*El cortesano y su fantasma* es la historia de un personaje, P. que cambia de sillas simbólicas —«de la cátedra al escaño»— y llega a las cortes en 1982. Convencido de que el conocimiento es una forma sutil de contagio, P. trata de adaptarse al nuevo medio, convertirse en un auténtico *indígena* de la política. Pasa sin solución de continuidad de la exaltación al desconcierto y de este al tedio. Entre un viaje oficial a China y uno privado al Pentágono, P. prosigue el diálogo con su fantasma y llega a conclusiones por lo menos sorprendentes: «comparada con la política, la poética es una ciencia exacta», «la democracia es el totalitarismo de las apariencias» o «la cámara de los espejos es la tumba de los líderes». Todo ello configura una radiografía impecable de nuestra vida política, que lo es también de la vida intelectual y personal del autor.
Basculando entre el desconcierto y la ironía, Rubert de Ventós filtra su peculiar visión del mundo y nos deja finalmente en la ambigüedad de no saber si estas impresiones son las del cortesano o las de su fantasma.
La enorme personalidad de Josep Pla —sin duda alguna uno de los primeros prosistas españoles del momento— tiene muy cultivada una brillante faceta humorística. El escritor de talento, el observador, maneja en Humor honesto y vago con extraordinaria destreza la difícil y rara cualidad de un humorismo sano e ingenioso. Del amor al fútbol, pasando por la teoría de la propina, los perros, los gatos, lo que le puede suceder cuando se naufraga…, hasta la cultura de los lenguados, Pla envuelve todos los temas en su atractiva prosa, que se ha convertido en una necesidad para sus innumerables admiradores. En este libro de uno de los más sabrosos cultivadores de las letras periodísticas españolas, la amenidad, apoyada a menudo en el diálogo, es insuperable. De esta obra se ha dicho: «Nos colocamos junto a Josep Pla para ayudarle, con resignado entusiasmo, a sostener la estéril bandera del sentido común».
Las aventuras del valeroso soldado Schwejk es, tal vez, la obra de la literatura checa más conocida fuera del país, ya que al poco de ser publicada se tradujo a varios idiomas y fue objeto de adaptaciones teatrales y cinematográficas. Constituye una sátira mordaz y divertida contra lo absurdo de las guerras. Su protagonista, Schwejk, con astuto desamparo y ladina sandez, libra su guerra privada contra la maquinaria militar como un Sancho Panza de la Primera Guerra Mundial, y empleando la estupidez como refinamiento se transforma en un estratega capaz de desarmar a quien sea. En una serie de divertidos episodios y en el trato con sus múltiples y siempre limitados superiores, Schwejk cumple su deber de obediencia de tal manera que todas las órdenes llevan al absurdo y deja en ridículo a las autoridades reconocidas.
Joyce Cary nació en Londonderry en el año 1888. Es descendiente de una aristocrática familia angloirlandesa que se arruinó a finales de siglo pasado. Ha pasado muchos años en África donde sitúa la acción de algunas de sus mejores novelas. Abandonó su cargo colonial en el distrito de Borgu de Nigeria, con la salud deshecha por el asma, el insomnio y la malaria. Su vocación literaria fue tardía y no publicó nada hasta los cuarenta y tres años. Quizá se deba a su vida y a la abierta sensibilidad por el espectáculo humano, la enorme riqueza en caracteres y acciones que singulariza sus obras. Se ha señalado que Joyce Cary a diferencia de los más grandes novelistas contemporáneos, no se limita a describirnos un solo personaje que se repite obsesivamente en todas las novelas. Un crítico le ha llamado incluso el «camaleón» de los novelistas contemporáneos para señalar su gran capacidad para descubrirnos tipos y ambientes distintos.
Míster Johnson , es la primera novela de Cary que se traduce en castellano. Nos cuenta las cómicas peripecias y el trágico fin de un joven negro en su vida de empleado colonial. Una obra en la que el humor más auténtico y un patetismo contenido, brotan de la observación directa, inteligente y certera de unos hechos ciertos que significan para el lector un precioso documento sobre los indígenas del Continente negro.
