En un mundo donde ya no predominan las despedidas de soltero, sino las de casados, Estela y Joaco, Joaco y Estela, dos jóvenes jubilados, se persiguen entre los Jardines del Botánico, como si no hubiese transcurrido un solo otoño sin que sus padres se apresurasen detrás de ellos. Se vacilan, se aman y se miman, mientras el decadente mundo que les rodea se derrumba por delante y por detrás a golpe de prejuicio, entre las bombas de mano de sus propios hijos. Pero Estela y Joaco han decidido antes de pasar por la vicaría que la vicaría pase por ellos. Y no han querido desmentir a Dolores Escobar cuando afirma que “El amor siempre vence; donde no vence, simplemente, no hay amor”. Sus personajes aman a conciencia. Con la conciencia de quien sabe que tiene la vida y la muerte pegada a los talones. Corren como Cary Grant en campo abierto, más veloces que una avioneta. Porque cuando se ama y se vive, se tienen los pies ligeros de Aquiles.
Una adolescente descubre una libertad sexual inesperada durante un viaje a Ámsterdam. Una mujer atrapada en una cena se da de bruces con una obsesión desagradable. En los relatos de Ali Smith asoma el deseo, el recuerdo, la ambigüedad sexual y la imaginación. Bajo la desnuda luz del trastorno, las personas que los padecen siguen hallando conexiones, palabras que flotan en la calle, amor en sitios insospechados. Ali Smith nos muestra cómo las cosas toman forma y cómo se vienen abajo. Con toques levísimos, afilados y lúcidos, Ali Smith nos cuenta historias excelentes sobre la vida y el amor. Amor libre obtuvo el Saltire First Book of the Year Award, 1995.
El protagonista de Amor y basura es un escritor que se ve convertido en barrendero por la censura estatal, y que comparte con los otros miembros de la brigada de limpieza a la que pertenece un similar afán de evasión. Este deseo de elevarse por encima de la realidad, y la imposibilidad material de despegarse de esta, crean una disyuntiva que constituye el núcleo de esta historia, una bellísima novela en la que Klíma reivindica no solamente la necesidad de la memoria, sino el papel de la literatura en la conformación de la vida personal y de la historia colectiva.
Roderick Sutter, un escritor mediocre de novelas románticas históricas, conoce en Florida a una «chica-coctel» de una belleza extraordinaria. A partir de ese momento su vida cambia completamente. Se obsesiona con ella, a pesar de haberla visto sólo una noche, hasta el punto de no poder concentrarse en su nueva novela. No se dará por vencido hasta lograr lo que busca y comienza una persecución desde Sarasota a Nueva Orleans, Houston y finalmente Colorado Springs, pero en vano. Durante todo el libro el elemento de suspenso está presente en la figura de la misteriosa y reticente mujer que se aleja de él constantemente. Se sabe que ella está ocultando algo, pero el misterio se va construyendo capítulo a capítulo. Erskine Caldwell logra con Amor y dinero una novela llena de tensión, intercalada con episodios de humor.
En una ciudad sin nombre, algunos jóvenes desencantados empiezan un movimiento de vuelta a la naturaleza: abandonan a sus hijos y se van a vivir a los bosques. Un tiempo después, los ciervos de la zona se comportan de manera extraña y agresiva. América alucinada cuenta la historia de tres personajes: Berenice, una niña al parecer abandonada por su madre; Beryl, una anciana ex hippie que funda un club de caza para eliminar a los ciervos; y Vik, un inmigrante que descubre que una mujer se ha escondido en su casa durante días. Personajes complejos y entrañables para una trama de alta tensión narrativa que sorprende al lector a cada paso. Con la escritura envolvente y original que la caracteriza, Betina González ha logrado una novela que es una reflexión sobre la ruptura de los lazos solidarios en el capitalismo de hoy y una historia inquietante acerca de nuestras utopías colectivas.
