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Te doy la bienvenida a la gran Biblioteca Utopía.
En esta biblioteca podrás encontrar libros en español para descargar y leer. Hay casi 200000 de ellos (y se actualiza periódicamente), así que probablemente hallarás lo que andes buscando.
Este catálogo es muy fácil de entender, no como la primera versión de mi diseño que estaba toda fea.
Básicamente puedes elegir en el cuadro combinado cuántos autores quieres que se muestren, puedes ir a las distintas páginas y lo más interesante, buscar libros por autor, título, sinopsis y género. ¡Bendito GPT!
Puedes descargar los libros individuales, o los autores que quieras con todos sus libros incluidos. ¡Tú decides!
Ten presente que al descargar todos los libros de un autor en específico, presionando sobre el enlace del autor, la página puede tardar en procesar tu solicitud. Entre más libros tenga el autor que quieras descargar, más tardará en comenzar la descarga.
En cada autor puedes encontrar sus libros, los géneros (los que los tienen) y su sinopsis. ¡Así de fácil!
Estoy consciente que muchos libros no tienen sinopsis, pero a medida que voy viendo que no la tienen se las voy agregando. Sin embargo, hay algunos que por alguna razón no tienen una sinopsis registrada por ningún lado. Son minoría, pero también están ahí, para que sepas.
¡Que disfrutes la biblioteca!
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Porque a pesar de que la Biblioteca Utopía es la mayor proveedora de libros, esta en sí no es esa biblioteca. Hemos ido añadiendo nuestros propios libros también, consiguiendo metadatos que ellos no tienen, borrando libros duplicados, corrigiendo autores... así que si se te ocurre un mejor nombre, ¡dímelo y vemos!
También si quieres aportar con libros (por favor, en formato epub) puedes hacerlo. Todavía estoy subiendo los libros que faltan de la Utopía, pero si de las letras que ya están completas ves que falta algo y quieres enviármelo, hazlo, por favor.
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Si ves libros que has leído, o si lees algún libro de aquí, por favor márcalo como leído y recomiéndalo (o no).
Debajo de cada libro tienes un botón para marcarlo como leído. La página te preguntará si quieres recomendarlo y al hacerlo, se estará guardando y se visualizará debajo de cada sinopsis.
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Connor, el mejor guerrero del Rey, cansado de su belicosa vida, ansía poder vivir tranquilo en sus tierras, pero para conseguirlo, su Majestad le ha impuesto una última misión. Deberá confirmar si las quejas de los nobles sobre Samuel, el hijo de un marqués, son fundamentadas. Connor se dirige hacia el lugar donde vive el chico, y lo encuentra en medio del bosque, persiguiendo a una joven muchacha, Leonor, con malas intenciones. Cuando confirma que sus sospechas son ciertas decide presentar al muchacho ante el Rey, pero Samuel consigue escapar y para vengarse, mata a los padres de Leonor. El honor de Connor lo obliga a prestar ayuda a la pobre y desamparada huérfana, convirtiéndose en su tutor y la lleva a sus tierras, pero entre ellos nace un profundo sentimiento que se hará más fuerte a medida que pasa el tiempo. La sombra de la traición se cierne sobre ellos. Una novela histórica-aventuras-romance que hará las delicias de cualquier lector.
Carolina es una mujer joven y alegre. Conoce a Arturo, un apuesto chico e inicia una apasionante historia de amor, pero él, al cabo de cuatro años, la abandona sin darle ninguna explicación, dejándola sumida en un estado de tristeza y depresión. Carolina ve como su vida se sume poco a poco en la desesperación. Compra un cuaderno y a modo de terapia, escribe un diario. En él plasma todos sus sentimientos, ideas, vivencias y cada una de las cosas que le pasan por la cabeza, unas buenas y otras no. De manos de Carolina vamos a sentir, vivir y experimentar cada una de las cosas que suceden en su vida, día a día. ¿Podrá Carolina superar esa terrible enfermedad y comenzar de nuevo? ¿Será capaz de mirar la vida con alegría y salir del pozo en el que ha caído? ¿Conseguirá poner fin a sus Días de Soledad?
En la España de los años 50, Elena sufre un cruel revés que la obliga a abandonar su tierra y su casa, con la esperanza de que el tiempo olvide y pueda regresar a su vida normal. Junto a Tomás, párroco y amigo de la infancia, cruzan medio mundo hasta llegar a un pueblo de Corea del Sur, donde servirán como misioneros ayudando a los niños huérfanos. El país intenta recuperarse de la invasión japonesa, recomponiendo sus pedazos, pero ahora se deben enfrentar a sus hermanos en una cruenta guerra que los divide. En medio de tanta masacre y desolación, la paz y la tranquilidad del orfanato se ve interrumpida por la llegada de una división de hombres de corea del norte. Sanguinarios y despiadados, bajo el mando del capitán Cheng-Gong, terminan con todos en un terrible baño de sangre, excepto con Tomás y Elena, que deberán superar la prueba más dura de sus vidas. Cuando todo estaba perdido, la llegada de Shaoran, coronel de Corea del Sur, cambiará su destino para siempre, mostrando un mundo maravilloso y fascinante, paralelo al dolor y la guerra. ¿El amor puede llegar a curar el alma rota de Elena? Un viaje fascinante al lejano oriente, mostrando una visión única de la desesperación y la superación, el anhelo y el deseo por alcanzar la felicidad.
María intenta escapar de sus perseguidores, en su loca huida encuentra refugio en una cueva. A su salida es rescatada por un grupo de hombres que al verla malherida deciden prestarle ayuda, son los soldados del Rey.Cuando se recupera de sus heridas descubre que no solo ha escapado de los atacantes, sino que ha viajado 700 años antes de su propio nacimiento.Después del shock inicial y al comprobar que de momento no puede regresar, se ve obligada a adaptarse a un mundo extraño, sus conocimientos de historia la ayudan a lidiar con una cultura diferente convirtiéndose sin querer en «la enviada de los dioses», título que la obligará a adentrarse en el mundo de palacio, con sus intrigas y traiciones, para conseguir salvar al propio rey.Pero no está sola. Los hombres que la rescataron acaban convirtiéndose en sus amigos, una amistad tan fuerte que supera distancias y fronteras, hasta las del propio tiempo.Sin darse cuenta el amor aparece en su vida, intenso e inocente, llenándola de un valor desconocido.Sin embargo las cosas se tuercen y la vida de sus amigos se pone en peligro y María se verá en la obligación de tomar decisiones difíciles para defender a las personas que quiere. ¿Conseguirá salvarlos? ¿Y si esa misión le cuesta su propia vida?Ningún sacrificio será suficiente si consigue salvar al hombre que ama.
Laia recibe la noticia de que su padre la ha prometido a Druso, un hombre terrible y cruel. Intenta convencerlo para que anule el compromiso, pero él se niega. Desesperada y sola, decide poner tierra de por medio y para ello, no duda en huir detrás de Marlock y sus hombres, guerreros experimentados, con la esperanza de poder pasar desapercibida hasta encontrar un lugar en el que se sienta segura. Durante el viaje más importante de su vida, su corazón se dividirá en dos, y por primera vez experimentará lo que es el verdadero amor, la pasión y unos sentimientos de desbordarán su cuerpo, pero se ha enamorado de dos hombres completamente diferentes. ¿Cómo lo superará sin destruirse a ella misma ni a los hombres a los que más ama?
Kaesios es un Oscuro, un ser temido y respetado por los inmortales y por los humanos. Veinte años después de la guerra de 'Los días Oscuros' en la que los humanos atacaron a los de su raza, decide cobrarse la deuda que tiene pendiente con los supervivientes, pero algo sucede al margen de su voluntad que trastoca todos sus planes, conoce a Katherina, una preciosa muchacha humana por la que siente una atracción que no entiende y no puede controlar. Sus vidas se ven atrapadas por las garras frías de la traición y la amenaza de una inminente y devastadora guerra que puede acabar con el orden establecido, sometiendo a los mortales y eliminando a los Oscuros, mientras intentan aceptar la pasión y el amor que nace entre ambos. Sumérgete en una historia paranormal de amor, amistad, traición, guerra y esperanza, donde los sentimientos están a flor de piel y se mezclarán con el deber y el sacrificio.
Irene ha terminado su carrera universitaria, después de años y luchas por llegar a ser alguien, por fin puede ser dueña de su destino, pero en el viaje de fin de curso, la tragedia se cierne sobre ella y sus compañeros. En busca de ayuda, en un lugar casi deshabitado, Irene encuentra a Asahi, un feroz guerrero samurái, que presta sus servicios a su amada diosa. Lo que Irene no sabe, es que su llegada forma parte de una profecía, que solo se verá cumplida gracias a ella, y por ese mismo motivo, Asahi tiene una misión, protegerla y cuidarla con su propia vida. Algo a lo que ella no cederá con facilidad. ¿Asumirá Irene su papel de elegida? ¿Cederá el control de su vida a un ser sobrenatural? ¿Podrá resistirse al encanto de una sonrisa?Una historia divertida, llena de magia, poder, leyendas y mitos, personajes divertidos y situaciones cómicas, que mantendrán a lector pegado a cada página.
Sara, ha crecido arropada por el amor que le profesan su padre y sus hermanos, también con el odio que siente por ella su madre. Tras la prematura muerte de su padre y la traición de su madre, Sara decide iniciar una nueva vida alejada de todo lo conocido en una propiedad lejana que pertenecía a su abuela. Allí, después de un accidente, tendrá que hacerse cargo de la recuperación de su vecino, un apuesto heredero del que se enamorará. Cuando cree que no se puede ser más feliz recibe una carta que escribió su padre muchos años atrás, en la que la explica el secreto que su familia le ha ocultado desde que ella nació, haciendo que su mundo se tambalee. Sara tendrá que superar el dolor de la pérdida de todo lo que consideraba suyo incluyendo el amor que siente por William, pero ¿Permitirá William que ella se aleje de él?
Ana huye de un pasado doloroso y terrible, intentando rehacer su vida. El destino la lleva hasta el bar de Sam, un hombre acostumbrado a vivir sin mirar atrás.
La mujer abatida y desesperada que entró en el bar buscando ayuda, esconde un secreto que puede acabar con su vida.
Lo que Ana no sabe, es que por mucho que corra, por muy lejos que llegue, el pasado terminará atrapándola, pero no estará sola.
Una educacion sentimental bajo el franquismo Elena Francis, un personaje de ficción, se convirtió en la consejera sentimental de las españolas a través de un consultorio de radio. Aunque fue concebido como motor publicitario de una empresa de productos de belleza, la influencia del programa trascendió hasta convertirse en un fenómeno de masas del brazo de la ideología nacionalcatólica. El presente estudio analiza un conjunto de cartas, datado entre 1951 y 1970, que establecen el escenario sentimental, laboral y familiar en el que se movían las mujeres de la clase trabajadora. Las cartas, que en su mayoría no se radiaron, constituyeron una vía de comunicación paralela al programa de radio y se contestaron particularmente, puesto que su contenido excedía la inocente consulta de belleza para describir graves casos de marginación, malos tratos y frustración personal. Este fondo documental confirma la supeditación de la mujer durante la dictadura a un sistema patriarcal que le vetaba la posibilidad de equipararse al varón en el ámbito educativo y social. Asimismo, revela las claves comunicativas que convirtieron a Elena Francis en un potente altavoz ideológico que se escuchaba religiosamente en los cuartos de servicio, los talleres de costura, las fábricas y las cocinas de un país amordazado.
Radio España Independiente, la emisora del Partido Comunista de España, fue el más potente altavoz del antifranquismo entre 1941 y 1977, fecha en que cesó sus emisiones en su sede de Bucarest tras la constitución del primer parlamento democrático. Durante estos años, y sobre todo entre 1962 y 1967, el programa «Correo de La Pirenaica» dio lectura a las cartas que desde España o desde los países de la emigración sorteaban la censura o las dificultades de comunicación para contar sus experiencias personales y sus anhelos de libertad. El presente libro analiza el contenido de las cartas que se han conservado, unas 15 500, e identifica a corresponsales y oyentes, los «ojos y oídos de La Pirenaica», entre los cuales se encuentran antiguos combatientes republicanos, exiliados, expresos, obreros, campesinos, mineros, profesores, amas de casa, escritores y estudiantes. Las cartas de La Pirenaica recogen un largo memorial de agravios, comenzando por los recuerdos dramáticos de la guerra civil y el reguero de fosas comunes, prisiones y vejaciones que dejaron los vencedores. Contienen la peripecia de los inmigrantes que abandonaron sus pueblos, la lucha por la supervivencia en los suburbios, la indignación por la insoportable carestía de la vida y la falta de acceso a una educación digna. Constituyen, además, un lamento coral de las distintas sensibilidades ideológicas contra el imperio del terror impuesto por la dictadura, acentuado por la ejecución del dirigente del PCE Julián Grimau en 1963. La España de Franco no pudo silenciar las voces de la disidencia y el descontento, que este fondo documental censa como un impresionante fresco colectivo surgido desde la clandestinidad. En definitiva, las cartas de La Pirenaica se alzan como un testimonio único de arrolladora autenticidad donde están presentes el dolor, la resignación, la solidaridad y el heroísmo de los ciudadanos que prefiguraron la democracia en España.
Este librero de ocasión pasa de la página al acto, de la biblioteca a la alcoba, del libro a la cama con el desenfado y el tacto de un erudito y de un disoluto. Entre lo que la lectura de ciertos libros suscita en la fantasía sexual de un librero bibliófilo y los actos que su fantasía le conducen irresistiblemente a llevar a cabo, median apenas sutiles fronteras que ningún ser humano sería capaz de delimitar y menos aún de juzgar…
La mitología de Superman, las teleseries educativas tipo Plaza Sésamo, no surgen del trabajo de expertos en conducta infantil de alguna Fundación con buenas intenciones. Son todos mensajes culturales que plasman necesidades concretas e históricas del imperialismo, en un momento determinado, tanto en su empresa de pacificación interna, como en su proyecto expansionista.
El autor estudia el desarrollo de las nuevas fuerzas productivas, en particular de la tecnología de la comunicación, en un momento como el actual, en que los grandes monopolios productores de tecnología, vuelcan su dedicación de la industria bélica, a la de las comunicaciones.
«Armand Mattelart es uno de los mayores pensadores en el campo de los estudios de la comunicación y de la cultura; y en consecuencia ha llegado a ser imprescindible y reconocido en todo el mundo. [...]
A lo largo de esta entrevista, Armand Mattelart vuelve sucesivamente a las premisas epistemológicas de su aproximación al campo de la comunicación. Explica su elección entre las diferentes teorías. Explicita algunos aspectos que son poco conocidos de su trabajo. En cierto modo, cada uno de los capítulos constituye un espacio-tiempo que revela, por un lado, las raíces de su conciencia política, el estado de las relaciones de fuerza a nivel internacional, así como los movimientos de ideas en acción, y por otro, la materialidad de su pensamiento y la evolución del campo de estudios interdisciplinares sobre la cultura y la comunicación.»
Michel Sénécal
Las recientes revelaciones sobre las prácticas ilegales de la Agencia Americana de Seguridad (NSA), o el descubrimiento por parte de un usuario del rastreo digital masivo realizado por Facebook testimonian la magnitud de la hipervigilancia a la que estamos sometidos. Sin embargo, lejos del modelo disciplinario tradicional sobre el que alertaba George Orwell en su Gran Hermano, ahora los controles se ejercen desde múltiples y sofisticados frentes, en los que cada vez es mayor la participación involuntaria de los ciudadanos. Armand Mattelart y André Vitalis nos proponen reflexionar sobre un novedoso e inquietante concepto: el perfilado, esto es, el control indirecto de los individuos —a menudo con el propósito de anticipar sus comportamientos— a través del estudio y explotación sistemáticos de sus datos —ya sean sus desplazamientos o sus pautas de consumo—. Mientras que el modelo de vigilancia totalitario exhibía su control, en el mundo postorwelliano éste se nos impone sin plena conciencia por nuestra parte; es invisible, y esta invisibilidad, potenciada por la desmaterialización de los soportes, garantiza su efectividad en una población crecientemente fascinada por las nuevas tecnologías que, sin embargo, no perciben como tecnologías de control.
A sus 16 años, Sebastián decide irse de la casa, aconsejado por su amigo Nico. El quiebre ocasionado por una madre infiel y un padre que abandona el hogar, detonan su drástica determinación. Sale a la carretera a ?hacer dedo?. En compañía de un camionero que maneja un vehículo negro de marca Freight-Line, el cual le impresiona mucho a Seba, parte rumbo a Val- paraíso. En un principio, la comunicación entre ambos es difícil, debido a las constantes preguntas indagatorias que hace el conductor. Cerca de Curacaví, este le pide al muchahcho que se baje del vehículo y lo espere un momento, para intimar con una mujer que aparece por la carretera.
La novela está ambientada en la zona norte de Chile en marzo de 1850.
Martín era un joven provinciano de la región que vino a estudiar a la capital y que en uno de sus viajes conoce a Mercedes, hija de quien dirigía el grupo de dueños de las casi 6.000 mulas que hasta ese momento realizaban el transporte del valioso cargamento del mineral.
El enfrentamiento entre quienes eran partidarios del progreso que se sabía que el tren podía prodigar y quienes se oponían a su instalación, gobierna el centro de la trama, que contemporáneamente incorpora eventos históricos ocurridos en la época.
Finalmente fue en el viaje inaugural del primer tren tan esperado que coincidentemente ocurre el trágico que afectará mucho a la historia de amor de los protagonistas de la historia.
Todo hombre y mujer tiene una historia sin igual, tan diferente una de otra, como diferentes son sus propias huellas genéticas. Sin embargo, esas historias tienen algo en común si las clasificamos en etapas de vida como son la infancia, la juventud, la madurez, la vejez y las vivencias propias que tenemos en esas etapas. Otra forma de encontrar la similitud de esas historias puede ser en función de las emociones, mismas que son iguales en cada persona. La tristeza, el amor, la alegría, la furia, la compasión, el temor, el dolor, etc. Y otra más puede ser aquélla que une al hombre en los valores universales, independientemente de dogmas de fe y/o espiritualidad que lo lleva al descubrimiento de su propio ser, de su unicidad con el Universo. CUENTOS QUE NO SON CUENTOS, es un anecdotario biográfico basado principalmente en experiencias del autor, pero ahora visualizadas bajo la lupa, con un escrupuloso escrutinio en tiempo y circunstancias. Al interiorizar su pasado, va descubriendo todo aquello que en su momento fue imposible ver y ahora escudriña con un solo fin…reconocer y comprender quién es en el presente. “Soy yo y mi circunstancia” -dice Ortega y Gasset-, con profundo tino respecto a al enjuiciamiento del hombre por el hombre. En ésta serie de narrativas, el lector se encontrará identificado con muchas de ellas y revivirá en su propio tiempo y circunstancias lo leído. Invitando a la reflexión y análisis; reconociendo en el pasado y el presente de todo ser humano… La maravilla de existir.
Una divertida novela gráfica que nos acerca a las consultas de pediatría a través de las aventuras de un enfermero. Los pañales y los pucheros forman parte de la vida de Salva las 24 horas del día. Este padre primerizo ha empezado a trabajar en un ambulatorio como enfermero de pediatría. Desde el comienzo, no solo se da cuenta de que la conciliación familiar es un unicornio con alas, también descubre los entresijos de los centros de salud, y no siempre de la mejor manera. Las dudas sobre la lactancia, el debate sobre las vacunas, el sobrepeso o la desesperación de algunas «mombies» (aquellas madres-zombies que se identifican a una legua por los ojos de mapache) traerán a la consulta un abanico de pintorescos personajes. Además, este joven enfermero se verá en más de un aprieto cuando sienta que alguno de los médicos infravalora sus consejos. Y como en casa del herrero, cuchillo de palo... en su vida familiar también tendrá que batallar con su propia madre, a quien le cuesta comprender que a un bebé no se le puede dar natillas, por mucho que a la hija de Salva le gusten. Aunque esa cruzada ya la puede dar por perdida.
Situada en mitad del océano Atlántico, a más de dos mil metros de profundidad, Utopía es el primer hábitat humano submarino del mundo. Cuando NeWorld la corporación que financia las investigaciones de alto secreto que allí se llevan a cabo pierde contacto con ella, saltan todas las alarmas. Convencido de la existencia de un fallo en el avanzado sistema de inteligencia artificial que controla el complejo, su director, Marc Clayton, decidirá enviar a un grupo de expertos para repararlo. Los elegidos serán: Rick Blaine, ingeniero de estructuras; Natsuki Kuriyama, doctora en informática avanzada; y Víctor Miranda, antiguo teniente de la marina española y piloto del batiscafo que los bajará hasta el abismo. Cuando el equipo comprende que algo muy extraño y peligroso sucede en las instalaciones, ya será́ tarde para escapar. Incomunicados en las profundidades abisales, sin posibilidad de huir y rodeados por toneladas de presión, el pequeño grupo deberá́ iniciar una carrera contrarreloj para descifrar el aterrador enigma que amenaza Utopía, conscientes de que mucho más que su supervivencia depende de ello.
Una mañana, Pablo, director de una sucursal bancaria, comienza a recibir extraños mensajes. A partir de ese momento su vida acomodada y familiar da un vuelco de ciento ochenta grados. ¿Son reales los mensajes o producto de su imaginación? Pablo los seguirá ciegamente y descubrirá que, poco a poco, todo va cobrando sentido, al menos en su cabeza. La visión de las cosas, de las gentes y de su vida, entrará en una dimensión poco convencional. Pablo comienza una existencia que lo llevará a vivir una aventura interior difícil de describir. ¿Es un loco, un visionario, un cobarde o solo un hombre perdido? Una historia que sin duda, no te dejará indiferente.
El hallazgo de un antiguo informe secreto llevará a la periodista Carla Neri a iniciar una investigación que podría conducir al descubrimiento del siglo: la confirmación de uno de los mitos más extraordinarios del Antiguo Testamento.
A partir de ese momento, el lector acompañará a la periodista —junto a un hacker y a un arqueólogo bíblico— en un viaje repleto de enigmas, acechantes peligros e impactantes revelaciones sobre la Humanidad. Un viaje que tendrá como fin la búsqueda de la verdad, por muy terrible que esta sea.
Buscaban una reliquia y encontraron el infierno Víctor Costa, un viejo arqueólogo español, lleva parte de su vida buscando una famosa reliquia cristiana, sin éxito. Cuando siente perdida la esperanza de encontrarla se cruza en su camino un magnate norteamericano, Dawson Fox, dueño de una gran corporación armamentística y tecnológica. Él, respaldado por un antiguo informe escrito por un centurión romano, cree tener la información exacta de dónde se encuentra, y le propone organizar y financiar una expedición para buscarla. A ella se unirán finalmente: Sarah, doctora e hija de Víctor; Ray Bayona, un espeleólogo en horas bajas, y antigua pareja de esta; las mellizas Annika y Grete, exmilitares alemanas y escolta personal del enigmático Dawson; y Peter Li, un científico chino-americano, experto en física e informática. Las pistas les llevarán hasta las exóticas y convulsas tierras de Egipto, a las montañas nubias cerca del Mar Rojo, hasta una antigua mina de oro romana sepultada en el olvido y envuelta en una extraña leyenda de muertes y desapariciones. 'Expedición Atticus' es una novela de aventuras, llena de acción, viajes y misterio; donde los enigmas rondan cada página, algunos personajes ocultan oscuros secretos, y nada es lo que parece. Esta es una obra de ficción gestada con el sencillo y a la vez complicado objetivo de entretener.
El sorprendente descubrimiento de una tumba neandertal en Siberia contradice la fecha de la desaparición de la especie y arroja luz sobre la verdadera causa de su repentina extinción. Por otra parte, el profesor Lébedev, antropólogo ruso encargado de las excavaciones, cree haber encontrado algo aún más extraordinario y después de entregar un enigmático paquete a Laura Anglada, una paleogenetista española, abandona el yacimiento misteriosamente. ¿Qué significado tiene el contenido del paquete? ¿Qué ha encontrado el profesor? Y, sobre todo, ¿qué relación guarda el yacimiento neandertal con su nuevo descubrimiento? Dispuesta a averiguar qué hay detrás de todos estos enigmas, Laura viajará hasta Alaska acompañada de su ayudante Owen. Pero no estarán solos; Echevarría, un antropólogo rival, los seguirá dispuesto a no detenerse ante nada con tal de apropiarse del supuesto hallazgo. Una lucha a muerte deberá librarse contra la naturaleza salvaje y la ambición humana antes de que un secreto oculto durante milenios vea la luz. Un secreto tan increíble que desquebrajará los cimientos de la paleontología moderna y dará un nuevo rumbo a la historia de la humanidad.
Un virus. No hay cura. No hay vacuna. Todo intento por contener la epidemia es inútil. En pocas semanas la práctica totalidad de la humanidad está infectada. El "Fubarbundy" corre por sus venas transformándolos en seres brutales, sin mente, sin alma. Grupos reducidos de personas lucharán por sobrevivir en una guerra desigual por evitar la extinción. Esta es su historia.
El virus «Fubarbundy» ha asolado el planeta. La civilización, tal y como la conocíamos, ha desaparecido. El mundo está en manos de un nuevo ser, una nueva especie. Grupos de humanos sobreviven a duras penas, alimentando una esperanza de futuro. Están equivocados. El virus sigue mutando para crear un tipo de infectado más evolucionado, más letal. Un depredador implacable capaz de borrarlos de la faz de la tierra. Y ese no será el único de sus problemas.
Menorca ha sido escenario de una de las batallas más cruentas de la historia, pero por fin es segura. El día a día en la isla sigue siendo duro, pero los supervivientes creen haber encontrado allí un lugar donde comenzar de nuevo. La calma durará poco. Una misión llevará de nuevo a Madrid a nuestros protagonistas y les meterá de lleno en la boca del lobo. Mientras, un enemigo más terrible que los infectados amenaza todo aquello que han logrado conseguir. El valor y la solidaridad se pondrán a prueba como nunca, en una lucha desesperada, a contrarreloj, y sin cuartel.
La inspectora Valdeón creía conocer el mal. Se equivocaba.
El robo de un objeto legendario, un extraño asesinato, un misterioso experto en antigüedades y una policía de homicidios atormentada por su pasado se entremezclarán en este perturbador thriller policíaco.
Enfrentada a una investigación repleta de mitos y secretos, la inspectora Elena Valdeón deberá sumergirse en el oscuro mundo de las sectas satánicas, y seguir las pistas dejadas por un crimen atroz cometido hace casi dos mil años, si desea resolver el caso más inquietante y peligroso de toda su carrera.
De madrugada, en un vertedero situado en el extrarradio sur de Madrid, es hallado el cuerpo sin vida y horriblemente mutilado de una adolescente.
A pesar de que al principio se barajan diversas hipótesis, la similitud con el modus operandi utilizado en otro crimen —perpetrado un año antes— llevará a la inspectora Elena Valdeón a la convicción de que se encuentran ante un despiadado, inteligente y perturbador asesino en serie. Un verdadero monstruo al que deberá enfrentarse —junto a sus propios demonios— en una lucha sin cuartel, arriesgándolo todo, incluso la cordura.
Después de La estrategia del diablo llega este duro y descarnado caso en el que la inspectora Valdeón acabará implicándose hasta más allá de lo tolerable.
Julia es una mujer divorciada que vive en Madrid y trabaja como maestra. Un día recibe la terrible noticia de que su hijo, al que creía viviendo con su padre en Miami, ha aparecido devorado por un jaguar en mitad de la Selva Maya. Confundida, rota de dolor, pero sin tiempo para duelos, volará hasta Ciudad de Guatemala para asistir al entierro. Allí sabrá cosas de su hijo que desconocía, y comenzará a sospechar que su muerte no ha sido debida a un desgraciado accidente, sino a algo relacionado con su trabajo en unos misteriosos laboratorios. A partir de ese momento, Julia vivirá una realidad perturbadora; adentrándose en un mundo oscuro y siniestro lleno de inquietantes revelaciones, engaños, conspiraciones, espías y asesinatos. Un mundo que pondrá a prueba su valor y determinación, y al que deberá adaptarse si desea descubrir toda la verdad sobre la muerte de su hijo.
Un libro mínimo, algo más de seis mil palabras. Cincuenta microrrelatos divididos en seis bloques. Vistazos a la vida. Lecturas ínfimas que albergan historias inmensas y complejas.
'Los herméticos', este libro, escrito en un lenguaje crudo, puede ser duro para algunos lectores, incluso hay quien lo ha tildado de pornográfico, estáis advertidos; 'Cuando aún no existías' es otra cosa, un ejercicio de estilo, la literatura dentro de la literatura, un libro difícil de clasificar; o te encantará o lo detestarás, no tiene término medio. Un prólogo, siete historias y un epílogo componen este nuevo trabajo del autor de “Cuando aún no existías”. Un libro de relatos en el que hallaréis morbo, humor negro, sexo duro, frustración y cobardía. Pero sobre todo, si sabéis mirar entre alguno de sus pliegues, encontraréis la soledad que provoca el amor que se ha perdido o que nunca se ha tenido, ambas cosas son lo mismo. Historias imposibles, situaciones inverosímiles llenas de personajes irreales, o no tan irreales, vosotros juzgaréis.
Un libro que cuenta de manera ligera e irónica cómo alcanzar el Santo Grial del hombre moderno: una fuerza de voluntad de acero. Para adelgazar, para dejar de fumar, para ir a correr todas las noches o jugar con tus hijos cuando sólo tienes ganas para apagar el cerebro. Y estar feliz mientras lo haces. Armando Elle nos cuenta una vez más argumentos difíciles con palabras sencillas. Para tener siempre MÁS de las cosas que deseamos y MENOS de las cosas que queremos dejar atrás.
La gloria y el olvido
Esta es la otra historia de México, donde sus héroes y heroínas no son de bronce o mármol, sino hombres y mujeres sujetos a la grandeza y las miserias de la condición humana. Es aquella que nos permite replantearnos quién es el verdadero Padre de la Patria y cuestionar el papel de los llamados villanos y traidores que señalan los libros de texto. Como nunca antes, Armando Fuentes Aguirre “Catón” aborda el convulsionado periodo de la Independencia de México y retrata a sus protagonistas sin miramientos ni concesiones. Hidalgo, Morelos, Iturbide, Guerrero, Nicolás Bravo y todos los sin nombre, los que la historia olvidó, desfilan por las páginas de este libro con sus virtudes y desaciertos, sacrificios heroicos y traiciones despreciables. Si por sus actos serán recordados, ¿a quién mantener en la memoria histórica de un país que ha perdido la fe? Es esta, más que todo, una obra de divulgación. Fue escrita por un periodista, no por un historiador. Pero algo tiene de historiador el periodista. A nada aspira el que la escribió sino a ser acompañado en la aventura por los mismos cuatro lectores que ya otras veces lo han seguido. A ellos les dice el autor que lo que aquí van a leer No es histórico: es verídico. ‘Catón’
Armando Fuentes Aguirre Catón, es el columnista más leído de México. Sus artículos «De política y cosas peores» y «Mirador» hacen reír y pensar cada día a cientos de miles de lectores. Sus reflexiones acerca del panorama nacional son a un tiempo amenas y profundas, y sus meditaciones en torno del mundo y de la vida poseen filosofía trascendente. Ahora conocemos otra faceta de Catón, la del hombre que estudia la historia mexicana y nos la entrega convertida en relato apasionado y apasionante. Este libro contiene una visión de México distinta a la versión que se nos enseñó. En esa nueva perspectiva, Juárez aparece con un perfil de plenitud humana, no de estatua, y en sus páginas la narración de la vida y la muerte de Maximiliano alcanza conmovedores matices de tragedia. El sorprendente texto de Catón muestra el consumado oficio del escritor y la ágil amenidad del periodista que le caracterizan. Aquí aprendemos que nuestros héroes no son de bronce o mármol, sino hombres sujetos a la grandeza y las miserias de la condición humana, y aprendemos también que aquellos que nos han sido presentados como villanos, y que están condenados al basurero de la historia, quizá se equivocaron, pero no son traidores, ni deben por tanto ser objeto de execración u olvido. Tarea de reconciliación cumple el autor, y de unidad en el común amor en México. Después de leer estas páginas, sin duda nuestra visión del pasado ya no será la misma. Con lo cual se habrá cumplido el propósito que se fijó Fuentes Aguirre al escribir La otra historia de México: que amemos a nuestra patria en la verdad.
Hay novelas demasiado reales, donde la ficción escapa por entresijos y regresa acompañada de la realidad imperante, “Gilda” es una de ellas. Es el relato de una “jinetera” quien logró su sueño, el de todas las “jineteras”, ligar un extranjero rico que la sacara de la isla. En su propia voz, nos va contando cuando lo conoció y él le propuso matrimonio, sus dudas sobre la veracidad, su sueño añorado, sus inquietudes. Armando G. Muñoz, en su característico estilo minucioso y descriptivo, nos lleva por la vida de una mujer luchadora que ha sobrevivido vendiendo su única riqueza, la belleza con que nació, y el mundo escondido descubierto por este español, un rico hombre de negocios, la cara oculta del sistema, las fastuosas riquezas de la nomenclatura, sus islas privadas, sus yates, el sexo desenfrenado. Vamos siguiendo la relación con el español que la sacó del infierno, su vida posterior en Mallorca, siempre luchando y el final, coincidiendo con el de muchos que han atravesado esos avatares. “Gilda” es una novela que permanece en la memoria, fuera de lo corriente, dolorosa para algunos, reveladora para otros, un exponente de todas esas mujeres que sobreviven lo peor y vencen. También es una historia de los cubanos convertidos en judíos errantes y una sutil advertencia de que el infierno se puede reproducir en muchas partes.
Relato de la travesía del Atlántico, en un velero de 13 metros de eslora de nombre Luzula, realizada por cinco personas sin demasiada experiencia náutica.
El texto que comienza con los preparativos del viaje, describe desde como seleccionar a la tripulación, hasta los mínimos detalles sobre la preparación del barco, la ruta a seguir, las provisiones, la electricidad, el combustible y los medios técnicos necesarios.
El relato describe, desde lo que comienza siendo un sueño inalcanzable, hasta su culminación en compañía de cuatro amigos. El autor aprovecha cada situación para ofrecer al lector pinceladas de formación náutica y anécdotas sobre su vida.
Los objetivos del libro son:entretener a todos, mejorar los conocimientos de la navegación de crucero de los navegantes y despertar el deseo de navegar a vela, a los amantes de la libertad.
INDICE
Prólogo
El sueño
Los preparativos
San Martín
Los primeros días
Corales en el Caribe
El manatí
Borrascas del Atlántico
Nos hundimos
¡TIERRA!