La historia se desarrolla en el imaginario pueblo siciliano de Vigàta en el año 1891. El motor de los acontecimientos es la solicitud de Filippo “Pippo” Genuardi de una línea telefónica, en esa época una auténtica novedad. El sinfín de trámites burocráticos, problemas y enredos a los que tiene que enfrentarse Pippo para lograr un teléfono es cómico, pero tiene también un significado más profundo. El autor proporciona un retrato de la sociedad siciliana de los primeros años de la unidad de Italia (la misma época que reflejó Lampedusa en «El gatopardo»), a través de chispeantes diálogos entre los diversos personajes, de las cartas entre los amigos de Pippo y los pomposos y altisonantes informes y documentos burocráticos. La solicitud de una línea telefónica en un pequeño pueblo siciliano desencadena una divertida serie de peripecias burocráticas, malentendidos y maniobras. Una visión a la vez cómica, realista y amarga de la sociedad siciliana.
La Ópera de Vigáta parte de un hecho real ocurrido en 1875 en Sicilia, la determinación del prefecto de inaugurar el teatro de su ciudad con una ópera desconocida, Il Birraio di Preston, lo que da lugar a una serie de intrigas, delitos y tumultos y su posterior investigación. Una tragicomedia de una sociedad en la que la permanencia de los modos de vida y dominación sicilianos se afirma contra los modelos importados del Norte.
La temporada de caza es un retrato inteligente, cáustico e hilarante de una época de aristócratas y labriegos, de herencias disputadas y vendettas incumplidas. Una cómica visión del primitivo y disparatado universo rural siciliano.Vigàta, Sicilia. Carmelina —una cabra— fue la novia del hijo cretino del marqués Filippo, y también la afligida viuda, porque el bobo apareció muerto un buen día tras un desafortunado encuentro con una seta venenosa. Los planes de herencia del marqués se vinieron abajo de sopetón. Aunque el hijo salió idiota, era un varón y con eso bastaba.Desde el día de tan terrible pérdida, la mujer del marqués quedó trastornada, pero nunca se supo si fue por la muerte del hijo o por la perspectiva de tener que volver a soportar los desmedidos ardores de Filippo. Así las cosas, el marqués buscó a otra mujer para sembrar su semilla. Lo que sucedió a partir de entonces entre el noble y Trísina —esposa de uno de los guardias de la casa llamado Pirrotta— sólo lo supieron Dios, el complaciente Pirrotta y toda Vigàta. Poco después, empezó a morirse la gente: algunos de muerte natural.
De qué va eso del amor es una divertidísima comedia de enredo sobre los entresijos, dimes y diretes que tienen por consecuencia las siempre difíciles, complejas y, a veces, incomprensibles relaciones de pareja. A Eva acaba de dejarla Fernando. La ruptura provoca que la mujer ponga tierra de por medio y acepte un trabajo en Cuba. Cuando ella, dolida y despechada, le devuelve sus antiguas cartas de amor, no sospecha que Fernando ha vendido la casa y nunca leerá sus reproches.
A partir de ese momento empieza una correspondencia insólita entre Eva e Iván, el nuevo dueño del piso. Lo que la protagonista no sabe es que alguien ha usurpado la personalidad de su exnovio, aunque le extraña que ahora quiera volver a intentarlo.
Partiendo de este equívoco inicial, conoceremos a los demás personajes que habitan el universo de Eva e Iván y que, como ellos, también sufren una revolución sentimental.
Existen padres que no quieren a sus hijos, novias que persiguen a sus parejas, vecinas que se vuelven locas, cubanos que no quieren dejar Cuba, madres que se enamoran de sus monitoras de natación, mujeres que se vengan de sus jefes… Y también carreras, accidentes, mentiras, atracos y, sobre todo, muchos corazones rotos.
Reproches, equívocos, imposturas y mucho humor son los elementos claves de esta novela.
