Bautista, con ayuda de su madre y aislándola de sus amigos y familiares, ha logrado dominar a Luisina, su esposa, hasta convertirla en una sombra de la persona vital y exitosa que era. Un buen día, enamorado de su secretaria, decide dejarla. Se teme que quedará sola y abandonada a su suerte, pero gracias a una nueva amiga que la casualidad le ha dado, Luisina irá revirtiendo por completo su inminente desastre. Incluso encontrará el amor verdadero; lástima que sea tan próximo… acaso demasiado próximo.
La familia Daniels decide mudarse de Austin a un pequeño pueblo llamado Hidden Hill, cuando la matriarca de la familia empeora de salud. Red, el hijo mayor, decide ir antes para comprobar que el rancho que pertenece a la familia está en condiciones, y es cuando conoce a la familia Miller. Desde el primer día, choca con Charlotte Miller, la hija menor. Y la relación de amor odio que protagonizan desembocará en el conocimiento de sus sentimientos a pesar de que ambos luchan contra lo que sienten. Justin Miller viaja desde San Luis hasta Hidden Hill tras una feria de ganado. El viaje en caravana no suele ser fácil y dura semanas. Pero la cosa se complicará aún más cuando conoce a Lana en un oscuro callejón de la ciudad y la salva de un malhechor. La joven inocente no tiene a nadie ni a dónde ir, y cuando Justin le propone que lo acompañe en la caravana, no duda en aceptar, ya que no tiene otra salida.
Las mujeres que protagonizan este libro, publicado en italiano en 2012, son mujeres fuertes, que luchan, que a veces pierden pero que en ningún caso se rinden. Frente a ellas, sus maridos, amantes, compañeros, se revelan como adolescentes que se niegan a crecer y confunden la pasión con la posesión.En los ocho relatos que lo conforman, duros y capaces tanto de emocionar como de indignar, encontramos por ejemplo a Marina, una recién casada que se niega a denunciar al marido que la golpea y humilla a diario; a Francesca, que con apenas trece años es violada por cuatro compañeros de colegio que serán absueltos por la justicia y la opinión pública; o a Alessandra, que decide no traer al mundo al hijo fruto de la violencia sexual. Dacia Maraini habla de un mundo dividido entre quien considera al otro como alguien a quien hay que respetar y quien lo considera un objeto que poseer y esclavizar. Es éste un libro de denuncia que revela incluso aquello que las mujeres víctimas de la violencia callan o no quieren ver.
Y otras maneras de decirte que te quiero Eva sueña con conocer a un caballero que la venga a buscar en un corcel blanco y la bese siempre con los ojos cerrados, como ha visto infinidad de veces en las películas. El problema es que la realidad nunca es como la ficción, y tiene que conformarse con sexo una vez por semana y deshojar margaritas. Pero no solo de Eva va esta novela. También están Carla, su hermana, que ni siquiera se atreve a mirarse en el espejo, y mucho menos a reconocer que siente algo por un mejor amigo; Gina, que busca llenar sus vacíos bajo un cuerpo… o dos, y María, que desearía ir a un concierto de rock y liarse con el batería, pero no se atreve… Si crees que el amor tiene muchas caras, que existen muchas maneras de manifestarlo, de disfrutarlo y de vivirlo, esta historia es para ti.
Eva sueña con conocer a un caballero que la venga a buscar en un corcel blanco y la bese siempre con los ojos cerrados, como ha visto infinidad de veces en las películas. El problema es que la realidad nunca es como la ficción, y tiene que conformarse con sexo una vez por semana y deshojar margaritas.
Pero no solo de Eva va esta novela. También están Carla, su hermana, que ni siquiera se atreve a mirarse en el espejo, y mucho menos a reconocer que siente algo por un mejor amigo; Gina, que busca llenar sus vacíos bajo un cuerpo… o dos, y María, que desearía ir a un concierto de rock y liarse con el batería, pero no se atreve…
Si crees que el amor tiene muchas caras, que existen muchas maneras de manifestarlo, de disfrutarlo y de vivirlo, esta historia es para ti.
Esta novela es una historia de amor en clave humorística y con grandes dosis de ironía, en la que los dos protagonistas pasean sus sentimientos por algunas ciudades europeas. Numerosas situaciones, cercanas al surrealismo, provocan la carcajada del lector, pero la obra se convierte en una sátira sobre el amor y una crítica contra aquella literatura galante de la época. El propio autor ha escrito sobre el amor en sus «Máximas mínimas»: «El amor es como los columpios, porque casi siempre empieza siendo diversión y casi siempre termina dando náuseas».
