Sergio es un joven empresario con un padre obsesionado en que se case y le dé nietos. Por su parte, Sergio solo se casará si está enamorado y eso todavía no ha sucedido.Su padre, en su afán por encontrarle una chica distinta de las que está acostumbrado, organiza una fiesta en la que conoce a Natalia.Natalia trabaja como cajera en un hipermercado. Es una chica sencilla y cariñosa que vive enamorada de un personaje de telenovela, ya que un terrible pasado la obliga a mantenerse ajena a la vida.Sergio hará tambalear la tranquilidad a la que Natalia estaba acostumbrada, sobretodo cuando ese terrible pasado se hace de nuevo presente.
En ocasiones, las personas tomamos las peores decisiones en nuestras vidas, las cuales muchas veces pueden ser irremediables, en caso de no enmendarnos a tiempo. William Carrington lo sabe bien, pues en su juventud —buscando escapar de las presiones familiares y ser libre—, eligió la puerta equivocada. Vivió una época de desenfreno total, y estuvo al borde de perderlo todo, incluso lo más preciado que posee cada ser humano, dándose cuenta con ello de su manera errada de proceder, antes de caer en un abismo sin retorno. Haciendo un cambio radical en su vida, conoció a alguien que despertó en él algo que jamás había sentido, centrando todas sus esperanzas en ella y planes futuros. Sin embargo, el destino le hace una mala jugada, destrozando su corazón de la forma más cruel inimaginable, llevándolo a pensar que estaba pagando por su forma de proceder aquélla nefasta noche. Años después, se vuelve a repetir uno de los momentos que lo marcó en el pasado, conociendo de la forma más inverosímil a un ser que le devolverá las ganas de vivir, provocando que su corazón vuelva a latir… como nunca antes. ¿Logrará el amor salir victorioso y unir a dos almas que estaban destinadas a estar juntas?
En dieciocho años de matrimonio Liz y Jack Sutherland han formado una familia, un bufete de abogados que goza de bastante éxito y un hogar feliz cerca de San Francisco. Pero la mañana del día de Navidad, la tragedia llega a sus vidas: Jack es asesinado por el marido despechado de una clienta en proceso de divorcio. Empieza un período difícil para Liz, pues no solo ha de sobreponerse al dolor causado por la pérdida del gran amor de su vida para ayudar a sus hijos a comprender la muerte violenta de Jack, sino que ha de sacar adelante el bufete ella sola. Los meses pasan pero, cuando Liz parece haber encarrilado su vida y la de los suyos, uno de sus hijos sufre un accidente y ha de ser hospitalizado urgentemente. El doctor Bill Webster no solo curará las heridas del hijo, también reparará el corazón roto de Liz.
La tentación entre ellos es demasiada, y el amor no sabe decir que no. Esperanza Falcón está convencida que ningún hombre despertaría de nuevo su capacidad de amar como lo había hecho su difunto esposo, y mucho menos el guapísimo mujeriego sinvergüenza que la sedujo en una noche de copas. Felipe Robles es fiestero, es borracho, es lujurioso, y no tiene el mínimo interés de comprometerse con una mujer luego de su desastroso divorcio. Ama la vida tal y como la vive. Pero algo tiene aquella chica que pasó la noche en su depa y luego huyó. El descubrir que sus hijos son mejores amigos no evitará que su irresistible deseo trate de tomar el control, y los traumas del pasado les harán cuestionar si el amor de verdad lo vale todo. ¿Podrá la semilla de una noche de pasión germinar en lo más bello que dos personas podrían tener a pesar de las crueldades que la vida les ha jugado?