Anales de Ana y otros relatos, conocidos en la obra de D’Annunzio como Giovanni Episcopo, recoge de una manera magistral las sensualidades y apasionamientos de las personas humanas, hasta tal extremo que se embriagan ellos de neurosis rusa. Algunos de sus cuentos exaltan lo irracional, lo vital, narrando sus historias en primera persona. Es significativo el lema puesto por el autor en el prólogo «O renovarse o morir», ya que D’Annunzio en este momento se inspira en Dostoievski, lo cual no quiere decir que en su producción posterior siga el mismo modelo. Anales de Ana es de los relatos breves de Giovanni Episcopo el más acabado en cuanto reflejo de la totalidad de los sentimientos del autor.
Riestra retrata con ternura, buen gusto y diálogos inteligentes el paso hacia la edad adulta, la pérdida de la arrogancia y la aceptación de los propios límites ante los delirios de grandeza de Paula, Gustavo y Anatol, compañeros de piso, familia advenediza, amigos y rivales al mismo tiempo. Los protagonistas de este exquisito retrato juvenil se enredan en discusiones bizantinas, filosofan sobre el amor y el sexo, mezclan grandes dosis de alcohol con citas de Werther, Rimbaud o Henry Miller. Intentan encontrar su sitio en la vida compartiéndola en una ciudad de musgo y charcos llena de promesas y expectativas.
Anatomía sensible es una celebración del cuerpo en toda su amplitud. Una defensa de la imperfección y sus bellezas alternativas, mediante un recorrido poético, político y erótico por la materia que somos. Un libro que revela con humor cómo nos vemos o nos inducen a mirar, proponiendo una estética desmitificadora. Estas páginas se nutren de una intensa observación, aventura vital y exploración lingüística: el cuerpo como estilo, el estilo como cuerpo.
Pero la experimentación de Anatomía sensible no se limita al género literario, y pone también en juego una perspectiva que desborda las identidades canónicas. Asistimos así a la creación de una mirada intergeneracional y poligénero que despliega una extraordinaria riqueza imaginativa, una prosa tan elegante como radical.
Conscientes de que el cuerpo es un campo de batalla social, estos textos nos invitan a admirar sus rincones periféricos y repensar sus zonas evidentes. Construyendo un tratado heterodoxo, cada uno de sus capítulos se rebela con hedonismo contra la cultura del Photoshop. En tiempos de retoque compulsivo y poses digitales, acaso sea hora de releer nuestro cuerpo para recuperarlo. Todos los cuerpos son bienvenidos aquí.
Tras unas obras primerizas, Otero publica Ángel fieramente humano ; (1950) y Redoble de conciencia; (1951); luego, reunidos en un solo volumen, con 38 poemas más: Ancia ; (1958), "palabra" formada por la primera sílaba del primer título y la última sílaba del segundo, con la que obtendría el Premio Fasternrath de la Real Academia Española en 1961.
Se trata de una poesía desarraigada, expresión del "yo" con sus angustias existenciales. Es, ante todo, una poesía "metafísica", es decir, dedicada a inquirir sobre el sentido del hombre y del mundo.
Contiene poemas religiosos, pero dirigidos a un Dios a la vez anhelado e incomprensible al que lanza súplicas sin obtener respuesta. Hay también poemas amorosos, impregnados de la misma sed de Absoluto. Y hay, en fin, un primer acercamiento al "nosotros", a los sufrimientos de los demás hombres; así, en poemas como "Crecida", "Encuesta", "Canto primero"…
Predominan en esta etapa las formas clásicas: Blas de Otero se revela, en particular, como espléndido sonetista. Ensaya también el verso libre. Su densidad estilística es ya asombrosa. Y se perciben, entre otras, las influencias de los Salmos, de Quevedo o de Unamuno.
