Hace un tiempo el escritor italiano Alessandro Baricco pensó que «sería hermoso leer en público, durante horas, toda La Ilíada ». Su intención era recuperar así la fuerza del texto homérico y transmitir de forma oral la mítica guerra entre troyanos y aqueos. Por supuesto, la lectura del poema completo era una gesta imposible: Homero, Ilíada es la adaptación concebida por Baricco.
Una obra brillante e innovadora, a la vez que todo un tributo al gran clásico griego.
Después de la Primera Guerra Mundial, Alemania se ve sumida en una depresión, obligada por el Tratado de Versalles. En un recóndito pueblecito alemán, junto a las montañas de Rohn, un par de estudiantes, todavía en edad escolar, sueña con que algún día podrán ser pilotos. Sus ilusiones se antojan imposibles de cumplir, pero aunque los términos del armisticio señalaban a los alemanes la imposibilidad de volar aviones con motor, no decía nada de los aviones que no lo tuvieran. La casualidad hace que un nutrido grupo de estudiantes universitarios escoja las colinas de ese entorno geográfico para experimentar una nueva actividad deportiva: el vuelo de planeadores.
Hornblower, un tímido y solitario guardiamarina de tan sólo diecisiete años, llega a su primer destino: el buque ‘Justinian’. Su encuentro con las duras condiciones de vida de un barco de la Armada real británica en tiempo de guerra supone todo un reto para el muchacho, que pronto se verá involucrado en las acciones contra la flota francesa y tendrá ocasión de aprender algunas lecciones que nunca olvidará. Así, tras un temerario duelo del que sale afortunadamente ileso, embarca en la fragata ‘Indefatigable’, un navío en el que pretende encontrar las ocasiones apropiadas para un ascenso en su carrera. Abordajes, combates, naufragios y cuarentenas se suceden en diversas misiones con desigual resultado, hasta que el joven marino termina con sus huesos en la prisión militar de El Ferrol. Un trepidante estreno para un personaje llamado a convertirse en protagonista de una de las más apasionantes series náuticas jamás escritas.
En esta segunda entrega de la serie dedicada a Horatio Hornblower, el protagonista deja atrás su etapa de guardiamarina e inicia su auténtica carrera militar. Los avatares de la guerra entre franceses y españoles le llevarán a asumir la responsabilidad del cargo de teniente de navío. El valiente Hornblower está superando apenas la adolescencia y conserva todavía buenas dosis de ingenuidad, pero va a tener que dirigir ya sus primeras operaciones militares, en las que demostrará que es capaz de mantener la cabeza fría en los momentos decisivos. Su innato talento militar le permitirá triunfar allí donde otros marinos más experimentados fracasaron; su sagacidad en el juego de naipes le convertirá en un rival temible; su ingenio despierto le permitirá iniciar negociaciones con oficiales muy duros y curtidos en alta mar…
Justo después de casarse, Hornblower se hace de nuevo a la mar para intervenir en el bloqueo de la costa francesa y recabar información de los movimientos de la flota napoleónica. Además, tiene la orden no escrita de no hacer nada para evitar un conflicto con Francia que desemboque en una guerra declarada. El Canal de la Mancha es un escenario de lo más apropiado para que Hornblower muestre su pericia como marino, sobre todo en las maniobras nocturnas, pero además tiene ocasión de hacer gala de su talento militar y de sus innatas dotes para intervenir en misiones secretas. Una novela que combina a la perfección las escenas bélicas con una apasionante trama de espionaje militar.