Antes de Navidad: Mi nombre es Sandra, y hacía ya años que había dejado de creer en el amor. Con un hijo de 13 años al que cuidar, un trabajo a tiempo completo que me robaba la salud y la energía, y un ex-marido que no me da más que problemas con la pensión alimenticia, la fe en la humanidad se te escapa entre los dedos. Da igual cuantas citas tengas, no quedan hombres buenos. O eso creía. Me equivocaba. Al menos, quedaba uno. Alberto. Conocí al hombre en cuestión antes de navidad, en mi grupo de amigos habitual. Un amigo de un amigo, invitado a nuestra cena de los sábados por la noche. Sí, me entró por los ojos nada más verlo. Guapo, agradable, mi tipo de hombre y parecía incluso honesto. Sincero. Comenzamos a hablar. Tenía una hija de 15 años, su casa no era nada del otro mundo y… de algún modo, quizá no lo recuerde por el vino, o quizás sea por la vergüenza, despertamos juntos en la misma cama. Ahí empezaban los “¿Qué he hecho?”, “¿Qué pensará de mí” y demás auto-flagelaciones similares. Pero no, me invitó a cenar. Así que repetimos y, sí, sexo no fue lo único me trajeron esas navidades.Cortocircuito: Ahí estaba yo, María. Una madre soltera que había estudiando informática y se dedicaba a trabajar desde casa como Freelance. Frente a mí, mi hija nadando en el “examen final” de aquel año en la escuela de natación. Con sus 9 años, la pequeña era todo lo que tenía. Entonces él, Daniel, se sentó a mi lado. Dan, como dijo que lo llamaban sus amigos, decidió hablarme. La última vez que salí con un hombres, a través de un portal de citas por internet, terminé borrando mi perfil y decidiendo que los hombres habían dejado de merecer la pena. Bueno, quizás solo lo hice porque no creía que quedasen hombres como Dan. ¿Y cómo era este? Alto, atlético, con una sonrisa arrebatadora y un aspecto de marido perfecto. Por supuesto, él también había ido a ver a su hijo, de 9 años, al examen final. Solo que él, en lugar de informático, era nadador profesional. Olímpico.Olvídame: Diez años viviendo en la fría Inglaterra, y todo para, “al fin”, volver a casa. Sí, es cierto, ahora soy profesora de filología inglesa en la universidad, tengo plaza fija, y mi currículum es difícil de superar. Y sí, me he vuelto con unos ahorros más que generosos que me han permitido comprar una casa — pequeña, pero oye, al menos sin hipoteca —. Con un trabajo cómodo y sin preocupaciones, podía disfrutar de la vida… O eso me quería decir a mi misma. La realidad es que tras diez años de relaciones con españoles, ingleses, portugueses y hasta un italiano, por algún motivo, siempre me faltaba “algo”. Quizás soy yo, que soy una de esas mujeres disfuncionales que siguen medio-encerradas con su primer amor. Un hombre al que, por supuesto, hacía diez años que no veía. No desde que cortamos, tras errores cometidos por ambas partes, y huí a Inglaterra… ¿Ya lo adivinas, verdad? Sí, estudiamos en la carrera juntos, y sí, ahora ambos tenemos el mismo puesto de trabajo, en aulas distintas, en la misma universidad. Fantástico. Genial. Maravilloso.… La ¿peor? noticia en diez años. Ahora mismo lo tengo delante, mirándome con la misma cara de tonto que debo tener yo.
La relación con su padre no marchaba del todo bien desde hacía varios años desde que decidió apartarse de su madre para vivir en un mundo nada civilizado. Sin embargo necesitaba reencontrarse con él pese a la oposición de su familia. Entonces tomó el avión y se adentró en medio de una selva habitada por aborígenes, insectos y serpientes con el deseo ferviente de abrazarlo, sin embargo nada fue como lo soñó. Allí conoció a Dan, un nativo increíblemente atractivo, vanidoso y poco afable a las mujeres y aunque un abismo los separaba, caería rendida a su estirpe salvaje sin importarle el parecer de su círculo social y mucho menos el de sus parientes.
Mujer cautivante y dueña de un temperamento audaz, Bronwyn Edana se divierte junto a sus hermanas escandalizando a la alta sociedad de Inglaterra con sus atrevidas aventuras. Pero cuando conoce a Adam Keane, siente que todo su mundo ha cambiado para siempre. Desde el primer excitante encuentro con el noble, Bronwyn se ve arrastrada por un deseo arrasador y decide que hará todo lo que sea necesario para conquistarlo, incluso cuando el oscuro pasado de Adam la coloca en el centro de una conspiración que puede sacudir los cimientos del reino británico. Desde las peligrosas calles de Londres hasta la imponente mansión Boudasea, Bronwyn está dispuesta a seguir el destino que le marca su corazón, y a arriesgarlo todo por la promesa de un amor verdadero.