En las Azores
Ya estamos en casa
Temporal a la vista
Llegada a Vigo
Vigo-Laredo
Epílogo
Hace mucho tiempo, en fenecidas eras prediluvianas, una raza alienígena rebelde descendió a la Tierra para llevar a cabo un proyecto demoníaco: hibridarse con la raza humana (Génesis 6:4) a fin de impedir el cumplimiento de una antiquísima profecía que Elohim (Ellos-Dios) había hecho a Eva: un hijo de ella aplastaría la cabeza del jefe de la raza reptiliana rebelde, los haría volver a su hogar edénico, y renovaría su relación con la Divinidad (Génesis 3:15). Los rebeldes, los Bene ha-Elohim (Los Hijos De Dios) casi lograron su cometido de no haber sido por la oportuna intervención del Todopoderoso, quien destruyó a aquella progenie híbrida, ahogándolos en un terrible Diluvio (Génesis 9). El preanunciado hijo de Eva, nacido hace más de 2000 años, cumplió su misión. Hoy, el príncipe reptiliano agoniza con una herida mortal en la cabeza, y ha amenazado no sólo con vengarse sino intentar por última vez impedir de manera definitiva la instauración del reino mesiánico sobre la tierra. ¿Está usted listo para descubrir una historia desconocida, olvidada y prohibida? Este libro es un estudio erudito de la increíble historia de los Nefilim: la raza híbrida de seres humano-extraterrestres que gobernaron el mundo antiguo como dioses en las edades pre y posdiluvianas, y que están ya de regreso. Queda invitado a conocer una historia extraoficial no ficticia para descubrir por usted mismo la más antigua y terrible realidad de lo que nos depara el futuro próximo…
El amor entre Ángela y Fernando, sus vicisitudes , su infortunio, la reivindicación del amor, asesinatos, la muerte de Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril de 1948, el asesinato del ministro Low Murtra por orden de Escobar, amore seniles, contrabando de diamantes, los personajes hombres y mujeres en un sainete de amoríos de aventuras todo con sabor costumbrista.
El Magistrado, un hombre enigmático, producto de la miseria, de la violencia y sus inmensas contradicciones frente al mundo y frente a sí mismo. Su triste desaparición. Una historia que atrapa.
Jorge, su novio dio la versión: Al finalizar la película, Yolanda y yo nos disponíamos a abandonar la sala cuando le escuché un grito desgarrador. Me dí vuelta y vi que perdía el equilibrio. De inmediato la sostuve. Cuando prendieron las luces, comprobé que uhn torrente de sangre brotaba de una herida del cuello, empapándola hasta los zapatos. / La gente horrorizada, se dispersó./ Supliqué llorando que no se muriera, que no me abandonara./ Hizo un ademán de incorporarse pero se murió en mis brazos.
«La vida de un lobo no es nada sencilla, eso Jessé Leblack lo sabe mejor que nadie. La vida de un licántropo está llena de retos en los que la sangre, la muerte y el dolor son los protagonistas principales. Lo que, él, no sabe es que los lazos más fuertes terminan rompiéndose cuando se trata de ambición y poder.
Sin embargo, cuando sus mejores amigos mueren de forma sospechosa, Jessé comienza a dudar de todo lo que un día creyó. ¿Quién es en realidad? ¿Existe alguien en quien pueda confiar? No lo sabe, pero encontrará las respuestas a medida que la gran luna de sangre se aproxime...».
Jessé y su manada han logrado escapar con vida después de la colosal batalla contra Michell y la opresión que esta ejercía sobre la ciudad. Seis meses transcurrieron desde su escape y en ese tiempo ha respirado una paz absoluta. Con la desaparición de Michell y sus fuerzas, las preocupaciones se esfumaron y es el momento oportuno para rehacer sus vidas, sin embargo, la acción que ha venido ejecutando se verá afectando, cuando dentro de su propia manada hay descontento y traición. Ahora cuando los problemas comienzan a surgir nuevamente, y el peligro a flora de todos los flancos, Jessé se verá a obligado a tomar decisiones que lo envolverán nuevamente entre colmillos y garras, ¿podrá el Joven alfa tener luz en su vida llena de oscuridad?
La escritura poética de César Vallejo no se presenta como algo constituido, sino en trance de constituirse. De ahí que la mejor forma de aproximarse a sus poemas, tanto los más conocidos como los inéditos, sea desde la singularidad poética del análisis.
Joaquín, un joven jornalero granadino, se ve obligado a emigrar para trabajar en las minas. El amo de su pueblo se niega a arrendarle tierras para trabajarlas, y los jornales de peón agrícola no alcanzan para vivir.El trabajo de minero es duro, inhumano, y las medidas de seguridad, escasas, pero el sueldo y los destajos le permiten a Joaquín alquilar una casa, y empezar a soñar con volver a su pueblo y comprar unas tierras para trabajarlas.Narrada con un estilo preciso, periodístico, La mina tiene una fuerza extraordinaria. Los problemas de sus protagonistas y sus esperanzas, que cada uno expresa a su manera, adquieren en esta novela un relieve grandioso. Los personajes se integran fuertemente en su contexto social e histórico que, en definitiva, es lo que les da una explicación. Aunque se ha adscrito esta novela a la corriente literaria del «realismo social», quizá sería más correcto considerarla como «realismo histórico» en el sentido marxista del término.La mina resultó finalista del Premio Nadal de 1959.
Al estilo de Paula Hawkins y Ruth Ware, una intrigante novela de suspense psicológico acerca de una joven con una rara condición neurológica que está convencida de que su vecina va a ser asesinadaLeah ha vivido con akinetopsia, o ceguera al movimiento, desde que era niña. Durante los últimos veinte años, no ha podido percibir el movimiento. Mientras pasea por su vecindario en Upper Manhattan con su bastón blanco guiando el camino, la mayoría de la gente asume que es ciega. Pero la verdad es que Leah ve mucho, y con sus agudos sentidos del olfato y la audición, muy poco escapa a su atención. Lleva una vida tranquila y ordenada, con poco contacto humano más allá de su ama de llaves de toda la vida, su psicólogo y su anciana vecina. Todo eso cambia cuando Alice se muda al apartamento de al lado y Leah puede oler de inmediato la ansiedad que emana de ella. Lo que es peor, Leah no puede evitar escuchar a Alice y a un visitante nocturno involucrarse en una violenta discusión....
Tras el éxito del best seller internacional La niña alemana, la segunda novela de Armando Lucas correa narra un nuevo episodio desconocido de la Segunda Guerra Mundial. Nueva York, 2015. A los ochenta años, Elise Duval recibe la llamada de una mujer que la devuelve a un tiempo y un lugar que había abandonado en el olvido. Elise, una francesa católica que llegó a Nueva York al finalizar la Segunda Guerra Mundial, descubre así que las cartas en alemán que una desconocida traía de Cuba fueron escritas por su madre durante la guerra. De repente, siete décadas de secretos salen a la luz. Basada en hechos reales, La hija olvidada es la crónica de una de las atrocidades más terribles cometida por los nazis en la Francia ocupada; una conmovedora saga familiar sobre el amor, la supervivencia y la esperanza contra todas las barreras.
Inspirada en un hecho poco conocido: la negativa de Cuba y otros países a recibir a los judíos que huían de la Alemania nazi a bordo del transatlántico St. Louis. Finalmente, solo a unos pocos se les permitió desembarcar. Antes de que todo cambiara, la vida de Hannah Rosenthal era de ensueño. Pero ahora, en 1939, las calles de Berlín están embanderadas de estandartes nazis, su familia ha sido desposeída de sus bienes y los judíos ya no son bienvenidos en los lugares que antaño frecuentaban. Hannah y Leo Martin, su mejor amigo, sellan un pacto: pase lo que pase, ambos compartirán un mismo futuro. La próxima partida del transatlántico St. Louis con rumbo a Cuba les proporcionará una chispa de esperanza. Tras una ardua gestión para obtener visados, los Rosenthal y los Martin se embarcan en la lujosa nave con destino a La Habana. La vida a bordo del St. Louis se asemeja a unas vacaciones surrealistas para esos refugiados, pero los rumores inquietantes desde Cuba no tardan en ensombrecer el ambiente festivo, y la nave que prometía ser su salvación parece a punto de convertirse en su sentencia de muerte. Hannah y Leo se ven enfrentados a una decisión desgarradora… Siete décadas después, en la ciudad de Nueva York, el día que cumple doce años, Anna Rosen recibe un paquete de Hannah, una tía abuela a la que nunca conoció pero que crio a su difunto padre. En un intento de reconstruir el misterioso pasado de su padre, Anna y su madre viajan a La Habana para reunirse con la anciana. Hannah les relatará el viaje en el St. Louis, les hablará de sus años en la isla y revelará, por primera vez, el modo en el que ella y Leo cumplieron con el solemne pacto que sellaron.
Del autor del bestseller «La niña alemana» , nos llega esta conmovedora novela en la que cuatro generaciones de mujeres experimentan amores, pérdidas, guerras y esperanzas, en una historia que comienza con el surgimiento del nazismo en Alemania, pasa por la Revolución cubana, y se extiende hasta la caída del Muro de Berlín.
Berlín, 1931 : Ally Keller está sola y asustada cuando da a luz a una hija mestiza a la que nombra Lilith. Mientras los nazis ascienden al poder, Ally sabe que debe proteger a su bebé de la ideología de la raza aria promovida por Hitler, y pone en marcha un plan desesperado para enviar a su hija a un lugar seguro al otro lado del océano.
La Habana, 1958 : Ya adulta, Lilith conserva pocos recuerdos de su madre o de su infancia en Alemania. La emociona el futuro con Martín, un piloto cubano con fuertes lazos con el gobierno de Batista, por lo que, al estallar la Revolución, Lilith y su hija recién nacida, Nadine, se encuentran en una encrucijada.
Berlín, 1988 : Como científica en Berlín, Nadine ha pasado toda su vida evitando la verdad sobre la historia de su propia familia. Es su hija Luna quien la anima a indagar sobre las decisiones que tomaron su madre y su abuela para asegurar la supervivencia de sus hijas. Le corresponderá a Luna aceptar una traición desconcertante que cambiará todo lo que creía saber sobre el pasado de su familia.
Separadas por el tiempo, pero unidas por el sacrificio, cuatro mujeres se embarcan en viajes de autodescubrimiento y se convierten en testimonios vivientes del poder del amor materno.
Rubia es una historia donde las pasiones humanas se manifiestan de muchas formas diferentes. Esta novela está basada en vidas y pasajes de personas reales, pero no es tratada como un testimonio, es una novela de ficción basada en argumentos reales. Tuve la oportunidad de conocer algunas de esas personas y cada una de ellas hizo aportes con sus memorias, sus anécdotas y sus impresiones sobre la vida del personaje central y su entorno. Algunos ya no existen, otros aún viven.El conjunto de los episodios aquí descritos nos llevan a un mundo donde el altruismo y lo pintoresco, la prostitución, los bajos instintos y el amor se dan la mano y comen en el mismo plato.Rubia nos muestra la cara ruda de esos tiempos y las más oscuras, hermosas e hilarantes facetas de sus personajes. Es un recorrido por la vida de cualquier pueblo y sus almas, sus pensamientos y ambiciones.No queda mas que invitar al lector a disfrutar de este viaje a lo mas profundo de las vivencias y emociones de estas personas. Les prometo asombro, risas y reflexiones.
Un imperio salvaje y sanguinario (Los Lamanitas), invade militarmente a la nación vecina (Los Nefitas), dedicados a las ciencias, las artes y la diplomacia. El Capitán Túpac es elegido para dirigir a los ejércitos nefitas en la defensa de sus familias y su libertad; cuando está a punto de ser derrotado por los terribles lamanitas, la sorprendente intervención de REBECA, ¡ viene a transformarlo todo ! En todas las historias épicas siempre hay un campeador, pero en EL ESTANDARTE DE LA LIBERTAD, ¿Quién será el héroe o heroína? ¿Será acaso REBECA…?
La historia de Cuba se circunscribe erróneamente para muchos al proceso revolucionario que la mantiene secuestrada desde 1959. La construcción del socialismo y el antinorteamericanismo militante han sido las coartadas para justificar dicho secuestro; para consagrar a un individuo carismático y paranoide como líder de la revolución mundial, para camuflar “errores” que no lo son y exhibir logros inexistentes. La violencia y la intimidación han sido los instrumentos para inducir la desesperanza, fomentar el sometimiento, estimular la simulación como estrategia de supervivencia, y para empujar a millones de cubanos a la enajenación, al suicidio o al éxodo sin retorno. Cuba, el socialismo y sus éxodos muestra la realidad cubana del último medio siglo combinando (en un símil cinematográfico) encuadres de planos cortos para analizar las partes, con planos abiertos para apreciar totalidades. El hilo conductor de la narración es la memoria y las vivencias del autor, lo que le imprime autenticidad, calidez y cercanía al relato.
La huída de una delincuente psicodélica, los brotes de una revolución jocosa y el proyecto conceptual de un filósofo underground confluyen en el tiempo y en el espacio. El que ocupa Villa Palmera, en mitad del Océano Atlántico, como puerto de paso obligado para diletantes de la contracultura y turistas de la Atlántida. Allí se mantienen a flote los restos del continente hundido, y un residuo esotérico en la atmósfera del que resulta del todo imposible escapar. Un viejo y un niño tratan de desenhebrar la historia de estas islas extrañas y de sus antiguos pobladores, en el epicentro de un vértice mágico que indefectiblemente atrae a Jeremías Flint.
Armando Palacio Valdés publicó, en 1984, 'Aguas fuertes', que mereció el elogio de Clarín, y que son descripciones paisajísticas fraguadas durante su estancia en el balneario de Marmolejo. Son un corpus de seis bocetos de la vida madrileña —las cuatro de El Retiro de Madrid, El Paseo de Recoletos y La Castellana—más seis escenas de la vida cultural de la capital —La Academia de Jurisprudencia, La Biblioteca Nacional, Los mosquitos líricos, El último bohemio y La abeja (periódico científico y literario)— y dos cuadros sobre las públicas ejecuciones de reos —El hombre de los patíbulos y El sueño de un reo de muerte—.
La acción de El cuarto poder se desarrolla en Sarrió, ciudad ficticia que se ha identificado con Gijón. Sarrió, paralizada por la rutina y el inmovilismo de sus habitantes necesita, a juicio de don Rosendo, un rico comerciante local, de un revulsivo que acelere su desarrollo. A tal fin, funda El Faro de Sarrió, un periódico que dirigirá a la ciudad por la senda del progreso. El hijo de don Rosendo, Pablo es un joven aficionado principalmente a los caballos y a conquistar a las bellezas locales. Su hija mayor, Cecilia, se encuentra prometida con Gonzalo, un joven ingeniero de ascendencia marinera. Gonzalo, sin embargo, acaba enamorándose y casándose con la hija menor de don Rosendo, Ventura. Ciertos artículos aparecidos en el Faro molestan a algunos habitantes de Sarrió, que crean un periódico rival El Joven Sarriense. El enfrentamiento entre los dos periódicos y la dedicación de ambos a la maledicencia, al mote y a los improperios, atiza las bajas pasiones en la población. Se enconan, en definitiva, los conflictos de la política municipal y, más en concreto, se exacerban tensiones personales e incluso conyugales. En este clima de decadencia moral humana y social hace su aparición el duque de Tornos, que proyecta veranear en Sarrió. El glamour del duque impresiona vivamente a Ventura. Se hacen inseparables, e inevitablemente se convierten en pasto de la chismografía local. Su affaire se unirá al conflicto externo del pueblo al ser víctima de los cotilleos. ¿Dónde acabe el Periodismo y empieza el chisme? El cuarto poder se publicó en Madrid en 1888, y fue traducida al inglés, al francés y al holandés. Algunos años después fue adaptada como obra de teatro.
'El idilio de un enfermo' es quizás la obra más perfecta del autor. Esta se desarrolla, como muchas de sus obras, en Asturias. Es reconocida por su concisión, ironía, sencillez de argumento y sobriedad de personajes.
Aunque Palacio Valdés escogió el nombre de “Lancia”, esta novela está ambientada en Oviedo, una ciudad española. Retrata, a través de sus personajes y acontecimientos, las costumbres, tradiciones y problemáticas de la España de finales del siglo XIX.
En El maestrante (1893) se acerca a uno de los grandes temas de la novela del Realismo, el adulterio, de nuevo en ambiente asturiano.
Historia de un loco, que se cree un gran antropólogo y ciegamente engendra el dolor entre los suyos queriendo encontrar, mediante métodos pseudocientíficos, el origen del pensamiento humano. Mientras, un joven escultor, incapaz de percibir el mal, intenta demostrar su arte y un viejo tenorio trabaja su última conquista. El telón de fondo lo constituye la sociedad madrileña de finales del XIX. Pintura admirable de tipos y escenas, de humor finísimo y dolor penetrante, El origen del pensamiento podría calificarse de tragicomedia. El argumento salta sin complejos de lo cómico, rayano en el sainete —incluso castizo, de su tiempo—, a la comedia seria que a veces llega a rozar la tragedia, sin que por esta diestra convivencia de ambos extremos se escamotee ningún valor humano ni se falsee ninguna situación real en el desarrollo de la obra.
El señorito Octavio obra en la que se critica el caciquismo y la corrupción política. Ambientada en el espacio asturiano de Laviana, en medio de una relación de adulterio que termina, como no podía ser de otra forma, con un desenlace trágico.
José es una novela realista protagonizada por marineros.
Se trata de una pieza con un argumento simple, pero muy amena, en la que se narra una inocente relación amorosa entorpecida por las disputas subidas de tono entre las futuras consuegras, así como por la oposición interesada de la madre de la novia.
José es la novela de los pescadores, la novela del mar.
Aunque no comulgó plenamente con las propuestas modernistas, algunas de las obras de Palacio Valdés de los primeros años del siglo XX se verán impregnadas por algunas de sus características, como en esta novela, aborda los problemas que en la tranquila vida de una comunidad campesina originó la primera industrialización, con la introducción violenta de usos y costumbres ajenas a toda su ancestral cultura. En tierras de Laviana la vida transcurre felizmente entre las tareas cotidianas del campo y las romerías, aquí surge el amor entre Nolo y Demetria y también el de Jacinto y Flora. Toda esta paz y tranquilidad se ve enturbiada por la aparición de la minería que aunque muchos crean que traerá consigo la civilización y el dinero también les traerá la violencia. Nolo y Demetria disfrutan de sus encuentros en las romerías,aunque estas siempre acaban en peleas constantes entre los mozos de Entralgo y los de Lorío, pero no tendrán mayor transcendencia por ser estas a palos o pedradas, pero con la industrialización llegan unos mineros que cambian estos por las navajas y las pistolas, son violentos y asedian a las mozas del lugar sin ningún miramiento. En medio de todo esto cierto día llega la legítima madre de Demetria a buscarla para llevársela a vivir con ella a Oviedo, pero Demetria no se acostumbra a aquella vida y cierto dìa que Nolo la va a visitar por la feria de la Ascensión se escapa con él para volver a Entralgo. Por otra parte D. Félix el capitán, rico terrateniente no ve con buenos ojos que las minas estén destruyendo las tierras y su idílica forma de vida, verá como parte de sus tierras serán expropiadas al no quererlas vender. Dos días antes de la Fiesta del Carmen se celebran las bodas entre Nolo y Demetria y Jacinto y Flora, por este motivo el día de la romería el capitán invita a todos a una gran fiesta, pero a la llegada a la iglesia estalla una encarnizada lucha entre los mozos del lugar y los mineros que acaba con la muerte de Jacinto y Demetria.
El capitán Ribot, un marinero valenciano cargado de vitalidad, cuenta en primera persona cómo conoce y se prenda de Catalina. Descubre pronto, con pesar, que se trata de una mujer casada, pero no puede evitar seguir enamorado de ella, buscar el trato (que va prendiendo aún más la hoguera) y lanzar incluso algún anzuelo para conseguirla. Ribot padece un debate moral, porque sabe que lo que intenta no está bien y percibe además la virtud de Catalina (que es, por otra parte, una de esas cualidades que la hacen atractiva). Hace además amistad con el marido de Catalina, Emilio, un frágil y soñador personaje sencillo e ingenuo. La amistad con Emilio se convierte después en un nuevo muro, ya infranqueable para Ribot y le aleja casi definitivamente de cualquier tentación. El socio de Emilio, Enrique Castell, es sin embargo un hombre sin escrúpulos, pretende también a Catalina y no posee barreras morales.
La Espuma, independientemente de su valor literario, constituye una excelente vía de acercamiento a la vida social de la España de la Restauración de la que Palacio Valdés resulta un testigo excepcional. La mentalidad de los distintos grupos que componen la clase dirigente, el juego de relaciones que se da entre ellos en virtud del papel que se asigna al dinero, a la sangre, a la religión o a los prestigios sociales; las pautas de conducta por las que se rige la vida pública o privada; los distintos componentes de la vida material... son algunos de los aspectos de la España canovista para los que una lectura detenida de La Espuma constituye una cantera de datos, sugerencias y puntos de reflexión.
Cuando comenzaba la última década del siglo XIX, Armando Palacio Valdés publicó 'La fe', una novela de conflictos morales en la que oponía la ciencia a la teología, o lo que es lo mismo, la razón a la fe. La trama nos presenta al padre Gil, protagonista de la novela, que en su empeño por convertir al ateo recalcitrante don Álvaro de Montesinos, acaba dudando de su propia fe. Por su parte, una beata local, Obdulia, enamorada en secreto de don Gil acusa a este de haberla seducido. La novela utiliza para exponer su tema central los postulados de un naturalismo que podría calificarse de espiritualista, y coloca la acción en Luanco (Asturias), que toma aquí el nombre de Peñascosa, topónimo inventadopero que Palacio Valdés escogió seguramente pensando en lo escarpado de sus costas, y, por extensión, en lo espinoso y árido del dilema que iba a plantear. Palacio Valdés llama reiteradamente a los habitantes «peñascos». Aclamada por sus contemporáneos, la novela fue objeto de graves censuras por adentrarse en el delicado problemas de las creencias religiosas.
El joven Ceferino Sanjurjo, médico y poeta gallego, conoce en el balneario de Marmolejo a una simpática monjita sevillana, la hermana San Sulpicio, de cuya gracia y belleza queda prendado. Sanjurjo interroga con suma discreción a la madre Florentina, superiora de la orden a la que aquélla pertenece, y se entera de que en esa congregación se renuevan los votos cada cuatro años, y a la linda y graciosa novicia le falta sólo un mes para confirmar o no los suyos. El joven médico la galantea con cierta prudencia, pero al darse cuenta de que está enamorado de ella, la corteja abiertamente y le declara su amor, con la esperanza de que le corresponda y no renueve sus votos. Las circunstancias son propicias para que Ceferino Sanjurjo logre sus propósitos. Gloria Bermúdez, nombre mundano de la monjita de 19 años de edad, había tomado los hábitos no por verdadera vocación religiosa, sino por desavenencias con su madre, doña Tula, y a instancias de ésta. Sin embargo, convencida actualmente de que su destino no estaba en la vida conventual, tenía pensado abandonarla. A raíz de ciertos acontecimientos sucedidos en el balneario, la superiora, la hermana San Sulpicio y otra monja deben abandonar el sitio y regresar a Sevilla. El enamorado Sanjurjo las sigue y, a los pocos días, se presenta en aquella ciudad resuelto a impedir que la hermana sea obligada por su familia a hacer nuevos votos, pues está dispuesto a casarse si ella lo acepta por esposo. Escrita en primera persona, la obra se sitúa en España, alrededor de 1870, y está considerada como una de las mejores y más populares novelas de Palacio Valdés. Entretenida, graciosa, pulcramente escrita, de composición irreprochable, abunda en hermosas y acertadas descripciones de fiestas, corridas de toros, «cante jondo», patios y rejas sevillanos, el Guadalquivir y sus alrededores, todo lleno de luz y color. Su mayor encanto radica en la sencillez de su trama y en la ausencia de problemas religiosos, pese a que el tema podría tentar a ello.
Publicada en 1921, se trata, como indica el subtítulo «Escenas de la infancia y adolescencia», de unas memorias de su época infantil y juvenil, en que nos narra sus primeros años de vida a lo largo de las deliciosas páginas de esta autobiografía ejemplar. Tales episodios son contados con sencilla emoción y una ternura conmovedora, traspasado de finísimo humor. He ahí, en definitiva, los rasgos más comunes a toda su obra admirable.
Sucedía esto allá en Cádiz, en una taberna del Campo del Sur, no lejos de Capuchinos, frente al mar Océano. Para entrar en la tienda era menester subir tres escalones. Cerca de la entrada, á mano izquierda, estaba el mostrador: detrás de él la gran estantería repleta de botellas. Á un lado toneles y barriles y terciados sobre éstos varios zaques de vino. En el fondo tres aposentos separados por sendos tableros pintados de amarillo que no llegaban al suelo. Había gente bulliciosa en estos cuartos: escuchábase rumor de plática alegre y chasquido de vasos…
Los papeles de Jiménez necesitaban, como los jeroglíficos egipcios, prodigios de atención y perseverancia para ser descifrados. Además de su letra perversa y abreviaturas, se hallaban escritos con lápiz unos, otros con tinta, en todos los tamaños y formas imaginables: tan pronto pliegos en folio semejando memoriales a la Alcaldía, como esquelitas diminutas de las que se envían a la tienda de comestibles. La mayor parte redactados en español; pero los había también en francés y en inglés. No me decidí, por lo pronto, a ser el Champollión de aquella bárbara escritura. Los dejé dormir largo tiempo en un armario. Pero habiendo resuelto no escribir ya para el público, y careciendo de otras ocupaciones que me distraigan, emprendí, pasados algunos años, la tarea; y después de algunos esfuerzos he logrado, en parte, llevarla a cabo. Digo en parte, porque los papeles que ahora se publican no son todos los que me entregó. Indudablemente, algunos de ellos parecían destinados a la publicidad por la forma en que están escritos. La gran mayoría, no obstante, son apuntes o notas rápidas sugeridas por algún incidente de la vida o por sus lecturas, y desde luego se puede asegurar que sólo los escribía para descargarse de sus impresiones, necesidad absoluta que experimentan todos los solitarios.
Los 4 cuentos breves están tomados del libro Aguas fuertes (1884). “El pájaro en la nieve” narra la trágica historia de un joven músico ciego que se queda solo en el mundo e inicia un imparable descenso hacia la miseria y el desastre. Su única esperanza: el regreso de un hermano que marchó a América para hacer fortuna. Leyéndolo es imposible no recordar el más célebre cuento de Andersen. “La confesión de un crimen” está ambientado en el mundo de los precoces amores infantiles, reflejos turbadores, en su carencia de disimulo, del mundo de los adultos. No obstante el tono ligero del relato, sobrecoge la seriedad con que la protagonista asume la terrible responsabilidad de la muerte de su joven admirador. En “El sueño de un reo de muerte” es posible ver una reprobación de la pena capital y la indignidad de los ajusticiamientos públicos (un asunto tratado con mayor intensidad en otro de sus relatos: “El hombre de los patíbulos”, Aguas fuertes, 1884). El narrador sufre una esperpéntica pesadilla que lo conduce al cadalso, y donde lo que más lo aterroriza es convertirse en espectáculo. “Los Puritanos” es un curioso relato que muestra cómo puede cambiar en una centuria la consideración de lo políticamente correcto: el ridículo flirt -sin consecuencias- de un hombre casado, de tránsito en Madrid, con una niña de trece años que le ha tirado a la cabeza, desde el balcón de su casa, una enorme muñeca. Iniciada la relación, la desigual pareja se refugia durante unas horas en el Teatro Real, donde se representa la célebre ópera de Bellini, I Puritani, de ahí el irónico título del relato. Inocencia y mala conciencia, apenas disimulada, bajo la burlona mirada del autor.
La acción de Marta y María transcurre en la localidad asturiana de Avilés, que el autor rebautizó para esta novela como «Nieva». María de Elorza es una mujer de clase alta, hermosa y de maneras delicadas. Su personalidad es una mezcla de frialdad exterior con un romanticismo novelesco y una religiosidad exacerbada, fanática. Está prometida con Ricardo, marqués de Peñalta y militar de artillería. Marta, la hermana de María, es una jovencita de catorce años con un carácter práctico y sincero que contrasta con el de su hermana. María lleva una vida mística llena de renunciaciones y actos de caridad. Además, en una carta propone a su prometido seguir el ejemplo de Santa Isabel de Hungría y el duque de Turingia, quienes después de casados vivieron separados para siempre. Todo esto mortifica al joven militar, que poco a poco va desviando su atención hacia la joven Marta. Movida por su misticismo y sus veleidades románticas, la devota María termina envuelta en un complot carlista para asaltar una fábrica de armas. Pretende incluso que Ricardo traicione a los suyos y le ayude en el proyecto. Marta y María fue la primera novela de Palacio Valdés que alcanzó el éxito editorial, y fue traducida a varios idiomas. Adscrita a la corriente realista, dibuja con claridad las costumbres del Avilés de finales del siglo XIX.
Miguel Rivera tiene una azarosa existencia, primero al lado de su madrastra, luego en el tétrico colegio de la Merced y, después, en sus relaciones con Lucía, esposa de un amigo de su padre. Un verano se enamora de Maximina, una chica tierna e inocente que inflama la pasión del protagonista. La novela llega a su fin cuando Rivera va de Madrid a Pasajes para casarse con ella. Riverita resume los recuerdos de los ambientes y gentes de los años jóvenes de Palacio Valdés vividos en Madrid. La acción continúa en la novela Maximina.
Maximina es la continuación de Riverita. Riverita es una novela de formación (infancia y juventud del protagonista); Maximina arranca donde otras novelas concluyen: con la boda. Miguel Rivera es un hombre bien situado en la sociedad madrileña, pragmático, un poco exaltado y un poco cínico y descreído. Su mujer, Maximina, es jovencísima e ingenua, hermosa, sensible y piadosa, casi una niña. Maximina encaja con dificultad en la sociedad urbana dominada por las apariencias y la afectación. Es un remanso de idealismo y amor limpio en un entorno mundano. Como un don Juan ante doña Inés, Miguel contempla desconcertado el amor que le tiene su mujer y percibe que se encuentra ante un don de Dios. Maximina era también el nombre de la esposa de Armando Palacio Valdés, fallecida dos años antes de publicar esta novela.
En Semblanzas literarias, Armando Palacio Valdés recoge “algunas observaciones sobre varios de los oradores que han terciado durante los últimos cursos en los debates del Ateneo Científico y Literario de Madrid. No aspiro a hacer retratos, que harto difícil lo considero para mi humilde pluma. Busco tan sólo el medio de echar a volar algunos pensamientos que me ocurrieron al escuchar los discursos pronunciados en las veladas del Ateneo. Excusado parecerá añadir, después de lo expresado, que mi punto de vista será principalmente artístico. Esto no obstante, trataré, hasta donde me sea posible, de hacer ver, a la par que los méritos artísticos de cada orador, las tendencias más caracterizadas de su inteligencia, o sea el rumbo que actualmente sigue en el océano del pensamiento humano. Bajo uno y bajo otro aspecto, aunque mucho pueda aplaudir, algo tendré también que censurar; mas haré de modo que estas censuras, ni tengan su raíz en la pasión, ni se presenten tan agrias que puedan herir ninguna susceptibilidad”.
Con la novela Sinfonía pastoral se cierra el ciclo de novelas asturianas y con ella la producción novelística de Armando Palacio Valdés, publicada en 1931 cuando el autor linda en los 80 años. Novela campesina en la que el novelista hace gala una vez más de su amor al justo medio. El campo y sus moradores no tienen ni el tono paradisíaco el primero, ni la exquisita elegancia, refinada cultura y delicada sensibilidad, los segundos, que les atribuyen los escritores clásicos y renacentistas; pero tampoo hay que verlos con el lente negro del naturalismo decimonónico, que no descubre en el campo más que 'monstruos de malicia, hembras rijoas, machos bravíos, intrigas tenebrosas, suciedades y abominaciones de todo género': más que vicio, el novelista descubre en la vida campesina mezquindad. Como se ha dicho, la ténica del contraste constituye una de las características fundamentales del escritor asturiano; contraste en todos los órdenes, en el físico, en el moral, en el espiritual.
Tristán o el pesimismo fue escrita en 1906, en cuya portada consta, junto a la firma del autor, la descripción “novela de costumbres”. Diestro en esto, los retratos y escenarios costumbristas, Palacio Valdés es un arquitecto de novelas naturalista, estilo derivado del realismo literario de finales del siglo XIX, en el que desarrolla la formación de carácter del hombre a través de planteamientos filosóficos y cristianos, mostrando una mano certera en la creación de personajes femeninos, algo así como Flauvert con Bovary, perteneciente también al realismo. En esta novela, para el estudio de caracteres y situaciones, Palacio Valdés coloca frente a frente a dos hombres, Reynoso y Tristán de naturaleza tan distinta como el agua y la gasolina. Dos contrastes rodeados de secundarios (muy estupendamente trazados) que crean una trama de enredos sociales, caricaturas o retratos de fina y sutil ironía sobre la “alta” sociedad ( y burguesía) del cambio de siglo anterior, en la España de los intelectuales de cafés y cafetines, de la Restauración, y la corrupción del régimen parlamentario que la caracterizó, algo de lo que el autor rasca migajas en este historial folletinesco. Tristán, influenciado por un pesimismo de época, decide saldar los excesos de su misantropía llevando su delirio hasta el límite. Mientras, Reynoso se ve obligado a tomar una importante decisión, para lo que ha de enfrentarse a su propio código ético, lejos de convenciones morales sociales o religiosas. Clara y Elena, respectivamente, serán las víctimas o beneficiarias de las resoluciones de ambos personajes, tan antagónicos. Tristán o el pesimismo era la obra preferida de Palacio Valdés, según sus manifestaciones. En ella podemos deleitarnos de buenas dosis de humor que se manifiestan a través de personajes como Gustavo Núñez o el feo Barragán, por no hablar de la ridícula prima de Tristán, Araceli, adolescente aspirante a marquesa de pitiminí, orgásmica con el postín de las habituales reuniones de saloncitos particulares, “Aquel día rebosaba de distinción y de elegancia el gabinete y el saloncito contiguo de la bella esposa de Reynoso. Una duquesa, tres condesas, una marquesa, y dos vizcondesas; además, las de Domínguez y las de Mínguez, emparentadas con lo más elevado e inaccesible de la aristocracia española. Araceli estaba en sus glorias. Empezaba a perdonar a Elena su oscura estirpe en gracia a los muchos títulos que ya acudían a sus martes”.
Para descubrir y desarrollar sus facultades ocultas de medium, telepatico, etc. con 60 experimentos practicos >En este libro, cuyos argumentos son extraidos de la realidad, el autor presenta, por primera vez en la historia de la parapsicologia, una interpretacion unitaria de todos los fenomenos paranormales (telepatia, telequinesis, clarividencia, levitacion, voces misteriosas, materializacion, etc) entre los cuales la precognicion adquiere un sentido mas credible y menos traumatico. Con razones que no ofenden la fe ni marginan a la ciencia, descubre la verdadera naturaleza de dichos fenomenos, con lenguaje agil y claro.
La inexplicable mano del destino, ha hecho que, Jack Randolph un agente del servicio secreto de segunda generación (su padre fue miembro de la seguridad personal de JFK) atraviese accidentalmente, un portal del tiempo y viaje al año 1963, a solo unos días, del asesinato del presidente Kennedy.Allí, Jack se enfrenta a su nuevo destino y a la oportunidad única de contestar una pregunta que muchos nos hemos hecho. “¿Será posible para un ser humano viajar en el tiempo, y tratar de cambiar un evento historico?'
Ese hombre tenía rabia y un perro, y lo envidié. Yo sólo tenía rabia.
Hijo de un republicano exiliado que esperaba en México la muerte de Franco, Andrés Samayoa viaja a Madrid contratado por un año para investigar y escribir sobre la Guerra Civil. Pero su precaria disciplina sólo le da para consultar libros en bibliotecas y tomar notas algunas mañanas; el resto del tiempo lo dedica a deambular por una ciudad entregada a los placeres.
En tales andanzas se lía con María, yonqui veinteañera, y con Cándida, melancólica y cercana a la cincuentena; ambas relaciones atizan los ardores de sus demonios: la abulia profesional, las explosiones de rabia contra su esposa, el poco expresado amor a su hija, pero ante todo la imagen regordeta, autocomplaciente del hombre de familia que rebasa los cuarenta y empieza a decir que sí, a inclinarse, incluso a aplaudir todo lo que antes había criticado. La sombra de la muerte completa el panorama: algo en el cuerpo de Andrés no está bien y podría ponerse mucho peor. Tal vez no le quede tiempo para descifrar las dos Españas que quisiera entender: la de la guerra fratricida y la actual sin memoria ni convicciones, pero igualmente racista y cruel.