Ancia ; fue un grito de alerta en medio de la desolación de ambas postguerras. Dámaso Alonso, en el estudio que en 1952 dedicó a estos libros dice: “Otero es quien con más lucidez que nadie ha expresado (…) los datos esenciales del desarraigo. De ahí es donde brota todo este canto frenético y a jirones.” Poesía del hombre frente a la muerte y el vacío, pero también poesía del amor y de la esperanza. “Escribo con el cuello llameante”, dice Blas de Otero en uno de los poemas de Ancia ; pero también: “Me estás hiriendo con unas alas tan frágiles”, dirigido al recuerdo de una mujer. Blas de Otero cuida extraordinariamente la forma en su verso. En Ancia ; están muchos de sus sonetos más conocidos por su perfección. Sirva de homenaje a su memoria.
En los buenos cuentos, como en la vida, los silencios importan y definen y lo condicionan todo: el silencio de una novia cuando abandona a su pareja; el de un objeto que está a punto de estrellarse contra el suelo y se detiene de pronto; el de una risa en la cocina que ha dejado de oírse; el de unos pies que avanzan de puntillas; el de un salón con todos los muebles pegados contra la pared; el silencio que sigue a ciertas palabras que, nunca, nadie (ni un niño, ni un adulto) debería escuchar ni haber escuchado. Jamás. Jamás. Con su primer libro, armado con una maestría sorprendente para manejar ese silencio y la profundidad de las historias que narra, Carlos Frontera retrata en Andar sin ruido con un estilo incisivo y rotundo, pero al tiempo hilarante en el que hasta una onomatopeya es capaz de desencadenar la catástrofe el vacío que queda cuando no queda nada que decir, el ruido que provoca algo que se rompe, lo que queremos incluso cuando dejamos de querernos.
Angosta es una ciudad de tres niveles, tres castas económicas y tres climas, situada en un estrecho valle de los Andes. Está marcada por una catarata conocida como el Salto de los Desesperados y dividida por montañas, por un muro y por fronteras internas. Todo para consolidar una política de Apartamiento que recluye a cada casta en su propio sector: los dones en Tierra Fría, los segundones en Tierra Templada y los tercerones en la tórrida Boca del Infierno. La ciudad está sitiada por la exclusión y la violencia, dos plagas controladas por los Siete Sabios, que determinan quién puede vivir y quién debe desaparecer. El entrañable grupo de personajes que protagonizan Angosta gira en torno a La Comedia, un hotel decadente en el corazón de la ciudad: un joven poeta que apunta sus experiencias en cuadernos; un matemático impasible, una pelirroja aguerrida, dos bohemios envejecidos, la mujer más triste del mundo, y el memorable Jacobo Lince, dueño de la librería La Cuña, centro de reuniones y verdadero reducto de libertad. Angosta es un resumen violento, erótico y político de una ciudad ficticia que es la mejor imagen de todo un mundo real. A medio camino entre la ciencia ficción y el hiperrealismo social, esta hermosa y aterradora fábula contemporánea es una novela necesaria, la obra mayor de Héctor Abad Faciolince, narrador impecable y polifacético que ocupa ya un lugar sobresaliente en la literatura en lengua española.
«Las alumnas especulaban. Un hombre había penetrado en sus dominios, en su colegio de paredes de piedra, de entramados de flores en los jardines. ¿Acaso se aventuraban a decirlo? ¿Era tal vez un maestro? ¿Se atrevería Miss Bell a dejar que un hombre enseñara a las muchachas?» Animal de nieve es la segunda novela de la fotógrafa Dara Scully, cuyo arte ha conseguido enredar a sus miles de seguidores en un mundo de cuerpos mágicos, escenas hipnóticas y animales heridos. Precisamente todas esas cosas son las que componen el universo de este libro, con una historia unas veces deliciosa y otras claustrofóbica sobre un internado para niñas regentado por una misteriosa directora. De entre todas las alumnas, Angélica se sabe diferente al resto. Tal vez sea su ímpetu, o su curiosidad, tal vez sean sus nervios, o sus ansias de belleza, pero ella reconoce que ese colegio es demasiado sombrío. Que necesita salir de allí y ser libre. Será tras la llegada al colegio de Frédéric, el nuevo profesor de música, cuando todos esos sentimientos terminen por estallar en su corazón. Él es un hombre que ha visto más allá de los muros del internado y que, pese a todo, se enfrenta a los mismos fantasmas que las chicas. Animal de nieve es una novela lírica, sobrecogedora, que sigue la estela de la literatura de Fleur Jaeggy, Herta Müller o Marguerite Duras, y cuyas protagonistas recuerdan también a las nínfulas del arte de Virginia Mori o Sally Man.