Vigàta, 1890. Salvador Barbabianca es uno de los principales productores de azufre gracias a las malas artes que ha empleado en su negocio, esto es: robando y estafando. Su mortal enemigo, Ciccio Lo Cascio, no le va a la zaga, y los dos se enfrascan en una pelea desquiciada por ver cómo atender el pedido de un barco ruso para cargarlo con el dichoso mineral. La espera del barco y su fatal llegada al puerto involucran al pueblo entero, capaz de confundir al final la peor de las tragedias con un acto de intercesión divina.
Con Un hilo de humo Camilleri vuelve a su particular visión del mundo, socarrona y teatral, desde un remoto rincón de la Italia recién unificada, donde lo mismo se preocupan por Garibaldi que por la producción de azufre en medio de unos enredos ingenuos, eróticos y mafiosos, que parecen construir la razón de ser de estos sicilianos vehementes.
Los Drummond, de Canadá, son dos hermanos, una hermana, unos padres divorciados y una madrastra que, juntos, constituyen la familia mas disfuncional que haya podido registrar la psiquiatría mundial.La historia empieza cuando viajan todos juntos hasta Cabo Cañaveral para presenciar el lanzamiento del transbordador espacial. Sarah Drummond, la única hija aparentemente normal, es uno de los astronautas que viajara al espacio. Por una u otra causa, todos menos ella tienen motivos suficientes para convertirse en serios candidatos a una muerte prematura. El hermano mayor, Wade, descubre que es seropositivo, pero solo después de que una bala disparada por su padre le atraviese el hígado y se aloje en el esternón de su madre. La madrastra, Nickie, se ha acostado con Wade y eso, a juicio de su padre, bien vale un tiroteo. Nickie, claro, también se une al club de seropositivos. No contentos con sus propias desgracias, los Drummond se mezclan en una espeluznante aventura en la que un contrabandista con problemas cardíacos no sobrevivirá a Disneyworld y un farmacéutico multimillonario y excéntrico intentara hacerse con una carta robada del ataúd de la princesa Diana.Todas las familias son psicóticas constituye un delirante paseo por el drama de la convivencia típica de nuestro siglo, pero Douglas Coupland ha sabido destilar en el limite de todas las situaciones tanto la miseria como la grandeza de sus personajes, la dignidad, en fin, que los hace humanos. He aquí la quintaesencia de nuestro siglo en una historia divertidísima y dura, violenta y tierna como pocas.
Para muchos, «Ana Karenina» es la novela más grande de la Historia. Ahora, la memorable saga de amor y traiciones se transporta a una Rusia decimonónica mucho más asombrosa: un universo que retumba con potentes motores alimentados a groznio, donde las jóvenes bailan suspendidas en el aire, donde unos lobos mecánicos combaten junto a los soldados más valientes, y donde unos robots milagrosos y adorables hacen compañía a todos los que pertenecen a la alta sociedad. Desesperada por forjarse su propio destino en esta sociedad tecnologizada, la audaz Ana Karenina deja atrás un matrimonio sin amor y, acompañada de su androide, se zambulle en las aguas de la pasión junto al atractivo conde Vronsky. Pero cuando su escandaloso romance se ve envuelto en las malvadas intrigas de unos futuristas villanos, se produce un caos que amenaza con destruir sus vidas, sus familias y, quizás, todo el planeta Tierra.
El avión es el medio de transporte más seguro pero que mayor desconfianza genera entre los viajeros. De hecho, cuando un pasajero se embarca en un avión su mayor deseo no es que el aparato llegue a su destino sin retrasos —que también— sino que lo haga en perfectas condiciones.
