Enero de 1741. Diego de Rojas, más conocido por su apodo de espía de “El paisano de Jamaica”, llega a Cartagena de Indias con un mensaje funesto: el almirante de las fuerzas inglesas Edward Vernon se dispone a conquistar la ciudad, y para lograr su objetivo contará con la mayor fuerza naval que se haya conocido jamás: cerca de doscientos navíos con más de 25.000 soldados a bordo.
Frente a ellos, Cartagena se defenderá con poco más de 3.000 hombres al mando del virrey Eslava y sobretodo del almirante Blas de Lezo. Cojo, manco y tuerto, Lezo hará cuanto esté en su mano para defender la ciudad del impresionante ataque inglés, contando para ello con la inestimable ayuda de Diego de Rojas. Juntos tratarán de impedir que Cartagena se acabe perdiendo como tantas otras posesiones del Imperio Español tras la firma del tratado de Utrecht.
El Paisano de Jamaica es una novela repleta de batallas, intrigas, amor y aventuras contadas desde todos los puntos de vista implicados y que se desarrollan en un contexto histórico absolutamente real, como fue el asedio sufrido por Cartagena de Indias entre marzo y mayo de 1741; un relato épico que con un estilo ameno y ágil sumerge el lector en uno de los capítulos más apasionantes de la Historia española de los últimos siglos.
El paje de la nao capitana supone un nuevo intento por parte del autor de acortar las distancias entre Historia y novela. Porque la historia que nos narra Alonso de la Frontera, cuyo manuscrito fue encontrado en un caserón de la localidad vallisoletana de Medina de Rioseco, es una historia real que, sin artificios ni hipotecas, nos sitúa en la España de finales del siglo XV. Siguiendo la estela de las grandes crónicas medievales, de la Frontera nos desgrana su vida y los siete años que Colón estuvo en España intentando buscar financiación para su proyecto, y lo que supuso su puesta en marcha: nada menos que el descubrimiento de un nuevo mundo. Fue, además, testigo de acontecimiento tan importantes para nuestra Historia como la toma de Granada o la expulsión de los judíos.
Dentro del mundo belicoso que nos toca vivir hoy en día, El palacio de las ilusiones nos devuelve a una época que es mitad historia y mitad mitología, un tiempo completamente mágico. Narrado por Panchaali, la mujer de los legendarios hermanos Pandava en el Mahabarata, esta novela nos ofrece una reinterpretación del tradicional cuento. El palacio de las ilusiones cuenta la vida de la princesa Panchaali, empezando por su nacimiento del fuego y continuando con su actuación enérgica como la esposa de cinco maridos que fueron expulsados del reino de sus padres. Panchaali se adentra en una búsqueda para reclamar los derechos de primogénito de sus maridos, dejando tras ellos años de exilio y una horrible guerra civil en la que se ven involucrados todos los reyes más importantes de la India. Mientras tanto, no perdemos nunca de vista los estratégicos duelos que tiene con su suegra, su complicada amistad con el enigmático Krishna o su secreta atracción por el misterioso hombre que resulta ser el enemigo más peligroso de sus maridos. Panchaali es una apasionada mujer que redefine por nosotros un mundo de guerreros, dioses y las jamás manipulables manos del destino.
Florencia. Siglo XIV. La ciudad impulsada por una de las familias más poderosas de Europa se encuentra en la cúspide de su creciente cultura y economía. El antropocentrismo gesta corrientes filosóficas y artísticas para dar paso al nacimiento de una poderosa orden secreta. Esta, basada en conocimientos propios del ser humano y la práctica de las leyes naturales y espirituales, expandirá un vínculo de fuertes creencias divinas por toda Europa. El círculo cultural de la academia neoplatónica que representa Lorenzo de Medici, alcanza un prodigioso despertar humano que florecerá entre sus eruditos con protagonistas como, Angelo Poliziano y Sandro Botticelli, desencadenando el ingenio de estos en la realización de un tesoro artístico a través de un manuscrito fruto de la historia de amor entre Giuliano de Medici y Simonetta Cattaneo. La creación de sublime belleza pronto será considerada herética debido a su elevado contenido sensual y, será perseguida por la inminente organización de una de las hogueras más ambiciosas de todos los tiempos dispuesta a destruir todo lo idealizado hasta aquel momento. Solo la incansable lucha de algunos de los miembros más brillantes de la sociedad evitará que desaparezca y ante inesperados contratiempos quedará oculta a la luz pública durante cientos de años.
