Sabina, una joven con muchas ganas de amar y de ser amada, vivirá en una constante tentación al tener junto a ella a dos impresionantes hombres que le harán disfrutar de infinidad de momentos cargados de pasión, lujuria, y desenfreno, pero, sobre todo, la amarán como pocas personas saben hacer. Tendrá que elegir entre su pasado y su futuro sin saber qué decisión tomar, pues ambos le gustan muchísimo y despiertan en ella su lado más salvaje, erótico y sensual. ¿Qué decisión tomará? Tendrás que averiguarlo leyendo la excitante historia que Sabina quiere contarte. En La duda y el deseo primera parte, la escritora nos sumergirá en un sinfín de momentos divertidos, peligrosos y emocionantes explicando algunas actuaciones policiales junto a la imprescindible colaboración de los bomberos, los servicios sanitarios, y por supuesto, con interesantes tramas judiciales. Nos dará detalles de cómo se vive formando parte del maravilloso mundo de locos en el que la protagonista sobrevive día a día. Muchas historias son reales y muchas otras inventadas. ¿Cuál es cuál? Solo Ariadna Tuxell lo sabe...
En La duda y el deseo segunda parte, nuestra protagonista vivirá nuevas aventuras tanto en su trabajo como en su día a día. Jan seguirá formando parte del círculo más cercano de Sabina arrepintiéndose a diario de haber fallado a la mujer más importante de su vida mientras Estefan la amará y la querrá como pocos hombres saben hacerlo. Nuestra chica sufrirá las consecuencias de tener tan cerca a sus dos amores, pues el destino, en ocasiones, es así de caprichoso y te da a elegir entre dos opciones realmente apetecibles. Pero, ¿quién quiere conformarse con la mitad cuando lo puedes tener todo? En esta novela podrás dejar volar tu imaginación y hacer realidad las fantasías sexuales de muchísimas personas que no hacen más por miedo al qué dirán, a los tabúes y a las vergüenzas. No siempre lo prohibido es malo, y muchas veces, lo que aparenta ser malo resulta ser lo más fascinante, emocionante y positivo que has hecho en la vida. Déjate llevar leyendo la historia de Sabina y disfruta con cada una de sus ardientes citas, no siempre siendo dos en la cama, puesto que existen algunos excitantes momentos en que tres no son multitud…
La joven alzó el arma contra quien amaba dispuesta a terminar con su vida pues, la hermosa heredera de uno de los títulos más antiguos y prestigiosos de Londres, estaba convencida de que era él quien estaba tras los ataques que había sufrido. Cuchichean las más ancianas, protestan los jóvenes casaderos; la hermosa dama acaricia el gatillo sin despegar las pupilas del barón Petre. —Habrá de convencerme de su inocencia antes de que amanezca… —siseó ella sin un ápice de compasión en la voz. —No puedo aportar nada más que mi palabra. —¿Su palabra? ¿Le recuerdo su promesa? —Entonces era otro hombre… —Uno que juró estar dispuesto a todo por desenmascararme. Impostora, así me llamaba mientras trataba de alzarme las faldas —resumió Sunshine con una sonrisa ladina colgando de los labios. —No comprendí lo errado que estaba hasta que perderla se tornó realidad. «Su lengua es peligrosa…», pensó ella, acortando el espacio entre ambos. «Al igual que su sonrisa…» Lo deseaba y negarlo era absurdo. Cedió al impulso al envolver su cuello y besar sus labios, despacio, lista para alejarse a la más mínima señal de peligro. —No debería esforzarse tanto —susurró Eduard, recogiéndola entre sus brazos cuando ella perdió el pie y se aferró a su chaqueta, dejando caer el arma—. Todavía no está recuperada del todo… —Si es culpable seré yo la que le arranque la piel antes de… —Lo sé, preciosa —aseguró él, besando con dulzura su mejilla.
