«Creo que lo he fascinado, y sé que él me ha fascinado también. Presumo que nos perteneceremos el uno al otro hasta que la muerte ocurra». Así comienza Cecil, y quien así habla es precisamente el narrador que da título a la novela, que no es otro que un perro de raza whippet, regalado por unos amigos al escritor Manuel Mujica Láinez y bautizado con ese nombre el honor al fotógrafo inglés Cecil Beaton, al que el autor conoció el día en que le fue obsequiada su nueva mascota. Estamos por lo tanto ante una ingeniosa novela autobiográfica narrada mediante un personaje interpuesto, escrita en un momento de crisis creativa de su autor, en el momento en que abandona Buenos Aires y se instala en la recién adquirida quinta El Paraíso, en la provincia de Córdoba.
Esta novela es considerada como una de las más representativas de la cubanía tanto por sus temas como por su argumento; asimismo, se puede considerar la primera novela cubana. Originariamente en dos tomos, el primero fue publicado por la imprenta literaria de Lino Valdés a mediados de 1839. La obra completa se publicaría en Nueva York en 1879; y, ya en su versión definitiva, en la misma ciudad en 1882. La obra, de contenido antiesclavista, constituye además un valioso testimonio de la época. Escrita con inusual crudeza realista y un fuerte sentimentalismo, sus elementos de truculencia y misterio hicieron de ella una escalofriante y memorable descripción de la vida cubana hacia 1820. Aunque ubicada en el romanticismo, la obra posee valores realistas que no fueron del todo ajenos a exponentes de esta escuela en los géneros de ficción. «Cecilia Valdés» es, en efecto, un amplio y vívido cuadro de rico color descriptivo, de la sociedad cubana en las primeras décadas del siglo XIX. Por las páginas de esta novela asistimos al drama de Cuba durante el primer tercio de la pasada centuria; aparecen retratadas las características de cada tipo de la escala social, desde el potentado, dueño de haciendas e ingenios azucareros, hasta el sufrido mestizo que busca el sustento en las reuniones y bailes de las clases pobres; desde el más alto dignatario del gobierno hasta el triste esclavo que sufre las torturas del tormento al que se denominó "bocabajo" por la posición en que era colocada la víctima. El núcleo argumental de la novela es el idilio entre una mestiza de singular belleza, Cecilia Valdés, y un joven blanco y rico, Leonardo Gamboa, estudiante del Seminario de San Carlos (la institución docente más significada por entonces), que resultan ser hermanos. Es la época del general Vives, Capitán General de la Isla de Cuba. Alrededor de este núcleo se desarrollan otras acciones y se relatan episodios diversos que dan amenidad al conjunto. El idilio se resuelve en un trágico desenlace: Cecilia Valdés, burlada por el rico joven, cuenta su desventura a José Dolores Pimienta, un músico que era su platónico amador. José Dolores, sin atender a las súplicas de la joven, da muerte a su burlador cuando se dispone a desposarse con una muchacha perteneciente a las clases pudientes de la Isla. En la técnica de esta novela se aprecia la influencia que en el autor ejerció Walter Scott. A través de sus capítulos (encabezados con lemas que recogen pensamientos de diversos autores universales) pasan las costumbres cubanas en la ciudad y en el campo, con todas sus peculiaridades, en las distintas clases sociales; los altos ideales de quienes aspiraban a una superación colectiva se cruzan con los vicios, las crueldades, la esclavitud, la insania gubernamental y las prerrogativas de los privilegiados. Inspirada en la novela y con el mismo título, el músico cubano Gonzalo Roig compuso una zarzuela que a su estreno obtuvo un gran éxito.
En 1792, los integrantes de la familia de Marsilly, muy cercana al depuesto rey, tienen que emigrar a Inglaterra disfrazados de campesinos. El Barón de Marsilly muere defendiendo a la familia real en las Tullerías, mientras ellos se refugian en la Convención. Cecilia, de sólo cuatro años, su madre, la baronesa de Marsilly, y su abuela, la marquesa de Roche-Berthound, se establecen en una aldea cerca de Londres y ahí pasan diez largos años sufriendo limitaciones y alejadas del mundo, con la esperanza de regresar a Francia algún día. Ya joven, Cecilia recibe una esmerada educación de su madre, lo que, unido a su belleza física, la convierte en una encantadora dama. Tras la muerte de su madre y ya agotados los recursos financieros que proporcionaba la venta de las joyas de la abuela, deciden regresar a su país y probar fortuna en la corte imperial de Bonaparte. Antes de partir, Cecilia conoce al joven Enrique, otro descendiente de empobrecidos inmigrantes, y quedan prendados. En Francia, hacen planes para su boda. Él parte para la isla Guadalupe a hacer fortuna como comerciante; ella se queda en París bordando su vestido de novia. Pero un final inesperado cambia la historia.