Los milenarios conocimientos del México antiguo en el recinto más representativo de nuestro país Un relato en el que episodios clave de la historia de México son reinterpretados a la luz de tradiciones sagradas. Antonio Velasco Piña, el aclamado autor de Regina, narra en estas páginas su descubrimiento del Palacio Nacional, uno de los sitios más emblemáticos de nuestro país. En este escenario, el protagonista conoce a la mujer de sus sueños y decide emprender una hazaña extraordinaria para ganarse su amor. Esto lo conduce a un proceso de evolución de la conciencia y reencuentro con la sabiduría milenaria. La narración se entrelaza con la historia del palacio, escenario de algunos de los episodios más trascendentales de la historia de México, recreados en estas páginas: los últimos momentos del mundo prehispánico, la unión de dos culturas durante el virreinato, las caminatas de carácter sagrado que los cadetes del Colegio Militar realizaban durante el siglo XIX, los sangrientos actos de la Decena Trágica, entre otros. Estos hechos son reinterpretados a la luz de tradiciones milenarias, con el sello personal de su autor, el máximo exponente de la mexicanidad sagrada.
Son los tiempos de postguerra en Alemania. El joven protagonista inicia precisamente en esos duros y difíciles días su vida de trabajo. En ésta, como en otras de sus obras, Heinrich Böll —Premio Nobel de Literatura 1972— denuncia el vacío escalofriante del que padece la humanidad. Su crítica social va dirigida hacia la hambruna, la escasez, el mercado negro, y además fustiga sin piedad antivalores como el consumismo de una sociedad que califica como «americanizada». Pero El pan de los años mozos es también una historia de amor que, como señala el crítico Ignacio Valente, se mueve en el plano de las relaciones profundas que se crean entre un hombre y una mujer bajo la superficie de los ademanes y palabras más simples, esta carga secreta y subterránea de miedo, ternura, asombro, deseo, torpeza, veneración, que se encierra en los pocos minutos del primer encuentro.
Roma, siglo II. La Iglesia cristiana sigue siendo perseguida, y además en su seno asoman ya las primeras divisiones. Calixto, antiguo esclavo de un patricio romano, está a punto de convertirse en papa; un destino que nadie habría podido predecir, ni los legionarios que lo vendieron a Roma como esclavo, ni el poderoso senador que lo asesoró, ni la concubina del emperador, Marcia, a quien le une una pasión desmesurada.
Madrid, en la actualidad. Mara siente que algo falta en su vida desde hace tiempo. Dueña de una cadena de muebles coloniales que decoran las casas más exquisitas de la ciudad, el éxito empresarial la acompaña pero en el terreno personal no alcanza la felicidad que tanto desea. Un día, un maravilloso mueble se cruza en su camino y se convierte en su obsesión. Y también en la excusa perfecta para huir a tierras lejanas en busca de sí misma. Será en Bali, ese lugar mágico en el archipiélago de Indonesia, donde entrará en contacto con el pasado colonial de la isla y con la historia de una mujer que vivió en el siglo XIX y que protagonizó una apasionante y peligrosa historia de amor. Al mismo tiempo, Mara descubrirá también dónde se encuentra el verdadero paraíso.
Estamos en 1914, a comienzos de la Primera Guerra Mundial. Los países árabes de Oriente Medio no existen aún. Jerusalén y Damasco pertenecen al Imperio otomano. El palestino Midhat viaja a Francia para estudiar medicina y se enamora de la hija de su anfitrión francés, pero durante una conversación se produce un malentendido y el joven se va a París, donde participa en polémicas, seduce a mujeres, estudia en la Sorbona. Termina la guerra europea y Midhat vuelve a Palestina, pero no ha olvidado a su amada francesa. Tampoco ella lo ha olvidado, y le escribe una carta que Midhat no recibe.