De la autora superventas de “La ecuación del amor”, llega una comedia romántica sobre esa clase de amor que cruza fronteras y sortea todos los límites del corazón. Helen Hoang profundiza en el complicado mundo de las relaciones con la historia de amor entre un chico con Asperger y una chica vietnamita elegida por la madre de él. Una historia que demuestra que el amor siempre es posible, incluso para alguien que no siente emociones. Khai Diep no siente emociones. Para ser más exactos, siente irritabilidad cuando alguien mueve sus cosas de sitio, o satisfacción cuando los libros de contabilidad cuadran hasta el último céntimo, pero no emociones importantes, como dolor o amor. Está convencido de que, en cierto modo, hay algo «defectuoso» en él, aunque su familia sabe que, en realidad, su autismo hace que procese las emociones de manera diferente.
Pero cuando Khai rechaza sistemáticamente las relaciones de pareja, su madre decide tomar cartas en el asunto y regresa a Vietnam para encontrarle esposa. Esme Tran siempre se ha sentido fuera de lugar en Ho Chi Minh. La vida no siempre le ha puesto las cosas fáciles, así que, cuando tiene la oportunidad de viajar a EE.UU. para conocer a un posible marido, no puede negarse. Pero seducir a Khai no resultará tan fácil como pensaba. Las lecciones de amor de Esme parecen estar funcionando… pero solo consigo misma. Está irremediablemente enamorada de un hombre que cree que nunca será capaz de corresponderle. ¿Podrá Khai superar los límites de su corazón? A medida que el tiempo de Esme en EE.UU. se agote, Khai comprenderá que se ha equivocado… Y que, en realidad, hay más de una manera de amar.
Jackeline es una ejecutiva dura y de acciones sin piedad para poder sobresalir en un trabajo repleto de hombres. Pero también tiene la necesidad de distraerse de ese trabajo tan agobiante y despiadado. La forma de evadirse de ese mundo en su tiempo libre es entrando en chats eróticos para conocer a hombres y fantasear con ellos. Pero encuentra a un hombre que le hace desear dar el excitante y peligroso paso de conocer a alguien, del mundo online, en persona.
Jackeline es una ejecutiva dura y de acciones sin piedad para poder sobresalir en un trabajo repleto de hombres. Pero también tiene la necesidad de distraerse de ese trabajo tan agobiante y despiadado. La forma de evadirse de ese mundo en su tiempo libre es entrando en chats eróticos para conocer a hombres y fantasear con ellos. Pero encuentra a un hombre que le hace desear dar el excitante y peligroso paso de conocer a alguien, del mundo online, en persona. Y después del primero siguen otros, desconocidos que no sabe si serán buenas o malas personas… Segunda cita del chat sexual (Dominación erótica) es una historia perteneciente a la colección La ejecutiva seductora, una serie de historias de alto contenido erótico y con el protagonismo de una dura ejecutiva con ganas de distraerse de su agobiante y duro trabajo con algo excitante.
Adam tiene toda la eternidad por delante. Dalila, a sus 20 años, sólo unas décadas. Adam ya no siente ilusión por nada. Dalila aún está descubriendo el mundo. Y entonces sus caminos se cruzaron. Él se obsesionó con ella. Ella se enamoró de él. Y pasó. Ella bebió de él. Él bebió de ella. Ella se entregó a él. Él casi la mata. Y entonces tuvo que decidir… ¿Salvar su alma o convertirla? ¿Dejarla morir o hacerla uno de ellos? ¿Liberarla o vincularla completamente?
Sara espinosa era especialista en que le fueran in fieles los novios que tenía. Era andaluza, pequeña y guapa y había cumplido su sueño de ir a la gran manzana y dar clases en un Instituto. Había estudiado filología inglesa. El director era su novio hasta que lo pilló infraganti con otra profesora. Y perdió el novio y el trabajo. Como venganza se enteró de que la chica era novia de un gran empresario de Nueva York y no corta ni perezosa, se propuso hacer lo mismo que había hecho ella con su novio y de dirigió al despacho de Adrián Madox y además le tendría que dar trabajo. Pero se equivocó de hombre e hizo el amor con el hermano de Adrián, Caleb en el despacho. Los hermanos, buscaban una trabajadora para cuidar a su padre enfermo de Alzheimer y Caleb, se lo ofreció, pero debía mudarse a Emporium, Pensilvania y vivir en su casa. Era eso o volver a España. Y se arriesgó. Caleb era Sheriff del Condado de Cameron. Era alto, joven y guapo y las mujeres lo perseguían como moscas. Caleb y Sara tuvieron sus más y sus menos. ¿Llegarían a enamorarse? ¿Cuántas vicisitudes tendrían que pasar para ser felices? ¿Podría soportar Sara tantas inquietudes que le atenazaban?