La acción de esta novela se inicia en el espléndido funeral de lord Nelson en agua de Támesis, pero Hornblower no tarda en ser destinado a Malta para, zafándose de los servicios de espionaje enemigos, organizar la búsqueda de un botín hundido frente a las costas turcas. La amenaza de la presencia de la Armada turca hace que la operación no sea un auténtico éxito, pero tampoco un fracaso. En el regreso, la Atropos intervendrá en una de las grandes batallas acontecidas ante la costa española en el Mediterráneo, cuando prestó apoyo a la Nightingale al ser ésta atacada por una fragata española mucho más poderosa, la Castilla, que acababa de salir de Cartagena. La Armada británica abrió una investigación para esclarecer las responsabilidades de las pérdidas, pues se produjo un sospechoso cruce de acusaciones entre los capitanes de la Atropos y de la Nightingale que Forester intenta aclarar.
Hornblower recibe órdenes de poner rumbo al golfo de Fonseca para apoyar un intento de rebelión contra los españoles liderado por Julián Alvarado, un cacique que, anticipándose a Roa Bastos, se hace llamar «el Supremo». Pero además debe enfrentarse a un impresionante navío de dos puentes y cincuenta cañones, el Natividad, y apresarlo, quemarlo, hundirlo o, en cualquier caso, dejarlo fuera de combate. Incluso el Almirantazgo sabe que se trata de una misión casi imposible de cumplir al mando de la Lydia, una fragata de sólo treinta y seis cañones. Pero Hornblower nunca rehuye el riesgo, y afrontará todos los peligros que se le pongan por delante, aun cuando en ello pueda irle la vida.
En 1810, el capitán Horatio Hornblower llegaba frente a la Costa Brava a bordo de la Sutherland, un navío cuya proa redonda y perfil holandés le permitían pasar por francés. Aprovechando esta circunstancia, consiguió capturar a la Amélie y tomó por asalto la batería del puerto de Llançà, para dirigirse luego a Palamós, donde recabó información acerca de una columna militar que marchaba en dirección a Malgrat. Hornblower en España es un emocionado homenaje a los hombres que lucharon en nuestras costas no sólo contra los franceses, sino contra unas condiciones de navegación terribles de las que el Cabo de Creus se ha convertido en un símbolo.
Obligado a rendirse ante la superioridad de los franceses, Hornblower se enfrenta a un futuro incierto en una incómoda prisión en Rosas. Si bien era una estratagema muy usual en tiempos de guerra, el hecho de haber enarbolado la tricolor en su ultimo enfrentamiento con la armada napoleónica puede llevar a Hornblower y a sus oficiales ante un pelotón de fusilamiento, pues el emperador Frances esta dispuesto a desprestigiar a los ingleses a toda costa. Por si fuera poco, al bueno de Bush han tenido que amputarle la pierna como resultado del último combate, por lo que intentar una fuga durante el viaje a Vincennes parece una idea completamente descabellada e inútil. Sin embargo, Hornblower no es un hombre que acepte una muerte deshonrosa sin presentar batalla hasta el último momento. La inesperada aparición en esta novela del legendario Thomas Hardy, cuya intervención en Trafalgar al mando del Victory le convirtió en un héroe nacional, sorprenderá a todos los buenos aficionados a la literatura del mar. Pero, como siempre, es Hornblower quien toma las riendas de su propio destino.
Hornblower, flamante comodoro tras su inesperado éxito en Francia, regresa al escenario de sus primeras aventuras, el mar Báltico. El arrojo y las dotes demostradas a lo largo de los años le convierten en el hombre ideal para comandar una misión tan delicada como peligrosa. Pero en esta ocasión no se trata de entrar en comb ate, apresar naves enemigas o llevar a cabo incursiones en suelo francés, sino de proteger a la flota mercante británica e intentar que la tensa situación que se vive en el norte de Europa no desemboque en una guerra de impredecibles consecuencias. Sin embargo, las circunstancias le llevarán a intervenir contra las defensas francesas, y los acontecimientos se desarrollarán a partir de entonces de una forma desbocada. El futuro de Europa queda en manos de Rusia. Cuando Hornblower se pone al mando, la emoción está asegurada.