Como silenciosos espectadores de las vicisitudes de la vida cotidiana aparecen los animales domésticos que pueblan este magnífico conjunto de relatos. Se asoman para observar cómo a su alrededor las parejas, las familias, padres e hijos se relacionan ante hechos que los ponen a un paso de la felicidad o la desdicha. Una mujer tiene que decidir si se opera de una enfermedad grave o en definitiva no lo hace. Una pareja en crisis acude de madrugada a una clínica para salvar a un gato. Un hombre solitario encuentra a un perro y no está seguro de si desea devolverlo.
Una amante persigue a quien la ha abandonado hasta el otro lado del mundo.
Con delicadeza, como si dibujara sobre un papel transparente, Alejandra Costamagna perfila mundos donde el lector se acercará a la extrañeza y la fugacidad de la vida.
Un viaje de crecimiento a través de los ojos de Inés, una niña de seis años en la Colombia de finales del siglo XX. "Era Inés planta ornamental. Inés mascota. Inés animal de porcelana, perdida entre los infinitos rincones de la casa y sus silencios". Inés tiene seis años, ha perdido los dientes y le teme al fin del mundo más que a nada. Una mañana estalla una bomba y en medio del caos encuentra a María, una niña con la que finalmente puede compartir el universo adulto en el que vive. Pero el principio del fin es inminente: pronto celebrará su séptimo cumpleaños y su vida está rota. La crítica ha dicho: "Para mostrar la vida desolada de Inés, esa niñita de seis años que mide el tiempo por cada uno de los dientes que va perdiendo, Gloria Susana Esquivel acude a recrear una mirada: la hiperbólica, fragmentada, fabuladora, que sólo se tiene en la infancia, irrecuperable; y un lenguaje: metafórico, profuso, deliberadamente artificioso, que salva a Animales del fin del mundo de caer en un naturalismo ingenuo o un aburrido realismo. Lo que va emergiendo es una grieta dolorosa, la que separa el mundo egoísta, triste, a menudo fracasado o patético, de los adultos, del corazón anhelante de amor de un ser humano que va perdiendo, dolorosamente y para siempre, la piel de la inocencia". Piedad Bonnett "La pequeña Inés vive con su madre y sus abuelos, temerosa de que el fin del mundo llegue en cualquier momento e irrumpa en la casa desde el exterior: con un meteorito, con el congelamiento del Sol. Ese miedo va desapareciendo mientras la niña aprende que el fin del mundo es permanente y que lo provocan una y otra vez quienes la aman: los adultos que, al verla jugar, no entienden que ahí, en esos juegos, ella está creando, fundando un mundo propio q
Los cuentos de la gran escritora austriaca Ingeborg Bachmann son parte irrenunciable de la literatura contemporánea, y entre estos trece que aquí presentamos, inéditos en castellano, se incluye «Ansia», relato que quedó inconcluso debido a la prematura muerte de la autora y que da título al libro. La audacia del lenguaje, la agudeza de visión y la fuerza del sentimiento han sido desde el principio rasgos característicos de la prosa de Ingeborg Bachmann. Sus historias llegan y conmueven al lector, muestran a hombres y mujeres en una encrucijada de su existencia, enfrentados a decisiones trascendentales sobre el amor, la verdad, la vida y la muerte.
El coche negro pega un frenazo. Una pistola asoma por la ventanilla. “SUBE AL COCHE” dice la voz. “ANTES MUERTA” responde ella. Bajan 4 hombres. La suben al coche. Puedes imaginar como sigue.