Mientras tanto, Francia y Gran Bretaña se reparten el control de Oriente Medio; para contener las reivindicaciones árabes inventan países como Irak, Líbano, Jordania, Palestina y Siria, y facilitan la inmigración de miles de judíos, que se van apoderando del suelo palestino. Midhat se ha casado, tiene un comercio de telas, todo parece ir bien. Pero el pasado vuelve cuando encuentra la carta de la amada francesa, que había sido interceptada y escondida por su padre. Una carta que es como la oportunidad occidental perdida. Midhat entra en crisis y enloquece. Su locura dura lo que la huelga general de 1936, que señaló el inicio de la rebelión árabe contra la inmigración judía y el imperialismo británico que la apoyaba.
El parisino no es solo la historia de un palestino afrancesado: también es la de una geografía en conflicto desde las Cruzadas. La rica prosa de Isabella Hammad, que mezcla los tres idiomas que se oían en Palestina en aquellos tiempos, el árabe, el francés y el inglés, parece aunar multitud de influencias, y es como una invitación a que el lector las descubra.
«Una novelista espontáneamente social con sensibilidad auditiva para el diálogo vivo y una gran capacidad para explorar la intimidad psicológica» (Johanna Thomas-Corr, The Guardian).
«Deslumbrante» (Christopher Benfey, The New York Times).
«Asombroso dominio del tema con una escritura precisa, medida y cuidadosa» (Holly Williams, The Independent).
«Una novela histórica apasionante, un romance conmovedor y un revelador fresco familiar. Por encima de todo, un generoso regalo. Hay un tipo de felicidad que contiene no solo placer sino también lucha, e incluso tristeza. Esta novela cuenta esa clase de historia feliz, y provoca esa clase de felicidad en el lector» (Jonathan Safran Foer).
«Una experiencia de lectura sublime: delicada, contenida, de una inteligencia aventajada y un equilibrio inhabitual, y hermosa de verdad. Realismo en la tradición de Flaubert y Stendhal: todo lo que sucede no parece tanto imaginado como predestinado. Que esta novela histórica épica sea el debut de una autora veinteañera parece imposible, y sin embargo es cierto. Isabella Hammad tiene un talento enorme, y su libro es una maravilla» (Zadie Smith).
A caballo entre el thriller y la novela histórica, «El pasado fue una guerra» es un apasionante y emotivo relato basado en una historia real sucedida en Socuéllamos durante la Guerra Civil. El libro une pasado y presente, ficción y realidad, al tiempo que analiza la complejidad de las relaciones humanas en medio de la tragedia cainita española. La traición y la libertad, las ideologías y el amor, el horror y la recuperación de la memoria aparecen en la historia de un joven universitario —«alter ego» del autor— que investiga la muerte de su bisabuelo, arquetipo moral de una época desaparecida pero todavía muy latente en nuestro tiempo.
Septiembre de 1943. Cinco personajes de la España de posguerra se encuentran en la encrucijada de sus vidas. El anciano Jordi, afinador de pianos; su joven nieta María, de 22 años; el novio de ella, Pere, que trabaja como doblador de películas; Jaume, que regresa clandestinamente a Barcelona como miembro activo del FNC (Frente Nacional de Cataluña); y Neus, su antigua novia, que va a casarse con un hombre mayor para salir de la pobreza. El afinador de pianos ha de dar clases al hijo de un poderoso falangista para subsistir y Pere ve cómo las oportunidades son cada vez menores para él. La vuelta del rebelde Jaume, dispuesto a tomar las armas, les cambiará la vida a todos y los sumergirá en una espiral de amor y violencia de la que no podrán escapar.
Una novela de trasfondo histórico dura, contundente, que refleja de manera fiel y minuciosa los acontecimientos sucedidos en España entre septiembre y noviembre de 1943, momento en que la Segunda Guerra Mundial empezaba a perderse por parte de los nazis y España se enfrentaba a su soledad en el nuevo mundo.