CAPITULO 10 DE ESCLAVA NEGRA (ÚLTIMO): La salida de Tara de Dixieland con motivo del Mardi Gras fue un gran éxito pero ha traído consecuencias indeseadas. Su antiguo novio, Mick, la ha reconocido y ha decidido recuperarla a toda costa. Por ello secuestra a míster Trap y se introduce por la fuerza en la ciudad esclavista. La irrupción de Mick hará que los acontecimientos se precipiten de forma dramática. (ÚLTIMO CAPÍTULO DE LA SERIE)
Mantén la mirada baja, sirve la comida y luego vete. Nada de quedarse en la Suite del Presidente. Nada de miradas, nada de entablar conversación con el príncipe y nada de coquetear. Especialmente nada de coqueteo: el príncipe Casper tiene una reputación escandalosa cuando se trata de mujeres. Holly, ¿me estás escuchando? Holly salió de un torbellino de miseria el tiempo suficiente para asentir. Sí", graznó. Te escucho, Sylvia". Entonces, ¿qué acabo de decir? El cerebro de Holly estaba nublado por la falta de sueño y por un constante rodeo de duro autoanálisis. Dijiste... me dijiste..." Su voz se apagó. No lo sé. Lo siento". La boca de Sylvia se tensó con desaprobación. ¿Qué te pasa? Normalmente eres muy eficiente y fiable, por eso te elegí para este trabajo". Eficaz y fiable. Holly se estremeció ante la descripción. Otros dos defectos que añadir a la creciente lista de razones por las que Eddie la había dejado. Aparentemente ajena al efecto que estaban teniendo sus palabras, Sylvia continuó. No debería tener que recordarte que hoy es el día más importante de mi carrera: servir a la realeza en el estadio de Twickenham. Es el campeonato de las Seis Naciones. El torneo de rugby más importante y emocionante del año. Los ojos del mundo están sobre nosotros. Si lo hacemos bien, estamos hechos. Y más trabajo para mí significa más trabajo para ti. Pero necesito que te concentres". Una camarera alta y delgada con una expresión desafiante se acercó a ellos con una bandeja de copas de champán vacías. Déjala en paz, ¿quieres? Su prometido rompió su compromiso anoche. Es un milagro que esté aquí. En su lugar, ni siquiera me habría arrastrado fuera de la cama". ¿Rompió el compromiso? Sylvia miró de una chica a otra. Holly, ¿está Nicky diciendo la verdad? ¿Por qué lo hizo? Porque era eficiente y fiable. Porque su pelo era del color de una puesta de sol y no de un girasol. Porque era mojigata e inhibida. Porque su trasero era demasiado grande...
Jane entró en su apartamento y se dirigió directamente a la nevera. Puede que no hubiera nada para comer, pero sabía que había dejado medio paquete de refrescos de cola en la estantería. Sacó una de las latas frías, abrió la lengüeta y bebió. Luego, saboreando su frescura en la lengua, se quitó los zapatos y volvió a la sala de estar. Era bueno estar en casa, pensó, mirando el gran espacio que servía de salón y comedor. Se alegró de que el constructor hubiera derribado la pared que separaba las dos habitaciones. Junto con una pequeña cocina de servicio, su dormitorio y el baño contiguo, había sido su hogar durante los últimos cinco años. Se le había caído la maleta en el pequeño vestíbulo de entrada y, cuando fue a recogerla, vio la luz del mensaje que parpadeaba en su contestador automático. Su madre, pensó resignada. La señora Lang estaría ansiosa por saber que su hija había llegado a casa sana y salva. Aunque estaba familiarizada con Internet y sin duda habría comprobado las llegadas de los vuelos a Heathrow, seguía necesitando la confirmación de la voz de Jane para