La primera novela erótica escrita por un hombre que hace palidecer las sombras… «Esta noche no vas a dormir…» Sangre cubana y un amor casi carnal por el arte, Luis es un seductor instintivo, de los que carecen de reglas e inhibiciones; por eso, ninguna mujer se le resiste, y sus conquistas terminan puntualmente en el taller de Navigli en el que pinta. Sobre sexo, cree saber incluso más de lo que necesita, al menos, hasta que conoce a la propietaria de una tiendecita de vinilos en la que el tiempo parece haberse detenido, quien, sin pedirle permiso, pasa de ser su enemiga jurada a ser su obsesión. Todo por culpa de un hurón. Pues sí, porque, cuando la graciosa mascota comienza a sobrar en casa de ella, una noche de primavera en la que Milán parece mágica, Luis se transforma en el Príncipe Azul: se ocupará de Lucky, pero, a cambio, ella tendrá que posar para él una tarde a la semana, durante seis semanas. Un contrato auténtico, del que Luis perderá pronto el control, arrebatado por una pasión que lo llevará, en el juego del placer, más lejos de lo que nunca ha llegado. Y, mientras persigue la inspiración y, poco a poco, conquista a su presa, no se dará cuenta de que, en realidad, el cazador ha sido cazado y de que puede que, con ella, haya encontrado el amor. Pero ¿está listo para reconocerlo y aceptarlo? Todas las veces que quieras es una historia de erotismo arrollador, que desvela a las mujeres lo que todo hombre querría ocultarles, dentro y fuera de la cama: también los hombres se enamoran y, con el corazón, el sexo sí que no tiene límites…
Tres amigos deciden ir de excursión al Parque nacional Tikal (Petén, Guatemala).Todo va bien hasta que sufren un accidente y quedan a la deriva en una zona desconocida e inexplorada: Bosque primate. Llegan a un campamento donde un equipo de excavación, dirigido por un arqueólogo, acaba de descubrir una antigua y extraña ciudad. Sitio donde viven sus peores miedos al encontrarse con el protagonista de una vieja leyenda: El Mico Brujo.Cuando deciden buscar ayuda, ninguno de ellos puede saber que su mayor esperanza se convertirá en su peor enemigo.¿Lograrán salir con vida de ese rudo lugar?
Ante el avance inexorable de la modernidad que amenaza con borrarlo del mapa, el ahora llamado «centro histórico» de la ciudad más habitada del mundo reclama a sus cronistas finales. Y uno de los primeros en responder a esta última llamada es Armando Ramírez con «Bye, bye Tenochtitlan», un libro que no habla de edificios ni de monumentos sino de la gente de carne y hueso que vive, a pesar de todo y de ella misma, en el lugar donde le tocó, en la región que para su cronista vital es un santo y seña, un mito, un es y un será, un antes y un después. Las crónicas corresponden a un periodo de cinco años (1985-1989) y sin mucho método giran en torno a tres grupos: lugares (el Bombay, el Imperio, el Marrakeshito, la Alameda, los mercados de San Camilito y Sonora, las ostionerías), personajes (el raterillo, la vendedora de sopes, el galán, el que hace «san lunes», el reventado en Garibaldi, las prostitutas) y hechos (delincuencia, amor, sexualidad, diversión y sano entretenimiento). De este modo, la voz del autor y las múltiples voces a las que les cede el micrófono reiteran en mil formas un solo mensaje: aquí está lo que fuimos, lo que somos y lo que probablemente seremos.
Barrio típico, corte de los milagros, escenario único en donde se encarna el peso de estar vivo, Tepito se ha hecho de un juglar, y con él la literatura mexicana contemporánea, que da voz a su ambiente inaudito: la ciudad. Chin Chin, el protagonista de esta historia, nos hace descender por los niveles del infierno citadino y de sus personajes, infierno que se traduce en el lenguaje y nos enfrenta al drama de vernos a nosotros mismos. «Chin Chin el teporocho» se ha convertido en una novela pionera, pues su autor supo ver un ámbito literario que condicionó el emplea de recursos lingüísticos, desenfadados y eficaces, que inauguraron un modo de hacer literatura. Armardo Ramírez nació en Tepito y, como digno baluarte de este barrio, se ha convertido en su cronista, así como en fiel retratista de la cultura popular de la ciudad de México. Su convivencia tan cercana con la vecindad, la barriada, el proletariado, la ha reflejado en sus libros «Quinceañera», «Violación en Polanco», «Noche de califas», «Me llaman la Chata Aguayo» y «Sóstenes San Jasmeo». Algunas de sus obras han sido adaptadas para el teatro y otras para el cine: «Chin Chin el teporocho», «Noche de califas» (ganadora de la 2.ª Convocatoria de Teatro Nacional del IMSS-INBA), «Me llaman la Chata Aguayo» (video casero), «El cuento ratero» y «Quinceañera».
La epopeya que vivieron griegos y troyanos en la guerra de diez años hace más de tres mil años y que Homero recreó en la «Ilíada» en un largo texto que recrea el nacimiento de la civilización occidental, además del inicio de nuestra literatura, sirve de pretexto y línea argumentativa a Armando Ramírez para trasladar varias de esas historias a un México, D. F. de hoy (o de un pronto inminente), un Centro Histórico donde el pasado antiguo y el presente que transa conjugan las decisivas intervenciones de los dioses y semidioses del Más Arriba. Porque las pasiones continúan caracterizando a las personas; y el amor, la posesión, los celos, la traición, la envidia, la admiración, la misma pasión desbordada están en esta «Tepiteada», que narra el rapto de la Negra, pareja del Diablo, el violento y salvaje asedio a Palacio Nacional, el sangriento rechazo, las épicas batallas, y el largo desfile de las figuras míticas de Calcas, Anquistes, Glauco, Ayante, Telemamón, Hipoloco, o Néstor, quienes resienten cómo el fiel de la balanza se inclina por la acción o traición de los dioses o diosas, semidioses o semidiosas como La Señora de las Tienditas, El Señor de los Teibols, el Otro Señor de los Cielos, La Señora de los Ambulantes, al mando de los Vándalos, los Gañanes, los Gandules o los Pránganas, unos y otros pintados como troyanos y aqueos chilangos. Entonces, lo que aquí se relata es una historia de amor y guerra, con un ritmo y lenguaje ágiles, que, de muchas maneras, invita a la relectura. Despiertas, como todos los días, preguntándote qué te depara el destino. Y en el sendero existencial de la fatalidad versus la libertad se juega gran parte de la dinámica narrativa de esta enorme apuesta que Armando Ramírez invierte en «La Tepiteada». En el personaje protagónico del Diablo imprime rebeldía suficiente para convertirlo en un «out cast» que no le queda más que la transgresión como signo de su humanidad. De esta manera, Ramírez nos instala en las dimensiones trágicas que busca para su novela; entendiendo el término en raíces y connotaciones clásicas: no la confirmación de un destino que indefectiblemente sujeta al individuo, sino el testimonio de una libertad que se alza contra ese destino, incluso aunque la derrota sea inevitable. Intenso y apurando al vértigo, el oficio de Armando Ramírez hace malabares con la violencia sorda a que orilla la supervivencia o a que invita la maldad sublime, y la quiere cauterizar con la pasión amorosa, el amor sin más, fogonazos sombríos que poco hacen contra las oscuras fuerzas que juegan con destinos desde su atalaya inabordable.
La Chata Aguayo es el alma de la Soledad, la calle que corre a espaldas de Palacio Nacional. Lideresa indiscutible de los vendedores ambulantes, la Chata sabe mejor que nadie que en la calle hay para todos, pero que es celosa; que nunca falla, y si falla «es porque eres maje». De adolescente, la anémica y apática Chata sólo iba del catre al zaguán de la vecindad. Ahí aprendió viendo la calle y su fauna. Luego lo viviría todo: la vez que perdió con el Chalío —el incurable Scherezado de la Merced—, los hijos, el abandono, la soledad libre en los salones de baile, las golpizas con los uniformados o con su propio gañán, el arrobo místico ante el Presidente, las amenazas de los «doctorcitos» en el poder durante los últimos sexenios. La Chata es transa, pero derecha porque reparte… y porque «ni modo, el hambre es más». La Chata es hocicona, aunque «mejor le haces como el sordomudo: hablas cuando te conviene y escuchas sin decir pío». En un áspero, sinuoso, netísimo, absorbente monólogo, la Chata vio conveniente hablar en este libro. El lector sale igualmente ganón. Armando Ramírez, uno de los narradores más leídos en México, ha publicado también con Grijalbo: «Violación en Polanco» (1979), «Noche de Califas» (1982), «Tepito» (1983), «Quinceañera» (1985), «Chin Chin el teporocho» (1985), «Bye, bye, Tenochtitlán» (1992), entre otros títulos.
Hoy he vuelto a ver a ese hombre de presencia mítica; con su abrigo mugroso y su elegancia a-pesar-de-todo, estaba dirigiendo el tráfico en una de esas céntricas esquinas de la ciudad, de la llamada parte vieja de la ciudad… Un bolero ya de edad grande, me miró y me dijo señalando al hombre del abrigo mugroso y barba larga y rala: «Ése, así como lo ve, fue un padrote; dicen que el mejor de la Merced. Galán, califa mayor, no’mbre ni migajas quedan. Dicen que recibió un castigo divino; que se volvió loco por una mujer… Pero vaya usted a saber, con el tiempo la gente va cambiando las cosas, pero sí fue califa mayor, todavía se le nota, a poco no…». Del autor de «Chin Chin el teporocho» y «Violación en Polanco».
«Quinceañera» es la reunión casi exacta de los boleros y la vida cotidiana: la vida como una canción, el ambiente de los barrios de la ciudad de México en la quintaesencia de sus fiestas: el baile de quince años. «Quinceañera» es también el rito de iniciación social y sexual de Cecilia y la tragedia de Alejo, que pudo pero no quiso. La historia de ambos es un vals mal bailado y un bolero bien entonado, con su carga de amargura y goce. En esta novela, Armado Ramírez intenta poner la escritura al servicio del habla, trastornando la sintaxis y ortografía para lograr transmitir las andanzas de estos personajes entrañables en su paso por calles, vecindades y plazas.
Empujado por el afán de ser «alguien en la vida» y deseoso de cumplir con el sueño de sus esforzados e idealistas progenitores, el Maciosare —hijo dilecto de la gran Tenochtitlán— concluye con éxito la carrera de sociología y se dispone a buscar trabajo. Sin embargo, no pasa mucho tiempo antes de darse cuenta de que en México ser sociólogo es una de las variantes menos seductoras del desempleo. Por ello, este industrioso y emprendedor personaje decide integrarse a las filas del comercio informal e, inspirado en la generosa anatomía de su novia, la Chancla, se convierte en diseñador y vendedor de pantaletas de talla extragrande. Desde su puesto en un tianguis capitalino, el Maciosare informa al lector de sus alegrías, sus desventuras, sus empeños laborales y sus amores con la inconstante e impredecible Chancla. Con su característico desenfado y esa mordaz e irreverente visión de la realidad mexicana que ha dado carta de identidad a su obra, Armando Ramírez traza en esta divertida novela el perfil de un personaje memorable: el Maciosare, quien se suma a otras creaciones del autor, como son «Chin Chin el Teporocho», protagonista del libro homónimo, y José Agapito de los Hoyos, a quien conocimos en «La casa de los Ajolotes». También encontramos aquí el registro desencantado pero festivo de una ciudad y un tiempo en el que las reformas sociales y los supuestos beneficios del liberalismo económico siguen sin beneficiar a quienes más lo necesitan. Todo lo anterior narrado mediante un inventivo juego verbal que, apoyándose en la riqueza y multiplicidad semántica del habla popular, nos ofrece un jugoso registro expresivo.
España, año 2015. El Gobierno de concentración que se forma tras las elecciones anticipadas no puede combatir los graves problemas del país, sumido en una profunda crisis desde hace años, y que se encuentra al borde del colapso.
La Troika ha expulsado a Grecia de la Unión Europea y firmado la sentencia de muerte de Portugal, con España e Italia en su punto de mira. El país avanza hacia el caos más absoluto y la sociedad, harta de corrupción, recortes y estrecheces, está a punto de explotar.
En medio de esta convulsa situación económica, política y social llega un nuevo caso a manos de la Policía Nacional: la desaparición de Álvaro Sarmiento, un antiguo político reconvertido a banquero sin escrúpulos, imputado por varios casos de estafa y malversación de fondos. La investigación se le asigna a la inspectora Sonia Murillo y al subinspector Andrés Solsona, dos policías que se verán envueltos en una complicada trama que les deparará muchas sorpresas.
Banqueros estafadores, políticos corruptos adictos al sexo duro, financieros especuladores y otros especímenes similares están en el punto de mira de un justiciero diferente. Un hombre sin futuro que, ante las adversas circunstancias en las que se encuentra la sociedad española, decide cambiar las cosas a su manera utilizando el poder de las redes sociales.
Alguien que lo ha perdido todo y por lo tanto no tiene nada que temer, se embarcará entonces en una cruzada de consecuencias imprevisibles…
¿Realidad o ciencia-ficción? Descubre una distopía peculiar, narrada en forma de thriller pero con un profundo trasfondo de crítica social. Una novela negra ambientada en un futuro próximo que quizás esté mucho más cerca de lo que nos pensamos…
Bryan Jackson es un delincuente común que cumple condena por tráfico de drogas en la penitenciaría de Broken Narrows. En la cárcel le llaman El Pastor por sus soflamas fundamentalistas y sus continuas referencias bíblicas al hablar. Lleva más de una década en prisión y le van a transferir a una cárcel de menor seguridad debido a su buen comportamiento. Pero en ese traslado ve una oportunidad de escapar y no se lo piensa dos veces, aunque tenga que dejar varios cadáveres por el camino.
El fugado solicita entonces ayuda a sus antiguos camaradas de la Hermandad, un grupo supremacista blanco comandado por su viejo amigo Cranston. Tiene que huir de las autoridades que le persiguen y esconderse de nuevo hasta que su antiguo jefe le ayude a cambiar de vida. Y a cambio, colaborará en las nuevas operaciones criminales del grupo sin olvidarse de sus propios planes de venganza.
El Pastor tiene en el punto de mira a Jake Butler, un antiguo policía de Nueva York, por una redada policial ocurrida años atrás. Butler, ajeno a los planes de su nuevo enemigo, ha dejado atrás su etapa como miembro de las fuerzas del orden. Mientras afronta sus tormentosas relaciones familiares, se ve envuelto además en una guerra entre clanes mafiosos por el control de Brooklyn. Solo tiene el consuelo de la vuelta a la ciudad de Andrew, su sobrino, convertido en un flamante agente federal. Pero entonces comenzará a recibir amenazas de El Pastor y tendrá que tomar precauciones para mantener a salvo a su familia.
Cuando la brutalidad golpea de nuevo en el corazón de la Gran Manzana, Butler se ve envuelto en una operación conjunta de varias agencias federales que investigan la relación de El Pastor con los últimos sucesos ocurridos en NY. Tendrán que poner todo de su parte para cazar al asesino antes de que lleve a cabo su último golpe. Pero Butler no estará preparado para el duelo a cara de perro que le propone El Pastor. Y entonces, mal que le pase, tendrá que luchar por su vida y la de sus seres queridos antes de salvar a su ciudad, un Nueva York atacado por una mente rencorosa que clama por su venganza.
Meses después de su último gran operativo, el inspector Bermejo deberá enfrentarse a una doble misión en Valencia: descubrir al causante de los misteriosos asesinatos de mujeres ocurridos en la región y acabar con una trama de corrupción en la que se ven involucrados algunos miembros de la Policía.
Por su parte, tras una excedencia, el sargento Roncero regresa a España junto a la periodista Miriam Monfort y recibe el encargo de colaborar en una importante operación de la Guardia Civil contra el tráfico de personas en la zona levantina.
Un macabro hallazgo en el puerto de Valencia los situará tras la pista de un empresario ruso con conexiones al más alto nivel. La presencia de mafias internacionales en la zona pondrá en jaque a los investigadores, envueltos en una trama cada vez más compleja, repleta de peligrosas ramificaciones.
Un «thriller» en el que los protagonistas deberán enfrentarse al lado más oscuro del ser humano y luchar encarnizadamente por sus vidas.
Con el secuestro de una joven pareja en un altozano castellano, el comisario Bermejo, cansado y hastiado de su trabajo y de la vida, se ve envuelto en la investigación de los crímenes más sangrientos de la historia patria. Ayudado a su pesar por un joven e inexperto guardia civil, el sargento Roncero, tendrá que luchar contra sus fantasmas, propios y ajenos, si quiere llevar a buen puerto la investigación y terminar honrosamente su larga carrera en la policía. Numerosas trabas internas y externas les harán recorrer increíbles derroteros, hasta averiguar muy a su pesar que se hallan tras la huella de un calculador asesino en serie. Los crímenes se suceden uno tras otro en diferentes zonas del país, cambiando cada vez la recreación de los asesinatos. Su autor les sumerge en una vorágine mortal, dejando pistas macabras en cada cadáver. Serán entorpecidos en su labor por una audaz periodista, que sin embargo cambiará de registro para unirse en su ayuda. Todos los medios son pocos si pretenden acabar con el salvaje ritual de muerte y destrucción, atrapando al monstruo antes de que cumpla su amenaza: terminar su maléfica serie de asesinatos buscando cerrar su particular objetivo.
Un thriller policial en el que las autoridades intentarán dar caza a un sangriento asesino en serie que va alfombrando de cadáveres el suelo patrio. Un duelo a vida o muerte entre el bien y el mal, en una trama de intriga psicológica que nos adentrará en los recovecos de la psique humana sin dejarnos pestañear.
David Sanromán, joven español nacido en los años de posguerra, vuelve a Madrid tras quince años de destierro en Sudamérica. Después de una dura infancia y de una adolescencia prometedora, tuvo que huir siendo un imberbe debido a sus desavenencias con la familia Fournier, causa de sus desdichas a lo largo de su vida. A su regreso, y tras hacerse cargo de un negocio heredado en el centro de Madrid, descubre un increíble juego de mesa que le obligará a poner su vida en riesgo.
Con la inestimable colaboración de su amigo Pedro y de dos adolescentes vecinos del barrio, deberá desentrañar las casillas del juego, obligándole a resolver los diferentes enigmas que les llevarán a alcanzar su objetivo: encontrar el verdadero tesoro de los vencidos.
Ayudados de su inteligencia, corazón y habilidad, recorrerán los más famosos sitios del Madrid de siempre, acechados en la sombra por malvados perseguidores. Tendrán que poner todo de su parte para llevar su cometido a buen término, ya que la recompensa no es poca: hacerle justicia a la verdadera historia de nuestro país.
Thomas Anderson, un joven científico afincado en Washington, está a punto de culminar una investigación que podría cambiar el curso de la medicina moderna. Un proyecto de más de diez años que supondría el mayor descubrimiento del siglo XXI. Pero su situación anímica y personal no es la más idónea, por lo que aprovecha un congreso médico que se celebra en Las Vegas durante el fin de semana para escapar de la rutina habitual.
Allí se encontrará con Nathan Danniels, antiguo compañero de estudios al que había perdido la pista. Juntos preparan un arriesgado plan que les permitirá a ambos acabar con todos sus problemas. Durante semanas ultiman los preparativos de lo que suponen puede ser la llave de su futuro. Pero el destino, caprichoso, les llevará por unos derroteros que jamás hubieran imaginado.
Anderson se verá entonces envuelto en una trama para la que no está preparado: intrigas empresariales, mafias internacionales, sicarios y asesinos a sueldo, o persecuciones de película en escenarios de medio mundo. Thomas será el peón en un tablero de poder con reglas desconocidas para él, asumiendo a partir de entonces una identidad que no le corresponde si quiere tener alguna oportunidad de reconducir su vida.
El protagonista de esta historia, un antihéroe por excelencia debido a su apocado carácter, tendrá que hacer frente a intensas aventuras en las que recorrerá desde los monumentos de Washington a las ruinas del Foro romano, o desde los rascacielos de Manhattan a las playas de Tenerife. Todo ello, en busca de una utopía que quizás nunca llegue a alcanzar…
El plan organizado por el doctor Thomas Anderson y su antiguo compañero de estudios Nathan Danniels fracasa estrepitosamente, por lo que la situación se vuelve complicada para los protagonistas de nuestra historia. Thomas tiene que huir a la carrera para que el sacrificio de Nathan merezca la pena, dejando atrás toda su vida anterior. Pero el científico no intuye lo que se le viene encima tras aterrizar en Roma, una ciudad en la que se encontrará más de una sorpresa. homas se verá entonces envuelto en una trama en la que nunca hubiera imaginado verse involucrado: intrigas empresariales, mafias internacionales, sicarios y asesinos a sueldo, o persecuciones de película por escenarios de medio mundo. Thomas será el peón en un tablero de poder con reglas desconocidas para él, asumiendo a partir de entonces una identidad que no le corresponde si quiere tener alguna oportunidad de reconducir su vida. La trama se complica a un ritmo vertiginoso en la continuación de esta singular aventura. ¡No te pierdas las sorpresas ocultas entre sus páginas!
Thomas Anderson, reconvertido por azares del destino en Adam Forrester, se siente vigilado y perseguido en las calles de la capital italiana. Decide entonces realizar un viaje en compañía de Tess, una bella y misteriosa mujer que ha conocido durante su estancia en Roma, recalando en un entorno paradisíaco donde ambos no podrán disfrutar de un momento de respiro. El protagonista de esta historia, el antihéroe por excelencia debido a su apocado carácter, creía que sus problemas habían terminado al abandonar los Estados Unidos, su país natal. Pero las acciones realizadas en el pasado serán cobradas en ese futuro incierto que se cierne ante él, encontrándose de frente con un destino que jamás hubiera sospechado. El científico norteamericano tendrá que hacer frente a intensas aventuras en las que recorrerá desde los monumentos de Washington a las ruinas del Foro romano, o desde los rascacielos de Manhattan a las playas de Tenerife. Todo ello, en busca de una utopía que quizás nunca llegue a alcanzar... Déjate seducir por los giros de esta fascinante historia hasta desembocar en el sorprendente final de la trilogía "Juego de identidades", una saga de acción trepidante donde no falta ninguno de los ingredientes que fascinarán a los amantes del género.
Consigue destacar en Amazon: Marketing para escritores
A mediados del 2011 di los primeros pasos en mi proyecto digital. Sin apenas conocimiento sobre Amazon y el funcionamiento de su plataforma KDP, me adentré sin miramientos en el mundo de la publicación en ebook. Una aventura arriesgada en aquella época, apasionante y enriquecedora, que me ha brindado grandes alegrías a lo largo de un proceso en el que he contado con el apoyo de los lectores.
Hoy, más de tres años después, puedo decir que aquella decisión fue la más acertada. Mis obras han llegado al gran público; he publicado una de mis novelas con una gran editorial española gracias al éxito en la Red y una editorial americana ha traducido al inglés y lanzado otra de mis obras en el mercado anglosajón; he alcanzado el Número 1 global de todas las categorías en Amazon España y varias de mis obras han ocupado los puestos destacados de ventas en español dentro de las Tiendas Kindle de Alemania, Francia, Italia, reino Unido, Canadá o Brasil, entre otros importantes hitos. Y miles de lectores en todo el mundo han disfrutado con la lectura de mis libros, algo que nunca hubiera imaginado antes de comenzar en la literatura.
Todas esas experiencias vitales en las que me he visto involucrado aparecerán en esta obra. No se tratará de una biografía, ni de un libro de autoayuda. Pero sí un libro donde reflejaré ese aprendizaje continuo, a base de ensayo, prueba y error, buscando ese sueño que también vosotros podréis alcanzar. Una obra con la que pretendo entretener al posible lector al narrar mis andanzas literarias, ahondando también en el proceso creativo de mis novelas, pero también ayudar a todos esos autores que quizás se encuentren en alguna situación de la que no sepan salir en estos momentos.
Hablaremos de la importancia de las Redes Sociales, y de la utilización de distintas herramientas para mejorar nuestras estrategias de venta. Aplicaremos el marketing online para orientar el plan de acción necesario que nos ayudará a cumplir nuestros objetivos. Trataremos del marketing para escritores, enfocado sobre todo a la publicación digital en las distintas plataformas de ebooks como Amazon. Aunque también desarrollaremos convenientemente el camino tradicional de publicación en papel, explicando el funcionamiento del mercado editorial y la manera de adentrarnos en él del mejor modo posible.
Por supuesto, veremos los distintos formatos electrónicos de ebooks, entrando en detalle en el TOC, los metadatos y otros términos importantes en el ámbito digital. Incluiremos además casos prácticos, experiencias, consejos e información de primera mano que os servirán para conocer mucho mejor un mundo aparentemente cerrado. Incluso nos introduciremos en el corazón de Amazon, desentrañando su complejo algoritmo de un modo que nos permita focalizar nuestros esfuerzos, mejorando los puntos fuertes y minimizando los débiles, de ese proyecto literario que queremos llevar al éxito.
Nota: el texto incluye hipervínculos con enlaces externos a diferentes páginas de Internet para una mayor experiencia interactiva.
Cantabria, finales del siglo XIX. Tras la inesperada muerte del cabeza de familia de los Abascal, su viuda e hijos deberán sacar adelante una pequeña posada de viajeros, en el corazón de la villa marinera de Suances. La llegada de Declan Mclister, un irlandés errante que ha pasado sus últimos años en Cuba, trastocará la vida de la familia Abascal al completo, sobre todo la de las dos hijas solteras, María y Amaya. Rencillas, celos y malentendidos entre las hermanas se sucederán en el interior de un hogar cuya tranquilidad ha terminado para siempre. Pero los verdaderos problemas en comenzarán cuando, sin querer los habitantes de Casa Abascal se vean involucrados en una compleja conspiración política. Romance, aventuras e intrigas son los ingredientes principales de esta deliciosa novela de Armando Rodera.
Susan Mckennan atraviesa una dulce etapa en su vida, tanto personal como profesionalmente, aunque las desavenencias con su familia le impiden disfrutar de ese buen momento. Decide entonces ir a la casa familiar para intentar arreglar esos problemas, pero el destino le juega una mala pasada. En el camino se detiene un momento a sacar dinero de un cajero y entonces es atacada por un delincuente, que la dispara y deja malherida en medio de la calle. Susan es trasladada de urgencia al hospital y operada para salvar su vida, pero los médicos no pueden impedir que caiga en coma. Días después, aunque para el resto del mundo continué en esa situación, Susan se percata de que su organismo se encuentra en un estado intermedio entre la conciencia y el coma. No puede hablar, ver ni moverse, pero el resto de sus sentidos se han agudizado al máximo, siendo consciente de todo lo que ocurre a su alrededor. En esas circunstancias conocerá de primera mano las disputas entre miembros de su familia o las conversaciones entre el personal médico. La angustiosa situación que vive la protagonista empeorará al conocer que ella es la única testigo de un hecho crucial, motivo por el cual ha sido tiroteada. Susan deberá esforzarse para recuperarse del coma, ya que tanto ella como su pareja están en peligro. Oscuros intereses se mueven detrás de estos sucesos y Susan es la única que puede impedir el fatal desenlace. Se verá entonces abocada a una lucha cruenta contra su propio organismo y la maldad personificada de sus enemigos si quiere seguir viviendo. 'La rebeldía del alma' es una novela diferente: un intrigante drama con dosis de suspense que incluye una historia de amor poco convencional y una trama negra como leiv motiv de toda la obra.
Historia de una amistad. Alejandro Aguado y José de San Martín es la biografía del ilustre y gran desconocido sevillano Alejandro Aguado y su íntima relación con José de San Martín. Un centenar de personajes españoles, criollos y franceses, desfilan con sus grandezas y sus miserias, sus ilusiones y sus miedos, por el escenario del Cádiz ultramarino, la Sevilla señorial, el Madrid cortesano y el París fastuoso de la primera mitad del siglo xix, las intrigas políticas, las finanzas, la corrupción, el mundo de la ópera, las fiestas en los palacios a orillas del Sena y las cabalgadas por los bosques de Senart y Grossouvre.
¿Cómo piensa el nuevo Pontífice?. ¿Qué opina el Papa Francisco del sufrimiento, la pobreza o la esclavitud? ¿Cómo reza y qué le pide a Dios? ¿Qué es la fe para el Pontífice? ¿Cuál es la Nueva Evangelización de la que tanto habla en sus homilías? ¿Qué ha escrito el sucesor de San Pedro sobre la esperanza y la misericordia de Dios? ¿Qué consejos ofrece a los jóvenes para que aprendan a soñar? Todas estas cuestiones y muchas más se responden en este libro de la mano de las reflexiones y escritos del propio Papa Francisco. Un libro definitivo para comprender sus pensamientos e inquietudes más profundas.
¿Te has parado a pensar alguna vez el por qué de la buena o mala suerte? Seguro que sí. La Física y las Matemáticas están presente hasta en lo mas cotidiano de nuestros días.
¿Te imaginas que pasaría si alguna compañía con suficientes recursos tecnológicos y científicos descifrara la manera de tener cierto control sobre ello?
Nuestra protagonista parece haber sido la elegida para luchar contra una poderosa multinacional especializada en algoritmos y para algunas cosas mas. Entre sospechas y celos luchará contra todo, incluso contra los propios algoritmos donde el eterno reto de la ciencia, la moral e incluso la religión está servido…
El destino de la humanidad depende de ello.
La poesía de Tejada Gómez parece surgir como torrente de la propia tierra. Tiene un profundo contenido del que trasciende su preocupación por el hombre y sus problemas. Ha sabido trasladar a una poesía de riqueza lírica excepcional, de alto valor estético, el dolor de los seres humanos, los sucesos de su diario vivir, el régimen social que los golpea inmisericorde. Sin duda, Tejada Gómez es uno de los grandes poetas argentinos. Se comprende que Pablo Neruda, cuando leyó Ahí va Lucas Romero, sin conocer al autor dijera: «Me parece un documento de belleza y contenido excepcional». También Ezequiel Martínez Estrada, con motivo de la primera edición de Los compadres del horizonte, expresó en esta frase el concepto que le mereciera el libro: «Lo guardaré como una verdadera obra maestra». La luna había muerto en los últimos grillos, acaso apuñaleada por el canto del gallo, dormía bajo tierra con el vientre luciérnaga, velada por el rito terrestre de los sapos.
Tejada Gómez cambio en su manera de escribir debido a un comentario crítico de su hermano, obrero de la construcción, que le mencionó que sus compañeros de trabajo decían que «escribía cosas que nadie entendía». El comentario influyó notablemente en él, quien decidió entonces orientar su poesía hacia la problemática social y los temas populares. Uno de los primeros poemas de esta nueva etapa fue su conocido poema «Hay un niño en la calle». El poema fue incluido en su tercer libro, Antología de Juan. A esta hora exactamente hay un niño en la calle. [...] y saber que a esta hora mi madre está esperando, quiero decir, la madre del niño innumerable que sale y nos pregunta con su rostro de madre: qué han hecho de la vida, dónde pondré la sangre, qué haré con mi semilla si hay un niño en la calle.
«… Todas las voces todas, todas las manos todas pueden ser canción en el viento…» el himno de la unidad de los pueblos al decir de muchos fue Canción con todos. Encuentros, creaciones conjuntas, viajes, peñas, ponencias como aquella de Armando Tejada Gómez en el Foro de la nueva canción en México cuando dice «la canción nace de la entraña de sus pueblos… cabe la flor y el cataclismo».
El nuevo Cancionero gestado en Mendoza juntó artistas de más de 20 idiomas, extendió su canto por Latinoamérica, despertó voces con los sentires propios de otros lugares y dio lugar a las nuevas generaciones en los escenarios. Enseñó de lado a lado. «Preocupate por los contemporáneos» diría Mercedes Sosa. El Movimiento pasó las fronteras de los géneros musicales y Mercedes Sosa llevó el compromiso social a los escenarios del mundo. «Fue la encarnación del nuevo cancionero», como dice el periodista Rodolfo Braceli.
En 1974, Armando Tejada Gómez escribió un cancionero folklórico titulado Canto popular de las comidas. Allí reflexionaba acerca de la íntima relación que existe entre las comidas y la vida del hombre y de los pueblos. El libro obtuvo el premio de poesía Casa de las Américas y más tarde Tejada Gómez estrenó, junto con el Dúo Salteño, un espectáculo en el que alternaba textos del Canto popular... con canciones musicalizadas por el salteño Gustavo «Cuchi» Leguizamón. Canto popular de las comidas se divide en dos partes. La primera repasa el lugar histórico de las comidas desde la época precolombina, pasando por la conquista, la colonización, el surgimiento de la nación y las luchas de liberación; después de un preludio en el que revisa los grandes textos sagrados y poéticos del pasado. Así, la comida es una parte sustancial de la herencia cultural latinoamericana. En la segunda parte del libro, más fragmentada, la comida y los alimentos (o la ausencia de ellos) aparecen íntimamente relacionados con la situación social argentina y latinoamericana.
«Dios era olvido» es la primera novela de ARMANDO TEJADA GÓMEZ escritor y poeta nacido en Mendoza, cuya vasta obra literaria se ha encauzado hasta hoy por los camino» de la poesía y de la canción popular. En la primera linea destaca su «Canto popular de las comidas», galardonado con el primar premio de poesía de CASA DE LAS AMÉRICAS. de La Habana, en 1974 Como folklorista fundó en 1963 el movimiento «Nuevo Cancionero» que dio origen a la nueva canción argentina. Sus composiciones las cantan los más egregios representantes del folklore sudamericano. En la novela «Dios era olvido», premio VILLA DE BILBAO 1978, desarrolla una estremecedora historia sobre el origen social de la violencia, en un medio primario y sobrecogedor como es la vida de los marginados que habitan las «Villas Miseria» de Argentina. A través de un lenguaje de riquísima originalidad plantea una inquietante interrogación sobre que es la realidad en realidad: los seres vivos y palpitantes de la narración hacen brillar de vez en cuando el amor, la ternura y la alegría de vivir, como diamantes brutales en medio de la ciénaga que los circunda. La novela ofrece además otro fenómeno tan inquietante como su trama el ensanchamiento continental del idioma castellano hasta el límite de crear un idioma dentro del propio idioma.
De un modo pertinaz y casi inexplicable, este libro, cuya primer versión tomó forma allá por 1960, nunca fue publicado. Algunos poemas sueltos han circulado en revistas y alguna que otra antología de magra difusión como casi todas ellas. Ahora mismo no sabría explicar por qué no lo di a editar. Acaso sea debido a una reserva interior de hacer pública cierta intimidad de estos sentimientos y sensaciones tan personales y recónditas.