Olivia Lockhart
Calle Lighthouse ,
16Cedar Cove ,
Washington
Querida lectora,
Aún no me conoces, pero eso va a cambiar en unas horas. Quiero invitarte a mi casa y a mi ciudad, Cedar Cove, para que conozcas a mi familia, a mis amigos y a mis vecinos. Ven a conocer sus historias… ¡e incluso sus secretos! En cuanto a mí, debo admitir que mi vida es como un libro abierto. Me divorcié hace un par de años, y tengo una relación bastante… difícil con mi hija, Justine. Por no hablar de mi madre, Charlotte, que tiene opiniones acerca de todo y nunca se las calla.
Para que te hagas una idea: soy juez de familia, y a ella le encanta venir al juzgado. Hace poco, estaba en la vista de una petición de divorcio, y Charlotte consideró que la joven pareja, Ian y Cecilia Randall, no se había esforzado lo suficiente para intentar que su matrimonio funcionara.
Yo pensaba lo mismo, así que denegué la petición de divorcio, pero mi decisión provocó una reacción desmedida. Jack Griffin, el editor del periódico local (un hombre al que no me importaría ver más a menudo), escribió un artículo al respecto, y ahora no se habla de otra cosa.
Cedar Cove… todo el mundo adora esta ciudad, y el que se va, nunca la olvida.
Hasta pronto,
Olivia.
Querida lectora:
Si ya has estado en Cedar Cove, probablemente nos conocemos. Por lo general, estoy en casa o en la biblioteca municipal, donde trabajo, así que es fácil encontrarme. He vivido en esta pequeña ciudad toda mi vida, y aquí he criado a mis dos hijas. Sin embargo, mi marido y yo… bueno, hace seis meses, más o menos, él desapareció. Así por las buenas… desapareció. ¿Dónde está Dan? ¿Por qué se fue? ¿Con quién está? ¿Lo averiguaré alguna vez?
Mi ciudad, mi familia y mis amigos me proporcionan consuelo y apoyo durante esta temporada tan difícil. Me recuerdan constantemente que la vida continúa. Por ejemplo, la gente no hace más que hablar de bodas y bebés últimamente. Justine, la hija única de mi mejor amiga, Olivia Lockhart, se casó hace muy poco. Mi hija, Kelly, acaba de tener un bebé. Por desgracia, se niega a aceptar que quizá Dan no vuelva para conocer a su primer nieto. Mi hija mayor, Maryellen, es más realista. Creo que está saliendo con un chico, pero por algún motivo que no acierto a comprender, no me dice quién es.
También está Jack, que quiere tener una aventura con Olivia, y su hijo Eric, y la novia de Eric, Shelly (creo que está embarazada), y Zach y Rosemary Cox, cuyo matrimonio, según dicen, va cuesta abajo… ¡Bueno, ven a verme y hablaremos!
Grace
Querida lectora.
En Cedar Cove hay algo que está muy claro: la gente está muy interesada en los asuntos ajenos. Miradme a mí, por ejemplo. Todo el mundo sabe que me divorcié hace poco de mi marido, Zach, y que la juez Olivia Lockhart ha decretado una custodia bastante inusual: los niños no tendrán que vivir a caballo entre la casa de Zach y la mía, seremos nosotros dos los que tengamos que ir de un sitio al otro.
La misma Olivia no es inmune a los cotilleos. ¿Se quedará con Jack, el editor de nuestro periódico local, o volverá con su ex? ¡Todos estamos deseando saber lo que pasa! Pero el principal tema de conversación es el muerto, el hombre que falleció en la pensión de la ciudad. ¿Quién es?, ¿por qué llegó en medio de la noche? Roy McAfee, nuestro investigador privado, está decidido a resolver este misterio.
¡Espero que lo consiga, y entonces os lo contaré todo!
Hasta pronto,
Rosie
Pensión Thyme and Tide
Cranberry Point, 44
Cedar Cove, Washington
Querida lectora.
Me encanta vivir en Cedar Cove, pero las cosas han cambiado mucho desde que murió un hombre en nuestra pensión. Resulta que se llamaba Max Russell, y fue compañero de Bob en Vietnam. Aún no sabemos por qué vino a la ciudad, ni quién lo mató… pero al parecer, murió envenenado. ¡Espero que descubran la verdad cuanto antes!