asegurarse de que todo iba bien. Suspirando, Jane pulsó la tecla para recuperar sus mensajes y esperó pacientemente a que hablara la voz grabada de la señora Lang. Sus amigos sabían que estaba de viaje, y todas las llamadas de negocios se desviaban a la galería. Así que no estaba preparada cuando una voz masculina inquietantemente familiar pronunció su nombre. ¿Jane? Jane, ¿estás ahí? Si lo estás, contesta, ¿quieres? Ineh poli simandiko'. Es importante. Jane se hundió débilmente en la pequeña otomana que tenía junto al teléfono. A pesar de que estaba decidida a no dejar que Demetri Souvakis volviera a entrar en su vida, no podía negar que su rica y oscura voz, con su característico acento, seguía teniendo el poder de debilitarla. Pero no era su voz lo que le había hecho millonario varias veces antes de cumplir los veinticinco años. Eso se debía a su herencia y a su absoluta crueldad en los negocios, se recordó a sí misma, una crueldad que de alguna manera se había extendido a su vida privada. Jane expulsó un suspiro inestable y seguía tratando de calmar su pulso acelerado cuando comenzó un segundo mensaje. Soy yo, Jane", dijo. Tu marido. Theos, sé que estás ahí. No hagas que tenga que ir a buscarte. ¿No podemos al menos tratarnos como adultos civilizados? Eso ayudó. La arrogancia en su voz, la forma en que asumía que ella estaría disponible cuando él decidiera contactarla. ¿Y cómo podía llamarse a sí mismo su marido cuando durante los últimos cinco años no le había importado si ella estaba viva o muerta? Sus uñas se clavaron en las palmas de las manos en sus esfuerzos por controlar la ira que la invadía, pero eso no impidió que los dolorosos recuerdos hicieran trizas su objetividad, que tanto le había costado conseguir. ¿Cómo se atrevía a ponerse en contacto con ella ahora, como si tuviera algún derecho a hacerlo? Por lo que a ella respecta, le había apartado de su vida.
Bárbara y Yago se conocen desde que eran niños. Durante la adolescencia compartieron travesuras, y una incipiente tensión sexual nació entre los dos. Pero con los años todo cambió, y esa amistad tierna y cómplice tomó una forma inesperada. Ella es una mujer audaz e independiente, una actriz que busca papeles protagónicos para representar lo que por temor se niega a experimentar en la vida real. Él es un hombre seductor y decidido, pero también su amigo incondicional, el que la conoce desde niña... Yago deberá rescatarla de su infierno interior, de la censura y las contradicciones para convertir su amistad en una historia de amor y erotismo que cambiará sus vidas para siempre.
Sara es una mujer como muchas, joven, atractiva y llena de vida, que un día se ve envuelta en un laberinto de pasiones secretas a las que ni ella misma les encuentra sentido, pero que no puede dejar de vivirlas, creando excitación en su cuerpo, placer indescriptible y una serie de tentaciones inconfesables. La distancia entre los protagonistas de estos encuentros pasionales, el anonimato y la provocación, se mezclan entre la vida de Sara, las palabras escritas y los pensamientos íntimos, éstos siempre acompañados de un deseo incontrolable de seguir jugando a este juego nuevo en su vida, ahora trastornada y desbocada, que la llevarán a vivir un abismo de sensaciones mezcladas en su día a día, y sobre todo, en la intimidad de sus noches, donde la sensualidad y el erotismo, irán envolviendo el ambiente y los instintos más ocultos de nuestro propio ser junto con el de la protagonista.