En el otoño de 1813, a la vista de su brillante historial, lord Saint Vincent ha decidido encomendar a Hornblower una delicada misión que conlleva la penetración en territorio francés a bordo del bergantín de dieciocho cañones Porta Coeli. Sin embargo, antes deberá lidiar con una situación no menos delicada, pues la tripulación del Flame, embarcación gemela del Porta Coeli, se ha hecho con el mando, se ha amotinado y amenaza con pasarse a las filas napoleónicas. Hornblower es un veterano que puede dejar en manos del capitán Freeman, a quien conoce bien, las cuestiones de navegación, pues lo que se espera de el es que ponga en práctica de nuevo su audacia y su habilidad táctica para desembarazarse de una situación desesperada. Y empleando mas el ingenio que la fuerza bruta, Hornblower pondrá en práctica una feliz idea pare enfrentarse a ella desde una posición muy favorable. Lo que no puede ni imaginar es que acabará exponiéndose a una sentencia de muerte.
Hornblower en las Indias Occidentales nos traslada a los años 1821-1823, un breve respiro en las guerras napoleónicas. Sin embargo, Horatio Hornblower no va a tener unos últimos años de servicio tan tranquilos como cabría esperar, sino que, nombrado comandante en jefe de las Indias Occidentales, con base en Jamaica, tendrá que hacer frente a una disputa con un barco estadounidense que puede romper la aún frágil paz, perseguir un bajel pirata, descubrir a un esclavista, intentar mantener la neutralidad ante las rápidas acciones de Simón Bolivar..., y, por si fuera poco, sobrevivir a uno de los temporales mas devastadores que se recuerdan en el Caribe. Un perfecto colofón a las fascinantes aventuras de Hornblower.
'Los contornos del Huáscar se iban delineando a medida que se acercaba. El capitán Castleton distinguió la torre artillada, el palo mayor y el espolón que cortaba las aguas. El espolón capaz de partir un barco de madera en dos. El mismo, recordó el capitán Castleton con un escalofrío, que había destrozado a la Esmeralda y su tripulación hacía poco más de dos meses. La inminencia del encuentro le provocaba más admiración que miedo'. La captura del Huáscar se convirtió en la gran obsesión de la Armada chilena durante los primeros meses de la Guerra del Pacífico. Aquel barco implacable, dotado de un poder de fuego y un blindaje como pocas embarcaciones tenían en esos años, se convirtió en uno de los símbolos de un conflicto único en la historia del continente. Con precisión y abriendo el relato a otros planos más allá de la tradicional novela histórica, Carlos Tromben ofrece una narración documentada y emocionante sobre un combate naval que cambió la historia de Chile, Bolivia y Perú.
Instantánea describe la electrizante acción desarrollada para rescatar a David Munger, fotógrafo de la prensa internacional, que se encontraba preso en una cárcel de seguridad en Irak. En medio del bombardeo de la planta nuclear de El Tuwaitha, hecho real efectivamente sucedido, un avión se desvía para acometer la hazaña. Ruth Paget, heroína deslumbrante, desempeña un papel fundamental y dramático en la aventura. Es una historia de espionaje y perversión, intolerancia étnica y religiosa, actos de intenso amor y arrojo. El fotógrafo está inmerso en una pesadilla de la que logra salir en lucha desesperada con la ayuda y el amor inquebrantable de Ruth. Instantánea es, sin duda, una gran novela que continúa la línea de grandes éxitos iniciada por A. J. Quinnell con El guardaespaldas.
Cambridge, Inglaterra, semanas previas al estallido de la Primera Guerra Mundial. Joseph Reavley recibe la visita inesperada de su hermano Matthew, quien le anuncia la fatídica muerte de sus padres en un accidente de tráfico. A su dolor se suma el desasosiego: la noche anterior a los hechos, John Reavley había revelado a su hijo Matthew que estaba en posesión de un documento que iba a cambiar la historia de Inglaterra para siempre.