Pero yo no soy la única fuente de cotilleos en Cedar Cove. Me he enterado de que Jon Bowman y Maryellen Sherman van a casarse, y de que la madre de Maryellen, Grace, tiene varios pretendientes. La cuestión es con quién acabará quedándose. Olivia… que ahora es Olivia Griffin, porque se ha casado… ya ha vuelto de su luna de miel, y parece ser que Charlotte, su madre, (que debe de tener setenta y tantos años), también tiene un hombre en su vida. No sé si a Olivia le hace demasiada gracia…
Hay un montón de novedades más, ven a tomar una taza de té y una de mis magdalenas de arándanos y charlaremos un rato.
Peggy Beldon
Corrie McAfee
Harbor Street, 50
Cedar Cove, Washington
Querida lectora.
Teniendo en cuenta que estoy casada con el investigador privado de Cedar Cove, cabría pensar que me gustan los misterios, pero no es así… ¡sobre todo los que están relacionados con nosotros! Roy ha estado recibiendo unos mensajes en los que se nos pregunta si nos «arrepentimos del pasado», y no tenemos ni idea de a qué se refieren.
Por otro lado, estamos encantados porque nuestra hija Linnette se ha mudado a Cedar Cove para trabajar en la nueva clínica. Hace unos meses asistí a un evento con fines benéficos, la Subasta de Perros y Solteros, y le conseguí una cita con Cal Washburn, que trabaja en el rancho de caballos de Cliff Harding; por desgracia, mi hija está mucho menos entusiasmada que yo por lo de la cita.
Y hablando de Cliff… al parecer, su romance con Grace Sherman se ha reanudado. En Cedar Cove están pasando un montón de cosas interesantes, así que pásate por la oficina de mi marido o por nuestra casa, ¡tomaremos un café mientras te cuento todas las novedades!
Corrie
Rainier Drive, 6
Cedar Cove, Washington
Querida lectora.
A lo mejor te has enterado ya del duro golpe que sufrimos recientemente. Mi marido y yo perdimos nuestro negocio, el restaurante Lighthouse, debido a un incendio intencionado. La investigación aún está en marcha, y el principal sospechoso es un joven que había trabajado con nosotros, Anson Butler, que desapareció justo después del incendio. Seth y yo estamos intentando encarrilar nuestras vidas (y la verdad, una crisis como esta no beneficia en nada a un matrimonio), y mientras tanto, la vida sigue para todo el mundo en Cedar Cove. Hay matrimonios, nacimientos, reuniones, y hasta algún que otro escándalo, pero una de las novedades más candentes es que Cal, el adiestrador que trabaja en el rancho de Cliff Harding, está rescatando mustangs salvajes en Wyoming. En fin, tengo que irme… he quedado para comer con un viejo amigo, Warren Saget. ¡Espero volver a hablar contigo pronto, para poder contarte todo lo que está pasando en la ciudad!
Justine
Seaside Avenue, 74
Cedar Cove, Washington
Querida lectora.
Tengo una vida con la que ni siquiera podría haber soñado hace un par de años. Estoy casada con Bobby Polgar (¡ya sabes, el famoso campeón de ajedrez del que me enamoré!), y vivimos en una casa preciosa con vistas a Puget Sound. Pero Bobby está preocupado por algo últimamente, y cuando le pregunté qué le pasaba, me contestó que estaba «protegiendo a su reina». Me dio la sensación de que no estaba hablando de ajedrez, sino de mí, pero se negó a darme explicaciones. ¿Te acuerdas del Get Nailed, el salón de belleza de Cedar Cove? Pues aún trabajo allí. Te explicaré cómo le va a mi amiga Rachel, que tiene a dos hombres interesados en ella (sí, no uno, sino dos), y te contaré lo que he oído sobre Linnette McAfee, que se marchó de la ciudad cuando su vida sentimental se desmoronó (la verdad es que yo también me he llevado chascos en cuestiones de amor). Pásate pronto por el salón de belleza, te haré la manicura y charlaremos un rato, ¿vale?
Teri (Miller) Polgar
La futura mamá Mary Jo Wyse llegó a Cedar Cove el día de Nochebuena en busca del padre de su bebé. David Rhodes le había dicho que estaría en el pueblo, pero no era cierto. Al averiguarlo, Mary Jo se vio perdida, embarazada y sola. Y no había sitio en ningún alojamiento de la zona… Así pues, Grace Harding recibió a Mary Jo en su casa.
