Un político relevante del partido del Gobierno aparece asesinado en un despacho del Congreso de los Diputados mientras la multitud indignada rodea el Parlamento ante un desmesurado despliegue policial. Nora Murúa, una joven diputada surgida del 15M, y Bruno Mairal, un veterano periodista, encuentran una pista que parece guardar relación con el crimen y deciden tirar del hilo. Entre tanto, el comisario Robles deberá sortear las presiones políticas para avanzar en una investigación en la que la élite política del país está bajo sospecha. Todo se complica con la irrupción de un justiciero popular, oculto tras la máscara de V de Vendetta, que ataca a grandes personalidades de la economía y la sociedad a quienes señala como responsables de la crisis. La crisis económica, social y también política de la España actual atraviesa toda la novela, una auténtica radiografía de nuestra compleja realidad narrada con el ritmo de un relato policiaco. De hecho, los protagonistas son los ciudadanos y ciudadanas que plantan cara e intentan resistir a la involución del Gobierno de Manolo Rajón, que destruye derechos y libertades en cada Consejo de Ministros. Chesús Yuste utiliza su experiencia como diputado en la primera legislatura de Rajoy para transformar con maestría sus memorias en Asesinato en el Congreso, una trepidante novela negra, cruda en su visión de la sociedad y del sistema de poder, aunque sin perder nunca la ironía que caracteriza al autor.
En el invierno de 1934, un crimen conmociona al Soviet de Leningrado: el asesinato de Serguéi Kirov, destacado dirigente del Partido Comunista y estrecho colaborador de Stalin. Igor Litonev, joven comandante de la Milicia, emprende una investigación para esclarecer un crimen teñido de sombras. Partiendo de un hecho real, que marcó el inicio de la era más dura del stalinismo, Alejandro M. Gallo ha escrito una novela donde personajes reales se mezclan con otros de ficción para ofrecer un relato de ritmo trepidante, en la que la intriga por descubrir la autoría del asesinato no decae un sólo momento. Escrita con un lenguaje directo, profusión de diálogos y un escrupuloso respeto por la memoria histórica, Asesinato en el Kremlin ha obtenido el XIV Premio Francisco García Pavón de Narrativa Policíaca.
Clarence Sutherlan, primer secretario del presidente del Tribunal Supremo de los Estados Unidos, aparece muerto en la sala de sesiones de un disparo en la frente. La brillante y atractiva Susanna Pinscher se hará cargo de la investigación, secundada por el heterodoxo detective de la policía de Washington, Martin Teller. Poco a poco se hace evidente que Sutherland, hombre de excepcional inteligencia y mujeriego impenitente, había logrado tener acceso a confidencias y turbios antecedentes que ponían en sus manos un poderoso instrumento de chantaje. La clave de la intriga será revelada en un final sorprendente, digno desenlace de una construcción narrativa en la que suspense y realismo, sentido del misterio y lúcido conocimiento de los ambientes washingtonianos, están perfectamente dosificados.
El telegrama que la madre de Nancy Patterson le había enviado decía meramente: "Te necesito. Ven enseguida". Por esta razón Nancy había creído que tenía que enfrentarse con algún conflicto, y al encontrar a su madre perfectamente, no pudo por menos que respirar aliviada. Aquella seguía siendo tan "chic", tan hermosas como siempre, y muy excitada ante la perspectiva de la próxima apertura del Parador del Tulipán Blanco.
Nancy no se sintió tan complacida al saber que había sido llamada para regentar la dirección del tal parador sin su consentimiento ni conocimiento y de cualquier manera se sintió apenada al ver que su madre evidentemente la quería para que ella llevara un trabajo para el que no estaba preparada.
Sin embargo todavía fue más alarmante la insistencia de Edna en que su segundo esposo, Morgan White, no debía saber que el Tulipán Blanco pertenecía a su esposa, así como la repugnante personalidad de Mr. White, que desagradó instantáneamente a Nancy.
Entonces Edna White desapareció y Nancy quedó a solas con su aborrecible padrastro, una cantidad de forasteros y un asesinato.