Cualquier fantasía puede convertirse en una realidad cuando se trata de magia... La mayor pasión de Jimmy Calavan en la vida es el Mundo de la Magia, un juego en línea hiperrealista donde pasa horas matando monstruos y buscando tesoros como un hermoso y mágico guerrero llamado Fae. Entre su trabajo de 9 a 5 como técnico de ordenadores, su mala suerte con las mujeres y su molesta madre, sus aventuras nocturnas en el juego son lo más destacado de sus días: un reino secreto donde puede hacer lo que quiera, ser quien quiera, y la magia es real. Daría cualquier cosa por la oportunidad de vivir allí, a pesar de que sabe que es una fantasía tonta. Pero cuando una réplica de edición limitada de un pergamino mágico del juego aparece en su puerta una noche, Jimmy descubre que a veces las fantasías se hacen realidad... Después de leer las palabras en el extraño pergamino, ¡se ve transportado al mundo de la magia, un reflejo casi perfecto del mundo del juego que conoce tan bien! ¿El único problema? ¡Parece que está atrapado en el cuerpo del hermoso personaje femenino que él mismo diseñó! Jimmy puede saber mucho sobre el Mundo de la Magia, pero nunca ha sostenido una espada antes, no puede hacer hechizos, y ciertamente no sabe nada sobre ser mujer... estas son las lecciones que tiene que aprender rápidamente si quiere sobrevivir como Fae en este extraño y mágico reino. Con la ayuda de sus nuevos amigos: Cara, una poderosa maga, y un Logan, un pícaro apuesto hacia el que el cuerpo femenino de Jimmy parece tener una atracción confusa y magnética; se lanza a la mayor aventura de su vida en un esfuerzo por encontrar su camino de regreso a su cuerpo masculino y el único hogar que ha conocido... . A medida que se libran y ganan batallas frenéticas, los amigos se convierten en amantes, y su extraño vínculo con Logan se hace cada vez más fuerte, Jimmy pronto se encuentra haciéndose una nueva pregunta... Sea mujer o no, ¿quiere realmente escapar de esta fantasía?
Yo no pertenezco aquí. Camino contra mi voluntad. Pero tengo deudas que pagar. Llaman mi nombre. El foco está encendido. Comienza la subasta. El Señor Black es el mejor postor. Es oscuro, rico y poderoso. Le gusta jugar juegos. La única regla es que no hay reglas. Pero es solo una noche. ¿Qué es lo peor que puede pasar?
No nos pertenecemos. Nunca debí haberlo visto después de nuestra primera noche juntos. Pero lo ansío. Soy adicta a él. Es mi placer oscuro. El Señor Black es Aiden. Aiden es el Señor Black. Dos caras de la misma persona. Aiden es amable y dulce. El Señor Black es exigente y orientado a las reglas. Cuando me invita a volver a su yate, no puedo decir que no. Otra subasta. Otra oferta. Se supone que soy suya. Pero entonces todo va mal..
Yo no pertenezco a ella. Nací en la oscuridad, la vida me convirtió en un cínico incapaz de amar. Pero luego Ellie entró. Inocente, optimista, amable. Ella es lo opuesto a lo que merezco. La compré, pero ella me robó el corazón. Ahora mi negocio está en llamas. Solo tengo una oportunidad para hacerlo bien. Ahí es donde sucede... algo que nunca podré recuperar. No la engaño. No hay nadie más. Es peor que eso. Mucho peor. ¿Podemos sobrevivir?
Pueden tomar todo de mí, pero no pueden tomarla a ella. El señor Black está de vuelta. Para vengarse. —Necesito que firmes un contrato. —¿Qué tipo de contrato? —Un contrato que te hará mía. Esta vez ella va a hacer todo lo que yo diga. Ella lo va a odiar y luego va a rogar por más. Este es el juego que jugamos. Es nuestro juego. ¿Pero qué pasa cuando los demás se enteran? ¿Perderemos todo?
¿Es este nuestro fin? Encontré una mujer sin la cual no puedo vivir. Hemos pasado por mucho. Hemos tenido nuestros contratiempos. Pero nuestro amor es más fuerte que nunca. Somos sobrevivientes. Pero cuando la alejan de mí en el altar, justo antes de que ella se convierta en mi esposa, todo se rompe. Haré cualquier cosa para liberarla. Haré cualquier cosa para hacerla mía para siempre. ¿Pero es eso suficiente? ¿Y si no lo es?
Hace una década cometí un seductor error… ¡Y lo volvería a hacer otra vez! No debí haberla dejado en nuestra ciudad natal. Ahora, cada parte de mí desea tocarla… sentirla. Necesito hacerla mía otra vez. Ser un fotógrafo deportivo exitoso tiene sus ventajas. Pero nunca había sido rechazado por una mujer. Y menos aún, por la única mujer por la que he estado realmente obsesionado. Sé que estoy jugando con fuego. Tarde o temprano, tendré que irme de nuevo de la ciudad. Sólo que esta vez no me iré sin ella… …Y sin su pequeño secreto, que no será pequeño por mucho tiempo más.