Mary Jo se puso de parto aquella misma noche, y un joven llamado Mack McAfee, técnico médico del cuerpo de bomberos, acudió en su rescate justo en el momento en que los tres hermanos de Mary Jo, los tres hombres Wyse, llegaban al pueblo. La gente de Cedar Cove se unió a ellos para celebrar el nacimiento de la pequeña Noelle. Sin embargo, nadie tenía más que celebrar que Mack. Porque aquella Navidad le dio fe, esperanza y amor…
8, Sandpiper WayCedar Cove, WashingtonQuerida lectora.Tengo que confiarte un secreto: creo que Dave, mi marido, tiene una aventura. Encontré un pendiente en su bolsillo, y no es mío; por si fuera poco, recientemente le robaron varias joyas a una anciana a la que mi marido solía visitar con asiduidad.Dave es el reverendo metodista de la ciudad, y un buen hombre. Aunque me cuesta creer que sea culpable, ¿por qué no me dice dónde ha estado cuando llega tarde a casa?Me gustaría que me dieras tu opinión, y también quiero contarte cómo les van las cosas al resto de amigos de Cedar Cove… por ponerte un ejemplo: Faith Beckwith, el amor de juventud del sheriff Troy Davis, acaba de venirse a vivir a la ciudad.En fin, ven a tomar una taza de té y charlaremos.Emily
92 Pacific Boulevard ,
Cedar Cove ,
Washington
Querido lector.
No soy muy dado a escribir cartas. Como sheriff de Cedar Cove, estoy acostumbrado a redactar informes y atestados, no largas misivas, pero mi hija Megan, que pronto me hará abuelo, se ha empeñado. Así que ahí va.
Lo primero que quiero dejar claro es que confiaba en casarme con Faith Beckwith, mi antigua novia del instituto, pero ella puso fin a nuestra relación el mes pasado, a pesar de que los dos somos viudos y estamos libres. Hubo unos cuantos malentendidos entre nosotros, algunos de ellos motivados sin querer por mi hija.
Pese a todo, tengo muchas cosas con las que mantenerme ocupado, como los restos humanos sin identificar encontrados en una cueva a las afueras del pueblo. O el hecho de que mi amiga la juez Olivia Griffin está luchando contra el cáncer. O los ataques que está sufriendo el 204 de Rosewood Lane, la casa que Faith le alquiló a Grace Harding.
Si quieres saber más, pásate por mi casa o por la oficina del sheriff … si es que soportas el café rancio.
Troy Davis
1022 Evergreen Place, Unit B
Cedar Cove
Washington
Mi querida lectora.
No vas a creértelo, pero ¡me he enamorado de mi vecino, Mack McAfee! Desde que nació mi hija Noelle en primavera, estamos viviendo pared con pared. La relación aún me da un poco de miedo, porque no puedo decir que haya acertado siempre con los hombres. El padre de mi hija, David Rhodes, es la prueba más evidente. Tengo mucho miedo de que pueda demandarme por la custodia de Noelle.
Mientras tanto, me distraigo con las cartas de la Segunda Guerra Mundial que encontré en casa. Se las escribió un joven soldado a su amada, y Mack y yo intentamos averiguar qué fue de ellos. Pásate algún día a tomar un té helado y te enseñaré las cartas. Te contaré además las últimas novedades sobre Grace y Olivia, sobre mi hermano Linc y su mujer, Lori, de quien me hice amiga nada más conocerla, y del resto de nuestros amigos comunes. Y a lo mejor Mack puede acompañarnos…
Mary Jo Wyse
1105 Yakima Street ,
Cedar Cove ,
Washington
Querido lector.
Probablemente hayas oído que mi mujer me ha abandonado. Rachel está embarazada y dice que ya no puede soportar el estrés en nuestra casa. Mi hija de trece años, Jolene, está celosa de ella. Tal vez sea culpa mía. Como viudo, la he mimado; Jolene estaba leyendo por encima de mi hombro ahora mismo y dice que eso no es cierto. Afirma que Rachel lo ha estropeado todo. Pero eso no es verdad. La cuestión es: ¿cómo puedo recuperar a mi mujer? Ni siquiera sé dónde está. No está con Teri Polgar ni con ninguna de sus otras amigas del salón. La otra cuestión es: ¿cuándo va a madurar Jolene y a dejar de actuar como una mocosa? Claro que no soy el único en esta ciudad que tiene problemas. El suegro de Linc Wyse está intentando destruir su negocio. Y ¿sabes quién es Charlotte Rhodes? Pues parece que se le olvidan las cosas, y su familia está preocupada por Ben y por ella. Están pasando muchas más cosas… pero a Rachel se le da mejor mantenerse al día que a mí. Si tienes alguna idea de dónde está mi esposa, te ruego que me llames. Por favor.