María es una joven malagueña, de clase obrera, de principios del Siglo XX. A pesar de las desgracias que durante sus primeros años de vida castigan a su familia, ella no pierde su interés por el mundo que le rodea. Aunque los recursos familiares no le permiten estudiar para dedicarse a la docencia, ella encuentra un camino alternativo para conseguirlo. Un buen día aparece el amor en su vida. María se enamora de Alfred Stern, un fugitivo que le corresponde. Todo parece ir perfectamente hasta que los acontecimientos históricos de su tiempo los arrastran como una bola de nieve cayendo por una pendiente. Esta es la historia de María y de Alfred, pero también es la historia de Josefina, de Juan, de Nuria, de Carmen, de José y de muchas otras personas, en su mayoría normales y corrientes, que tuvieron que ir adaptándose a un mundo duro y cambiante y en el que las guerras y los conflictos pasaron a ser parte del paisaje. La historia se cocina a fuego lento al principio para entrar en ebullición a partir del primer tercio. Los ingredientes son el Amor en un 50 %, las Aventuras en un 30 %, la Historia en un 10 % y el resto en el 10 % restante.
La diseñadora de zapatos de Los Ángeles, Maddie Springer, vive su vida bajo tres reglas: Moda, Moda, Moda. Pero cuando se tropieza con la obra de un asesino brutal, su vida da un giro inesperado de los "Manolos" al asesinato. Y las cosas sólo empeoran cuando su novio desaparece junto con 20 millones de dólares de fondos malversados, y cada uno de sus movimientos pasa a estar bajo el escrutinio del policía más sexy del Departamento de Policía de Los Ángeles. Con la ayuda de su madre boda-zilla post-menopaúsica, su médium de 110 kg, y su mejor amiga seriamente obsesionada con el sexo, Maddie se encuentra a si misma bajándose de sus tacones de aguja y bajo el rastro de un criminal. Pero, ¿podrá coger al asesino antes que él la atrape a ella?
Mi esposo. Sus secretos. Nuestra tragedia.
Creí que lo conocía. No fue así. Pensé que era de confiar. No lo era.
Sin embargo, nada en este mundo es lo que parece.
Llamé la atención del hombre más conocido del bajo mundo.
Konstantin no era el tipo de hombre que pasa desapercibido. Lideraba su imperio criminal con puño de hierro, no obstante, tenía sus propios secretos.
Pero yo era Tatiana Nikolaev. Nunca me doblegaría a la voluntad de un hombre o sería utilizada como un peón. No otra vez.
En el momento en que tenté al destino y jugué con fuego, la vida se descontroló.
Mi única forma de sobrevivir era confiar de nuevo.
Pero ¿podría hacerlo?
Mi esposo. Sus secretos. Nuestra tragedia.
Creí que lo conocía. No fue así. Pensé que era de confiar. No lo era.
Sin embargo, nada en este mundo es lo que parece.
Llamé la atención del hombre más conocido del bajo mundo.
Konstantin no era el tipo de hombre que pasa desapercibido. Lideraba su imperio criminal con puño de hierro, no obstante, tenía sus propios secretos.
Pero yo era Tatiana Nikolaev. Nunca me doblegaría a la voluntad de un hombre o sería utilizada como un peón. No otra vez.
En el momento en que tenté al destino y jugué con fuego, la vida se descontroló.
Mi única forma de sobrevivir era confiar de nuevo.
Pero ¿podría hacerlo?
Enrico Marchetti. Uno de los cinco reyes de la mafia italiana. Poderoso. Intocable. Corrupto.
Todo comenzó con una mirada inocente a través de una habitación en París. Era mucho mayor que yo. Un dios romano vestido con traje italiano, rodeado de un aura a la que no pude resistirme.
Cuando volví a cruzarme con él, me cautivó bajo su hechizo sin esfuerzo. Sin embargo, no sabía que una noche llena de placer carnal me costaría todo.
Cuando Enrico Marchetti quería algo, no se limitaba a tomarlo. Lo poseía. Ahora, su vista estaba puesta en mí.
Este hombre guardaba secretos. Lo rodeaban, su esposa muerta, sus hijos.
No quería tener nada que ver en ello, pero no podía escapar. Me había llevado a su reino, cerró las puertas y tiró la llave.
Ahora solo me quedaba luchar. Aunque muriera en el intento.
