre punzante y ágil; dotado para la vehemencia contagiosa, también es capaz de hacer soltar a menudo la carcajada; sin rehuir los asuntos cotidianos, nos lleva a pensar en nuestro tiempo de manera inesperada y profunda; sus rememoraciones ocasionales nunca caen en la excesiva nostalgia, pero logran emocionar sobriamente. Todo ello, cada vez, en el espacio de tres o cuatro páginas tan sólo. El autor consigue crear un estado de ánimo con cada pieza, y, lo que es más importante, hace que sus relatos y sus reflexiones lleguen a afectarnos personalmente, y que tras su lectura veamos un poco más claro y limpio el mundo por el que transitamos. «A veces un caballero… y a veces un rufián» , como el propio Javier Marías reconoce en su prólogo, sus impecables razonamientos, sus evocaciones, su inconformidad y su guasa obran como infalible estímulo para la inteligencia.


Aventuras y desventuras del Chico Centella, de Bill Bryson

Crónica, Memorias, Divulgación

Como muchos compañeros de generación, Bill Bryson creció fantaseando con ser un superhéroe: provisto de una vieja sudadera con un rayo sobre el pecho y una toalla atada al cuello, patrullaba su casa y su vecindario, saltando altos edificios y derrotando a villanos y malandrines (e imbéciles) —en su imaginación— como “El chico centella”. Bill Bryson recrea la vida de su familia y de su ciudad natal durante la década de 1950 en toda su trascendente normalidad. Era una época feliz, en la que coches, televisores y electrodomésticos (por no hablar de las armas nucleares) ganaban en número y tamaño con cada año que pasaba, y en la que el tabaco y la lluvia radioactiva provocada por los ensayos nucleares se consideraban inocuos. A un tiempo tierno y desternillante, «Aventuras y desventuras del Chico Centella» está a la altura de cualquiera de los maravillosos libros que Bill Bryson ha escrito hasta la fecha y encandilará a quienes en algún momento fueron niños.


A way to queer, de Ayran n

Memorias, Comunicación, Crónica

Me llamo Ayran n. Desde un tiempo a esta parte me he encontrado con muchos casos de personas que se encuentran en la misma situación que yo. Lo he visto en películas, libros autobiográficos, comentarios de amistades y otros medios diversos, y me estoy dando cuenta de que lo mío no es algo tan exclusivo e insólito como me creía en un principio. Unos días me veo como un chico que con el paso de los años se ha dado cuenta de que se siente mejor desenvolviéndose como un chica, y otros en los que me siento como una chica atrapada en el cuerpo de un chico. La diferencia es sutil, pero existe; y siembra la duda... Así comienza Ayran n su particular declaración de intenciones. Esta obra recopila las entradas escritas de su weblog, desde la creación del mismo hasta su final abandono. En sus páginas experimentaremos con desgarradora franqueza el drama cotidiano que vive una persona con disforia de género, así como el deseo de encontrar su sitio en una sociedad que se presenta cruel e intolerante para aquéllos que no consiguen encajar en sus sólidas etiquetas estereotipadas.