Armando Tejada Gómez nació en Mendoza en 1929. Había cumplido sólo 23 años cuando dio a conocer su primer libro, Pachamama, que obtuvo el 2.o premio en el concurso literario municipal de su ciudad natal. A partir de ese momento trabajó con intensidad y publicó Tonadas de la piel (1956), que mereció el premio instituido por el editor Gildo D’ Accurzio, Antología de Juan (1958) con dibujos de Carlos Alonso, del cual acaba de darse a conocer la segunda edición, Los compadres del horizonte (1961), que logró la primer recomendación del jurado en el segundo concurso literario auspiciado por la Casa de las Américas, de Cuba, y en 1963 Ahí va Lucas Romero, que alcanza ahora la tercera edición. Tiene además varios libros inéditos. La poesía de Tejada Gómez parece surgir como torrente de la propia tierra. Tiene un profundo contenido del que trasciende su preocupación por el hombre y sus problemas. Ha sabido trasladar a una poesía de riqueza lírica excepcional, de alto valor estético, el dolor de los seres humanos, los sucesos de su diario vivir, el régimen social que los golpea inmisericorde. Sin duda, Tejada Gómez es uno de los grandes poetas argentinos. Se comprende que Pablo Neruda, cuando leyó Ahí va Lucas Romero, sin conocer al autor dijera: «Me parece un documento de belleza y contenido excepcional». También Ezequiel Martínez Estrada, con motivo de la primera edición de Los compadres del horizonte, expresó en esta frase el concepto que le mereciera el libro: «Lo guardaré como una verdadera obra maestra».
«Sin memoria no se puede escribir», dijo Ernest Hemingway poco tiempo antes de su muerte. Pero no se refería exclusivamente a la memoria que almacena los conocimientos adquiridos sino también, y especialmente, a la memoria de los ancestros, aquella yacente en los meandros y recovecos de la subconciencia, así como a la más combatida por los poderes dominantes: la memoria popular. A todas estas memorias, que en su conjunto constituyen La Memoria, rescata Armando Tejada Gómez en Los Telares de Sol, último libro —es de presumir que inconcluso— que ahora se edita después de su reciente fallecimiento. Allí transcurren las tragedias y los sucesos de la conquista y avasallamiento de América de una manera, diría, mágica. Rescata voces, palabras, todo un pensamiento cosmogónico del aborigen, elementos que han quedado aprisionados, apretados contra el horizonte o en el último recodo de la memoria ancestral. Creencias, mitos hasta lo profundo del pensamiento religioso, punto de partida de la vida social de los distintos asentamientos tribales americanos. Es mucha y muy densa la obra de Armando Tejada Gómez donde nada sale de contexto: todo tiene una unidad monolítica. Como siempre ha sido en la historia del arte, en la tarea de los grandes creadores. Los Telares del Sol es un libro que se inscribe en las más altas cumbres de la poesía americana, llega, duele, conduele, lucha y enciende una esperanza en este dolido continente o, si se prefiere, en este desmantelado subcontinente. Hamlet Lima Quintana
«Como el cantor no tiene otra biografía que su canción, esta selección de mis poemas y mis libros, son mi breve historia. Es que la poesía no se hace con esto ni con aquello sino con toda la vida. Así pues, hay aquí, fragmentados, los ocho principales libros que he escrito. Falta uno: Creciente Cuba que es imposible fragmentar y cuya extensión lo obliga a esperar su propia edición. No es que yo piense que los poemas escogidos de cada libro sean los mejores. Es que había necesidad de no abultar más este libro. Nada de lo que escribí niego. Por el contrario, asumo una por una todas las palabras adonde fui dejando el júbilo y la furia, el testimonio áspero y caliente de ser poeta desde el carozo mismo de mi Patria y América».Armando Tejada Gómez, Argentina, 1968.
«… Todas las voces todas, todas las manos todas pueden ser canción en el viento…» el himno de la unidad de los pueblos al decir de muchos fue «Canción con todos». Encuentros, creaciones conjuntas, viajes, peñas, ponencias como aquella de Armando Tejada Gómez en el Foro de la nueva canción en México cuando dice «la canción nace de la entraña de sus pueblos… cabe la flor y el cataclismo». El nuevo Cancionero gestado en Mendoza juntó artistas de más de 20 idiomas, extendió su canto por Latinoamérica, despertó voces con los sentires propios de otros lugares y dio lugar a las nuevas generaciones en los escenarios. Enseñó de lado a lado. «Preocupate por los contemporáneos» diría Mercedes Sosa. El Movimiento pasó las fronteras de los géneros musicales y Mercedes Sosa llevó el compromiso social a los escenarios del mundo. «Fue la encarnación del nuevo cancionero», como dice el periodista Rodolfo Braceli.
Lecturas entretenidas en pequeñas dosis. Una modesta oferta de cien narraciones más o menos brevísimas es lo que podrás encontrar, amigo lector, en este libro de cuentos para adultos (en realidad, para niños grandes de cualquier edad). Esperar el autobús, o todo tipo de espera, a menudo resulta un fastidio. Una buena solución puede ser la historia de la terrible chanza que la señora de Chateauduprée ideó para burlarse de sus dos locos amantes, o el relato de la euforia desmedida del sabio que descubrió una fórmula matemática para demostrar la existencia de Dios.
«Un Vietnam invisible y silencioso»: así definía Allende a su país, poco antes del golpe de septiembre de 1973. Con esta afirmación evocaba las múltiples agresiones de los Estados Unidos contra su gobierno, directas o no, a través de sus aliados internos o de sociedades multinacionales como la ITT, de organismos bancarios norteamericanos o internacionales, tanto en el plano económico como en el financiero y diplomático. Armando Uribe, antiguo ministro consejero de la embajada chilena en Washington y ex embajador en Pekín, quien intervino directamente en los acontecimientos que describe, puntualiza con documentos de primera mano las intervenciones directas de los Estados Unidos en los asuntos internos, la venta de armas y adiestramiento de las Fuerzas Armadas, los ardides subversivos de los servicios especiales: todo aquello destinado a hacer caer a cualquier precio el gobierno de la Unidad Popular que Chile se había dado democráticamente. Los documentos secretos aquí publicados —empezando por el resumen del plan del Pentágono que sirvió para la preparación del golpe por parte de los Estados Unidos— emanan de archivos chilenos conservados por el autor.
Este libro empieza con la muerte largamente y termina con el vino en breve. Pasa por la poesía; y por la rabia y el odio con gusto. Se llama precisamente «Odio lo que odio, rabio como rabio.» Hay cosa escrita en 1948. Las hay de 1997. El simple paso del tiempo. Complicado.
Armando Valladares nació en 1937. Tras ser detenido, pasó veintidós años en las cárceles políticas de Castro. Siendo funcionario del Gobierno revolucionario cubano se opuso al control del poder por parte de los sectores marxistas. Su rechazo a los planes de rehabilitación política, así como el mantenimiento de sus convicciones frente a la represión desatarían sobre él represalias brutales, palizas, torturas y confinamiento. Valladares es uno de los supervivientes de los trabajos forzados en Isla de Pinos; allí vio asesinar a muchos de sus compañeros. La campaña mundial por su liberación en la que participaron Amnistía Internacional, los ´PEN CLUBS´, gobiernos e intelectuales, culminó con la petición del presidente francés Mitterrand a Castro, y fue liberado en octubre de 1982. Armando Valladares ha escrito tres libros: Desde mi silla de ruedas, El corazón con que vivo y Cavernas del Silencio.
Un delirante, divertidísimo (y no poco salvajemente escatológico) relato de Armiados Güeva-Vil, trasunto y sombra de Armando Vega Gil, bajista del legendario grupo mexicano de guacarock, Botellita de Jerez. Diario Íntimo de un Guacarroquér es un desbocado descenso a los infiernos más terribles y asquerosos, pero también más divertidos, de la Ciudad de México. Antros abyectos, congales, morgues, hoyos funkis apestosísimos y resumantes de sudor, Almoloya de Juárez; ningún lugar es demasiado espantoso como para que el botellita de jerez Vega-Gil le haga el feo. Incluye ahora un flamante capítulo nuevo, por iguales partes desternillante y horroroso, este aullido desesperado, hiriente, graciosísimo de Vega-Gil nos recuerda que el Distrito Federal, esta ciudad hermosa, monstruosa, nos está matando lentamente a todos.
Escúchame, Emi. Yo soy el que entrega las cartas desde el futuro, cuarenta años adelante. Soy el cartero y también soy el que responde. Soy el que está al otro lado en la estación de las ferrovías que se bifurcan. Soy quien sigue la ruta a la izquierda. Jim Morrison, el Rey Lagarto, es encontrado muerto, y este hecho es el detonante para que un joven escriba cartas a su yo del futuro, quien se ha convertido en todo lo que él detesta, y responde desde su propia realidad. Emi es un adolescente que poco a poco se descubre a sí mismo en un México marcado por las cicatrices de la matanza del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco y el Jueves de Corpus, en 1971. La música, el primer amor y la sabiduría de un abuelo que se transforma en chamán para establecer un vínculo en el tiempo son la pauta para comenzar una travesía por la memoria.
«¿Será que, igual que el amor, cada cuerpo tiene su fecha de caducidad?»Natalia ama el amor por sobre todas las cosas, Mateo jamás se enamora (dice) y Ágata… ama a los dos, tanto o más que los dos, a su vez, la aman y se aman. ¿Es esto algo inusitado o algo normal? ¿Deseable o terrible? ¿Podría ser el Paraíso?Los protagonistas de esta novela escrita a seis manos se profesan amor honesto, sincero, total a pesar de todo o quizás precisamente por eso. Natalia toca su violín (o violina, mejor) y vive por y en la música; Ágata vibra al son del pulso vital de su país aunque vive al otro lado de la frontera norte; Mateo tiene eso que solemos llamar “una vida hecha” y se dedica a combatir tumores con rayos equis de alta energía. El misterioso azar que los unió podría serles propicio, sólo que, y lo saben, tienen mucho en contra: prejuicios sociales, historias personales, lazos conyugales… Y un mundo infame: en tanto los tres buscan el amor, la verdad, lo dulce, en la vida cotidiana la impunidad es cada vez más descarada y el Estado es evidente culpable de crímenes atroces, como la desaparición de 43 jóvenes.Amor, fe, dignidad, honradez: ¿de veras tiene todo esto fecha de caducidad? Natalia, Ágata y Mateo saben que no.
Para mí, todo comenzó con una fatalidad como ninguna otra que yo recuerde de mi infancia. Ocurrió en el dormitorio que yo compartía con mis dos hermanos. Tengo la idea de que todo sucedió en la noche, pero en realidad no recuerdo qué hora aproximada era, porque la puerta de la habitación estaba cerrada, y la ventana no aparece en este recuerdo. Aunque las paredes del dormitorio eran blancas, recuerdo todo como en un reducido espacio gris, iluminado con una luz débil color ámbar. Era una habitación muy pequeña, con los muebles todos juntos y pegados a lo largo de todos los muros. Así que el espacio libre para andar se reducía a un pasillo de dos metros, y al hueco para abrir la puerta. Y allí estábamos metidos cuatro personas: Jeff, Frank, Maryann, y yo.
Recuerdo que estábamos ahí, y que estaba ocurriendo una gran pelea; la pelea más dispareja, cruel y definitiva de que tengo memoria. Todo era gritos y amenazas, violencia y pánico. Recuerdo que Maryann estaba como poseída. La vi desde primera fila. Sus gestos eran como los de una bestia furiosa. Sus párpados estaban todos abiertos, y sus ojos se empujaban hacia afuera. Estaban rojos y violentos. Mostraba los dientes completos, y rugía y aullaba. Su aliento olía a ácido. Y también estaba rígida por la fuerza que concentraba en los músculos de sus extremidades y en su columna vertebral. Se notaba que todo su combustible iba a sus brazos y a sus piernas, para atacar. Tenía los puños cerrados y apretados, muy apretados. Sus venas marcadas palpitaban debajo de la piel estirada de sus nudillos. Apretaba tanto los puños, que se clavaba las duras y largas uñas en las palmas, pero no se dolía, o no se daba cuenta. Concentraba allí toda su fuerza y su horrorosa ira. Era como un lobo alfa frente a una amenaza, mostrando sus afilados dientes, con su saliva caliente y espumosa derramándose sobre sus belfos. Recuerdo que Jeff y yo estábamos parados juntos, y que constantemente Maryann volteaba sobre su hombro izquierdo y nos miraba, y que con esa mirada de animal nos decía que permaneciéramos quietos, porque era lo que más nos convenía. Estábamos tiesos de pánico. Pero lo que estábamos sintiendo Jeff y yo, no era mayor que lo que estaba sintiendo mi hermano Frank, porque era él quien estaba en verdadero peligro. Frank estaba acorralado en el hueco para abrir la puerta. Él estaba allí, sin algo a favor, en absoluta desventaja, berreando de pánico. Yo quería sentir el impulso necesario para hacer algo por Frank, para ayudarlo, pero no podía dejar de estar tieso de pánico, y tampoco Jeff. Frank estaba solo. Recuerdo que hubo un momento en el que Frank hizo un movimiento repentino de piernas y cadera. Quiso aprovechar un hueco por el que creyó poder escapar, pero no pudo, y retrocedió de nuevo. Frank estaba cubierto. Creo que, quizá, fue en ese momento cuando entendió que no tenía opciones ni posibilidades reales para salir de aquello, porqué su siguiente movimiento fue jugar su última carta. Si Frank iba a terminar acabado, se entregaría a eso, pero no sin antes hacer el mayor daño posible. Entonces lo vi erguirse. De alguna manera, Frank se creció y estiró su pequeño esqueleto. Lo vi estirarse tanto como le fue posible, adoptando una postura ofensiva, una de combate. Sus ojos estaban hinchados por tanto llorar, pero con su última energía logro encenderlos y fijarlos sobre la mirada de su atacante, tan cerca y tan directo como pudo. Todos supimos que iba a ocurrir algo muy grande, porque por menos no se puede lograr una metamorfosis tan radical. El tiempo final tiene su propio olor. La amenaza inesperada también. Así que había que contenerlo. Entonces Frank recibió más golpes, uno tras otro, para ser contenido. Pero era demasiado tarde. El dolor ya no existía en él, se había ido. Y si se va el dolor, se va el miedo...
Lo que un hombre que creció el único varón en una familia llena de mujeres, probablemente ha escrito uno de los mejores (si no el mejor) libros sobre las citas para personas solteras, y sin duda, para solo damas buscando para encontrar el derecho mate? Así, el libro Armani Valentino, 99 preguntas usted debe preguntar a un hombre antes de irme a dormir con él y sin duda antes de tener relaciones sexuales, podría ser ese libro.
Es una práctica guía recta hacia adelante que se dejan al lector ilustrado en todos los niveles. El libro cubre todas las áreas de lo que podría venir para arriba en una relación. Gran Boom, Steve Harvey el mejor amigo y guardaespaldas, autor de best-sellers y el auto-proclamado "guardaespaldas de la Mujer de corazón's", dice, "Armani está justo en el punto. Su generación y otros necesitan este libro." Armani Valentino cree que su libro es una gran herramienta para aquellos que desean estar en una relación y para los que ya están involucrados. Él dice, "La mayoría del tiempo, las personas realmente no saben qué preguntar. Muchas personas quieren evitar hacer preguntas por temor a descubrir algo que no quieren saber. La parte triste de esta situación es, STD's están a la alza. Incluso si no contraen una ETS, puede participar en una canasta total que usted pudiera ser objeto de abuso emocional y físicamente. Estas cosas junto con tantas otras posibilidades por lo general se deben a que no lo suficiente del derecho preguntas antes de que te emociones y vida sexual." Algunas mujeres sienten que el hombre se acuesta a su antojo. Por lo tanto, Sr. Valentino ha incluido el capítulo "El arte de hacer preguntas." Este capítulo le enseña cómo convertirse en un experto entrevista . Las empresas de la lista Fortune 500 utiliza este proceso para elegir a los mejores candidatos. Armani considera que las mujeres deben tratar por sí mismos como si fueran empresas de Fortune 500.
Bajo el disfraz de una delirante sátira política, 'Viaje a Virgenia' es un revolucionario proyecto literario marcado por un estilo vibrante, gran amplitud temática y hondo aliento humano. El protagonista, un arisco e hipercerebral antihéroe autodenominado Can, busca su propio lugar bajo el sol a través de los cambios de paradigma culturales de nuestra época. Su odisea le llevará a una 'zona cero' espiritual conocida como Virgenia. Allí, Can descubre un antiguo calendario cósmico, desencadenando una serie de conflictos que desembocarán en una epifánica transformación social y espiritual. La crítica radical de Can, satírica y erudita, aborda algunos de los principales retos de la humanidad: la arrogancia del Estado y la Religión organizada; la persistencia del fanatismo, la xenofobia y el darwinismo social; la doble moral sexual; la fracasada propaganda patriótica; el hipercapitalismo, etc. Can persigue respuestas a través de una apasionante búsqueda de la identidad.
En el Berlín de 1865 una mujer es asesinada de manera brutal. Julius Bentheim, un joven estudiante de Derecho que, gracias a su talento como dibujante, gana algo de dinero realizando bocetos de escenas de crímenes, colabora con la investigación. Todos los indicios apuntan a la culpabilidad del excéntrico profesor de filosofía Botho Goltz, empezando por su propia confesión de los hechos. Sin embargo, cuando el presunto asesino es finalmente llevado ante la justicia, hará gala de una astucia tan maquiavélica —no hay arma homicida, no hay móvil y la policía incluso ha hecho desaparecer sin saberlo algunas de las pruebas— que acabaremos preguntándonos si Goltz pagará por su sórdido crimen o si conseguirá justificar ante todos su inocencia.
Es esta una soberbia novela de detectives en la que escuchamos ecos del mejor Balzac, de Dickens, de Zola, y que crea una suerte de espejo en el que se refleja lo más oscuro del Berlín decimonónico y de la condición humana.
Prusia, Año Nuevo de 1865. El barón Valentin von Falkenhayn ha organizado una grandiosa celebración en su palacio urbano. Allí tiene lugar una sesión de espiritismo a la que asisten trece individuos, y que se revelará mortal. El terror se apodera de la región desde esa misma noche, cuando el farmacéutico de la localidad, participante en el encuentro, aparece aplastado por lo que se describe como el atroz sonido de unos cascos de caballo. La prensa de Berlín se hace eco de la noticia: trece fueron los invitados a la reunión y trece es el número perfecto para que todos comiencen a hablar de una maldición en la zona. En contra de la opinión pública, el joven estudiante de leyes Albrecht Krosick pasa a la acción y funda «el Gabinete de los Ocultistas», que también constará, adrede, de trece miembros. Pero las muertes no cesan, y su gran amigo Julius Bentheim, dibujante para la policía y detective aficionado —a quien ya conocimos en «La musa oscura»—, tendrá que enfrentarse al caso y a sus propios fantasmas.
Gabriel Noone es un escritor de culto, guionista de un programa de radio nocturno que le ha abierto la puerta de millones de hogares gracias a la fuerza de sus historias urbanas. Noone se encuentra en un penoso proceso de separación de su pareja, cuando su editor le envía el impactante manuscrito autobiográfico de Pete Lomax, un niño enfermo que ha sufrido terribles abusos. Pete vive con su madre adoptiva y es además un fiel oyente del programa de Noone. Cuando Noone le telefonea para infundirle ánimos, Pete ve en él la imagen del padre que siempre quiso tener. Pronto se entabla entre ellos una amistad muy especial -por teléfono, pues nunca se han visto-, mientras la salud del muchacho se va deteriorando poco a poco y Noone le confía sus sentimientos más profundos. Esa peculiar relación, que se desarrolla en un marco de misterio en el que se entremezclan la verdad y la ilusión, lleva a Noone a replantearse todas sus relaciones -familiar, romántica y erótica-, alterando para siempre su percepción de sí mismo y de su vida.
Tony Guarino creció en el duro mundo del bar y la sala de billar, donde cada gangster era un héroe y cada policía un enemigo. Sólo los duros lo lograron. Cuando tenía sólo dieciocho años, mató a Al Spingola, jefe de pandillas y asesino despiadado, y fue catapultado a la notoriedad y la fama, pero eso fue sólo el comienzo de su ascenso al poder.
Hija de un padre anarquista y una madre católica, la escritora Armonía Somers (1914-1994) es una de las propuestas más estimulantes del siglo XX literario en Latinoamérica. Una escritura que se expande y se libera de ataduras para subvertir las tradiciones, desmoronar mitos, fracturar estereotipos, trascender los recursos expresivos o explorar una imaginación sin límites. Una narrativa en la que aflora siempre el coraje para cuestionar prejuicios sobre la homosexualidad, el aborto, la violencia de género, las maternidades, la identidad y la fe. Una escritura que no requiere más explicación: «El cuento, y también la novela deben llegar vírgenes al lector. A quien no capte hay que dejarlo en su penumbra mental. Yo tengo muchos de esos con la candileja a media luz».
Prologado por la especialista María Cristina Dalmagro, el presente volumen reúne su narrativa breve completa constituida por El derrumbamiento (1953), La calle del viento norte y otros cuentos (1963), Todos los cuentos (1967), Muerte por alacrán (1978), Tríptico darwiniano (1982), La rebelión de la flor (1988) y El hacedor de girasoles (1994). Como bonus track una miscelánea de diversos textos que profundizan en la reflexión y el análisis de la escritora sobre las luces y las sombras de su escritura y su lectura, destacando la inclusión del inédito guion cinematográfico de su reconocido cuento Muerte por alacrán.
Publicada inicialmente con seudónimo en 1950, La mujer desnuda causó escándalo sin precedentes en el ámbito de la literatura uruguaya, no sólo por su audaz contenido sexual sino además por el misterio de la identidad del autor. La obra llegó al gran público recién en 1966, cuando la editorial Tauro publicó la tercera edición y cuando Armonía Somers ya había publicado dos colecciones de cuentos -El derrumbamiento y La calle del viento norte-, así como su segunda novela, De miedo en miedo (Los manuscritos del río). Escritora de inusual intensidad, con una riqueza de estilo igualmente notoria, su obra ha sido emparentada con la de los grandes narradores uruguayos del siglo XX, Juan Carlos Onetti, Felisberto Hernández y Mario Levrero, y con autoras como Clarice Lispector y Marosa di Giorgio.
Un hombre de Entre Ríos se sienta en la abadía de Solesmes y atiende con los ojos el sonido del gregoriano. Ese murmullo desata ramalazos de memorias que se exilian en sus oídos. El poeta trabaja su poema –autobiográfico, narrativo– con las distancias y los tiempos. Entre la prehistoria, la edad dorada de Entre Ríos y la Edad Media, una imaginación mítica se extiende en planos simultáneos, en una cuarta dimensión de horizontes plurales que indaga el presente.
El peligro del amor es que se puede transformar en amistad; el peligro del sexo es que te puedes enamorar. Amor es prosa, sexo es poesíareúne las mejores crónicas afectivas de Arnaldo Jabor. Aclamado director de cine, autor de algunos de los best sellers más sonados en Brasil, periodista que escribe con el corazón, Arnaldo Jabor es un feliz descubrimiento para los lectores españoles. Con una inusual capacidad evocadora, y provocadora, Jabor recorre en esta obra el territorio plagado de contradicciones del amor. Sin pudor, Arnaldo Jabor descubre su hambre de belleza en todo: en la vida, en la política, en el amor, en el sexo. Confiesa ternuras y envidias. Repite incansablemente: las mujeres desean al hombre inalcanzable, ¡las mujeres tienen debilidad por los canallas! Y así, Jabor, reconoce uno de sus mayores miedos: «Los abismos de las mujeres son venenosos, su secreto nos mata». Pero llega un momento en que todo héroe se deprime y siente que también necesita un ritual de encuentro. Es para ese hombre, y sobre todo para la mujer que tiene al lado, para quien Jabor escribe sus crónicas afectivas. Con la misma exuberancia que imprime a sus comentarios políticos escribe sobre nuestras obsesiones más íntimas: sexo y amor, familia, mujeres. Más que por el poder, él apuesta por el amor como una ilusión sin la cual no podemos vivir.
Una serie de asesinados inexplicables y la policía sin pistas... Un caso aparentemente sencillo, el homicidio de un estudiante de informática, se convierte en uno de los casos más difíciles para nuestro Comisario...
La extremidad norteña de Escocia presenta la estructura de un enorme puño tendido en actitud de amenaza hacia el mar. Son las llamadas Tierras Altas, poseedoras de un prestigio sostenido desde tiempos lejanos. Es la comarca que forja marineros que se gozan en luchar con salvaje complacencia contra el furioso embate de los elementos.En el símbolo de su configuración, los nudillos son su costa, occidental, inhóspita, sin habitantes ni puertos de abrigo, cortada por fiordos donde el mar, en permanente ebullición alborotada, imposibilita el acceso ni la salida.El dorso del puño lo traza la costa oriental en la que se jalonan los puertos y poblados conserveros, protegido por las anchurosas bahías de Dornoch y Cromarty.
En el punto máximo de su arqueo, la costa oriental de Panamá, antes de unirse por la serranía del Darién, con la tierra de Colombia, presenta un litoral bajo y pantanoso, donde pululan toda clase de insectos y reptiles, desde el irritante mosquito portador de fiebres, hasta el escamoso y repulsivo caimán. Era costa sin sanear e inhabitada por los años 1675 en que un jinete, internándose por el bajo cañaveral, penetraba en el fangoso limo que ribeteaba la margen del arroyo Concepción.El poblado más cercano era el de Santa Isabel, donde días antes el jinete había averiguado, entre otras cosas, que por la playa encenagada que mediaba entre los arroyos Concepción y San Blas merodeaba un extraño barquero.Un barquero a quien apodábase «Caronte», mote que le puso un marinero amante de lecturas mitológicas.
En el extremo más oriental de la isla cubana, frente al canal que la separa de La Hispaniola, la punta Maisí penetra en el mar como larga lanza. Era tierra que el dominio español desdeñó, por ser árida y azotada por todos los vientos, y ser mar revuelto por el continuo tránsito de naves corsarias.Con frecuencia llegaban a la punta Maisí, individuos de hosco aspecto, náufragos, desertores y huidos, con los que confraternizaban los escasos negros que allí vivían miserablemente, en chozas construidas con cañas y recias hojas.Uno de estos «bohíos», daba albergue a los que, procedentes de muy distintos lugares, iban allí a otear el paso de pinazas, queches y otras embarcaciones de poco calado, y con señales demostraban su deseo de hacerse enrolar.
En la embarcación de dos palos, diminuta en medio del verdoso paraje del mar Caribe, había seis hombres. Uno era un negro gigantesco, cuyos voluminosos bíceps abultaban tanto como una cabeza humana, alrededor de la cintura un largo látigo de los llamados «rompecabezas», y un taparrabos.El resto de su cuerpo brillaba como el ébano, reluciendo al ser salpicado por la vaporizada espuma de las crestas de las olas, entre las que la chalupa abríase fácilmente paso.Sostenía la empuñadura del timón de varas, y en la otra mano asía el obenque que tensaba la vela cangreja.Miraba de vez en cuando una balandra que se alejaba con rumbo opuesto, dando lentas cabezadas, idénticas a las que el negro iba ejecutando.Carlos Lezama, el «Pirata Negro», sentábase en la proa. También miraba empequeñecerse en la lejanía la balandra…
A fines del año 1693, las culebrinas que vigilaban la entrada al puerto de Panamá dispararon siete cañonazos consecutivos. En la Plaza Real se congregaron reuniones de asustados panameños, que, ignorantes de que los cañonazos eran de pólvora sin proyectil, creyeron al principio en una incursión de las temidas flotas corsarias. Pronto se aquietaron los ánimos cuando corrió la voz de que las salvas se debían a la llegada de la nave española que llevaba a bordo a la hija del Virrey gobernador. A lo lejos se divisaba ya la airosa silueta de una goleta que, con las velas desplegadas, surcaba el azulado mar. En el castillete de proa, una mujer, casi una niña, contemplaba extasiada el tropical paisaje, que con toda su esplendorosa vegetación iba aproximándose.
Una curiosa característica de esta colección, es que en ella se alternaban diferentes protagonistas. El principal El Pirata Negro, aunque también aparecieron posteriormente El Halcón, El Aguilucho y Diego Montes. En las portadas firmadas por Provensal, destacaba la gran calidad y colorido de las ilustraciones, y en las páginas interiores un par de dibujos en blanco y negro, ambientaban al lector ayudandole a imaginar con más facilidad las características de los personajes y a seguir la siempre dinámica narración.
Una curiosa característica de esta colección, es que en ella se alternaban diferentes protagonistas. El principal El Pirata Negro, aunque también aparecieron posteriormente El Halcón, El Aguilucho y Diego Montes. En las portadas firmadas por Provensal, destacaba la gran calidad y colorido de las ilustraciones, y en las páginas interiores un par de dibujos en blanco y negro, ambientaban al lector ayudandole a imaginar con más facilidad las características de los personajes y a seguir la siempre dinámica narración.
Una curiosa característica de esta colección, es que en ella se alternaban diferentes protagonistas. El principal El Pirata Negro, aunque también aparecieron posteriormente El Halcón, El Aguilucho y Diego Montes. En las portadas firmadas por Provensal, destacaba la gran calidad y colorido de las ilustraciones, y en las páginas interiores un par de dibujos en blanco y negro, ambientaban al lector ayudandole a imaginar con más facilidad las características de los personajes y a seguir la siempre dinámica narración.
Una curiosa característica de esta colección, es que en ella se alternaban diferentes protagonistas. El principal El Pirata Negro, aunque también aparecieron posteriormente El Halcón, El Aguilucho y Diego Montes. En las portadas firmadas por Provensal, destacaba la gran calidad y colorido de las ilustraciones, y en las páginas interiores un par de dibujos en blanco y negro, ambientaban al lector ayudandole a imaginar con más facilidad las características de los personajes y a seguir la siempre dinámica narración.
Se trata de Ricardo (Dick) Mendoza, también conocido como El Aguilucho, el hijo de un buhonero español que recorría la Huella del Dragón, una peligrosa ruta que partía de Ceylan, atravesaba la península indostánica y la tierra de los Lamas y contorneaba la muralla china; un extraño personaje a quien le son fieles un elefante salvaje, un tigre y un aguilucho. Por su facilidad en disfrazarse de personajes dispares, desde un derviche hasta un rajá, también le apodan «Cienrostros». Incansable conquistador, miente amores en muchas lenguas, es un acróbata saltarín de murallas, lanza puñales precisos en asaltos a harenes y presume de cortar cabezas de reyezuelos y apuñalar tiranos mongólicos.
Se trata de Ricardo (Dick) Mendoza, también conocido como El Aguilucho, el hijo de un buhonero español que recorría la Huella del Dragón, una peligrosa ruta que partía de Ceylán, atravesaba la península indostánica y la tierra de los Lamas y contorneaba la muralla china; un extraño personaje a quien le son fieles un elefante salvaje, un tigre y un aguilucho. Por su facilidad en disfrazarse de personajes dispares, desde un derviche hasta un rajá, también le apodan «Cienrostros». Incansable conquistador, miente amores en muchas lenguas, es un acróbata saltarín de murallas, lanza puñales precisos en asaltos a harenes y presume de cortar cabezas de reyezuelos y apuñalar tiranos mongólicos.
Se trata de Ricardo (Dick) Mendoza, también conocido como El Aguilucho, el hijo de un buhonero español que recorría la Huella del Dragón, una peligrosa ruta que partía de Ceylan, atravesaba la península indostánica y la tierra de los Lamas y contorneaba la muralla china; un extraño personaje a quien le son fieles un elefante salvaje, un tigre y un aguilucho. Por su facilidad en disfrazarse de personajes dispares, desde un derviche hasta un rajá, también le apodan «Cienrostros». Incansable conquistador, miente amores en muchas lenguas, es un acróbata saltarín de murallas, lanza puñales precisos en asaltos a harenes y presume de cortar cabezas de reyezuelos y apuñalar tiranos mongólicos.
En el Golfo de Bengala forma el Ganges al desembocar un gigantesco delta de numerosos brazos, por entre los que pululan en sus pantanosos barrizales, cocodrilos repulsivos en su adormilada espera de incauto manjar. Hay también espacios de floresta, donde las garzas, los marabuts, y otros grandes pájaros, coloreaban el horizonte con sus plumajes pintorescos.Y en los sitios más elevados, donde la linfa húmeda no ablanda la tierra, existían en las postrimerías del 1700, poblados de muy diversos ocupantes.
El Estado de Kentucky, famoso por sus magníficos caballos, fue el único de los estados del Mississippi, que en los turbulentos años de la Guerra de Secesión se mantuvo neutral. Al estallar el conflicto entre Norte y Sur, una proclama, apareció fijada en los postes de entrada y salida de cada ciudad del Kentucky. La misma proclama que aprobó el Parlamento del Norte y el Congreso del Sur. Estaba redactada en términos por igual ingenuos y prácticos en su elocuente concisión: «La buena gente de Kentucky, blanca y negra, es pacífica y laboriosa, y por convicción juran todos sus habitantes, blancos y negros, no tomar partido a favor ni en contra de ningún forastero, impetrando del Sumo Hacedor el amparo para todos los buenos americanos. Los negros de Kentucky quedan libres por esta proclama de marcharse al Sur o al Norte. Los que sigan en Kentucky, percibirán el mismo salario y albergue, que los plantadores, destiladores y caballerizos blancos. Y mientras duren las hostilidades en los demás Estados, el de Kentucky fumará su tabaco, beberá su whisky y montará sus caballos. Quien vendiera tabaco, whisky y caballos a cualquier forastero, será encarcelado. Y el forastero, que deseará fumar, beber o cabalgar los productos del pacífico y neutral Estado de Kentucky, fumará, beberá y cabalgará entre las fronteras de nuestro noble Estado. Así lo juramos y mantendremos.» Cuando los hermanos Dalton leyeron esta proclama, en su paseo dominical a la hermosa ciudad de Fairview, se limitaron a mirarse y asentir.
El látigo restalló crujiente, enlazando con habilidad el torso del negro atado al poste. Y aquel restallido que no produjo rebeldía en el negro que estaba interrogando el capataz, ni suscitó la menor protesta en los demás que junto al cobertizo presenciaban el interrogatorio, puesto que consideraban muy natural que el capataz blanco usara de su prerrogativa, produjo en Olimpia, el primer chispazo de un sentimiento nuevo, confuso… —Habla ya, negro retinto —masculló el capataz Forbes, retirando con brusco tirón, el enroscado cuero. En el desnudo busto de Toby apareció el surco sangriento. Mantuvo la vista fija en el único horizonte que durante dieciocho años viera Olimpia.
Sucios y cansados, todos ellos con cara de hambre, avanzaban como hormigueros azules que desfilaban hacia el sur, siempre hacia el sur, saliendo de los bosques, llenando los caminos, atravesando los campos. Llevaban días y días caminando incesantemente sobre las huellas de un enemigo que siempre conseguía librarse en contumaz retirada. En este avance forzado, los víveres de la intendencia llegaban tarde a los campamentos provisionales. En los cortos altos de la marcha, devoraban embutidos mohosos. Algunos se esparcían por los campos para desenterrar las remolachas, mascando su dura pulpa entre crujidos y granos de tierra. Los que estaban sentados en el suelo, extraían sus pies hinchados y sudorosos de las altas bota. Era el ejército yanqui del general Sherman, victorioso, que pronto llegaría a Atlanta la capital del estado de Georgia, almacén de provisiones de los sudistas. Y en aquel mes de febrero de 1805, no sabían los agotados portadores del uniforme azul, que mascaban remolachas, que con aquella marcha forzada, remataban triunfalmente una guerra cruel de cuatro largos años.
En 1865, ante el avance ya inconteniblemente victorioso del Norte, las tropas desmoralizadas y en pleno agotamiento de los sudistas, se batían en retirada desordenada. Huían también a la desbandada los muchos desertores yanquis, para evitarse un juicio sumario, que muchas de las veces terminaba en sentencia de horca. Tanto los desertores de un bando como del otro, lo primero que procuraban conseguir era ropa, arrancándose insignias, galones y distintivos. Los que tenían dinero las compraban. Los otros, que eran los más, las robaban, atacando granjas aisladas por parejas o grupos. Eran las granjas en el campo y las mansiones solitarias en las afueras de los poblados, sus predilectos sitios de rapiña, porque además de la ropa necesaria, podían encontrar alimentos, bebida, y lo más codiciado en aquella época: un caballo o un mulo.