Bruce Peyton
Un largo verano, cuyo sopor afiebra los monólogos e interpolaciones narratorias, se ensaña, destruyéndola, contra una casa de un pueblo del litoral norteño de Colombia. Los habitantes del inmueble, en una acción que encierra setenta y cuatro años, se deshacen con él en mitad de la tórrida estación. Esto hace posible alimentar el relato con los aconteceres primordiales de la vida: los nacimientos, los matrimonios, las enfermedades, los velorios, las amargas disputas familiares en torno de una herencia. Los dos personajes centrales son, por tanto, el mal como elemento ubicuo y el verano como atmósfera temporal. Celia —la niña, la madre y la final abuela— es el coágulo del asunto y quien, en cierta medida, vivencia y justifica las otras criaturas. Siguiéndola desde su infancia hasta su derrotada vejez, Rojas Herazo logra un opulento cuadro de desesperación, de lentitud sacrificial y de ruina. Todo esto, al aprehender un contorno con morosa fidelidad y recóndita noción de lo patético, termina por conformar un alucinado testimonio de esa comarca sudorosa, fulminada por el embiste solar y carcomida por el yodo oceánico, en que la acción es situada. Desdé este punto de vista, la novela es estrictamente colombiana pero los: elementos costumbristas que la constituyen han sido hábilmente diluidos en el proceso general de los acontecimientos. Sentimos en ella todos los valores documentales —tanto de carácter individual como de referencia a las intimidades mágicas de una geografía— que, alinderando la acción, ubican su transcurso en un lugar inconfundible. Más el vigor subjetivo, la entrañable indagación de unas cuantas vidas y la severa riqueza con que todo esto ha sido aprisionado por la palabra, trascienden el localismo y hacen de «Respirando el Verano» una referencia primordial en el trabajo novelístico de este momento colombiano.
Una novela que se desarrolla en un pueblo ubicado a orillas del mar Caribe, su nombre es Cedrón o Cedrogordo. La etapa histórico-política en la que suceden los hechos novelescos es la Hegemonía Conservadora, la cual inicia en 1880 y culmina en 1930. Este periodo se adivina en el retrato del general Reyes que preside el despacho del alcalde y en la alusión al final de la Guerra de los Mil Días (1899-1903) y a la llegada del general Rafael Uribe Uribe a Cedrón. En dicho pueblo el poder lo depara la posesión de la tierra, por tanto, el eje de la historia es Leocadio Mendieta, un jerarca sanguinario y bestial dueño de un monopolio que mueve la economía de su pueblo y al mismo tiempo, mueve la vida y los sentimientos de los pobladores. Mendieta llegó a Cedrón en febrero de 1896 y en 1904 compra a su esposa Etelvina por ciento sesenta pesos; de ahí en adelante su vida y sus actos determinan el desarrollo de la historia, pasando por encima de la llegada misma del Arzobispo.
En esta novela, que cierra la saga de Cedrón, Rojas Herazo despliega toda su capacidad narrativa en una trama que gira alrededor de la historia de Anselmo y su abuela, una mujer llamada Celia que nació en 1855 y vivió 93 años, de los cuales 77 años los pasó en Cedrón con su esposo y sus hijos.
Ceguera de amor cuenta la historia de la joven judía Vanessa Levy, hija de un prestamista de no muy buena reputación. Profundamente endeudado con el padre de Vanessa, el noble británico Hubert Culverdale acepta casarse con la chica a fin de saldar su deuda. Culverdale entiende que Vanessa es cómplice del trato y desde el principio le hace saber que ella no es "su tipo", y que cualquier tipo de romance entre ellos esta fuera de cuestión. Sin embargo, progresivamente, el noble y esnob caballero es conquistado por la sinceridad y la devoción de la heroína.
La mala suerte lleva a un funcionario de prisiones novato a presentarse en la cárcel de Sevilla el mismo día en que se produce un motín de presos. Enredado en un destino tan caprichoso como trágico, que lo obliga a utilizar al máximo los recursos de su inteligencia, este hombre va descubriendo que no es tímido, que no es débil, que quizá ni siquiera es un hombre bueno, como siempre había creído: es un superviviente nato al borde del abismo.