Durante el invierno de 1840 un comisionado real es enviado al corazón del pirineo aragonés con la misión de cumplir un objetivo: llegar hasta un monasterio perdido en las montañas del que apenas se tenía noticias y proceder a confiscar todos sus bienes en virtud del decreto de desamortización. La ruta de acceso a dicho monasterio solo era posible a través de un aterrador desfiladero conocido como «el Paso de las devotas» que debía sortearse con la ayuda de un guía local. Fernando de Artales, acompañado por sus actas notariales y un viejo caballo, se adentrará en este mundo inhóspito que hasta principios del siglo XX permaneció aislado del resto del país. Allí trabará conocimiento con una tierra hermética. La brujería, las plantas medicinales, el paganismo endémico y la tradición atávica de un matriarcado vigente durante siglos, pondrán el marco de fondo sobre el que se hará patente el rechazo de la comunidad ante la presencia del recién llegado. Pero la aventura referida en su diario no adquirirá dimensiones plenas hasta que tome conciencia de la realidad que esconde el monasterio que pretende confiscar: un lugar encumbrado por una maldición milenaria, cuya naturaleza subyace agazapada en el fondo de un pozo ubicado en la vieja cocina de sus dependencias…
Un relato basado en las historias reales de los llamados «bâtards de Boches», más de doscientos mil niños nacidos de las relaciones entre jóvenes francesas y soldados alemanes durante la Ocupación de Francia en la Segunda Guerra Mundial. Como cada mañana, coincidiendo con el tañido de las campanas de la iglesia, Nathalie saca al escaparate su pastel de manzana. Inmediatamente, el aroma dulce de la masa recién horneada fluye por las callejuelas empinadas de Saint Martin sur Meu, haciendo brotar sonrisas a su paso. Pero cuando alza sus ojos, su mirada se encuentra con otra: fuera de lugar, nueva, desconocida, grande y azul, como el azul lavanda de la fachada de madera del Café Patisserie Maison Blanchard. Tras el desconcierto inicial, Nathalie recobra la sonrisa. Sin embargo aquel hombre, un hombre fuera de lugar, nuevo y desconocido, no se la devuelve, esconde la mirada y se marcha calle abajo con la cabeza gacha bajo la gorra y las manos metidas en los bolsillos.
El país del agua ha sido unánimemente reconocida como una de las mejores novelas de la literatura británica de las últimas décadas. Las clases del profesor de historia Tom Crick —cuya esposa acaba de raptar a un niño— son muy particulares: nada de fechas, batallas o héroes, apenas el pasado del maestro y la vieja lucha de su familia contra los pantanosos Fens ingleses. A pesar de las directrices de la escuela, Crick elige contar su vida antes que dictar el tradicionalmente amable programa de la materia. Con la misma tenaz paciencia que sus antepasados utilizaron para derrotar la obstinación acuática de los movedizos Fens, el curioso docente se irá rodeando de sus más íntimos fantasmas, inseguridades, miedos y dudas. ¿Sirve para algo la Historia? ¿Por qué motivo una mujer cambia el amor de su marido por la devoción a Dios? ¿En qué momento todo empieza a ir mal? Las respuestas, quimeras que pretenderán vengar la secreta impunidad del presente, se le aparecerán embarradas, sugestivas y distantes; aún en el frío paisaje de su infancia como pistas abandonadas que esperan el regreso del culpable al lugar del crimen. Una conmovedora y brillantísima reflexión sobre las ambigüedades del conocimiento, las imposibilidades del amor, y las idas y venidas del Tiempo, en la que las historias familiares se suceden con extraordinario encanto, apasionada crueldad y refinada belleza.
La historia de amor imposible, pasiones, celos y despechos de Amelia, una indómita y sensual heroína romántica, fascinada por su amante rebelde y las gestas de la guerrilla patriótica. Un coronel de caballería se rebela contra el régimen constitucional, reclamando el poder omnímodo para Fernando VII. Basada en hechos reales, la asonada del coronel desencadenará toda suerte de acontecimientos bélicos, persecuciones y fugas presidiarias. En este confuso contexto se desarrolla una sugerente historia de amor, celos y venganzas, protagonizada por la bella y resuelta Amelia Pimentel y dos pretendientes enfrentados: el coronel Morales y el político liberal José Gordon. Redactada por Fernando Flores con un lenguaje eficaz y sugerente, en que alternan formas dialogísticas breves con ágiles descripciones. En la obra queda patente una voluntad de estilo, marcada por un equilibrio entre formas muy elaboradas y expresiones cercanas al habla popular. La amenidad del relato engancha a cualquiera que se aproxime a su prosa cuidada –no rebuscada-, pulcra, de rico vocabulario y contención retórica.