«Diego Montes», de la que se publicaron un total de 10 novelas, escritas también bajo el pseudónimo de Arnaldo Visconti. La colección propiamente dicha de este personaje constaba de 6 números, publicados en formato mediano (20 x 15 cm), desde diciembre de 1946 a marzo de 1947, aproximadamente. Después, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro de la ya conocida «Colección RIS» (números 2, 6, 10 y 14), cuya acción es continuación de las seis anteriores. La publicidad —que aparecía en las contraportadas de otras colecciones de la misma editorial Bruguera, como podía ser El Pirata Negro— lo presentaba como «el descendiente de El Pirata Negro, cuyas hazañas son dignas de su antecesor. El patriota cien por cien que lucha contra los opresores y los invasores. ¡Un héroe español legítimo!». La acción tiene lugar en España, durante la Guerra de la Independencia, relatando la lucha de los españoles contra el invasor francés. Su escenario fue la serranía cordobesa —que Debrigode conocía perfectamente, al haber sido destinado a ella durante la guerra civil—. Allí, la rebelión la encabezaba Diego Montes, misterioso personaje que se escondía tras un pañuelo. Como dice la publicidad, y en contra de lo que por algún sitio se ha publicado, Diego Montes era efectivamente descendiente de El Pirata Negro. En la primera novela aparece Álvaro de Ferblanc y Lucientes, el padre de Diego Montes, lo que inmediatamente nos hacer ver que don Álvaro era hijo de Cheij Lezama y Gaby Lucientes, el hijo mayor de El Pirata Negro y la hija de Diego Lucientes, el inseparable amigo de El Pirata Negro. Por tanto, Diego Montes —cuyo verdadero nombre es Diego de Ferblanc y Alfaro— era el biznieto de El Pirata Negro. Así se dice expresamente en las novelas, si bien con un error evidente en el parentesco, al calificarlo de «nieto», en vez de biznieto —¿error de impresión o del propio Debrigode? Quién sabe—.
En el Madrid populachero y aristocrático, lírico y sentimental de los principios del sigloXVIII… Día de fiesta de toros. Un torero clandestino, con el rostro cubierto de un pañuelo rojo, salta al ruedo… ¡Diego Montes! Grita la multitud. Y el temor se apodera de los «afrancesados», y el gozo invade a los patriotas que luchan en silencio.
Diego Montes el temerario cordobés, selvático y campero en la Sierra, galante y exquisito en la Corte, que se juega la vida por un clavel o una sonrisa, escribe una de sus hazañas más geniales en Malatesta. Episodio en el que se mezclan la realidad y la fantasía para producir un cuadro vibrante y lleno de emoción con la invasión napoleónica como fondo. Malatesta es una narración plagada de aventuras en la que la doble personalidad de Diego Montes atrae, intriga, fascina…
La figura del aristocrático afrancesado Diego de Ferblanc, suscita hostilidades, pero las lenguas que sus espaldas murmuran, enmudecen ante la presencia del impasible cordobés que, con exquisita cortesía, más hiriente que la insolencia, va cimentando su nombre, de temible espadachín. La duquesa y el bandolero es un episodio lleno de vida y de realidad histórica, en la que vemos como los círculos franceses acogen cordialmente a Diego de Ferblanc, sin sospechar la doble personalidad. La duquesa y el bandolero son los dos personajes principales de la conspiración, que, con sus inteligentes maquinaciones componen una de las más interesantes aventuras de Diego Montes.
El artero Barfleur, la duquesa de Turiel y tres bravos duelistas son los personajes que desfilaran por las páginas del próximo episodio de Diego Montes. En las calles de Madrid, cuando la noche al caer tiende penumbras propicias, los navajeros a sueldo, acechan el instante oportuno para apuñalar por la espalda al temible y odiado Ferblanc pero el galán de la muerte tiene la jactancia de desafiar continuamente el peligro y su doble personalidad, cosigue elevar hasta el máximo interés con que todo Madrid sigue las andanzas de Diego Montes.
En una Córcega codiciada por genoveses y franceses, gobernada por diversos nobles y sometida al imperio de diversos bandidos se nos presenta a las señoras de Montemar, la altiva Altiera y la más joven Alicia. La primera gobierna con mano firme aunque sabe del del peligro de Dago corsi, feroz caudillo de los Hermanos Corsos, una horda de delincuentes organizados. La segunda, Alicia, está fascinada por la personalidad de Corsi -seductor, satánico y atractivo-, al que casi nadie ha visto nunca. En ese contexto se nos presenta la figura de Luys Gallardo, un trovador español que ha llegado a Córcega casualmente y que ha convertido en su escudero a Bembo, un rollizo piamontés. Luys es simplemente un galante aventurero, para quien cantar madrigales en busca de un amor y pelear con alegre ferocidad, constituía la razón de vivir y ser.
Luys Gallardo, suplantando ya de forma plena a Dago Corsi y aliado con la poderosa Madona Altiera de Montemar, decide convocar a todos los bandidos de Córcega en el lago de Venus, el bello lago subterráneo que se encuentra en la imponente cueva a Anfitrite, cerca de Ajaccio; su autoridad la ejerce acompañado de Bembo y de Delfín Lechuga y su objetivo es crear una fuerza armada que pueda plantar cara a franceses y genoveses, que codician la isla. Al mismo tiempo, para conseguir suplantar correctamente a Corsi, el galante aventurero obliga al astrólogo y truhán Piero Basano a que escriba la biografía del bandido al que está suplantando. Este núcleo de pícaros se ve inmerso en una compleja trama política en la que intervienen los tres hermanos Renzo, el condotiero Ugo Paolo Renzo Faciatosta y sus dos hermanos, el pérfido Conrado Polo Renzo y la bella y viuda Alessandra Renzo; Conrado querrá matar a Alessandra y robar el poder a Ugo pero la intervención de Corsi/Gallardo y el amor que siente por ella uno de los esbirros de Conrado -Gubio Orsini- evitará el crimen. Gallardo consigue reunir en la cueva de Anfitrite a los tres hermanos y allí consigue la redención de Alessandra, la muerte ejemplar del miserable Conrado y la complicidad de Faciatosta, que se compromete a hacer público su amor por Madona Altiera; al mismo tiempo consigue desenamorar a ésta pues aparece ante sus ojos abrazado a la libidinosa Bárbara. Mientras esto ocurre, Madona Altiera de Montemar ha encerrado en una lóbrega mazmorra al auténtico Corsi, encadenándolo de por vida y ocultándolo bajo una máscara de hierro; lo que ella no sabía es que Corsi había profesado palabras de amor Alicia de Montemar y que ésta, al ver a su hermana encerrando un enigmático preso, tuvo la intuición de ir a visitarlo; al hacerlo descubre al bandido que la fascina, lo libera y se desmaya. Corsi la deja en la mazmorra y se da a la fuga anunciando una terrible venganza
El supremo jefe de la isla, Podestá Giordano Stefano, aparece en escena y bendice la unión de todos los bandidos de la isla para defenderse de los invasores genoveses y franceses. Uno de los forajidos, ahora luchador patriota, es Filipo Ferrante, digno y honesto, que se enamorará de la bella judía Zoraida Rovizo, Salomé, hija del prestamista Samuel Rovizo cuyo hermano Rubén detesta y envidia. Gallardo-disfrazado de Corsi- conseguirá la complicidad de Ferrante en su proyecto de crear una hermandad de corsos unida frente a los enemigos exteriores así como el apoyo de Rovizo para que le indique los hombres más ricos de la isla, cuyo apoyo económico es imprescindible; aparece así el rico comerciante Bruno Sarto, casado con la bella Bianca Ventigli, que recibe la visita de Gallardo-Corsi quien le exige su apoyo económico. Bianca, fascinada pero fiel al miserable Sarto, querrá matarlo y en su empeño llevará a la muerte a seis bravis que pretendían asesinar a nuestro héroe.
Los franceses y los genoveses -Barnabó Liebo es el principal agente de la Banca de San Jorge de Génova, un pulpo de infinitas dimensiones- envían a dos taimados individuos, la bella Viviane dAurigny y el pérfido inglés Charles Mombray, a que negocien con Corsi para que se alíe con ellos para dominar la isla. Fracasan en su empeño pues Corsi/Gallardo no se va dejar comprar y por ello van a buscar la ayuda de un enigmático señor enmascarado, un poderoso de Ajaccio, que les propone comprar la colaboración de Gubio Orsini, que por amor a Sandra Renzo es capaz de todo, incluso de traicionar al que siguen creyendo Dago Corsi.
En las naves de Abdul Hamez, el pérfido pirata turco se divierte humillando y torturando a sus galeotes; entre ellos aparece Stronck Goldstein, hermano de Beatriz y sobre todo el corsario bretón Truand Lascar, fuerte, vehemente y violento. Aparece un efebo bello y amanerado, diversión del pirata, que sólo después de mucho turbar e indignar a Lascar se descubrirá que es mujer disfrazada. En tierra todo se complica.
El Hidalgo Lunático desvela a Corsi el secreto tan bien guardado durante años; es su padre y el de Luys, ambos son hermanos gemelos y fueron abandonado por su progenitor pues al nacer provocaron la muerte de su amada esposa. Establecida la complicidad entre Corsi y el Hidalgo, irrumpe en escena la historia de unos nobles que viven un episodio pastoril hasta que es descubierto el marino Gianfosco, un buen hombre que mató a un noble amigo de los anteriores por defender su honor; a partir de ahí, detención de Gianfosco, terrible venganza de los nobles, liberación, intervención de Corsi y el Hidalgo en su ayuda.
El poderoso genovés Barnabó Lieto convoca a un conjunto de poderosos condotieros para planificar la invasión definitiva de Córcega; los grupos son diversos pero entre los cabecillas destaca Sans Merci, sobrenombre de Erick von Merck, siempre bajo una férrea armadura, y el truhán gascón Bruyant Lartiguers. El primero es un genio de la estrategia, el segundo un pícaro amante de la aventura que siempre va acompañado de su loro Coclicó -¡Caramba! ¡Qué opípara cuchipanda!-. La invasión está perfectamente planificada y preparada, y más cuando cuenta con la colaboración de dos importantes corsos que van a traicionar a su tierra, Podestá Giordano Stefano y el rico comerciante Bruno Sarto.
La novela se inicia con la descripción de la estrategia que urde Luys Gallardo quien, acompañado por sus fieles dirigidos por Ferrante y las galeotas de Lascar, se dispone a vencer a los reitres alemanes. El bandolero gascón Bruyant Lartiguers —fanfarrón siempre acompañado de su parlanchín loro Coclicó— recibe la encomienda de detener a Corsi; lo hace, pero cuando busca un compinche para embarcar su presa se encuentra con Lascar, que le vence y le reduce y le convence de que se alíe con la causa corsa. A partir de ese momento, en su dimensión de espía doble consigue confundir a los aliados de los invasores; la guerra es inmisericorde.
La novela se inicia con la descripción de la estrategia que urde Luys Gallardo quien, acompañado por sus fieles dirigidos por Ferrante y las galeotas de Lascar, se dispone a vencer a los reitres alemanes. El bandolero gascón Bruyant Lartiguers -fanfarrón siempre acompañado de su parlanchín loro Coclicó- recibe la encomienda de detener a Corsi; lo hace, pero cuando busca un compinche para embarcar su presa se encuentra con Lascar, que le vence y le reduce y le convence de que se alíe con la causa corsa. A partir de ese momento, en su dimensión de espía doble consigue confundir a los aliados de los invasores que resultan ser, ni más ni menos, que el Podestá Giordano Stefano y el rico comerciante Bruno Sarto; la guerra es inmisericorde y se descubre que Sans Merci no es Eric Von Merck sino su hija Erika Von Merck, que substituyó a su padre muerto y que, tras la celada, escondió su condición femenina. Cuando Lartiguers va a traicionar a Sans Merci sin saber que es la bella rubia a la que y de la que se había enamorado en episodios anteriores, es casi asesinado por la feroz Barbara Foscari; viendo la irreprimible derrota de los suyos, Erika ordena la muerte de la bandida y se despoja de sus atributos de varón. Cuando los corsos llegan a la habitación de Sans Merci encuentran una bella mujer atendiendo al valiente gascón, salvado in extremis. Se encuentran por primera vez cara a cara los dos hermanos y Corsi le desvela a Gallardo su condición de hermanos y de hijos del hidalgo lunático; cuando la victoria ya es clara y el triunfo de Faciatosta parece el final lógico, cuando la trama de los dos hermanos parece ya definitivamente orientada hacia su resolución, el episodio acaba con una sorpresa final: el hidalgo lunático no es padre de Corsi y Gallardo, sino un amigo de Gonzalo Bravo de Zaldívar que, después de haber abandonado a los dos hijos y una vez viendo en qué se habían convertido, desveló su secreto al confidente -el hidalgo lunático- y decidió alistarse para combatir al turco.
Se acerca el desenlace del ciclo corso pero aún queda tiempo para trepidantes cierres de cabos sueltos. El texto se inicia con el diálogo entre Viviane y el jefe genovés de El Pulpo, Barnabó Lieto, que urden el asalto a la cueva de Anfítrite a cargo de unas bellas damas -aparentes náufragas- que seducirán a los bandoleros de Gallardo y Corsi. Aparece el islandés Olaf Hogni, traficante de blancas que, seducido, por la fortuna que le promete el ruso Piotr Grymka se dedica a tan execrable negocio auspiciado por el miserable Gosta Framoer. Mientras, Altiera cuenta a Alicia la verdad sobre su enamorado, que no es Gallardo sino Corsi, y ella acepta la boda. Olaf, después de secuestrar a las mujeres, y ya cerca de Menorca, se arrepiente de su tráfico, y más cuando descubre que una de las secuestradas es la bella Beryl Dorst, una islandesa a la que ama. Se presenta al pirata argelino Siddi Abbes que pasa el tiempo con la bella, joven y virgen Lalla, una nueva Sherezade que le cuenta historias; la primera no le gusta, la segunda tampoco y la tercera, “en un cierto castillo en España cerca de los montes Pirineos”, le despierta cierto interés. Pero todo se interrumpe cuando el barco del islandés Saga es avistado por el pirata; tras el enfrentamiento, el sarraceno degüella a toda la tripulación y se queda con el capitán y catorce bellezas islandesas, escogiendo para sí a Beryl. Mientras, Musso Volpi, siciliano, es escogido entre los remeros liberados por Lascar para ser convertido en su nuevo hombre de confianza al tiempo que se anuncia la boda entre Lascar y Angustias mientras el barco de Gallardo se bautiza como “Dardo”. Una brutal tempestad hunde la expedición de Vivianne y Siddi ve que esa galerna va a hundir su buque; libera a Olaf para que muera con su amada Beryl aunque al final ambos rescatan a todas las islandesas y Lalla aturde a Siddi para salvarlo de su deseo de hundirse con el buque. Llegan las islandesas a Ajaccio, Gallardo cree que son las hembras taimadas de Vivianne pero cuando Olaf descubre entre los remeros a Gosta Framoer, el ladrón de islandesas, se rebela la verdad. Gallardo libera a las mujeres que ajustician a Gosta y liberan a Olaf, para que sea, aunque lejos de su patria, feliz con Beryl: “Islandia estará donde nosotros vivamos, Olaf”. Siddi y Lalla se salvan y esconden su identidad. Delfín explica que ha encontrado a Vivianne, naufragada, muerta y la ha enterrado y, al final, una boda triple - Faciotosta/Altiera, Corsi/Alicia Lascar/Angustias- parece cerrar definitivamente la historia. Nada más lejos de la realidad....
Esta novela supone un punto de inflexión decisivo en el desarrollo de la colección. La trama desarrollada en Córcega se muestra definitivamente clausurada y toda la narración se traslada a un nuevo espacio, la isla de Capri. Nuestros héroes, a bordo de El dardo, avistan una isla con sirenas, desembarca Luys Gallardo y descubre que son mujeres disfrazadas que así quieren asustar a los marinos; su jefa es Carlina Zanni y están allí refugiadas de la invasión que la familia Trozzi, napolitana, ha llevado a cabo de su isla de Capri. Luys se compromete a luchar por la justicia. Los Trozzi son tres hijos perversos, dos hijas cándidas y un padre terrible. El primero de los tres hijos es Umbrío Trozzi que ha provocado que la bella Giulia se suicidase; en el sepulcro éste mata a su enamorado -Giuseppe Neris- y ve, oh prodigio, resucitar a la bella, que sólo había ingerido un narcótico para huir del acoso de Umbrío. Cuando éste se dispone a poseerla, aparece Luys, que le vence. El segundo hijo, Trentino Trozzi, desea a la bella Nela Messica; Luys le vence. El tercero y último, Falco Trozzi desea a la bella Fiorenza Gherlina pero es la bella quien le vence y humilla salvándola Luys de su terrible venganza. Cuando el padre, Matteo Trozzi, se entera en boca del bufón Jaccoppinode de la triple derrota, humilla a sus hijos y encomienda a su bufón, taimado y perverso, que le traiga al trovador. Así lo consigue y cuando se anuncian terribles torturas para Luys y Fiorenza, una enigmática mujer con máscara veneciana les libera. Dan sus ropas a dos cadáveres mutilados y una jauría de perros feroces destroza los cuerpos; los Trozzi creen que se ha cumplido su venganza al tiempo que se presenta la figura de la nueva esposa de Matteo, la pérfida Lucrecia siempre acompañada de su fiel nigromante Gretto.
La saga nos ofrece un nuevo vuelco espectacular con la incorpración de nuevos personajes. Los terribles Trozzi son amenazados y aterrorizados por Ferenc Mijail, el bandido bohemio húngaro, el bandido del Tirol transilvano. Isolda, hija bella de los Trozzi, recibe un anillo de un misterioso encapuchado; Gretto le explica que es el símbolo de boda de Ferenc que le convierte en novia de la muerte. Iolanda, la otra hija bella, quiere avanzar en su amor no declarado por su guardespaldas Bruno. Mientras en “El faisán dorado”, se reúnen cuatro extranjeros, el artista florentino Marco Veneto -en realidad Ferenc- , el veronés Luciano Risco -Luys Gallardo- y el presunto embajador francés -el gascón Bruyant- y el obeso Aldo Giucciardini; éste cuenta la historia de su hermano, de sus dos buques, uno blanco y otro negro, y de cómo sólo quedo el oscuro Desesperación. Bruno y Iolanda se seducen pero en pleno beso hace su aparición una suerte de murciélago humano que los mata a los dos y les deja marcadas dos aspas, la marca de Ferenc. Poco después descubrimos que Gretto es quien ha hecho este traje y que con tal se viste Lucrecia para infundir pavor -“¿Magnífico! Estáis maravillosamente convertida en un espantoso engendro natural” (85/XII)”. Bruyant, mujeriego, acosa a Lucrecia y es encarcelado mientras Luys se da cuenta que fue la misteriosa mujer quien le liberó. Descubrimos que Véneto es Ferenc y vemos cómo mata a Lucrecia, que parecía amarle, y se viste de murciélago. Isolda, que en realidad está enamorada de Luys, teme la llegada del húngaro; el galante libera a Bruyant y se compromete a defender a la hija de su enemigo. Éste, Mateo Trozzi, recibe la visita del murciélago y es asesinado. Cuando Ferenc ve como Luys ayuda a escapar a Isolda, les asalta pero Luys consigue escapar hiriéndole gravemente con su lanzamiento de cuchillos. Llegan a la costa y nadie les espera; no es extraño. Gretto salva a Ferenc y descubrimos qcómo pirata del húngaro aparece al final con su buque Desesperación y con veinte ahorcados: Erika, Volpi, Lechuga y 17 gascones
La novela se inicia con un soberbio flash back que nos muestra la conjura Mijail/Donato Guicciardini y que se encadena con un nuevo flash back que nos lleva al buque El Dardo con Volpi, Erika y Bruyant, que decide convertirse en D’Eperlan para bajar a tierra a cortejar damas. Se describe el asalto del Deseperación a El Dardo y la muerte de Lechuga, Volpi y Erika Luys Gallardo y Bruyant ven llegar el Desesperación con su racimo de ahorcados (recordemos que éste fue el final de XII). Mientras, el pastor Reinaldo queda al cuidado de Isolda, y de él se sabe que es hijo del antiguo gobernador depuesto por los Trozzi. Mijail vuelve para entrar en contacto con el nigromante traidor pero llegan Jaccoppino y F Trozzi y le torturan; aparece como murciélago Mijail que muere a la primera descarga del Desesperación que empieza el asalto a Anacapri. Se produce el triunfo absoluto de Donato que se presenta como libertador cuando lo que quiere, por pura maldad, es destruir la vida en la isla, quemándola como un nuevo Nerón. Ante Donato y Galo, su lugarteniente, se presentan Aldo, hermano y Luys y Bruyant bajo la máscara de embajadores, son recibidos y nuestros héroes los matan en una escena de acción trepidante. Mientras, Reinaldo e Isolda viven un intermedio pastoril; Reinaldo cuenta una larga historia de princesas y príncipes, de 10 besos pedidos, de 100 besos interrumpidos en el sesenta y nueve... Luys vuelve a esa Arcadia y con Reinaldo organizan el asalto a Anacapri; disfrazados de pastores consiguen la victoria y Reinaldo e Isolda anuncian sus esponsales. En un epílogo, Bruyant y Luys entierran a los suyos, abandonan Capri y se lanzan a vivir nuevas aventuras por el Mediterráneo.
Inocentina es el nombre de una chica que, con cinco años, y de presunto origen griego, naufragó hace dieciséis en la costa de Sicilia, junto al castillo de Sabia. Creció huraña y solitaria, y con fama -falsa- de bruja, y ahora, sin quererlo -ella espera un hombre que venga del mar- enamora al joven Giancarlo della Sabia. Luys, Bruyant, Coclicó y los tres gascones arriban a Sicilia, y en la taberna, haciéndose pasar por juglares, escuchan la historia de Lucinda, la hermana de Giancarlo, deshonrada por un reitre, Lisardo Gentile, que la sedujo y abandonó. Se desarrolla una pelea en la taberna que interrumpe Lutezia, madre de Lucina y Gianacarlo, que invita a palacio a los presuntos juglares., nuestros héroes. Se presenta Adonais Mirkopoulos y su barco de treinta y tres tripulantes, pescadores de esponjas, que han sido enrolados para ir, bajo esa identidad, a buscar el tesoro que se hundió en un barco griego hace dieciséis años. Se presenta también, como una historia independiente que parece obsesionar a Lucinda, Ubaldo Ziani, cuya vida en la Venecia de 1500 pasa del lujo más exquisito a un compromiso con los pobres, a sustituir a un marino enrolado a la fuerza para la guerra contra el turco y a hacerse cargo de un enfermo de peste. La reina Lutezia parece esconder una extraña animadversión hacia Inocentina por lo que ocurrió hace dieciséis años; Adonais la relaciona con el naufragio pero Inocentina es acusada de brujería con falta de pruebas y la tolerancia de la reina. Luys Gallardo y Bruyant se dan cuenta de la injusticia y, aunque le obligan a callar, anuncian su rebelión.
El libro se inicia con un largo flash-back contando la historia de Heleno de Mitelene, un pirata griego quien, 16 años antes de cuando se desarrolla la acción -recordemos, 1506-, robó un galeón español aunque mçás tarde su barco, el Dafne, naufragó y él murió. A la hija de Heleno, a bordo, la recogió un tal Giulio, siciliano, que desapareció. En realidad, la joven reina viuda Lutezia tenía 20 años cuando el Dafne naufragó en la gruta de los encantados; Giulio le contó a la reina viuda el secreto del barco cargado de tesoros que le había confesado en sueños la niña, Inocentina. Lutezia encerró en oscura mazmorra al pescador, después selló el acceso a la gruta, recogió el tesoro con buceadores y los encerró hasta que murieron de hambre Luys y Bruyant quieren liberar a Inocentina y buscan la colaboración de Adonais. Lutezia recibe la visita de Inocentina, acusada de brujería, y la encierra en terribles mazmorras. Los vengativos sicilianos de las tabernas persiguen a nuestros héroes, y se desarrolla un combate vibrante de hachas. Bembo baja a tierra, entra en el castillo y narcotiza a toda la guardia, Luys y Bruyant se hacen dueños del castillo, Lutezia intenta seducir -casi lo consigue- al gascón mientras Luys libera a Inocentina y a Giulio, que desvela el terrible secreto. Visitan la cueva, muere Lutezia al querer escapar y Luys prueba a Adonais diciéndole que no hay tesoro, cuando demuestra que su amor por Inocentina es sincero, Luys le regala el enorme tesoro que aún quedaba en la cueva. Pobres y felices, nuestro héroes deciden ir a Venecia.
La novela se inicia con un flah back que nos lleva veinte añós atrás. En Florencia, en 1487, se nos describe fiesta lujosa de los condes florentinos y del Dux de Venecia. Se nos presenta a Fausta Bentivoglio, hija de un trapero y escaladora social que es la mujer de confianza de la duquesa. Busca casarse con Mancini, un ambicioso noble arruinado pero él está casado con la rica aunque desheredadada Leonora. Guido Manzini busca a un rufián, Galeazzo Muzio, para que la haga desaparecer y el malvado le hace firmar un documento comprometedor. Éste va a Livorno, intercepta una conversación de Leonora donde explica ella que espera la llegada de un monje enviado por su padre para perdonarla, se disfraza de monje y envenena a Leonora dejando una nota de suicidio; se lleva a su hija de meses, que Mancini no sabía que tenía, y la abandona en una gabarra del puerto donde dos marinos españoles, Cayo y Policarpo, magníficos tipos contrarios y complementarios en todo, que están a las órdenes del pirata Juliot Legars, la recogen. El pirata la adopta aunque poco después él muere y los españoles se quedan como padres. Volvemos al presente, a 1507. Gallardo, Bembo y Bruyant van a Venecia; en ella manda Manzini, poderosísimo junto a su fiel Muzio y a un nuevo ayudante, Loredan Corniveli, q ue ha tejido una perfecta red de espionaje. Se presenta a la bella Hermosilla, la joven encajera ahijada de Cayo y Policarpo, y a Monna Olimpia, hermana del Dux que es acosada y chantajeada por Muzio; casualmente Luys oye la conversación y se bate con Muzio, va a visitar la misteriosa dama -él no sabe quien es- y la galantea y enamora con un beso. En un nuevo flash back se nos cuenta cómo en los últimos veinte años antes la niña creció entre pícaros y piratas, cómo murió Legars, como en realidad parece que no murió, cómo ingresan a Hermosilla en un convento para que crezca y se eduque y cómo Cayo, Policarpo y Hermosilla reciben la extraña orden de ir a Venecia. De nuevo en el presente descubrimos como Hermosilla está enamorada de Gino Manzini -¡su hermano! Al tiempo que Manzini, ¡su padre!, la desea como amante sin saber que es su hija. Ella acepta para salvar a sus padres adoptivos pero está dispuesta a matarse antes que perder su honra. Se descubre al final que Loredan Corniveli es en realidad Lorenzo Cipriani, que desde hace años quiere vengar el presunto suicidio de su hermana que él nunca creyó. Luys se presenta ante Cayo y Policarpo -españoles en Italia siempre se ayudan- para ayudarles a plantar cara a Mancini al tiempo que “alguien” les revela los infames propósitos del poderoso noble. Al final se descubre que Juliot Legars parece estar vivo.
El volumen se inicia relatando la vida de Juliot Legars a finales del XV; camino de París, se encontró con Arthème Pravel, con quien entabló un duelo pues éste le exigía que se casase con su hermana Juana a la que había seducido. Vence Legars pero Arthème, moribundo, le confiesa que su hermana está embarazada. Conmocionado se entrega pero ante la sorpresa de todos le condenan a muerte aunque Juana le visita en la celda y consigue que le conmuten la pena por la de galeras. Once años después es liberado, sabe de la historia de Hermosilla y descubre su extraordinario origen, pero se embarca hacia las Antillas pues tiene miedo de encontrar a un hijo que no conoce y matarle sin querer; recibe el sobrenombre de el Hércules cobarde. Malherido en un duelo confiesa su secreto a un franciscano que escribe a Cayo y Policarpo; tras siete años vuelve a Europa y pide a sus antiguos hombres, Cayo y Policarpo, que vayan a Venecia. Se encuentran pero los dos antiguos marinos suyos lo ven cobarde cuando sólo es un hombre temeroso de encontrar, sin saberlo, a su hijo, quien le quiere matar.Luys trama a un plan; convence a una camarera, la Abeja, que suplante a Hermosilla en el lance de amor con Mancini. Ésta y los dos padrastros, huyen. Mancini descubre el engaño y al leer la carta exculpatoria de Luys decide buscarlo para matarlo. Mientras, Bruyant, Coclicó, Bembo, Rspingón, Vinagre y Frambuesa se encuentran con el taimado Lisardo Gentile, que sedujo a la princesa Lucinda en Inocentina. Le vencen. Se encuentran con una compañía de Commedia dell’arte, Polichinela -chismoso-, Arlequín -enamoradizo-, Colombina -novia poco fiel de arlequín-, Scaramucci -fanfarrón-, una Rosaura y un Leandro, un brillante espadachín que no es otro que el temible Revers D’Estoc, que resulta ser el hijo de Juliot Legars y Juana Pravel. Se desarrolla un nuevo duelo entre Bruyant y Gentile cuando llega un misterioso espadachín -no es otro que D’Estoc- que le ayuda y mata a los cuatro bravis que acompañaban al taimado Gentile. Olimpia cita a D’Estoc, quien confiesa que sólo buscaba a su padre para matarlo, y le propone que se integre con las Damas de la noche que, en góndola rosa y bajo apariencia de cortesanas, traman conspiraciones. Entre ellos se desarrolla una escena galante de notable tono erótico. Juliot Legars es detenido y cuenta a Corvineli y a Cipriani la auténtica historia de Hermosilla, que resulta ser su sobrina. Mancini trama detener a D’Estoc pero no sabe que su acción va a ser interrumpida por Luys; poco después Mancini recibe un anónimo de las Damas de la noche -en realidad, un trampa urdida por Cipriani- acusándole del crimen horrible que cometió veinte años atrás.
El libro se inicia con el relato de la ardiente juventud de Revers d’Estoc, cómo su madre le mintió diciéndole que su verdadero padre, Juliot Legars, había asesinado a su progenitor, cómo le crió sin cariño, como de niño lo entrego al maestro de esgrima Messire Rabutin para que lo convirtiera en el más feroz espadachín, cómo éste, enfermo de peste, le enseño su estocada mortal y con ella Revers le mató para que no sufriese. Tras la muerte de su madre, Revers se lanza a la búsqueda de Juliot. La narración vuelve al presente donde las tres damas de la noche, Olimpia Sterna, Giana Luchino y Loretta Grimani, intentan desmontar el poder de Mancini. Corniveli-Cipriani cuenta su identidad a Olimpia y traman un plan. Vuelve a aparecer la compañía teatral que se instala en Venecia con Bruyant como estrella junto a su Coclicó. Revers d’Estoc se enamora de Hermosilla, protegida por Olimpia. El plan tramado por Olimpia, que Luys y Revers y los suyos suplantasen a los hombres de Muzio-Mancini fracasa porque, en un flash back se nos explica cómo Loretta traiciona a su amiga por miedo a Mancini y cómo junto a Gianna narcotizan a los rebeldes capitanedos por Luys y Revers. Loretta y Gianna son asesinadas por los esbirros de Mancini, Corniveli-Cipriani es envenenado, Hermosilla es acosada por quien no sabe que es su padre, Mancini, Olimpia es detenida y los rebeldes llevados a los terribles Fosos, unas cisternas donde los presos se pudren entre humedades repugnantes; sin saberlo meten a Revers en una cisterna en la que está el presunto asesino de su padre, aunque es su padre en realidad, Juliot Legars. Bruyant es misteriosamente capturado y se advierte cómo la narración se está preparando para un gran final.
Facchino, el tabernero. La compañía de teatro busca a Bruyant y Facchino, tabernero y jefe de la gallofa -hampones venecianos- le libera de unos compinches que le habían secuestrado. Bembo cuenta a Hermosilla la prisión de Luys y Revers y ésta decide ofrecerse a Mancini para vengarles matándolo. Mancini visita a Revers y Juliot; se mofa de su futura seducción de Hermosilla y Juliot le revela que es su hija. Juliot le cuenta a Revers que es su padre y su verdadera historia lo que provoca que éste le perdone. La intensidad de su relación provoca que Julio cuente a su hijo el “secreto” que le hizo rey de los mares; mintras, Mancini decide enviar a su hija Hermosilla a un convento. Se produce una alianza entre Bruyant y Facchino para liberar a Luys: un bebedizo de los Broffa que lo va a dejar como muerto y permitirá que lo lancen a los canales como presunto cadáver. Así se hace y así lo liberan. Una vez liberado, se prepara una encerrona contra Galeazzo Muzzio, duelo con Luys y muerte del rufián aparentando que ha sido una acción de Mancini. Mientras se juzga a Mancini, aparece Loredan, embalsamado, que “denuncia” a Mancini. Fausto, su hijo, da al Dux la carta comprometedora que Muzio le había dejado y Mancini es condenado y ejecutado y sus bienes pasan a Luys que los cede a Facchino y Hermosilla. Luys recupera su “Dardo” y decide embarcar con los suyos, entre los que están los Legars. Hermosilla llega al convento de mujeres descarriadas donde se cuentan historias galantes hasta que llega Revers con el mandato del Dux de que sea liberada. Ya no se llama Revers sino Legars, como su padre, y eso provoca que sea secuestrado junto a su amada por un pelotón de marinos ingleses al mando de Lord Fitzroy que quieren saber el “secreto”. También el Dux envía al espia Marcantonio para que intente desvelar el “secreto” de Legars.
Se presenta a lord Fitzroy, un perfecto caballero pero, como buen inglés, taimado y mentiroso. Camino del convento-fundación Rinaldi, Luys encuentra a Marcantonio. El herido de muerte Jeremy Mac Lean es atendido por Fiorenza Rinaldi; él, ciego, se enamora y ella también. Ambos se dan el primer y último beso. En el convento, las chicas -Risca y la bella pelirroja Abruccia- se cuentan historias ejemplares y galantes. Fiorenza cuenta a nuestros héroes lo que Mac Lean, moribundo, confesó, y parten a embarcarse para buscar a Revers y Hermosilla. Se suma a la partida, a propuesta de Marcantonio, el marino francés Vat Enchier. En el barco inglés Lord Fitzroy se da cuenta de que ha secuestrado al hijo -Revers-queriendo secuestrar al padre y decide esperar a que venga el viejo corsario francés. Luys desenmascara a Marcantonio, y le permite que vuelva a tierra a nado; Vat Enchier se convierte en su último aliado. La novela introduce una divagación sobre el origen mallorquín de Cristóbal Colón al tiempo que se produce el avistamiento de las naves de Andrea Doria. Durante 30 páginas se cuenta la vida de este condotiero y almirante aunque no incide en la historia. “El Dardo” se encuentra con el buque inglés. Tras engaños diversos, finalmente Juliot Legars, su hijo Revers, Bruyant, Hermosilla, Bembo y tres gascones, Vinagre, Frambuesa y Respingón, son desembarcados mientras Vat y Luys dirigen la nave cargada de explosivos contra el buque ingles para dar el último beso. El ataque es brutal y efectivo pues tras la explosión se hunde el barco inglés, se hunde “El Dardo” y muere Luys Gallardo, El galante aventurero. Y acaba la colección.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias «Dandy Pólvora»), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del «Ku-kux-klan», o con buenas aventuras de «indios contra vaqueros».
Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias «Dandy Pólvora»), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del «Ku-kux-klan», o con buenas aventuras de «indios contra vaqueros».
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
La colección de El Halcón apareció en 1948, publicada con el pseudónimo de Arnaldo Visconti, de la que se editaron un total de 14 novelas. A pesar de que en un principio, en las contraportadas de los primeros números de esta colección, y también en las de las coetáneas de 'El Pirata Negro' -v.gr., números 49, 50, 51...- se anunciaron 15 títulos, la colección propiamente dicha de este personaje constaba de 10 números en formato “pulp” (21x15 cm.), publicadas de marzo a julio de 1948, aproximadamente. Posteriormente, en 1952, aparecieron otras 4 publicadas dentro otra colección, la 'Colección IRIS' (números 3, 7, 11 y 15), cuya acción es continuación de las diez anteriores. Las portadas de todas ellas corrieron a cargo de la mano de Provensal, ilustrador habitual de Bruguera en este tipo de colecciones en aquellos años.En este caso, Debrigode nos relataba los avatares de Rock Gambler -literalmente, jugador de piedra- (alias “Dandy Pólvora”), un aventurero al que le gusta el póker y el boxeo –al igual que a Debrigode- en los albores de la Guerra de Secesión norteamericana; no tomaba partido ni por el Norte ni por Sur, sino que nadaba entre dos aguas, tratando de sacar el máximo partido de la revuelta situación, traficando con armas que vendía a quien mejor se las pagara, siendo el escenario por el que se movía, como es lógico, la costa este de Estados Unidos. Ello no fue óbice para que Debrigode nos deleitara con el germen del 'ku-kux-klan', o con buenas aventuras de 'indios contra vaqueros'.Como anécdota curiosa, diré que en esta serie Debrigode dotó a varios de sus personajes de nombres sacados directamente de la industria cinematográfica; y así, nos encontramos con John Wayne, Broderick Crawford, Rita Hayward, Humphrey Beaugard –a los dos últimos les cambió la grafía del apellido, pero fonéticamente suena igual-,... Asimismo, en algunas de las portadas de las novelas el personaje de “El Halcón” aparece dibujado con un gran parecido a Clark Gable, en especial la nº 9, 'La venus de ébano'.
Las torres del castillo de Civry se elevaban en la lejanía, sobre las oscuras cimas de los árboles que formaban un anillo rodeando los colindantes castillos de Civry y Corbigny, fusionándose en un bosque descomunal.
A fines del año 1693, las culebrinas que vigilaban la entrada al puerto de Panamá dispararon siete cañonazos consecutivos. En la Plaza Real se congregaron reuniones de asustados panameños, que, ignorantes de que los cañonazos eran de pólvora sin proyectil, creyeron al principio en una incursión de las temidas flotas corsarias. Pronto se aquietaron los ánimos cuando corrió la voz de que las salvas se debían a la llegada de la nave española que llevaba a bordo a la hija del Virrey gobernador. A lo lejos se divisaba ya la airosa silueta de una goleta que, con las velas desplegadas, surcaba el azulado mar. En el castillete de proa, una mujer, casi una niña, contemplaba extasiada el tropical paisaje, que con toda su esplendorosa vegetación iba aproximándose...
El “Flyng”, galeón en el que había zarpado de Rotterdam Hugues Doorn con sus doscientos aventureros reclutados por dinero, era ya el único barco que se mecía en la ancha bahía natural de Port-au-Prince. Hugues Doorn había saqueado concienzudamente una parte de la ciudad y los otros dos buques de la flota con los que había aplastado el primer intento de resistencia, habían partido hacia Holanda con el fruto de la rapiña...
La galerna arreció durante toda la noche para amainar a la madrugada y aplacarse del todo a media mañana. El mar recuperó su azulada transparencia y el sol luchó con sus cálidos rayos para entibiar la fresca brisa. Y durante tres días consecutivos el Aquilón surcó en todos sentidos los parajes por donde el Pirata Negro suponía que la corsaria bretona podía haber buscado un refugio contra la galerna. El veloz velero contorneó los islotes, y los vigías oteaban los más recónditos recovecos de las dentadas costas. Durante su infructuosa búsqueda de las velas y gallardetes del bergantín bretón, los ojos del Pirata Negro se dirigieron varias veces hacia la gran isla que flotaba a lo lejos como una inmensa y verde esmeralda engarzada en líquida montura azul...
El Pirata Negro', cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 4 de la colección.
El Pirata Negro', cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 5 de la colección.
El Pirata Negro', cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 6 de la colección.
El Pirata Negro', cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 7 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 8 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 9 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 10 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 11 de la colección.
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El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 19 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 20 de la colección. Aunque en la solapa posterior del nº 19, se anunciaba como siguiente título La hija del Pirata Negro, nunca llegó a publicarse. Asi mismo, en la solapa posterior de este mismo episodio, figura como nº 20, La hija del Pirata Negro. En las portadillas de los números siguientes, ya no aparece como nº 20 La hija del Pirata Negro sino Frente a frente. ¿Problemas de censura?
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 21 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 22 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 23 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual .Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 24 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 25 de la colecció.n
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 26 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 27 de la colección.
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El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 31 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949 .Nº 32 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 33 de la colección.
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El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 35 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 36 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 37 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 38 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 39 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 40 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 41 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 42 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 43 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 44 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 45 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 46 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 47 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual .Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 48 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 49 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 50 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 51 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 52 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 53 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello .El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 54 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 55 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 56 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 57 de la colección.
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El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 60 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 61 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello .El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 62 de la colección. Se ha de hacer constar que si bien según el catálogo de BNE el título es: En pos del chacal, en las contraportadas, el título del episodio aparece como: En pos de 'El Chacal'.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 63 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual.Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 64 de la colección. En el catálogo de la BNE el título que aparece es Aguas revueltas, sin embargo en diferentes contraportadas aparece como Aguas Revueltas. Teniendo en cuenta que el nombre corresponde a un lugar geográfico, me he inclinado por la segunda opción.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 65 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 66 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 67 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 68 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 69 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 70 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 71 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 72 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 73 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 74 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 75 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 76 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 77 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello .El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 78 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 79 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 80 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 81 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 82 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 83 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Nº 84 de la colección.
El Pirata Negro, cuyo nombre era Carlos Lezama, viajaba a bordo del Aquilón combatiendo a los buques ingleses y holandeses que se oponían al dominio hispano de los océanos, sobretodo en Panamá, donde el Pirata Negro tenía su morada habitual. Su ropaje consistía en un traje de pirata, pañuelo rojo en la cabeza y un enorme medallón colgado del cuello. El Pirata Negro se publicó en 85 números, desde 1946 hasta 1949. Último episodio de la primera temporada. Tres años después de su cancelación, en 1952, el personaje reapareció en la colección IRIS, tambien de Bruguera y contando con la destreza de Jaume Provensal como portadista.
Es ésta una serie de novelas que, bajo la bandera negra de la calavera y las tibias, además de relatos de piratas, incluyen las aventuras de otros personajes que, a causa de las injusticias cometidas contra ellos, se transforman de pacíficos individuos en rebeldes indomables que luchan contra sus opresores. Ocho novelas de Arnaldo Visconti que son independientes unas de otras y no hay personaje fijo. Una mezcla trepidante de aventuras de piratas, cosacos del Volga y cazadores de la Frontera del Canadá.Su autor P. V. Debrigode, firmando como Arnaldo Visconti, esta vez actuando fuera de la disciplina de Bruguera, demuestra su madurez y su dominio de la técnica narrativa, muy por encima de lo habitual en este tipo de publicaciones.EL ZAR DEL VOLGA: Donde Stenka Razin se levanta en armas para vengar la muerte de sus hermanos y organiza una revuelta contra quienes pretenden usurpar el trono de todas las Rusias.
Es la historia de una expiación: la de un pirata con arrebatos patrióticos. Era en 1524 y las armaduras cubrían intrépidos corazones españoles, acaudillados, por Hernando de Soto. Pero España no se detenía en su ímpetu descubridor y el delta del Mississippi volvió a ser propiedad única de cocodrilos y grandes tortugas, nubes de brillantes garzas, negros cuervos, gaviotas y culebras de mar, hasta que un siglo después, un explorador francés, Robert Cavelier, «sieur» de La Salle, plantó el estandarte con la flor de lis en la desembocadura del Mississippi y, en honor a Luis XIV, bautizó Luisiana, aquella vasta extensión salvaje.
Es la traslación del bosque de Sherwood a los incomensurables territorios del Canadá; el relato de las primeras sublevaciones independentistas es sólo la excusa para presentarnos a un émulo de Robin Hood.
Relata la caída y posterior auge de un campesino, con la fuga obligada hacia tierras exóticas para eludir las rejas, el periplo por las álgidas e inexploradas tierras canadienses y el retorno del héroe a la madre patria, a tiempo para convertirse en el salvador de sus antiguos adversarios.
Es una revisión de Los Tres Mosqueteros, con un D’Artagnan femenino de incógnito, tan astuto como el de la Gascuña que le sirvió de modelo, y un malhechor con debilidades donjuanescas que se arrepiente en el instante propicio.
Si Bettý entra en tu vida, ya nada volverá a ser lo mismo. Ella es una mujer de una belleza única. Y también posee algo más. Una mujer de las que no se olvidan nunca, de las que saben lo que quieren y a las que no puedes responder con un no. Por una mujer como ella cualquiera podría llegar a cometer una locura y buscarse la perdición.
En 1979 Erlendur, ya divorciado, lleva dos años trabajando como detective para Marion Briem. Ambos investigan el hallazgo del cuerpo de un hombre que fue encontrado en una laguna. Al parecer, la víctima cayó desde una gran altura y, en un primer momento, la policía baraja la posibilidad de que haya sido arrojado desde un avión, pues el tipo trabajaba en una base militar estadounidense. En paralelo, Erlendur investiga el caso sin resolver de una joven que desapareció de camino a la escuela décadas atrás y que todo el mundo parece haber olvidado. Todos menos Erlendur.
En la última planta de un decadente sanatorio mental de Reikiavik, un paciente esquizofrénico se lanza al vacío ante los ojos de su hermano. Casi al mismo tiempo, en otra parte de la ciudad, un profesor de escuela que acaba de jubilarse es asesinado en un incendio provocado. Los dos fallecidos habían sido maestro y alumno décadas atrás y en las últimas semanas se habían visto en varias ocasiones. Ahora les corresponde al malhumorado e intuitivo inspector Erlendur y a su equipo de investigación desvelar qué inimaginable secreto ocultaba esa turbulenta relación.
A los pies de la tumba de Jón Sigurðsson, el histórico héroe de la independencia islandesa, yace el cadáver de una joven desnuda. Nadie sabe quién es ni por qué la han abandonado en un lugar tan emblemático rodeada de flores. La policía ha averiguado que era drogadicta y que abusaron de ella.
Al frente de la investigación, Erneldur Sveinsson va a ir descubriendo que la chica tan solo es una pieza más en un juego de corrupción, negocios turbios y afán desmedido de poder.
Holberg, un camionero de sesenta y nueve años, aparece asesinado en el sótano de su casa en el barrio de Las Marismas, en Reikiavik, junto a una nota incompleta de lo que aparenta una confesión: “Yo soy el…”. Que sólo cobrará significado para Erlendur y su inseparable Sigurdur Óli, cuando encuentran la foto de la tumba de una niña. Pero esa niña, fallecida hace más de cuarenta años, no ha sido víctima de un homicidio. ¿Qué significa entonces el mensaje del misterioso Holberg, a quien nadie parece conocer? El drama que esconde la biografía del viejo y la exhumación del cadáver de la niña provocará el regreso de viejos fantasmas, también a la vida de Arnaldur. Y, en el peor momento, una joven novia desaparece en su propio banquete de bodas.
El hallazgo de un esqueleto humano enterrado en una colina en las afueras de Reykjavik pone en una situación difícil al detective Erlendur y sus ayudantes: no sólo necesitan recurrir a un equipo de arqueólogos que empleará varios días para recuperarlo en buenas condiciones, sino que además éstos les advierten desde las primeras paladas de que no se trata de un cadáver reciente, y que probablemente puede corresponder a un enterramiento de unos sesenta años atrás. Desde que conocen este dato, y sin saber a ciencia cierta la identidad del enterrado, los investigadores se yen inmersos en la compleja reconstrucción de unos hechos ocurridos durante la Segunda Guerra Mundial, cuando las tropas aliadas estaban acantonadas en esos montes, entonces alejados de la capital y habitados sólo a medias, y que les sumerge poco a poco en la dramática historia privada de algunas familias de la época, rememorada por los ecos de los pocos habitantes de aquella zona que aún quedan con vida. Un rompecabezas complicado para un atribulado Erlendur, que tiene que enfrentarse a sus propios fantasmas familiares cuando recibe una fugaz llamada de su problemática hija Eva Lind, a la que hace mucho que no ve y para la que nunca ha sido precisamente un modelo de padre, y que sólo tiene tiempo de pedirle auxilio antes de que se corte la comunicación.
Gulli, el viejo portero de uno de los más conocidos hoteles de Reykjavik, aparece desnudo y acuchillado hasta morir en su miserable habitación en el sótano. Pero Gulli es mucho más que un simple portero que se disfrazaba de Papa Noel todas las navidades, es un completo misterio. Veinte años en el hotel y nadie le conoce realmente. Erlendur Sveinsson decide alojarse en el mismo hotel en busca de la asesina, que, también de eso cree estar convencido, aún debe permanecer muy cerca, pese a que las vacaciones de Navidad están ya encima y el hotel completo. Mientras que al director tan sólo le importa que el asesinato permanezca oculto y su reputación intacta. Erlendur, sin embargo, recibe la visita de su hija, que de nuevo se adentra entre las brumas de la droga y el alcohol, dejando al inspector al borde de la desesperación y la impotencia.
El nivel del lago Kleifarvatn ha ido bajando lentamente después de un terremoto. Al parecer, unas fisuras en el fondo están propiciando el drenaje de las aguas. Un hidrólogo local está estudiando el curioso fenómeno cuando descubre un esqueleto con un agujero en el cráneo y un viejo aparato de radio, con inscripciones en ruso, usado a modo de lastre para que el cadáver no subiera a la superficie. Todo apunta a un asesinato cometido hace bastantes años. El inspector Erlendur Sveinsson se ocupa de la investigación. Los archivos de personas desaparecidas no le proporcionan datos demasiado fiables, aunque el caso de un vendedor que se esfumó sin dejar más rastro que un Ford Falcon aparcado en la estación, y al que una mujer todavía espera, despierta en él un interés especial. Otra historia, la de un grupo de jóvenes y brillantes estudiantes islandeses que partió, treinta años atrás, a la Alemania del Este controlada por la Stasi, a estudiar en la Universidad de Leipzig y formarse en la ideología comunista, va tomando forma. Erlendur tiene que volver a abrir expedientes cerrados y heridas mal cicatrizadas, hurgando en el pasado —la compleja situación política de Islandia durante la Guerra Fría— y el presente de las personas involucradas en los hechos. La vida de aquellos jóvenes idealistas que partieron a Leipzig ha dado muchas vueltas desde entonces, y el peso de los recuerdos es a veces insoportable.
En enero, el implacable invierno islandés se adueña por completo de la isla. Elías, un niño de diez años, ha aparecido apuñalado cerca de su casa y en estado de congelación. La víctima del homicidio es el hijo de una inmigrante tailandesa que trabaja duro para mantener a su familia desde que su marido islandés les abandonó. El inspector Erlendur Sveinsson y sus inseparables ayudantes Sigurður Óli y Elínborg son los encargados de llevar a cabo la desagradable tarea de resolver un asesinato en el que no faltan sospechosos. Erlendur y sus compañeros se verán obligados a ahondar en el pasado de la familia y a sumergirse en las profundidades de la sociedad islandesa.
«Los cardiólogos estuvieron hablando de eso. De la vida después de la muerte. Algo que había sucedido hacía poco. Un hombre que estuvo muerto durante dos minutos en la mesa del quirófano. Dijo que había tenido una experiencia cercana a la muerte». Una mujer obsesionada con saber si existe algo después de la muerte aparece ahorcada. Un padre sigue buscando a su hijo desaparecido hace veinte años sin dejar rastro. El inspector Erlendur Sveinsson está investigando extraoficialmente un caso de suicidio que no le cuadra. Para él, la modélica Islandia es como una especie de triángulo nórdico de las Bermudas. A pesar de su envidiable estado del bienestar, de sus banqueros y políticos corruptos en la cárcel y de su bajísimo índice de criminalidad, el clima y la orografía salvaje de la isla hacen que muchos asesinatos pasen por desapariciones fortuitas.
Las noches de Reikiavik ocultan más miserias de las que se ven a simple vista. En una vivienda céntrica de la capital islandesa han encontrado el cadáver de un hombre joven en medio de un enorme charco de sangre. A pesar de lo espectacular de la escena del crimen, no parece haber signos de violencia en el apartamento. Tan solo hay dos cosas fuera de lugar: un chal de mujer en la cama y unas pastillas propiedad del fallecido. La policía tiene muy claro que tras esos indicios puede ocultarse algo bastante más perturbador que un asesinato.
Un hombre confecciona una máscara de cuero con un clavo fijado en la frente. Se trata de una «máscara infernal» usada antiguamente por los granjeros islandeses para sacrificar terneros. Al mismo tiempo, un reencuentro con sus antiguos compañeros de instituto deja a Sigurður Óli insatisfecho con su vida en el cuerpo de policía. Mientras Islandia experimenta un boom económico, su relación sentimental hace aguas e incluso su puesto en la Policía Judicial queda en peligro tras haber aceptado hablar con una pareja de chantajistas para hacerle un favor a un amigo.
En la zona de los fiordos orientales, todos conocen la historia de la salvaje tempestad que en enero de 1942 tuvo trágicas consecuencias para un grupo de soldados británicos. También aquel día, la joven Matthildur salió de casa y nadie la volvió a ver. Su cadáver jamás apareció tras el temporal. Aunque eso sucedió hace décadas, el inspector Erlendur decide investigar por su cuenta y riesgo qué le pasó a Matthildur y, además, enfrentarse a su mayor trauma: la desaparición de su hermano durante otra tormenta.
En verano de 1972, se celebra en Islandia el Campeonato del Mundo de Ajedrez que enfrenta a Bobby Fischer y Boris Spassky. La isla se ha llenado de extranjeros y la Guerra Fría está en su apogeo. En ese ambiente, encuentran a un hombre asesinado en una sala de cine. Marion Briem, la persona que enseñó el oficio de policía al joven Erlendur Sveinsson, se encarga del caso.
En una antigua zona de marismas de la capital islandesa, aparece flotando en un estanque el cadáver de un vagabundo. Como a casi nadie le importa su muerte, la policía archiva rápidamente el caso. Un problema menos. Sin embargo, un joven agente llamado Erlendur, que conocía al mendigo de sus rondas por el corazón de la ciudad, empieza a obsesionarse con las circunstancias del trágico suceso. Hay varios detalles que indican que no se trató de un simple accidente y Erlendur tiene la firme convicción de que todos merecen justicia.
Alertados por una inquilina preocupada porque uno de sus vecinos lleva tiempo sin dar señales de vida, dos policías encuentran el cadáver de un anciano sobre la cama. El análisis forense dictamina que fue asfixiado. El registro del domicilio del difunto saca a la luz unos recortes de prensa sobre una joven que en 1944 fue estrangulada y cuyo cuerpo fue depositado en la parte trasera del Teatro Nacional de Reikiavik. ¿Pueden ambas muertes estar relacionadas pese a las seis décadas que las separan? Entrelazando el presente con el pasado y recurriendo a dos atípicas parejas de detectives, Indridason traza la inquietante y compleja línea que une ambos casos, marcados por la violencia contra las mujeres y la aparición de intrigantes elementos sobrenaturales. En el trayecto, el lector se ve transportado a la Islandia de finales de la Segunda Guerra Mundial, momento en que la presencia de las tropas americanas provoca fuertes tensiones entre una población, muy apegada a las leyendas y supersticiones, que cree en elfos y acude a sesiones de espiritismo. Una doble investigación trepidante con una impecable recreación histórica que consolida a su autor como un referente de la novela negra nórdica.
El hallazgo de un esqueleto humano enterrado en una colina en las afueras de Reykjavik pone en una situación difícil al detective Erlendur y sus ayudantes: no sólo necesitan recurrir a un equipo de arqueólogos que empleará varios días para recuperarlo en buenas condiciones, sino que además éstos les advierten desde las primeras paladas de que no se trata de un cadáver reciente, y que probablemente puede corresponder a un enterramiento de unos sesenta años atrás. Desde que conocen este dato, y sin saber a ciencia cierta la identidad del enterrado, los investigadores se yen inmersos en la compleja reconstrucción de unos hechos ocurridos durante la Segunda Guerra Mundial, cuando las tropas aliadas estaban acantonadas en esos montes, entonces alejados de la capital y habitados sólo a medias, y que les sumerge poco a poco en la dramática historia privada de algunas familias de la época, rememorada por los ecos de los pocos habitantes de aquella zona que aún quedan con vida. Un rompecabezas complicado para un atribulado Erlendur, que tiene que enfrentarse a sus propios fantasmas familiares cuando recibe una fugaz llamada de su problemática hija Eva Lind, a la que hace mucho que no ve y para la que nunca ha sido precisamente un modelo de padre, y que sólo tiene tiempo de pedirle auxilio antes de que se corte la comunicación.
Un hombre agoniza completamente solo en un hospital de terminales. En el trance de la muerte rememora toda su existencia. Ha sido una vida dura pero él no ha sido ningún inocente. La intriga hace de hilo conductor y de excusa para entrar de lleno en muchos aspectos del alma humana: el amor, el sexo, el sentimiento de culpa, las relaciones familiares, la religión, el afán de poder… El autor ha realizado una profunda investigación buceando en las entrañas de una de las instituciones históricas y universales más poderosas y, a la vez, de las más desprestigiadas de nuestro tiempo, y ha tejido una trama imaginaria pero posible en la que retrata fielmente el ambiente real de una parte de la misma. Arnau de la Torre nos recuerda y advierte en las primeras páginas que “hace más ruido un árbol que cae que un bosque que crece”. No es una advertencia vana. Asistimos al descenso imparable del anti-héroe a la degradación más infrahumana y al escándalo que ello supone. La maestría narrativa del autor combina su conocimiento exhaustivo de los entresijos eclesiásticos y del mundo gay para ofrecernos el retrato de una persona que podría vivir a nuestro lado. Este libro tiene varios niveles de lectura: el superficial de quien se queda en la mera anécdota, el nivel medio de quien analiza la personalidad del protagonista, y el superior de quién aparte de fijarse en todo lo anterior se plantea preguntas teológicas y morales.
Aure es la abuela septuagenaria de una María adolescente. Fernando ha sido siempre un picarón irredento y ya se sabe que genio y figura hasta la sepultura. ¿Qué pasa cuando se encuentran? ¿Tienen nuestros mayores capacidad para enamorarse? ¿Necesitan ilusiones para vivir o como su vida toca el final han de soñar ya solo con lo pasado? La novela nos adentra en la forma de vida de una ciudad mediana, Valencia, y los cambios de costumbres a través de tres generaciones. Adéntrate en esta historia compuesta de historias interesantes y humanas.
El narrador, Arnaud, se ve obligado a pasar largos meses internado en un sanatorio para tísicos de los Alpes franceses. Allí encuentra a una joven extraña, a la que llaman Noemia y que es enfermera auxiliar en el hospital. Se trata de una mujer de alta montaña, que ha permanecido prácticamente incontaminada del mundo llano y aún mucho más del de la ciudad, al estado casi bruto, por decirlo así, arraigada a los prejuicios y las tradiciones de sus antepasados. Arnaud se entrega, como todos los demás enfermos por cierto, a los paganos rituales que ese duende de los bosques ancestrales practica con gran seriedad y dedicación, pero también con la más sorprendente ingenuidad. Pero, poco a poco, las relaciones entre Arnaud y Noemia asumen rasgos francamente peculiares... y el amante gravemente enfermo emprende la transformación física, mental y sexual de Noemia. Más allá del erotismo evidente, más allá de los fantasmas que puede suscitar en nosotros, este relato posee las virtudes sacrílegas de un ritual en el que Eros juega al peligroso juego de la pasión y la muerte.
El hallazgo de la lanza que atravesó el cuerpo de Jesús desencadena una carrera contrarreloj para evitar una peligrosa manipulación genética. La reliquia más importante de la historia de la cristiandad ha desaparecido. Todos los arqueólogos vaticanos, salvo uno, han sido asesinados, y Judith Guillemarche es la joven consejera papal encargada de investigar el suceso. Sus pesquisas la conducirán hasta la multinacional Axus Mundi, que pretende clonar a un nuevo Mesías con los restos de material genético hallados en la lanza. Si lo consigue, el Vaticano se hallará ante un gran dilema…
Venecia, año 1756. El cuerpo de un célebre actor aparece crucificado en el teatro de San Lúea, escenario de su última representación. El suceso conmueve a toda la sociedad veneciana y atemoriza a sus dirigentes, quienes no dudan en liberar de las lúgubres mazmorras donde le tienen preso al intrépido Orquídea Negra para que intente resolver el escalofriante crimen. El audaz investigador solo dispone de tres pistas para empezar su búsqueda: los versos de Dante escritos sobre la piel de la víctima, el broche de una cortesana y unos pequeños fragmentos de cristal de Murano. Una investigación apasionante que nuevos asesinatos, cuyas claves podrían encontrarse en referencias a algunos pasajes de «La Divina Comedia», convierten en una carrera contra el tiempo. Una excelente recreación histórica a la que Arnaud Delalande añade con maestría la intriga, el misterio y la erudición propias de un autor consagrado en el género de la novela histórica y experto en el tan difícil arte de seducir al lector y hacer que se estremezca.
Tras casi veinte años de anonimato, reaparece el genial e intrépido Pietro Viravolta, alias Orquídea Negra («El noveno círculo»). Ahora, el agente secreto veneciano está al servicio del rey Luis XV: forma parte de La secreta, una élite de investigadores de capa y espada. A pesar de ello, cuando aparece el cadáver de una muchacha asesinada junto con una carta dirigida a Pietro donde aparecen escritos diez títulos de fábulas de La Fontaine, el duque de Aiguillon, su eterno rival, ordena que lo encarcelen. Desde ese instante los acontecimientos se sucederán en cascada: todo Versalles está aterrorizado ante los crímenes del Fabulista. Desbordado por la ola de crímenes, y muy a su pesar, Aiguillon se verá forzado a liberar a Orquídea Negra y encargarle que resuelva el misterio.
El 18 de Marzo de 1314 la conspiración planeada por el rey de Francia Felipe el Hermoso y el Papa Clemente V alcanzaba su cénit con la muerte en la hoguera frente a la catedral de Nôtre Dame de París del 22.° Gran Maestre de la Orden del Temple, Jacques de Molay. Con el apresamiento, martirio y muerte de los Templarios, así como la incautación ilegítima de sus bienes, creyeron sus verdugos haber alcanzado sus objetivos. Sin embargo, ambos morirían el mismo año dando puntual cumplimiento al emplazamiento ante el tribunal de Dios que les hizo Jacques de Molay desde la hoguera poco antes de morir. Con la extinción de la orden del Temple despareció una organización singular muy adelantada sin duda a los tiempos que le tocó vivir. Desaparecieron sus estructuras materiales, aunque a pesar del tiempo transcurrido y del afán por borrar sus huellas, han llegado hasta nosotros los restos de sus asombrosas construcciones, así como la herencia en el pueblo que aún se refleja en múltiples aspectos de su existencia cotidiana. Por ello puede afirmarse con rotundidad que los enemigos del Temple trataron de exterminar su cuerpo material sin imaginar que más allá de su corteza el Temple es y representa sobre todo una Idea, con plurales manifestaciones, que ha sobrevivido insólitamente casi 700 años al expolio de la Orden.
El inspector Paul Hjelm se enfrenta a un proceso de disciplina interno, con acusaciones de racismo incluidas, por disparar a un extranjero durante un secuestro con rehenes. Su impulsiva actuación no ha sido entendida y, a pesar de que le ha convertido en un héroe mediático, ha desbaratado su carrera. De pronto, una singular propuesta del superintendente Jan-Olov Hultin le sacará de la pesadilla: en lugar del cese de sus funciones, Hultin propone unirse a un grupo de investigadores de élite a los que denomina Grupo A. La invitación no podía llegar en un mejor momento para Paul, que se integra en el grupo y comienza a investigar el asesinato de dos empresarios de las altas esferas, muertos de la misma forma, con dos balas en la cabeza y sin rastro de casquillos. Pese a que algunas pistas apuntan a la implicación de la mafia estonia, las investigaciones de repente se centran en el hallazgo de una cinta con una curiosa grabación del Misterioso de Thelonius Monk hallada en el lugar del crimen… ¿Qué relación tiene con los asesinatos y de qué forma podría conducirles al asesino? Arne Dahl utiliza recursos de gran nivel, un estilo rico, de registros variados, un grado de reflexión moral e intelectual y un estupendo sentido del humor. Pero, ante todo, Misterioso es un auténtico thriller: duro, emocionante, sorprendente y lleno de acción.
Ha pasado un año desde la constitución del Grupo A, la unidad especial para la resolución de crímenes violentos de carácter internacional a la que pertenece Paul Hjelm, y la falta de casos adecuados a sus objetivos y habilidades hace que los círculos policiales suecos empiecen a cuestionar la necesidad de que una unidad tan especializada siga en activo. Como respondiendo a sus plegarias, el Grupo A recibe un aviso: un asesino en serie ha matado a un hombre por medio de un macabro ritual en el aeropuerto de Newark, en Nueva York, y viaja con su billete hacia Estocolmo. No saben su nombre ni qué aspecto tiene. El equipo al completo se traslada a toda prisa al aeropuerto, pero, pese al operativo desplegado, el asesino escapa y empieza a matar en Estocolmo. No parece que lo haga por placer, por un deseo retorcido o perverso. Hay un patrón en lo que hace, pero no está claro cuál es. Con el propósito de averiguarlo, Paul viaja a Estados Unidos junto a su colega Kerstin Holm para entrevistarse con el FBI. Durante su ausencia, los asesinatos se suceden en Suecia ante la perplejidad de los investigadores, que tienen como única pista el pasado de la víctima de Newark y el método utilizado para asesinarla, una refinada técnica de tortura que parece remitir a un criminal entrenado, inteligente y extremadamente cruel.
En plena celebración de un partido de fútbol, un joven es atacado con una jarra de cerveza en un popular pub de Estocolmo y muere allí mismo. Parece un crimen sin importancia, al menos hasta que entra en juego la intervención del Grupo A, la unidad especial formada por detectives de élite para la resolución de crímenes internacionales, disuelta desde el último caso. La investigación se asigna a Paul Hjelm y Kerstin Holm. Conforme interrogan a los testigos, Hjelm y Holm empiezan a darse cuenta de que había algo más tras una escena del crimen aparentemente accidental. Además de estar conectados con unos crímenes ocurridos en Suecia durante el verano, en un futuro cercano, un ataque terrorista entra en escena. Ese caso pondrá a prueba la eficacia del Grupo A, dándoles, al final, una segunda oportunidad.
Alpin Mackay, una huérfana escocesa enviada a Barbados a muy corta edad, se siente plenamente identificada con la plantación azucarera en la que ha crecido. Hasta tal punto conoce los entresijos de la producción de azúcar que cuando su tutor, el propietario de las tierras, empieza a perder facultades, es ella quien administra el negocio con sorprendentes resultados.
En el mundo lóbrego y violento de la Escocia medieval, Johanna y Clare, hermanas gemelas, luchan por salvaguardar su honor y sus derechos. Descendientes, sin saberlo, de la familia real escocesa, sus vidas se ven una y otra vez sacudidas por la ira del implacable rey inglés. En esta guerra sin cuartel todo vale, hasta el punto de que cuando Clare muere accidentalmente, Johanna la suplanta para poder conservar las tierras y el castillo de su hermana.
Juliet White, nacida en la Colonias Americanas, viaja hasta Escocia para encontrar a su sobrina, la hija de su difunta hermana. En su búsqueda, llegará hasta el castillo del descarado y mujeriego Lachlan MacKenzie, duque de Ross. Allí se convertirá en la institutriz de las cuatro hijas ilegitimas del sensual escocés, todas concebidas en una corta y desenfrenada temporada en la Corte. Juliet sospecha que su sobrina es una de ellas pero no sabe exactamente cual. Así, se adentrará en el pasado familiar del duque para encontrar la respuesta a este misterio... Mientras, las niñas irán haciéndose un hueco en su corazón. Pero Lachlan no es un hombre capaz de dejar que una joven y hermosa mujer conserve la inocencia bajo su techo, y cuando se conviertan sus juegos de seducción en profundo deseo, intentará por todos los medios conquistar a Juliet. Ésta, a pesar de sus reticencias iniciales se verá incapaz de resistirse a los prohibidos placeres del hombre que sedujo a su hermana. No pudiendo oponerse al salvaje deseo, se sumergirá en un mar de pasiones, cuyas aguas quizás sean demasiado turbulentas para conducirla a una orilla segura. ¿Es un libertino empeñado en seducirla… o el noble que ganará su corazón?
Sarah MacKenzie creía ser la hija, fruto del amor, de Lachlan Mackenzie, duque de Ross. Pero descubrir que por sus venas no corría una sola gota de sangre noble la dejó destrozada, e incapaz de confiar en el amor de Mackenzie. Sarah huyó de las Highlands rumbo a Edimburgo, y abrió su corazón a los huérfanos de la ciudad… para enterrar su dolor y comenzar una nueva vida.Separado de su madre, cuyo afecto se centró en el hijo mayor, el apuesto Michael Elliot se unió a la Compañía de las Indias Orientaless. Pero años más tarde, una crisis familiar le lleva de regreso a casa a fin de colaborar en el plan de su madre: seducir a Sarah y hacerse con su generosa dote, que solventará los problemas de la empobrecida familia Elliot.Impulsado por el sentido del honor, Michael se propone ganarse el corazón de Sarah. Ella, lejos de la familia que la quiere, se rinde poco a poco a sus encantos. A pesar de ser funesta en un principio, su alianza florece en una apasionada unión… y juntos comienza a desvelar el poder sanador del amor…
Una mujer de extraordinario valor. En la boda de su hermana Sarah, Agnes MacKenzie se interpuso en el camino de una flecha, salvando la vida de Edward Napier. Para Agnes aquello fue cuestión de instinto y entrenamiento; su fama como guardaespaldas era conocida en toda Escocia, pero pocos sabían el dolor que impulsaba su peligrosa profesión. Un hombre de ciencia y misterio. A pesar de la cólera de Lachlan, duque de Ross y padre de Agnes, Edward Napier puso en práctica sus habilidades como médico para atender las heridas de esta. Le debía la vida, por lo que accedió a su petición de acompañarles a él y a sus hijos a Glasgow. Sin embargo, no tenía intención de permitir que aquella hermosa y temeraria mujer buscara al desconocido que había intentado matarle. Una apasionada unión entre iguales. Agnes había renunciado al amor hasta reparar el daño que había causado, pero la gran inteligencia de Edward y su elegante atractivo la atraían como un imán. La audacia de Agnes fascinaba a Edward y, de vez en cuando, le enfurecía. En medio de una nueva lluvia de flechas envenenadas, ambos cederán a un amor tan repentino como dichoso… un amor al que cuidar y proteger tan ferozmente como la propia vida…
Virginia MacKenzie desapareció hace diez años. Cameron, su prometido, debía viajar a Francia, y Virginia no iba a permitir que se separara de ella. Compró un pasaje que la llevara junto a su amado, pero el capitán del barco decidió que sería más ventajoso para él llevarla hasta las colonias americanas y venderla al dueño de una plantación. Durante todo ese tiempo, Cameron ha continuado con la búsqueda de su gran amor, incluso cuando el resto de la familia de Virginia había abandonado debido al paso del tiempo y al desánimo; pero no es hasta ahora, en el momento en el que empieza a perder la esperanza de encontrarla, cuando halla un indicio que puede llevarlo junto a ella. Sin embargo, Virginia ya no es la jovencita inocente que desapareció. Se ha convertido en una hermosa joven, con demasiados recuerdos dolorosos, demasiadas cosas que esconder, cuando descubre que, al fin, podrá regresar junto a las personas que ama. Todo un muro de secretos que Cameron tendrá que derribar si desea hacerla feliz.