Érase una vez una cenicienta de barrio, una carroza con cámara oculta y un misterioso conductor encantado y encantador, dispuesto a convertir un reality show en su propio cuento de hadas. Mascarada es un nuevo programa televisivo de cámara oculta que maquilla famosos y los transforma en conductores anónimos para sus fans, usando como gancho una app para compartir coche. Así es como Alba termina siendo copiloto de su cantante favorito, sin imaginar siquiera que pueda ser el mismísimo Óscar Navas el que se esconde tras una barba desaliñada y una melena leonina. Una serie de aventuras y desventuras disparatadas, programadas minuciosamente a lo largo de los mil kilómetros del viaje, les llevarán mucho más lejos de lo que los guionistas podrían haber soñado. A veces le pides un deseo a una estrella fugaz y te lo concede tu estrella de rock favorita, cayendo a tus pies. Es la fantasía hecha realidad que plantea Amor sobre ruedas, una novela divertida, ocurrente y original en la que todo es más de lo que parece y nada parece imposible. Don Kiwi se ve marrón y peludo, pero su interior es verde esperanza. La señorita Albaricoque parece suave y tierna, pero esconde un hueso duro de roer. En Amor sobre ruedas la vida no es solo color de rosa, pero deja un buen sabor de boca.
Cuando el peso de una pérdida dolorosa se vuelve difícil de soportar, nada mejor que poner tierra de por medio en busca de aire fresco. A esta sabia y sensata conclusión ha llegado Bella a sus treinta y tres años. De la noche a la mañana, abandona un piso plagado de recuerdos y un estresante empleo en Londres para mudarse a Kent, muy lejos del bullicio de la ciudad y muy cerca de donde reside Viv, su amiga de toda la vida. Pero, sobre todo, Bella no quiere ni oír hablar de hombres, ni mucho menos enamorarse; a partir de ahora dedicará su tiempo libre a la pintura, al jardín y a su amiga. Sin embargo, a menudo la tozuda realidad puede hasta con los propósitos más firmes, especialmente si adopta la forma de Will, el candidato perfecto. Ante semejante ejemplar, cualquier mujer caería rendida, así que Bella deberá luchar contra la tentación de volver a las andadas.
Llevo un tiempo sintiendo que debo encontrarme a mí misma en lugar de hacer lo que mi familia espera que haga. Por eso interpreto el papel de buena hija... Todos creen que ayudo a mi hermana en la peluquería cuando no estoy trabajando en el restaurante chino de mis padres. En realidad, estoy cursando Química en la universidad y, además, en mi tiempo libre, digamos que también estudio la reacción del amor. Y ahí es donde entra Rubén, un matemático friki del que me he colgado y que me hará entender, en la complicada ecuación que supone mi día a día, lo mejor y lo peor de nuestras culturas. Nina Chou es una joven de origen chino que vive en Usera junto a sus padres. Su hermana Fang está felizmente casada con un joven médico chino y tiene una peluquería. Nina trabaja por las noches en el restaurante chino que regentan sus padres, que no ven el momento de que se case y le organizan un sinfín de citas a ciegas. Pero durante el día, y sin que ellos lo sepan, Nina estudia química en la universidad. Cuando un día, al doblar una esquina, se choca de frente con un apuesto joven, Rubén, el amor se instalará en sus vidas. ¿Podrán superar las barreras raciales y culturales? ¿Aceptará la estirada madre de él a una muchacha china como ella? ¿Aceptará la madre de ella a un occidental que además es su profesor de matemáticas? ¿Conseguirá Nina cumplir sus sueños y alcanzar sus metas sin defraudar a sus padres?
Elisa vive por y para su trabajo. Por casualidad, lee uno de los artículos del reconocido periodista Edward Parker, convirtiéndolo en su obsesión. Daniel tiene todo lo que puede desear: es el periodista más importante de un reconocido periódico inglés, y además disfruta del anonimato que le proporciona su seudónimo: Edward Parker. Ella se enamora de él leyendo sus escritos; Él de ella leyendo sus palabras. El destino se encargará de unir sus caminos. ¿Es posible amar a alguien leyendo lo que escribe?
Gema tiene claro que su estilo de vida no es el correcto para muchos, pero sí es el que le hace feliz. Con su filosofía de «haz lo que te dé la gana sin importar lo que digan de ti mañana» y una sonrisa por uniforme, va derribando muros.Por otro lado, Gabo tiene grabado a fuego la frase dicha por Platón «Puedes descubrir más sobre una persona en media hora de juego que en un año de conversación», y la sigue al pie de la letra. Es el mejor en su trabajo, y se define a sí mismo como un «friki feliz». Es impaciente, meticuloso y, tal vez, un tanto obsesivo con todo lo que le rodea. ¿Podrá un pasado en común y una simple casualidad unir a dos personas totalmente incompatibles? Una petición de amistad, un mensaje y mucho humor.