Messina Limosi, archivera de la Orden de Malta, aparece asesinada dentro del estado soberano más pequeño del mundo: el Palazzo di Malta, situado en una de las calles más transitadas de Roma. Frey Dimarco, comendador de la Orden y encargado de llevar a cabo la investigación, se topa con varias dificultades: ¿Cómo ha podido entrar el asesino? ¿Qué hacía Messina Limosi todas las noches en el archivo? ¿Por qué estaba desnuda? Y, lo más inquietante, ¿por qué sonreía? Dimarco, que no tiene experiencia en delitos de sangre, cuenta con el ayuda de Roberto Ciaccometti, caballero de la Orden y ahijado suyo, para intentar desentrañar el misterio. Además, por parte de la policía de Roma, intervienen el comisario Leone y la inspectora Rovente, de la UASV, unidad especial de investigación del crimen. La muerte de la archivera se entrelaza con la de un niño mendigo, asesinado brutalmente, y se siguen investigaciones paralelas, apareciendo diversos sospechosos: mafias inmobiliarias que acosan a propietarios del Trastevere, una secta muy antigua a la que perteneció el pintor Caravaggio, un taxista, un notario y un asesino en serie. Asesinato en el archivo es una novela policíaca y de intriga, con algunas pinceladas de historia del arte. La trama está basada en la acción y el cambio de escenarios, al estilo fast-pace. Asesinato en el archivo va dirigida al público amante de la novela de misterio. De lectura rápida y adictiva, lenguaje fácil, ameno y con más acción que descripción. Los capítulos, que suelen ser breves, se entrelazan buscando de forma consciente no perder la atención del lector y provocando así el efecto de no poder dejar de leer.
Flavia de Luce vive en una oscura mansión y tiene una familia poco común: dos hermanas que la odian y un padre a quien le interesa más la filatelia que lo que ocurra en su casa. Afortunadamente tiene dos aliados: su bicicleta Gladys y el laboratorio de química en el que disfruta de su curiosa afición por los venenos mientras planea la venganza contra sus hermanas. Cuando Flavia se encuentra un pájaro muerto en la puerta de su casa y a un hombre a punto de morir, no dudará en meterse de lleno en la investigación, demostrando que una niña de once años también puede resolver misterios que otros desearían enterrar.
La finca de Whistlefield es famosa no solo por su belleza, sino también por el laberinto vegetal que diseñaron sus primeros propietarios. El recorrido, delimitado por altos setos que se entrecruzan en caminos sin salida o que regresan al punto de partida, conduce a dos centros distintos en los que un cómodo banco, recompensa a quienes logran alcanzar la meta. Y es allí donde, en una calurosa tarde de verano, aparecen los cuerpos sin vida de Roger Shandon —el dueño de la heredad— y de Neville —su hermano gemelo y conocido abogado—, ambos asesinados con la misma arma: un dardo impregnado de curare. Dado que todos los miembros de la familia, los únicos capaces de orientarse en el laberinto, parecen tener una sólida coartada, serán necesarias una mirada aguda y una inquebrantable profesionalidad para averiguar quién ha cometido el extraño doble crimen. Cualidades que, inteligentemente disimuladas bajo una apariencia anodina, el jefe de policía sir Clinton Driffield posee en extraordinaria medida.
La autora superventas Christine Feehan alcanza nuevas cotas de pasión y suspense en esta emocionante novela que nos transporta a las montañas de California, donde una mujer vive atormentada por las visiones de un asesino.
Todo empieza en sueños. Horribles visiones de una pesadilla que solo ella puede detener. Imágenes de un asesino acechando a quienes ella más quiere…
Stelle Harrison pensaba que había enterrado los traumas del pasado. Hacerse cargo del resort Sunrise Lake en lo alto de las montañas de Sierra Nevada, California, le ha ayudado a vivir en paz, aunque en realidad no comparte su tranquila vida con nadie. Ni siquiera con Sam, el empleado del mantenimiento que está pendiente de todo y siempre parece saber qué necesita.
Stella no sabe nada sobre el pasado de Sam pero, de alguna manera, en los últimos dos años su serena y constante presencia ha conseguido burlar sus defensas. Aun así, sabe que no puede contarle sus recientes premoniciones. De momento no ha habido ningún asesinato. Ningún cuerpo. Ninguna manera de demostrar lo que está a punto de suceder sin destruir la vida que Stella ha construido para sí misma.
Pero hay un asesino ahí fuera. Y Stella sabe que ha llegado el momento de hacer cuanto haga falta para detenerlo.
Phil Nevitt, un joven de Nueva Inglaterra, trabaja para una compañía de ron después de la Prohibición y es enviado a una isla caribeña para investigar a una empresa rival. La Annunziata puede ser pequeña, pero lo tiene todo: sol, arena, un interior montañoso, una aristocracia criolla, negros alegres que charlan en inglés, y un club para los blancos disolutos que dirigen el lugar, incluido el administrador de EE. UU., Randal Trantor. Trantor es un rico borracho: su capataz criollo, Bareda, administra sus numerosas empresas comerciales, incluida la destilería.