Todo empieza un día normal y corriente en el que Frank y su madre ganan el gordo de la lotería. A partir de ese momento, ya no habrá más días normales y corrientes para ellos. Todos en el pueblo se movilizan para rascar algo del premio. Entonces su madre lo complica más al proponer un gran pellizco para quien realice la mejor acción para la comunidad. Una historia superdivertida sobre lo difícil que resulta ser increíblemente rico y a la vez una buena persona.
Einar, periodista exiliado en una pequeña localidad del norte de Islandia y alcohólico «en descanso», sigue la pista de dos muertes producidas en extrañas circunstancias. Se trata de dos adolescentes que aparentemente se han suicidado pero que han dejado tras de sí una estela de incógnitas de difícil comprensión. La investigación se complica por momentos debido a tres factores no menos complejos: en primer lugar Einar no sabe distinguir la vida privada de la laboral; además, hace todo lo posible por contradecir al redactor en jefe de su periódico, que se empeña en teledirigirle desde la capital; y, por si fuera poco, lo que tiene delante es una microsociedad gangrenada por la corrupción, la droga y una complicada red local de intereses políticos y económicos. He aquí una novela negra rebosante de ironía y de suspense, con la venganza, la codicia y la enajenación como temas principales en el marco de una sociedad mucho menos perfecta de lo que parece.
A inicios del mes de junio, Einar, bajo la presión de su redactor jefe, Trausti Löve, redacta para el periódico local Vespertino de Akureyri un artículo relacionado con una vieja casa abandonada, sujeto de rumores y leyendas sobre presencias extrañas que afirman que el edificio está encantado. Las llamadas intrigantes de una mujer que se hace llamar Victoria y se presenta como el contacto médium de Einar son el hilo conductor de las investigaciones. El festival de música al que acude la hija del periodista, junto a su novio, queda de escenario de fondo. Einar investiga la presencia de un avión privado que pertenece a una compañía de cine estadounidense interesada en la grabación de la película Hot Ice en la casa encantada, que trata de ardientes pasiones en tierras islandesas. La mañana siguiente a la fiesta, las estadísticas apuntan a que todo el mundo bebió demasiado, se cometieron varias agresiones e incluso hubo violaciones. Einar recibirá de nuevo una llamada de Victoria, que, con voz alcoholizada, le pide que acuda lo más de prisa posible, y con la policía, a la vieja casa. Junto con el comisario Olafur Gisli, descubrirán el cuerpo de una joven chica estrangulada, que aprieta en su mano el mensaje: «Ten cuidado, cariño». La muchacha quedará varios días sin identificar pues nadie señalará su desaparición.
Un autor fundamental de la literatura del siglo XX es Arno Schmidt (1914-1979). Sus estructuras novelescas rompedoras, su gusto por la experimentación y los juegos de palabras, de raíz rabelaisiana y joyciana, su ácido sentido del humor y la sátira, su pesimismo radical, hicieron de su literatura un mundo aparte en la literatura alemana posterior a la Segunda Guerra Mundial. Arno Schmidt es un autor de culto, casi secreto, y también un escritor de escritores.
En el año 2008 las bombas atómicas han desbastado el planeta, pero los sabios , pensadores y artistas más notorios viven a salvo en una 'isla de helices'. Winer , periodista norteamericano - luego de atravesar un territorio envenenado por las radiaciones atómicas, donde proliferan criaturas monstruosas- , llega a visitar la isla. Pasara allí cincuenta horas repartidas entre la zona norteamericana y la zona rusa, entrevistando a viejas glorias estériles y a funcionarios que reglamentan la 'creación colectiva', y descubriendo los horrores secretos : ' metempsicosis' de los rusos , hibernación de los norte americanos. Arno Schmidt nació en Hamburgo en 1914, y estudio matemáticas y astronomía en Breslau. Fue empleado de comercio, y desde 1958 vive retirado. Ha publicado entre otras obras una biografía de Fpuquet, un estudio sobre la obra de Karl May y dos novelas en facsímil de original dactilografiado: Zettels Traum(1970), y Die Shule der Atheisten (1972)
Los hijos de Nobodaddy' de 'Arno Schmidt': Trilogía acerca del fin de las esperanzas puestas en la humanidad. Sus protagonistas son encarnaciones de un personaje que Schmidt creó para sí mismo: un hombre enamorado de los grandes poetas, de las ciencias y de la técnica, testigo del horror de la guerra y cuyo ideal es la extinción de la raza humana. Las páginas de 'Momentos de la vida de un fauno', 'El brezal de Brand' y 'Espejos negros', diseccionan la vida en Alemania desde la era nazi, pasando por los años de la posguerra, hasta un futuro apocalíptico.
Una joven estudiante universitaria de Hamburgo recibe un espeluznante paquete una cálida mañana de abril: la primera página del manuscrito de una aterradora novela policíaca, cruelmente escrita sobre piel humana. El criminal, que secuestra a mujeres jóvenes para satisfacer su necesidad de materia prima, parece imitar con escrupulosa fidelidad una de las novelas del fracasado autor Christoph Jahn, que automáticamente se convierte en el principal sospechoso de la policía. ¿Recurre Jahn, al parecer en serias dificultades financieras, al crimen con el fin de promocionar su obra y situar sus libros en las listas de éxitos? La situación se complica cuando la policía descubre que no es la primera vez que las novelas de Jahn sirven de inspiración para un asesinato: cuatro años antes, en la ciudad de Colonia, hubo más muertes imitando otra de sus novelas, y entonces no se logró detener al asesino…
El psiquiatra Joachim Lichner fue condenado a trece años de cárcel por el asesinato de una niña gracias al testimonio de su novia, que posteriormente inició una relación sentimental con Bernd Menkoff, uno de los detectives de policía encargados del caso. Todo esto hizo que Alex Seifert, compañero de Menkhoff en la investigación, siempre tuviera dudas razonables sobre la culpabilidad del psiquiatra y el papel de su colega en toda la trama.
Un coche a toda velocidad, un brazo con un extraño tatuaje azul y el profundo dolor por el rapto de su hijo. Eso es todo lo que recuerda Sibylle cuando despierta en una fría y amenazadora habitación de hospital. Es entonces cuando descubre que lleva dos meses en coma, pero lo más sobrecogedor es que el personal del hospital le indica que, en realidad, ella nunca ha tenido hijo alguno. Sabiéndose de algún modo en peligro, Sibylle consigue escapar y dirigirse a su casa, donde la pesadilla, lejos de desaparecer, se agudiza cuando su marido dice no conocerla. A partir de ese momento, se irá introduciendo en una espiral cada vez más enloquecida, dónde nada es lo que parece, ni siquiera ella misma: policías corruptos, empresas sin escrúpulos y un increíble hallazgo que amenaza la paz mental de Sibylle, quien sólo podrá contar para aclarar lo ocurrido con su maltrecha memoria y un par de desconocidos. Una novela impactante, que se introduce en uno de los peores temores del ser humano: ¿Qué ocurriría si el mundo que conocemos hubiera dejado de existir?
Basada en un ensayo que se publicó en una revista científica durante la segunda guerra mundial —titulado «Observaciones sobre la fauna ornitológica de Auschwitz»—, esta breve y turbadora novela del escritor alemán Arno Surminski se centra en el complejo dilema de contraponer la lealtad a uno mismo, respetando nuestras ideas y sentimientos, con la lealtad al sistema que nos ampara y conforma nuestra identidad. Marek Rogalski es un joven estudiante de Arte polaco deportado a Auschwitz en 1940. Allí, por su pericia como dibujante, es elegido por el guarda y ornitólogo Hans Grote para que sea su asistente en la tarea de documentar la población de pájaros del lugar, un importante punto de encuentro de aves migratorias. En el transcurso de su tarea, durante las excursiones que realizan fuera del campo, los dos hombres establecen una relación de relativa proximidad. Mientras registran minuciosamente la cantidad de nidos de somormujos o la variación en la población de cornejas y alondras, ambos intercambian confidencias sobre la familia de Grote o el carácter de Elisa, la prometida de Marek. Sin embargo, si éste se interroga sobre el fatídico destino que lo aguarda, y espera encontrar en Grote una tabla de salvación, el oficial nazi parece dispuesto a acatar ciegamente las órdenes que recibe. Así pues, la afinidad y la complicidad surgidas con naturalidad entre dos seres unidos por el azar entrarán en un inevitable conflicto con el abismo que los separa, el de víctima y verdugo.
La publicación de esta novela en castellano tiene el interés de difundir entre el público español a un autor inglés muy poco conocido y menos traducido en España. Cuento de viejas The Old Wives Tale, 1908 es reconocida unánimemente como la mejor. Cuento de viejas, la novela más representativa del naturalismo inglés, narra la historia de una familia de comerciantes de las Potteries (la famosa región productora de alfarería del centro-norte de Inglaterra) a lo largo de tres generaciones, desde los años sesenta del siglo XIX hasta comienzos del XX, en el marco de las transformaciones sociales y tecnológicas que tienen lugar en la Inglaterra contemporánea, salvo el Libro III, que se desarrolla íntegramente en Francia, siguiendo las peripecias de una de las dos protagonistas, Sofía y Constanza Baines, y está dominado por el clima creado en París por la guerra franco-prusiana de 1870. El título nos remite al final, cuando las protagonistas (dos hermanas al principio adolescentes) son ya ancianas y, tras haber llevado unas vidas divergentes, vuelven a confluir en su última etapa. Cuento de viejas pertenece a una época de ebullición en las letras inglesas que posee un peculiar atractivo: la del primer tercio del siglo XX, es decir, la formada por el período eduardiano (Eduardo VII, 1901-1910) y el georgiano (Jorge V, 1910-1936). Esta época constituye un auténtico 'siglo de oro' literario, marcado por el surgimiento y desarrollo del modernismo, en un nuevo episodio de la vieja lucha de 'antiguos y modernos', que tan viva fue en Inglaterra por la solidez de la tradición narrativa nacional, menos experimental y más realista.
Anna Tellwright vive junto a su padre Ephraim y su hermana Agnes en Bursley, una de las cinco poblaciones que en conjunto dan nombre a las Cinco Villas, célebres por su industria alfarera en torno a la cual gira toda la actividad social, económica y empresarial de la zona. Plegada a la estricta disciplina impuesta por su padre en todos los aspectos de su vida, los días de Anna discurren de manera tranquila y solitaria entre su hogar y la escuela metodista. Esta monotonía se ve alterada cuando alcanza la mayoría de edad —que trae consigo un cambio inesperado y sorprendente en su situación personal— y resultan evidentes la admiración y atenciones que le dedica Henry Mynors, el soltero más codiciado de Bursley. Cuando sus compromisos sociales aumentan y las responsabilidades adquiridas la indisponen contra su íntegro sentido de la justicia, Anna se enfrenta al dilema de claudicar bajo el yugo paterno o seguir los dictados de su corazón y su conciencia.
Una sensacional comedia de enredo, suplantación y dobles identidades, elegida por Jorge Luis Borges como parte de su biblioteca personal. Priam Farll es el más reputado pintor de Inglaterra: célebre por sus cuadros sobre policías y pingüinos, es adorado por el público y la crítica. Tímido como un cervatillo, nadie conoce su aspecto, pues lleva años viviendo en el extranjero junto con su criado Henry Leek, un granuja de tomo y lomo. Un día regresa a Londres de incógnito, y Leek tiene el mal detalle con su amo de fallecer súbitamente de pulmonía. El doctor que certifica la muerte confunde a Leek con Priam Farll, y pronto la noticia corre como la pólvora: el gran pintor ha muerto. Farll ve el cielo abierto y decide no sacar al mundo de su error: finge que es Henry Leek, y hasta asiste a su propio entierro en la abadía de Westminster. Es entonces cuando entra en escena una pizpireta viuda de Putney, Alice Challice, que estaba prometida en matrimonio por correspondencia con Leek, y con quien Farll se aliará para luchar contra las adversidades de la vida moderna.
Un multimillonario estadounidense, junto a su caprichosa pero muy sagaz hija, Nella, recalan en Londres, en el mejor hotel de la ciudad y por extensión del mundo civilizado, el Gran Hotel Babylon. Por un capricho azaroso, se convierten en los dueños del hotel y comienza la aventura de sus vidas, gracias a un director que se jubila anticipadamente, a un personal de servicio variopinto y algo deshonesto, a un príncipe empobrecido de la realeza que desaparece misteriosamente y al que han de ir a buscar, además de un cadáver, que también desaparece misteriosamente; porque en esta novela, todo es muy sospechoso e intrigante. Pero como en los buenos dramas con sabor añejo, al final, todo acaba bien, y las cosas retornan a su lugar, como si fuese lo más natural del mundo. Detrás de tanta intriga se esconde una comedia entretenida, llena de tópicos y típicos personajes que hacen las delicias de los lectores, aún hoy, más de un siglo después de su publicación.
Robin Dalton se miró en el espejo. Estaba orgulloso de sus orejas azules, su ojo semicerrado, y otras tumefacciones. Eran huellas gloriosas de su triunfo por «K. O.», en el séptimo «round» sobre el duro pegador negro que la noche anterior deliberó con él, entre cuerdas, para averiguar cuál de los dos hacía más méritos para ser el finalista del torneo cinturón de oro, aficionados, peso medio. Robin Dalton, de ancho cogote, rostro chato y fornida anatomía, no aceptaba consejos de nadie. Era, por naturaleza, agresivo, aunque sin maldad. Pidió con autoridad: —Un doble de coñac, tú.
El clima del estado de Wisconsin, es considerado muy saludable por sus habitantes, porque es fresco en verano y de un seco cortante en invierno. Los numerosos turistas del típico estado, consideran que más que un frío seco y cortante, en invierno son agujas frigoríficas las que se inyectan en el rostro del desprevenido visitante. Para Simon Foster, nacido en Madison, la capital del Wisconsin, no había belleza que pudiera superar al lento aparecer de la primavera, cuando las nieves sonrosadas por el sol, iban fundiéndose. Tenía la ventaja sobre muchos de sus conciudadanos, de no ser ferozmente localista. Había viajado a partir de sus veintidós años, cuando se alistó en la infantería rasa, provocando, con ello la repulsa de varios honorables miembros de la familia Foster.
Edwin Parks era buen bailarín, y Norah Morley, ignorándolo, porque según la paterna visión que oyó a los cuatro años, su madre se había ido al cielo, llevaba en la sangre el alado espíritu de la danza. Lo cierto es que cuando Norah Morley intentó tomar lecciones de danza clásica, chocó con la rotunda negativa de Cecil Morley. Y ella, plenamente sumisa a la paterna autoridad, se contentó con seguir un curso de dibujo y pintura en compensación.
Un hombre aparece con un puñal clavado en la nuca flotando en los pantanos que rodean la ciudad de Nueva Orleáns. Es el segundo caso en pocos días y la policía encarga el caso al lince Graham Colbert, un brillante policía apodado el Judas por ser hijo y hermano de hampones de renombre en la ciudad.Colbert empieza su investigación y ello le lleva a visitar diversos tugurios y a enfrentase a su hermano Fox que, aunque delincuente —un simple contrabandista—, es un tipo noble que no perdona a su hermano su cambio de bando. Todo ello cambia cuando Graham, investigando el caso de los puñales y advirtiendo que las ya tres víctimas tenían algo en común, recibe una brutal paliza que le deja malherido e irreversiblemente ciego. La ceguera de Colbert le lleva a las puertas del suicidio pero su hermano asume su cuidado con la ayuda su actual amante, la bella artista Carolina Depré, que canta como la Piaf y la Greco y que emociona con su versión de «Les feuilles mortes». Los dos hermanos, uno como mente pensante y el otro como brazo ejecutor, empiezan a desarrollar su investigación y ello les lleva descubrir que los tres asesinados formaban parte de un grupo de siete náufragos que se salvaron de un extraño hundimiento; en la investigación que dirige desde su ceguera Graham, Fox queda fascinado por la figura y sensualidad de Marian Bellamy, también cantante, y descubre que tras el naufragio había una compleja trama de contrabando de lingotes de oro que empezaba en Australia, seguía en Colombia y culminaba en Nueva Orleáns. Tras diversos avatares en los que Fox actúa bajo diversas máscaras, se desvela toda la trama y se descubre que Carolina era una cómplice de los contrabandistas y que Marian era una policía australiana que estaba siguiendo el caso. Graham resuelve, pues, el caso, y Marian y Fox inician una relación amorosa.
Ned Carleton pasó desde el diminuto cuarto de baño a su alcoba. Silbaba una tonadilla que oyera no sabía dónde. Pensó que había músicas que se retienen en el oído durante cierto tiempo y después se olvidan. Y vuelven a retenerse otras, fácilmente. Le pasaba lo mismo con las mujeres. Atrajo hacia sí el cajón de la cómoda, y sacó una automática de su funda de flexible cuero negro, que deslizó entre su camisa y el pantalón, al lado derecho del estómago. Era zurdo. Se miró complacido en el espejo al ajustarse las solapas de la americana azul.
Archer Brumel provoca una reyerta en un bar de Nueva York en Nochevieja. Él es un detective que acaba de salir de la prisión donde estaba cumpliendo una pena por homicidio; mató involuntariamente y en defensa propia a su socio cuando descubrió que éste escondía bajo su negocio un red de tráfico de drogas. En el «Trocadero» encuentra a un viejo amigo, Adrián Wilcox, acompañado de la bella Silvia Marcy; Brumel le reprocha que deje a su esposa —una antigua prometida suya— en noche tan señalada y eso provoca el rifirrafe. Todo se resuelve cuando Wilcox explica que Silvia es una amiga de la familia y que él está felizmente casado. Al día siguiente Archer recibe la visita de Silvia quien le informa que Wilcox se ha suicidado y de cómo sospecha de que todo ello se trata de una trama asesina urdida por los Marcy, que, al no poder declararla loca, quieren matarla y han envenenado a Wilcox para que no desvele un secreto que podría hundir su fortuna y su reputación. Ésta no la única vista que recibe Archer; poco después es acosado por dos rufianes, Minelli y Marloy, antiguos compinches de su socio muerto, quienes le quieren obligar a que desvele dónde guardó el fallecido un alijo de marihuana. La trama se complica aún más cuando Silvia desvela a Archer que ella tiene una enfermedad cardiaca congénita que la matará en breve pero que tiene guardado el secreto de los Marcy en la consulta del médico que lleva su caso, el doctor Elliot. Archer es secuestrado y torturado por los rufianes —aunque consigue escapar—. Silvia muere en extrañas circunstancias y el detective recibe su legado, una lápida de mármol rosa donde se desvela que los Marcy han hecho su fortuna a partir de una gran estafa. La visita a los ricos Marcy parece demostrar la corrupción de esta rica familia pero finalmente se desvela que en realidad Silvia estaba trastocada, Wilcox se suicidó inducido por ésta y ella murió a causa de su enfermedad. Minelli y Marlow son detenidos, Archer confiesa a la policía el paradero del alijo demostrando así que en ningún momento tuvo que ver con los tratos de su socio. Finalmente Archer recibe una invitación para formar parte de la policía al tiempo que inicia una relación con la viuda de su amigo Wilcox, Ann, a la que siempre había amado.
El alborozo contagioso con que los habitualmente comedidos londinenses habían acogido el final de la guerra, fué decreciendo y dos semanas después volvió a dominar el ritmo acostumbrado. Un ritmo monótono para muchas personas, y sobre todo para Cinthya Sutton, dependienta de la sección de perfumería de los «Grandes Almacenes Davies». Estaba ahita de oírse decir que era un clásico ejemplar de inglesita deliciosa. Ahita, porque si bien era halagador, el madrigal procedía casi siempre de cincuentones elegantes o de jóvenes galanes con intenciones igualmente pérfidas.
De los cinco distritos que componen la ciudad de Nueva York, Manhattan, Bronx, Brooklyn, Queens y Richmond, el matrimonio Lindsay había elegido para residir el distrito de Queens. Era una elección acertadísima, comentaban todos los habitantes del distrito de Queens. Bastaba atravesar el puente de Blackwall sobre el East River, y se encontraba uno de lleno en el centro de Manhattan, con su tumultuoso dinamismo.
Inicial versión de la novela Sombras mortales, una obra de 1965. En esta primera versión la narración es algo más prolija y rica en personajes secundarios; de esta versión a la del año 1965 hay un proceso bastante complejo de reelaboración. Se suprimen fragmentos y personajes y se reelaboran textos y diálogos, no sabemos si para modernizar los contenidos y el estilo o para despistar a aquéllos que podrían reconocer la inicial versión de la novela. Aparece una de las primeras referencias explícitas a Simenon i Maigret, “no ignoraba que le apodaban “Maigret” por su cachazuda corpulencia y su constante afán por vigilar las estufas” que nos habla de la evidente francolfilia del autor y de cómo Simenos, en 1953, empezaba ya a ser un autor popular en nuestro país. Como en muchos de los títulos de la colección Detective, la referencia al traductor se lleva a cabo para reforzar la credibilidad de la existencia del autor foráneo que firma la obra.
Novela ambientada en los años de la ley seca que expone cómo un mafioso traicionado decide urdir una venganza sin saber que sus hombres de confianza van a ser policías camuflados. Vernon Fraser y Edgar Sikes, dos aparentes hampones, cínicos y descreídos, vigilan a una chica, Peggy Haines, desde hace días. Tras diversos avatares descubrimos que ella forma parte del gang de Big Al Scorpio, que parece querer esconderse tras la muerte de su socio, Brant Rogers. De forma extraña mueren los socios de Scorpio, entre ellos Peggy y su protector, Lloyd, y en la empresa es también asesinado Sikes; Fraser se toma el caso como algo personal y llega a descubrir que Rogers no estaba muerto y que la esposa de Scorpio, Lula, era en realidad una hija abandonada por Rogers. La que aparece al principio como probable culpable —Lula— se muestra al final como una mujer inocente que no sabía de la condición de gángster de su marido y de su condición de hija de un malvado como Rogers. Éste había querido contratar dos matones y por ello había contado con los servicios de Sikes y Fraser, dos matones de Chicago, para que viniesen a Nueva York sin saber que, en realidad, ambos eran dos policías especializados en infiltrarse en el mundo del hampa. Al final Rogers muere acribillado por la policía, Scorpio es detenido por los documentos que libró Rogers y es condenado a muerte y ejecutado; Lula recupera su condición de mujer libre. Ficha extraída de la página: http://peterdebry.blogspot.com.
—Cálmese, Joan, porque sólo consigue estropearse los ojos con tanto llanto. Ya todo ha pasado, muchacha… Está aquí muy a cubierto de todo daño. ¿Quiere un poco más de agua? La cajera del «Jefferson Market» mordiéndose los labios, intentó de nuevo dominar sus nervios. Intentaba apartar la imaginación del atroz espectáculo reciente. Aquellos hombres disparando contra sus compañeros de trabajo, que saltaban como peleles, a cada impacto…
Un joven meteorólogo neoyorkino, analizando los últimos datos suministrados por los satélites meteorológicos, descubre que la Tierra está entrando en un nueva Era Glaciar. Pero sus predicciones son ridiculizadas. A pesar de ello el avance de los hielos polares es, día a día, más amplio. Las poblaciones esquimales emigran hacia el sur y los primeros ejemplares de la fauna polar aparecen cerca de Nueva York.
De pronto se desencadenan los acontecimientos y un inmenso glaciar avanza hacia el sur. Las cosechas, las comunicaciones, todo el sistema de suministros de las naciones se ven destruidos por el hielo. La gente huye desesperadamente hacia zonas tropicales y la civilización se derrumba con el incontenible avance del hielo…
“Piensa positivo, actúa positivo es un libro que despierta a ese ‘ser valiente’ que esta dentro de cada uno de nosotros y lo invita a dejar de lado cualquier miedo, y a poner sus sueños en acción.” –Elexito.com
Inteligente e inspirador, Piensa positivo, actúa positivo toca hasta lo más profundo del sistema de creencias y valores de sus lectores. Este libro es un testimonio _el de que aquello en lo que pensamos constantemente moldea nuestro mundo y construye nuestros sueños, y de que, si además de eso le agregamos una acción decisiva y sobre todo positiva a esta fórmula, cualquier cosa es posible.
Piensa positivo, actúa positivo está escrito con la intensión de ser una herramienta motivadora. Si estás estancado en una situación incómoda o conoces a alguien que no puede salir adelante o está atado a una vida que no desea, este libro es para ustedes. Tener sueños y pensamientos positivos no es suficiente, no basta con “Yo quisiera tener o ser”. Es necesario para todos aquellos que buscamos la felicidad poner nuestros deseos en movimiento y este libro justamente es un cofre lleno de ejemplos de cómo hacerlo.
En el interior de esta obra, los autores, que además son padre e hijo, nos traen un libro cargado de enseñanzas y, sobre todo, nos plantean las claves para llevar un estilo de vida positivo. Sin embargo, el pensamiento positivo por sí solo no basta, es por eso que muchas personas afirman que estas ideas no son efectivas. Los Fox nos demuestran todo lo con su ejemplo propio y con los que ofrecen dentro de esta obra.
Arnold Hauser se constituyó en un clásico desde que apareció en 1951 su «Historia Social de la literatura y el arte». Pocos libros han tenido, en efecto, tal éxito de crítica y público en los últimos años. La perspectiva sociológica que Hauser aplicó a la historia de la cultura es ya parte del sistema conceptual de todo hombre que merezca llamarse “culto”. “El arte y la literatura, a partir del paleolítico, hasta el cine moderno y el arte de Picasso y Dalí, es considerado como florecimiento siempre imprevisible, pero condicionado por el ambiente y por una complicada combinación de premisas económicas y sociales.” El arte y la literatura son un producto social y no pueden estudiarse sino en relación con los demás aspectos de la sociedad en que vive el artista: religión, economía, política…
Este libro es una exposición de la actitud de los cristianos frente a los adeptos de otras grandes religiones vivas. En él se examina cuál es esa actitud y cuál debería ser, así como tratar de establecer cuál es la posición del cristianismo y de las otras religiones en el marco del mundo moderno y frente al resurgimiento de otra religión antigua y perversa: el culto de nosotros mismos, en plural y en la forma del poder humano colectivo.
Con una ojeada al índice de este libro, el lector podrá apreciar en seguida que la obra abarca una amplia variedad de temas. Ellos fueron objeto del diálogo porque eran cuestiones que interesaban personalmente a los dos participantes. Publicamos ahora el diálogo en forma de libro con la esperanza de que las cuestiones tratadas sean asuntos de interés general para los contemporáneos de los autores que viven en el mundo anglohablante, en el Japón y en otras partes.
El diálogo naturalmente se desarrolló en forma oral. Los dos participantes se reunieron en Londres y su conversación duró varios días. El señor Richard L. Gage recogió lo que dijeron y lo ordenó. Su trabajo de compilación fue arduo, pero el señor Gage lo llevó a cabo con suma pericia. Los ojos del lector exigen una exposición diferente de la que sigue el oído del oyente, y los dos autores del libro agradecen sinceramente al señor Gage por el servicio que les ha prestado y creen que su gratitud será compartida por el lector.
Su historia es excepcional y de lo más divertida, y en estas páginas nos la cuenta de maravilla. Nació en un año de hambruna en una pequeña ciudad de Austria y era hijo de un oficial de policía muy severo. Soñaba con viajar a Estados Unidos para llegar a ser campeón de culturismo y estrella de cine. A los veintiún años vivía en Los Ángeles y había obtenido el título de Mr Universo. Cinco años después, había aprendido inglés y se había convertido en el mejor culturista de todos los tiempos. Al cabo de diez años, había conseguido un título universitario y se había hecho millonario, con empresas en el ámbito de la propiedad inmobiliaria, el urbanismo y el culturismo. También obtuvo el Globo de Oro por su debut como actor dramático en Músculos de acero. Veinte años después, era la estrella de cine más famosa del mundo, estaba casado con Maria Shriver y era un incipiente líder republicano vinculado con la familia Kennedy.Treinta y seis años después de llegar a Estados Unidos, el hombre al que sus compañeros culturistas habían apodado «el roble austriaco» fue elegido gobernador de California, la séptima economía del mundo. Durante su gobierno, el estado tuvo que hacer frente a una crisis presupuestaria, desastres naturales y disturbios políticos.Trascendió las líneas de su partido para luchar por mejorar el medio ambiente, por reformas electorales y por alcanzar soluciones bipartidistas.Con Maria Shriver tuvo cuatro hijos estupendos. Después de un escándalo provocado por él mismo, trató de mantener unida a su familia. Es la primera vez que narra en primera persona la historia de toda su vida. Lo que nos cuenta Arnold es todo un desafío.
Capturado por los alemanes durante la Primera Guerra Mundial, Grischa es un militar ruso que logra fugarse del campo de prisioneros donde está confinado. Para intentar recorrer con éxito el largo camino a casa desde territorio enemigo, decide disfrazarse con el uniforme de un soldado alemán que ha encontrado muerto en la nieve. Sin embargo, lo que Grischa no sabe es que el cadáver del alemán tiene una historia detrás y suplantar su identidad puede acarrearle fatídicas consecuencias si le retienen de nuevo.
En Dolor de uno, dolor de todos, Arnoldo Kraus nos habla constantemente sobre la necesidad que tiene la persona que soporta el dolor de restaurar en su horizonte vital un rayo de esperanza, un sentimiento reconfortante: sentirse escuchado, tal vez tocado.Prólogo de Francisco González Crussí."En la clínica la palabra más frecuente es dolor; transferir esa carga y asumir que llegó a buen puerto le permiten al enfermo depositarse, saber que sus dolores y miedos fueron entendidos y suelen mejorar sin medicamentos y sin necesidad de exámenes o radiografías...Como si lanzara un recordatorio a quienes dan la impresión de haberlo olvidado, el doctor Arnoldo Kraus menciona en este libro que el primer deber del médico es aliviar el sufrimiento; que el dolor no es un beneficio sino un agobio que pesa sobre el enfermo, haciéndolo más enfermo de lo que sería sin él.Que el dolor sea, desde un punto de vista filosófico, inexpresable o indecible,...
Prólogo de Eduardo Matos Moctezuma Autonomía y libertad son bienes y derechos incuestionables: entonces, ¿por qué nos resistimos a ejercerlas ante Su Majestad la Muerte? A diferencia de la vida, la ciencia carece de límites. Los inconmensurables avances de la tecnología médica han prolongado, no siempre para bien, la vida. Cuando privan la desesperanza, el dolor, el sufrimiento y el desasosiego, y se prolonga la muerte por el uso inadecuado de la biomedicina, el ser humano tiene derecho a elegir cuándo y cómo morir. Adueñarse del final es un privilegio. Hacerlo dignifica a la persona, ilumina su historia y enaltece a quienes acompañan al enfermo y caminan a su lado el tramo final. Pensar en el final significa cavilar en la propia existencia, en la de los seres queridos y en el entorno inmediato. En La morada infinita. Entender la vida, pensar la muerte , Arnoldo Kraus expone ideas sobre cómo se confronta y entiende, en la actualidad, el proceso de morir. Ofrece argumentos no maniqueos sobre eutanasia y suicidio asistido. Dignidad, independencia y el valor de la lealtad y la escucha recorren las páginas del libro.
¿Qué ocurre cuando ya no encontramos en el enfermo ni rastros de lapersona que fue, ni de su dignidad? ¿Cómo se mide el sufrimiento? ¿Quéhace a una persona, persona? ¿Se modificará con el tiempo la definición de vida? En un tono confesional, Kraus aborda temas muy dolorosos: la pérdida delos seres queridos, aun en vida, ante enfermedades crónicas, demenciasenil, Alzheimer; la soledad de la vejez, el papel de la medicina y de la sociedad.
OBRA CANDIDATA AL PREMIO EUSKADI DE ENSAYO EN CASTELLANO
Estamos ante un libro fuera de serie por bigámico, solícito y osado. Un libro que es escritura de escrituras y que se podría decir que esta escrito al alimón aunque conserve el perfil singular de cada autor. Un libro transitado por dos miradas enamoradas de la palabra que intentan dar testimonio de aquellos momentos en que la literatura es esencial, audaz, alimenticia, necesaria.
Una psicoanalista donostiarra y un psicoanalista argentino dan un paso al costado de su especialidad y se arrojan a ser lo que íntimamente son: lectores e indagadores curiosos de las entretelas de la letra, de aquellos notables narradores que signaron el mundo del relato con obras inusuales e imperecederas.
Los autores se sienten cómplices no sólo entre ellos sino con aquellos que han marcado sus sueños de leyentes. Desde Franz Kafka a Jorge Luis Borges, de Sandor Márai a Ernesto Sábato, de Joseph Roth a Stefan Zweig, de Tomas Mann a Imre Kertesz o Félix Grande, de Fiodor Dostoievski a Fernando Pessoa, los autores transitan mundos y textos inolvidables.
No se trata de criticas bibliográficas sino de encuentros compartidos con la belleza. Un viaje o tránsito sólo admisible para aquellos que aun creen en la soberanía del verbo y en el pacto con la creación y la voz.
Los autores rastrean y anhelan la palpitación redentora del lenguaje, esa que conlleva un modo de pensamiento singular, aquel que se aproxima a lo que don Miguel de Unamuno afirmaba: se trata de pensar el sentimiento y sentir el pensamiento.
Este es quizá un modo de comenzar a salvarnos.
### About the Author
Arnoldo Liberman es médico psicoanalista y escritor (nacido en Argentina, 1933). Hace 46 años años que reside en Madrid, ha sido profesor invitado al Master en Teoría Psicoanalítica de la Universidad Complutense de Madrid y al Instituto de Estética y Teoría de las Artes de esta misma ciudad. Faja de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores (1964); Auspicio del Fondo Nacional de las Artes (1965); Accésit del Premio Jano de Medicina y Humanidades (1981, Barcelona); Premio de la Sociedad Española de Médicos Escritores (1992) y Premio Fernando Jeno al Humanismo (México (1992). Es actualmente Asesor Cultural de la Fundación Lírica del Teatro Real de Madrid junto a Mario Vargas Llosa y Antonio Muñoz Molina. Es Miembro del Consejo Asesor de la Fundación HispanoJudía. Es autor de las siguientes obras: "Gustav Mahler o el corazón abrumado" (1982); "Grietas como templos: biografía de una identidad" (1984); "La fascinación de la mentira" (1987); "Las inquisiciones de la nostalgia" (1988); "Wagner o el visitante del crepúsculo" (1990); "Freud, el judío que regresó de Egipto" (1990); "Los celos y el amor" (1991); "La música, el amor y el inconsciente" (1993); "La nostalgia del padre" (1994); "El pentagrama secreto. El mito de la música y la música del mito" (1997); "En los márgenes de la música" (1998); "Música. El exilio acompañado" (2000); "Barbarina, el fulgor del instante" (2001); "AEIOU, La Viena de Mahler y Freud" (2003); "Previamente, la alegría" (2005); "Éxodo y exilio. Saldos y retazos de una identidad" (2006); "Caminante de corcheas" (2008); "Escribidurías" (2010); "Kadish por Gustav Mahler" (2011); "Arnold Schonberg o la disonancia del dolor judío" (2012); "Simplemente además" (2014); "A tientas hermano Kafka" (2015); "Heidegger y yo, judío" (2018). Igualmente, colabora en diversas publicaciones con ensayos sobre temas psicológicos y artísticos. Participó en el libro "Ernesto Sábato. Premio Cervantes"; en "El libro de los decálogos: reglas de oro para vivir mejor" y en "El libro de la mujer". Es asiduo autor de programas escritos y conferencias en el Auditorio Nacional y en el Teatro Real de Madrid y ha participado en programas y conferencias en el Teatro Liceu de Barcelona. Ha realizado diversos café konzert en la Casa Argentina de Madrid (Casa de los Artistas), La organización Bet El y en el café Comercial (en homenaje a don Antonio Machado y a Aníbal Troilo).