En el año 378 d. C., mientras el Imperio romano se desmorona, una misteriosa congregación religiosa llega a un valle del Norte de Hispania. El líder de esta secta cristiana es conocido como el Doctor y su influencia enseguida se dejará notar en los habitantes del lugar; nobles como Aufidio, jóvenes como Anü o agricultores arruinados como Antonio se verán envueltos en la lucha que el poder creciente del Doctor y de sus fieles desata en la provincia. Y es que el mensaje del Doctor que pregona la pobreza y la relación directa con Dios choca frontalmente con los intereses de una jerarquía eclesiástica que, ante la ruina de Roma y sus ejércitos, se ha convertido en el único poder estable en la mayor parte de Hispania. Esta obra, que novela la vida del controvertido y misterioso Prisciliano, se adentra en uno de los periodos más críticos y desconocidos de la Historia de España. Una época de crisis, pobreza y enormes cambios que guarda grandes similitudes con la actualidad.
Germán Bravo, joven arqueólogo, cree haber descubierto la pista del «Santa Clara», un galeón atacado por corsarios y hundido en la Bahía de Cádiz con una misteriosa carga en su bodega. En su búsqueda conocerá la aventura y el inesperado interés que despierta en dos mujeres que pertenecen a mundos opuestos, pero nunca llegará a sospechar el verdadero peligro que implica encontrar el «Santa Clara». Un hecho misterioso e inconfesable en el ocaso del imperio español de América da lugar a una inmensa intriga en el presente. Mafias de trata de personas se dan la mano con sospechosas casualidades en el Archivo de Indias. A bordo de galeones comerciales o negreros, cabalgando a lomos de caballos cartujanos, bajo el fuego de piratas, corsarios y navíos de guerra, con el oro de América y el maremoto de Cádiz de 1755 como telón de fondo, Carlos Funcia combina en su primera novela un torrente de pequeñas historias que arropan el nudo principal: los deseos de aventura y el ansia por desentrañar los misterios que nos rodean.
El descubrimiento de unos cuadernos desconocidos de Antonio Pérez, el secretario de Felipe II, permite desvelar la Historia oculta de aquellos años en España. El propio secretario reconoce, en sus últimos días, que continúa con vida gracias al arcón donde guarda copia de documentos, legajos, cartas y toda clase de pruebas que implican en asesinatos y siniestras estrategias a la monarquía, a la Iglesia y a casi toda la nobleza, desde los Reyes Católicos hasta Carlos V y su enigmático heredero. Es la confesión total de Antonio Pérez, el más temido verdugo del poder, que terminó siendo víctima de sí mismo.
En efecto, Juan de Lepe existió y hay alguna que otra reseña del personaje, pero como realmente lo vamos a conocer bien es de la mano de Aurelio, el narrador omnisciente que nos desnuda a personajes reales y de ficción entrelazados los unos con los otros en estos paisajes en los que solo el Guadiana marca la frontera hispanoportuguesa. Y nada mejor que los tiempos del Descubrimiento de América, aunque en la Andalucía de entonces todavía no se era consciente de la gesta Colombina, para ambientar las correrías de Juan y reivindicar la gloria de una provincia, la onubense, que se niega a permanecer arrinconada. No se sabe qué llevó a Juan de Lepe, en los albores del siglo XVI, a las islas británicas ni cómo logró acercarse de manera tan estrecha -sin redes sociales- al primer regente de los Tudor, Enrique VII, hasta el punto de, en una partida de cartas, arrebatarle el reinado por un día. Aurelio salta de Lepe al mundo sin salir de Lepe y nos lleva al pasado para que aprendamos en presente.
Uno dilapida su fortuna en el juego, el otro roba para vivir. ¿Podrán un conde y un ladrón encontrar un punto de equilibrio para ser felices? La mayor preocupación de Christopher Tadeus Von Grubber, conde de Utherness, es estar a la moda y seguir llevando la vida de lujos y diversión que siempre ha tenido. La noche londinense lo ha mantenido activo en mesas de juego donde se mueven fortunas, a pesar de que el juego y la bebida son malas compañías y llevan a malas decisiones. London Bridge es un huérfano que ha creado una familia propia, incorporando a ella a otros desafortunados como él. Sus armas no son fáciles de percibir: astucia, inteligencia, frialdad y una memoria prodigiosa que lo han convertido en un estafador digno de temer. La extraña desaparición de un grupo de niños que viven en la calle hará que los caminos de London y Tadeus se crucen. A partir de ahí, un osado plan y una apuesta cambiarán sus vidas para siempre.