Me dijo que me amaba y luego me abandonó.
Mi hermana fue su primera opción. Lástima para él, me negué a ser su segunda.
Dante Leone era una mala noticia con un exterior hermoso y una mente peligrosa. Emocionalmente inasequible y ligeramente trastornado, era un desamor a punto de ocurrir. Otra vez.
Huí. Me persiguió y mi destino quedó sellado.
Recorriendo el mundo, buscaba una parte vital de mí. No habría un nuevo comienzo hasta que encontrara mis respuestas. El sabor de mi libertad era dulce, pero solitario. Y, tan fugaz.
Debería haber sabido que me atraparía. Después de todo, éldisfrutaba de la caza. Lo aprendí por las malas.
Pero ¿adivina qué?
Yo ya no era la mujer que él sedujo hacía tantos años. Ya no creía las bonitas mentiras que salían de sus labios ni las falsas promesas de sus ojos engañosos.
Me llamo Phoenix Romero, y esta vez yo pondría las reglas.
Como mi nombre, había resurgido de las cenizas y esta vez sería yo quien lo haría arder en llamas.
El vicepresidente de los Estados Unidos y su mujer aparecen asesinados en su residencia. Todo parece indicar que se trata de un ajuste de cuentas. El agente especial del FBI Enric Savall se encargará del caso. Con las primeras pesquisas descubrirá que el vicepresidente asesinado podría estar relacionado con una banda de trata de personas. Pronto comprenderá que se enfrenta a una banda organizada muy poderosa, sin escrúpulos, por encima del bien y del mal. Enric se adentrará en una espiral que parece no tener fin, desencadenándose una guerra sin cuartel, donde la desigualdad de condiciones acabará dejando vencido a Enric… ¿definitivamente? Una demoledora novela de acción, suspense, misterio e intriga.
Ana Cruz intenta recuperarse de la pérdida de su marido, pero no es capaz de conseguirlo hasta que, en la boda de su mejor amiga, se cruza en su camino un irresistible, atractivo e insoportable tejano que parece dispuesto a poner su vida patas arriba. Cuando Mark Jacob se topa con aquella espectacular española de lengua afilada, sólo puede pensar que está ante una lunática por muy «sexy» que sea. Pero la atracción que Ana despierta en él es muy poderosa y el sexo… El sexo siempre acaba metiéndole en problemas. Y mientras ella se resiste a aceptar lo que el destino le ofrece, sintiendo que iniciar una nueva relación es una traición hacia su fallecido esposo, Mark lucha con todas sus fuerzas para conseguir a la mujer que ama. Pero la palabra «compartir» no forma parte de su vocabulario, ni siquiera con un muerto.
Una luminosa historia de amor entre dos hombres se abre paso en una sociedad marcada por el prejuicio. ¿Llegará el día en el que tengamos el coraje de ser nosotros mismos? Ésta es la pregunta que se plantean los dos inolvidables protagonistas de esta novela. Dos niños, dos hombres, dos increíbles destinos. Uno es intrépido e inquieto; el otro, sufrido y atormentado. Una identidad hecha pedazos que es necesario recomponer. Una conexión absoluta que se impone, la hoja de un cuchillo en el filo del precipicio de toda una existencia. Guido y Constantino se alejan, kilómetros de distancia los separan, establecen nuevas relaciones, pero la necesidad del otro se resiste en aquel primitivo abandono que los lleva a ellos mismos al lugar en el que descubrieron el amor. Un lugar frágil y viril, trágico como la negación, ambicioso como el deseo.
Hace quince años que Rui, Clarisse y Carlos regresaron a Portugal dejando a Isilda, su madre, aferrada a su hacienda. Supervivientes de una rica familia de colonos portugueses, hundidos en vidas groseras y obsesionados por las miserias que compartieron —al mismo tiempo, causa de su separación y su único nexo—, desde que abandonaron África los tres hermanos esperan, como Estragon y Vladimir esperaban a Godot, una reunión que nunca se produce. Y en Angola, Isilda, que también espera y desea ese encuentro, se aferra a las ruinas de lo que fue su esplendorosa vida sin renunciar al ensueño de Angola, reflejo de lo que ahora es, para todos ellos, una espantosa pesadilla.