Lierni Irizar (Bergara, 1965) es psicoanalista miembro de la Escuela Lacaniana de Psicoanálisis y la Asociación Mundial de Psicoanálisis, trabajadora social, DEA (Diploma de Estudios Avanzados) en Ciencia y Humanismo, doctorada en filosofía y máster en Salud Mental. Ha realizado un amplio y diverso recorrido tanto en el campo social como educativo y clínico. Destacamos entre sus publicaciones "La pérdida del humano. El modo en que se trata el sufrimiento, la enfermedad y la diferencia" (2014); "El cuerpo, extraño. Dos formas de entender el cuerpo: medicina y psicoanálisis" (2016) y "Banalizaciones contemporáneas: lenguaje, sufrimiento, enfermedad y muerte" (2018); "Lo que nadie quiere saber" (2021); "Las palabras que me soñaron" (2022).
En 1934, un grupo de buzos y marinos de la isla de Margarita,Venezuela, fueron contratados para pescar perlas en la India, y quedaron abandonados a su suerte en Massaua, colonia italiana de Eritrea, en la antesala de la II Guerra Ítalo-Abisinia. En ese entorno, un joven aprendiz busca su destino. Massaua fue considerada una de las cinco mejores novelas publicadas en Venezuela durante 2012, según el jurado del Premio de la Crítica a la Novela del año.
La aparición del cuerpo magullado de una joven en una pequeña isla caribeña pone a temblar la estructura del poder. ¿Quién es ella? ¿Quién o quiénes son los responsables del crimen? Averiguarlo es la labor que emprende Néstor Ortega, un apasionado del jazz, por encargo de las autoridades de la isla. Una investigación que tropezará con las barreras del silencio y las complicidades menos esperadas, abriendo múltiples hipótesis de solución, algunas de las cuales se exploran en caminos que se bifurcan, dándole al lector la posibilidad de elegir.
Marek, el protagonista de esta novela, es un solitario y tímido estudiante de filosofía vienés de dieciocho años que se lanza a la búsqueda ansiosa y desesperada del amor total, salvaje, apasionado, infinito… Sin embargo, pronto se enfrenta a un traumático descubrimiento: su pene no está en armonía con el resto de su cuerpo. Para complicar aún más las cosas, su familia es más bien rarilla: dos hermanos desquiciados, una madre hipersensible y excéntrica y un padre incapaz de mostrar su afecto. Marek lo intentará todo para superar su defecto físico y para conquistar ese «amour fou» del que hablaban los surrealistas. Pero empiezan a surgir ciertos imprevistos: el joven protagonista comienza a quedarse calvo y, para colmo, su madre muere en circunstancias misteriosas.
Aaron Grunberg nació en 1971, debutó a los 23 años con la novela Blauwe maandagen, la cual le dio un éxito inmediato. Es autor de Figuranten y Fantoompijn, novelas que consolidaron su carrera como escritor. Posteriormente escribió De asielzoeker y De joodse messias. Grunberg escribe ensayo, teatro y columnas de viaje. Por su obra obtuvo el Premio AKO de Literature Prize, el Libris Literature Prize y el Flemish Golden Owl Award. Bajo el pseudónimo de Marek van der Jagt, publicó una exitosa novela: De geschiedenis van mijn kaalheid y Gstaad 95-98 (2002), así como el ensayo Monogaam. Arnon Grunberg vive y trabaja en Nueva York.
Ganador del Premio Anton Wachterprijspor.
'A stunning twist', Los Angeles Times
'Grunberg es el Houellebecq holande´s'
'A meet-cute worthy of J. M. Coetzee's 'Waiting for the Barbarians' ('Do you want company, sir?') allows Hofmeester to face the man he is and — more to the point — the man he isn't.' The New York Times
«Sueños impúdicos» reúne tres novelas cortas estrechamente emparentadas por el hecho de situarse en el barrio antiguo de Praga en los últimos días de la segunda guerra mundial, caracterizados por el miedo, la confusión y el desmantelamiento de las estructuras de ocupación alemanas. El encuentro entre una prostituta alemana y un juez nazi perseguido por los partisanos, la amarga primera cita amorosa de una joven checa con un oficial nazi de la marina o la sofocada y sórdida tragedia de una joven taquillera de cine en el vórtice de la tragedia son a un tiempo estampas realistas y visiones alucinadas con fuerte carga simbólica: la animalidad, el instinto de muerte y el de supervivencia, el amor, la crueldad, la ausencia de ley y la aniquilación de los judíos, en una gama expresiva que va desde la más límpida sencillez hasta la mayor complejidad, alcanzan acentos de grandeza adusta, angustiosa y brillante a un tiempo, que acreditan en Lustig a un escritor excepcional que, según «The New York Times Book Review», describe el angustioso paisaje de la Praga de su juventud con intensidad parecida a la de la Odessa de Isaak Bábel o el Chicago de Saul Bellow. «Sueños impúdicos» revela al público de habla española a uno de los grandes autores de la actual Europa Central.
El hombre del traje gris (L’Homme au complet gris) de Arnould Galopin (1863–1934), publicada originalmente en francés en 1912. La obra nos relata el encuentro entre el sabueso australiano Allan Dickson, que en su llegada a Londres coincide con el gran detective «Herlokolms», seudónimo creado para poder usar el personaje de Arthur Conan Doyle, Sherlock Holmes; como el «Herlock Sholmes» de Maurice Leblanc en las historias de Arsène Lupin: desde ese momento, en colaboración tendrán que investigar unos atroces crímenes cometidos por un misterioso individuo al que se conoce por el nombre de Jack el Destripador. Un sorprendente relato en el que nada es lo parece y que rinde homenaje a una tradición iniciada por el Dupin de Edgar Allan Poe…
En la fachada de La Pedrera aparece colgado un cuerpo en llamas. La investigación posterior descubre un grado de crueldad extrema: la víctima fue colgada viva antes de prenderle fuego. Todo indica que en la Barcelona para turistas ha empezado a actuar un psicópata. Y políticos, policía y jueces tienen prisa por detenerlo. Para ello, el Grupo Especial de Homicidios de los Mossos pide ayuda al inspector Milo Malart, apartado del servicio por un expediente disciplinario. Solo él parece capaz de detener al monstruo que amenaza con sembrar Barcelona de cadáveres. Así arranca una investigación trepidante y repleta de macabros hallazgos, en la que Malart y su compañera, una joven inspectora formada en Estados Unidos y de métodos muy diferentes a los suyos, van a tener que enfrentarse con unos crímenes atroces. En su camino para resolverlos les aguardan todo tipo de enigmas y dificultades: corrupción a distintos niveles, tanto policial como del poder económico, las culpas del pasado, extraños símbolos masónicos, oscuras redes de pederastia, una prensa sensacionalista ávida de dar noticias morbosas, y un asesino despiadado que busca venganza y vive obsesionado con las claves secretas de la obra de Gaudí.
«Esa era la verdadera tragedia: que la incompetencia de los gobernantes iba a destrozar una generación, arrebatándoles el futuro». Milo Malart se enfrenta a dos asesinatos y una macabra matanza de perros en Barcelona. Como telón de fondo, una ciudad estigmatizada por los estragos de la crisis, el paro y la corrupción.
El lunes al amanecer un joven se presenta en comisaría. Va empapado de sangre de pies a cabeza. «Todos están muertos», balbucea, y acto seguido se desmaya. El análisis de sus ropas constata que la sangre pertenece, como mínimo, a tres personas. ¿Se encuentran ante una víctima más, un superviviente? Pero, entonces, ¿por qué guarda silencio cuando recupera el conocimiento? Cabe otra posibilidad: que se trate de un asesino múltiple. Sin embargo, todo su entorno lo define como un chico dócil, incapaz de matar a una mosca. ¿Qué es en realidad Lucas Torres? Milo Malart, policía judicial de los Mossos, vuelve a su puesto después de unas vacaciones forzadas. El caso con el que se enfrenta será uno de los más sanguinarios y complicados de su carrera y el principal sospechoso es un joven que esconde muchos secretos. Una historia donde se mezclará la investigación, una ciudad convulsa, los problemas familiares y sus demonios interiores.
California 1860. Después de haber sido vendida por su padre, la bella gitana española viaja con los Cortés hasta California. La fiebre del oro y toda la riqueza de esas tierras atrae a millones de europeos, destruyendo el universo ordenado de las tribus americanas que se mantuvieron seguras durante miles de años, hasta que de repente, sin advertencia, fue aniquilada por una sociedad extranjera. Entre tanto dolor y confusión nace una hermosa historia de amor entre la gitana y un joven nativo.
España 2004. Elena recibe una carta desde California que le hace volver después de mucho tiempo a esas tierras, junto con su hijo David. Él descubrirá los fascinantes orígenes que le atan a las verdes y primigenias montañas que bordean la Bahía de Humbolt.
«…por fin me he decidido, llevo mucho tiempo queriendo hacerlo y no por falta de ganas lo he aplazado tanto, sino por miedo. Ese miedo a recordar y sufrir por ello.
La historia de mi familia no debe perderse en el olvido, por eso hoy, comienzo a escribir en estas páginas. Trataré de plasmar fielmente la esencia de los personajes que han marcado mi vida. Yo soy el último vestigio de esa raza de hombres que creía en la magia, esa raza que hablaba con los espíritus del bosque. Esos que entendieron que eran aire, que eran tierra.
Por todo esto y más, cogeré fuerzas, inspiraré y espiraré las veces que haga falta, por si en algún momento me falla el pulso y me quedo sin aire. Ya no hay marcha atrás. Se lo debo a todos ellos; a los Wyiot que en un pasado poblaron estas tierras.»
Un verano para disfrutar. Un grupo de amigos. Un amor inesperado. Valeria necesita un cambio de aires, ¿y qué mejor forma que ir de monitora a un campamento de verano? Carol, su mejor amiga, la empuja a vivir nuevas experiencias. Ale, el niño rico, se interpondrá en su camino poniendo su mundo patas arriba. ¿Qué puede salir mal? Del odio al amor solo hay un paso. ¿Estarán dispuestos a darlo?
Adirane regresa a la casa familiar de su pueblo junto a la ría, en el norte del País Vasco, con la frágil excusa de registrar la última memoria de infancia de su abuela Ruth durante la Guerra Civil. Ha dejado atrás a su marido y a su hija de cinco años, sin siquiera una explicación, para intentar encontrar un nuevo punto de partida desde su propio pasado. En la casa vive también Adriana, su madre, con quien no se habla desde hace años. ¿Qué significa criar o cuidar de alguien bajo tres contextos históricos y políticos muy dispares y en un territorio casi permanentemente tensado? En esta novela, madres e hijas de diferentes generaciones irán tejiendo, con el ritmo y la fuerza de las mareas, una genealogía zarandeada por secretos familiares y enfrentamientos que hasta ahora las han mantenido alejadas, viviendo vidas separadas por los muros de lo que nunca se dice. Aroa Moreno Durán, con una prosa hermosa y evocadora, pero también visceral e inmisericorde, nos conduce por casi un siglo de nuestra historia reciente: el horror de la guerra, el desarraigo del exilio, los años del plomo, la casa vacía y la vida vencida, y aún más allá, desde los secretos del pasado hasta la huida del futuro.
Berlín, 1956. La tarde con más frío de todo el invierno, las manos de una niña se ensucian de carbón. Berlín, 1958. En esas mismas manos hay un secreto o un recuerdo, una insignia con tres letras grabadas: PCE. Berlín, 1961. La sangre de las sardinas ha quedado al otro lado porque un muro ha partido la ciudad en dos. Berlín, 1968. ¿Has pensado en lo que significa estar aquí para siempre? Berlín, 1971. Qué cosas se llevan en los viajes, cuando se huye, cuando no será posible un regreso. La vida de Katia podría haber sido contada de muchas formas, pero la prosa de Aroa Moreno Durán, incisiva y brillante, nos la cuenta de este modo: devolviendo la belleza al peso de la Historia.
Aron Ralston, un experimentado excursionista de veintisiete años, emprende un solitario paseo por un remoto y estrecho cañón de Utah, cuando una roca de más de trescientos cincuenta kilos se desprende y le aplasta la mano y la muñeca derecha contra la pared del cañón. Además del dolor terrible al que se ve sometido, Aron se da cuenta de que ha quedado completamente atrapado. Nadie sabe dónde está; nadie vendrá a rescatarlo. Le queda agua y comida para pocas horas más. Su única herramienta es una navaja de bolsillo. Sus opciones se agotan una a una. En la quinta noche, presa del delirio y de escalofríos incontrolables, Aron grava su propio epitafio en la pared de roca, convencido de que ya no volverá a ver la luz del día. Sin embargo, al día siguiente tiene una idea terrible y salvadora: si pudiera usar la roca para partir los huesos de su brazo, también podría amputárselo usando la navaja como un bisturí. Convertida en una exitosa película dirigida por el oscarizado Danny Boyle y protagonizada por James Franco, 127 Horas es la historia real y estremecedora de una asombrosa hazaña de supervivencia, narrada con el pulso de un thriller psicológico, así como un testimonio de primera mano de los extremos a los que un hombre puede llegar para salvar su propia vida.
Una de las historias de supervivencia más extraordinarias que se haya contado: Aron Ralston relata sus seis días atrapado en uno de los lugares más remotos de los Estados Unidos, y cómo un acto inspirado de valentía lo llevó a casa. Comenzó como una simple caminata en los cañones de Utah en una cálida tarde de sábado. Para Aron Ralston, un montañero de veintisiete años y hombre de actividades al aire libre, un paseo por el remoto «Blue John Canyon» fue la oportunidad de descansar de un invierno de escalada en solitario en los picos más altos y duros de Colorado. Se había ganado estas vacaciones de fin de semana, y aunque conoció a dos mujeres encantadoras en el camino, a primera hora de la tarde finalmente se encontró en su elemento: solo, con la belleza del mundo natural que lo rodeaba. Lejos de su camioneta y la civilización, Aron estaba bajando por una profunda y estrecha ranura del cañón, cuando una roca encajada se desprendió repentinamente y de manera aterradora. Antes de que pudiera darse cuenta, la roca de más de trescientos cincuenta kilos sujetaba su mano derecha y su muñeca contra la pared del cañón. Y así comenzaron seis días de infierno… Libro en que se basó la película de drama y suspenso «127 Horas» de 2010, dirigida por el ganador del Oscar Danny Boyle y protagonizada por el actor James Franco.
En este segundo volumen de los Tratados de Arquímedes, con el que la Biblioteca Clásica Gredos concluye la publicación de la primera traducción directa del griego al español de sus obras, se presenta el resto de sus estudios sobre figuras curvilíneas, la Cuadratura de la parábola (primera cuadratura de una figura limitada parcialmente por curvas) y Sobre las líneas espirales, y sus obras teóricas de tema mecánico, el Equilibrio de las figuras planas (en el que se contiene el famoso principio de hidrostática que lleva su nombre) y Sobre los cuerpos flotantes.
Junto a esos trabajos, este volumen incluye otras obras menores pero que nos dan una idea de la gran curiosidad de Arquímedes y de la variedad de temas que atraían su atención: el Arenario, en donde, en razón de la exposición de un sistema de notación numérica de su invención, Arquímedes nos ofrece las noticias más antiguas y fidedignas sobre Aristarco y su teoría heliocéntrica; los curiosísimos Problema de los bueyes y Stomachion, aparentes pasatiempos matemáticos; el Método, cuyo texto, hallado a principios del siglo XX, tanto nos ha ilustrado respecto al método heurístico arquimedeo…
La traducción ha podido beneficiarse de las investigaciones más recientes, especialmente de la relectura del palimpsesto de Jerusalén llevada a cabo por R. Netz, cuyas novedades, significativas sobre todo en lo relativo al Stomachion y al Método, han sido tenidas en cuenta e incluidas en esta versión.
El arenario es una obra de Arquímedes en la que el autor intenta establecer un límite superior para el número de granos de arena necesarios para llenar el universo. Para hacer esto tuvo que estimar el tamaño del universo según el modelo vigente en ese momento y, además, inventar una manera de expresar números muy grandes.
De Arquímedes sabemos con certeza que era natural de Siracusa y que murió en el 212 a. C., durante la Segunda Guerra Púnica. A lo largo de los siglos su fama se ha fundado en el ameno relato de Plutarco que resalta su capacidad inventiva plasmándola en anécdotas y frases célebres como el “Heúreka” o el “Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo”. Pero Arquímedes fue, antes que ingeniero o inventor —y eso que construyó importantes artilugios para sistemas de irrigación, máquinas para mover grandes pesos y bélicas—, uno de los más brillantes matemáticos de la Antigüedad, entre cuyos hallazgos fundamentales se cuentan la medida del círculo y la de la superficie y el volumen de la esfera, descubrimiento considerado por su autor tan valioso que pidió que el resultado final figurara como epitafio de su tumba. Casi un milenio después, Eutocio —perteneciente al círculo de Antemio de Trales, uno de los arquitectos de Santa Sofía— consideró necesario acompañar las obras de Arquímedes con un comentario pormenorizado. En él recogió, entre otras cosas, las soluciones antiguas al problema de la duplicación del cubo y la resolución, debida probablemente al propio Arquímedes, de cierto tipo de ecuación de tercer grado.Este volumen recoge la primera traducción directa del griego al español de los tratados arquimedeos Sobre la esfera y el cilindro, la Medida del círculo y Sobre conoides y esferoides, junto con una selección de los Comentarios de Eutocio.
Conduciendo a la salvaje Mercedes, es la historia de una incombustible pasión amorosa llevada a la literatura y que se muestra con relaciones de parejas imperfectas, en un río de sentimientos del que se pueden pescar pasajes alegres, tristes, aventureros, delictivos, pero sobretodo, divertidos y que deja al descubierto que las pasiones no se tienen que entender, sólo experimentar. El personaje principal de esta novela es Estela, una bella joven que nos recuerda a la Lolita del escritor Vladímir Nabókov, nada más, que esta Estela se mueve en una Managua llena de desenfreno amoroso, fantasía y noches de interminables besos. Estela seduce, enamora, huye, se esconde, pero irónicamente se entrega de tal manera, que es inevitable volverla a buscar. Este libro mereció en el año 2007 una mención especial en el Premio Centroamericano de Cuento Rogelio Sinán.
Prólogo:
Maité ni siquiera es bonita, y allí comienza su seducción como personaje. Maité está casada pero no ha conocido el amor. Maité, que tiene en su padre energúmeno a un verdadero enemigo, y en su madre dócil una cómplice indolente de sus infortunios, ansía una vida y un mundo diferente, quiere alas para volar, y abre las puertas a la tragedia, como quien abre la caja de Pandora.
Esta novela de Arquímedes González, ya bien probado en la primera que escribió, La muerte de Acuario, nos muestra habilidades nuevas, la primera de ellas organizar una trama con elementos de la vida diaria de unas personas de las que, en su acontecer ordinario, parece que no podemos esperar nada. Pero de la rutina de la oficina, y de la rutina de la vida conyugal, aún de la rutina del pasado, es de donde brota la chispa que incendia las páginas de la novela.
La rutina del pasado de Maité, porque su escenario, el del país, el que recuerdan sus padres, es caótico y contradictorio, y la historia entra en escena con colores violentos y tonos ambivalentes. Son dos cauces que van a dar a la misma corriente estremecida por la desgracia, las aguas de la vida privada y las aguas de la vida pública que mezclan sus colores turbulentos, y cuando se aplacan, sólo quedan las desilusiones, y la soledad.
Sergio Ramírez, Premio Alfaguara de Novela.
En noviembre de 1889 Francis Tumblety, señalado como la persona vinculada a los asesinatos de varias mujeres en Whitechapel, Inglaterra, escapó en barco con destino a Nueva York, Estados Unidos. Los policías enviados por Scotland Yard para capturarlo jamás lo localizaron… Entre enero y febrero del siguiente año se reportaron las muertes de seis mujeres en diferentes ciudades de Nicaragua. Sherlock Holmes a la caza de Jack El Destripador es una novela histórica y policial que relata la llegada de Jack El Destripador a Nicaragua y también el arribo del famoso detective británico Sherlock Holmes en su búsqueda del asesino más famoso de todos los tiempos. Este libro fue publicado en el 2002 con un prólogo del escritor Sergio Ramírez Mercado (incluido en la contraportada), con un tiraje de 4,500 ejemplares. El libro fue reimpreso en el 2005 con un tiraje de 3,500 ejemplares. Una última edición se hizo en el año 2007 de 3,500 ejemplares. En el año 2005 el detective británico Trevor Marriot publicó el libro Jack El Destripador, La Investigación del Siglo XXI, en el que asegura que efectivamente el asesino pudo haber viajado de Nueva York a Nicaragua. En enero de 2009 el libro se presentó en la Librería Estudio en Escarlata, en Madrid, España. Entre el año 2010 y el año 2011, este libro fue el más vendido en el género de Suspenso, Crimen y Misterio en Amazon en español.
“Arquímedes González es un escritor con dedicación, devoción y disciplina. No es fácil encontrar a un escritor que renuncie a todo para dedicarse a escribir, pero Arquímedes es uno de esos autores. Es un escritor prolífico que cuenta con una producción más allá de lo que se ha publicado sobre él”, Sergio Ramírez.
Volver, es el libro completo de la trilogía que comprende Abril hace lo que quiere, (Rosas negras, Infierno blanco), Sueño con dragones (La cruzada contra el Imperio del Bósforo) y El Juicio Final (La venganza de El Caballero Templario).La protagonista, Ashia Rijn, deberá luchar contra un desconocido que tratará por todos los medios de matarla. Tras vivir muchos años en Nicaragua, Ashia Rijn regresa a su país, Holanda, donde con el paso de las semanas, cosas extrañas comienzan a ocurrirle... Se siente perseguida, alguien le deja extraños mensajes en el buzón de las cartas, le roban su bicicleta y le saquean su cuenta bancaria… Pero esto será sólo el inicio de un infierno que nos llevará a una pintura del siglo XV del artista Lucas van Leyden, en la que se encuentra la respuesta a esta venganza de alguien que todo ese tiempo observó y aguardó. Aguardó y observó. Y ahora, por fin ha puesto en marcha su plan para acabar con Ashia Rijn....Esta trilogía se desarrolla en México, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras, Jamaica, Colombia, Venezuela, Brasil y algunos países europeos como Noruega, Alemania, Holanda, Inglaterra, Francia y España.
Ashia Rijn, deberá luchar contra un desconocido que tratará por todos los medios de matarla. Tras vivir muchos años en Nicaragua, Ashia Rijn regresa a su país, Holanda, donde con el paso de las semanas, cosas extrañas comienzan a ocurrirle… Se siente perseguida, alguien le deja extraños mensajes en el buzón de las cartas, le roban su bicicleta y le saquean su cuenta bancaria… Pero esto será sólo el inicio de un infierno que nos llevará a una pintura del siglo XV del artista Lucas van Leyden, en la que se encuentra la respuesta a esta venganza de alguien que todo ese tiempo observó y aguardó. Aguardó y observó. Y ahora, por fin ha puesto en marcha su plan para acabar con Ashia Rijn… Esta trilogía se desarrolla en México, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras, Jamaica, Colombia, Venezuela, Brasil y algunos países europeos como Noruega, Alemania, Holanda, Inglaterra, Francia y España.
Ashia Rijn, deberá luchar contra un desconocido que tratará por todos los medios de matarla. Tras vivir muchos años en Nicaragua, Ashia Rijn regresa a su país, Holanda, donde con el paso de las semanas, cosas extrañas comienzan a ocurrirle… Se siente perseguida, alguien le deja extraños mensajes en el buzón de las cartas, le roban su bicicleta y le saquean su cuenta bancaria… Pero esto será sólo el inicio de un infierno que nos llevará a una pintura del siglo XV del artista Lucas van Leyden, en la que se encuentra la respuesta a esta venganza de alguien que todo ese tiempo observó y aguardó. Aguardó y observó. Y ahora, por fin ha puesto en marcha su plan para acabar con Ashia Rijn… Esta trilogía se desarrolla en México, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras, Jamaica, Colombia, Venezuela, Brasil y algunos países europeos como Noruega, Alemania, Holanda, Inglaterra, Francia y España.
Ashia Rijn, deberá luchar contra un desconocido que tratará por todos los medios de matarla. Tras vivir muchos años en Nicaragua, Ashia Rijn regresa a su país, Holanda, donde con el paso de las semanas, cosas extrañas comienzan a ocurrirle… Se siente perseguida, alguien le deja extraños mensajes en el buzón de las cartas, le roban su bicicleta y le saquean su cuenta bancaria… Pero esto será sólo el inicio de un infierno que nos llevará a una pintura del siglo XV del artista Lucas van Leyden, en la que se encuentra la respuesta a esta venganza de alguien que todo ese tiempo observó y aguardó. Aguardó y observó. Y ahora, por fin ha puesto en marcha su plan para acabar con Ashia Rijn… Esta trilogía se desarrolla en México, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras, Jamaica, Colombia, Venezuela, Brasil y algunos países europeos como Noruega, Alemania, Holanda, Inglaterra, Francia y España.
'Existe imperfección en lo perfecto; lo que lo hace impecable es toda su maravilla, aquella que permanece hasta en lo más oscuro' La maldad del hombre es capaz de convertir un alma pura en su peor versión. Liv Olson fue corrompida; los trozos de su corazón yacen en el fondo de un abismo y su alma esparce toxinas que envenenan todo lo que la rodea. A pesar de su inocente apariencia, los demonios que la acompañan trabajan sutiles, creando un arma perfecta para abrir las puertas de un nuevo infierno. Su llegada a la vida de Dorian hace alusión a una felicidad incierta, rompiendo barreras y desatando una gran tormenta. Como es de esperarse, su pasado perfora un amor real convirtiéndolo en un círculo vicioso lleno de sensaciones novedosas y encerrando su espíritu en un placentero calvario. Nos demuestran la realidad de la esencia, que la vida maneja el tiempo que le impongamos y el rumbo que realmente deseemos.
Mordaces, ingeniosas, incisivas, jocosas. En décimas, en sonetos, en tercetos encadenados, en romances, en octavas reales. Disfrazadas de odas, de fábulas, de epigramas, de letrillas… La sátira política en estrofas clásicas es una de las grandes tradiciones de la literatura española. La han cultivado muchísimos escritores: de Quevedo y Góngora en el XVII a Leandro Fernández Moratín, Samaniego o Iriarte en el XVIIIi y Zorrilla, Campoamor o Bretón de los Herreros en el XIX. Arsenio Escolar, periodista y analista político en ejercicio, pero también filólogo de formación y ganador —hace muchos años— de algunos galardones como poeta «serio», recupera ahora el género para trazar una punzante crónica de la actualidad española, casi un ensayo de los años de la crisis y de los recortes, de la confusión ideológica, de la desigualdad y de la pérdida de valores. El autor critica, caricaturiza y dispara indiscriminadamente a tirios y troyanos. Lo firma además con su nombre, pese a la cercanía a muchos de sus retratados. Reciben, así, su dosis de vitriolo en este libro Mariano Rajoy, el rey (el anterior y el actual), Esperanza Aguirre, Pablo Iglesias, Ana Botella, Alfredo Pérez Rubalcaba, Cristiano Ronaldo, Belén Esteban… Y hasta el propio autor en el título, porque el humor bien entendido empieza por reírse de uno mismo.
«El siglo XIV fue probablemente el más duro de toda la historia de Castilla, quizás el más negro de la Península Ibérica desde que esta existe. Tres grandes catástrofes, el hambre, la peste y la guerra, golpearon a la población con saña, extendieron la muerte, dejaron la tierra 'yerma, estragada, pobre' y cambiaron el Estado y la política: los poderosos aumentaron su poder y su riqueza y la gente llana quedó empobrecida y perdió algunos de los derechos que habían logrado las generaciones anteriores».«La pugna entre Pedro I y su hermanastro acabó en una guerra civil muy cruenta. Duró tres años, como la guerra civil más reciente ocurrida en la Península Ibérica. Comenzó en un año que acababa en 6 y acabó en un año que acababa en 9, también como la guerra civil más reciente de nuestra historia. Ambos bandos tuvieron apoyo de tropas extranjeras que probaron aquí sus nuevas técnicas y máquinas de guerra, como hace pocas décadas. También como en la Guerra Civil de 1936-1939, la Iglesia tomó partido por uno de los bandos y acusó al otro de anticlerical y de ateo».El justiciero cruel. Pedro I de Castilla y el nacimiento de las dos Españas, continúa la senda abierta por La nación inventada. Una historia diferente de Castilla. De nuevo, una obra divulgativa que repasa la conformación del casón llamado España. Escrito con rigor y un variado anecdotario, Arsenio e Ignacio Escolar han conseguido, en esta segunda entrega, repasar la amena historia de Castilla -centrada en el rey Pedro I- separando, para siempre, realidad y leyenda.
«La nación inventada» es un repaso divulgativo a la historia de esos siglos en los que se formó la identidad nacional castellana, la nación sobre la que después se edificó el casón de España. La historia la escriben los vencedores, y la Castilla victoriosa no fue una excepción. En el siglo XIII, tras ganar la batalla de Las Navas de Tolosa y conquistar gran parte de al-Ándalus, cuando sólo faltaba la pieza del reino nazarí de Granada para completar el mapa de la llamada Reconquista, Castilla era sin duda la nación más pujante de la península Ibérica y una de las nuevas potencias europeas. Su pasado, sin embargo, no era tan brillante como su presente: «no había logrado la independencia de León hasta el siglo XI, había sido uno de los últimos reinos cristianos en nacer y en comenzar la guerra contra el islam». Fue en ese momento, durante los reinados de Fernando III y de Alfonso X, cuando toda una serie de falsos mitos, exageraciones y medias verdades —de los jueces de Castilla a Fernán González o El Cid—, entran en la corriente histórica. Han estado ahí hasta hace muy poco y aún forman parte de la cultura popular. La nación inventada es un repaso divulgativo a la historia de esos siglos en los que se formó la identidad nacional castellana, la nación sobre la que después se edificó el casón de España. Escrito con rigor y un variado anecdotario, ideas e historia, Arsenio e Ignacio Escolar han conseguido repasar de forma amena la historia de Castilla separando, para siempre, realidad y leyenda.
Hijos de Padilla es la biografía novelada, a veces veraz, otras fabulada, aunque siempre excesiva y apasionante, de un personaje cuya existencia fue tan real como desventurada.
Sebastián de Villacieros (en realidad el capitán y abogado don Cristóbal Jurado) fue un hombre cuya mala suerte le hizo vivir y ser protagonista de uno de los periodos más tenebrosos y críticos de la Historia de España: el reinado de Fernando VII.
Un burgués bienintencionado, un liberal exaltado y romántico que luchó por cambias un tiempo equivocado hasta el extremo de sacrificar su propia vida en pos de unos ideales de libertad y justicia que hoy nos pueden parecer primarios, pero que siempre serán eternos y utópicos.
Pero Hijos de Padilla es, de un modo simultáneo, la novela coral de una sociedad en cambio inevitable que se debate entre la modernización de sus estructuras políticas y sociales, propugnada por sus elementos más progresistas, y el conservadurismo tradicional impuesto por sus estamentos privilegiados más intransigentes.
Escrita con una prosa reflexiva y lírica, no exenta de ironía, Hijos de Padilla es el retablo despiadado e ingenuo de una España que comenzaba a estrenar su contemporaneidad con otras naciones europeas y su dualismo político excluyente y cainita.
Esta es la España de Villacieros, en cuyas contradicciones e infortunios podemos rescatar las claves de muchos de los problemas que nos han ido acompañando en los dos últimos siglos de nuestra Historia.
He aquí el más famoso manual de oniromancia del legado griego. Artemidoro de Éfeso, o de Daldis, experto en el oficio de interpretar los sueños, compuso este tratado completo y bien estructurado que fue un útil libro de consulta en lo concerniente a tales asuntos. La oniromancia, con sus aspiraciones científicas, venía de lejos: ya la menciona Homero, y hubo sacerdotes que rastreaban en los ensueños signos enviados por los dioses, antes de que médicos hipocráticos y filósofos como el propio Aristóteles se interesaran por la cuestión interpretativa.Artemidoro, en el siglo II d.C., es heredero de tal tradición, y la combina con su práctica personal en este tratado Oneirocritica, en la que asienta los principios de su doctrina con innumerables y pintorescos ejemplos extraídos de su experiencia profesional.
Artemio de Valle-Arizpe presenta en «El Canillitas» una obra clásica de la picaresca mexicana. En esta novela el lector está leyendo los sucesos de su propia vida y la del vecino. Es un relato que viene del sueño a plasmarse en la realidad. «El Canillitas» relata su vida denunciando las lacras y pecados de su sociedad. Y esta denuncia la realiza con el valor de un testimonio del cual es testigo paciente y actuante porque él también se acusa. Es una novela cruda en donde no importa el obrar sino el padecer. Es el relato de la consunción de un héroe en las llamas de su propio fuego. La lucha diaria no es para conseguir la fama ni el amor: es la lucha por la vida. Vitalidad es la sensación que se palpa en torno a «El Canillitas», es esa vida multiforme y colorista en la que nacer, amar o morir se suceden con la sencillez de lo cotidiano. Esa vida que pasa y se pierde en cada momento sin que pueda ser aprehendida por la rapidez vertiginosa con que desaparece. Es la vida que no triunfa ni derrota, sino que termina con un simple encogimiento de hombros.
«La Güera Rodríguez» presenta «un momento de la sensibilidad mexicana en torno a una de sus figuras más brillantes», tal y como lo dijera el mismo Artemio de Valle-Arizpe, e instala al lector desde un principio en las postrimerías del periodo virreinal y en los primeros brotes insurgentes del patriotismo criollo. Antes que una biografía novelada, de Valle-Arizpe se propuso reconstruir las jornadas emblemáticas en la vida de María Ignacia Rodríguez de Velasco, mejor conocida como la Güera, para formar a partir de ahí un animado fresco histórico. Las páginas de «La Güera Rodríguez» son entonces una crónica amenísima, minuciosa, salaz y en extremo ágil por cuyos derroteros deambula en toda su plenitud la enorme pasión por la trama que caracterizara a don Artemio.
Un doble homicidio en Alemania desencadena una investigación criminal, revelando una conspiración internacional que va más allá de atrapar a los asesinos.
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Sofía, la reconocida detective de homicidios de la ciudad de Múnich, se ve envuelta en un caso que revive su pasado y un gran amor que pensaba perdido.
En el transcurso de la investigación, lucha contra sus sentimientos, y descubre que las apariencias siempre engañan.
Una historia de intriga, amistad y romance, que concluye con el inicio de una saga.