Este libro es la demostración de que las leyendas urbanas, en enfermería, se quedan muy cortas con respecto a la realidad. La imaginación de la mente colectiva no llega a la altura de las anécdotas que las enfermeras de este país viven a diario en los centros sanitarios a los que los enfermos y sus familiares parecen ir en un estado de nerviosismo y despiste que les lleva a protagonizar hazañas verdaderamente surrealistas. La capacidad de sorpresa de estos profesionales es infinita, el ser humano nunca dejará de asombrarles. La misma impresión tendrá el lector: cuando crea que eso es lo más increíble que ha leído jamás, enseguida se topará con una suceso aún más hilarante, desternillante, curiosa, escatológica, bestia, alucinante, inaudita, impensable… Si piensa que nada puede superar que a alguien se le caigan 4 metros de intestino al suelo, todavía alucinará más al leer los extravagantes objetos que la gente se introduce en sus partes íntimas.
Anécdotas de Taxistas nos muestra algunas de las aventuras más divertidas de este gremio. Una prueba de que tras el retrovisor de sus coches estas personas son testigos de lo variopinto de la condición humana. El asiento trasero de un taxi es el escenario por el que desfilan todo tipo de personajes y donde suceden las historias más insospechadas. Cada vez que se baja la bandera se sube el telón y empieza el espectáculo: pasajeros que duermen como marmotas, famosos adivinos que se aparecen por toda la ciudad como visiones, machotes de cadena en pecho, ejecutivos agresivos y familiares aún más agresivos; urgencias que no son tales, partos inminentes y un sin fin de situaciones cada cual más surrealista que aseguran la carcajada.
Comedia dramática en tres actos y una presentación previa de los ocho personajes principales. Está escrita en verso y se estrenó con el título de «Angelina o el honor de un brigadier» en el teatro Infanta Isabel de Madrid, el viernes 2 de marzo de 1934. Me llamo Angelina Ortiz, soy una muchacha honrada que no se entera de nada, tengo un novio que es poeta y un papá que es brigadier. Yo soy Germán, el traidor, calavera, pendenciero, con cinismo y con dinero triunfo siempre en el amor. Visto con gran elegancia, consigo cuanto deseo y soy un poquillo ateo…, porque veraneo en Francia, que, como deben saber, es la patria de Voltaire. La acción transcurre en Madrid, en la primavera de 1880 y comienza cuando Angelina, hija del brigadier Don Marcial, el día en que su novio Rodolfo iba a pedir su mano, decide escarparse con Germán, un joven con el que ha estado viéndose a espaldas de todos. Su padre y el abandonado Rodolfo, inician su búsqueda y, finalmente, los encuentran. Don Marcial, enfurecido, se bate en duelo con Germán y logra herirlo. Es entonces cuando descubre que su propia esposa, Marcela, lo ha estado engañando a él con el mismo galán. Será este el momento en que Don Marcial, viendo su honor y dignidad mancillados, opte por tomar medidas drásticas para resolver la situación.
Alvy Singer, un tipo algo neurótico, trabaja como humorista en clubs nocturnos. A sus 40 años, tras romper con Annie, su última novia, reflexiona sobre su vida, rememorando sus amores, sus matrimonios, pero muy en especial su relación con Annie, a la que conoció en una cancha de tenis. Al final, llega a la conclusión de que son sus manías y obsesiones las que siempre acaban arruinando su relación con las mujeres. Annie Hall, película considerada por muchos como una de las mejores comedias de la historia del cine, recibió el Premio Óscar a la Mejor Película en 1977.
Juan Aparicio Belmonte vuelve a adentrarse con su siempre caústico sentido del humor en el género negro para desarrollar una historia de crímenes, fallidas investigaciones, fútbol y corrupción. Un empresario encomienda a un escritor de turbia trayectoria la redacción de la que él considera la escamoteada e ignorada historia izquierdista del Real Madrid, pero el plan se tuerce y el empresario desaparece misteriosamente. Sara Lagos, una perfeccionista comisaria de policía en excedencia, se obsesiona con el caso y lo reabre por su cuenta y riesgo. No es consciente del peligro, tanto físico como sentimental, que supone introducirse en un mundo totalmente corrupto, en el que el principal sospechoso, un pequeño narcotraficante con veleidades literarias, vive donde la realidad y la ficción se entremezclan. Una hilarante comedia que parodia con fina ironía los tópicos más acendrados de las novelas de detectives, del casticismo y de las ambiciones literarias.