Irónico, mordaz y sin tapujos. Con este estilo directo, AntiMoa combate la manipulación de la historia de España que venimos padeciendo desde determinados sectores ajenos a la historia misma, y que hundiendo sur raíces en el franquismo llega hasta la actualidad gracias a las obras de Pío Moa y otros, publicitados por los artículos y opiniones de toda una cohorte de autores y periodistas. AntiMoa desvela el porqué de la manipulación y al servicio de quién está; y a las fidelidades históricas contrapone los actuales conocimientos sobre la II República y la Guerra Civil española, datos resultantes de la investigación de los historiadores españoles y extranjeros más relevantes.
Cuando uno ha nacido y crecido rodeado de corridas, capeas y encierros de toros por todas partes puede creer que esta costumbre bárbara es algo natural, pero llega un momento en que se experimenta una revelación. Manuel Vicent también fue en su niñez y juventud uno de tantos españoles que gozó de la fiesta nacional hasta que un día descubrió su miseria. «Cuando uno vuelve al lugar de aquellos juegos taurinos que le hicieron tan feliz y contempla a otros niños embruteciéndose con el mismo juego, de pronto, a uno se le abren los ojos y se le presenta con toda nitidez la crueldad humana —dice Manuel Vicent en el prólogo a este alegato antitaurino—. La mirada se transforma y el estómago sufre un vuelco y entonces se inicia una lenta conversión». Nadie tiene derecho a gozar haciendo sufrir a los animales. Nadie tiene derecho a convertir en espectáculo festivo y moral la muerte de un toro. En este principio se basa esta Antitauromaquia, que no es un arte de torear al revés, sino una apuesta por no tarear a nada ni a nadie y salvarse de la crueldad. Ilustraciones de OPS.
Esta es una compilación de todos los relatos escritos por Grace Lloper desde sus inicios en septiembre del año 2010, si bien en el 2020 se cumplieron diez años desde su primer libro, estuvo alejada durante un tiempo por problemas personales, así que pensó que ya era hora que este libro viera la luz para festejar una década de su pluma… Los relatos por orden de publicación son: -Fantasías en un elevador. -Lady in Red. -A partir de una fantasía. -Peca conmigo. -Un tropiezo en el camino. -Ponle pimienta a tu vida. -Nochebuena de ensueño. -Adán y Eva en el paraíso. -El diario de una ruta. -Las tres calas. -Peregrinos del tiempo. -¿Amigos o qué? -Juegos en Navidad. -Amor por deber. -Un corazón para vivir.
Manuel del Cabral nació en 1907, en Santiago (República Dominicana). Ha viajado por casi toda América y parte de Europa. Su voz, como le dice Gabriela Mistral, «de grande y riquísima poesía humana», es de ancha y múltiple producción; todas las cuerdas, toda la gama conforman su rico instrumento. Pero el creador de «Trópico negro» (1942); «De este lado del mar» (1948); «Chinchina busca el tiempo» (1945); «Sangre mayor» (1945); «Los huéspedes secretos» (1951); «Compadre Mon», «30 Parábolas», etc., confirma que es en la tierra y en la raíz del hombre donde su poesía ha crecido fuerte y justa, y comprueba, además, que es, junto con Neruda, Vallejo y otros, uno de los poetas esenciales de nuestro Continente. «Pocas veces —como dijo André Gide— nos llega del otro lado del mar una voz tan humana, tan vital y americana como la de Cabral». O como ya lo sintetiza y define Gerardo Diego: «Extraño y formidable, este gran poeta, Manuel del Cabral, en cuya voz, fundida a la temperatura de alto horno del hombre nuevo, parecen haberse dado cita todos los hombres de América, el Continente que se descubre día a día en la imaginación exploradora del espíritu». Su obra, profundamente social, constantemente humana, lo sitúa entre los grandes poetas modernos de nuestro idioma.