En ocasiones el dolor de una perdida es tan grande que se nubla la razón y el corazón. Por eso Amanda decide ahogarlo en alcohol y acaba perdiendo el control de su propia vida. Tras estrellar su coche en Central Park, la heredera de la más importante cadena hotelera del país pone patas arriba su vida y la de los que la rodean. El primer afectado es su propio hermano, Sean, obligado por su ausencia a tomar el mando de una empresa que no quiere mientras su vida en Los Ángeles se desmorona. Volver a la ciudad de la que huyó no tiene atractivo para él hasta que conoce a Kate, la mejor amiga de su hermana. Por su parte, Kate se siente dividida ante la llegada de Sean: lleva toda la vida enamorada de él y no está muy segura de sí tenerlo cerca será una buena idea o no. El que sí tiene claro que tener a Amanda cerca no es una buena idea es Gabriel, director del centro de rehabilitación. Es un peligro para todos los que la rodean, pero para él aún más. Todo su control desaparece en cuanto la ve.
La llegada del pasado destroza el presente de Kate. Se ha convertido en lo que más odia y no ve luz al final del túnel que no sea el regreso de Amanda y la vuelta a la normalidad. Se siente traicionada por todo y solo quiere poder tener a su amiga de vuelta. Sin embargo, Amanda no quiere regresar. Ha encontrado la felicidad en el lugar más insospechado con la persona más inesperada. Teme que alejarse de allí signifique perderlo. Pero su tiempo allí se acaba y debe regresar a La Gran Manzana. Gabriel se siente en el infierno tras la marcha de su Kamikaze y no sabe cómo actuar. Está convencido de que el paraíso no es su lugar, todo lo contrario que Sean que piensa conseguir el suyo al lado de la mujer a la que ama. ¿podrán superar las adicciones que los atan al pasado y recuperar el control de sus vidas para poder tener un futuro juntos?
Un buen día, Emmy Turner, esposa de un ambicioso profesor del Convers College, se da cuenta de que ya no ama a su marido. Convencida de que su propia vida le es ajena y ha pasado a ser monótonamente repetitiva, busca distracción en casa de unos amigos excéntricos. Allí conoce a Will Thomas, un libertino a quien su carrera como compositor de música contemporánea interesa menos que las mujeres. Emmy no tarda en enamorare, y la pasión va apoderándose de ella desbarajustando todo el sistema de convenciones en el que ha vivido hasta entonces. Ni el peligro de escándalo, ni la repercusión de sus actos sobre su marido y su hijo, pueden y librarla del abismo que se abre entre el deseo y la responsabilidad.
El protagonista de Amor y basura es un escritor que se ve convertido en barrendero por la censura estatal, y que comparte con los otros miembros de la brigada de limpieza a la que pertenece un similar afán de evasión. Este deseo de elevarse por encima de la realidad, y la imposibilidad material de despegarse de esta, crean una disyuntiva que constituye el núcleo de esta historia, una bellísima novela en la que Klíma reivindica no solamente la necesidad de la memoria, sino el papel de la literatura en la conformación de la vida personal y de la historia colectiva.
Puede que las creaciones pirotécnicas de Anna Leslie alumbren el cielo del 4 de Julio, pero sus trabajos de investigación y desarrollo no consiguen alumbrar sus noches privadas, y su forma de ver la vida como mujer trabajadora y niña buena, tampoco están logrando demasiadas cosas fuera de la cama. Cuando su jefe le da un ultimátum, empujándola a salir del laboratorio, Anna decide que ya va siendo hora de dejarse llevar y empezar a crear cohetes mucho más personales. Jay Whitman no puede creerse que la bomba de rojo sea el genio de Frontier Fireworks. Está convencido de que la pasión de Anna por los cohetes oculta una pasión muy terrenal por lo fálico y, para darle una nueva línea de investigación, se ofrece voluntario a ceder su cuerpo a la ciencia. Es una oferta que no puede rechazar, pero Anna se da cuenta enseguida de que tiene entre manos un experimento que no es capaz de controlar o predecir.
Roderick Sutter, un escritor mediocre de novelas románticas históricas, conoce en Florida a una «chica-coctel» de una belleza extraordinaria. A partir de ese momento su vida cambia completamente. Se obsesiona con ella, a pesar de haberla visto sólo una noche, hasta el punto de no poder concentrarse en su nueva novela. No se dará por vencido hasta lograr lo que busca y comienza una persecución desde Sarasota a Nueva Orleans, Houston y finalmente Colorado Springs, pero en vano. Durante todo el libro el elemento de suspenso está presente en la figura de la misteriosa y reticente mujer que se aleja de él constantemente. Se sabe que ella está ocultando algo, pero el misterio se va construyendo capítulo a capítulo. Erskine Caldwell logra con Amor y dinero una novela llena de tensión, intercalada con episodios de humor.