En un viaje al interior, Phil se encuentra con una cacería de cerdos dirigida por Eve Brinsley, una vehemente e impetuosa muchacha de diecisiete años. Cuando la ve, ella está azotando a un criado negro por desobediencia, y le levanta el látigo a Phil antes de que se lo quite; después de este arrebatador comienzo, naturalmente se enamoran el uno del otro. Pero Eve está comprometida para casarse con Trantor, con la aprobación de su madre, y su padre es un borracho que es incapaz de detener el matrimonio.
Al escuchar esta noticia, Phil se emborracha, -¿qué se puede esperar en una isla cuyo principal producto es el ron? - y se pelea con John D'Acosta, un criollo que también está interesado en Eve. Con la orden de abandonar la isla, se queda el tiempo suficiente para frustrar el intento de D'Acosta de secuestrar a la novia. La boda se lleva a cabo, pero en la recepción Trantor muere por whisky envenenado, y comienza la búsqueda del asesino. ¿Fue Phil, D'Acosta, Eve, su padre o alguien más?
Hulbert Footner (1879-1944), fue un escritor canadiense de novelas policiacas y de aventuras. Después de estudiar en una escuela en la ciudad de Nueva York, se estableció en esa ciudad en 1905 y comenzó una carrera como periodista, que luego continuó en Calgary, Alberta. Mientras tanto, fue durante un breve tiempo actor en la compañía de William Gilette durante las giras de la obra de Sherlock Holmes.
Two on the Trail (1911), su primera novela, es una historia de aventuras al estilo de Jack London, ambientada en el extremo norte de Canadá. Después de algunas novelas del mismo género, prueba la novela policial en 1918 con The Fugitive Sleuth y Thieves’ Wit.
Sin embargo, el éxito llega cuando Footner crea el personaje de Rosika Storey, una hermosa joven que se describe a sí misma como “una psicóloga especializada en el alma femenina". El segundo protagonista recurrente de Footner es el detective aficionado Amos Lee Mappin, un exitoso escritor de novelas de misterio de mediana edad cuyos crímenes tienden a ocurrir en la sociedad de cafés de Nueva York. Mappin es inusual porque su "Watson" (al menos en algunos de sus cuentos) es una joven, su secretaria Fanny Parran. Ella es una de las pocas "Watson" femeninas en la ficción.
Es esta la narración extraordinaria de las emocionantes y originales aventuras de una mujer que se encuentra envuelta en un extraño asesinato. Ella también puede ser la culpable. Pero ¿lo es? Un argumento original y admirablemente escrito nos da la clave de esta interesante novela.
Gertrude Mary Wilson (1899-1986) comenzó su vida como maestra de escuela. Se casó con el artista de cómics Roy Wilson en 1924. En 1932, el editor de Amalgamated Press y amigo de la familia Leonard Stroud le pidió a Gertrude que escribiera historias para uno de sus títulos, Butterfly. Ella creó el personaje detective "Roy Keen", y pronto se convirtió en una habitual de Butterfly y otros cómics, escribiendo de forma anónima. Otras tiras que escribió incluyeron al "Inspector Stanley" y "Jane X" para Radio Fun, y "The Secret of Dreadwood" para un semanario no identificado. Dejó AP en 1956. También escribió 25 novelas, un libro para niños y numerosos cuentos y series de radio. Su detective habitual era el inspector Lowick, quien trabaja junto con la señorita Purdy, una detective aficionada.
Novela negra, ambientada en el comienzo de los años de la caída de la bolsa y del aumento del paro. Narra las extrañas vivencias de Raimundo, viudo, bibliófilo y rentista, que en su piso de la céntrica calle Alberto Aguilera construye una cámara secreta en honor de Julia, quien ha sido su esposa y a la que profesa un amor más allá de la muerte. Sus extravagantes costumbres le llevarán a frecuentar tanatorios, en un intento por evocar el último momento de Julia. Una tarde conoce a Justina. Raimundo contratará a Justina para que, en la cámara oculta de su piso y ataviada con los trajes de Julia, reviva sus últimos instantes. Julia y Justina, la vida y la muerte, en inconciliable alianza. Pero los acontecimientos se irán complicando, siendo el lector cómplice y voyeur de los mismos. Arrastrado por la lectura de El idiota de Dostoievski, Raimundo se preguntará sobre el significado del tercer sello del Apocalipsis de San Juan. Otros significados simbólicos, más allá del literal, se sumarán en la obra. La belleza, que nunca muere; la eternidad del arte; la trascendencia; la reflexión sobre el mal y sobre el mal estado de la sociedad a comienzos del siglo XXI… En la novela hará su presentación el inspector de policía del distrito centro de Madrid Jaime Morales, nostálgico, barbudo y poeta. Y Madrid será, no solamente escenario, sino protagonista.