Tras quince años de implacable matrimonio con Bárbara, Graham Hendrick, un historiador y profesor universitario, conoce a Ann, se enamora y, después de unos meses de relaciones clandestinas, abandona esposa, hija, coche e hipoteca, y se marcha a vivir con la mujer que le ha hecho recuperar el placer de vivir. Graham se divorciará de la furiosa Bárbara, se casará con Ann, y serán felices para siempre y comerán perdices… Hasta el día aciago en que sorprende a su nueva esposa cometiendo adulterio en la pantalla. Pues Ann no ha nacido, como desearía Graham y desean todos los enamorados, en el instante preciso en que se conocieron. La joven tiene un pasado en el que ha sido actriz, y ha interpretado pequeños papeles en numerosas películas. Y Graham se dedicará a rastrearlas minuciosamente, y a verlas compulsivamente, pues como historiador que es, sabe que el pasado, y sus testimonios, importan. Aunque él, más que en una «investigación histórica», se ha embarcado en un delirio de celos retrospectivos propios de la más desesperada y divertida historia de «amour fou».
Año 2017. Curro lleva veinte años internado en el hospital psiquiátrico Santa Dympna, en Sant Boi de Llobregat, por un grave brote de locura homicida. Pero Curro está harto de ser un enfermo mental, quiere escapar de ahí y necesita un plan. Para ello nada mejor que su fiel Plácido, mayordomo de plastrón almidonado y calva reluciente, citador patológico de Churchill y persona capaz. Mientras amo y sirviente, unidos por un juramento, traman su huida, el lector empieza a descubrir el pasado terrible que acabó con la cordura del protagonista. Es 1982 y Curro, un niño frágil de doce años envuelto en tics y fobias, lucha por superar los traumas de su vida: la demencia de su abuelo, el misterioso afán atlético de su padre, la obesidad de su madre, los puñetazos con su hermano y el abuso de los matones locales. Curro y su mejor amigo Priu —desgarbado, precozmente hirsuto, un genio—, «nerds» originales, raros de nacimiento, sobreviven como pueden en el extrarradio urbano, tierra de gente normal. Hasta el día en que estalla el huracán y todas las mentiras, todos los secretos acumulados en la familia y en el pueblo destruyen su mundo para siempre. «Antes del huracán» es una obra triste e hilarante que habla de ser distinto, y estar jodido, en un pueblo de la periferia barcelonesa. En su quinta novela, Kiko Amat combina melancolía y humor para explorar los caminos que llevan de la rareza al delirio. Una inolvidable historia de locura, familia, clase obrera y amistad en el paisaje deshecho del extrarradio —cemento, espiguillas, descampados, torres eléctricas y calles sin asfaltar—, con los años ochenta, la guerra de las Malvinas y el Mundial 82 de fondo.
Una hilarante novela sobre la vida de un peculiar entrenador de baloncesto. El debut de Pablo Lolaso en el mundo del libro. Pablo es un viejo exentrenador de la élite del baloncesto español. Ahora, haciendo vida de jubilado en un pueblo perdido de la mano de dios, junto con Pepe, su antiguo y fiel delegado del cuerpo técnico de sus equipos, se embarcará en la aventura de entrenar a un grupo de patanes del club de al lado de su casa. Cuando piensas que esta historia ya la has visto en Campeones o, si eres más mayor, en Hoosiers, empiezan a pasar cosas raras: a Pablo le suenan las caras de los entrenadores rivales con los que se va cruzando y empieza a tener la sospecha de que algo raro está sucediendo. Una historia de ficción narrada en presente y en primera persona te llevará a vivir -y descubrir- a la vez que él qué cojones está pasando en esa extraña competición. Saltos al pasado y multitud de referencias al panorama baloncestístico harán la experiencia lectora divertida, amena, cercana y, por qué no decirlo, real.