Abril,1915. La Primera Guerra Mundial sigue su implacable marcha. Entre las tropasbritánicas enviadas al frente, se hallan los hermanos Reavley. Joseph, el mayorde los tres, ejerce de capellán en las trincheras, mientras que Judith es conductoray traductora del general que está al mando del ejército británico. Matthewtambién participa en los acontecimientos históricos desde su puesto en losservicios de inteligencia en Londres. Tanto Joseph como él siguen investigandola extraña muerte de sus padres, hecho que asocian con un posible complot anivel internacional y en el que dos de las potencias mundiales, Inglaterra yAlemania, estarían involucradas. Además de la incógnita en torno a susprogenitores y de tener que hacer frente a la cruda experiencia de lacontienda, Joseph intenta descubrir quién asesinó a Eldon Prentice, uncorresponsal de guerra inglés que se había ganado la antipatía de muchos.
Primera Guerra Mundial, marzo de 1916. Joseph Reavley queda herido de gravedad en un intento por rescatar a un compañero de combate. Enviado a su casa en Cambridgeshire, Joseph se enfrenta a una lenta y dolorosa recuperación marcada por sus turbadoras vivencias bélicas. La visita inesperada de un amigo, que le habla de un invento que podría neutralizar el efecto devastador de los submarinos alemanes, y el asesinato, ocurrido días más tarde, de uno de los científicos involucrados en la investigación, demuestra que alguien está filtrando información confidencial al enemigo.
Enjulio de 1917, a punto de iniciarse el cuarto año de conflicto bélico, elcapellán Joseph Reavley y su hermana Judith, miembro del Cuerpo de Ambulancias,están agotados. En el frente del Oeste ha comenzado la batalla dePasschendaele, y la paz aún parece muy lejana. La arrogancia y la incompetenciadel oficial Northrup, comandante a cargo del regimiento de Joseph, auguran lamuerte innecesaria de muchos soldados. Pero pronto es el propio Northrup el quecae, aunque a manos de sus hombres.
Enoctubre de 1918 parece que se vislumbra el final de la guerra. Los hermanosReavley -Matthew, agente de los servicios de inteligencia británicos, Joseph yJudith- se encuentran en las terribles trincheras de Flandes. A lo largo de laserie, no han cejado en su afán de dar con quien mató a sus padres: elPacificador, un ser empeñado en evitar la victoria británica. Cuando están apunto de localizarlo, Matthew es acusado de asesinato.
Islas en el golfo (Islands in the Stream, su título en inglés), es una novela de Ernest Hemingway publicada póstumamente en 1970, luego de que su manuscrito fuera hallado entre los papeles que dejó al morir. Se trata de un intenso relato de acción y aventuras desarrollado en tres partes, en el que cuenta la vida de Thomas Hudson, un pintor establecido en la isla de Bimini, sobre la corriente del golfo, a mediados de la década de 1930. La acción comienza con la visita de los tres hijos de Hudson durante unas vacaciones, hecho que quiebra su soledad y también, en parte, la rutinaria disciplina de su trabajo. Así se suceden una serie de vívidos episodios que incluyen una de las mejores descripciones de la pesca de altura que jamás se hayan escrito. La segunda parte tiene lugar varios años más tarde, en Cuba, cuando durante la guerra, Hudson interviene en actividades antisubmarinas secretas. La trama se desarrolla, en buena medida, en un bar de La Habana por el que desfilan una serie de pintorescos y variados personajes magistralmente caracterizados por Hemingway. La tercera y última parte, tiene lugar poco después, a bordo de un falso barco mercante con el que Hudson intentará dar caza a los sobrevivientes de un submarino alemán, episodio cuyo relato dará lugar a algunas de las mejores y más hermosas páginas de acción escritas por el autor a lo largo de toda su carrera. El libro fue llevado al cine en 1977 por el director Franklin J. Schaffner, en un film protagonizado por George C. Scott, David Hemmings y Gilbert Roland.