La imaginación exuberante de Asimov atraviesa ahora una nueva frontera y penetra en el género de la novela policiaca. El resultado es «Asesinato en la convención». Un escritor de primera línea muere en circunstancias misteriosas, durante una Convención de Libreros Americanos. Guiado por la diestra mano de Asimov, el lector atravesará el complejo laberinto de intereses creados, envidias profesionales, trucos publicitarios… hasta llegar al sorprendente e impecable final.
La literatura es un juego, nos dice Margaret Atwood, un asesinato en la oscuridad, sólo que no estamos seguros de quién es el detective, quién el asesino, quién la víctima. No es fácil distinguir entre verdad y mentira, realidad y ficción, si una autora ha de mentir siempre. ¿O no? En estos breves divertimentos literarios, Atwood ironiza sobre las estructuras poéticas y míticas de nuestro tiempo y disecciona el comportamiento humano, privado o público, con un humor implacable. Pueblan la página personajes de Shakespeare, populares, de novelas rosa, de acción, de misterio; tramas antiguas, contextos nuevos, temas candentes. Pero bajo su inocua apariencia de comedia, bajo la página, se esconde la inquietante relación de este juego con nuestra realidad cotidiana.
El lado más gamberro y humorístico de Jordi Sierra i Fabra se manifestó en esta novela pseudopoliciaca escrita a fines de 2004 y que transcurre en tiempo real antes, durante y después de la emisión de un popular programa de televisión. Con todos los personajes reales, caricaturizados con sano humor, se publicó en catalán en 2005 y es la primera vez que ve la luz en castellano.
El segundo caso de la inspectora María Anchieta La acción de Asesinato en una playa de Londres transcurre en el año 2006 y comienza con el asesinato de un empresario inglés y su novia brasileña al principio de la novela. A partir de ahí, la compleja acción se desarrolla en Tenerife, Londres, Cancún y São Paulo, pasando por las islas Caimán. La sagaz Inspectora María Anchieta de las islas Canarias afronta la investigación del crimen con la Policía Civil de Brasil, Scotland Yard y la Policía Nacional de España, conforman el equipo de investigación internacional, que descubrirá y desvelará el misterio de los asesinatos.
Daniel Hawthorne, expolicía desacreditado, un investigador tan brillante como excéntrico, necesita un escritor que documente su trabajo. El elegido es Anthony Horowitz, que pronto se verá envuelto en una historia que nunca hubiera imaginado para uno de sus libros. Quizá, como uno de sus personajes, su vida esté en peligro más de lo que nunca llegó a imaginar. Con Asesinato es la palabra, Anthony Horowitz publica la primera entrega de una serie de libros protagonizada por el detective Daniel Hawthorne. La novela se publicó originalmente en inglés en 2017 y ya existe una segunda entrega, The sentence is death.
Jacinto, un joven idealista con aspiraciones literarias, entra a trabajar en el Centro Cultural X, donde es testigo del asesinato del anciano empleado de mantenimiento. Ante la inoperancia de las autoridades policiales, incapaces de esclarecer el crimen, siente la obligación moral de realizar pesquisas para averiguar quién es el autor del asesinato.
Hace cinco años, la estudiante Andie Bell fue asesinada por Sal Singh. La policía sabe que fue él. Sus compañeros también. Todo el mundo lo sabe.
Pero Pippa ha crecido en la misma ciudad y no lo tiene tan claro… Decidida a desenterrar la verdad, Pippa convierte este asesinato en el tema de su proyecto de final de curso. Poco a poco, empezará a descubrir secretos que alguien se ha empeñado en ocultar. Si el asesino sigue suelto ¿qué será capaz de hacer para mantener a Pippa alejada de la verdad?
Pippa no quiere dedicarse a la investigación: el precio a pagar es demasiado alto. Después de resolver el asesinato de Andie Bell, Pippa decidió cerrar esa etapa para siempre. Y, aunque el pódcast que grabó con Ravi sobre el caso se ha hecho viral, insiste en que sus días de detective quedaron atrás…
O eso es lo que ella cree. Porque cuando Jamie Reynolds desaparece y la policía no logra encontrarlo, a Pippa no le queda más remedio que volver a las andadas… Pero esta vez, todo el mundo la vigila.