Un patógeno alienígena ha reducido a la población a una masa de barro negro hirviendo. Cuando llega el Octavo Doctor, se da cuenta de que la última amenaza de la humanidad es horriblemente familiar – es un virus que casi aniquila a su propia raza, los Señores del Tiempo…
Luz, pelirroja (no hay más que añadir), soltera, moderna y con una vida muy de su gusto en Bilbao. Martín, fotógrafo de éxito y con una animada vida en Nueva York, está pensando en regresar a su ciudad natal. Para Luz, después de ocho años, tropezarse con Martín es recordar su triste veintena, precisamente gracias a él; mientras que para Martín la sorpresa es mayúscula cuando se siente atraído por la arrolladora pelirroja. Imposible no quemarse en una ardiente relación llena de mentiras y ausencias, con unos ladrones de obras de arte y, por si fuera poco, una ex jefa despechada. Es la segunda novela de esta autora que se puede encontrar en el foro («Bajo las estrellas»); nacida en Getxo, vive en Madrid hace ya más de veinte años. Tiene además relatos varios en diferentes antologías: «La mirada del amor» o «Ese amor que nos lleva» entre otros y que dan una muestra de su narrativa.
Soy mamá. Perdón, me corrijo: Soy Xia, tengo treinta y cuatro años y madre de dos niños a los que ahogaría en el fondo del mar. Perdón, perdón. Es cierto, son adorables, estupendos, maravillosos, bla bla bla… pero… uf, ¡qué cansancio! Y ahora es cuando debería hablar de David, mi marido. Él es…, es mi peor pesadilla. ¿Cómo?, ¿por qué? Te lo contaré con todo lujo de detalles. Todo cambia cuando Mark entra en mi vida. Dicen que cuando una puerta se cierra una ventana se abre. En mi caso la ventana no apareció hasta que lo conocí a él.
Todo estaba preparado para la gran noche: Champán, seda... y la presencia del increíble Theron Xenidis. Aunque el guapísimo griego parecía no soportar estar más de dos minutos seguidos en la misma habitación que la joven heredera Andrea Demetriades, parecía empeñado en hacerse cargo de algo más que de las deudas de su familia. ¡De ella! Conseguir que la combativa joven se convirtiera en su esposa; aunque fuera solo de papel, había supuesto para Theron un delicioso desafío; pero el matrimonio había fracasado incluso antes de siquiera comenzar. Ella juró que jamás compartiría el lecho con un hombre acostumbrado a comprarlo todo, y él prometió que algún día tendría a su mujer en el lugar que le correspondía: en su cama... Y ese día había llegado al fin.
Abby odiaba a su atractiva tía Elba, a quien hacía responsable del fracaso del matrimonio de sus padres. Deseaba vengarse de ella por lo que atrapó en las redes del matrimonio a Luke, quien supuestamente era amante de su tía.
—Escucha, Kari, hazme el favor de atenderme unos segundos. Todos queremos a Maggy. Tú y yo no parece que vayamos a tener hijos y lo lógico es que adoremos a nuestros sobrinos. Ya ves, yo soy como el que dice de la parte de fuera, pero les quiero como si fueran míos. Maggy es estupenda y todo lo que tú quieras, pero tú no debes inmiscuirte en una vida que parece feliz. —Claro —se alteró Kari—, parece feliz porque Maggy no sabe cómo es su marido. —¿Qué dices, mujer? Si después de siete años de casada, no lo sabe ella, no lo sabe nadie. —Maggy tenía diecisiete años cuando se casó —insistió Kari enojada—. No conoció más hombre que él. Ni siquiera siguió estudios superiores por casarse con Jason. —¿Y qué me dices con eso? —Pues que es una inocente.